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INSTITUCION EDUCATIVA JOSE ANTONIO GALAN

Aprobada según resolución 0000677 de septiembre 16 de 2003


DANE 123672000054 - NIT 812.002.162. D.V.1

DOCENTE EDUCACION RELIGIOSA: CARLOS CANDELARIO RODRIGUEZ CASTILLO


CEL: 3145899726 EMAIL: croc5666@hotmail.com
GRADO 11° A, B Y C
TERCER PERIODO – GUIA #5
SEMANAS DE TRABAJO #QUEDATEENCASA DESDE EL 13 HASTA EL 31 DE JULIO DEL 2020

“Queridos estudiantes, Adelante!! Recuerda los resultados también dependen de ti”

UNIDAD #3
PASTORAL SOCIAL
DESEMPEÑO: Conoce los lineamientos de la doctrina social de la iglesia (D.S.I) y su incidencia en
las principales ideologías.

TEMA 1: DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA (D.S.I)

INDICADOR DE DESEMPEÑO: Identifica los fundamentos de la doctrina social de la iglesia.

ESTA INFORMACIÓN TE SERVIRÁ PARA DESARROLLAR LAS ACTIVIDADES 1, 2, y 3

Para analizar la D.S.I vamos a utilizar la metodología de: VER, JUZGAR Y ACTUAR

VER: aquí se presenta la información de manera neutral y objetiva, trata de responder qué es,
cuáles son y en qué consisten los fundamentos de la doctrina social de la iglesia.

JUZGAR: Aquí a la información se le hace un juicio valorativo desde lo positivo y lo negativo que
tiene la D.S.I

ACTUAR: Aquí se proponen alternativas para mejorar el propósito que tiene la D.S.I

LA LECTURA DEL TEXTO TE AYUDARA PARA DESARROLLAR LAS ACTIVIDADES 1, 2, y 3


EL TEXTO ES EL SIGUIENTE:
FUNDAMENTOS DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA
La Doctrina Social de la Iglesia (DSI), que se ha desarrollado especialmente en los Últimos cien
años, puede definirse como el conjunto de pensamientos y orientaciones de la Iglesia respecto a
las relaciones sociales, políticas, económicas y culturales de los pueblos y naciones, iluminadas
con las enseñanzas que se encuentran en la Sagrada Escritura, en la tradición y en el magisterio
de la Iglesia.
Es importante aclarar que por sus contenidos la DSI no es un modelo político y económico
alternativo a los modelos imperantes, sino una aplicación de la Palabra de Dios a los diversos
ámbitos de la vida social, que orienta el comportamiento de la comunidad cristiana y propone a
todas las personas de buena voluntad independientemente de su filiación política y económica,
los principios morales que deben tener vigencia en el orden social.
También es necesario aclarar que en los documentos de la DSI hay principios y verdades válidas
para todo tiempo y lugar, así como también referencias a situaciones históricas y sociales que
pueden variar. Por esta razón, al acercarnos a esos documentos hay que distinguir en ellos las
verdades perennes y las referencias a circunstancias cambiantes de la vida social de los pueblos o
de una época determinada. No puede pretenderse, por ejemplo, que los contenidos de la encíclica

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Rerum Novarum, escrita a finales del XIX, hagan referencia a problemas de hoy que no existían
en esa época. Pero sí encontramos en ese documento principios y verdades sobre la dignidad de
la persona humana y el bien común como ejes de la vida social, que mantienen su vigencia hoy.

La DSI, nace como exigencia de la Palabra de Dios, para dar respuesta a los problemas sociales y
a todo lo concerniente a la vida comunitaria, en la sociedad y en la Iglesia. Aunque en todas las
épocas la Iglesia ha tenido pensamiento social con motivo de la Revolución Industrial, iniciada en
el siglo XIX, se produjo desarrollo más intenso de la DSI, elaborada por el magisterio de la Iglesia
mediante el análisis e interpretación de la realidad social a la luz de la Sagrada Escritura vía
tradición de la Iglesia, con la ayuda de las ciencias sociales.

