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Rodríguez, Eylen.
Universidad Industrial de Santander.
2020
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349 Economia. (s. f.). Propensión a consumir, ahorro e inversión [Ilustración]. 349 Economia.
https://sites.google.com/site/349economia/-cuales-fueron-sus-principales-t
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Referencia Bibliográfica: Keynes, J.M. (1936). [Traducción de Eduardo Hornedo y
Revisión de Ángel Martín Pérez]. La propensión a consumir. I. Los factores objetivos.
Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero (pp. 87-101). México - Buenos aires:
Fondo de Cultura Económica.
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- Cambio en la diferencia entre ingreso real e ingreso neto; ya que el
ingreso neto es a lo que atiende cada uno cuando decide la escala en la
que ha de consumir.2
- Cambios imprevistos en el valor de los bienes de capital: Toman mayor
importancia para modificar la propensión a consumir al no tener
relación estable con el ingreso.
- Cambios en la tasa de descuento del futuro: No es lo mismo que la tasa
de interés porque se toma en cuenta el cambio futuro en el poder de
adquisición. A corto plazo su influencia no tiene mucha relevancia.
- Cambios en la política fiscal: Con esta se propone distribuir más
igualitariamente el ingreso, lo que aumenta la propensión a consumir.
- Cambios en las expectativas acerca de la relación entre el nivel presente
y el futuro del ingreso; estos cambios tienden a compensarse a escala
macroeconómica. No influye considerablemente debido a que ejerce
mucha incertidumbre.
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Gómez Gómez, C. M. (s. f.). UNIVERSIDAD DE ALCALÁ. UAH. Recuperado 25
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Por regla sicológica podemos considerar la siguiente afirmación: Cuando el
ingreso real aumenta, el consumo no crece en una suma absoluta igual, de
modo que se ahorrará una suma mayor. En otras palabras, las personas con
más capacidades adquisitivas son las que más oportunidad tendrán de
ahorrar, puesto que gastan menos o consumen en menor cantidad. Por el
contrario, un ingreso real descendiente respectivamente genera un ahorro
menor, en mayor escala al principio que después.
En primer lugar, las empresas ahorran para poder invertir a futuro sin tener
que incurrir en deudas. Además, intentan asegurar recursos líquidos para
imprevistos o necesidades que ocurran. Por otro lado, al ahorrar están
incrementando gradualmente la renta y, por último, por prudencia; es decir,
buscan posicionarse correctamente superando sus activos y no sus gastos y
costes.
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Cuando la capacidad productiva se relaciona directamente con la renta o el
ingreso real, podemos afirmar que en ese momento existe una verdadera
economía.
Bibliografía: