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i i nvestigación

T
RESUMEN

al y como señalan Kloot y Martín


(2000) y Kaplan y Norton (2001a,
UNA APROXIMACION A 2001b), en la actualidad son varias las entidades
LAS IMPLICACIONES no lucrativas (fundaciones, hospitales públicos,
DEL CUADRO DE ayuntamientos o gobiernos locales), que de-
MANDO INTEGRAL EN muestra un cierto interés por aplicar un Cuadro

LAS ORGANIZACIONES de Mando Integral (CMI). En esta tendencia, la


Nueva Gestión Pública, esta adoptando las
DEL SECTOR PUBLICO
prácticas de gestión utilizadas por el sector pri-
vado, con el objeto de mejorar la gestión en las
*Eunice L. Bastidas B. entidades públicas, para de esta forma lograr un
**Vicent Ripoll Feliu servicio más eficiente y efectivo (Brignall y
Modell,2000). En la presente investigación, de
*Profesora DAC-UCLA. carácter documental y análisis crítico, pondre-
** Profesor Facultad de Economía
mos de manifiesto cómo el modelo del CMI ba-
Universitat de Valencia, España.
sado en las cuatro perspectivas, requiere de
ajustes para ser implantado en las organizacio-
nes del sector público. Con el fin de lograr di-
chos ajustes utilizaremos la Teoría de los Stake-
holders y propondremos las modificaciones
pertinentes para aproximarnos a un diseño facti-
ble a estas instituciones.

Palabras claves: sector público, accionista,


cuadro de mando integral.

COMPENDIUM, Diciembre 2003 23


SUMMARY

K loot and Martin (2000), Kaplan and


Norton (2001a, 2001b), indicate the
existence of several not lucrative entities
AN APPROACH TO THE
(foundations, public hospitals, municipalities or IMPLICATIONS OF
local governments), that they have demon-
strated certain interest to apply a Balanced USING
Scorecard (BSC). In this tendency, the New BALANCED SCORE-
Public Management adopts the practices of
management used by the private sector, in order CARD IN PUBLIC SEC-
to improve the management in the public enti-
ties, thereby to supply more efficient and effec- TOR ORGANIZATIONS.
tive service (Brignall and Modell, 2000). In this
paper of documentary character and critical
analysis, we indicate that the model of the BSC
based on four perspectives needs adjustments
for its implementation and use in the organiza- *Eunice L. Bastidas
tions of the public sector. These adjustments B.
will be proposed based in the frame of the So-
ciological Theory of the Stakeholders, to ap-
proximate a feasible design for these institu- * Professor DAC-UCLA.
tions. ** Professor Facultad de Economía
Universitat de Valencia, España.
Key words: public sector, stakeholders,
balanced scorecard management.

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COMPENDIUM, Diciembre 2003 25

INTRODUCCIÓN llo de éstas últimas, tal y como ocurre con la


perspectiva de aprendizaje y crecimiento

La literatura especializada en Contabi-


lidad de Gestión esta demostrando,
desde los años 90 un creciente interés por el
(Kaplan, 1996c), considerada como la más in-
novadora e importante en todo el proceso ge-
rencial del CMI (Englund, 2001).
Cuadro de Mando Integral (CMI) (Norreklit,
2000; Englund, 2001; Tuomela, 2001). El CMI En las organizaciones cuyo objetivo no es
mas allá de ser un sistema de indicadores no obtener lucro, como las fundaciones, hospitales
tradicionales, recoge también una metodología públicos, ayuntamientos o gobiernos locales, la
para implantar la estrategia de una organización implantación del CMI, de momento no ha evo-
(Kaplan y Norton, 1996b), a través de la comu- lucionado tal y como ocurre en las empresas del
nicación y alienación de dicha estrategia a to- sector privado. En estos casos, el eje central del
dos los niveles organizacionales. Como señalan diseño para el CMI es la comunidad como
Aparisi y Ripoll (2001), el CMI facilita el dise- usuarios del servicio y la meta final, es conse-
ño e implantación de las nuevas herramientas guir la mayor satisfacción para la sociedad. Sin
destinadas a la toma de decisiones embargo los enfrentamientos que con frecuen-
cia ocurren entre directivos, empleados, gobie r-
Mas que un conjunto de indicadores que mi- no y la misma comunidad, hace difícil alienar la
den hechos económicos, operaciones o transac- estrategia de las instituciones no lucrativas
ciones, el CMI contempla la visión integral de (Norreklit, 2000) e identificarla con su personal
la empresa y su estrategia, considerada desde directivo y empleados, para lograr un objetivo
cuatro perspectivas o aspectos diferentes: la común a todos los miembros de la organiza-
perspectiva financiera, la perspectiva de los ción. El papel y las necesidades de cada uno de
clientes, la perspectiva de los procesos internos los actores involucrados o stakeholders, afectan
del negocio y la perspectiva del aprendizaje y el alcance de los propósitos de la organización
crecimiento, las cuales se vinculan entre sí, a y precisamente en las entidades del sector pú-
través de relaciones de causa y efecto. De esta blico es donde se evidencia con mayor intens i-
forma la visión se expresa en términos estraté- dad estas influencias: presiones políticas
gicos y ésta a su vez se traduce en objetivos (internas y externas), opinión de la comunidad,
operativos. poder de los sindicatos, compromiso de los di-
rectivos (Bogt y Helden, 2000) y el mismo Es-
La mayoría de las experiencias de éxito en tado.
aplicaciones prácticas, provienen de empresas
del sector privado como: Mobil Corporation, Esta investigación se desarrolla mediante la
FMC Corporation, KPGM Peat Marwick, Alls- confrontación teórica, con enfoque crítico, acer-
tate Insurance y AT&T (Gascho y Salte- ca de los supuestos básicos y fundamentos que
rio,2000). Estas organizaciones tienen como fin subyace en el manejo y éxito del modelo del
alcanzar el lucro para sus accionistas, por lo CMI, con la teoría sociológica de los Stakehol-
cual la perspectiva financiera domina en la es- ders y demostrar que para su aplicación prácti-
tructura de su CMI, quedando subordinadas las ca en las organizaciones del sector público, ne-
otras tres perspectivas del modelo, al logro del cesita de ajustarse a las diferentes condiciones,
máximo beneficio. Es por ello que el alcance de situaciones y características particulares que
las metas financieras sitúa en un segundo plano, rodean el ámbito de actuación de las entidades
al resto de perspectivas, impidiendo el desarro- públicas, en especial, a los diversos actores que
26 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

