AUSENTES A

PRESENTES
Papás, ¿Están ustedes ausentes o presentes en el hogar?

Bill C. Dotson
©2016 Bill C. Dotson. Derechos reservados.
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ISBN: 978-1-6150-7114-2 (sc)

Número de Control de la Biblioteca del Congreso: 2010920715

Los pasajes Bíblicos que se indican con RV60 son tomados de la versión Reina
Valera 1960.

Los pasajes Bíblicos que se indican con LBLA son tomados de la versión La
Biblia de las Américas.

Los pasajes Bíblicos que se indican con NVI son tomados de la versión Nueva
Versión Internacional.

To the Agreement dated August 10, 2010 between ALFRED MUSIC

PUBLISHING CO. INC.
and BILL C. DOTSON:
CAT’S IN THE CRADLE
Words and Music by HARRY CHAPIN and SANDY CHAPIN ©1974 (Renewed)
STORY SONGS, LTD. All Rights Administered by WB MUSIC CORP. All Rights
Reserved. Used by Permission of ALFRED MUSIC PUBLISHING CO., INC.

Impreso en Estados Unidos de América

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necesariamente reflejan la postura de la editorial, y el editor por este medio
renuncia a cualquier responsabilidad de ellas.
 CONTENIDO

Dedicatoria v
Reconocimiento v
Prólogo ix
Prefacio de Ausentes A Presentes xi
La condición de la Familia xvii
Mi Padre xxv
Capítulo 1: Ausente 1
Capítulo 2: Presente 11
Capítulo 3: Entendiendo el rol 17
Capítulo 4: Amando 23
Capítulo 5: Orando 29
Capítulo 6: Modelando 37
Capítulo 7: Mentoreando 43
Capítulo 8: Escuchando 51
Capítulo 9: Enseñando 57
Capítulo 10: Disciplinando 63
Capítulo 11: Bendiciendo 69
Capítulo 12: Proveyendo y Protegiendo 77
Capítulo 13: El Padre Eterno 83
Apéndice 87
Testimonios 91
Notas 101
Biografía del Autor 103

iii
iv
 DEDICATORIA

Este libro se lo dedico a mi padre que ya falleció, Chester A. Dotson.

Entre más vivo, más me doy cuenta que usted me amó y siempre estuvo
orgulloso de mí. Ha sido un placer ser su hijo. A mi madre, Clara, por
amarme a pesar de todo. A Joanne, mi esposa, por hacerme un mejor
padre; a mis dos hijas, Becky y Evelyn, por aceptarme como su padre; y
a mis cinco nietos, Lucas, Sara Peyton, Annie, Will y Renzo, quienes me
hacen un abuelo sumamente gozoso y completo. “Bienaventurado el
hombre que llenó su aljaba de ellos” (Salmo 127:5).

RECONOCIMIENTO
Quiero agradecer a todos aquellos que contribuyeron a este libro. Gracias
a Dudley Hall por su prólogo y a los hombres especiales en mi vida
quienes compartieron sus testimonios acerca de sus experiencias en la
paternidad. En ningún orden en particular, ellos son Ronald Sellers,
Arthur Wood, Arrvel Wilson, Ford Madison, Len Mclauglin, y Kurt
Nelson. Gracias a mi hija Evelyn, quien fue una gran ayuda como
editora. Gracias a Joanne, quien me animó y estableció el trabajo
preliminar para empezar el escrito. Gracias al Señor quien me animó a
escribir este libro a través de la ayuda de su Espíritu Santo. Y gracias a

v
todos ustedes hombres quienes leerán este libro y tomarán los pasos para
llegar a ser un “papá presente”.

vi
 RECOMENDACION
Es cierto decir que el mundo de hoy necesita de un liderazgo bueno y
fuerte. Igual de cierto es decir que el mundo de hoy necesita hombres que
entienden y cumplen con el rol de ser los papás que Dios quiere que sean.
En su libro Ausentes a Presentes (Faith to Faith), mi buen amigo y
hermano Bill Dotson presenta, bajo la dirección de nuestro Padre Eterno,
principios fundamentales en nuestro llamado como padres y líderes en el
hogar. Ya sea que estas planificando en ser papá en el futuro, estas
comenzando tus primeras experiencias como padre, tienes varios años de
experiencia en tus hombros como padre, eres abuelo o padrastro, este
libro es para ti. No importa si has fracasado o crees que has realizado un
buen trabajo como padre, este libro es para ti. En sus páginas vas a
encontrar enseñanzas de vida que han de pasar de generación en
generación. Que mejor legado que el dejar a tus hijos y a los hijos de tus
hijos el que te vean y te recuerden como: “El papá que Dios quiere que
seas.”

Rafael (Rafy) Gutierrez

Pastor/Director - Abiding Fathers en Español

vii
viii
 PRÓLOGO

Cuando un hombre con pasión toma un lápiz en mano para

derramar su corazón, el sabio presta atención. No es fácil escribir de tal
manera que personas muy ocupadas lo lean, por lo cual aprecio el
compromiso que Bill Dotson ha hecho de abordar uno de los temas más
vitales en nuestra sociedad.
Cuando se citan las estadísticas que revelan la ausencia de los
padres en nuestro mundo, la respuesta más común es negar que esto sea
una realidad. No podemos creer que sea una situación tan descontrolada.
Seguramente los encuestadores no calcularon correctamente. Después
tendemos a especular si esto realmente tiene importancia. Es una gran
epidemia; su fuerza nos paraliza y tratamos de convencernos a nosotros
mismos de que el diseño original del hogar no es esencial. En un
ambiente que busca ser “políticamente correcto”, evadimos hasta la
simple sugerencia de que alguien pueda estar haciendo algo
peligrosamente incorrecto. Continuamos permitiendo que hombres
conflictivos ignoren su llamado, mientras las mujeres frustradas luchan
con la dinámica creada por la ausencia de su pareja. Aunque no estén
viviendo en un orfanato, millones de niños crecen con corazones
huérfanos y como resultado, ven la vida a través de ojos huérfanos.
Temerosos de que nunca son lo suficiente, son vulnerables a un nivel alto
de ansiedad y conflictos en sus relaciones. Nunca están seguros de que
hayan hecho lo suficiente para ganarse el título de hijos, son el blanco del
perfeccionismo, o lo opuesto, de una actitud pasiva. Relacionarse con
Dios y su creación de una manera sana será difícil con esa mentalidad al
no haber tenido un padre presente.

ix
 Bill está consciente de que la meta no es solo restablecer el
hogar. Incluso si pudiéramos restablecer el hogar a un ambiente como el
del Edén, los hombres y las mujeres aún sufrirían al estar separados del
Padre original. La única solución perdurable es que cada individuo
encuentre reconciliación con Dios el Padre a través de Su Hijo. Al
descubrir la seguridad que produce ser amados incondicionalmente por
nada más y nada menos que Dios el Padre, somos libres para emprender
la tarea riesgosa de la transformación cultural. El evangelio es la única
esperanza de un cambio permanente. Todos nosotros somos huérfanos
hasta que el Hijo nos presenta al Padre. No hay lugar para las
acusaciones. No podemos señalar a nadie. Aun el mejor hogar no puede
mostrar adecuadamente la exquisita naturaleza del Padre y del Hijo. Solo
Jesús ha hecho eso, y Él está listo para ofrecer esa relación a cualquiera
que confíe en Él.
Al leer las palabras de Bill, usted escuchará el corazón de un
hombre que ha estado en el mundo de los negocios, y quien se ha
conectado con el Reino de Dios. Aunque no es un ministro de la iglesia,
él se mantiene ocupado asegurándose de administrar el jardín de Dios
que le ha encomendado. El habla como alguien que está viviendo la vida.
Estas no son simples observaciones de un espectador. Le importa lo que
dice, porque se preocupa por aquellos a quienes les habla.
Espero que usted pueda ser informado y estimulado a través de
lo que lee.
Dudley Hall
Presidente de “Successful Christian Living Ministries”
Autor: Grace Works, Incense and Thunder, Glad to be Left Behind, Men
in Their Own Skin.

x
 PREFACIO
AUSENTES A PRESENTES

“No es el crítico quien cuenta; ni el que señala con el dedo al

hombre fuerte cuando tropieza o el que indica al hacedor como
podría hacer las cosas mejor. El mérito recae exclusivamente en
el hombre que se halla en el área (el campo de batalla), a aquel
cuyo rostro está manchado de polvo, sudor y sangre, el que lucha
con valentía, el que se equivoca y queda corto una y otra vez,
porque no hay esfuerzo sin error y sin limitaciones. El que cuenta
es el que de hecho lucha por llevar a cabo las acciones, el que
conoce los grandes entusiasmos, las grandes devociones, el que
agota sus fuerzas en defensa de una causa noble; quien en el
mejor de los casos conoce el triunfo del logro, y en el peor de los
casos, si falla, por lo menos falla esforzándose grandemente, para
que su lugar nunca sea con aquellas almas frías y tímidas que no
conocieron ni la victoria ni la derrota”. 1
-Teodoro Roosevelt

Más de veinte años atrás, el Señor colocó en mi corazón una

carga importante que está cerca de Su corazón, la cual, vergonzosamente
no he tratado hasta este momento. Los Padres son los hombres que han
recibido la bendición del gozo de tener hijos, y quienes tienen la
responsabilidad terrenal de criarlos, alimentarlos, y equiparlos para que
lleguen a ser seres responsables y productivos. Aunque había escrito un
plan para desafiar a los padres de la manera que yo creía se me había

xi
mostrado, no es hasta ahora que he actuado según ese llamado.
Recientemente fui movido a sacar esas notas viejas, desempolvarlas;
refrescar los pensamientos y compartirlos con mi familia y amigos.
Al escribir este prefacio, verdaderamente no sé en qué dirección
iremos, pero sé que debo escribir lo que está en mi mente y corazón.
Tengo el privilegio de ser padre de dos hermosas hijas, ahora madres de
nuestros cinco nietos maravillosos. Mientras que el nombre que se me
dio al nacer es Billy Cleveland, ahora afectuosamente me llaman Bumpa.
Mi esposa, Joanne, ahora es Gami. Para nosotros, esto es quienes somos.
Y siendo sinceros, nos encanta.
Cuando empezaba a prepararme para esta travesía de escribir,
Joanne compró varios libros instructivos acerca de la publicación. Uno de
esos libros menciona que dentro de cada persona hay por lo menos un
libro por escribir. Bueno, los siguientes capítulos son los míos. Debo
escribir acerca de lo que yo creo que es la tragedia más impactante en
América, más que cualquier otra, la cual se ha ido incrementando y
convertido en una situación severa. Es la raíz del problema en la mayoría
de nuestras vidas el día de hoy: la ausencia de padres en el hogar.
Lo que he atestiguado y experimentado como hijo, nieto, padre
y ahora abuelo, ha formado mi perspectiva del mundo de la familia. Es
simple: un Dios relacional, Creador, ha establecido un medio por el cual
las personas pueden crecer y prosperar de acuerdo con Su diseño. Ese
medio es la familia– un padre, una madre e hijos, y de allí los parientes.
La salud de la familia recae primordialmente en ambos padres, pero la
mayor responsabilidad ha sido encomendada al esposo/padre. La familia
tiene una mayor posibilidad de alcanzar su propósito divino, cuando es
aceptado.
Aunque soy un cristiano evangélico, y he puesto mi confianza
en Cristo Jesús para mi salvación, debo afirmar que los temas que se
abordan en las siguientes páginas contienen verdades para los cristianos y

xii
no cristianos por igual. Los hechos son los mismos para todos, al igual
que la responsabilidad y los resultados finales. La intención de este libro
es dirigirse a padres o padres potenciales. Mi advertencia para ambos es
que el papel de padre no debe ser tomado a la ligera, más bien de una
manera seria y con toda responsabilidad. Muchos niños en este mundo
les nacen a parejas, y especialmente a papás; quienes no han considerado
la suprema responsabilidad de la crianza de sus hijos. Al menos que esto
se revierta, la familia está seguramente destinada al fracaso. Las
estadísticas comprueban que este es el caso actual.
En ocasiones la muerte o alguna tragedia alteran el núcleo
familiar. Esto no se puede evitar. Pero hoy en día en América, los hechos
indican que niños están siendo abandonados por sus papás en un
porcentaje alarmante, aun mientras viven en la casa. Mi confesión para
usted, el lector, es que he cometido prácticamente todos los errores
habidos y por haber como padre y esposo. Después de la confesión
siempre debería seguir el arrepentimiento acompañado de la esperanza de
un nuevo inicio. Este libro no es una epístola sobre la perfección de la
paternidad, más bien es un análisis de los hechos y el medio por el cual el
padre puede ser restaurado en el hogar, para guiarlo de acuerdo con el
llamado que se le ha dado.
Al estudiar la Biblia, realmente no encuentro un enfoque en las
responsabilidades del papel de la madre. Esto me parece interesante. Pero
debo concluir que Dios sabía que una mujer, la cual Él creó,
instintivamente tendría un afecto de profundo amor por sus hijos. Pero el
hombre –él parece ser una historia diferente. Por ejemplo, yo juego golf.
En la primavera, generalmente observo el proceso de apareamiento entre
los patos. El pato macho espera hasta que los patitos hayan nacido, y
después, ¡zaz!, desaparece. La mamá pata queda dirigiendo su rebaño
hasta la adultez sin la ayuda del padre. Nosotros los hombres cada vez
más estamos haciendo lo mismo.

xiii
 Al haber visitado y enseñado por años en muchas prisiones y
centros juveniles, tristemente me he dado cuenta de la falta de cualquier
influencia positiva de los padres sobre los reclusos, y muchos de ellos
incluso nunca conocieron a sus padres. Muchas de las personas
sentenciadas a muerte, son hombres y mujeres que o no tuvieron una
relación con su padre, o fue una relación horrible. Las drogas, la
violencia, el fracaso en la escuela, sexualidad, el suicidio y muchas cosas
más son el resultado de la ausencia del padre. Todos nosotros sabemos
que las pandillas son un atentado en contra de la familia. La mayoría de
estos muchachos están reaccionando a la falta de un modelo o ejemplo
paterno en sus vidas.
He tenido el privilegio de enseñar las Escrituras a los hombres
en “Union Gospel Mission” (Misión del Evangelio Unido) en Dallas.
Muchos han compartido que la relación con sus padres, en el mejor de
los casos, era tensa. Recientemente surgió el tema del papel que juegan
los padres, y yo les compartí que estaba escribiendo un libro acerca del
impacto que causa la ausencia de los padres en el hogar y la fuerza
destructiva que tiene en la familia. En ocasiones he recibido aplausos de
su parte, pero esta vez tuvieron una reacción espontánea casi estruendosa.
Ellos conocían muy bien esta realidad, de primera mano, y estaban en
completo acuerdo. Fue un momento emotivo para mí y estoy seguro de
que para muchos de ellos también. Preste atención, cada persona tiene
un padre, pero solo algunos conocen a un padre.
En esta reunión un hombre levantó su mano. Me acerqué para
escuchar su pregunta. Pero lo que él me dijo a mí y al grupo fue esto:
“Yo estoy en libertad provisional, y mis hijos viven en Ohio. Estoy
planeando ir a verlos allá y reconciliar mi relación con ellos.” Él estaba
conmovido. ¿Por qué? ¡Él sabía que necesitaba ir! Yo le animé, algo que
la mayoría de nosotros deberíamos hacer. Espero que él logre ir y que
puedan perdonarse los unos a los otros y comenzar a vivir y prosperar

xiv
como familia. Este padre está tomando el primer paso necesario: ¡la
reconciliación!
Un reporte reciente muestra que en el 2008, el 40 por ciento de
bebés nacieron en hogares de padres/madres solteros(as), y el número
salta a más de 70 por ciento entre la comunidad Afroamericana 2. La
ayuda del gobierno, la conveniencia, y muchas otras influencias
negativas han producido esto. Esto debe cambiar. El péndulo debe
empezar a girar en otra dirección, o sino la América que conocemos
colapsará desde adentro. Ya está sucediendo. Debe haber una llamada de
atención. Las alarmas están sonando en toda nuestra nación. Los hijos les
están diciendo a los padres, “nos han fallado, ustedes nos han
abandonado, y parece que ni siquiera les importamos”.
Nada de lo que se ha mencionado hasta el momento refleja los
millones de bebés en América que han sido abortados antes de nacer; la
mayoría de ellos por adultos promiscuos que abortan por conveniencia.
La vida es preciosa desde el momento que es concebida.
Dios hizo la vida como algo para ser valorada, ya que es un
reflejo de Él y Su amor. Hemos sido creados a Su imagen. Hemos
estropeado la imagen. Pero hay esperanza. Quizá los pensamientos en
este libro le impactarán y se vea a usted mismo como padre en una
manera completamente diferente. Hombres, por la gracia de Dios, tal vez,
quizás, podamos retomar nuestro papel en la familia, uno por uno. Pueda
ser que el punto de partida sea el arrepentimiento, pidiendo perdón,
redirigiendo sus prioridades, o asumiendo la responsabilidad. Sea lo que
sea que se requiera, el esfuerzo valdrá la pena.
Tuve el privilegio recientemente de asistir a un Desayuno de
Oración en Dallas y escuché a Brad McCoy, padre de Colt McCoy, quien
jugó como mariscal de campo para los Texas Longhorns (un equipo
universitario de futbol americano). Entre muchas cosas brillantes que
compartió esa mañana estaba la idea central, de la cual todos quedamos

xv
hablando y comentando. Con su autorización, se los comparto aquí, ya
que pienso que es una de las expresiones más significativas con relación
a la crianza. Él dijo, “No prepare el camino para su hijo, prepare a su
hijo para el camino”. Nos explicó que él y su esposa criaron a sus hijos
bajo el amparo de ese pensamiento. Brad compartió varios principios del
método de crianza que usaron, los cuales acentuaban y provenían de este
tema fundamental. Espero que mucho de lo que está plasmado en los
siguientes capítulos sirva para convertir a Brad McCoy en un profeta,
comprobando lo que él ha dicho. Desde mi punto de vista, parece que su
filosofía ha tenido éxito.
El título de este libro más o menos lo dice todo: Ausentes A
Presentes. De los padres ausentes en el hogar a papás presentes en el
hogar. Para algunos, este será un camino difícil, mientras que otros
solamente necesitan despertar en el lugar donde están y asumir su papel
como padres. Hombres, ¿Me acompañan a compartir los pensamientos en
las siguientes páginas? Esto no será inclusivo y no cubrirá todos los
temas o aspectos. Apuesto que tendremos que escribir una segunda parte,
porque quedarán muchos temas que como padres debemos escuchar y
aceptar; pero principalmente porque la corriente de la paternidad se está
extendiendo en las familias en América y las historias de renovación han
sido confortantes.
Estoy orando para que eso suceda. Ponga atención a las palabras
del Sr. Roosevelt y “gástese a sí mismo en una buena causa” 3. ¡Papás,
acompáñenme!