Fundamentos de la DSI en la Sagrada Escritura

Como se ha analizado suficientemente en las clases de educación religiosa, Dios se ha revelado en


la historia. Por eso los cristianos y las cristianas tienen la certeza de que su relación con Dios sólo
es posible desde dentro de la historia de salvación y desde las relaciones con las otras personas y
con la naturaleza. No puede desligarse el aspecto religioso de la vida cotidiana de cada quien y es
a través de las relaciones sociales, económicas, políticas y culturales como la persona cristiana
ejerce su compromiso de construir un mundo nuevo según el designio de Dios.

En el Antiguo Testamento, especialmente en los profetas, pueden encontrarse orientaciones muy


precisas para el comportamiento social del ser humano. Temas como los derechos de las personas
pobres, la denuncia de las riquezas adquiridas con injusticia y la invitación a la pobreza se
encuentran en distintos pasajes veterotestamentarios. Como ejemplo, puede citarse el siguiente
texto del profeta Isaías:

"Harto estoy de holocaustos de carneros y de sebo de cebones; y sangre de novillos y machos


cabríos no me agrada, cuando venís a presentaros ante mí... Aunque menudeéis la plegaria, yo no
oigo. Vuestras manos están de sangre llenas: lavaos, limpiaos, quitad vuestras fechorías de
delante de mi vista, desistid de hacer el mal, aprended a hacer el bien, buscad lo justo, dad sus
derechos al oprimido, haced justicia al huérfano, abogad por la viuda".

El Nuevo Testamento retoma la enseñanza de los profetas respecto a la justicia, la pobreza y los
derechos de las personas marginadas de la sociedad; Jesús, que revela en forma definitiva la
Palabra de Dios, lleva a plenitud y perfección la enseñanza de los profetas:

Los seres humanos como poseedores de los bienes de la tierra son solamente administradores y
han de ser fieles administrando lo poco y 10 mucho.
Si las personas no tienen a Dios como único Señor, pueden caer en la codicia del dinero, del poder
y del tener, lo cual resulta incompatible porque no se puede servir a Dios y al dinero.

Las riquezas injustas deben ser compartidas Demás.

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Cristo es identificado con el pobre como bellamente lo narra la parábola del juicio Final.
Siguiendo los Evangelios, todos los libros del Nuevo Testamento desarrollan la enseñanza de
Jesucristo y la aplican a las circunstancias de su tiempo como lo vemos, por ejemplo, en la carta
de Santiago, donde se exige en nombre de Dios el respeto y vigencia de los derechos de las
personas pobres.

Fundamentos de la DSI en la tradición


Los santos Padres fueron reiterativos en sus denuncias en contra de las injusticias en la
distribución de los bienes y la codicia de las riquezas, que generan, inevitablemente, pobreza.
Reivindican que las personas solamente son administradoras e invitan a los cristianos y a las
cristianas a compartir con las personas más necesitadas. Entre los testimonios de la tradición
cristiana pueden mencionarse los siguientes:

La Doctrina de los Apóstoles (Didajé) afirma:


"No echarás al indigente, sino que tendrás todo en común con tu hermano y no dirás qué es tuyo,
porque si comparten en lo inmortal, cuánto más en los bienes pasajeros".
A su vez, san Basilio expresaba:
"Te pareces a un hombre que, llegando a un teatro, quisiera impedir que los otros entraran y se
imaginaría poder gozar solo de un espectáculo al cual todos tienen derecho. Así son los ricos: se
adueñan de los bienes comunes que han acaparado, porque son los primeros que los han
ocupado".

San Ambrosio afirmó:


"No es tu bien el que distribuyes al pobre. Le devuelves parte de lo que le pertenece, porque
usurpas para ti solo lo que fue dado a todos, para el uso de todos. La tierra a todos pertenece, no
sólo a los ricos".
San Agustín afirmaba que: "Lo que se da al pobre es una deuda en nombre de la justicia".
Santo Tomás de Aquino resume el pensamiento de los Padres de la Iglesia y aporta elementos
nuevos como el de justicia conmutativa, que define el derecho de una persona respecto a otra
como, por ejemplo, el salario justo, y el de justicia distributiva, que se refiere al derecho de cada
persona sobre el conjunto de los bienes no necesarios.