de forma directa o indirecta, afectan la gestión EL CMI COMO SISTEMA DE MEDICIÓN


de estas instituciones.
En los principales artículos de Kaplan y
De lo expresado anteriormente, se desprende Norton (1992,1993), se hace referencia a la
el carácter documental de la presente investiga- existencia y uso del Cuadro de Mando, confor-
ción, la cual concluye con una aproximación de mado básicamente por el dominio de indicado-
las implicaciones que conlleva un modelo facti- res financieros tradicionales y algún indicador
ble para su aplicación en las empresas del sec- no financiero. Con anterioridad a la aparición
tor público. del CMI se utilizaba el Cuadro de Mando, el
cual fue una aportación de la doctrina francesa,
Finalmente, para lograr tal cometido, se han que tiene sus origines en la II Guerra Mundial
formulado los siguientes objetivos: (Epstein y Manzoni, 2000) y todavía en la ac-
tualidad, es utilizado por muchas compañías.
1. Analizar las asunciones básicas del mode- Sin embargo, el Cuadro de Mando mostró cie r-
lo del CMI de Kaplan y Norton. tas debilidades al intentar hacer efectiva su im-
plantación, pues no lograba desplegar con éxito
2. Determinar si el modelo de las cuatro la estrategia planificada por la organización y
perspectivas es factible de aplicar en las organi- reforzaba el predominio de las medidas finan-
zaciones que prestan servicios públicos, para cieras sobre las no financieras.
entonces, proponer los ajustes necesarios, en
caso de que pueda ser adaptado a las entidades Pero la diferencia crucial entre el Cuadro de
públicas. Mando y el CMI, es el elemento innovador que
introduce éste último vinculado con la visión de
negocio desde cuatro perspectivas. La perspec-
CRITICAS A LAS ASUNC IONES tiva del accionista se centra en cómo debería-
BÁSICAS DEL MODELO DEL CMI mos aparecer ante nuestros accionistas para te-
ner éxito financiero. La perspectiva del cliente
En el presente trabajo llevaremos a cabo un enfatiza en la forma en que deberíamos apare-
cer antes nuestros clientes. La perspectiva de
análisis crítico, por etapas, de los fundamentos
los procesos internos del negocio analiza en qué
teóricos del CMI. En primer lugar analizaremos
procesos debemos ser excelentes para satisfacer
la utilidad del CMI, como un sistema de medi-
a nuestros accionistas y clientes y por ultimo,
ción. En segundo lugar, nos centraremos en lo
en la perspectiva del crecimiento y aprendizaje,
que supuso su desarrollo para la gestión del
se plantea cómo mantendremos y sustentaremos
desempeño y por ultimo, analizaremos su evo-
nuestra capacidad de cambiar y mejorar para
lución, hasta convertirse en un modelo de ges-
conseguir alcanzar nuestra visión.
tión estratégica. En cada una de estas etapas
destacaremos los elementos más relevantes y,
Esta forma de enfocar el negocio, permitió
nos posicionaremos con alguna de las asuncio-
que el CMI pudiese formular un balance racio-
nes específicas del modelo, provenientes de las
nal entre las medidas financieras y las no finan-
investigaciones efectuadas por Tuomela (2001),
cieras, un aspecto que el Cuadro de Mando no
Veen-Dirks y Wijn (2001) y Otley (1999).
llegó a concretar, y a su vez, representó la razón
fundamental que impulsó el inicio del CMI, en
el mundo empresarial.
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No obstante, aun cuando se acentuaban fuer- diante comparaciones entre sí y con otras com-
temente las críticas a los sistemas de informa- pañías, (Kaplan, 1994; Reilly y Reilly, 2000).
ción basados principalmente en medidas finan- Las medidas únicas son aquellas que tienden a
cieras, los indicadores no financieros también ser específicas para una unidad en particular.
revestían ciertas desventajas: por una parte, la Capturan la singularidad de la estrategia de la
valoración de los activos intangibles no resulta- empresa o de la unidad de negocio y refuerzan
ba fácil, puesto que su valor depende del con- la toma de decisiones locales.
texto organizacional y de la estrategia, es decir,
que no deben ser separados de los procesos or- Precisamente, este es un punto álgido a la
ganizativos que lo transforman en productos, hora de poner en práctica el CMI. Gascho y
que sí tienen un valor financiero, y agrupados Salterio (2000) analizan el uso de medidas co-
con otros activos intangibles y tangibles, a tra- munes a múltiples unidades y de medidas úni-
vés de una estrategia, pueden ser generadores cas a unidades particulares, demostrando que
de valor para la empresa. Por otra parte, la in- los gerentes superiores presentaban mayor in-
versión en activos intangibles no tiene un im- clinación a tomar en cuenta sólo indicadores
pacto inmediato sobre los resultados financieros genéricos en el momento de evaluar el desem-
sino a futuro. Estas dos razones hacen excesiva- peño de las unidades subordinadas. En conse-
mente vulnerables a los indicadores no finan- cuencia, desestimula la utilización de medidas
cieros, puesto que por sí solo no podrían valorar únicas por parte de los niveles medios e inferio-
adecuadamente los activos intangibles sin recu- res y debilita las potencialidades del CMI, al
rrir a la información emanada por los indicado- impedir captar el verdadero sentido de la estra-
res financieros. tegia de negocio que la organización ha decid i-
do implantar.
El CMI, por tanto, propone la complementa-
riedad entre los dos tipos de medidas. Las fi- Otro carácter diferenciador de esta herra-
nancieras informarían sobre la gestión de la or- mienta como sistema de medición, es la supues-
ganización a largo plazo (Indicadores de Resul- ta jerarquía en el conjunto de medidas de des-
tados), mientras que los indicadores no finan- empeño. La primera corresponde a la perspecti-
cieros, informarían sobre la gestión a corto pla- va financiera. Blanco, Aibar y Cantorna (1999),
zo, para señalar si la organización va en direc- señalan que dentro de ella se recogen aquellos
ción correcta hacia la consecución de los objeti- indicadores que tradicionalmente han sido utili-
vos propuestos a largo plazo y de qué manera la zados por los sistemas de información contables
empresa moviliza y combina sus recursos (tanto para reflejar el grado en que la empresa satisfa-
tangibles como intangibles), para generar utili- ce el interés del accionista. En segundo lugar,
dades reales que aseguren el futuro económico figura la perspectiva del cliente; en ella se in-
de la organización. (Inductores de Actuación). tenta medir la actuación de la empresa frente a
sus compradores. La tercera perspectiva com-
Otra clasificación, para el conjunto de indi- prende los indicadores que miden la creación de
cadores, es la que hace referencia a las medidas valor a través de la cadena de los procesos in-
genéricas y únicas. Las genéricas representan ternos del negocio y permiten satisfacer la de-
metas comunes para los diferentes departamen- manda de sus clientes y accionistas. La cuarta y
tos o unidades de negocio y reflejan una estruc- última perspectiva, agrupa los indicadores que
tura similar con empresas de la misma indus- evalúan la capacidad de innovación y aprendi-
tria. Esto permitiría evaluar el desempeño me- zaje organizacional a largo plazo, necesarios
28 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

