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Rechazo de demanda por enfermedad psiquiátrica de la trabajadora, porque no prueba

hostigación, persecución y desvalorización

4 julio 2013 por Ed. Microjuris.com Argentina Dejar un comentario

Despido2Partes: M. C. N. c/ QBE A.R.T. S.A. s/ Enfermedad Accidente

Tribunal: Cámara del Trabajo de Mendoza

Sala/Juzgado: VI

Fecha: 31-may-2013

Cita: MJ-JU-M-79557-AR | MJJ79557 | MJJ79557

Rechazo de la demanda por enfermedad psiquiátrica de la trabajadora, porque no ha probado la


presencia de conductas de hostigación, de persecución, de desvalorización de su condición laboral
por parte de sus superiores o compañeros de trabajo.

Sumario:

1.-Debe rechazarse la demanda deducida, pues si bien la actora atribuye sus patologías
psiquiátricas al trabajo y a las presiones y hostigamientos que recibía prestando servicios para su
empleador, no existen elementos de convicción idóneos y eficaces que permitan situarse frente a
lo que se denomina como estrés laboral , cuyos tipos pueden ser episódico y crónico , y cuyas
causas se relacionan a un ambiente laboral inadecuado, alteración de ritmos biológicos,
condiciones laborales inadecuadas, mal trato institucional.

2.-A fin de establecer la vinculación de causa a efecto entre el trabajo y la patología es necesario
practicar un juicio retrospectivo de probabilidad, que la doctrina nacional conoce como juicio de
idoneidad o cálculo de probabilidades en abstracto, procedimiento que consiste en determinar ex
post facto la posibilidad de un resultado en función de las condiciones precedentes, inquiriendo si
la acción (en este caso la labor cumplida) que se juzga, tenía idoneidad suficiente como para
producir normalmente ese evento, según el curso normal y ordinario de las cosas.

Fallo:

En la ciudad de Mendoza, a los treinta y un días del mes de mayo de dos mil trece, se reúnen en la
Sala de Acuerdos del Tribunal los Señores Jueces de la Excma. Cámara Sexta del Trabajo Dres.
ELIANA L. ESTEBAN, LAURA B. LORENTE y ORLANDO C. FARRUGGIA, con el objeto de dictar
sentencia definitiva en los autos Nº: 19.073, caratulados: “M. C. N. C/ QBE A.R.T. S.A. P/
Enfermedad Accidente”, de los que

RESULTA:

A fs. 26/30 se presenta C. N. M. por medio de representante legal e interpone formal demanda
ordinaria contra QBE A.R.T. S.A. por el reclamo de $27.839,32 o lo que en más o menos resulte de
la prueba a rendirse, con más sus intereses y costas.

Plantea la inconstitucionalidad del art.6 inc.2 y 46 de la ley 24.557.-


Relata que se desempeña para la firma “INDUSTRIAS ALIMENTICIAS MENDOCINAS S.A” desde
08/02/2001, cumpliendo tareas de administrativa en las oficinas que posee la empleadora en el
Departamento de Tupungato.

El horario de la actora es de lunes a sábados de 14 horas a 22 horas, bajo las órdenes del Sr. Raúl
Mazzeo (Jefe de Personal de la firma en el sector donde trabaja la actora).

Que ingresó en perfecto estado de salud, careciendo de cualquier patología que disminuyen su
capacidad laborativa, tanto física como psíquica.Que percibía un ingreso base mensual promedio
al momento de su primera manifestación invalidante de $1.196.

A partir del 2005 la actora comienza a sentir la insistente persecución y hostigamiento por parte
de sus compañeros de trabajo, los que en forma burlona colocaban “notas” (siempre irónica y
socarronamente) que no cumplía con su trabajo y que con su actitud recargaba a los demás
compañeros de oficina.

Que la imposibilidad de poder acceder a su computadora para realizar sus tareas, producía a la
actora el peor de los hostigamientos, las cuales son la ignorancia de su presencia y la ausencia de
dar tareas.