xvi
 LA CONDICIÓN DE LA FAMILIA

Al escribir estas líneas, estamos enfrentando una crisis de gran

proporción en las familias de América. La ayuda gubernamental y la
pobreza en ciertos segmentos de la sociedad han casi destruido el núcleo
familiar. Las presiones políticas y económicas han hecho que sea
conveniente traer hijos al mundo, los que no han sido abortados antes de
nacer, sin ningún rayo de esperanza de que estos hijos crezcan en un
hogar bien balanceado. Mientras hay un poco de variación en la
etnicidad, toda clase social está cayendo presa: blancos, negros, hispanos,
cristianos y no cristianos.
Cuando Juan Emirsch estuvo asociado con ESRC Society Today
(una revista del Consejo de Investigaciones Económicas y Sociales)
presentó un estudio llamado, “Los nacimientos fuera del Matrimonio: La
Historia Real”. Él dice que “cuatro de cada diez nacimientos se dan fuera
del matrimonio, comparado con veinticinco años atrás cuando el
porcentaje era del diez por ciento. La mayoría de estos nacimientos, sin
embargo, son de parejas que cohabitan juntas, no de madres solteras” 4.
Pero Juan Emirsh explica, “El crecimiento en la proporción de
nacimientos fuera del matrimonio sigue siendo una preocupación seria” 5.
Y él continúa diciendo, “Hay una creciente evidencia que la experiencia
en la vida familiar con un padre o madre soltera durante la niñez está
usualmente asociada con resultados desfavorables cuando se llega a la
juventud” 6.

xvii
 William Julius Wilson, el autor de When Work Disappears,
(Cuando el Trabajo Desaparece), comenta, “que el índice creciente de
padres solteros (o madres) está cruzando líneas raciales, pero es más
evidente en la zona urbana. El resultado para los niños es más pobreza,
menos supervisión, y un futuro riesgoso” 7.
Además, el porcentaje de divorcio está creciendo cada año en
cada nivel de la sociedad. La mayoría de los hijos en estas familias
terminan sufriendo, algunos más que otros, pero todos son afectados en
alguna manera. El divorcio o la separación incrementan el número
creciente de madres solteras. Leí recientemente con mucho interés un
artículo en el periódico Dallas Morning News, (un periódico local de
Dallas, Texas) escrito por Lorrie Irby Jackson, una escritora
independiente. El título era, “Mamás, Paren de Excluir a los Papás”. Con
su permiso, les comparto unas citas de su artículo. Ella afirma, y cree con
seguridad que “Hay una diferencia entre aceptar un sufrimiento y crear
uno, y eso es lo que algunas mujeres hacen cuando conscientemente
prohíben al padre biológico de sus hijos participar en las vidas de ellos”.
Ella continúa más adelante diciendo, “Las mujeres no pueden ser madre
y padre de sus hijos a la misma vez. Tal vez quieran hacerlo, o lo
intenten, pero no pueden”.

La señorita Jackson está en lo correcto cuando afirma:

“Sin padres, nuestros hijos pueden verse como hombres,

pero siguen el ejemplo deforme ofrecido por artistas, atletas
u otros maleantes quienes le enseñan a sus seguidores que
hacer de menos a las mujeres les hace más hombres.
Nuestras hijas terminan sedientas por atención masculina y
dan su corazón y cuerpos al primer hombre que les ofrece
palabras dulces y sonrisas. Más tarde, si nadie interviene

xviii
 para romper el ciclo, muchas crecen desilusionadas acerca
del amor y pasan esta disfunción a sus propios hijos”.

Y finalmente, “Considere ésta realidad desagradable: Nuestras

calles y cárceles están llenas hasta reventar de hombres sin padres,
mientras también muchos clubs nocturnos y refugios para mujeres
abusadas están repletos de mujeres que no tuvieron un padre” 8.
Muchos años atrás, nuestra iglesia fue parte de un grupo de
iglesias que llegamos a estar muy involucrados con las familias y sus
hijos en el área del occidente de Dallas. En particular, un ministerio
nació: Mercy Street Dallas (La Calle de Misericordia de Dallas,
www.mercystreetdallas.org) fundado y dirigido por el director Trey Hill
quien vio la necesidad, y Dios le dio una carga por los más de dos mil
cuatrocientos jóvenes en esa comunidad. Él, su esposa, y sus cuatro hijos
pequeños se mudaron a ese vecindario, y muchos de su equipo han hecho
lo mismo. Entre otros programas valiosos, se proveen mentores cristianos
para los niños del cuarto al doceavo año escolar, con la meta y la
esperanza de romper el ciclo de dependencia y desesperación en la
siguiente generación. ¿Por qué son necesarios los ministerios como La
Calle de Misericordia? Primordialmente porque hace falta el elemento
vital de la familia, los padres. Alguien tiene que cerrar la brecha para
estos niños necesitados.
Un amigo compartió lo siguiente, lo cual describe los resultados
en las familias sin la presencia de un padre. De acuerdo con el
departamento de Justicia de los Estados Unidos, lo siguiente refleja cómo
los jóvenes manifiestan su dolor y enojo en todo tipo de maneras
destructivas. Tristemente para ellos y para la sociedad, esta es nuestra
próxima generación de padres. La mayoría no tienen ninguna habilidad
para la crianza. Peor aún, están severamente paralizados aún antes de
tomar la responsabilidad como adultos en la crianza de una familia.

xix
 63 por ciento de los suicidios juveniles provienen de un hogar
sin el padre.
90 por ciento de todas las personas indigentes y jóvenes que
huyen de su casa provienen de un hogar sin el padre.
85 por ciento de los niños que presentan desordenes de conducta
provienen de un hogar sin el padre.
71 por ciento de los que abandonan la escuela provienen de un
hogar sin el padre.
71 por ciento de jóvenes en las instituciones del estado
provienen de un hogar sin el padre.
75 por ciento de los pacientes jóvenes en centros de abusos de
substancias provienen de un hogar sin el padre.
85 por ciento de los violadores motivados por enojo, provienen
de un hogar sin el padre. 9
En medio de todas estas estadísticas tristes y antes de perder
cualquier rayo de esperanza, vamos a enfocarnos brevemente en aquel
quien provee esperanza. Él es nuestro Salvador. “Él hace justicia al
huérfano…” (Deuteronomio 10:18 LBLA). Algunos traducirían este
versículo, “Él defiende la causa de los que no tienen un padre”.
He observado que las niñas que crecen en un ambiente sin la
presencia de un padre son más propensas a la promiscuidad sexual. Las
mujeres que trabajaron junto a nosotros en los centros de detención
juvenil reportan que este era el problema más discutido cuando ellas
ministraban a las muchachas. Ellas estaban muy hambrientas por hablar
con nuestras hermanas acerca de lo que significa ser una mujer y todas
las implicaciones que conlleva.
En las ciudades metropolitanas más grandes, las pandillas están
en su apogeo; las cárceles, los centros de detención y las prisiones
lamentablemente están llenas, al punto que siguen construyendo unidades
nuevas. Hay muchos hombres y mujeres que han sido condenados a
muerte. El abuso de las drogas y el alcohol entre adolescentes es una

xx
constante fuente de escape del dolor que estos jóvenes han tenido que
soportar. Todo esto es un reflejo de la decadencia constante de los
valores familiares y la falta del cuidado de los padres, especialmente de
los papás. Lamentablemente, hay fuerzas políticas agresivas que
promueven agendas para debilitar a la familia tradicional.
/RVWHPDVGHRULHQWDFLyQVH[XDO, impulsada por Hollywood y la
industria del entretenimiento, adoptada por políticos a todo nivel para
ganar votos y contribuciones, destruye la esencia misma de la familia.
Dios es muy claro en Su Escritura. En Romanos 1:22-28 LBLA, Él habla
de lo que estamos viendo hoy en día. Parte de estos versos dice:
“Cambiaron la verdad de Dios por una mentira… Por esta
razón Dios los entregó a pasiones degradantes; porque sus
mujeres cambiaron la función natural por la que es contra la
naturaleza; y de la misma manera también los hombres,
abandonando el uso natural de la mujer, se encendieron en
su lujuria unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos
hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos el castigo
correspondiente a su extravío”.

Hay muchos otros factores que las familias deben sobrellevar.

Todo parece resultar en una pobreza lamentable—económica, emocional
y espiritual—para la próxima generación. Esas fuerzas, aunque parecen
tener buenas intenciones, son básicamente destructivas. Han removido al
padre de la familia de muchas maneras. El patrón de Dios para la familia
desde el inicio en Génesis ha sido usurpado por las soluciones humanas
sin que tengan esperanza de tener éxito. La verdad ha sido reemplazada
por lo “relativo,” y la experiencia maravillosa de las pruebas y el gozo en
el matrimonio ha cedido el lugar a la conveniencia y la necesidad de ser
políticamente correcto. Dios dijo en la creación, “Hagamos al hombre a
nuestra imagen” (Génesis 1:26 RV60).

xxi
 La imagen ha sido estropeada al punto que no podemos ni
reconocemos los atributos esenciales que van a la par de esa declaración.
Hemos buscado las respuestas en otros lugares, y francamente
no ha funcionado, y nunca funcionará. Dios habla a través de Pablo en 2
Timoteo 3:16-17 LBLA. Él dice, “Toda la Escritura es inspirada por Dios
y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia,
a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena
obra”. Enseñar, reprender, corregir, instruir— ¿Lo está viendo y
escuchando? Todos estos aspectos son necesarios para ser un padre
eficaz. Por muchas décadas simplemente hemos buscado dirección y
respuestas en los lugares equivocados. Ni la sociedad ni el gobierno, por
si solos, están listos para la tarea. Aparte de la dirección divina de Dios,
ambas nos dirigirán a la ruina. Y en la mayoría de los casos, allí es donde
se encuentran las familias hoy en día.
Pero siempre hay esperanza. La corriente de una vida familiar
en decaimiento puede ser revertida y los valores pueden ser restablecidos.
Pero tiene que empezar, en mi opinión, con los hombres. Sí, hombres—
los que son padres actualmente y los futuros padres. Debemos dejar de
buscar la satisfacción al perseguir los placeres y la riqueza o el depender
de un programa del gobierno para proveer la respuesta a nuestros
problemas o a nuestros sueños. La verdadera satisfacción vendrá
únicamente cuando los hombres vuelvan a tomar el papel que Dios les ha
dado en el hogar y asuman la responsabilidad de su salud y bienestar.
Cuando Dios dijo que “haría al hombre a su imagen,” eso fue lo
que quiso decir. Y Él no nos dejó sin medios para llevar a cabo la tarea.
¿Por qué lo haría? Él nos confió a sí mismo. Eso es lo que hace un
Creador. “Nunca te dejaré ni te desampararé”, es una promesa profunda
que se encuentra en Hebreos 13:5 RV60.
¿Usted cree que Henry Ford, un ingeniero a finales de los años
1800, debería haber abandonado su preciosa creación, el motor de
combustible interno? ¿No? Estoy de acuerdo. Él lo cultivó y lo convirtió

xxii
en un imperio automotriz y financiero. Y si el Señor Ford lo hizo,
entonces ¿Por qué no podemos confiar nosotros que Dios también lo
hará? Hombres, debemos volver a empezar, e iniciar por ver quiénes
somos y a quién le pertenecemos. El punto de partida es ¡el
arrepentimiento y la confianza! Una valiosa cita, un mandamiento y
promesa en la Biblia, es 2 Crónicas 7:13-14 LBLA. Dios estuvo retando
a un pueblo rebelde a que hiciera lo que nosotros debemos hacer.
Colóquese usted mismo en estos versículos como un hombre que
desesperadamente quiere ser un padre “presente e idóneo” para sus hijos.
Tal vez su matrimonio esté sufriendo o usted está fallando de muchas
otras maneras como padre. Escuche y preste atención a estas palabras.

Si cierro los cielos para que no haya lluvia, o si mando la

langosta a devorar la tierra, o si envío la pestilencia entre
mi pueblo, y se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado
mi nombre, y oran, buscan mi rostro y se vuelven de sus
malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré
su pecado y sanaré su tierra.