para apoyar los objetivos estratégicos y des- bales de la compañía, en subconjuntos de medi-
arrollar una ventaja competitiva sostenible. das locales, manejables por los niveles inferio-
res (Epstein y Manzoni, 1997). De esta mane-
Kaplan y Norton reconocen que muchas ra, cada subunidad identifica sus propios indi-
compañías que han implementado el CMI, se cadores de desempeño, describiendo qué debe
han limitado al desarrollo de las tres primeras hacer y en qué momento ayudará a la organiza-
perspectivas y han dedicado pocos esfuerzos a ción a conseguir sus objetivos (Gascho y Salte-
la hora de medir los resultados y los inductores rio, 2000); así encaja dentro de la visión general
de las capacidades para la innovación y el y la estrategia. Sin embargo Norreklit (2000),
aprendizaje organizacional. El estudio empírico señala que el control de arriba-abajo resulta in-
realizado por Kloot y Martin (2000) en un go- compatible con los procesos de búsqueda conti-
bierno local en Australia, reveló que el aprendi- nuos de oportunidades o amenazas, que validen
zaje y la innovación son considerado como un la estrategia puesta en operación. Mendoza,
área estratégica clave y la necesidad de desarro- García y Zrihen (2000) critican la concepción
llar técnicas de medición para los atributos de mecánica de poner en marcha la estrategia, por
esta dimensión, que aunque en su mayoría re- considerarla una imposición que anula el traba-
sultan invisibles, son cruciales para el éxito sos- jo iterativo y dinámico de sus dirigentes.
tenido de la organización. La cuarta perspecti-
va, referida a temas relacionados con la gestión Respecto al cuarto proceso o de retroalimen-
de los recurso humano, es considerada como un tación, el CMI se convierte en el medio más efi-
activo importante en el desempeño del negocio. caz de comunicación (Kaplan y Norton, 2001b).
Desde el momento en que el CMI traduce la
En relación a la jerarquía que presenta el estrategia y la visión en objetivos claros y con-
modelo, algunos autores como Mendoza, Ruiz cisos, necesita ser arraigado al lenguaje de los
y Zrihen (2000), critican el dominio de los ob- empleados (Norreklit, 2000). Esto significa que
jetivos financieros que supedita las otras tres una expresión dada, debe ser captada por los
perspectivas a la mejora de dichos resultados. niveles inferiores, con el mismo significado.
Esta aseveración es cierta, tratándose de empre- Así se asegura que los directivos y empleados
sas con fines de lucro, pero la aplicación del actúan de acuerdo con el plan estratégico esta-
CMI a instituciones no lucrativas, demuestra la blecido por la alta dirección.
adaptación de esta herramienta en un ámbito
diferente de acción, en el cual la satisfacción de Lograr que la actuación de un individuo se
las necesidades de la comunidad prevalece co- ajuste a un plan preestablecido, no resulta fácil.
mo objetivo primordial (Kaplan y Norton, El nivel de dificultad de alcance y el nivel re-
2001ª , 2001b). querido del desempeño en las diferentes áreas,
definen esencialmente el relativo empeño en el
DE UN SISTEMA DE MEDICIÓN A UN SISTEMA logro de esa medida. Si cada indicador repre-
DE GESTIÓN DEL DESEMPEÑO senta un área críticamente importante, alcanzar-
los todos o ninguno, no debería ser un estándar
Para reforzar y afianzar la visión estratégica adecuado para la evaluación del desempeño en
del negocio entre los miembros de la organiza- general (Otley, 1999).
ción, el CMI se vale de un mecanismo denomi-
nado alineación de arriba-abajo o de cascada. Kaplan y Norton han insistido en sugerir la
Este consiste en descomponer los objetivos glo- vinculación de los indicadores al sistema de in-
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centivo de la empresa, de esta manera quedarí- expresadas en forma de relación de causa y


an enlazados los objetivos estratégicos con el efecto, hacen posible el control de las variables
desempeño individual. Sin embargo los resulta- claves que miden la estrategia y orienta a la or-
dos de los estudios de Epstein y Manzoni ganización a la consecución de su visión. La
(1997), Tuomela (2001), y Dirks y Wijn (2001) cadena se construye enlazando indicadores y
no lo recomiendan, si existe ambigüedad en la resultados esperados, propuestos en las cuatro
información expresada por el indicador, des- perspectivas del CMI.
equilibrio entre las medidas financieras y no
financieras o desconfianza en el uso de las me- Para demostrar la secuencia de hipótesis, los
didas. enlaces de los diferentes medidas de desempeño
y las vinculaciones entre los objetivos corres-
Algunas de estas barreras pueden eliminarse pondientes a cada perspectiva, se procede a
al utilizar el CMI más para el aprendizaje que construir el mapa estratégico, es decir, una ar-
para la evaluación. Asimismo, los indicadores quitectura lógica y comprensible a todos los ni-
de desempeño deberían ser usados como me- veles organizacionales, en donde se representa
dios de determinación subjetiva de la compen- la serie de eventos que describe la trayectoria
sación (Dirks y Wijn, 2001), dado el potencial de la estrategia (Kaplan y Norton, 2001c). Cada
que tienen para destruir el impacto de un buen indicador seleccionado constituye un elemento
diseño de este instrumento (Otley, 1999). en la cadena de relaciones de causa y efecto, y
conecta los resultados deseados con los induc-
Otros de los problemas detectados son las tores de actuación que harán posible alcanzar
barreras de acción que surgen al integrar el dichas metas.
CMI con los sistemas de control tradicionales.
Como todos los instrumentos gerenciales, nin- La supuesta relación causal entre las cuatro
guno es suficiente para el éxito en si mismos áreas es cuestionada por algunos autores. No-
(Epstein y Manzoni, 1997), y resulta poco con- rreklit (2000: 75) cuestiona la validez de esta
veniente desconocer la afectación que se produ- asunción, argumentado que dichos eventos pue-
ce al introducir los cambios en el sistema global den que ocurran o no, aún existiendo una causa
de gestión de la organización. dada. Deduce que si una compañía entrega mu-
cho valor y calidad a sus clientes, no necesaria-
EL CMI COMO SISTEMA DE GESTIÓN mente sus clientes le entregarán lealtad y altos
ESTRATÉGICO rendimientos. En otras palabras, aunque se sie n-
tan satisfechos y sean leales, no significa que
Las empresas que han adoptado el CMI, han siempre serán rentables.
colocado la estrategia en el centro de su sistema
de gestión, para movilizar y guiar el proceso de Norreklit señala que la relación que se esta-
cambio organizacional, que les permita adaptar- blece entre las medidas de las cuatro perspecti-
se continuamente a las nuevas exigencias mar- va es de finalidad y no de causalidad. Esto sig-
cadas por un entorno dinámico y competitivo. nifica que un medio seleccionado es uno de los
tantos que puedan existir para alcanzar un fin, y
Kaplan y Norton (1996b, 1996c, 2001c) to- a su vez, puede tener numerosos efectos. Real-
man los fundamentos de Porter, para justificar mente, el CMI sugiere una representación de
la especificación de la estrategia a través de la fines y medios, no de causas y efectos.
formulación de una secuencia de hipótesis, que
30 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

