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PALABRAS CLAVE

Arquitectura vernácula,
LA VIVIENDA COMO ESTRATEGIA
Vivienda rural,
La Puntilla, DE REPRODUCCIÓN SOCIAL. EL CASO DE
Argentina

KEYWORDS
LOS PUESTOS DE LA PUNTILLA
(LA PAMPA, ARGENTINA)
Vernacular architecture,
Rural dwellings,
La Puntilla,
Argentina

HOUSING AS A SOCIAL REPRODUCTION


STRATEGY. THE CASE OF THE PUESTOS OF LA
PUNTILLA (LA PAMPA, ARGENTINA)

> antonela mostacero y maría eugenia comerci


Universidad Nacional de La Pampa
Instituto y Departamento de Geografía
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas

recibido > cómo citar este artículo (NORMAS APA):


10 de julio de 2018 Mostacero, A. L. y Comerci, M. E. (2019). La vivienda como estrategia de reproducción social.
aceptado
El caso de los puestos de La Puntilla (La Pampa, Argentina). AREA, 25(1), pp. 1-14.
15 de enero de 2019 https://www.area.fadu.uba.ar/wp-content/uploads/AREA2501/2501_mostacero_comerci.pdf

EL CONTENIDO DE ESTE ARTÍCULO


ESTÁ BAJO LICENCIA DE ACCESO
ABIERTO CC BY-NC-ND 2.5 AR

1 area 25(1) | NOVIEMBRE 2018 - ABRIL 2019 | ISSN 2591-5312 | TEMÁTICA GENERAL | © SI-FADU-UBA
RESUMEN ABSTRACT
El presente artículo indaga sobre la This article researches about rural
territorialidad campesina en espacios territoriality in spaces that were deprived of
despojados de sus recursos hídricos del oeste their water resources located in the west of
de la provincia de La Pampa (Argentina) y el La Pampa province, Argentina and the role of
rol de la vivienda vernácula en el desarrollo vernacular housing in the social reproduction
de las estrategias de vida de las unidades strategies of the rural domestic units. Thus,
domésticas rurales. Para ello, se analiza el we analyze the case of La Puntilla area
caso de la zona de La Puntilla y los espacios and the spaces that constitute the puestos
que conforman la organización los puestos (domestic, peridomestic and grazing areas).
(doméstico, peridoméstico y de pastoreo). Finally, we focus on the meanings of the
Finalmente, se analiza el significado que la enramada between the farmers, examining
enramada tiene para los puesteros, haciendo the symbolism and usefulness of this
énfasis en la función simbólica y utilitaria de characteristic architectural element. From
este elemento arquitectónico característico. the methodological point of view, we recover
Desde el punto de vista metodológico se empirical material guided by the qualitative
recuperan diferentes materiales empíricos methodology. In addition to several field trips
guiados por la metodología cualitativa. to La Puntilla rural area, located in the center
Además de sucesivas salidas de campo por of the country, we count with the farmers’
la zona rural de La Puntilla, localizada en el testimonies, interviews made to public officers
centro del país, se cuenta con testimonios and territorial professionals, photography,
de puesteros, funcionarios y técnicos cartography and various documents that
territoriales, fotografías, cartografías, enable the methodological triangulation.
encuestas y diversos documentos que
posibilitan la triangulación metodológica.

> acerca de las autoras


Antonela Mostacero. Arquitecta. Becaria doctoral del Consejo Nacional de Investigaciones
Científicas y Técnicas (CONICET). Integrante del proyecto de investigación titulado
Estrategias de Reproducción Social en espacios de borde del Centro de Argentina, dirigido
por la Dra. María Eugenia Comerci en el período 2017-2019. Proyecto de investigación con
evaluación externa aprobado por el Consejo Directivo (Resolución CD 565/16), Facultad
de Ciencias Humanas, Instituto y Departamento de Geografía, Universidad Nacional de La
Pampa (UNLPam).
<antonelamostacero@gmail.com>

María Eugenia Comerci. Profesora y Licenciada en Geografía, Magíster en Estudios


Sociales y Culturales y Doctora en Ciencias Sociales y Humanidades. Es actualmente
Investigadora adjunta del CONICET con sede en el Departamento e Instituto de Geografía
(UNLPam) e investigadora del Centro de Investigaciones sobre Economía y Sociedad en la
Argentina Contemporánea (IESAC), de la Universidad Nacional de Quilmes. Asimismo, se
desempeña como Profesora Asociada Regular en Geografía de Argentina (UNLPam) y es
Directora de la Revista Huellas, del Instituto de Geografía (UNLPam).
<eugeniacomerci@gmail.com>