Las ofensas y agresiones motivaron que la actora se dirigiera a hablar con el Jefe de Personal de la
oficina donde trabajaba la actora, Sr. Mazzeo y posteriormente se dirige a hablar con el Sr. Daniel
Velásquez Jefe de Personal de Planta de ambos, quien le pide que no renuncie. No obstante jamás
se corrigió su situación.

En el año 2006 la situación se agravó, debiendo ser tratada por problemas de salud, indicándosele
reposo con diagnóstico de gastritis aguda. Como consecuencia de que la actora fue ignorada
completamente, se la trataba con una gran antipatía y un marcado aislamiento en su sección.

Todas estas conductas fueron denunciadas por la actora a sus superiores, de los que nunca tuvo
respuesta.

Que con el tiempo su situación empeora, iniciando una etapa de confusión y desorden, donde se
le indicaba una tarea y después otra. Que tenía como único fin ponerla en situación de ridícula.
Que también entre sus compañeros circuló una nota agraviante, injuriosa y mentirosa, donde se
ponía en tela de juicio sus calidades laborales y su honestidad intelectual.

Que en ese contexto se pone bajo tratamiento, del Dr. Carlos Guzzo, médico psiquiatra del
Hospital Pereyra.Quien luego de medicarla, induce que su patología tiene una clara vinculación
con el trabajo, y debe denunciar su situación a la ART.

Así se le extendió certificado médico, suscripto por el Dr. Oscar Walter Loggia, con diagnóstico
Stress Laboral, RVA Grado III que le implican una incapacidad del 25%.

Funda su derecho, practica liquidación y ofrece pruebas.-

A fs. 36/44 por medio de apoderado se presenta la demandada y contesta solicitando el rechazo
de la demanda, denuncia limitación de la cobertura; opone excepción de falta de acción, por
entender que la enfermedad no está cubierta por la L.R.T.
También plantea excepción de falta de legitimación sustancial pasiva, por considerar que está
eximido de responsabilidad, en atención a que las ART tienen como único objeto el otorgamiento
de las prestaciones que establece la ley y que ella determina.

Seguidamente contesta la demanda, negando todos los hechos invocados por la actora en forma
expresa y afirmando en cuanto a realidad de los hechos, que su parte cumplió en forma total y
acabada con todas las obligaciones que manda la ley 24.557.

Agregando que se anoticia de la supuesta dolencia del actor cuando esta solicita la intervención de
la Comisión Médica Nro.4, destacando que la psicopatología, depresión que la actora denuncia,
viene tratándola desde el 2005 y el examen físico realizado expresa “que la actora no presenta
ninguna de clase de alteración sensoperceptiva, contiene ideas depresivas, autorreferenciales, de
baja autoestima fóbica; que la afectividad se encuentra acorde con el relato…ansiedad…función
familiar coexistente…según dictamen CM del 21/02/2007.

De manera que se le diagnostica trastorno mixto de ansiedad y depresión, la cual es considerada


en forma correcta, por la comisión médica, una contingencia no amparada por la L.R.T.y por lo
tanto una enfermedad inculpable, no correspondiendo indicar prestaciones en especie.

Por ello, rechaza el certificado médico que adjudica un 25% de incapacidad de la actora por la
referida patología, agregando que las repercusiones a nivel físico de sus patologías psiquiátricas,
no tiene relación causal alguna con el trabajo.

Invoca también la doctrina de los actos propios, fundando su derecho, rechazando las
inconstitucionalidades planteadas y ofreciendo pruebas.-

A fs. 53/55 la actora contesta el traslado que confiere el art.47 del CPL.

A fs. 59 el Tribunal declara la competencia para entender en la presente causa.-

A fs. 64 se admiten las pruebas ofrecidas por las partes y se ordena la producción de las mismas.

A fs. 115/117 se presenta la pericia contable,

A fs. 132 impugna la pericia el demandado.

A fs. 172/175 obra pericial psiquiátrica.

A fs. 192/193 el perito contador contesta observaciones.