Esta misma opinión es compartida Otley un instrumento para la formulación de la estra-


(1999), quien critica el enfoque simplista y li- tegia sino para su ejecución, complementarse
neal con que Kaplan y Norton tratan de explicar con otros enfoques como la planificación estra-
la realidad, además de ser poco explícitos en los tégica o los factores críticos del éxito, afinaría
procedimientos para la construcción del mapa el trabajo en la búsqueda de definir una estrate-
estratégico. La poca orientación sobre cómo gia clave a los propósitos de la empresa.
lograr el equilibrio entre los indicadores, sugie-
re que la verdadera propuesta del CMI es la ne- El proceso de retroalimentación o de
cesidad de alcanzar todos los objetivos de des- doble bucle
empeño para que la organización pueda tener
éxito. Kaplan y Norton (1996c) enfatizan que el
proceso de retroalimentación es vital para la
Kloot y Martin (2000) hacen una compara- comprobación de las hipótesis planteadas sobre
ción similar al clasificar las cuatro perspectivas la estrategia elegida, e incluso, es posible modi-
del CMI de acuerdo con las dimensiones pre- ficarlas, manteniendo el mismo camino a se-
sentadas en el modelo de desempeño de Fitzge- guir.
rald, es decir las que miden el fin que persigue
la estrategia (de resultados), corresponde a las El CMI debería proporcionar suficiente in-
perspectivas financiera y la de clientes; mie n- formación acerca de los cambios del entorno,
tras que las que representan los medios para al- como clientes, mercados, tecnologías y compe-
canzar el éxito de la estrategia (determinantes), tidores, de tal manera que los gerentes pudieran
son las perspectivas interna y de aprendizaje y captar oportunidades y amenazas, respecto a la
crecimiento. posición competitiva de la empresa frente a sus
principales rivales. Con escenarios diferentes,
Aunque la opinión de estos autores es con- los directivos se cuestionan si los supuestos que
sistente con la tesis de la finalidad y no la cau- subyacen sobre la estrategia actual, siguen sie n-
salidad, Tuomela (2001) hace referencia a los do válidos y entonces, pudiendo aparecer una
beneficios que pueden obtenerse cuando se em- estrategia novedosa o emergente.
plea el CMI para apoyar la puesta en marcha de
la estrategia pretendida, como es el caso de la Este proceso doble bucle se logra cuando se
empresa FINABB, en donde uno de los puntos promueve el aprendizaje organizacional, el cual
de mayor comprensión por parte de los geren- contribuye a enriquecer el saber individual y
tes, fueron las relaciones de causa-efecto y el grupal, al permitir compartir experiencias y ob-
aprendizaje acerca de los fundamentos de una servaciones entre todos los miembros de la em-
estrategia posible. Se argumentaba que sin la presa, con relación a la estrategia. Si la organi-
explicación de dichas relaciones sería muy dif í- zación desarrolla esta capacidad, la estrategia
cil evaluar si la estrategia actual es apropiada a emergente puede originarse desde los niveles
las condiciones existentes. inferiores de la organización (Kapla n y Norton,
1996c) y su respuesta de reacción frente a la
No obstante, más allá de las posturas en pro evolución de su entorno, será más rápida
o contra de la validez de esta asunción, se des- (Mendoza, Ruiz y Zrihen, 2000).
prende una inclinación más positiva en la ba-
lanza a favor del utilización del CMI como Norreklit (2000) analiza esta suposición des-
herramienta estratégica. Si bien el CMI no es de dos punto de vista, uno externo que plantea
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que el CMI no presupone alguna observación Los factores clave del éxito y el CMI
continua de las acciones y resultados de sus
competidores, o de los avances tecnoló gicos, Son factores clave del éxito, aquellas capaci-
como tampoco incluye alguna estrategia en am- dades controladas por la empresa en las que de-
biente de incertidumbre y riesgo que involucren be destacar para que la unidad estratégica de
eventos que puedan amenazar o invalidar la es- negocios adquiera una ventaja sostenible a la r-
trategia seleccionada. Otro, interno, en donde se go plazo, con un nivel de rentabilidad superior
pone de manifiesto que la debilidad del CMI se al de la media de la industria (AECA, 2001; do-
refleja en el método de despliegue de la estrate- cumento 23 CPCG).
gia en forma de cascada. El autor señala que la
manera mecánica y jerárquica de imposición La propuesta de Dirks y Wijn (2001) utiliza
de arriba-abajo, no parece compatible con el los Factores Críticos de Éxito para detectar las
aprendizaje organizacional que el CMI pretende condiciones del mercado y evaluar el comporta-
fomentar y difícilmente aseguraría su arraigo en miento de los variables claves; para de este mo-
las bases más bajas de la organización. do, emitir una señal para iniciar o no el proceso
de revisión estratégico. A partir de allí, el resul-
Dirks y Wijn (2001), señalan que el CMI no tado de este proceso será el punto de partida
podría cumplir con ese papel y argumentan que para construir el CMI.
una herramienta utilizada para la implantación
de la estrategia y su revisión, conduce a accio- Usualmente se consideran de tres a seis fac-
nes ambiguas, puesto que estos dos objetivos se tores críticos, que son las actividades que la
consideran irreconciliables. Asimismo conclu- empresa debe realizar bien, para asegurar el
yen que, si el CMI fue diseñado principalmente éxito competitivo de la organización. La posi-
como un instrumento para la ejecución de la ción de la compañía se determina comparando
estrategia, por sí solo no podría inf ormar de los su desempeño frente a sus competidores. Mie n-
cambios que ocurran en el ambiente del nego- tras, el monitoreo de las variables clave permite
cio y recomiendan complementarlo con un en- capturar las ventajas potenciales del negocio, y
foque que pueda ser empleado para establecer advertir de posibles amenazas al plan estratégi-
una relación directa con el mercado, como son co de la empresa.
los Factores Críticos de Éxito.
Sin embargo, es interesante acotar que de los
En nuestra opinión, el CMI ha demostrado Factores Críticos de Éxito se desprenden los
ser un instrumento dinámico que crece al ritmo Procesos Internos del Negocio, es decir las acti-
de evolución de la propia empresa y de los vidades claves que son controladas en la pers-
cambios que se suscitan alrededor de ella. Para pectiva interna del CMI, pero ciertamente, una
cada caso particular, dependiendo del ambiente vez definidas, pierden contacto con el ambiente
del negocio, será necesario ajustarlo a las reali- externo, pues serán usadas como medios para
dades del entorno, complementándose o combi- satisfacer los objetivos de los clientes y accio-
nándose con otras orientaciones estratégicas y nistas de la compañía.
de gestión.
Por último, resulta coincidente los juicios de
Tuomela ( 2001), Reilly y Reilly (2000) y Otley
(1999), al señalar que las medidas de desempe-
ño que incorpora el CMI, representan los facto-
32 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