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Introducción Los puestos constituyen la unidad de
residencia familiar, no siempre fija a un
La construcción de la vivienda es un sitio, pues las pasturas pueden cambiar
hecho social que expresa necesidades, con el transcurso de los años o, taparse
expectativas y determinados puntos las aguadas y relocalizarse las viviendas
de vista. La configuración de una casa rurales en otro sector del campo. La de-
campesina1 manifiesta material y simbó- nominación de los puestos está asociada
licamente muchos elementos de la vida con la presencia de recursos en el lugar,
social y relacional de los sujetos (Tomasi situaciones vividas o deseadas por sus
y Rivet, 2011). El relevamiento del dueños o, incluso, historias generadas en
sistema de asentamientos de puestos que esos sitios.
1. Para este trabajo con- da cuenta de las territorialidades campe- En los puestos localizados sobre la depre-
sideramos necesario sinas es de vital importancia para poder sión fluvial del Atuel-Salado, y especí-
individualizar la vi- comprender los esquemas de uso, apro- ficamente en La Puntilla, el proceso de
vienda campesina res- piación y significados territoriales para asentamiento de criollos e inmigrantes,
pecto del resto de las las familias rurales de lo que llamamos se asoció directamente con la presencia
viviendas rurales. Las espacios de borde de la Argentina. En de los escurrimientos superficiales y su
unidades campesinas el caso del oeste pampeano, utilizamos posibilidad de aprovechamiento. Muchas
pueden ser entendidas dicha categoría para referirnos a esos familias realizaron usos particulares
como un ámbito de lugares menos insertos en la dinámica mediante la construcción de pequeñas
actividad múltiple del capital, con dependencia y domi- acequias y tajamares (reservorios de
que no se restringe nación, pero que tienen un margen de agua antrópicos) destinados al riego de
exclusivamente a autonomía en sus lógicas territoriales y agricultura frutihortícola y forrajera para
la residencia de la prácticas (Comerci, 2018). la subsistencia y, eventualmente, el mer-
familia sino también al En Argentina, a pesar del avance de la cado. Otras explotaciones no ribereñas,
espacio (re)produc- lógica empresarial, persisten productores garantizaban la reproducción simple o
tivo. Presenta una familiares que presentan transformacio- ampliada mediante la cría del ganado ovi-
mayor complejidad nes de la unidad doméstica, en el espacio no, vacuno, equino y caprino, utilizando
funcional y a menudo rural y en las representaciones (Bendini y el agua dulce y la oferta de pasturas.
constituye la principal Steimbreger, 2013). El concepto de terri- Con el paso del tiempo los taponamientos
fuente de provisión torialidad campesina hace posible repre- destinados a regar chacras mendocinas
de alimentos para el sentar el complejo caudal de estrategias cortaron los brazos principales del río
grupo doméstico. que al campesinado le permiten resistir y Atuel y los caudales fueron disminuyen-
El productor con permanecer en condiciones agroecológi- do hasta que la construcción del represa-
perfil campesino, se cas y socioinstitucionales históricamente miento El Nihuil en 1947, interrumpió
caracteriza por utilizar desventajosas y en contextos de expan- de manera abrupta el escurrimiento del
mano de obra familiar, sión concentrada del capital (Torres, río. El paisaje y su percepción cambiaron.
realizar un control Pessolano y Moreno, 2014). La ausencia de esta fuente de aprovisio-
formal del proceso En el espacio occidental pampeano, namiento de alimentos y de provisión de
productivo, y poseer caracterizado por su menor valoración agua para consumo humano y ganadero,
escasa disponibili- de recursos en el marco de los modelos significó pérdidas económicas, demográ-
dad de los recursos dominantes en el país, con semiaridez ficas, ecológicas y culturales de irrepara-
productivos, una ambiental, pequeñas localidades y más ble valor (Comerci y Dillon, 2014).
posición subordinada de quinientos puestos distribuidos en la En este escenario, las familias tuvieron
en el plano sociopro- zona rural (ver Mapa 1), los despojos que alterar su forma de vida ante la
ductivo y dificultades históricos de sus recursos hídricos, el falta de agua o al padecer inundaciones,
estructurales para avance de la propiedad privada y las sin previo aviso, cuando se producían
acumular capital lógicas individualistas están alterando la las sueltas aguas arriba. Las prácticas
(Cáceres, 2003). dinámica espacial. productivas-reproductivas actuales

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y las formas de construcción social
del espacio no son más que formas de
adaptación, persistencia y –en algunos
casos de resistencia a la desarticulación
campesina– ante las transformaciones
en el ambiente por la construcción de habitantes rurales y urbanos trataban de
las obras y los usos aguas arriba. Estos resolver sus problemas de sustento y or-
procesos, que implicaron más de setenta ganizar sus recursos. Sin embargo, como
años de desarrollo, alteraron algunos señala Clara Craviotti (2011), introducía
elementos del imaginario colectivo, los riesgos involucrados en la propia
redefinieron las estrategias, modificaron noción del término, pues a menudo se
las formas de percepción de los sujetos, enfatizaba en los procesos de cálculo
la construcción social de la vivienda y la racional y en la respuesta mecánica a los
distribución de los asentamientos rurales problemas presentados. Desde miradas
(Comerci, 2012a). críticas se propone abordar el estudio de
En este marco el objetivo de este traba- las estrategias como un concepto opera-
jo es reflexionar sobre la construcción tivo, sensible a la imprevisibilidad, a las
e identificación del puesto como parte interferencias derivadas de los inter-
de una estrategia integral de reproduc- cambios entre las acciones personales y Mapa 1
ción social de las unidades campesinas. familiares y los contextos sociales (Bjerg Diseño de puestos en el
Concebimos las estrategias, desde la y Boixadós, 2004). De esta forma, las oeste pampeano y área de
perspectiva de Pierre Bourdieu (2014), estrategias no están determinadas por estudio.
como el conjunto de prácticas combi- factores estructurales ni son mero pro- Fuente: Juan Pablo Bossa
nadas que posibilitan los procesos de ducto de una decisión libre e individual; (2017) con base en los
reproducción social de los grupos. Desde existe en los sujetos sociales un margen datos de Pombo y Martínez
la década del ochenta constituyó un de elección y de acción condicionado Uncal, Consultora UNLPam
concepto central en las Ciencias Sociales por los factores estructurales. El grado y Gobierno de la provincia
porque permitía comprender cómo los de autonomía de los sujetos depende de de La Pampa.

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las condiciones sociales objetivables y la
posición relativa en el espacio social en el
que las estrategias pueden estar compro-
metidas (Bourdieu, 2014).
Las reflexiones en este trabajo se enmar-
can en el proyecto de investigación de
la Universidad Nacional de La Pampa y
el Consejo Nacional de Investigaciones
Científicas y Técnicas (CONICET) en
los que participan las autoras titulado
“Estrategias de reproducción social actividades (Comerci, 2012b). Dados los
en espacios de borde del centro de objetivos del artículo, sumados a la au-
Argentina (2000-2016)” que busca discu- sencia de estadísticas confiables e infor-
tir y aportar en torno a cómo se desarro- mación editada sobre el oeste pampeano,
2. Los puesteros/ras llan y articulan las prácticas de sujetos hicieron imprescindible un abordaje
(Comerci, 2012a) son sociales que forman parte de espacios de desde la perspectiva que ofrece la inves-
los productores fami- borde en contextos de expansión capita- tigación cualitativa. Hemos utilizado la
liares, crianceros, con lista. Resulta necesario analizar de mane- estrategia metodológica del muestreo
perfil campesino que ra integral las estrategias de reproducción teórico para descubrir las categorías y sus
habitan en el puesto, social y la forman en que los sujetos se propiedades, dado que posibilita ampliar
residen y trabajan en articulan con otros actores sociales. Para o reducir potencialmente los conceptos.
su unidad producti- ello desarrollamos una mirada común Las estrategias metodológicas utilizadas
va, cualquiera sea su con abordajes interdisciplinarios (desde para poder reconstruir las diversas prác-
relación jurídica con los Estudios Culturales, la Geografía y la ticas y sus combinaciones a través del
la tierra (propieta- Comunicación Social), que recuperan la tiempo fueron la observación participan-
rios, poseedores o voz de los sujetos y combinan distintas te, conversación informal, entrevistas en
apareceros precarios). fuentes primarias y secundarias hiladas profundidad, historia de vida e interpre-
por la investigación cualitativa. tación de documentos diversos. Además
3. El Pilquen es un En este contexto, el artículo indaga acer- de los diez puestos recorridos (entre los
sistema de registro de ca de la vivienda campesina en espacios años 2008 y 2018) dentro de la unidad de
familias beneficiarias de borde, en este caso despojados de estudio se tuvo la oportunidad de concu-
de programas sociales sus recursos hídricos en la zona de La rrir –aplicando la técnica de observación
estatales de la pro- Puntilla (ver Mapa 1). A continuación, se participante– a reuniones organizadas
vincia de La Pampa. analizan, en la zona rural de La Puntilla, por el Programa Social Agropecuario,
Se caracteriza por los espacios que conforman los puestos, además de otras referidas a la cuestión de
presentar convenios teniendo como foco la organización las tierras en la unidad de estudio. En las
de articulación de funcional y los métodos constructivos sucesivas salidas de campo por la zona
información con otros utilizados. Asimismo, se caracteriza un de La Puntilla se obtuvieron testimonios
organismos (Salud, espacio arquitectónico de gran significa- de puesteros/ras2, funcionarios y técnicos
Educación, Poder ción para los grupos domésticos llamado territoriales, además de fotografías y car-
Judicial, entre otros). enramada. tografía. Esa información fue triangulada
Es un instrumento Metodológicamente se recuperan di- con datos de la encuesta del programa
técnico para acentuar ferentes materiales empíricos guiados Pilquén3 y documentos previos sobre
la coordinación de los por la metodología cualitativa. Como espacios y sujetos con similares caracte-
programas sociales ya se señaló, concebimos las estrategias rísticas y proceso de conformación.
estatales, asegurando como construcciones sociales producto
disponibilidad de del sentido de los sujetos, el conjunto La vivienda campesina como expresión
información sobre la de acciones y formas de percepción de las prácticas sociales
población vulnerable realizadas en forma permanente, que La vivienda representa una manifesta-
y sus condiciones permiten el desarrollo de procesos de ción cultural que permite dilucidar las
operativas, con actua- producción-reproducción de los grupos complejas estrategias de organización
lización permanente, (Bourdieu, 2014). Los procesos de toma social y territorial de una comunidad
con el fin de optimizar de decisiones y construcción de estrate- (Vigil Escalera, 2014); no debe ser solo
la ejecución de las po- gias se estructuran a partir de los deseos, comprendida como unidad arquitectó-
líticas sociales (http:// aspiraciones, representaciones y de la nica, sino además como resultante de un
www.mds.lapampa. particular forma que tienen los sujetos de complejo proceso en el que confluyen
gov.ar/pilquen.html, internalizar los riesgos e incertidumbres factores sociales, económicos y técnicos
consultado el 26 de a los que se encuentran sometidos en el condicionantes de su conformación y
marzo de 2018). campo social en el que desarrollan sus también de sus cambios (Sacriste, 1968).