La “tierra” de nuestras familias desesperadamente necesita esta

promesa y ayuda. La sequía y la pestilencia están causando estragos. Pero
todo esto empieza con usted y yo. ¿Le importan lo suficiente sus hijos y
su bienestar futuro para hacer esto? Uno por uno, podemos cambiar esta
situación y darle vuelta. No espere a que la siguiente persona lo haga.
Hágalo ahora. Y observe como Dios empieza a responder. Usted saldrá
ganando. ¿Será fácil? ¡No! ¿Valdrá la pena? ¡Sí!
Y si alguno de ustedes no está seguro si todo esto se aplica en su
vida, vaya al final de este libro y redefina su relación con el Dios vivo.
Tal vez ahí es donde muchos de nosotros necesitamos empezar.

xxiii
 MI PADRE

Chester Arthur Dotson (12 de marzo de 1915 al 18 de marzo de

1972) fue mi padre. Él murió a la edad de cincuenta y siete años,
demasiado joven. Fue hijo de Floyd y Maude (Smith) Dotson y fue el
mayor de sus ocho hermanos. Nació durante la Primera Guerra Mundial,
y era adolescente durante la Gran Depresión, la cual surgió después de la
guerra. Su familia se dedicaba a la agricultura y el abuelo Dotson fue un
negociante exitoso. Fue dueño de un almacén y una algodonera en el
condado de Lawrence, Tennessee. Papá, como yo le llamaba, estudió
hasta el octavo grado en una escuela de un solo salón y un solo maestro.
El domingo era un día familiar en el cual asistían a la iglesia, cantaban y
comían juntos. El carruaje y el caballo eran prevalecientes, pues el
automóvil apenas estaba siendo diseñado. Él aprendió a trabajar a
temprana edad, al igual que los otros niños, y eso fue algo que lo marcó
por toda su vida.
Mis primeros recuerdos de él fueron cuando yo tenía alrededor
de cuatro años. Nací en Leoma, y a papá se le dio la responsabilidad de
administrar el aserradero en Franklin. Él estaba allá, a sesenta millas de
distancia, el día que yo nací durante una nevada de seis pulgadas (en
casa, sin doctor, solo mi madre y una amiga quien tomó el papel de
partera). Su papá tenía diabetes y murió a la edad de cincuenta y uno; de
un ataque al corazón. Poco después estalló la Segunda Guerra Mundial, y

xxiv
él, junto con muchos de sus amigos, se unió a la milicia. Ellos estaban
acostumbrados al trabajo arduo, así que se unieron a la fuerza naval, en
especial a un batallón de construcción que se llamaban los SeaBees. En
una ocasión me dijo que no creyera las historias en que los marinos
siempre aterrizan primero. Según él, los SeaBees llegaban primero y
preparaban el camino para que los marinos pudieran entrar. Papá heredó
la habilidad de cocinar de su mamá. Como le gustaba la cocina, esto le
sirvió para el resto de su vida. La mayoría de su servicio en la guerra fue
en una pequeña isla en Japón. Él nunca compartía mucho acerca de sus
experiencias, solamente comentaba que los tifones en la isla de Tinian
fueron brutales. Observé más tarde que siempre que se formaba una
tormenta, él se levantaba de su cama y caminaba por la casa. Fue un
hombre que no le temía a nada, pero pienso que esos recuerdos de la
guerra nunca lo dejaron.
Por supuesto, estuve muy orgulloso de mi papá por haber
prestado servicio militar. La mayoría de las noticias de la guerra las
recibíamos en los cines, aunque ocasionalmente recibíamos una carta.
Tenía alrededor de ocho años cuando una noche desperté para
encontrarlo conmigo en mi cama. Ese fue uno de los momentos más
alegres a mi corta edad. Mi papá, mi héroe, estaba vivo y en casa. Nunca
se volvió a ir. Esto marcó el inicio de mi vida con él. Era después de la
Gran Depresión, después de la guerra; y en general, la vida empezó a
regresar a la normalidad.
Mamá, como la mayoría de mujeres que no se unieron al
ejército, había mantenido vivo el hogar. Ella trabajó para sostener a la
familia, más la pequeña paga de la milicia. Una vez en casa, papá buscó
trabajo por todos lados. El aserradero ya no estaba, así que fue difícil
para él encontrar un trabajo. Después de unos años, él y mamá vieron una
oportunidad de abrir un restaurante con su tío y tía en Franklin. Y así
empezó una vida en el negocio de los restaurantes. El don natural de papá

xxv
de cocinar, y su experiencia en la naval preparando comida para grupos
grandes de personas fue la base para el negocio; el cual aún existe hasta
el día de hoy. El primer lugar se llamó Snack Shop (Merendero). Mi papá
trabajaba en la cocina, y mi mamá se encargaba del mostrador. Su
reputación creció rápidamente, porque la comida de papá era excelente.
Lo que observé en este hombre trabajador, sin mucho estudio, fue que era
perfeccionista. Todo tenía que estar perfecto, y tenía que ser a su manera.
Intentó enseñarme su arte, pero no era para mí. Nunca he probado pollo
frito, pescado, pan de elote, bolitas fritas de masa de maíz, o verdura que
se iguale a la que él preparaba. Le encantaban los cumplidos, y hacía
todo lo posible por complacer a sus amigos y clientes a través de su
talento. Frecuentemente pienso en la expresión, “¿Amas hacer algo que
disfrutas o disfrutas hacer algo que amas?” No sé cuál sea la respuesta,
pero acertadamente describe a papá en su mundo.
Nuestra hija más pequeña, Evelyn, se parece a él en algunos
aspectos. Tal vez en parte eso la llevó a su carrera actual. Después de
graduarse con una carrera en leyes, se trasladó a la industria de la comida
y obtuvo un título en Artes Culinarias y actualmente es una editora con
Martha Stewart. Su enfoque como persona y madre en la comida
saludable, nunca le permitirían preparar y servir las recetas de mi padre,
pero definitivamente tiene su don en cuanto a la preparación de la
comida.
Algunos años más tarde, Mamá y Papá movieron el restaurante
a otro edificio y le nombraron El Restaurante Colonial. Esa es la
temporada que más recuerdo, pues ya era un adolescente. Mucho después
se mudaron como a una cuadra y abrieron el Restaurante Dotson, que
permanece hasta el día de hoy; con nuevos dueños, pero con el mismo
nombre y reputación. Una vez que papá murió en el 1972, mamá
continuó el negocio hasta que lo vendió. Unos años antes de eso, ellos
intentaron mudarse a Florida para estar cerca de sus hermanos. Abrieron

xxvi
un restaurante en Auburndale y dejaron el de Franklin, bajo la dirección
de un empleado de mucha confianza. A raíz de un mal manejo del
negocio, en menos de un año, tuvieron que cerrar el restaurante de
Florida y regresar a rescatar el Restaurante Dotson. Papá reaccionó
razonablemente bien ante esta situación, aunque se sentía decepcionado
con su asociado y con el hecho del reajuste que tuvieron que hacer por
los deseos que tenían. Nunca más delegaron la administración del
restaurante. Era una bendición para Franklin tenerlos de regreso. Algunos
comentaban que la comida había sufrido durante la ausencia de papá.
Su pasión por la comida era tanta que aun cuando venía a
visitarnos a Dallas después que Joanne y yo nos mudamos, cada mañana
despertábamos con el rico aroma de algo que estaba cocinando. Siempre
fue un madrugador, levantándose como a las 4 de la mañana, entraba a la
cocina para preparar comida para ese día.
Como había crecido en una finca, el cazaba y pescaba para
comer. Durante la Gran Depresión no se practicaba el concepto de pescar
y liberar. Esto también marcó su vida. Disfrutaba ambas cosas.
Eventualmente él y mamá compraron un campamento en el lago de
Kentucky. Ellos disfrutaron esa experiencia. Realmente se sentía en casa
allí. Ese fue el lugar donde murió de un ataque al corazón, una noche
mientras dormía, junto a un miembro de la familia. Ya que era un hombre
admirado y un gran chef, todo lo que cazaba, fuera lo que fuera, era
preparado o fileteado, y eventualmente terminaría en el sartén.
Él intentó arduamente que su único hijo llegara a amar la cacería
y la pesca. Pasamos mucho tiempo haciendo esto desde temprana edad, y
fue grandioso. Me estaba enseñando su mundo. Lo he dicho muchas
veces, el atrapaba peces, pero yo no; cambiábamos de lugar y el pescaba
uno, pero yo no; cambiábamos de caña de pescar, y el pescaba, pero yo
no. Él intentó enseñarme. Yo fracasé.

xxvii
 Cuando nuestra hija mayor Becky era pequeña, le encantaba ir a
pescar con él. Ambos disfrutaban la experiencia. Aún hoy en día lo
disfruta, y sus hijos también. Hasta se casó con un pescador. Hay una
experiencia que nunca olvidaré. Ella, papá, y yo estábamos pescando un
día muy de mañana. Noté una serpiente de agua nadando junto al bote.
De repente desapareció, y rápidamente se me olvidó que lo había visto.
Sacamos el motor fueraborda del agua para poder pescar con el motor
electrónico. Era una mañana soleada y muy tranquila, hasta que papá
sugirió que bajáramos el motor para avanzar río abajo. Yo estaba
manejando, entonces tomé la barra para bajar el motor, cuando de repente
mi mano hizo contacto con la serpiente, la cual se había envuelto en el
motor para calentarse con el sol. Siendo una persona que siempre les ha
tenido miedo a las serpientes, hice lo que cualquier hombre asustado
haría. Salté para atrás, y observamos como la serpiente se deslizaba
dentro del bote. Tomé mi hija y nos subimos a una de las bancas más
lejanas. Por un momento consideré saltar al lago. Mi padre no. Después
de ver a su hijo atemorizado, él procedió a atacar el problema. Me
convenció de que lo ayudara y juntos atrapamos al enemigo y lo tiramos
de vuelta al lago. Como padre, no estaba orgulloso en ese momento. Pero
ese era mi papá.
Cuando era niño e íbamos a cazar, él me enseñaba como cuidar
las armas, mantenernos seguros y la destreza necesaria para cazar. Él
siempre tuvo muchos rifles y pistolas. Cazamos conejos, ardillas, pájaros,
algunas veces le disparamos a cascabeles y víboras. Una vez más, él era
un buen tirador y yo, más o menos. Hubo un rasgo de carácter que
aprendí de él una mañana muy temprano. Cuando íbamos a cazar ardillas,
siempre llegábamos antes que amaneciera; tal vez eso es lo que no me
gustaba—madrugar. Esto nos permitía encontrar un buen lugar para no
asustarlas cuando salieran de sus nidos. Hay una mañana en particular
que viene a mi mente. Usamos rifles porque papá dijo que no era justo

xxviii
cazarlos con una escopeta. Vi hacia arriba y apunté para dispararle al
nido, ya que eran una presa más fácil. Allí es donde aprendí algo más
acerca de su carácter. Me detuvo y me informó que esa no era la idea del
deporte de la caza. Sería matanza, y corría el riesgo de matar a algunas de
las ardillas bebés. Nunca se me olvida eso.
Estando en el negocio de restaurantes, papá tenía muchos
amigos, especialmente aquellos con quienes cazaba. La temporada de
caza de venados siempre era especial para ellos. Siempre me invitaba,
pero yo nunca iba, y estoy seguro de que se sentía decepcionado. Le dije
que había visto Bambi demasiadas veces y que nunca podría dispararle a
un venado. Sus amigos sabían que mi papá podía preparar bien la carne,
así que él siempre cocinaba después de cualquier tipo de caza. El
restaurante era para sus amigos el lugar predilecto para ir, y Chester era
su hombre con quien ir a cazar.
Jamás escuché a mi papá decir las palabras “te amo” o que
estaba orgulloso de mí. Pero muchas personas me contaban como les
presumía de mí. Eso fue de mucha afirmación para mí. El tampoco
invertía tiempo abordando los temas más serios de la vida. Pero sí
aprendí mucho de él al observar sus acciones, tanto las buenas como las
malas. Como la mayoría de hombres de esa época, él fumaba
probablemente dos a tres cajetillas de cigarrillos al día. Disfrutaba su
vino de marca americana (bourbon) y la cerveza, pero nunca lo vi
borracho. Parecía ser capaz de controlar su licor. Las malas palabras eran
parte de su vocabulario, aunque bajaba el tono cuando estaba conmigo y
con mi familia. Nunca dije malas palabras en frente de él, aunque aprendí
el lenguaje desde temprana edad. No quería fomentar esta área de su
vida, y estaba avergonzado por él y por mí.
Mamá y yo siempre pudimos contar con Papá. Nunca tuve el
temor de que él nos abandonara. Eso fue muy confortante. Él era honesto,
muy trabajador, y no le gustaban las deudas, la cual fue una tendencia de

xxix
la mayoría de las familias después de la Depresión. Él tenía un crédito
excelente y era bien reconocido en la comunidad. No fue un líder de los
negocios, pero servía en cualquier cosa que se le solicitara o donde se
necesitara. Durante los primeros años de sus negocios, alrededor de los
años 1950, tuvimos una nevada muy grande y una tormenta de hielo que
alteró muchas vidas por muchas semanas, e incluso hubo inundaciones.
La gente no tenía como cocinar y la comida era escasa. Mis padres no
vacilaron ni un momento en servir a sus clientes. Cocinaron usando gas y
fueron uno de los pocos lugares donde las personas podían comer. En ese
tiempo vivíamos en Arno, como a diez millas del pueblo. Nunca dejaron
de abrir el restaurante, y alimentaron a todo el que venía. Muchos no
tenían dinero para pagar, pero eso nunca evitó que les sirvieran. La gente
de Franklin nunca olvidó eso, ni yo tampoco.
Papá amaba a Joanne y sus nietas. Se le veía en su mirada como
amaba jugar con ellas. Lamentablemente, justo cuando estaban a la edad
donde podían hacer más cosas juntos, él murió. Becky tenía doce años, y
Evelyn tenía ocho. Y en cuanto a mí, pienso que he perdido mucho al no
tenerlo en mi vida los últimos treinta años. No fue un hombre que
mostraba mucho afecto, pero era apasionado por la vida. No era muy
religioso, y como muchos otros, usualmente asistía a la iglesia en la
Navidad y el día de Resurrección. Era especial para mí verlo ahí en la
iglesia bien vestido. La mayoría de veces a mí me enviaban a la iglesia,
ya que la mayoría del tiempo trabajaban siete días a la semana, casi hasta
el final de su vida. Interesantemente, él tenía inclinaciones musicales, y
ocasionalmente lo vi tocando el piano u órgano a puro oído. Su himno
favorito fue “Cuan Grande es Él”. Eso me confortaba, al creer que
hubiera algún tipo de vida espiritual en él. Cerca de un año antes de su
muerte, mi vida tomó un giro significativo. Les escribí una carta a Mamá
y a Papá acerca de lo que yo llamo la experiencia de “nacer de nuevo”.
Mi mamá me dijo que ella cayó de rodillas para re-dedicar su vida al

xxx
Señor. Poco tiempo después, aprendí a compartir el evangelio. Llegué a
tener una carga profunda por compartir las buenas noticias con mi papá.
Después de mucha oración e indecisión, una tarde tuve la oportunidad de
estar a solas con él. Fue difícil para mí, pero le presenté el evangelio lo
más claramente que pude y le pregunté si consideraría también confiar en
Cristo, si es que nunca lo había hecho. Terminamos esa charla sin que él
tuviera ninguna reacción, pero dijo que entendía. Unos pocos meses más
tarde, recibimos la llamada que él había muerto mientras dormía.
Naturalmente, mis pensamientos estaban centrados
principalmente en su salvación. Mientras estábamos en su funeral, mamá
dijo que una de sus cocineras quería hablar conmigo acerca de Chester.
Platicamos con ella y parecía estar segura de que algo había cambiado en
su vida en los últimos meses. Él le había dicho a ella, quien era creyente,
que Billy (yo) le había hablado recientemente y que él había estado
reflexionando acerca de muchas cosas y sentía la necesidad de empezar a
ir a la iglesia. Ella estaba convencida que Chester estaba en el cielo y que
había tenido un cambio en su corazón. Solo la eternidad revelará la
verdad, pero por lo menos da consuelo saber que alguien vio algo en él
durante esos últimos días, y eso me da esperanza.
Mientras papá estuvo tratando de pasar tiempo conmigo en la
caza y la pesca, yo estaba empezando a involucrarme en los deportes. Ese
no era su mundo. Por cuestiones del trabajo, él estuvo presente
únicamente en uno o dos de mis partidos en todos mis años de escuela.
Yo entendía, pero su ausencia causó un vacío en mí. Esto impactó mi
vida futura con mis hijas y ahora mis nietos. Hay un momento interesante
que sobresale. Yo era rápido para correr distancias cortas. Un día regresé
a casa, mostrando mi medalla, pues había ganado en una carrera. Él
bromeó conmigo y me dijo que pensaba que me podía ganar, aún a su
edad. Acepté el desafío, pues no había manera que mi padre, que era
mayor que yo, fumador y con sobrepeso, podría ganarme. Creo que yo

xxxi
tenía trece años. Marcamos la distancia. Hasta iba a correr con sus
pantalones largos y sus zapatos de trabajo. Yo tenía pantalones cortos y
zapatos para correr. ¡En sus marcas, listo, fuera! Tomé el primer salto,
pero él me rebasó y nunca miró hacia atrás. Más tarde me dijo que si
hubieran sido diez yardas más lejos, no lo hubiera logrado. Sí noté que se
le dificultaba respirar. Pero no había manera que él me dejara ganar. Ese
día creció mi respeto hacia él por su naturaleza competitiva. Nunca
volvimos a correr otra vez.
Desde temprana edad estuve involucrado con los Scouts (Niños
Exploradores). Tuvimos una cena para padres e hijos. De milagro papá
quería ir y se tomó el día libre en el trabajo. Había mucha gente, y justo
en el momento que iban a empezar, entraron por la puerta de atrás otro
padre con su hijo. Papá miró alrededor y se dio cuenta que no había
ningún lugar disponible. Sin vacilar, se paró, fue donde ellos, y le dio su
lugar al muchacho. Él estuvo de pie con el otro padre todo el tiempo y no
comió. Yo me sentía el niño más orgulloso en ese lugar. Cuando se paró
me había dicho que podía comer después en la casa. Ese gesto me reveló
mucho acerca de su corazón.
Siempre me hizo saber que Joanne era la escogida para mí.
Compartimos nuestros planes de boda con amigos y familiares. Papá fue
mi caballero de honor en mi boda, y me dejó saber que, si él estaba
presente, sería el mejor caballero ahí. El noventa por ciento del tiempo, él
usaba camisetas y pantalones de trabajo o ropa para cazar o pescar. Me
preocupaba un poco cómo reaccionaría a la ropa formal. Fue la primera
vez en toda su vida, pero la usó muy bien. Esa también fue la última vez.
Se veía muy apuesto y yo estaba orgulloso de ser su hijo. (Por cierto, en
el día de la boda; me llevó al campo para jugar el tiro al blanco,
disparándole a latas y botes que estaban en la cerca. ¡Les dije que amaba
la cacería!)