Fundamentos de la DSI en el magisterio de la Iglesia


Cuando se habla de magisterio de la Iglesia se hace referencia a las enseñanzas emanadas del
Colegio Apostólico, conformado por los obispos bajo la dirección del sucesor de Pedro, en
desarrollo de su misión de interpretar auténticamente la Palabra de Dios y la tradición. En estas
líneas se incluyen dentro de dicho concepto las enseñanzas de los Papas escritas en sus cartas
encíclicas y en los documentos de la Iglesia latinoamericana.
Entre los documentos más importantes que sirven de base a la Doctrina Social de
Iglesia, se pueden mencionar los siguientes:

• Encíclica Rerum Novarum (1891), del Papa León XIII. Esta encíclica habla derecho de las personas
obreras a asociarse para la defensa de sus derechos y de deber de los estados de intervenir en los

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campos de lo social y lo económico para proteger a las personas más débiles frente a los abusos
del liberalismo económico. En ella también se plantean los peligros del naciente socialismo
• Encíclica Cuadragesimo Anno (1931), del Papa Pío XI. Esta encíclica habla do l restauración del
orden social y su perfeccionamiento, de conformidad con la l evangélica. Propone, ante los
avances del socialismo y la crisis del capitalismo un nuevo modelo llamado Corporativismo
cristiano, basado en el derecho de libre asociación, de libertad de participación y de
autoreglamentación.
• Radiomensaje del Papa Pio XIl con motivo de los cincuenta años de la encíclice Rerum Novarum
(1941) y en plena Segunda Guerra Mundial. Es una importante enseñanza en la cual se privilegia
la democracia frente a los demás sistemas políticos y se insiste en la función social de la propiedad
privada.
• Mater et Magistra (1961), del Papa Juan XXIII. Habla de desarrollo de la cuestión social a la luz
de la doctrina cristiana. En ella se afirma que el subdesarrollo no es un simple problema
económico, sino que es resultado de diferencias cualitativas establecidas por el nuevo sistema
mundial en el cual aparecen unos países ricos que dominan a los países pobres.
• Pacem in terris (1963), del Papa Juan XXIII. Habla sobre la paz entre todos los pueblos, que ha
de fundarse en la verdad, la justicia, el amor, la libertad y el respeto de los derechos
fundamentales de todas las personas.
• Constitución Gaudium et Spes del Concilio Vaticano II (1965). Habla de la Iglesia en su relación
con los grandes problemas del mundo actual. Habla de la necesidad de un desarrollo económico
integral que esté al servicio del ser humano. La actividad económica, aunque se rige por leyes
propias, debe acogerse al orden moral y a los planes de Dios y debe orientarse para que
desaparezcan las profundas desigualdades entre los pueblos y las personas.
• Encíclica Ecclesiam Suam (1964) del Papa Pablo VI. Esta encíclica habla sobre los caminos que la
Iglesia Católica debe seguir para cumplir su misión.
• Encíclica Populorum Progressio (1967), del Papa Pablo VI. Esta encíclica habla sobre la necesidad
de promover el desarrollo de los pueblos. Propone un nuevo humanismo que ayude a lograr un
verdadero progreso de los pueblos por encima del simple desarrollo técnico. Abiertamente afirma
que "el nuevo nombre de la paz es justicia".

ACTIVIDAD # 1: ESTA ACTIVIDAD LA VAS A REALIZAR DESDE EL 13 AL 17 DE JULIO.


De acuerdo al texto de los fundamentos de la doctrina social de la iglesia, vas a analizarlos desde
la metodología VER

ACTIVIDAS # 2: ESTA ACTIVIDAD LA VAS A REALIZAR DESDE EL 21 AL 24 DE JULIO.


De acuerdo al texto de los fundamentos de la doctrina social de la iglesia, vas a analizarlos desde
la metodología JUZGAR

ACTIVIDAD # 3: ESTA ACTIVIDAD LA VAS A REALIZAR DESDE EL 27 AL 31 DE JULIO.


De acuerdo al texto de los fundamentos de la doctrina social de la iglesia, vas a analizarlos desde
la metodología ACTUAR

EXITOS!!! QUE QUIEN LOS AMA LOS BENDIGA!!

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