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En este marco, en el mundo campesino,
la construcción de la vivienda vernácula
y la organización del espacio de pastoreo
implican siempre la puesta en acción de
numerosos saberes y técnicas que se han
modelado, adaptado y transformado
a través del tiempo en función de los
procesos internos y externos que afectan
al grupo doméstico.
En el caso de estudio, la zona de La
Puntilla, la impronta del proceso de explicado la localización de los asen-
desecamiento y cese del escurrimiento tamientos rurales es la presencia de los
permanente del río Atuel y sus brazos recursos hídricos superficiales (ríos,
(como el arroyo de la Barda), fue tan brazos, arroyos). En estos sitios, además
grande que afectó, no solo las actividades de las prácticas productivas-reproducti-
productivas sino también los patrones vas, diferentes elementos antrópicos dan
de asentamientos rural, formas de acceso cuenta de la importancia del agua (y su
a los recursos y estrategias de vida en su aprovechamiento) en el diseño territo-
conjunto. Ante el despojo histórico de rial: desde bombas y molinos localiza-
los recursos hídricos del río Atuel, por la dos en los cauces a puentes colgantes,
posición periférica de la provincia de La maromas (cuerda gruesa que se usa para
Pampa, aguas abajo del aprovechamiento cruzar bañados y/o pequeños arroyos) y
de la represa Los Nihuiles y la ausencia balsas construidas en forma precaria que
de un manejo integrado de la cuenca, las se utilizan, ocasionalmente, cuando se
familias ribereñas han generado nuevas libera el caudal.
estrategias de reproducción social y usos Con el nuevo ambiente generado con la
del espacio. interrupción del caudal permanente y el
En los puestos de la zona de La Puntilla, no cumplimiento de los acuerdos firma-
localizados en las cercanías del cauce del dos con Mendoza, se generaron en los
del río Atuel –confluencia del Atuel con últimos setenta años, procesos de reloca-
el Salado–, en la subregión denominada lización de puestos en busca de agua, en
“Llanuras aluviales del Atuel-Salado” muchos casos generando la construcción
(INTA, 1980), el principal factor que ha de viviendas y corrales en cauces secos.

Mapa 2
Distribución de puestos
en la zona de La Puntilla.
Fuente: con base en el
mapa elaborado por la
Consultora UNLPam (2012)
revisado y corregido por
las autoras.

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Figura 1
Puesto Los Tres Hermanos
Fuente: elaboración propia.

El trabajo de campo por la zona –en Como señalamos en líneas anteriores, el


distintas oportunidades– da cuenta de diseño de los puestos expresa material y
condiciones de pobreza estructural en simbólicamente muchos elementos del
los grupos domésticos crianceros de entorno ambiental y relacional de los
caprinos, equinos, y en menor medida, sujetos, modos de vida y condiciona-
vacunos. Además de plantel avícola y la mientos a los están expuestos los grupos.
caza de fauna silvestre, complementan sus Siguiendo a Jorge Tomasi: “las prácticas
ingresos con empleos temporales fuera del sociales de los diversos grupos pastoriles
predio y en las localidades de Santa Isabel y las formas de construcción del espacio
y Algarrobo del Águila (servicio domésti- doméstico están imbricadas íntimamente
co, changas, entre otros) y obtienen ingre- con las formas locales de territorialidad”
sos desde el Estado Nacional a través de (2011, p. 42).
asistencia social y transferencias directas En el oeste de La Pampa, cada puesto
tales como asignaciones familiares, tarjeta constituye la unidad de explotación
social, jubilaciones o pensiones4. A con- campesina y el asentamiento del grupo
tinuación, avanzamos en la organización familiar, que se encuentra organizado en
funcional de los puestos en La Puntilla. tres ambientes diferenciados: el espacio
doméstico, el espacio peridoméstico y
Caracterización del puesto el espacio de pastoreo o campo abierto
A menudo, las referencias a lo natural, (ver Figura 1). A los puestos se accede,
lo espontáneo, lo anónimo o lo popu- generalmente mediante uno o dos cami-
4. Las familias entrevis- lar como explicación, invisibilizan los nos irregulares o huellas que articulan
tadas no participan sentidos profundos que subyacen en los asentamientos dispersos, pueblos
actualmente de la aso- cualquier producción arquitectónica y atraviesan los espacios de pastoreo
ciación El Salitral que (Tomasi, 2011). Consideramos que estas (Comerci, 2010).
aglutina productores manifestaciones del hábitat son expre- El espacio doméstico está integrado
crianceros en Santa siones profundas del sentir de nuestros por la vivienda o las casas, y la galería
Isabel, fomentada des- pueblos que forman parte de las estrate- o enramada. La unidad habitacional
de el Programa Social gias de reproducción social y, al mismo se compone de un comedor, donde la
Agropecuario, luego tiempo, son un mecanismo de resistencia estufa hogar o la chimenea ocupan un
Secretaría de Agri- cultural cuyos procesos de producción lugar protagónico, cocina separada, dor-
cultura Familiar, hoy colectiva de conocimiento son pocas mitorios que se van adosando a lo largo
devenida en el Institu- veces tenidos en cuenta (Peyloubet, 2005; de los espacios comunes de acuerdo
to de Modernización. Ortecho, 2011). con la composición numérica del grupo