A fs. 198 se fija fecha para que tenga lugar la audiencia de vista de causa, la que se celebra como
lo informa el acta de fs.204, presentando a fs. 205/209 las partes sus alegatos por escrito,
quedando la causa en estado de resolver a fs. 211.-

CONSIDERANDO:

PRIMERA CUESTION: Existencia de la relación laboral.-

SEGUNDA CUESTION: Rubros reclamados.-

TERCERA CUESTION: Costas.-


A LA PRIMERA CUESTION EL DR. ORLANDO C. FARRUGGIA DIJO:

El actor denuncia la existencia de un contrato de trabajo que lo vinculó con la firma “INDUSTRIAS
ALIMENTICIAS MENDOCINAS S.A” para quien habría prestado servicios desde el 08/02/2001,
cumpliendo tareas de administrativa.

Tales extremos fácticos no fueron motivo de desconocimiento por parte de la accionada a través
de su responde y resultan por otra parte respaldados a través de la pericia contable rendida en la
causa (fs.115/117) y los recibos de remuneraciones que en copia obra a fs.5/23.

Atento a ello, las prescripciones de los arts.1 inc.b) y 3 de la L.R.T., conforme a la jurisprudencia
uniforme imperante, y habiéndose consentido la competencia del Tribunal, corresponde avocarse
a su tratamiento y dilucidación

ASI VOTO.-

Los doctores LAURA B. LORENTE Y ELIANA L. ESTEBAN dijeron que por sus fundamentos se
adhieren al voto que antecede.

A LA SEGUNDA CUESTION DR. ORLANDO C. FARRUGGIA DIJO:

Corresponde avocarse en la presente al examen de procedibilidad de la indemnización tarifada


prevista en la ley 24.557 que nace en cabeza de QBE ART S.A., ante la incapacidad laborativa que
denuncia padecer M., sirviendo de soporte fáctico de sus pretensiones indemnizatorias el
cumplimiento de tareas en un ambiente de trabajo teñido de presiones y hostigamientos por parte
de sus compañeros de trabajo y de sus superiores.

En efecto, alega que a partir del año 2005 comienza a sentir en forma insistente la persecución y
hostigamiento por parte de sus compañeros de trabajo, los cuales se burlaban de ella, y la trataba
en forma irónica y socarrona, lo que motivó que pusiera en conocimiento de sus superiores, pero
ellos nunca corrigieron su situación, que la situación se agrava en el año 2006, por lo que debió
someterse a tratamiento, donde se le diagnostica Stress Laboral con RVA Grado III, con
consecuencias de incapacidad laboral.

La accionada, basándose en la calificación de una “enfermedad inculpable”, opone defensa de


falta de acción al contestar demanda, rechazando y negando que la actora haya sido objeto de
malos tratos por parte de sus compañeros de trabajo y sus superiores, consecuentemente que el
ámbito laboral tenga habilidad para ocasionarle las dolencias siquiátricas que denuncia padecer.

De manera que, reafirma en su defensa y califica a tales dolencias como “inculpable” por no
guardar un nexo de causalidad adecuada con las funciones desempeñadas por aquélla y en el
ambiente de trabajo.Con el fin de obtener el actora el reconocimiento del derecho a la reparación
de la incapacidad que reputa adquirida en el trabajo, plantea la inconstitucionalidad de varias
normas de la Ley 24.557, adquiriendo relevancia la que involucra el art. 6 inc.2 L.R.T.

El control de constitucionalidad de la normativa reprochada sólo puede hacerse en el caso


concreto y no en abstracto. En tal sentido, nuestro Superior Tribunal Pcial. ha fijado lineamientos
muy precisos en relación a los alcances de esta facultad de los jueces de grado al ejercer el control
de constitucionalidad de una norma cuestionada expuestos en el Expte. nº68.767 “Pride
Internaticonal S.A. en J. 7871:”Accordino G. p/sí y p/su hijo menor c/Pride Internacional S.A. c/INC.
CAS; L.S. 300-48, originarios de la 6º Cam.Tr., a los que me remito en honor a la brevedad.

Ajustándome a tales parámetros que fijan los límites en el control jurisdiccional de las normas
cuestionadas de inconstitucionales, paso a continuación a abordar el caso concreto.