xxxii
 Vale la pena mencionar otra acción de su parte. A papá le
encantaban los carros nuevos, siempre ahorraba y los pagaba con
efectivo. En ese entonces la mayoría de las familias eran dueños de un
solo vehículo. Joanne y yo íbamos a viajar a Miami para una conferencia
estatal de bienes y raíces. Él se dio cuenta, y recuerdo que unos pocos
días antes de salir al viaje, estábamos en el patio de enfrente de nuestra
primera casa. Un Cadillac convertible Eldorado, con todas las extras,
apareció en nuestra calle, y papá lo estaba manejando. Lo había
comprado justo a tiempo para que nosotros lo usáramos para nuestro
viaje a Miami. ¿Cuánta gente conoce usted que le prestaría un carro
nuevo de marca Cadillac a su hijo joven, confiando que lo traería de
regreso sin ningún daño, después de un viaje de dos mil millas?
Simplemente, así era mi papá. Se gozaba al sorprender y complacer a
otros.
Hubieron otros pequeños recuerdos en los cuales papá estuvo
involucrado: mi primera pistola de balines cuando estaba chico, una
calibre 410 a los doce años; una mañana él hizo un trineo de madera,
durante la tormenta de hielo que mencione anteriormente, el cual jaló por
todo el campo con un carro Modelo-T; ese mismo año cuando hubieron
inundaciones, después de haberme despertado por el sonido de la bocina
de un vecino, muy de noche me sacó cargado de la casa a través de tres
pies de agua; nuestro primer televisor marca Dumont que tanto deseaba;
todos los cachorros y perros que me regaló; el pato de Pascua llamado
Junior; mi mascota la ardilla, la cual el atrapó y enjauló; su advertencia
de que no metiera mi dedo en la jaula, pues tienen dientes filudos; y sí, lo
hice de todos modos, y sí, sus dientes son filudos; fue un conductor
cuidadoso y confiable; él me enseñó a mí y a otros miembros de la
familia a manejar; nunca me dio una nalgada; cada uno de los miembros
de la numerosa familia de mamá lo amaron, y llegó a ser uno de los
favoritos; sus carcajadas—le encantaba bromear; trabajaba con sus

xxxiii
manos y hacía cosas con la madera; me dio una navaja de bolsillo y me
enseñó a tallar; en sus últimos años su amor por El Camino; su manera de
tratar a la gente con respeto; y una cosa más, ¡toda la comida exquisita!
¡Mi esperanza es que mi padre terrenal esté ahora viviendo con
mi padre celestial y que esté cocinando algo especial para el Rey!

Preguntas para Reflexionar

¿Qué aspectos describirían a su padre?

¿Valdría la pena colocar esos pensamientos en un papel?

¿Usted piensa que sus hijos y nietos podrían ser beneficiados al leerlo?

¿Qué lo está deteniendo?

xxxiv
 Capítulo 1: Ausente

AWOL: Ausente sin Salida Oficial

—Ejército Estadounidense

“Ausentado sin salida oficial”, es un concepto con origen militar

que significa ausente sin permiso, sin aviso, o desaparecido. Tiene su
origen y toda una historia en la fuerza naval y el ejército británico. La
regla en ese tiempo, desde los años 1700, era que si un soldado faltaba
tres veces cuando se tomaba lista, se consideraba que había desertado. El
término AWOL, siglas en inglés, es de origen militar estadounidense.
Algunos sugieren que esto surgió mucho después de “ausente sin salida
oficial,” probablemente justo antes de la segunda guerra mundial. Pero
también hay evidencia, aunque infundada, de haber sido usada en la
Guerra Civil Americana. M. L. Menchen, en The American Language,
1945 (El Lenguaje Americano, 1945) afirma: “(En el Ejercito de la
Confederación) ausencias de corta duración usualmente no resultaban en
castigo. En otros casos el ofensor recibía una sentencia insignificante
como: una reprensión de parte de un oficial de la compañía, tener que
excavar un tronco, cargar un riel de hierro por una o dos horas, o usar un
rótulo con las letras AWOL.” 10 Sugiero, en el caso de padres ausentes,
que por lo menos sería apropiado el uso de ese rótulo.
El diccionario Webster nos dice que “ausente” significa: “No
estar en un lugar específico físicamente o mentalmente”. 11 Examinemos
los aspectos físicos de la ausencia—de niño, ausentarse de la escuela y
como adulto, estando ausente del trabajo. Hay ausencias excusadas,
como cuando usted está enfermo, o tiene que ir al dentista y sus padres
escriben una nota de “excusa”, O cuando uno llama al trabajo para decir
que tiene gripe o alguna otra enfermedad de corta duración. La mayoría
de empleadores determinan cierto número de días designados para que

1
usted pueda ausentarse sin perder pago. Algunos empleados se
aprovechan del sistema para maximizar el beneficio. Apuesto a que la
mayoría de nosotros aparentamos estar enfermos en el día de un gran
examen, para el cual no habíamos estudiado, esperando clemencia y más
tiempo para prepararnos. Todos estos y otros ejemplos similares son
razonablemente aceptados por la sociedad en la mayoría de los casos.
Pero ¿Qué de las ausencias que van más allá de lo razonable? El
producto del trabajo es afectado, el estudiante se atrasa demasiado al
punto que le cuesta poder ponerse al día. Se comienza a exhibir una
conducta “crónica”, indicando un hábito a largo plazo y posiblemente
permanente. Para los empleadores, los gastos y la pérdida de ingresos en
América provocados por el ausentismo son de billones de dólares, sin
contar los productos defectuosos o los servicios reducidos. Es
únicamente cuestión de tiempo antes de que esto se deba afrontar.
Algunas maneras de luchar con este fenómeno van desde conceder el
permiso de ausencia sin pago hasta el despido. En la escuela, la disciplina
varía desde detención, sin goce de privilegios, hasta el ser expulsado. Las
escuelas y las autoridades locales invierten tiempo muy valioso y dinero
en controlar “la ausencia escolar” especialmente en nuestras escuelas
públicas.
También hay un lado mental de ausentismo. El estudiante se
sienta en la clase, pero su mente está en otro lugar. Los pensamientos
sobre temas ajenos a la clase nublan su mente. La cita de este viernes por
la noche, el partido que viene pronto, soñando despierto acerca de las
vacaciones de verano—todos estos y muchos más nublan la mente. El
niño está presente, pero al mismo tiempo está ausente. Él o ella no están
participando activamente de lo que un día podría dar dividendos, si tan
solamente estuvieran comprometidos.
Es lo mismo en el trabajo. Los problemas con el jefe o en la
casa, la acumulación de cuentas por pagar, la falta de sueño, considerar
un cambio de trabajo, y buscar la manera de como vencer el sistema
puede causar que un empleado esté mentalmente ausente. Sí, el empleado
se presentó al trabajo y está físicamente allí, pero mentalmente y
emocionalmente, él o ella están en otro lugar. Y cuando llega el momento
de la evaluación y no es favorable, el empleado se pregunta cómo el jefe
le puede hacer esto, siendo que es un empleado fiel que siempre está en
su trabajo. Tal vez los resultados del producto del trabajo reflejen su
ausencia mental.
Lo mismo es cierto para los padres; pueden estar ausentes física,
emocional o mentalmente. Hay muchas razones fuera de nuestro control
que contribuyen a la ausencia física. Algunas son la muerte, la
hospitalización, el servicio militar, o una misión a largo plazo. Estas
circunstancias deben ser afrontadas, y se debe abordar el tema para
asegurar el mejor resultado posible. Pero las razones que parecen
devastar el hogar oscilan entre los matrimonios rotos que terminan en la
separación y el divorcio hasta el aceptar posiciones de trabajo que
requieren viajes extendidos u horas exorbitantes de trabajo que obligan
una separación de la unidad familiar.
Si usted me lo permite, le compartiré una experiencia de mi vida
personal. Como cualquier norteamericano de pura sangre, estuve
buscando ascender la escalera del éxito y proveer para mi ego—digo, mi
familia. Me llegó una oferta para mudarme de Nashville a Dallas (un
campo más grande), y la tomé sin consultar con mi familia. Pero esa es
otra historia. Esta nueva oportunidad incluía el requisito de viajar
extensamente durante la semana, e incluso algunos viajes de diversión los
fines de semana. Tenga en cuenta que estaba haciendo el “sacrificio” por
“ellos”. Era parte del paquete del trabajo con este promotor público
multi-estatal de apartamentos. Vea, yo era el vicepresidente executivo, y
tenía que buscar y aprobar todos los sitios, aparte de hacer arreglos para
el financiamiento de cada proyecto. Este era un trabajo grande e
importante y yo quería triunfar, o por lo menos no fracasar. En ese
tiempo, Dallas era un mercado pobre, entonces íbamos a otros lugares
casi cada semana.
Después de un tiempo, sentí que mis hijas de siete y diez años;
de repente iban a crecer e irse de la casa y yo no las conocería, ni ellas a
mí. Mi esposa no se quejaba. Ella era una gran mamá y una esposa
comprensiva. Pero la intranquilidad dentro de mí me condujo a renunciar
y empezar mi propia empresa de desarrollo. Económicamente, esta era
una decisión horrible. Esto fue durante la administración de Carter
cuando la tasa de interés subió a más del 20 por ciento. Mi entrada
económica sufrió (hubo dos años sin ingresos), pero por la gracia de

3
Dios, sobrevivimos. Lo más importante, estuve en casa otra vez,
activamente involucrado. Las niñas pueden contar su lado de la historia.
Puede ser que tuvieron más de mí de lo que ellas querían. ¿Lo haría otra
vez? ¡Absolutamente! Esta etapa puede ser que haya sido el tiempo más
creativo en nuestra familia, al ver como hacíamos estirar el dinero y ver
como Dios proveía continuamente, aunque no faltaron también los
problemas y sufrimientos. Personalmente, nunca he tenido un
crecimiento espiritual mayor de lo que crecí durante esos años de
escasez. Él nunca dijo que el ser padres sería fácil, únicamente que el
esfuerzo valdría la pena.
Si existen circunstancias fuera de su control que requieren una
ausencia de la casa por un período de tiempo, hay maneras de ser
creativos y seguir siendo el padre que sus hijos necesitan. Ellos verán su
deseo de estar allí para ellos y sentirán su amor. Su esposa proveerá las
maneras a través de las cuales pueda ser productivo en sus vidas. Ellas
simplemente son así. Confié en ella para ayudarle en su “paternidad a
larga distancia”.
Yo crecí como hijo único en un pequeño pueblo en Tennessee.
Era después de la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial. Cuando
mi papá regresó a casa después de su servicio militar, me alegré mucho, y
ellos, al igual que el 90 por ciento de los americanos, tuvieron que
ponerse a trabajar y hacer una vida en un tiempo de gran escasez. Entendí
y aprecié la dedicación de mis padres. Trabajaban seis y a veces siete
días a la semana en el negocio del restaurante. Pero al ir creciendo
comencé a jugar deportes, y realmente extrañé su presencia y su apoyo.
Pienso que por eso tomé la decisión en Dallas de asegurarme de nunca
perderme nada en lo cual estuvieran participando nuestras hijas. Aún
seguimos asistiendo hasta donde nos es posible a cada evento donde
participan nuestros nietos. Papá trató de compensarlo por medio de las
salidas a cazar y pescar, pues eso era parte de quien era él. Estar
físicamente presente es muy importante. Nunca minimice el impacto
positivo que puede tener.
He visto la película reciente Facing the Giants (Enfrentando los
Gigantes), unas cuentas veces con mis nietos. Hay varias lecciones
grandes para la vida en esa película, pero una de ellas sobresale en mi
mente. A David, un jugador de futbol de baja estatura, se le anima a
intentar entrar en el equipo de futbol americano.
Su papá, un hombre confinado a una vida en una silla de ruedas, le animó
a que lo intentara. No le fue tan bien, porque no tenía una pierna fuerte.

4
Pero en el final crítico del partido en la cúspide del campeonato, el
entrenador toma la decisión de enviar a David a ganar el juego con un gol
de campo. La distancia era larga, más lejos de lo que jamás había
intentado. Cuando se acerca a la posición, mira hacia el final del campo y
ve a su padre de pie, fuera de su silla de ruedas con sus brazos extendidos
hacia el cielo como si le dijera, “Yo creo en ti, y lo podrás hacer.” Patea
la pelota, y le pega tan duro que él cae al suelo; la pelota vuela sobre el
aire y luego entra entre los postes. ¡Bien! ¿Quién piensa usted que hizo
posible que David hiciera el gol de campo, y que lo hiciera bien aun
cuando estaba fuera de su alcance? Eso es simplemente lo que hacen los
padres. Equipe a sus hijos para hacer cosas más grandes de lo que ellos
jamás han imaginado.
Bueno, ese padre estaba presente en ambas áreas, la física y la mental.
Pero ¿Y usted? Está usted en casa, pero mentalmente está en otro lugar.
¿Piensa usted que eso es posible? Examine su rutina cuando llega a casa
a cualquier hora. ¿Se está apresurando a abrazar o dar un “chócale” y
averiguar cómo pasaron el día sus hijos? O ¿El periódico es primero?
“Bueno, he trabajado todo el día, y necesito un tiempo tranquilo para
enterarme de las noticias”. Tal vez se toma una cerveza o una bebida.
“Realmente necesito descansar”. Los niños respetan su espacio, pero
desean ser atendidos. El hombre moderno tal vez esté en el teléfono o
enviando mensajes de texto cuando llega a casa y el día de trabajo parece
que no termina aún. Trabajos importantes requieren que usted esté
disponible las 24 horas los siete días de la semana. El padre piensa o
justifica sus acciones como parte de lo que se requiere para poner comida
en la mesa y ropa en sus cuerpos. Mientras tanto, la comunicación dentro
de la familia sufre desesperadamente. “Inmediatamente, después de la
cena, hijos, necesito terminar el trabajo que traje a casa. Un cliente muy
importante nos lo trajo hoy”. “Pero papá, ¿No recuerdas? Tengo una
reunión con los Scouts y tú prometiste estar allí”. La hermanita menor
agrega, “Sí, y tú vas a ayudarme en mi proyecto de escuela esta noche. Es
para mañana, y toda la semana tú has dicho que lo terminaríamos”. Este
es un reflejo de lo que sucede en muchas de las familias de América. Una

5
Escritura (Ef. 6:4a LBLA) viene a mi mente, “Y vosotros, padres, no
provoquéis a ira a vuestros hijos”.
Y no se nos olvide el dios americano—la televisión. “¿Qué, amorcito?
Espera un minuto, no quiero perder esta jugada”. “Papá, desde el
momento que llegas a casa, prendes los deportes, y nunca jugamos con la
pelota o trabajamos juntos en mi proyecto”. “Bueno, nosotros podemos
ver el partido juntos si quieres. Hijo, ¿Cómo va tu equipo este año?”
“Papá, me salí del equipo porque no soy bueno”. “¿Qué? ¿Mi hijo no está
jugando deportes? Hablaré con el entrenador. Arreglaremos esto”. “¿No
me escuchaste? Yo mismo renuncié, te dije que lo iba a hacer, pero como
siempre, no me escuchaste”.
Hoooola, ¿Hay alguien en casa? Usted quizás esté presente físicamente
pero no mentalmente ni emocionalmente. Imagínese la frustración que
empieza a crecer en sus hijos cuando ellos quieren desesperadamente que
usted los considere y los escuche. Ellos se harán una idea de cómo es
Dios al verlo a usted. La mayoría no tienen a nadie más cercano. En
cuanto a liderazgo, usted es la cabeza del hogar. Ellos realmente están
buscando y necesitan su atención y comentarios. Ellos están tratando de
crecer de la mejor manera que pueden. Se supone que usted es la persona
mayor y más sabia, aquel a quien pueden recurrir para obtener consejo.
Las familias funcionan mejor cuando esto sucede. Pero cuando esto no
pasa, una infinidad de situaciones desafortunadas comienzan a
desarrollarse. “Escúchame, Papá. Soy una persona, tu responsabilidad.
Estoy luchando con decisiones. Necesito respuestas— ¡de ti!”
Tristemente, a la mayoría de hombres nunca se les han dado las
herramientas necesarias para tomar el papel de padre. Posiblemente, su
modelo de padre fue similar a ellos. Los frutos nunca caen muy lejos del
árbol. Malos padres reproducen peores padres y así sucesivamente. Es
más fácil estar inmerso en cualquier otra cosa y dejar el trabajo de la
crianza a la madre, o a un pariente cercano, maestros y entrenadores.
Algunos hasta creen que como ellos mismos sobrevivieron situaciones
difíciles, sus hijos también sobrevivirán. Unos pocos golpes y moretones
nunca han dañado a nadie. Ellos son buenos hijos; estarán bien. Pero ¿En
verdad lo estarán? Y si sobreviven, ¿No hubiesen estado mejor equipados