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familiar, y un baño que puede o no los ingresos familiares son mayores se Fotografías 1 y 2
estar incorporado dentro de la vivien- observa la implementación de chapa Construcciones locales en
da5. La unidad no presenta espacios de galvanizada. Suelen colocar polietileno La Puntilla.
circulación, sino que las habitaciones de en rollo como material con función Fuente: registros de las
comunican directamente a los espacios hidrófuga por debajo. autoras, 2009 y 2018.
comunes o entre sí. La enramada es un Podemos referirnos al puesto como una
elemento semicubierto o semiabierto construcción de carácter introvertido,
que puede aparecer adosado o no al que orienta pocas aberturas y de pe-
resto de la vivienda y constituye una queñas dimensiones hacia el camino de
extensión del área social del puesto. acceso, mientras que las ventanas de los
Las casas se suelen ampliar a medida que locales de función pública y las puertas 5. Las primeras
crece el grupo doméstico6 y generalmen- exteriores se abren hacia la enramada, investigaciones de
te están separadas del resto del espacio se encuentre o no adosada a la construc- vivienda vernácula
por un cerco, llamado guardaparque que ción principal. en la provincia de La
evita que ingresen los animales, cons- El espacio peridoméstico es el área de Pampa hablan del uso
truido con diversos materiales: palos y transición entre la vivienda y el monte de letrina separada de
ramas, cañas, rocas, botellas, chapas o abierto. Se compone de diferentes cons- la vivienda (Poduje,
arbustos. Este cercamiento de la casa, es- trucciones y elementos accesorios que 2000). Desde fines de
tablece un límite entre el espacio domés- rodean la casa. Entre los más utilizados siglo XX a la actuali-
tico y el peridoméstico, entre el adentro identificamos la cocina exterior techa- dad, a causa del avance
y el afuera. da, con fogón, el depósito, el sitio de de articulaciones
Construir las casas, lejos de ser una ta- provisión de agua (pozo con bomba o productivas y sociales
rea sencilla, continúa implicando el tra- de extracción manual, es decir con aljibe entre los puesteros y
bajo conjunto de la familia y la puesta o simplemente a balde), el depósito de otros espacios urba-
en acción de diferentes estrategias para agua para consumo doméstico (tanque o nos, así como por la
la obtención de insumos. Los muros cisterna), la pantalla solar para abastecer intervención del Esta-
han sido construidos con recursos na- de electricidad a la vivienda, el horno de do Provincial en obras
turales obtenidos en la zona: en algunos barro, la letrina (en algunos casos aún públicas y privadas
casos se han usado mampuestos de la utilizan, en los que no la mayoría las en el sector, muchos
adobe, elaborados en moldes, y en otros conserva sin uso), el gallinero, el playón, puesteros incorpora-
ladrillos cocidos, revocados con morte- los corrales para caprinos, el picadero ron el baño como un
ro cementicio, con embarre (Viñuales, para amansamiento de caballos, y, even- local más dentro de la
1981) o sin revocar (ver Fotografía 1). tualmente, bebedero, manga y brete para vivienda, si bien, sigue
Las cubiertas se disponen a una o dos vacunos (Poduje, 2000; Comerci, 2016). existiendo la vieja le-
aguas con una ligera pendiente. Por lo Cada uno de ellos se organiza con una trina abandonada en el
general, la estructura es de troncos de combinación de instalaciones y áreas de espacio peridoméstico.
madera del lugar (jarilla, chañar) sobre uso específico delimitadas territorial-
la que se disponen ramas de jarilla y mente. Ante la ausencia del río Atuel, 6. Los puesteros/ras
pichana o caña atadas con alambre desde hace unos años, recorren los pues- suelen constituir
y/o ligadas con embarre de tierra y tos los aguateros municipales que abas- familias ampliadas
fibras vegetales. En los puestos en que tecen de agua para consumo humano o ensambladas.