A partir de las posiciones asumidas por las partes en el proceso y las probanzas sustanciadas se
pueden construir las siguientes micro-conclusiones:

1) La existencia de un hecho cierto e incuestionable como es la exis tencia de las dolencias


siquiátricas que padece la actora y que fueron evaluadas por médicos psiquiatras.Que diagnostica
según se desprende del informe pericial de fs.172/175 como Trastorno Adapativo Crónico
Moderado Mixto con Ansiedad y Depresión (DSM IV).

2)Que las citadas afecciones generan una secuela incapacitante en la actora del 20% por su
reacción vivencial anormal neurótica con manifestaciones depresivas Grado III,

Si bien la actora en su demanda atribuye estas patologías al trabajo y a las presiones y


hostigamientos, que recibía prestando servicios para su empleador, el aporte probatorio
incorporado a este proceso, me permite afirmar que no existen elementos de convicción idóneos y
eficaces que permitan situarse frente a lo que se denomina como “estrés laboral”, cuyos tipos
pueden ser “episódico” y “crónico”, y cuyas causas se relacionan a un ambiente laboral
inadecuado, alteración de ritmos biológicos, condiciones laborales inadecuadas, mal trato
institucional, etc. La patología padecida por la actora y la somatización que repercute en la misma,
debe aparecer como relacionada a las situaciones laborales traumáticas, que M. denuncia como
agente agresor y descalificador de su capacidad laboral, que concreta a través del
comportamiento de sus compañeros de trabajo y superiores.

En relación a las características de este ambiente laboral denunciado como “hostil y persecutorio”
se sustancia como única probanza la declaración testimonial de QUIROGA ALBA BEATRIZ
receptada por el Tribunal en la audiencia de vista de causa de que da cuenta el acta de fs. 204, la
que valorada objetivamente, no traduce un aporte idóneo para completar el panorama probatorio
disponible en autos y llegar a establecer la necesaria conexidad entre las tareas cumplidas y las
afecciones descriptas.

En efecto, en primer término la actora que cumplía tareas de 14 a 22 horas, en tanto que la testigo
dice que una de las situaciones que incomodaba a la actora era que su compañera se acomodaban
en los horarios y a ella siempre la mandaban de noche, afirmación esta que se contradice con los
propios dichos de la actora, que trabajaba en el turno tarde.Por otra parte la actora denuncia que
sus inconvenientes referidos a persecución y hostigamiento comienza a partir del año 2005, y se
agravan en el 2006 y la testigo que estamos examinando a fs.204 vta. si bien refiere no recordar en
que época trabajó para la empleadora cree que fue entre el 2001 y 2003, es decir fechas distintas
a las afirmadas por la actora en su súplica.

Ello me lleva a concluir que esta única prueba, no nos permite advertir la presencia de los
comportamientos descalificantes y persecutorios que denuncia la actora. No se ha probado la
presencia de conductas de hostigación, de persecución, de desvalorización de su condición laboral
por parte de sus superiores o compañeros de trabajo.
Del examen precedentemente no se rescatan elementos que definan la presencia de un nexo
causal suficiente y objetivamente claro entre las dolencias descriptas y el trabajo, no hay
evidencias eficientes sobre las que se pueda construir la presencia de aquellos factores que deben
concurrir para poder jurídicamente calificar una enfermedad como “profesional”.

No existen probanzas fehacientes ni idóneas sobre las que se pueda confirmar la existencia de los
factores que determinan la naturaleza profesional de las dolencias denunciadas por la actora.

El planteo defensivo de la demandada apunta precisamente a sostener la inexistencia de un nexo


causal adecuado entre el factor laboral y la enfermedad padecida por la actora.

La debida relación causal entre la contingencia y el menoscabo de derechos patrimoniales o


extrapatrimoniales sufridos por la víctima, debe cumplirse como un recaudo necesario para la
procedencia de la acción resarcitoria cualquiera sea su fundamento normativo. Resultando que la
regla general nos indica que la carga de la prueba del nexo causal incumbe a quien afirma la
existencia del derecho que se pretende hacer valer.