res críticos de éxito, considerados cruciales pa- todo, cuando se involucran informes de desem-
ra el cumplimiento de la estrategia del negocio peño y riesgo que pueden modificar el equili-
o al menos para su supervivencia. Estos hechos brio del poder dentro de la organización
revelan que si existe una relación entre las dos (Epstein y Manzoni, 1997). En muchos casos se
metodologías. evidencia que los gerentes locales han aprendi-
do a desarrollar fuentes secundarias de informa-
OTRAS CRÍTICAS A LAS ASUNCIONES ción, bien para mantener la autoridad y / o pro-
BÁSICAS DEL CMI tegerse a sí mismo de futuros cuestionamientos.

En la evolución del CMI como sistema de Es indudable, que el proceso de implanta-


gestión estratégico, podemos hacer referencia a ción del CMI no es fácil. Por muy pequeñas que
tres criticas relacionadas con: la interdependen- sean las modificaciones, siempre acarrea recha-
cia de las perspectivas, el número de indicado- zos, indiferencias y perturbaciones. El cambio
res y la cantidad de información requerida, y la no es solo a nivel de sistemas sino también de
resistencia al cambio. actitud individual, como de los grupos que con-
forman la organización.
Norreklit (2000) en sus apreciaciones res-
pecto a las relaciones de causa y efecto, señala
que tampoco existe una relación de causalidad LA TEORÍA DE LOS
entre las medidas de las cuatro perspectivas, STAKEHOLDERS Y EL CMI
pues son interdependientes, no unidireccionales
y su razonamiento es circular. Para demostrarlo, Un tema relevante acerca de los cuestiona-
cita el siguiente ejemplo: invertir en investiga-
mientos de las asunciones o fundamentos en los
ción y desarrollo, necesita de resultados finan-
que subyace el CMI, es el dominio del enfoque
cieros satisfactorios, pero requiere de investiga-
de los stakeholders, presente en el modelo pro-
ción y desarrollo, para producir resultados fi-
puesto de Kaplan y Norton. Esto se evidencia
nancieros satisfactorios.
cuando las organizaciones que han desarrolla-
do el CMI para fines estratégicos, encuentran
El número de indicadores no es una limitan-
otros factores que afectan directa o indirecta-
te del CMI. Para Kaplan y Norton (1996c) es
mente el alcance de este propósito.
irrelevante, siempre que estén lógicamente vin-
culados a través de la cadena de causa y efecto.
La Teoría de los Stakeholders es utilizada
Sin embargo, la información requerida suele ser
para explicar el comportamiento de las organi-
mayor. Epstein y Manzoni (1997) destacan, que
zaciones modernas, cuya realidad no puede ser
algunos datos pueden no existir dentro de la
comprendida sino bajo la luz del reconocimie n-
compañía y es necesario recopilarla especia l-
to de la conflictividad de intereses que juegan
mente para el CMI; en consecuencia, se genera
los distintos actores que intervienen en el am-
una mayor cantidad de trabajo y tiempo. Justa-
biente interno y externo de la empresa. Los
mente allí comienza a manifestarse el poco en-
constantes cambios que ocurren en su entorno,
tusiasmo por parte de los gerentes, en particular
transforman la realidad en un fenómeno com-
de los niveles medios e inferiores.
plejo, que provoca continuas interacciones entre
la organización y sus stakeholders, afectando su
Adicional a esta problemática, se agrega un
capacidad para lograr el éxito esperado. Esos
tercer elemento: la resistencia al cambio. Sobre-
actores constituyen grupos de personas sin cuyo
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apoyo la organización podría dejar de existir mo empresarial, lo ha situado como el aporte


(D´Souza y Willians, 2000). Han sido identif i- más significativo dentro del contexto de la con-
cados como los accionistas, clientes, proveedo- tabilidad de gestión (Atkinson y Waterhouse,
res, financieros, inversores, empleados 1997; Otley, 1999).
(incluyendo los directivos), grupos políticos,
sociedad y gobierno. Se ha detectado también una tendencia favo-
rable para su utilización en las organizaciones
La Teoría de los Stakeholders, sugiere que que no persiguen fines de lucro, como los orga-
los intereses que demanda cada grupo, deberán nismos no gubernamentales, fundaciones u hos-
ser reconocidos e incluidos como componentes pitales, entre otros, destacando algunas expe-
claves en el establecimiento de los objetivos riencias en entidades públicas, como los gobie r-
estratégicos de la organización y reflejar en nos locales. Aunque se tratan de empresas que
ellos su capacidad de equilibrar las demandas no tienen como objetivo fomentar la riqueza, sí
conflictivas que exijan los distintos grupos. Ba- requieren de un instrumento flexib le que les
jo este razonamiento y considerando al CMI permita manejar sus recursos en función de las
como un instrumento de carácter estratégico, no necesidades de sus usuarios y con ello, lograr el
puede ignorar la existencia parcial o total de propósito encomendado.
alguno de ellos, si la organización desea alcan-
zar con éxito sus objetivos. Una primera cuestión de investigación a
plantear seria si el CMI es un modelo de ges-
Valiéndonos de estos preceptos, creemos tión para las organizaciones del sector público,
que si las entidades públicas, que han comen- Kloot y Martín (2000) señalan, que los gobie r-
zado a adoptar el CMI para gestionar sus insti- nos necesitan de mejores medios para evaluar
tuciones, y además, su ámbito de actuación es su desempeño respecto a sus objetivos y fre-
disímil al entorno que rodea a las empresas pri- cuentemente, éstos se establecen en términos no
vadas, necesariamente deberán adaptar este mo- financieros, por lo cual un sistema de gestión
delo de gestión y ajustar su estructura a la reali- equilibrado que utilice tanto medidas financie-
dad que las circunscribe. El enfoque de los sta- ras como no financieras, sería muy conveniente.
keholders es un marco referencial que puede Se ha observado que la gestión del desempeño
explicar dichos cambios, justificar las adapta- en los gobiernos locales tiene un foco menos
ciones y hacer viable un modelo que verdadera- estratégico y más operativo, reflejado, por el
mente pueda ser utilizado por las instituciones empleo de ratios como costos, volumen de ser-
del sector público. vicios, tiempo de productividad, etc., que aun-
que demuestren el uso intensivo de los recursos
disponibles, pueden no corresponderse con la
LAS CUESTIONES A meta final que persigue la institución, como por
INVESTIGAR ejemplo, elevar la calidad de vida de su comu-
nidad.
La aplicación práctica del CMI ha generado
En sus orígenes el CMI trataba de superar
una serie de imprecisiones en su implementa-
las deficiencias y carencias de los sistemas de
ción, que aun sin convertirse en un instrumento
gestión basados únicamente en la información
meramente técnico, no ha logrado mostrar, los
aportada por un sólo tipo de indicador y pla n-
beneficios para el cual fue creado. No obstante,
tear unas medidas complementarias que expre-
su reconocimiento tanto a nivel académico co-
34 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