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cada quince días en depósitos que cada
familia debe poseer. En consecuencia, al
costado de la vivienda existen distintos
depósitos de agua que varían desde cis-
ternas a tanques para acumular agua de
lluvia y la entregada por los aguateros.
Entre los principales cambios a través
del tiempo en el espacio peridoméstico,
más que nuevas funciones en el uso del
espacio, podemos observar el uso de de mamíferos silvestres y aves para el
nuevos materiales constructivos como consumo doméstico o intercambio de
madera aserrada, chapa, morteros de carnes, pieles, cueros, plumas y/o huevos
cemento, ladrillo común, caños petrole- (Comerci, 2016).
ros, entre otros. Otras transformaciones Ante las crecidas del río Atuel sin previo
asociadas con el avance de la producción aviso y la creciente alteración del cauce de
vacuna para cría se expresan en la incor- inundación con la invasión de tamariscos,
poración de mangas, bretes, bebederos, ubicación de corrales y demás instalacio-
molinos y tanques australianos. nes antrópicas generadas durante los se-
Para la construcción de la cocina con tenta años en los que ha predominado un
fueguero (montículo de piedras, ge- ambiente con el cese de los escurrimientos
neralmente circular, donde se prende permanentes, determinados espacios de
fuego para calentar y cocinar) de uso pastoreo están inundados y ya no permi-
exterior se utiliza un sistema de tierra ten criar ganado vacuno y, eventualmente,
con entramado del tipo quincha7 con caprino. En este marco algunos grupos
fibras vegetales de jarilla, solupe, junco domésticos deben trasladar los animales
o pichana (especies vegetales locales), de hacia campos de vecinos arrendando o
ahí su denominación popular cocinitas haciendo acuerdos por porcentaje de ani-
de jarilla. Dentro del espacio peridomés- males por el uso del monte. La ausencia
tico en algunas explotaciones en las que de alambrados, si bien posibilita la obten-
pasan brazos del Atuel, se han realizado ción de diferentes recursos del monte y
pequeños embalses o tajamares para un manejo más sustentable de las pastu-
retener el agua. ras, requiere de un control permanente de
7. El estanteo-quincha es Al igual que en otros casos de arqui- los animales y, en caso de ser una familia
un sistema cons- tectura vernácula, tanto en el espacio pequeña con escasa mano de obra, puede
tructivo en tierra, doméstico como peridoméstico observa- ocasionar la pérdida de los caprinos.
de la familia de los mos variaciones en las tradiciones cons- Tanto la casa como el espacio que la rodea
entramados, que se tructivas, los cuales en primera instancia son ámbitos de dominio de la mujer. El
caracteriza por tener pretenden utilizar los recursos de la mantenimiento de la vivienda suele estar
un entramado de ma- región, debido a las presiones tecnológi- a su cargo, así como el de los corrales y
dera rústica montada cas modernas generadas por la sociedad aguadas (si hubiere). Por el contrario, el
sobre horcones, y las mayor (Rotondaro y Rabey, 1988). monte, o área donde se realiza el pastoreo
sujeciones de listones Finalmente, el espacio de pastoreo o de los animales, así como las actividades
horizontales a los pi- monte es el tercer espacio que compone de recolección y caza, es un espacio pro-
lares. Una vez armada el puesto, de vital importancia para la piamente masculino, aunque hay excep-
la estructura principal supervivencia de las familias. Este espa- ciones de mujeres que tienen a su cargo
se realiza un embarre cio, no solo provee diferentes recursos estos trabajos.
con mezcla de tierra, (frutos, raíces, maderas, ramas, hojas, De este modo, los espacios –domésti-
agua y fibras vegetales agua) para la realización de infusiones, co, peridoméstico y de pastoreo– que
(Flores, 1994). En este remedios caseros, tinturas naturales, conforman el puesto nos dicen mucho de
caso las fibras vege- combustión y/o consumo de anima- la cotidianidad de quienes lo habitan pero
tales son de especies les, sino también ofrece fauna silvestre también sobre el modo en que piensan
vegetales llamadas (tales como liebres, piches, ñandúes, y organizan su mundo y las limitaciones
comúnmente pichana, jabalíes, entre otros), que posibilitan a que poseen ante procesos estructurales
jarilla y solupe. los crianceros la realización de la caza que los afectan.