6
si su padre, usted, hubiera desarrollado su función, la cual diseñó el Padre
Celestial? No es por casualidad o un truco de TV, que prácticamente cada
atleta que ve a la cámara dice las palabras, “¡Hola, mamá!” Tal vez, ellos
no “conocen” el padre en sus vidas.
Uno de los ejemplos más vivos del factor de la “ausencia” de los
padres, se dio muchos años atrás durante una sesión con veinticuatro
jóvenes; de once a diecisiete años en el Centro de Detención Juvenil del
condado de Dallas. Nuestra tarea era compartir pensamientos acerca de la
palabra “reverenciar”. Les expliqué de una manera sencilla que
significaba darle honor o mostrar respeto hacia alguien. Luego les pedí a
los muchachos que me dieran una lista de todas las personas, las cuales
ellos creían deberían ser reverenciadas. Para tenerlos motivados y
participando, siempre les premiaba con un dulce por cualquier intento de
contestar la pregunta. Así que, levantaron sus manos y comenzaron a dar
respuestas. Las madres, las tías, las abuelas, los bomberos, los policías
(con renuencia), los jueces, el presidente, los maestros, y los pastores. La
primera ronda surgió más o menos veinte nombres. Los animé a indagar
más profundamente y pensar en más. Otros nombres vinieron a sus
mentes, como los doctores y las enfermeras. Luego, hubo silencio. Les
ofrecí dos dulces si me decían un nombre que faltaba en la lista. Siguió el
silencio.
¿Puede usted imaginarse eso? Veinticuatro muchachos brillantes
y pasaron diez minutos. Ellos estaban estudiando todos los nombres en la
pizarra. Empecé a deletrear, y después de escribir la letra “P,” un
muchacho gritó padre. Él estaba hambriento. En ese momento, les
declaré, “Muchachos, ¿Se dan cuenta que ustedes ni pensaron en sus
papás como a alguien al que se debe honrar?” De hecho, los padres no
eran de importancia en la mayoría de sus vidas. Me impactó la falta de la
presencia e influencia de los padres. En ese momento, les hice algunas
preguntas acerca de cuantos vivían con su padre o por lo menos conocían
a su padre. Tres o cuatro tenían a un padre en sus vidas en algún nivel.
Uno de ellos fue el que contestó la última pregunta. ¿Coincidencia?
Pienso que no. Esa mañana, ha permanecido en mi mente más que
cualquier otra, en los diez años que tengo de enseñar en el Centro de
Detención Juvenil. La realidad: Sus padres simplemente no eran parte de
su mundo. Escalofriante—y muy triste.

7
 Para muchos de ustedes, nunca es demasiado tarde para cambiar
lo que ha pasado previamente. Se requiere una evaluación honesta de
quién es usted, cuál realmente es su función, y dónde necesita empezar.
Para otros, esto será muy doloroso. Otros encontrarán que no se han
desviado mucho y podrán regresar rápidamente al camino. Mi
observación es que los hijos han estado esperando este día por todas sus
vidas. Es extraño, ellos lo captan, eso de ser padres. Siempre lo han
entendido. ¿Por qué la mayoría de padres han sido cegados a la misma
verdad? Examinaremos esto y mucho más en los siguientes capítulos.
¿Está usted listo para seguir adelante con nosotros? Solamente se
requiere que le de vuelta a las páginas, una a la vez. Pero antes que lo
haga, lea las palabras de esta maravillosa, y tal vez triste canción por el
conocido Harry Chapin titulado Cat’s in the Cradle (El Gato está en la
Cuna.)

Mi hijo llegó el otro día,

Vino al mundo de manera usual.
Pero había aviones que tomar y facturas por pagar
Aprendió a caminar mientras yo estaba fuera
Él ya hablaba antes de que yo lo supiera.
Y cuando creció dijo:
“Yo voy a hacer como tú papá. Sabes que voy a ser como tú”.

Y el gato está en la cuna y la cuchara de plata,

Muchachito triste y el hombre en la luna.
“¿Cuándo vendrás a casa papá?” “Hijo, no sé cuándo.
Estaremos juntos entonces.
Sabes que lo pasaremos bien entonces”.

Bien, mi hijo cumplió diez años el otro día.

Dijo, “Gracias por la pelota, papá. Ven, vamos a jugar.
¿Podrías enseñarme a lanzarla?”
Dije, “Hoy no, tengo mucho que hacer”.
Él dijo, “Está bien”.
Y se fue, pero su sonrisa nunca disminuyó,
Y dijo, “¿Saben? Voy a ser como él, sí.
Saben yo voy a ser como él”.

8
Y el gato está en la cuna y la cuchara de plata,
Muchachito triste y el hombre en la luna.
“¿Cuándo vendrás a casa papá?” “Hijo, no sé cuándo.
Estaremos juntos entonces.
Sabes que lo pasaremos bien entonces”.

Bien, el regresó de la universidad el otro día,

Ya casi hecho un hombre, debo decir,
“Hijo, Estoy orgulloso de ti. ¿Nos podemos sentar por un rato?
El agitó su cabeza, y me dijo con una sonrisa,
“Lo que en verdad quiero, papá, es que me prestes las llaves del carro.
Nos vemos al rato. ¿Las puedo tener, por favor?”

Y el gato está en la cuna y la cuchara de plata,

Muchachito triste y el hombre en la luna.
“¿Cuándo vendrás a casa papá?” “Hijo, no sé cuándo.
Estaremos juntos entonces.
Sabes que lo pasaremos bien entonces”.

Estoy jubilado desde hace tiempo, mi hijo se fue de casa.

Le llamé el otro día.
Dije, “Si no te importa, me gustaría verte”.
Él dijo, “me encantaría también, papá, si encontrara el tiempo.
Ves que mi nuevo trabajo es un fastidio y los niños tienen gripe,
Pero ha sido agradable hablar contigo, papá.
Ha sido agradable hablar contigo”.

Y mientras colgué el teléfono, esto se me ocurrió,

El creció justo como yo.
Mi hijo es exactamente como yo.

Y el gato está en la cuna y la cuchara de plata,

Muchachito triste y el hombre en la luna.
“¿Cuándo vendrás a casa papá?” “Hijo, no sé cuándo.
Estaremos juntos entonces.
Sabes que lo pasaremos bien entonces”. 12

9
 Si usted se ve a sí mismo en cualquier parte de esta melodía, es
tiempo de actuar, comenzar a enfrentar los cambios necesarios, y nunca
hay mejor tiempo que el presente.

Preguntas para Reflexionar

¿Es usted un padre ausente ya sea físicamente, mentalmente,

emocionalmente o las tres cosas?

De ser así, ¿Cómo cree que eso está afectando a sus hijos?

¿Quiere usted conectarse con ellos de nuevo?

¿Cuáles son los pasos que tomará?

10
 CAPÍTULO 2: PRESENTE

Un viaje de mil millas ha de

comenzar con un simple paso. 13
-Lao-Tzu

Algunos libros de misterio o novelas dejan el final para el

último capítulo. Como no soy un autor profesional, pensé que les gustaría
saber la dirección en la que vamos y cuál es el resultado deseado. Esto le
evitará hojear el libro hasta las páginas finales y posiblemente ni leer el
libro completo. Su dinero no se le reembolsará si se salta la parte difícil
del libro.
Al mismo tiempo, no hay ninguna revelación trascendente que
aparecerá después de varios capítulos. De hecho, puede leer este libro en
el orden que usted prefiera. Y para usted, cuya mente no es tan
organizada, esto debe traer plena libertad. Y decidí no cobrar más por ese
privilegio. Tal vez debería haber escogido a Random House como la
publicadora, que literalmente traducido al español sería Casa al Azar.
Hubiera funcionado bien, ¿No cree?
Pero la realidad es que esta es la manera en que muchos padres
desarrollan su paternidad. ¡No tienen un plan! Que ya no usen pañales,
que se pongan ropa de grandes, se gradúen de la escuela y tal vez de la
universidad, que obtengan un buen trabajo, que se esperen para conocer a
alguien de quien usted apruebe y se casen, seleccionen el partido político
correcto, y si tiene suerte, habrá nietos al fin de cuentas. ¿Quién dijo que
no hay un plan?
Pero la verdad es que, para la mayoría de las familias modernas
en América, el mayor crédito se le atribuye a la esposa y madre. Y si ella
tiene una profesión fuera de la casa, el tiempo con los hijos se sacrifica.
Yo sé que por ciertas situaciones financieras que se dan, hay padres que

11
no podrían sobrevivir de otra manera. Pero me atrevería a decir que
muchos padres colocan a sus familias en la condición de “escasez” al
proveer demasiados juguetes, enfocándose con estar a la moda, y
acumulando una gran cantidad de deuda.
Como resultado, entonces, estas familias tienen una madre o un
padre ausente, lo cual resulta ser más dañino para el desarrollo de los
hijos. Pero podemos tomar algunas decisiones, aun desde muy temprano,
que reducirán la carga en el camino. Los hijos son muy flexibles, y si los
involucramos y mantenemos informados, ellos pueden contribuir
constructivamente a la salud de la familia.
Entonces, ¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Cuál es el resultado
final que los padres deberían planear y perseguir? Simplemente, ser
padres que están presentes en el hogar. Padres deberían ir ¡De ser un
padre ausente a ser un papá presente! Los padres necesitan dejar de estar
ausentes en el hogar y comenzar a estar presentes en el hogar. Así de
sencillo. ¡Fácil! Pero primero, usted necesita querer este cambio,
realmente desearlo. Porque una vez este camino llega a ser su objetivo
primordial, habrá muchos cambios que deben ocurrir. En algunos casos,
serán cambios drásticos, mientras otros serán con menos trabajo.
Ahora, estoy asumiendo que usted cree que esta causa vale la
pena: la salud y el bienestar actual de su familia, y el fundamento para las
futuras generaciones que vendrán. En la mayoría de los casos se requerirá
algún tipo de sacrificio. Las prioridades tendrán que cambiar. Tendrá que
hacer algunos planes — ¡qué desagradable! —y buscar la ayuda y
aprobación de su familia, tanto la familia inmediata como posiblemente
otros parientes. ¿El resultado final justifica los medios? Seguro que sí.
Pero lo que más importa es su decisión consciente.
Bueno Bill, entonces, en resumen, ¿Cómo se ve este nuevo yo?
Pínteme el cuadro ideal, pero primero, ¿Qué significa la frase “estar
presente”? Buena pregunta. Me alegra que la haga, porque para algunos,
si no es que la mayoría de ustedes, esta terminología es nueva.
Empecemos con el Diccionario Webster y avanzaremos desde allí.
Pienso que se esclarecerá lo que es estar presente, aunque el camino para
llegar a serlo quizás no sea tan claro. Por esa razón este libro contiene
más de dos capítulos.
 Presente, es un adjetivo y básicamente significa “sin cesar”,
como una creencia o una fe permanente. Algunas otras figuras para
definir esta palabra son: seguro, invariable, constante, duradero,
perdurable, inmovible, firme, fiable, inalterable, e inquebrantable, entre
otras. La palabra aparece en la Biblia Griega desde el año 250 a. C. En
Juan 5:38 LBLA, Jesús habló estas palabras: “Y su palabra no la tenéis
morando en vosotros, porque no creéis en aquel que él envió”.
Esto me da la idea de “morar constantemente”.
El verbo morar significa habitar o residir. Algunos sinónimos
son: reconocer, estar, perdurar, pararse, sufrir, apoyar, y tolerar 14. Me
gusta este cuadro contextual relacionado con la presencia de alguien o
algo; habitar, vivir, morar, posar o residir. En relación con la
perseverancia, hay una expresión que he escuchado y usado muy
seguido, “Siga adelante en seguir adelante”. Se dice que Daniel Webster
comentó, “Si permanecemos en los principios que se enseñan en la
Biblia, nuestro país prosperará”. 15 Si me permite la libertad de cambiar
una palabra, esto afirmará un buen punto para considerar. ¿Qué pasaría si
substituyéramos, “familia” en lugar de “país”? Considerando que un país
está formado de familias, tal vez Daniel dio en el clavo a algo que se
aplica para ambos.
Aun si usted no es un estudioso de la Biblia, valdría la pena
explorar el capítulo 15 en el evangelio de Juan. La palabra permanecer
aparece diez veces en diez versículos. El cuadro que se pinta es de una
rama pegada a una viña, permaneciendo juntos y siendo productivos en
su propósito natural. Piense conmigo. Si en una familia, la viña
representa el padre, y las ramas son los hijos; si se separan por cualquier
razón, uno puede ver fácilmente los resultados desastrosos. Las ramas
mueren por perder la línea de vida. Llegan a estar hambrientos de la
sustancia que necesitan para sobrevivir y crecer para ser una persona
fructífera.
Entonces, ahora que tenemos una mejor idea de lo que significa
esta palabra “permanecer”, ¿Qué deberíamos aprender usted y yo como
padres? Por favor sepa que cuando hablo de los hijos, esto incluye a la

13
esposa y madre. Los mejores padres involucran completamente a sus
esposas, la mamá de los hijos.
Tenemos que estar presentes.
Tenemos que estar comprometidos e involucrados.
Tenemos que estar atentos.
Tenemos que estar dispuestos a sufrir con y por nuestros hijos.
Tenemos que apoyar a nuestros hijos.
Tenemos que ser consistentes.
Tenemos que estar allí a largo plazo.
Tenemos que ser firmes, sin vacilación—pero con compasión.
Tenemos que ser confiables.
Tenemos que ser su mejor modelo.

No es tan difícil, ¿O lo es? Estos diez puntos son solo un

resumen de los requisitos completos para ser un padre presente. Me
atrevo a decir, si la mayoría de nosotros le pegamos al blanco en todos
estos aspectos mencionados, seriamos el grupo más gozoso de hombres
sobre la faz de la tierra. Necesitamos estar conscientes de que aun con el
mejor manual de instrucción, ninguno de nosotros llegará a hacerlo
perfectamente bien. Como en muchas cosas que se hacen bien, lo
importante no es tanto la calificación como el proceso de aprendizaje. Y
en la búsqueda y el afán de llegar a ser el mejor “padre presente”,
encontrará que aun cuando usted queda corto, el esfuerzo lo llenará de
satisfacción. Y cuando sus hijos vean que usted está haciendo el esfuerzo,
será más fácil que le perdonen, y le apuesto que incluso estarán ahí para
animarlo. ¿Por qué? Porque sentirán que usted realmente se preocupa por
ellos, aun cuando comentan errores. Todos fallamos.
Para aquellos que tienen todo bajo control, que se las saben
todas y no desean leer el resto del libro, por favor regáleselo a alguien
que no lo sabe todo. No tendrá que ir muy lejos. Están por todos lados.
Para aquellos que creen que aún hay carne en el hueso, y como pagaron
por este libro (o su esposa y sus hijos se lo compraron), valdría la pena
seguir adelante y terminarlo; espero que usted lo haga, porque usted
quizás quiera encontrar maneras de llegar a ser el mejor padre del mundo
entero para sus hijos. Y su esposa, la madre de sus hijos, será una mujer

14
bendecida. Exploremos el mundo del cambio de estar ausentes a estar
presentes, recordando que el primer paso es siempre el más difícil.

Preguntas para Reflexionar

¿Desea usted ser un padre presente?

¿Qué se requiere de su parte?

¿Qué resultados desea ver?