sarían esencialmente, los elementos críticos de El modelo original del CMI es resultado del
la estrategia. El enlace de estas medidas con la enfoque de los stakeholders (Otley, 1999, Kloot
estrategia elegida, es la piedra angular del CMI, y Martin, 2000; Norreklit, 2000; Tuomela,
tal como lo expresa Atkinson y Waterhouse 2001), pero solo incluye las exigencias de los
(1997) y Otley (1999). Bajo estos razonamie n- accionistas y clientes. Quedan excluidos los
tos, el CMI es una práctica de la gerencia en el proveedores, las autoridades públicas, la comu-
sector privado, pero el ámbito de actuación de nidad y otros stakeholders institucionales, como
las empresas públicas es totalmente diferente. los sindicatos.

El documento Nº 16 de la Comisión de Prin- Atkinson y Waterhouse (1997) consideran


cipios de Contabilidad de Gestión (AECA, que el CMI es incompleto por las siguientes ra-
1997), establece el carácter diferencial entre zones: en primer lugar, no destaca adecuada-
entidades públicas y privadas. Entre otras, men- mente la contribución de los empleados y pro-
ciona que el campo de acción de los organismos veedores; en segundo, no identifica el papel de
públicos viene previamente definido en su nor- la comunidad como parte del entorno de la em-
mativa legal y estatutaria, mientras que el sector presa; y por ultimo, el proceso de medición del
privado se sitúa preferentemente donde existen desempeño no permite a la gerencia evaluar las
mayores posibilidades de beneficios. Por su po- contribuciones de sus stakeholders en el logro
sición monopolística, suelen tener un mercado de las metas organizacionales ni permite eva-
de clientes cautivos y presenta menos restric- luar si la organización es capaz de cumplir con
ciones en cuánto al manejo de recursos finan- sus obligaciones, presentes y futuras.
cieros.
A pesar de que Kaplan y Norton (2001c) ar-
Las entidades públicas, sin embargo, reciben gumentan que su modelo no es un enfoque de
fuertes presiones internas y externas que difi- stakeholders, para Otley ( 1999) representa una
cultan su gestión y el establecimiento de objeti- de sus principales ventajas. De este modo el nú-
vos; generalmente, éstos son múltiples y se en- mero de perspectivas no sería una restricción
trecruzan unos con otros, lo que trae consigo del CMI, como apunta Dirks y Wijn (2001), in-
conflictividad e influencia de intereses que obli- cluir o excluir alguna de ellas, dependerá del
ga a los gobiernos a negociar las prioridades y sector en cual opera la empresa y de la estrate-
necesidades. gia seleccionada.

Si a estas diferencias, agregamos el hecho de Para Kaplan y Norton (2001ª: 23) la mayoría
que las organizaciones públicas tienen como fin de las entidades no lucrativas y administracio-
perseguir el bienestar común y no el lucro, en- nes públicas tuvieron dificultades con la estruc-
tonces la perspectiva financiera, correspondie n- tura original del CMI, en que la perspectiva fi-
te a los intereses de los accionistas, no podría nanciera aparecía en la parte superior y pla n-
dominar la estructura jerárquica del CMI. Esto tean modificar su arquitectura, para colocar a
nos conduciría a plantear la segunda cuestión los usuarios o beneficiarios, en la parte alta de
de investigación, y es cómo afectaría los inter- la jerarquía. Ilustra como ejemplo, el CMI de la
eses de los distintos stakeholders de las entida- Municipalidad de la ciudad de Charlotte (USA),
des públicas, al diseño del CMI basado en el manteniendo las cuatro perspectivas pero en
modelo de 4 perspectivas. orden diferente: pr imero, la perspectiva del
cliente; segundo, la perspectiva financiera; ter-
COMPENDIUM, Diciembre 2003 35

cero, la perspectiva de procesos internos, y son: el gobierno central, las expectativas del
cuarto, la perspectiva de aprendizaje y creci- público, la competencia compulsiva, el cambio
miento. cultural y la pérdida de confianza.

Kaplan (2001), relata tres experiencias en Para Brignall y Modell (2000), la heteroge-
entidades no lucrativas, provenientes del pro- neidad que caracteriza a los stakeholders de las
grama de investigación de la Escuela de Nego- organizaciones públicas, se traduce en múltiples
cios de Haward (USA). Uno de los casos, una dimensiones de desempeño, que implica un
intermediaria financiera sin fines de lucro, de- gran número de interacciones y equilibrios, que
nominada New Profit Inc., incluyó una perspec- deben ser gestionados para satisfacer los inter-
tiva adicional a su diseño del CMI, para identi- eses de los diferentes grupos. Siendo así, ellos
ficar como cliente, no solamente al inversionis- afectarían el diseño del modelo en cuestión,
ta del fondo, sino además, a la cartera de agen- surge por tanto la tercera cuestión a investigar
cias que demandaban la subvención de capital la cual haría referencia a quiénes serían esos
para la realización de programas sociales. stakeholders y cómo vincularlos con los objeti-
vos estratégicos de estas organizaciones.
Aunque el éxito financiero no es un fin últ i-
mo para estas organizaciones, representa un te- El primer grupo a identificar son los usua-
ma de preocupación para su subsistencia. Gene- rios del servicio o beneficiarios, normalmente
ralmente, las instituciones gubernamentales de- agrupados en la perspectiva del cliente. Kaplan
penden de la asignación de fondos a través del (2001) hace énfasis del problema que encuen-
presupuesto público y son constantemente fis- tra las entidades públicas, al definir quiénes son
calizadas, por un ente contralor, para vigilar el sus verdaderos clientes, puesto que normalmen-
buen uso de dichos recursos. Cuando se trata de te, quién paga el servicio, no tiene por que ser
Organizaciones No Gubernamentale s (ONG), el beneficiario. Para esta situación, Kaplan pro-
éstas compiten con otras similares, en demanda pone dividir la dimensión del cliente en dos: el
de mayores fondos, provenientes de las dona- beneficiario, y el contribuyente, aunque hay que
ciones voluntarias de los propios beneficiarios advertir que un actor, agente o constituyente,
y / o de terceros, a quienes deben rendir cuen- puede ejercer varios papeles y representar dife-
tas por el manejo adecuado de ellos. rentes intereses.