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Espacio de transición: la enramada cubiertas del puesto, debido a la multipli- Fotografías 3 y 4
Los espacios arquitectónicos no son solo cidad de actividades que se realizan allí. Enramada adosada a la
recintos habitables sino también elementos Es en este espacio donde se realizan los vivienda (izq.) y enramada
cargados de múltiples significaciones. Las primeros intercambios sociales cuando se aislada (der.)
personas construyen su entorno a través recibe una visita, familiares o los espera- Fuente: registros de las
de prácticas cotidianas. En consecuen- dos mercachifles8. El lugar suele contar autoras, 2018.
cia, el producto no es neutral o pasivo, con sillas y mesa a la espera del inicio del
sino por el contrario, activo y dinámico, mate, práctica social muy difundida en
y por lo tanto generador de significado la provincia y en el sur del continente.
(Zarankin, 1998). Asimismo, es el espacio de encuentro
Coincidimos con Bárbara Göbel (2002), (ver Fotografía 5), el sitio de reunio-
en que las casas constituyen “almacenes nes, juegos típicos y bailes en el caso
materiales de prácticas culturales pasadas” de cumpleaños o celebraciones anuales,
(p. 70). La enramada o ramada es un ejem- momentos en que las familias numerosas
plo de cómo algunas prácticas se conser- de la zona ven propicia la ocasión para
van en el tiempo más allá de la influencia reencontrarse.
de posibles modas tipológicas impostadas. Muchas tareas domésticas también son
La enramada fue advertida en estudios de realizadas en este espacio de transición.
Robert Lehmann-Nitsche en la caracteri- El teñido de lanas y el tejido en telar son
zación de la vivienda gaucha de siglo XIX actividades que las mujeres del puesto
y en los de Francisco Aparicio al describir llevan a cabo en la enramada, donde
la vivienda natural de Córdoba de inicios confeccionan prendas, mantas y matras
de siglo XX (Coluccio, 1981; Aparicio, para uso familiar o venta extra predial.
1931). Otros muchos autores han estudia- Los hombres aportan además el trabajo
do este elemento, cuya presencia es muy en soga para el manejo del ganado (rien-
difundida en la vivienda vernácula de La das, sogas y cuerdas para enlazar), que
Pampa y de otras provincias argentinas dejan colgadas secándose en este sitio.
como Mendoza y Jujuy (Esteves, 2013; También utilizan este espacio para prepa-
Tomasi, 2013). rar ungüentos y medicinas regionales con
En el caso de los puestos de La Puntilla, hierbas del lugar (para uso doméstico o
es en la enramada donde transcurre la del ganado), que son recolectadas en el
vida diaria (Poduje, 2000). Como se dijo, espacio de pastoreo y posteriormente
es un espacio semicubierto o semiabierto puestas a secar colgadas de las envolven-
cuya estructura está conformada por tes de la enramada. En algunos casos la
horcones y vigas de troncos de madera cocina exterior y el fogón se encuentran
local sin aserrar (jarilla, chañar, cal- próximos a la galería. 8. Se llama comúnmente
dén), cubierta por ramas. Al igual que En la mayoría de los casos los dispositi- mercachifles a los
el resto de la tipología, algunos puestos vos para el uso del agua también se en- vendedores ambulan-
han incorporado para su construcción cuentran ubicados dentro de este recinto. tes que recorren los
materiales industrializados como chapa, Es el caso de los tanques para abasteci- puestos ofreciendo
lonas de polietileno, postes extraloca- miento y posterior distribución del agua bienes de consumo,
les y caños petroleros, entre otros (ver potable que los municipios les proveen, y y, eventualmente,
Fotografías 3 y 4). de los baldes utilizados para la recolección comprando parte
La enramada generalmente tiene igual o de agua de lluvia ocasional. Es así como de la producción
mayor superficie que las áreas comunes muchas tareas de lavado y limpieza se (Comerci, 2015).

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generación de formas de organización
espacial locales, que expresan formas de
adaptación a un ambiente sin presencia
hídrica permanente. Las familias ribe-
reñas han generado nuevas estrategias
de reproducción social, usos y apro-
piaciones del espacio. Como resultado
de más de setenta años con ausencia de
un caudal constante en el Atuel y sus
brazos, los puestos se han relocalizado en
busca de agua dulce y/o mejores pastu-
ras, en muchos casos, con la ocupación
de cauces secos en períodos de ausencia
de caudal. Asimismo, se han realizado
nuevos pozos de agua y bebederos en
plenos cauces para el abastecimiento de
agua, antes obtenida del río.
Entre los principales obstáculos iden-
Fotografía 5 realizan allí, incluso en ocasiones también tificados en el campo se menciona la
Enramada como espacio de de higiene personal. mayor profundidad de la napa freática e
encuentro. Diversas labores propias de las prácticas incremento de la salinidad y la necesidad
Fuente: registro de las económicas de los puesteros también se buscar nuevas fuentes de abastecimien-
autoras, 2008. realizan allí. Los animales obtenidos de to del agua extralocales (municipal y
la caza menor en el monte abierto, e in- privada) para el consumo doméstico.
cluso ejemplares de las majadas propias, Además, las familias deben realizar
son faenados y posteriormente colga- grandes restricciones en el consumo de
dos de la cubierta de la enramada para agua para no desabastecerse (para beber,
despostar o secar junto con sus cueros. bañarse y asear la casa). Las viviendas y
Es una práctica generalizada la de sujetar corrales, asimismo sufren en momentos
de sus envolventes todo tipo de artículo de crecidas, inundaciones y procesos de
o herramienta susceptible de ser usada deterioro por salinización de los muros.
para las prácticas de producción diaria, Esa carencia de agua o su salinización
destacándose entre ellos sogas, baldes, les impide realizar huertas familiares o
recados, rollos de alambre y latas (ver plantaciones de frutales o cortinas de ár-
Fotografías 6 y 7). boles para frenar el viento; practicar una
Las herramientas de trabajo de mayores agricultura forrajera de complemento a la
dimensiones también suelen estar ubica- ganadería y los obliga –en tiempos de au-
das en el piso de la enramada o próximos sencia de río– a disminuir la cantidad de
a esta. Además, suelen poseer reservas ganado por la salinidad del agua o bien,
de alimento balanceado y fardo al reparo por falta de pasturas; y –en tiempos de
del sol y del viento en estos sitios. crecidas–, a relocalizar las majadas por-
Observamos así que no se puede des- que los animales se empastan, se pierden
vincular el uso económico del espacio y se limita la capacidad de receptividad
de su control social y simbólico (Göbel, ganadera por la formación de pequeños
2002). Por medio del trabajo de campo bañados estancados, sin drenaje. Otro
identificamos que este espacio alberga un proceso identificado, en ciclos de ausen-
sinnúmero de prácticas domésticas, eco- cia de caudal es la invasión de especies
nómicas y sociales, razón por la que se lo exóticas, tales como los tamariscos, que
puede considerar un testimonio tangible cubren los cauces y las zonas de humeda-
de la identidad cultural de los puesteros les y reducen la capacidad de absorción
de La Puntilla. del suelo.
En este marco, la vivienda campesina no
solo debe analizarse desde su morfolo-
Últimas consideraciones gía o estructura sino también desde su
imbricación con aspectos de la realidad
Este espacio de borde que representa social de las personas que la habitan
La Puntilla se encuentra subordinado a (Tomasi, 2011), así como también en el
la dinámica del manejo de aguas, pero contexto socioespacial en el que se des-
asimismo presenta intersticios para la envuelven los sujetos. La expansión de la

