La gestión del riesgo sísmico, se ha convertido en un tema de gran
importancia en el mundo, debido al incremento de los desastres producidos por los sismos en los últimos años, lo que ha provocado consigo un aumento en pérdidas humanas; económicas y materiales. En consecuencia, la tendencia actual es centrarse en la reducción de riesgos y vulnerabilidades para proporcionar una solución que pueda satisfacer a todos los agentes implicados en un desastre, desde el gobierno, las instituciones públicas, privadas, entre otros, hasta lo más importante que son las personas afectadas y que en la mayoría de los casos son los que tienen menor información y desconocen los riesgos con los que pueden enfrentarse.