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Quiero comenzar este ensayo con esta frase que decía Jorge Drexler en su
disfraz que viste». Es una frase que me ayudó a entender muy bien el sentimiento que
inspira Beasts of No Nation. La andadura del pequeño Agu como niño soldado a través
de un país desangrado por el conflicto bélico es justamente eso: una terrible escuela de
la muerte, y esto es una triste realidad que viven muchos países que se encuentran en
guerra, donde los intereses políticos se han levantado en contra de los derechos
humanos, donde se involucran los más fuertes y los más vulnerables, donde
narra la guerra civil, en un país africano cuyo nombre no se menciona, donde existen
dos frentes: el oficialismo que es un grupo de soldados del gobierno que invaden el país,
matando por doquier a los civiles que se opongan al pensamiento de la autoridad; y por
otro lado, los rebeldes que son una especie de guerrilla, formada por los jóvenes y niños
más inocentes; los niños, tienen que sobrevivir adaptándose a su cambio de mentalidad
y costumbres, reemplazando sus juguetes por armas. ¿Cómo un niño puede adaptarse a
una sociedad viciada, donde matar es algo normal y la guerra es la única salida para
La historia gira en torno a la vida de Agu, un niño con una familia normal, con padres,
un hermano y abuelo; cuya vida cambió cuando fue alejado de su madre y vio morir a
su padre, abuelo y hermano, asesinados por los soldados oficialistas. La concepción que
un niño puede tener del mundo puede cambiar de manera radical cuando percibe un
hecho que sea tan impactante en su vida, donde le ha sido arrancado todo lo que el ama,
todo su entorno; talvez muchos piensen que es algo normal madurar a través de
situaciones dolorosas o extremas en la vida de una persona, sin embargo tengo la firme
convicción de que un niño merece vivir a plenitud esa etapa, sin traumar y marcar su
vida, de tal manera que jamás pueda volver a vivir en plenitud. La guerra
tragedias humanas que los ha despojado de todo. Agu, tenía familia, tenía futuro, tenía
mucho que vivir; y a su corta edad tuvo que probar el sin sabor de una guerra.
encuentra regulada por leyes de injerencia internacional como la Convención sobre los
del Niño relativo a la participación en los conflictos armados, el Estatuto de Roma o los
Principios de París, se estima que cerca de 300.000 niños menores de 18 años participan
considerada desde 1999 una de las peores formas de trabajo infantil , ya que en el
conflicto los niños, niñas y adolescentes no solo operan como combatientes, mensajeros,
sexuales en muchas ocasiones, perdiendo entre todas estas labores la esencia de la niñez
Los niños están protegidos por las garantías fundamentales relacionadas con el trato
niños tienen derecho, en estos conflictos a menudo de extrema crueldad, a que se les
trate, por lo menos, humanamente. No deben ser objeto de violencia alguna por lo que
EnEn el desarrollo de la película, tras verse despojado de todo lo que él tenía, Agu,
conoce al “Comandante”, el líder del movimiento rebelde; una especie de “dios” para
todos los jóvenes y niños que habían perdido a sus familias en la guerra, un hombre que
era rendido culto todos los días y a cada hora. Es muy curioso que cada joven y niño,
haber encontrado otro padre en este hombre, el Comandante. Ahora, esto sería
totalmente correcto si el hombre del que hablamos cumpliría con todas las virtudes, o al
menos algunas de lo que representa un buen padre, cuando analizamos la película, nos
damos cuenta que esto no es así. Hay una famosa frase, cuyos orígenes son bíblicos, que
película, sabemos a ciencia cierta que esos frutos que salieron de estos muchachos
pertenecientes al ejército del Comandante, eran de perversidad, vicios, rencor, ira, odio
Cómo conclusión se puede ver qué nuestra sociedad nos lleva en determinados puntos a
cuestionarnos sobre las cosas que estamos desarrollando en aparente defensa propia, sin
algún punto de nuestra existencia nos convertimos en “bestias” que solo tratan de
defender sus intereses políticos, sociales, religiosos y culturales, sin importar a quién
podemos hacer daño. Aunque el filme resulta bastante crudo, creo firmemente que
muestra la realidad que no solo viven niños, sino muchas personas alrededor del mundo;