Está en la página 1de 12
INTRODUCCION FILOSOFIAS ECOFEMINISTAS: UNA MIRADA GENERAL Karen J. Warren 1 movimienco feminisca y el movimiento eenlogise ban eobrado ‘epecial imporeancia en lar tise décadas™. Muchos pensadoes [minis argumentan que loc abjetivs dees das movimiento se spoyan mucuamentey, que eencialmente, ambos buscan desarllar esspeczivasypricicas globules que no estén fundadas en sistemas de ‘Sominacién, Una de as primers feminists en sage se ides fue Rosemary Radford Ruether quien, en 1975 ecribi ens libro New WomeniNew Earth (Nueva MujtiNueva Tera} , Las mujeres deben darse cuenta de que no podéin llevar a cabo 1 liberseién at encontrarin soluciones a lz crisis ecolégica ‘mientras que a sociedad coating Fundando sus modelos de = lacién en sistemas de dominaciin. Las demandas del movi- ‘min de la mujer lar del movimiento ecolégico eben uniz- ‘se para asl poder affontar una feforma radical de las relaciones bisias vocloeconémicas y de loe valotes subyacentes de ext ‘sociedad moder eindustil](p. 204) Posterioesexcrios feminist de militantes por lor derechos de ls animales y de ors ecofeministar han continuado apayando ls idea bésiea de Rusther quien afrma Ia existencia de importantes 1, Ga pede nos id ead eda easjoein ane sioantne pind x APA aera 199%, ppl08-116 ye Zimerman 1995, p238267. conexionss ene el feminisma y el ecologismo, y considera que eta ‘SRomacion ex esencil para el eiunfo de ambos movimientos "Cuil son algunas de ests coneionesexstentes ence el femi- into y el ecologismo a las que algunas pensadoras han prestado {Tene {Climo ha influido el reconocimiento de estas conexiones rin perspectivasfilorfias dl feminism y en temies del co- Togo? inex iacpduceén intento context a ets cuestions en tes aor Dame, Hdentifico algunas de as conexones ents la domina- pe de a jer y la dominacién de a naturalea que ban sido suge- fide en la Terai flasicn dl ecofeminismo. En segundo liga {ensieo una sede de posciones floséfiss que han surgido dentro {Ll ecoeminismo, parccularmente en el drea de cca meicambien-_ © eft gue rovern un enarco erica paral entendimienso dels cone- SoS cae fein y ol eclogsmo. Finalmente, supe la eouin Glostifien que el surgimiemo de em lteratira dene, 00 Tian d minim y be floola medioanbien, sino eambien ‘ana lost wading Aunque mi intencion no a sido la de ex {irr safome echaufivo,epero que esa mirada general marque Ios ponor mis elrancesy asic os ein gad con el po J ahead de poscons Blois dl feminism colic. Carecterizacién del ecofeminismo ‘De i misma manera que na hay un s6lo do de posturafeminia, ‘ampoco hay un slo evofeminismo ni-una.Gnica Mosofia feminism. fetinsmo ccldgicor es el nombre que eecbe la vaiedad de per Ponts que se ocupan de extudiat ls cnexiones entre a minacign de le mujer (y otto opsimidos)y la dominacién. de Ia ‘ural. sFlsofaecoferainizen e nombre que recibe la dversi- {ale exadioe losbficos que examinan las diferentes conexiones {nuts el feminismo y el medio ambience. Esmas diferentes pewpectiras ‘isan no slo diferentes poreuas feminisas (iber, wadiconal, ‘Gast, socials, ec) sino que también rfijan compren- ‘ones diversas dc la condicin y dela soluci dels premianespro- ‘lemas medioambientaes (ver WARREN, 1987). De modo que, toda- ag ‘la es una cust abet decidir cudnas, cudles 0 con qu fandae tmentos las postuaseugeridas son adecuadas expresionesecofeminis: tar. Qué posiiin evofeminita uno considere genuina depende mayo- Sitarlamente de cémo tno conceptie ambos términos: Feminism y feminism eoldgico. ‘Sin embargo, todas las pensadoas ecofeministas sostienen la coping de que exsten vinculos ence la doiminacin dela mujer (y ‘tres oprimidos)y Ia dominacién dela maturalera, y que la falta de feconocimiento de eas conexiones generan concepeiones inade- Cuadas del femiaismno, el ccologismo la Rlosofla medioambiena ‘Cad es I esencia de estas conerionesy cules son la desexipeiones precias de las caacteriticar y del otigen de esas dominaciones as, de la mujer y la nauraleza, es lo que mayoricariamente de- Baten la ofa ecofeminseas, conexiones entre el feminismo yelmedioambiente = lay al menos ocho tipos de conexiones qu las feminisasecoldg- cas han seas como importantes paral comprensién de a eax én entre el feminizmo y el medio ambiente, Eas ocho categoras tno deben entenderse como excluyentesni en competencia, porque Ae hecho, muchas dela aportaciones expresdas acer de un tipo ‘de conexion (p, e. conceptual teria), 2 menudo dependen de los ‘onocimientosrecogidos en otras conexiones (.e. histérica y em- pities). Mi intencién aqui no es la de hacer una valoracién de Tos {studios hechos sobre etas conexiones sno simplemente presentar, pata su consideraign, los diferentes elementos que forman el cus {fo general del feminismo y el medio ambient. 1. Hire ycauzal Una de estas conexionts es a cone his- térica, Se define también como conecién causal Cuando se ua datos histricos para genecarteorias sobre el orgen de las domsina- cones gemelas de Ia mujer y de la naturaleza/ De hecho, algunas {eministas han descrit el ecofeminismo dnicamente en érmincs de cata referencias histricas y causales: wel ecofeminismo es un dex 3 sola insedenao dl peotmient fein que ene a ‘eel und dl medi abla come ua sad pete ible de la cultura patiareals(SALLEH, 1986, p. 138, nl). (Culles toa gina de ea eres bite y tale? Alpina coemininar ( -SPETA 1990, RSTER, 1988) secon x smerions tray clr rors ode esos deal in ee Ra ene er ciety at fev bos Orsi fot cb niet pela emionde tant ene 4500 AC (Lata, 1991. Rane Ese ect a gpocs {terior «er imadone come sina pain rm gai aoa y tmatlines, Ou cofennises (GH, 1978; PLOMOOD, 1951; Hurt 1973) anand pape que han jogo aise anaes rear Ge eee a ds eu ol pono) dls les cla pen Onn cea Sj Mencia, 196, 1989; Syn 198) cinco lor cat Bio lle ycentcwocdos ura elie tics Rae cu Ue ae eee eee Eeetends dl coerce feo att yk ebortncis dea ce {Ce oc ban explo en conesincs Rad y cle? econdines Hota gue perideron a perkindccn ti tens de dominaci6n gemclo? Par conta 4s eueons at fia conkininash anlinds as conoretalncione us dan y nano a dominant dela eer ane 2, Compal Muchas eoleminiseasyfléofe ecoigico fei risa (p 6 CHENEY, 1987; GRAY, 19815 GRIFIN, 1978, KING, 1981, 1983, 1989s MERCHANT, 1980, 1990; PLntWooD, 1986, 1991; RUETHER, 1975; SaLLeH, 1984; WARREN, 1987, 198, 1990 {incido en exe volumen/han argumentado que en ‘slim ine tanda, or vinculos histcosy eautales entre la dominacién de la mujer y de [a naturales se basan en erucorasconceprales de dominio yea a forma en la qu l mer y la nacre han ido concepadas,paricularmente en a erdicién intelectual oceden- tl. Sehan sugeido custo tpos de vineloe conceptual. Un ei se In base concepral de lax dominaciones gem las dela mujer y dela naturales en dualinnar de alr 0 se, pas “ dlsyuncivs en los que ls diyuncions se consideran anagicas (en've de complementaria)yexclusivas (ner de incl) en ferrules de alr, 0 ea qe ls pesepconcs de dvesidad cn Gnganzadas de