Está en la página 1de 2

KRAMER CONTRA KRAMER, de Robert Benton.

Sinopsis: El día que un publicitario -Hoffman- consigue la mejor cuenta de


la agencia, su mujer -Streep- le comunica que le abandona, a él y a su hijo
de 7 años. Comienza así una dura etapa en la que tendrá que ejercer de
padre soltero de un niño que echa de menos a su madre y, al mismo
tiempo, dedicar toda su energía en el trabajo. Cuando tras un tiempo
parece que la relación con su hijo parece ir mejorando, la madre aparece
para pedir la custodia del pequeño. Vaya por delante que se trata de un
correcto drama de gran éxito de taquilla con excelentes interpretaciones,
por no decir que es un telefilm de lujo que astutamente retrata un problema
muy común en la sociedad moderna.

Escena

Llaman a la puerta. Ella está sentada con la maleta de viaje hecha al lado.

ÉL.- (En off) Joana, aquí estoy.

Va a abrir.

ÉL.- (Entra, y la besa) Hola, se me olvidaron las llaves. Tengo que llamar a
la oficina antes de que cierren. Joana, no sabes el marido que tienes. Traigo
un notición. (Tararea descuelga el teléfono)

ELLA.- Ted…

ÉL.- Un segundo, ahora hablamos.(Sigue tarareando mientras marca el


teléfono) ¿Te acuerdas de Jack Edwards, el de contabilidad? Ayer por la
mañana se suicidó. Sí, hola. Soy Kramer. Mañana por la mañana necesito
las fotos que tiene el retocador.

ELLA.- Te voy a dejar.

ÉL.- Joana, por favor, no oigo. ¿Qué…? Sí, desde luego. Muchas gracias.
Hasta mañana. (Cuelga el teléfono) ¿Has cenado ya?

ELLA.- Ted, me voy de casa. Ted, mis llaves, aquí están mis llaves. Mi
tarjeta de American Express. Mi libro de cheques. He sacado 2000 dólares
de la cuenta corriente porque es lo que yo tenía cuando nos casamos.

ÉL.- ¿Qué es esto, una broma?

ELLA.- Los resguardos del tinte y la lavandería. En los dos sitios puedes
recoger la ropa el sábado. El sábado, tú tendrás que ir a buscarla.

ÉL.- Joana, ¿puedes explicarme lo que pasa?

ELLA.- He pagado el alquiler, he pagado la luz y he pagado el teléfono.


ÉL.- Vaya un momento que eliges para… (Ella toma su bolso y la maleta)
Perdona, siento haber llegado tarde. Pero me estaba ganando la vida,
¿sabes? Vamos, no seas tonta. ¿Lo dejamos ya?

ELLA.- No queda nada pendiente. (Se dirige a la puerta para marchar)

ÉL.- Eh, eh, ¿qué haces? ¿A dónde vas? (Le sujeta la maleta y se la quita) A
ver, ¿qué es lo que hecho? Vamos dímelo. (Ella sale al pasillo y llama al
ascensor) Anda por favor, ¿dime que es lo que hecho de malo?

ELLA.- No es por ti, no es por ti. Es por mí. Es culpa mía. Te equivocaste de
persona al casarte. No lo resisto.

ÉL.- Está bien, está bien. Vamos adentro.

ELLA.- Déjame.

ÉL.- Joana, por favor, no seas… Perdona.

ELLA.- No, no me hagas entrar ahí, por favor. Por favor, no me hagas entrar
ahí, no me hagas entrar ahí.

ÉL.- Sólo es para hablar.

ELLA.- Si me obligas, te juro que un día de la semana que viene me tiro por
la ventana.

ÉL.- Joana, por favor, vamos… ¿Y qué pasa con Billy?

ELLA.- No me llevo a Billy. No soy buena con él. Lo hago muy mal. No tengo
paciencia. Estará mejor sin mí.

ÉL.- Joana, por favor.

ELLA.- Y además, ya no te quiero.

ÉL.- ¿A dónde vas?

ELLA.- No lo sé. (Se va)

También podría gustarte