15
16
 CAPÍTULO 3: ENTENDIENDO LA FUNCIÓN

Busque la sabiduría de los años, pero vea al mundo

a través de los ojos de un niño. 16

Simplemente no podemos evadir el hecho que hay varones y

hembras—hombres/mujeres, niños/niñas, ambos seres humanos, ambos
especiales. Cuando Dios creó a la humanidad, Él declaró que era “muy
bueno”. Primeramente, creó al hombre del polvo; lo moldeó y lo formó.
Después Dios lo hizo caer en un sueño profundo y formó a la mujer del
cuerpo del hombre. Dios le trajo una compañera a Adán, a la cual aún no
se le había dado nombre. Él declaró, “Esto es ahora hueso de mis huesos
y carne de mi carne; está será llamada Varona, porque del varón fue
tomada” (Génesis 2:23 RV60). Es por esta razón que cuando dos
personas se casan, dejan el dominio de sus padres y se unen, en “una sola
carne”. Ante los ojos de Dios son iguales, pero claramente tienen
funciones muy distintivas.
Cuando cada uno está llevando a cabo sus funciones, el otro se
realza. A la medida que los hijos se van agregando a la familia, ya sea a
través del nacimiento o de la adopción, estos dos ya no son únicamente
esposo y esposa; ahora son padre y madre. Aún son iguales, pero
adquieren responsabilidades claramente diferentes. Algunas sociedades y
culturas manejan esto un poco diferente, pero claramente, desde el punto
de vista del padre y la madre, estos roles no deben ser intercambiados.
Esta semana estaba leyendo Deuteronomio 22:5 LBLA, y me intrigó una
de las leyes que Dios dio a Israel. “La mujer no vestirá ropa de hombre,
ni el hombre se pondrá ropa de mujer; porque cualquiera que hace esto es
abominación al SEÑOR tu Dios”. No es simplemente algo que no

17
debemos hacer, es una abominación. Quizá de aquí sale el dicho de
“¿Quién lleva los pantalones en tu casa?”
Si usted es el que ha sido designado para “llevar los pantalones”
de la paternidad, ¿No piensa que debe conocer un poco, o mucho, acerca
de las responsabilidades que esto conlleva? Cuando uno aplica para un
trabajo, el empleador usualmente provee una descripción de trabajo, una
lista de las responsabilidades primordiales que van con esa posición. Las
personas que aplican usualmente presentan su currículo o una biografía
que demuestra que son calificados para obtener ese trabajo. Para que
salga todo bien, estos dos deben de alinearse perfectamente. Pero
también se espera que, aunque el empleado sea calificado, habrá ajustes y
cambios al trabajar para un nuevo empleador. Lo mismo sucede con la
paternidad.
Examinemos algunas de las cualidades de un hombre común.
“Veamos: 1) Soy un hombre saludable; 2) Estoy casado; 3) Mi educación
es decente; 4) Tengo trabajo; 5) Jugué un poco de deporte en la escuela;
6) Me gustan los niños; y 7) mis padres iban a la iglesia. Bueno, creo
que eso es todo. Me imagino que con el tiempo podría pensar en algunas
otras cualidades”. Como lector, ¿Cómo calificaría a este hombre? Si
usted estuviera calificando a sus hijos, ¿Su calificación sería lo
suficientemente alta para darle uno o dos? Debo admitir que suena como
alguien decente, pero ¿Estará suficientemente calificado para aceptar la
responsabilidad de guiar a una familia con una carga tan preciosa como
lo son los hijos? Simplemente no lo conocemos lo suficiente. Pero
superficialmente, no encontramos evidencia sustancial para indicar que
tiene un buen conocimiento acerca de la crianza de los hijos. Tener hijos,
sí; ¿Pero criarlos? Tal vez o tal vez no.
¿Cree usted que Dios hace este proceso, cada vez que Él decide
que un hombre se convierta en padre de una de Sus criaturas? El mandato
para los primeros padres fue que procrearan: “Sean fructíferos y
multiplíquense; llenen la tierra y sométanla…” (Génesis 1:28 NVI).
Esa era la única estipulación, pero más adelante dio muchas
indicaciones de cómo vivir y las bendiciones que resultan de la
obediencia, y también las consecuencias de la desobediencia. Él no solo
nos colocó en un lugar llamado Tierra y nos dejó a la deriva. Diseñó
leyes de la naturaleza de todo tipo, las cuales son para nuestro bienestar.
La mejor manera de estudiar y entender el manual de la paternidad es
conociendo personalmente a su autor.
Identifiquemos y examinemos los elementos que muchos
definen como características esenciales de un buen padre.

1) Admita que no tiene las cualidades necesarias.

2) Busque ayuda de buenos ejemplos.
3) Escuche a su esposa.
4) Ore bastante.

Eso es todo. Caso cerrado. ¡Listo! Francamente, es todo lo que hay.

Vemos la humildad, y sí que es humillante. Vemos a un hombre que
busca consejo y vaya que lo necesitará. Es suficientemente hombre para
buscar perspectiva de su pareja, su compañera de una sola carne. Y la
oración lo conecta con aquel quien lo hizo hombre y tiene el poder para
ayudarle a terminar bien la carrera. No dije terminar de manera perfecta;
dije terminarla bien.
Quizá usted se parece a muchos de nosotros. Antes de los aparatos
de navegación, quizá este haya sido el desenvolvimiento de un viaje
familiar. Como el “hombre”, yo estoy manejando. Veo el mapa; me
ubico más o menos. Lleno el tanque y acomodo las maletas, y mi esposa
sugiere que llevemos un mapa por si lo necesitamos. Después de un
pequeño debate, para apaciguarla, cedo a la mujer que estará como
“copiloto”. Poco tiempo después de partir nos encontramos con
construcción en el camino. Nos encontramos con desvíos. Pero aún estoy
ubicado. No hay problema. Comienza a oscurecerse. Pienso, pareciera
que nunca vamos a llegar a la calle principal. De repente ella hace la
pregunta equivocada, “Cariño, ¿Estamos perdidos?” Con esa pregunta los
niños quieren saber si “ya llegamos”. Estamos bien; llegaremos en un par
de millas. Luego viene la pregunta letal. “Amor, ¿Hiciste las
reservaciones en el hotel que discutimos la semana pasada? Tenía una
piscina para los niños, y tenemos un poco de hambre. Cielo, crees que
quizá… quizá ¿Deberías parar y preguntarle a alguien?” ¡Hasta aquí
llegué! ¿Se atreve a poner en duda mi hombría?

19
 Muchos hemos experimentado una situación similar a esta. Como
padres muchos iniciamos la paternidad con pocas credenciales o
preparación, y cuando nos descarrilamos, somos demasiado orgullosos
como para pedir consejo, o aún escuchar a nuestra pareja. Se pregunta,
“¿Qué saben ellos acerca de mi función?” Al mismo tiempo, los hijos se
vuelven rebeldes e impacientes a la falta de sabiduría y liderazgo. Es
tiempo de detener el vehículo. Salga, respire profundamente, y encuentre
dirección. “Donde no hay buen consejo, el pueblo cae, pero en la
abundancia de consejeros está la victoria” (Prov. 11:14 LBLA).
Quizá alguno de ustedes tuvo un padre ideal del cual recibió consejo
sabio y dirección en esta experiencia de ser padre. Pero todos los demás
aprendimos en el camino, como dicen, en el camino se acomodan las
cargas. Y uno de los grandes retos, aun para los más preparados, es el
cambio de cultura entre las generaciones. La idea que “Yo voy a criar a
mis hijos como yo fui criado” no es la mejor manera de aprovechar el
tiempo. Créamelo, lo he intentado. Yo crecí en un pueblo pequeño.
Nosotros criamos a nuestras hijas en una ciudad grande. ¡Hay una gran
diferencia! Las estrategias que se requerían eran diferentes.
Regresemos al rol.
Como hombre, usted ha sido comisionado para asumir el liderazgo
principal en el hogar.
Con la ayuda adecuada, estará bien preparado para asumir ese rol.
Este liderazgo no solamente lo incluye a usted, incluye a toda su tropa
(esposa e hijos).
Usted es el líder “espiritual”, la fuente primordial de sabiduría y
conocimiento.
Aun cuando la disciplina se les pide a ambos padres, a la larga, recae
sobre el papá.
Las decisiones finales, en última instancia, son su responsabilidad;
¡asuma esa responsabilidad!
Usted debe modelar su función de una manera que haga prosperar a la
familia.
Debe continuar perfeccionando sus habilidades como padre.
Entrene a sus hijos, no los controle.

20
 Debe desarrollar la habilidad de escuchar para tener una
comunicación constructiva.
Inviértase a sí mismo en sus hijos.
Su mirada debe enfocarse en el privilegio que se le ha concedido de
entrenar a la próxima generación.

Para lograr esto y más, debe estar presente y comprometido. Los

padres informados, conscientes y receptivos toman las mejores
decisiones. Y si se pudiera resumir todos estos siguientes capítulos, en
una palabra, seria ¡discipulado! La función es simplemente ser un
discipulador.
Nada de lo que se ha mencionado hasta aquí se puede lograr con
un machismo egocéntrico y duro. Simplemente fracasará,
miserablemente. Pero existen demasiados hombres que usan su tamaño o
posición para demandar respeto en vez de ganárselo. Hombres, a la larga,
eso es lo que añoramos- respeto. Cómo nos perciben nuestros hijos como
padres, determinará la manera en la que obtenemos el respeto. No
podemos engañarlos. Ni lo intenten. Y recuerden, ellos deben ser
inteligentes porque son sus hijos. De hecho, verá que ellos son mucho
más inteligentes de lo que usted era a esa misma edad.

Preguntas para Reflexionar

¿Tiene una mejor comprensión del papel que desempeña como padre?

¿Qué áreas ya está desempeñando ahora?

¿En qué áreas necesita mejorar?

¿Está dispuesto a poner el esfuerzo necesario?

21
22
 CAPÍTULO 4: AMANDO
El amor es paciente y bondadoso.
El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo.
No exige que las cosas se hagan a su manera.
No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas.
No se alegra de la injusticia
sino que se alegra cuando la verdad triunfa.
El amor nunca se da por vencido,
jamás pierde la fe,
siempre tiene esperanzas
y se mantiene firme en toda circunstancia.

--Apóstol Pablo
I Corintios 13:4-7 (NTV)

Hombres, tanto para ustedes como para mí, este es “el” reto más
grande que tenemos. Es una batalla difícil para la mayoría de nosotros.
La mayoría simplemente no sabe cómo amar. Tristemente me atrevería a
decir que las palabras “te amo” no están dentro de nosotros. Quizá no
fueron palabras que escucharon de parte de su padre cuando eran
pequeños. En su gran mayoría las personas de mi generación creíamos
que nuestros padres nos amaban, más sin embargo nunca lo escuchamos.
Hace varios años participé en un estudio bíblico con hombres de mí
misma edad. Un día la discusión se centró en este tema. De los cinco
varones que estábamos en el grupo, solamente uno había escuchado a su
padre alguna vez decirle “te amo”. ¿A mí me hubiera gustado
escucharlo? ¡Absolutamente!

23
 Pero como hombres, estamos más enfocados en el respeto que
en el amor. Damos respeto y esperamos recibirlo. El amor parece ser un
atributo difícil pero no necesario. “Yo sabía que mi padre me amaba,
pero nunca me lo dijo”. ¿Cuántas veces he escuchado esto a través de los
años? Demasiadas, eso es seguro. Entonces, si ésta es una pregunta tan
frecuente, ¿Podemos asumir que es un “aspecto importante” en cuanto a
la paternidad? Seguramente se pueden decir las palabras entre tus labios,
sin afirmarlo con acciones. Pero yo les sugiero que no puede ser palabras
o acciones solamente, más bien ambas las palabras y las acciones.
El mejor y más grande ejemplo que podemos encontrar está en
la Biblia en un versículo muy conocido por la mayoría de las personas,
Juan 3:16. “De tal manera amó Dios… que dio”. Y cuando Jesús fue
bautizado; un evento importante en la vida de cualquier persona, una voz
se escuchó que dijo “Este es mi hijo en el cual tengo complacencia”.
Usted como hijo, ¿No quisiera escuchar esas palabras en cualquier
momento y en cualquier lugar? Después de haber dicho estas palabras a
su Hijo, tres años más tarde Dios sacrificó (dio) a Su Hijo en una cruz
por la redención de nuestros pecados. No fueron palabras únicamente,
sino que también lo demostró. Pero pueda ser que usted se pregunte,
“¿Por qué un padre sacrificaría a su hijo? Eso no parece ser muy
amoroso; más bien parece cruel”. La respuesta a esta pregunta se
encuentra en la misma Escritura. El Padre y el Hijo ya habían
determinado que la muerte del Hijo era el único medio por el cual
podrían mostrar su grande amor, y redimirnos del juicio del pecado. Y al
creer (confiar) en esto, nosotros somos adoptados como hijos de Dios. El
Padre Celestial demostró Su amor por nosotros a través de Su Hijo. El
último acto de amor hacia Su Hijo en la tierra fue la resurrección,
levantándolo de los muertos y sentándolo a Su diestra.
Ahora, no es muy probable que a usted y a mí se nos pida que
demostremos nuestro amor en esta manera, dando nuestra vida por
nuestros hijos. Pero hay ocasiones en que esto sí sucede, y tenemos
muchas historias que lo confirman. El punto es que ésta fue la máxima
demostración del amor, tanto en palabra y en hecho. Este debe ser
nuestro modelo para seguir. Ni Dios Padre ni el Hijo necesitan o quieren
nuestro respeto. Tampoco nuestros hijos. Ellos quieren y necesitan
escuchar (y ver) que los amamos, tal como son, no solamente después de

24
que “arreglen sus vidas”. Ayudarles a mejorar y actuar de buena manera
es otro tema aparte. Eso es algo que se solucionará con más facilidad
cuando saben que se les ama incondicionalmente. Jesús no murió por
nosotros después de que enderezáramos nuestros caminos, o con la
condición de que arregláramos nuestra vida, lo hizo aun conociendo a
cabalidad nuestra desobediencia. Hombres, ¡eso sí que es amor! Es ese
tipo de amor que crea un ambiente en el cual como familia podemos
enfrentarnos a los retos de la vida, juntos.
Entonces, ¿Qué es el amor? No estamos hablando de las escenas
de amor que presenta Hollywood ni del amor fraternal. Y tampoco es
“Yo amo la comida Cajún” o “amo mi carro nuevo”. Estas son
expresiones de afecto por algo que lo beneficia a usted. El amor es una
emoción del corazón, no del paladar. 17 Estamos hablando aquí de las
expresiones de palabra y de hechos que resaltan las mejores cualidades
del objeto de esa devoción sin la necesidad o expectativa de recompensa
alguna. Lo que usted hace o dice es por el bienestar de la otra persona, en
el caso del padre, los hijos.
Interesantemente, las Escrituras mencionan a Jesús diciendo en
Juan 14:15, 21, “si Me aman, Me obedecerán… y si Me obedecen,
demuestran que Me aman” (mi paráfrasis). Esto indica que el amor no
siempre tiene que ver con las emociones; de hecho, la mayoría de las
acciones de amor no se hacen por emoción sino por voluntad (una
intención deliberada). Sencillamente, esto es lo mejor para mis hijos.
Usted demuestra su amor por ellos al actuar en obediencia a la Palabra,
su conciencia, los consejos que ha recibido o una orientación moral. Y la
respuesta obediente de su hijo demuestra su amor por usted. No hay
emociones, (bueno, esperemos que no), simplemente hay obediencia.
Las acciones y expresiones que requieren sacrificio, y no son
correspondidas reflejan el amor a su nivel más profundo. Dios utilizó una
palabra griega antigua para definir este amor ágape. Cuando Jesús reta a
Pedro tres veces acerca de Su amor por Él en Juan 21, la tercera vez le
pregunta, “¿Me amas de una manera ágape?” Y el acto de supremo amor
ágape fue el sacrificio de Su Hijo por nosotros.
Hay un video conmovedor en YouTube que he visto varias
18
veces. Quizá usted lo ha visto también. Esta historia verídica es uno de

25
los actos de amor profundo y desinteresado que jamás haya visto. No
podría describirlo con el mismo impacto, así que le animo- no, le exijo-
que vaya a Google y busque ironman triathlon, Dick and Rick Hoyt y lo
vea por sí mismo para que obtenga el impacto completo. Pero, haré el
mejor intento de expresar este amor ágape entre padre e hijo. El
muchacho y su padre participan como equipo en carreras de Ironman
Triathlon (Triatlón Hombre de Hierro) a través del mundo. ¿Por qué
juntos? Porque el hijo es parapléjico. Ellos (mejor dicho, el padre),
corren, montan bicicleta y nadan. El padre se ha dedicado con gozo para
que su hijo cumpla su pasión. Por todo el sacrificio que este padre ha
tenido que hacer al entrenar y aguantar las demandas agotadoras tanto
físicas como mentales, él gana mi voto para el padre de la década.
Simplemente lo hace porque ama a su hijo. ¿Alguno de nosotros estaría
dispuesto a invertir el esfuerzo necesario, dejando a un lado nuestros
deseos egoístas por el bienestar de nuestros hijos? Quizá haya otros
héroes iguales. Necesitamos más como ellos.
El amor emocional es bueno y el amor que proviene de la
voluntad es bueno, pero juntos, son excelentes. Dar abrazos, besos, un
“chócala”, una palmada en la espalda, palabras de ánimo y expresiones
verbales de “te amo” demuestran el amor por su hijo. Pero hay momentos
en que las emociones deben dejarse a un lado y las decisiones difíciles se
deben tomar. Algunos llaman a estas decisiones el tener un “amor firme”.
Estas decisiones no hacen que el amor sea menos—son necesarias, claro,
pero no le quitan el valor a su amor.
Se dice que el amor cubre la multitud de pecados. Como padres,
cometemos todos los errores habidos y por haber; por lo menos yo los he
cometido. Pero si sus hijos saben que usted los ama, podrán aceptar aun
esas malas decisiones, especialmente si el padre pide perdón. Pueda ser
que este proceso lleve tiempo, especialmente para que lo lleguen a
perdonar. Pero, por su propia salud, eventualmente ellos necesitan
perdonarle. No descargue todos los asuntos sobre ellos de una misma
vez. Comience por demostrarles cuánto los ama y vaya mencionando los