acuerdo a una mesforsepactl de atb-aajo que atibuyen a aquello que ext eattbae mayor valor (ease prego) gi Dt mts ence aes cree is Frere a eee eee Se eee Tis ig a aera seek pe Scere mui nia mae om er ‘Ie cultura; lo humano (en su sentido masculine) y el hombre-Eo- SS ee Sa eae eS Te See le es Soe eran ees eS a abi es an ae eee ee een heey ie alg tae ple eet piper ened aerin es lh eee aa ae oe Re ese me eeee a age are gm aah i Seen Soe rey meee ie Ber abet fadt p minenchees ee ee eae a ae ic een ena emee SSE an me meres grimy reerln Sees ee reer eae nee eee eee eee Sree ere ane 15 rw ws weer ee See 88ST Py mince ‘como ls marcos concepmusles opresvesy pararales (los com- portamientor lor que dan pc) sancionan, mantienen y pespetian las _Moninacones gemela dela mujer y de la naturaleza Fotances, una iegorane ra al enn, ela 7ta meio Sia eer y eon a mans en ge es Epes oper y pares eter y prices qeamoes shai yalantuniea. ‘Uc coisa aba conceal en lat dfn del ier we prclarnets ot foci cocina den Fem lence: CHENEY 7, ha 98 CAL. Err Laan 1985; SALLE, 1984), 4e loa gues xprenae ia fein (ae alanine Keane Cae) TBs tegen pore an alas jer con lac ala Tete de foamy difrente alos hombres Ea direc mx. tii ua concen de mujer que difere def de los hombres ur eo conceptialments enaizada en eparadipmas Glgamente fcnndos baci le masculine modelos oceldentales de elaonare Sin el mando racine anally antes, me comenmens tovccdas como rocones entice y ajar (SALLEH, 1988, $30), Osea busta en diss de valor gu scparan y saber Talo gue hinders bn sle Ucn cou d get men te. Boos sores ecloplcolgicoeproveen un vical concep en IRredidaen que fman pare de as enact eseegiasdifren- teiqued hombre yl mer tienen de conceal (se difeen- 1 Smarde conse), y de tlaconare con I naialers, Por tino de lo sbjevo deleinno ya ca meioabiecal bee earl enguajs tes y prc que tenga en cen- Sie gence i no promeren soe hii que exploen a STopeyalnnsturks cs clas Goin enifedar cone er marlin rnaee ‘studios inspira en algunas de las conexiones histri- cas mencionads con anterioridad (en punto 1. Sia vinclo ‘Soap ented feminkamo ye medio anbiene en as mexfons y lel ey cn cameras re donnie
  • (PLUMWOOD, 1991), {Une eplstemologia ecologista feminist tiene que trata estos a= pester poitcos de Ia dicocomla humanidad/naruralera ‘Outs ecofeministas recuten ala teorla cea de HORKHEIMER, (4974), ADORNO (1973, 1974), BaLBUS, (1982) y a la Escuela de Frankfur, porque ssu epistemology andliss substanivo apuntan tuna convergencla de los intereses feminists y ecologists, antc- ‘undone al ecient ecferinismos (SALLEH, 1988, p. 131). Pare > tas feminists, la teria erica oftce una cia de ala naturales ‘ersus I cultura yuna estractaraepistemoligica para anal Ia Telacgn ene la dominacién dela mujer la dominacon dels nate falea (vers SALLEH, 1988, MilLs, 1987, 1991) 5. Simba, Muchas ecofeminists (ver peje Hey 15 BELL, 1988; MURPHY, 1990; SALLEH, 1988) explora a soca y ‘evaluacion simbslica de la mujer’ de a naruraleza en cle, ate fata, a eligi y Ia eologla, Haciendo uso dela literatures fr (eome la de ATWOOD, 1985; BAGBY, 1990; CORRIGAN y Home, 1589, 1990; DOUBIAGO, 1990; GEARIART, 1979; KOLODNY, 1975: LeGu, 1985, 1987, 1988, OuIvER, 1983; PIERCY, 1976: RICK, } 186; Sx, 1987; Zaviana, 1988) ea argimentado que as on | CEpcions pesarales dela nacraezay de la mujer han justifcado | SEReolecin y dominacién dab de la teray de ls mujeres que “ven en ellas (MURPHY, 1988, 1987). A menudo esta ide ba sido use “Be como base para desarollar estas itera ecfemininas (MURPHY, 1991), Ouas ecofeminirer exploran ol potencal del ecofeminisme pars crear lengua (p ), DALY, 1978; GRIFFIN, 1978), simbolos eel oro epttuales (ps. simbolos de Doss) hipdtesis(p «el Flipgesis de Gains), eologas (p. e- CHusT, 1990: Daly, 1978, ‘Gib, 1988, RUETHER, 1989; SPRETWAK, 1982, 19893; STARKAWK, 1985, 1990) y sociedad (las uropasfrinists sugesids por Geasstant, 1979; PIERCY, 1970), todos aemativos. ‘Ova ccofeminisas analzan lz conesiones simbilicas este el lengua seita ye nausea, os, los lenguses que subordinan ala fuer y a nacuraera no humana. Ese planes I cuestion des el Tenguafe genésico sexual de a expresién =Madre Tienes, come dice ‘Yrestt King. epotencialmente iberador 0 usa simple base para com fimuar oon ln suboedinacion de la mujer (KING, 1981, 12: ver sam= bign Griscom, 1981; ORINER, 1974; Rowcl, 1991). Se han esa blecide coneriones ence los lenguajesempleados pare describ as ‘jeres, ala naruraleca ya ls armas nucleats (ver: ADAMS, 1990; ‘Con, 1989, STRANGE, 1989). Por ejemplo, a menodo las mujeres on deriva con nombres de animales (ors, plats lors, linas polls, bora) y la naturale es a menudo desita en ezmins FEmenincsy sexual la natutlenae¢volada, conquistada, domida, secregs son penerados yu sno sal servicio de “ete dela encase conan ydestuyen bosque aligeney- mi ee ivan sas vey ve devechan las etl Se ha r= ‘Teo que el Jengusie que sfeminica a saturalea ¥ neural rules deserbe ejay pespenia Ix domsnaciomeinfriorasin a ee ous ue ens dominacines gad de ty dels rurale Glenda earn on ened a ido Bgurade) calguaimenteandlogas (ADAMS, 1990, p. 61) Por eanto, un de Tos objeios Feminist es desaro- Ter Ros taovay priccafeminize du no perpesien etenguse Tocaintemas de poder y dominacibn que stent calmer era Soya er attcaad ee pe Kee pogo nea ‘aver: WARREN, 1990, WARREN y CHENEY, 1991b). La conexién 4, Tenbiew, La dveidad de coneiones mencionadas ene fn ere cio ambiente (punt 1-6, mds arsib) han gene fen oc opus pons Elsi y eons eo. {rds es dees eae ein TEMAS P+ Se Biden en el Sea de fica medioumbien anime yadincin ete punt sobre ls conexione '22- saan de Phinda campo dea edca medioambienta Fe ides a ica medicambenalcotemporkicae- 16 a ee de ln ies Blea normatv contemporinen, Ai as poner iin consecuencalia (p -ln ccg0- Tae te neds), le taicin no consecuenciina 0 deon- eat et kanaiamo, Ia ca de derecho yl de ve) cambién incluye posuras que desafian las corrents tradicionales (p Fr éies feminittas, exiencalisas, marist, afrocéntrcs). As hismo, la erica medioambiental tambien contienerodas ext ea ‘Jone laconsccuencaita (pla ecoutitaia y la éricauilaia ‘delibeacién animal); la no consecuencinlista, que extiende las con- ‘Sideraiones ica radicionales alos animales y al medio ambiente (Gah ls dca de los derechos humanos adel iberaci6n animal y| I de a tesponsbildad por la tera); también las posiciones no teadicionales (pel ferinismo eclégio, la eologia socal a eeo- Togia profunda la ética de la tierra holistic leopoldina) Las dife- rebes ecofeminicas y fl6sofis onfeministas cuando analiza temas Imedicambienales emplean una o varias de estas poscione “for extension se puede decir que ene ecofeminismo no hay una ea fea flosiea, Debido a que el ecofeminismo es una posicin {eoddea muy recente Ja caractesticas de Ia éica eofeminisa ‘Sein a penassurgiendo, Entre lt nds nocables esti las pociones Te las feminists porta Uberacién animal (p.

    También podría gustarte