SIN COMPAÑÍA

(Entra en escena Susana, dejando bolsas de comida sobre la mesa)

Susana: - Llego y nunca hay alguien en esta casa para ayudarme… Seguro mis
hijos se fueron con sus amigos, ya ni viven acá, hace una banda de días no los veo,
es la adolescencia, que se le va a hacer, mientras que no se metan en problemas,
todo bien… Lo malo es que no tengo a alguien con quien hablar, solo a la vecina…
mira, ¡ahí está! Holaaa doñaa… ¿qué tal va su día?... me alegro entonces, yo, bien,
sola… la vi que metió a unos señores a su casa, el sábado… si, perdón por ser
chusma doña, pero no me presentas alguno, acá ando sin hombres, capaz los
asusto, pero uno cada tanto viste que se necesita… ahhhh… uhh… están todos ca-
sados noo, bueno una lástima de lo que se pierden… ¿quiere venir a tomar mates?
Yo compré bizcochos… ah, no puede, ¡bueno no hay problema! No la molesto más,
perdón, seguí colgando la ropa… ¿no necesitas ayuda? … no, bueno señora, solo
ofrecí mi ayuda, chau, que termines bien el día… Esta señora cada día me soporta
menos, pobre. Me quedé con la duda, esos hombres ¿estarán casados? ¿o me min-
tió? Para mí, tiene alguno por ahí. Igual, ¿quién necesita de un hombre? Podemos
vivir felices iguales, sin depender de nadie, aparte te engañan como a mí, te dejan,
no sé, me buscaré un señor con plata, como se le dice ahora, sugar daddy jajaja,
estos chicos de ahora... Me voy a buscar mi bata, empezó a hacer frío y no me
quiero enfermar, porque si no quien me mantiene. (comienza a doblar ropa) Es-
toy un poco sensible, estoy en mis peores días, yo no entiendo por qué las mujeres
tenemos que sufrir la menstruación, tengo ganas de comerme la vida, y quedarme
tirada en mi cama por el dolor. Pero bueno, cosas que nos tenemos que soportar…
Voy a llamar a mis hijos (saca el celular y los marca)
Hola juannn, soy tu madre, no sé si te acordás, ¿Dónde estás?... ahh con los chi-
cos, nunca con una pareja che… bueno bueno, no te jodo más, te extraño, perdón
(le corta). Que buena charla, la verdad, ¡me contó de todo! voy a ver qué hace
Francisco (lo llama) hola mi cuchurrumí de la mamaaaa, ¿por dónde andas? …
ah, ¿Quién es Camila? ¿la puedo conocer? ¿por qué no la traes a casa así charla-
mos?... ah ¿te doy vergüenza? Pero, si no me voy a poner a bailar… decile que
algún día la espero en casa que yo cocino… no importa, voy a cocinar si viene ella.
Bueno, chau chau, cuídense, ojito… (cuelga)
Uno enamorado y el otro sin saber qué hacer con su vida, dos polos completa-
mente opuestos… si nadie piensa venir, a no ser que ser que ocurra un milagro,
me toque la puerta un hombre y me invite a salir, me lanzo… me voy a bañar,
acostarme y mirar netflix, nada interesante pero me encuentro bien y feliz, ya
encontraré pareja, o si no adopto a todos los perros de la calle creo que va a ser
mucho mejor… (sale de escena)