26
asuntos que necesitan ser abordados, durante los momentos que se
brindan como la mejor oportunidad.
En I Corintios 13, la Biblia nos dice que hay tres cosas que
perdurarán: la fe, la esperanza y el amor, y el mayor de estos es el amor.
Nada puede igualarlo o reemplazarlo en una relación. Un buen punto de
partida para mostrar el amor es siendo honestos y auténticos. Les
garantizo que en años venideros sus hijos verán hacia atrás y reconocerán
que su padre cometió errores, pero siempre sabrán que los amaba. Qué
gran confianza la que esto inculca en los niños que pronto serán adultos.
Cuando ellos entienden que su padre los ama, están preparados para vivir
una vida llena de fe y esperanza. Sin esa confianza es virtualmente
imposible desarrollar una vida con estos atributos.
Hay un juego que se llama Mostrar y Contar. El amor funciona
de la misma manera. ¿Cómo puedo mostrarles a mis hijos cuanto los
amo, y cuando será la próxima vez que se los diré? Y no estamos
hablando aquí de comprar el amor con dinero o cosas. El mostrar y
expresar amor es involucrarse con ellos. No hay mayor regalo que usted
mismo, con todo y sus defectos. Dios nos dio su mayor regalo: a Sí
mismo a través de Su Hijo. Y Él no se equivocó cuando lo colocó a usted
como el padre de sus hijos. El mayor mandamiento en las Escrituras,
tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento es, “Ama
al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente.
El segundo se parece a éste—ama a tu prójimo como a ti mismo” (Mateo
22:37-40 NIV). ¿Tenemos algún prójimo más cercano que nuestra propia
familia, nuestra propia sangre? No hay que buscar más allá que sus
propios hijos. Pueda ser que a cambio reciba bendición. Pueda ser que
ellos comiencen a mostrar su amor hacia usted. ¿No cree que eso sería
especial?
Dejé este detalle para lo último a propósito. Es un tema que
requiere otro libro entero. Padres, no se equivoquen, si no aman a la
madre de sus hijos y se lo demuestran, la mayoría de lo que le enseñe e
instruya a sus hijos les entrará por un oído y les saldrá por el otro. ¿Por
qué? Porque eventualmente lo verán como un hipócrita y sus hijos lo
podrán notar enseguida. Ellos tienen buen ojo para esto. Sus palabras y

27
acciones serán vacías, sin sustancia. Aquí es donde surge el aspecto de
moldear. Hay demasiados hogares que se mantienen unidos “por el
bienestar de los hijos”. Pero realmente, es como poner un cartucho de
dinamita con una mecha larga bajo de ellos. Eventualmente, explotará y
será un gran desastre. No traten de engañarlos. Si están teniendo
dificultades en su matrimonio; en la relación con la madre de ellos,
derrame su alma y busque perdón y restauración. Enfrente la situación.
La Escritura es muy clara acerca de esto. Efesios 5:25 RV60 nos
exhorta, “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la
iglesia, y se entregó a sí mismo por ella”. ¿Es fácil? No; ¿Posible? Sí.
¿Solo? No; ¿Con la ayuda de Dios? Sí. ¿Vale la pena?, ¡Claro que sí! ¿Es
necesario?, ¡Absolutamente! Este pueda ser el punto de partida de su
jornada.

Preguntas para Reflexionar

¿Alguna vez su padre le dijo que le amaba? ¿Cómo se sintió?

¿Alguna vez le ha dicho “te amo” a sus hijos?

¿Está dispuesto a iniciar este proceso de cambio diciéndoles que los ama?

¿Sus hijos dirían que usted les ama?, y también ¿Los ama
incondicionalmente?

Haga una lista de maneras específicas que demostrará su amor. (Utilice

papel adicional si fuera necesario).

28
 CAPÍTULO 5: ORANDO

Perseverad en la oración, velando en ella

con acción de gracias.

--Apóstol Pablo
Colosenses 4:2 LBLA

Si yo les compartiera un dato absoluto que anula cualquier otro

atributo como padre, es el ser un hombre de oración. Muchos hombres
les dirán que esto no es necesario. Debo admitir que yo he conocido a
padres aparentemente exitosos que tienen buenos hijos, pero
probablemente nunca hayan elevado una tan sola oración. Pero creo que,
como padre, usted debe determinar lo que quiere lograr a través de su
paternidad como un resultado final en sus hijos. En cuanto a mí, debo
admitir que yo solo no era lo suficientemente sabio ni lo suficiente fuerte
para lograrlo, entonces busqué ayuda y dirección divina a través de la
oración.
Algunos de ustedes estarán emocionados con esto, mientras
otros están diciendo, “Bill, nunca he orado en mi vida, y aun así no salí
tan mal”. Algunos otros responderán que ni si quiera saben que es la
oración o como se debe orar. Y puedo apostar que hay algunos escépticos
que están pensando, Eso es algo para que hagan las viejitas, pero no
para mí. Muchos han experimentado o escuchado historias de cómo le
pidieron algo a Dios que nunca les concedió. “Le pedí a Dios que mi
padre se mejorara cuando yo era niño, y Dios dejó que se muriera de
todos modos”. No hay duda de que hay un sinfín de reacciones a los
pensamientos referentes a la oración en general, especialmente cuando
tiene que ver con nuestros hijos.

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 La oración es un tema complejo, pero al mismo tiempo sencillo.
Está bien decir “no sé cómo orar”. Los primeros discípulos le admitieron
a Cristo cuando anduvieron con Él que no sabían cómo orar. Él no los
condenó, sino que les enseñó como orar en El Padre Nuestro, en Mateo
6:9-13. Les dio un formato para la oración. Luego Él dejó que ellos
llenaran los espacios en blanco, basándose en las necesidades y deseos de
sus corazones.
Muchas personas creen que la única oración que Dios escucha
de parte de un pecador impenitente es cuando la persona pide perdón por
sus pecados, confiesa que no puede salvarse por sí mismo y confía en
Cristo Jesús para su salvación. En ese momento, Su Espíritu Santo llega a
residir en su vida y comienza a enseñarle como orar y porque cosas orar.
Algunos de ustedes quizá quieran detenerse un momento y
ponerse a cuentas con Dios ahora mismo. Al final de este libro he
incluido una oración que puede ser usada como guía, si les ayuda a
expresar el deseo de su corazón. Entienda que no es la oración la que
salva, sino el acto de fe cuando usted pone su confianza en Cristo por su
muerte en la cruz. Él resucitó de los muertos y ofrece una vida en Él por
la eternidad.
La Biblia contiene muchos escritos acerca de la oración. Tal vez
quiera desempolvar su Biblia o conseguir una nueva que tenga una
concordancia, la cual puede dirigirlo a capítulos y versículos específicos.
Y para aquellos que entienden bien la tecnología, el internet es un recurso
extenso para estudiar cualquier tema en la Biblia; así que no tenemos
excusa. El acceso está allí. ¡Haga el esfuerzo!
La oración simplemente es compartir con Dios lo que está en su
corazón y estar dispuesto a escucharle por los diferentes medios que Él
nos responde. Después de iniciar una relación con Dios a través de Su
Hijo, Jesús; tenemos una reserva de tesoros a nuestro alcance a través de
la oración. Hasta milagros pueden suceder, como que sus hijos crezcan
bien a pesar de su manera de criarlos o la falta de crianza. Si creen, así
como creo yo, que Dios les dio estos hijos específicos para criarlos para
Él, y que Él conoce sus necesidades mucho más de lo que usted las
conoce, ¿Por qué no tiene sentido buscar Su ayuda? Solo a manera de

30
ejemplo, si usted tiene una cuenta en el banco con millones de dólares a
su disposición, y su familia pasa hambre cada mes y está luchando por
sobrevivir, ¿No tendría sentido el ir a la cuenta y sacar dinero para
mejorar sus vidas o aun salvárselas? Hay tantas promesas en la Biblia, y
Él nos ruega que le pidamos, lo busquemos y llamemos. Esto significa
que Él nos escucha y está listo y dispuesto para ayudar. Y, a diferencia de
los padres terrenales, Él sabe lo que es mejor para usted como padre y
para sus hijos.
El ser padre probablemente es el trabajo más grande y más
difícil que cualquier persona pueda tomar. Muchos de nosotros podemos
acertarlo. Hombres, sencillamente es una enorme responsabilidad.
Algunos de ustedes tienen posiciones de liderazgo en empresas u otros
lugares. ¿Se atrevería a ejecutar los objetivos de su posición sin asegurar
primero la mejor ayuda y consejo que pudieran tener para tener el mejor
éxito? Bueno, para la labor de padre, usted tiene la mejor ayuda posible,
y es una ayuda gratis e inagotable. Es la oración.
Para alguno de ustedes, la oración debe iniciar confesando que
usted no puede desempeñar o no ha hecho bien el trabajo o lo que se ha
solicitado. ¿Sabía usted que el confesar es simplemente estar de acuerdo
con Dios? Él ya sabe que usted es inadecuado. No va a sorprenderle a
Dios al decírselo. Simplemente admítalo, arrepiéntase, y busque Su
ayuda. Estará maravillado de las muchas maneras que le proveerá ayuda.
Para otros, simplemente se trata de ajustar o sintonizar su vida
de oración y reajustar sus oídos a Su voz.
La mejor manera de escuchar Su voz es a través de Su Palabra,
la Biblia. Esto hace que su vida de oración sea más efectiva.
Si me lo permite, me gustaría dar un poco de mi testimonio, de
mi vida de oración concerniente a mi familia, mis hijos y ahora mis
nietos. Siempre he orado de alguna u otra manera desde que era niño.
Pero hace algunos años me impactó la realidad de que yo, dentro del
tiempo y el espacio limitado que tengo, no podía estar, cuidar y dirigir
cada momento de la vida de mis hijas. A medida que se fue desarrollando

31
mi vida de oración, claramente pude ver que la herramienta más efectiva
en la crianza de mis hijas era la oración. Dios es omnipresente, y yo no,
entonces, ¿Por qué no dejarlas en Sus manos cada día, por fe
intercediendo por ellas, hoy y por la eternidad?
Entonces, eso es lo que hago. En forma breve, entrego a mi
familia a Su cuidado cada mañana, y oro por cada uno por nombre y por
las diferentes circunstancias y necesidades. Durante el día, cuando vienen
a mi mente, intercedo por ellos en oración. He encontrado fortaleza,
consuelo y paz al confiárselos a Aquel quien los creó, sabiendo que Él
conoce sus necesidades a cada momento, mucho mejor que yo. Y como
también es un Dios omnipotente (tiene todo el poder) y omnisciente
(todo lo conoce), ¿Qué puede ser mejor que Él para el bienestar de mis
hijas y mis nietos?
Los versículos lema de mi vida son Mateo 6:33-34 (RV60)
“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas
cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana,
porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal”.
Cada día es un regalo. Cada día tiene sus propios problemas. Para mí, la
vida es como una caja de sobres llenos con las provisiones para cada día.
Las provisiones de ayer ya se acabaron, y las de mañana aún no han
llegado. Cuando vivo un día a la vez, puedo iniciar el día abriendo un
nuevo sobre y saber que ya se ha provisto para las necesidades de hoy.
Me recuerda que necesito estar en oración desde muy temprano y
confiarle mi día a Dios—confiarle a mi esposa, mis hijas y mis nietos.
Sin duda hay otras áreas que se incluyen en mis oraciones, pero en
cuanto a mí como padre, tengo ese privilegio y responsabilidad como
padre de familia. Para que pueda orar más efectivamente, se requiere que
usted busque, pregunte y observe las necesidades de su familia. Dios le
guiará a saber cómo orar por esas necesidades.
Uno de nuestros pastores recientemente predicó un sermón de
un Credo Puritano y su tema era “Ore hasta que usted ore”. ¿Qué? Hay
ocasiones en que cada uno de nosotros ora de una manera inactiva, sin
sinceridad o sin mucha atención. Son oraciones rutinarias, habituales. Lo

32
que los Puritanos estaban tratando de decir era que hay que poner
atención e involucrarnos en las peticiones que le presentamos al Señor,
sea cual sea el tema. Permanezca ahí lo suficiente hasta que empiece a
sentir la profundidad espiritual en la oración, la unión con Dios, como
que si uno pudiera sentirlo y tocarlo. Santiago 4:8 RV60 dice “Acercaos
a Dios, y Él se acercará a vosotros”. Además, Pablo escribe, “Por nada
estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con
acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de
Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará
vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús”. (Fil 4:6-7 LBLA)
¿Quisiera tener ese tipo de paz?
Si no estuviera convencido de que existen fuerzas que
diariamente trabajan para derrotar a mis hijas, entonces no tendría la
necesidad de la oración. Pero como sí lo creo, oro como que si todo
dependiera de mí, pero le confío los resultados a Dios. Pueden decirme
anticuado y que estoy fuera de lugar, pero saber que mi familia está
segura en Sus manos simplemente me ayuda a funcionar cada día. No
significa que cosas malas no les suceden, más sin embargo tengo la
seguridad que todo es filtrado a través de las manos amorosas de Dios.
Recientemente escuché a una de mis hijas contarle a alguien que
uno de los recuerdos de su niñez, era observar a su papá orando por ella,
y lo mucho que eso significó en su vida. Yo he escuchado testimonios
una y otra vez de otras personas acerca de este tema. ¿Puede usted
imaginar la seguridad que deben sentir los hijos cuando saben que su
padre ora por ellos? En algunas ocasiones he escrito mis oraciones en una
libreta. Joanne escribe sus oraciones diariamente, al igual que muchos
otros. Se puede ver la mano de Dios obrando en nuestras vidas, y al
llevar un registro de ellas nuestra fe crece y podemos seguir adelante
siendo más audaces en nuestras oraciones.
De igual manera, si no es que, de mayor importancia, es el
hábito de orar junto con sus hijos. No se puede medir el valor que tiene el
hecho que un padre acueste a su niño pequeño y ore con él. En primer
lugar, le está enseñando a su hijo como orar, y, en segundo lugar, usted
se convierte en el canal de conexión entre ellos y el Padre Celestial. Ellos
ven a Dios a través de usted.

33
 Para los hijos más grandes, tiempos específicos de oración son
bien recibidos. Pueden ser tiempos donde hay preguntas, situaciones
difíciles o tribulaciones; sea lo que sea. Simplemente hay algo bueno que
les sucede a ambos cuando ora con su hijo. Pueden orar en las comidas
en casa, cuando salen a comer o por teléfono cuando están lejos o durante
el día si necesitan un consejo. Pueden estar seguro de que ellos llamarán
a su papá si saben que el orará por ellos y con ellos. Todas estas cosas
demuestran que la oración es muy importante.
Le sugiero muy firmemente que no adopte el hábito de decir
“oraré por usted o por esa situación”, porque la mayoría de nosotros no lo
hará. Ore en ese mismo momento y si después viene a su mente esa
petición, puede orar otra vez también. Enfrentemos la realidad, amigos,
ustedes no saben todo, sobre todo. Y aún más importante, después de los
tres años, nuestros hijos saben que no lo sabemos todo. Entonces, ¿Por
qué buscamos sabiduría en una reserva limitada? En vez de eso podemos
recurrir al tanque que desborda de sabiduría. Dios nos dice en Santiago
1:5 “Si nos falta sabiduría, pidámosle a Él, y Él nos la dará libremente y
sin reproche” (mi traducción).
Para ustedes que son “machos”, esta parte de la paternidad
pueda que sea difícil. Yo conozco a un hombre grande. Cuando recién lo
conocí en los años 70, para mí él era uno de los hombres más grandes
que jamás haya conocido. Él jugó en la NFL cuando hombres eran
hombres y fue premiado como el mejor jugador de los Cleveland Browns
cuatro veces. El invierte mucho de su tiempo en las prisiones hablando y
predicándole a los hombres. Escribió un libro que recomiendo y que
muchas veces regalo a padres de todas las edades. Su nombre es Bill
Glass y el libro se titula Champions for Life (Campeones de por Vida).
Apuesto que usted puede identificarse con él. Y él ora. ¡Imagínese!
No hay oración demasiado pequeña o insignificante a los ojos
de Dios. Las Escrituras nos dicen que Jesús es nuestro sumo sacerdote y
que intercede por nosotros a la diestra del Padre las 24 horas al día, los 7
días de la semana. Eso me dice que Él está interesado y dispuesto a
recibir nuestras peticiones. Él le dio a su familia y lo hizo a usted el

34
“sacerdote”, y el “pastor” de su rebaño. Búsquelo. Él está esperando-
esperando ansiosamente- escucharlo a usted. Su número es gratis.
Llámelo. Usted disfrutará la conversación. Para aquellos que no han
llamado desde hace algún tiempo, dedique un tiempo para ponerse al día
y a cuentas con Él antes de presentar sus peticiones. Él lo apreciará.