Obviamente, las relaciones entre las organi- Kloot y Martín (2000) investigaron el desa-
zaciones públicas y sus stakeholders, resultan rrollo de los sistemas de medición del desempe-
complejas. Además de numerosas, le rodean ño en los gobiernos locales, y decidieron susti-
circunstancias inciertas que complica la posib i- tuir la perspectiva del cliente, para ampliarla
lidad de lograr con éxito la estrategia trazada. por el enfoque de la comunidad. Bajo esta ópti-
Brignall y Modell (2000) señalan, que muchos ca, podían analizar cómo la comunidad general
servicios públicos se encuentran presionados percibía la gestión y la opinión específica de
para ser más eficientes y efectivos, ante un es- quienes usaban directamente los servicios del
cenario donde se acentúa la escasez de recursos ayuntamiento, es decir, su satisfacción como
y se incrementa la demanda por servicios públi- clientes. Los atributos a evaluar fueron: lide-
cos de calidad. Kloot y Martín (2000) enumeran razgo, imagen, servicio al cliente, responsabili-
cinco factores de presión que se han evidencia- dad en la rendición de cuentas, cumplimiento
do en los gobiernos locales británicos, como de las leyes y protección medioambiental.
36 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

Brignall y Modell (2000) analizaron el papel y constancia en los pedidos. Esta relación gene-
del beneficiario como comprador de servicios ralmente conlleva un contrato explícito, donde
públicos, dado que el “poder del comprador” es se establecen estándares de desempeño como
una forma de legitimar sus derechos y de eje r- calidad, costo y entrega (Atkinson y Waterhou-
cer una influencia directa sobre la organización se, 1997).
proveedora de servicios públicos. Es decir, co-
mo compradores exigen precios asequibles y La vinculación de las expectativas de los sta-
mejor calidad de los servicios suministrados. keholders con los objetivos organizacionales, es
el resultado de las negociaciones entre la em-
Los trabajadores y gerentes son stakeholders presa y sus stakeholders. Los contratos reflejan,
de procesos, al realizar actividades diarias de la ya sea de manera explícita o implícita, las con-
entidad, pero a su vez exigen derechos y reivin- tribuciones esperadas de cada uno de sus stake-
dicaciones que se contraponen a los objetivos holders, para ayudar a la empresa a alcanzar sus
de la organización y en consecuencia, entran en metas principales, como también, las retribucio-
conflicto. Estas relaciones resultan muy com- nes que cada stakeholders espera por su coope-
plejas y deben ser manejadas con cautela. ración.

Por ejemplo, los sindicatos y asociaciones de Las contribuciones y retribuciones posibles


profesionales (proveedores de servicio profesio- pueden definirse como “atributos de valor” que
nales) demandan mejoras salariales y otros ex- la organización está dispuesta a dar para satisfa-
cedentes económicos, en pro del bienestar de cer los requerimientos de sus stakeholders. Por
sus asociados. Estas exigencias resultan contra- ejemplo, la institución puede ofrecer: calidad,
producentes a las políticas de eficiencia y eco- accesibilidad, transparencia, confianza, partic i-
nomía que impone el cuerpo de financiadores. pación y formación, para recibir a cambio, ima-
gen, reputación y conocimiento.
La cultura organizacional es un factor influ-
yente en las interacciones de la organización y Como consecuencia del reconocimiento de
sus empleados, Blanco, Aibar y Cantorna los stakeholders, la organización debe tratar de
(1999), argumentan que no existe una única mantener su participación continua, respondie n-
cultura empresarial sino distintas subculturas do a las exigencias de cada grupo. Un modelo
“funcionales” que coexisten en la misma orga- de gestión estratégico para las entidades públi-
nización, pero una de ellas prevalece cuando cas, debería proveer información a los gerentes,
dominan sobre las prioridades estratégicas. De para evaluar si la institución está logrando con-
esta manera, suelen afectar la elección de los seguir el equilibrio adecuado entre los intereses
indicadores del desempeño y centrar la atención de los diferentes stakeholders y si verdadera-
de los demás miembros, sobre aquellas varia- mente, están creando valor para ellos.
bles que convienen a sus intereses y a la posi-
ción de poder que representa en la institución. Para finalizar y a modo de reflexión, cree-
mos conveniente nombrar a los competidores
El papel de la organización de los proveedo- como posibles stakeholders. Aunque no apare-
res, parece estar claramente definido: suminis- cen incluidos como tal, los competidores pue-
trar los bienes y servicios que la institución re- den influenciar indirectamente en el comporta-
quiere para la realización de sus operaciones, a miento de los otros grupos y en las mismas en-
cambio del cumplimiento oportuno de los pagos tidades públicas. Pueden representar una ame-
COMPENDIUM, Diciembre 2003 37

naza a la ejecución del plan estratégico o una Los ajustes que hemos considerado conve-
oportunidad de alianzas futuras. En los gobie r- nientes para que el CMI pueda ser un modelo
nos locales de Australia (Kloot y Martín, 2000), viable a las instituciones públicas, han sido pro-
compararon el desempeño de estos gobiernos puestos sobre la base de los cuestionamientos
con sus rivales más inmediatos, posiblemente formulados en este trabajo, y a las sugerencias
provenientes del sector privado. Esta experie n- y críticas de los investigadores. A continuación,
cia, permitió enriquecer la perspectiva gerencial puntualizaremos tales observaciones:
y fomentar el aprendizaje organizacional.
1. Proponer tres perspectivas paralelas que
ocuparán la principal jerarquía en la estructura
AJUSTE PROPUESTOS AL M O D E L O del CMI; éstas son: la Perspectiva del Usuario,
DEL CM I PARA SU APLICACIÓN EN la Perspectiva de la Comunidad y la Perspectiva
LAS ORGANIZACIONES DEL Medioambiental.
SECTOR PUBLICO
2. Integrar la planificación estratégica como
Las entidades gubernamentales demandan un proceso indispensable para la identificación
de los stakeholders, sus intereses, potencialidad
un modelo de gestión mult idimensional, que les
de conflictos e influencia de poder.
permita manejar la potencialidad de conflictos
de intereses de sus stakeholders y la capacidad
3. La Perspectiva de Aprendizaje y Creci-
de crear va lor para satisfacer esas aspiraciones.
miento será sustituida por la Perspectiva Huma-
Como apunta Otley (1999: 365), la relativa im-
na e incluirá los objetivos concernientes a la
portancia dada a las diferentes metas puede re-
propuesta de valor para los RRHH de la organi-
flejarse en el relativo poder de los diferentes
zación.
stakeholders, es decir, diferentes coaliciones o
grupo de stakeholders pueden dominar el esta-
4. La Perspectiva Financiera será un medio
blecimiento de las metas (Tuomela, 2001: 2).
para alcanzar los fines de las perspectiva ante-
Por lo menos, para las organizaciones del sector
riores y se medirá en términos de economía,
público, es un hecho reconocido.
eficiencia, eficacia y efectividad.
La alta gerencia de estas instituciones debe
5. Dado que la Perspectiva Interna define
integrar lo mejor posible esa complejidad y pro-
los factores críticos del éxito, la entrega de va-
poner el equilibrio adecuado entre los requeri-
lor a sus proveedores se considerará una varia-
mientos de sus stakeholders, para traducirlo en
ble clave; y la comparación con sus rivales más
objetivos estratégicos. Por ello el CMI, al ser la
inmediatos, podrá servir de método para impul-
herramienta idónea para gestionar, medir y eva-
sar la mejora y la innovación en los procesos.
luar el logro de dichos objetivos, debería pla n-
tearse en estas organizaciones, para ser excele n-
El papel de la comunidad se tiene como pun-
tes en satisfacer a: nuestra comunidad (por la
to de referencia en la formulación de las prior i-
contribución que hacemos a su bienestar), los
dades estratégicas de la institución al participar
usuarios (por el servicio suministrado), los em-
como fiscalizador y comprobar que la organiza-
pleados y la protección del ambiente, así como
ción está correspondiendo a sus expectativas, a
para dar una buena imagen ante los órganos fis-
fin de cuentas, son los que verdaderamente se
calizadores, por el manejo de los recursos asig-
nados.
38 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