Es válido colegir que a fin de establecer la vinculación de causa a efecto entre el trabajo y la
patología es necesario practicar un juicio retrospectivo de probabilidad, que la doctrina nacional
conoce como juicio de idoneidad o cálculo de probabilidades en abstracto.Este procedimiento
consiste en determinar ex post facto la posibilidad de un resultado en función de las condiciones
precedentes, inquiriendo si la acción (en este caso la labor cumplida) que se juzga, tenía idoneidad
suficiente como para producir normalmente ese evento, según el curso normal y ordinario de las
cosas.

Para poder determinar si las patologías denunciadas por la denunciante caen en el ámbito de
cobertura establecido por la Ley de Riesgos de Trabajo, es necesario indagar en la ejecución
concreta de débito laboral cumplido. Ello con la finalidad de poder comprobar la existencia o no
del nexo funcional en el que se sitúa, a partir de una red de causalidad suficientemente como para
calificarlos como enfermedad profesional. Es precisamente esta labor procesal que estaba a cargo
de la accionante la que se reputa deficientemente cumplimentada en esta causa, lo que conlleva
de manera inexorable a descalificar la procedencia de la pretensión indemnizatoria objeto de la
misma.

ASI VOTO.-

Los doctores LAURA B. LORENTE Y ELIANA L. ESTEBAN dijeron que por sus fundamentos se
adhieren al voto que antecede.

A LA TERCERA CUESTION EL DR. ORLANDO C. FARRUGGIA dijo:

Dadas las características particulares y naturaleza especial de las cuestiones ventiladas en este
proceso, estrechamente ligadas a cuestiones fácticas sujetas en su calificación al arbitrio y
valoración del juzgador, con las dificultades probatorias del caso, interpreto que existió
razonabilidad por parte de la accionante al deducir su pretensión en la creencia que obraba
ajustada a derecho. En función de ello condeno las costas en el orden causado, apoyándome en las
facultades atribuidas en los arts. 31 C.P.L. y 36 C.P.C.-
En relación a los gastos causídicos, los mismos deberán ser soportados por ambos litigantes en
proporciones iguales, al igual que los honorarios de los peritos intervinientes por tratarse de
prueba de ofrecimiento y beneficio común.

ASI VOTO.

Los doctores LAURA B. LORENTE Y ELIANA L.ESTEBAN dijeron que por sus fundamentos se
adhieren al voto que antecede.

Con lo que se dio por terminado el acto, pasándose a dictar la sentencia que a continuación se
inserta.

MENDOZA, 31 de Mayo de 2.013.

VISTOS: El acuerdo arribado, el Tribunal

RESUELVE:

I) Rechazar la demanda incoada por C. N. M. contra QBE A.R.T. S.A. por la suma de pesos
VEINTISIETEMIL OCHOSCIENTOS TREINTA Y NUEVE CON 32/100 ($27.839,32) por los fundamentos
vertidos y conforme lo resuelto en el tratamiento de la segunda cuestión.-

II) Las costas se condenan en el orden causado de conformidad a lo resuelto en la TERCERA


CUESTIÓN.

III) Practíquese liquidación mediante la Secretaría del Tribunal.

IV) Diferir la regulación de honorarios y determinación de los gastos causídicos para la


oportunidad de practicarse la liquidación respectiva.

COPIESE. REGISTRESE Y NOTIFIQUESE.

Orlando C. Farruggia

Eliana L. Esteban

Laura B. Lorente

Constancia: Se hace saber a las partes que el Dr. Orlando C. Farruggia hizo uso de licencia los días
15 al 23 de Abril; y los días 10 al 17 de Mayo; la Dra. Eliana L. Esteban los días 25 y 26 de Abril; y la
Dra. Laura B. Lorente hizo uso de licencia los días 6, 7, 8, 14 y 20 de Mayo de 2013. Secretaria, 31
de Mayo de 2013.-

Esc. Act. Ana María Mathus – Secretaria

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