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frontera ganadera, el negocio inmobilia-
rio, la actividad turística y el impulso hi-
drocarburífero en el oeste de la provincia
de La Pampa han motivado una mayor
interacción entre los puesteros y otros
actores sociales, especialmente a raíz de
la puja por la territorialidad (Comerci,
2011). Esta situación ha motivado cam-
bios en la arquitectura doméstica de la
zona, destacando entre ellos, el reempla-
zo de sistemas constructivos tradiciona-
les, como la quincha, por materiales y
tecnologías que el discurso arquitectóni-
co asocia con mayores posibilidades de
progreso y estatus social. Consideramos
estos procesos como una estrategia de
los puesteros para incorporarse a una
nueva realidad aun cuando esta situación
sea real o ficticia (Tomasi, 2006). Los
puestos, y la territorialidad campesina
generada, son testimonios de los cambios
y permanencias en las prácticas sociales
de quienes las habitan, expresándose en
su composición funcional y tecnológica.
La conformación espacial de los puestos
obedece a funciones productivas propias
del pastoreo y cría de animales. A pesar
de su localización rural aislada, podemos
observar la necesidad simbólica de los Los saberes de estos pueblos campesi- Fotografías 6 y 7
sujetos de establecer un espacio domésti- nos deben ser visibilizados puesto que Interior de enramada.
co, de uso privado para el núcleo fami- contienen en sí mismos la creatividad Fuente: registros de las
liar, y de configurar un espacio perido- y capacidad suficiente para continuar autoras, 2013.
méstico, donde desarrollar las actividades asegurando su persistencia productiva.
productivas, sociales y recreativas, que Asimismo, la caracterización de sus
sirva a su vez para antropizar las áreas espacios habitables y la identificación de
próximas a la unidad arquitectónica, sus significados y valoraciones pretende
diferenciándolas del campo abierto. realizar un aporte teórico para posibles
La adaptación de la arquitectura domés- planificaciones estatales en el sector,
tica a las costumbres, formas de vida y de siendo que su estudio procura aportar al
producción, así como también la orga- conocimiento de la identidad cultural del
nización espacial, la relación entre sí de sitio y de las formas de organización del
cada una de las habitaciones y de los edi- territorio, evidenciando la dialéctica en-
ficios dentro del conjunto, han dado co- tre naturaleza y cultura (Esteves, 2013).
herencia a la arquitectura de cada pueblo Problemáticas complejas que, sin dudas,
(Viñuales, 2005). El estudio de la vivien- requieren junto a una activa intervención
da vernácula aporta al conocimiento de pública, de miradas holísticas, interdis-
las estrategias de vida de los puesteros/ras ciplinarias y que recuperen los saberes
y sus métodos de adaptación y resiliencia populares para mejorar las condiciones
ante los conflictos económico-territoria- de vida de estos grupos y posibilitar la
les que experimentan a diario. En una lo- persistencia campesina en condiciones
calización de características semiáridas y dignas en estos espacios
ubicación dispersa, la enramada aparece
como un elemento de interacción entre
la privacidad de la vivienda y espacio
exterior. Es un ambiente con funciones Agradecimientos
sociales, utilitarias y de protección, que Agradecemos a las familias de La
representa la multiplicidad funcional de Puntilla que aportaron información
la unidad doméstica campesina de mane- imprescindible para el desarrollo de esta
ra acertada. investigación.

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