ven afectados por la buena o mala gestión de cesidades del presente, sino además, prepararse
los servicios públicos. para provocar las transformaciones que la reali-
dad reclama.
La incorporación de la dimensión medioam-
biental es vista como la responsabilidad social
compartida entre la comunidad, para velar por CONSIDERACIONES FINA LES
la protección ambiental; el cuerpo de financia-
dores, en vigilancia del cumplimiento de la le- El CMI desde su aparición ha sido utilizado
yes respectivas; y la propia organización, para
para diferentes propósitos. En su evolución na-
evitar el impacto negativo que produce la ex-
tural ha pasado de ser un instrumento de medi-
plotación de sus actividades.
ción, un conjunto de procesos gerenciales y un
sistema para gestionar la estrategia cualquiera
Con relación al aprendizaje y crecimiento
de estos fines, hasta llegar a ser útil para apli-
organizacional, estará soportado sobre las pers-
carlo en las instituciones públicas.
pectivas Humana y los Procesos Internos. Por
un lado, fomentan la motivación, el rendimiento
Más allá de representar una colección de in-
y la participación de sus miembros, y por otro,
dicadores financieros y no financieros, el CMI
promueven los cambios que se esperan de las
pretende perpetuarse como un modelo de ges-
estructuras administrativas y procesos organiza-
tión estratégica, que sirva a las organizaciones
cionales, para convertirlos en sistemas flexibles
para intentar alcanzar la excelencia, a través
que estimulen la iniciativa y la innovación.
del éxito en el logro de sus metas. En este senti-
do, las empresas no solamente deben conside-
Otro punto a destacar de la propuesta, es la
rar los intereses de aquellos a quienes debe su
definición de las medidas en función de los cri-
existencia, sino además, a las personas o entes,
terios de evaluación para la gestión de las orga-
que de una forma u otra, se ven involucradas en
nizaciones del sector público, como por eje m-
la realidad que rodea a la organización.
plo, sugiere la CPCG de AECA en su Docu-
mento n° 16, sobre Indicadores de Gestión para
El elemento fundamental del modelo y punto
las Entidades Públicas (1997). No solamente
de partida para su diseño, es la estrategia; elegi-
cubre los propósitos de eficacia, economía, efi-
da en el seno de la organización, claramente
ciencia y efectividad, sino además, plantea
definida, discutida y compartida, a través de las
otros tipos de indicadores que pueden medir las
experiencias, opiniones u observaciones, de los
metas estratégicas de las perspectivas, tales co-
miembros participantes en el proceso. El CMI,
mo la excelencia, equidad, entorno y sostenib i-
comprende una metodología para su implanta-
lidad. El uso de medidas financieras y no finan-
ción, no para su formulación.
cieras se ajusta perfectamente a estas exigen-
cias.
El CMI no es un modelo estático. Su carác-
ter dinámico se evidencia, cuando al cuestionar
En el gráfico 1 se representan las adaptacio-
la validez de la estrategia actual, surge otra, que
nes señaladas y cómo encajan en los procesos
puede responder más rápidamente ante las nue-
gerenciales. El feedback estratégico y la planif i-
vas situaciones que se originan en su entorno.
cación estratégica, hacen posible que la organi-
Conjuntamente con la integración de la planif i-
zación pública aparezca como un ente dinámi-
cación estratégica a los procesos de dirección,
co, que no sólo debe reaccionar frente a las ne-
se podrá monitorear las variables criticas del
GRAFICO 1
AJUSTES PROPUESTOS AL MODELO DEL CMI PARA LAS ENTIDADES PUBLICAS

CMI CON ENFOQUE DE LOS


PROCESOS GERENCIALES MISIÓN
STAKEHOLDERS
MODELO ORGANIZACIONAL

PERSPECTIVA PERSPECTIVA PERSPECTIVA


VISIÓN MEDIO AMBIENTAL
USUARIO COMUNIDAD
PLANIFICACION
ESTRATEGICA
IDENTIFICACIÓN DE
STAKEHOLDER

PERSPECTIVA
FORMULACIÓN DE LA HUMANA
ESTRATEGIA ELEGIDA

TRADUCIR Y COMUNICAR LA CONSTRUCCIÓN DEL CMI


ESTRATEGIA (AJUSTADO)

PERSPECTIVA
FINANCIERA
PROCESO DE PLANIFICACION ELABORACIÓN Y EJECUCIÓN
Y PRESUPUESTO DE PLANES Y PRESUPUESTO

MONITOREO Y EVALUACIÓN
DE RESULTADOS
PERSPECTIVA
FEEDBACK PROCESOS INTERNOS
ESTRATEGICO
REFORMULACION
AJUSTES DE ESTRATEGIA
39
40 Una aproximación a las implicaciones del cuadro de mando integral...

éxito y capturar los posibles cambios, provoca- ENGLUND, H. 2001. Leader-activities and
dos por el medioambiente en que se desenvuel- their impact on implementation process:
ve la organización. The case of balanced scorecard in the mu-
nicipally Nora, Sweden. Paper presentado
La adopción del CMI se debe apoyar en los en el 24th Annual EAA conference. Atenas,
sistemas de control de gestión (entre otros, con- Grecia, Abril.
tabilidad y presupuesto), porque por sí solo no
podrá promover las modificaciones necesarias EPTIEN M. Y MANZONI, J.F 1997. Transla t-
para su factibilidad; en especial, cuando se trata ing strategy into action. Management Ac-
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donde predominan la rigidez de las normas y un
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