Preguntas para Reflexionar

¿Es usted un hombre de oración? ¿Cree que le importa a Dios?

¿Con qué frecuencia ora? ¿Es adecuada?

¿Ora específicamente por cada uno de sus hijos?

¿Sus hijos saben que usted ora por ellos?

¿Ora usted con sus hijos?

¿Alguna vez ha intentado orar y después realmente esperar a que Dios

actúe?

35
36
 CAPÍTULO 6: MODELANDO

Las personas pueden dudar de lo que diga,

pero creerán lo que hace. 19

—Lewis Cass

“Es mejor lo que se capta que lo que se enseña” es una frase

antigua muy conocida, y es verdad. En la mayoría de las ocasiones, las
acciones hablan más claro que las palabras. Los niños a casi cualquier
edad absorben todo y lo procesan como si fuera verdad, especialmente
entre uno y seis años. Después de eso parece que sus mentes comienzan a
desafiar lo que han aprendido. Tienen una capacidad enorme. Usted debe
entender que ellos no saben nada cuando entran a este mundo, así que
todo es nuevo para ellos. Y como tienen un gran interés, se enfocan
grandemente en cada nuevo dato de información, el cual es guardado de
manera especial, tanto en el consciente como en el subconsciente.
Créanle a este abuelo, ellos observan cada paso que usted toma. De
hecho, después de un tiempo comienzan a anticipar sus acciones. En su
mayoría, todo lo que han aprendido hasta este momento ha influenciado
y formado sus vidas.
Así que, ¿Cuáles de las cosas que usted está modelando quiere
que capten sus hijos, especialmente su hijo mayor? Los hijos mayores no
tienen hermanos mayores de quien aprender; así que, papá, por lo
general, usted es el que le enseñará. Mencioné anteriormente una canción
de 1974 que contiene verdades muy profundas, “Cat’s in the Cradle” (El
Gato está en la Cuna) por Harry Chapin. Si uno es padre, estas palabras
son escalofriantes. La letra completa de esta canción se encuentra en el
capítulo uno. En la canción, el hijo comparte una de las frases más
reveladoras: “Yo voy a hacer como tú papá. Sabes que voy a ser como
tú”. Hacia el final de la canción el padre exclama dolorosamente, “El

37
creció justo como yo. Mi hijo es exactamente como yo”. ¿Usted quiere
que sus hijos sean “como usted”? Algunos contestarán esta pregunta de
manera afirmativa, pero para muchos, esto es aterrador.
A medida que uno va modelando, debe asegurarse que sus hijos
entiendan que usted no es un modelo perfecto. Sus hijos necesitan ver sus
cicatrices y saber que usted ha cometido errores. Usted mismo debe
compartirles que hay consecuencias por desviarse y seguir un camino
equivocado. La transparencia es una fortaleza. Ellos necesitan ver sus
debilidades, porque muchos hijos ponen a sus padres en pedestales con la
idea de que su viejito, siempre tenía todo bajo control. Esta transparencia
hará que usted se dé a querer y les asegura que es normal fallar, sabiendo
que usted mismo ha fallado, pero se volvió a levantar y la vida sigue.
Un modelo debe representar o reflejar la intención del diseñador
o creador:

¿Qué está tratando de reflejar usted?

¿Qué/quién es el original que usted está tratando de representar?
¿Qué quiere que sus hijos vean en usted?

Estaría dispuesto a decir lo que Pablo le dijo a Timoteo en 1

Corintios 4:16 RV60: “Por tanto, os ruego que me imitéis”. Después
exhorta a sus seguidores a “ser imitadores de mí (¿Cómo?), al igual que
yo pues también soy de Cristo”. Jesús era el modelo de la humildad, y
¿Cómo lo demostró? Él dijo claramente en Juan 5:19 RV60 “De cierto,
de cierto os dijo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que
ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el
Hijo igualmente”. También dijo, “El que me ha visto a mí, ha visto al
Padre” (Juan 14:9b RV60). Aquí lo vemos una vez más—un “vivo
retrato”. Simplemente modeló los atributos de su Padre, los cuales son
infinitos.
Cuando estaba pequeño, los modelos o maquetas de avión, eran
muy populares, especialmente entre los niños. Teníamos todas las partes
necesarias, y teníamos los planos, así que seguíamos las instrucciones
para crear nuestro avión. Qué tan bien seguíamos las instrucciones y

38
poníamos atención a los detalles influía directamente en el resultado, un
buen avión o uno no tan bueno. El modelo era un reflejo de un avión real.
Simplemente era un modelo, una representación en una escala mucha
más chica. ¿No llegan a ser eso nuestros hijos, una representación suya
en una escala más pequeña?
Todos hemos dicho o escuchado “de tal padre, tal astilla”, o “su
hijo es idéntico a usted”. ¿Alarmante? Espero que no, pero quizás si lo
sea. En inglés hay una frase que describe esto que dice “la manzana no
cae lejos del árbol”. ¿Qué tipo de fruto producirá lo que usted está
modelando? Se requiere mucho tiempo para que un árbol frutal crezca
desde que germina la semilla hasta que pueda producir su fruto. Es lo
mismo con sus hijos. Ellos tienen un número limitado de años antes que
comiencen a imitar lo que han visto, escuchado y aprendido. Los árboles
de manzanas simplemente no producirán melocotones. Las semillas de
reproducción están en la fruta. Si usted ha sembrado y cuidado sus
“árboles frutales”, ellos producirán la fruta deseada y de igual manera
probablemente sembrarán las mismas semillas en la próxima generación.
¿Alguna vez ha visitado una hortaliza, de cualquier tipo, que no
se ha cuidado, que está frondosa, infectada con plagas, no ha sido ni
podada, fertilizada, ni regada? No se ve muy bonita, y lo peor del caso es
la condición de la fruta, si es que la hay. Alguien que siembra una
hortaliza, pero no le da el cuidado necesario es un hombre necio. ¿Por
qué sembrar árboles los cuales no cuidará? Es lo mismo con su
descendencia, su semilla. Necesita ser alimentada, recortada
(disciplinada) y un cuidado de una manera amorosa. ¿Cómo quiere usted
que sea su futura “hortaliza”? ¿Qué se requiere para lograrlo?
Una de las ilustraciones más gráficas son los modelos, hombres
y mujeres, que aparecen en la televisión, las revistas, en las tiendas o en
la pasarela. Han bombardeado nuestra sociedad. Nuestra cultura está
obsesionada con ellos. Lo que vende la Avenida Madison es un estilo
adecuado para usted. Cada modelo ha pasado por un régimen muy
intenso para presentar “la imagen perfecta”. Muchos dicen “me muero
por verme como ellos”. Nos imaginamos que nos veremos igual que ellos
con ese traje que están modelando. La mayoría de la humanidad no se
verá como ellos. Somos chaparros, gorditos, no tan bien parecidos, etc.

39
Pero por lo menos nos lo podemos imaginar, ¿No es cierto? Ese es el
propósito de modelar— crear un deseo en otros de parecerse a ellos.
Todos se recuerdan del hombre Malboro. El hizo que la gente pensara Si
fumo Malboro, seré fuerte, guapo, alegre y mucho más. Debo confesar,
durante los pocos años que fumé, lo único que logré fue un mal sabor de
boca y tos.
En el diccionario Webster la palabra modelo, cuando se usa
como adjetivo, significa “digno de imitar”, como un ciudadano modelo,
entre otras cosas. Como sustantivo significa “alguien digno de imitar”,
por ejemplo, “cada niño necesita un modelo”. 20 ¿Está usted intentando
serlo para sus hijos? No debe esperar ser perfecto, pero sí debe trabajar
para alcanzar ese llamado supremo a la perfección.
Analice el modelo que usted está presentando.
Evalúe honestamente esas áreas que, si fueran imitadas, serán
dañinas o perjudiciales para la próxima generación, sus hijos.
Fíjese metas para mejorar en esas áreas. Concéntrese en las
áreas que está modelando positivamente y afínelas.
Pregúnteles a su esposa y sus hijos qué aspectos positivos o
negativos ven ellos en usted. Ellos son los que lo conocen mejor que
nadie.
Así como en la canción, pueda ser que algún día tenga la
bendición que su hijo diga “Crecí justo como tú, papá, soy igual que tú”.
¿No valdrá la pena de todo el esfuerzo que se puede traer a la crianza de
los hijos si llegamos a oír estas palabras?

Preguntas para Reflexionar

¿Está modelando lo que quiere que sus hijos imiten?

De lo que está modelando, ¿Qué acciones necesita corregir y cambiar?

40
¿Sus hijos lo considerarían como uno de sus modelos principales?

¿Quiere que sean igual que usted?

41
42
 CAPÍTULO 7: MENTOREANDO

Nunca me digas que el cielo es el límite

cuando hay huellas en la luna.

— Anónimo

El papel de mentor es algo que se ve en todos los caminos de la

vida. Es diferente que modelar. Un mentor efectivo es intencional—
proactivo, no reactivo. Los mentores son maestros, consejeros, asesores,
y hasta cierto punto pueden ser modelos, pero no necesariamente. Ser un
mentor requiere cierto nivel de confianza. Por favor entienda que muchos
de ustedes han intentado, o quizá aún están intentando ser el mejor amigo
de su hijo(a). Asegúrese de escuchar esto. Pueda ser que se dé en
instancias muy poco comunes, pero no es el objetivo primordial. Si esa es
su meta, el resultado será fracaso en muchos aspectos de la crianza
porque cederá ciertas áreas importantes simplemente para caerle bien a
su hijo. ¿Cómo se puede ser un mejor amigo cuando usted tiene que
disciplinar o tomar las decisiones difíciles que son los mejor para ellos?
Si se da el caso eventualmente, ¡gol! Pero no haga que ésta sea la
prioridad.
El diccionario de Webster define a un mentor como “un guía, un
asesor confiable y sabio”. 21 Usted está tratando con la sabiduría en el
área de la paternidad. Reconozca que no hay manera de saber la respuesta
a todo lo que le será demandado por sus hijos. Mucho del contorno en el
cual están creciendo ni siquiera existía cuando usted estaba creciendo y
convirtiéndose en un hombre. Entonces, ¿Cómo puede usted tener todo lo
de un hombre sabio? Simplemente, esto involucra la sabiduría. Y, como
al parecer ninguno de nosotros nacimos con mucha sabiduría, la pregunta
es ¿Cómo se obtiene y reparte?

43
 1) Observando y aprendiendo de personas sabias en todos los
caminos de la vida.
2) Meditando en los libros de sabiduría de la Biblia-
Proverbios y Eclesiastés son un buen punto de partida.
3) Pasando tiempo con padres que son buenos modelos.
4) Leyendo y estudiando a hombres prominentes de la fe.
5) Examinando sus propias fortalezas y debilidades en esta
área.
6) Buscando ayuda en áreas en las cuales no tiene experiencia.
7) Practicando el arte de decir “No sé, pero averiguaré la
respuesta”.
8) Orando a la fuente de la verdad, Dios, para obtener la
sabiduría adecuada para ser un padre y esposo efectivo.

Cuando usted estaba en la escuela, ¿Repartían preservativos? Si

es así, usted es un padre muy joven. Cuando usted era niño, ¿Ya habían
inventado las computadoras portátiles y teléfonos inteligentes que tienen
acceso inmediato a todo lo que hay en el internet? Seamos sinceros— sus
hijos están más expuestos a cosas que usted ni por cerca conoce. Mi nieto
mayor tiene catorce años, y desde que tenía como diez años se ha
sumergido en el mundo de la computación. Las respuestas a
prácticamente cualquier pregunta que pueda tener están al alcance de él y
de sus amigos, a veces en menos de un minuto.
Pregúntele quien ganó la Serie Mundial cincuenta años antes de
que nacieran. En un instante pueden tener todos los datos y darle más
información de la que usted aún recuerda o quisiera saber, así que no
intente ser un sabelotodo. No pasará la prueba y ellos no lo buscarán a
usted cuando se enfrenten con temas importantes tales como:
¿Existe Dios?
¿Por qué se mató mi mejor amigo?
¿Debo unirme a los Scouts?
¿En qué deporte debo invertir mi tiempo?

44
 ¿Por qué no le caigo bien a mis compañeros?
¿Qué escuela es la que me conviene?
¿Jesús es Dios?
¿Qué debo hacer cuando mi mejor amigo me da la espalda?
¿Cree que soy bonita?
¿Realmente entiende lo difícil que es crecer hoy en día?
¿Por qué es incorrecto tener relaciones sexuales fuera del
matrimonio?
¿Cree que Jesús es el único camino a la salvación?
¿Qué cree acerca de la creación y la evolución?
¿Dónde van los bebés que mueren antes de nacer?

Hay millones de estas preguntas. Y si las preguntan, quiere decir

que son cosas importantes para ellos. Estos son temas morales, éticos,
espirituales y sociales que les afectan. Necesitan respuestas, o por lo
menos un diálogo. Nunca es incorrecto decir “no lo sé”. La mayoría de
las preguntas no tienen que ver con la matemática o el inglés. Son temas
que forman y moldean la sociedad en la cual están creciendo. Hay
muchas áreas grises que no tienen respuestas concretas. Esto está bien.
Responder con, “voy a averiguar y después platicamos”, está bien
también, o “hagamos una cita para retomar este tema”. Así demostrará
sabiduría. Pero definitivamente regrese pronto al tema de conversación.
Ellos están esperando.
Muchas veces lo que quieren es comunicarse son usted, y al
mantener abiertas las puertas, está animándolos a comunicarse. Después
de una cita difícil o un desánimo severo, usted quiere que sientan la
confianza de venir a contarle lo que sea. Usted tiene que ganarse ese
derecho. Algunos chicos dicen “no puedo hablar con mi papá acerca de
nada; únicamente me da un sermón”. Usted no quiere que ellos busquen
otra fuente de respuestas y consuelo. Y realmente no quiere que guarden
o repriman esos sentimientos o luchas. Esto es muy peligroso. Yo hice
eso muy a menudo con mis hijas. Esa es una de las ventajas de ser
abuelo, uno puede simplemente escuchar. La mayoría de las veces, eso es
lo que están buscando de todos modos.
En Santiago 1:5-7 LBLA, el escritor nos exhorta, “Pero si
alguno de vosotros se ve falto de sabiduría, que la pida a Dios, el cual da
a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero que pida con

45
fe, sin dudar; porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada
por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, ese hombre,
que recibirá cosa alguna del Señor”. Esto es algo de lo que ya hablamos.
A usted se le ha dado la responsabilidad de ser el mentor de su hijo,
como un consejero. Usted tiene que estar preparado, listo en cualquier
momento. Es imperativo que tenga los recursos necesarios para poder
ofrecer respuestas y consejos útiles y llenas de verdad. Ellos no quieren
respuestas inventadas- la sabiduría superficial que no provee solución o
profundidad.
Es por esto por lo que, para mí, no hay mejor fuente de sabiduría
que las Sagradas Escrituras. Estoy convencido que fueron inspiradas por
Dios, dadas por el Espíritu Santo a través de aquellos que como usted y
como yo enfrentaron las mismas situaciones. Creo firmemente que la
verdad es absoluta y no es relativa. Diferentes tonos de la verdad no
existen, y sus hijos necesitan una verdad sólida que los moldee. El libro
de Proverbios fue escrito pensando en usted. Pero usted tiene que leer,
estudiar y meditar en ellos. Hay una o más verdades para cada
situación— y posiblemente para toda pregunta. Pero usted debe tener
esas herramientas. ¿Qué dice Dios en su Palabra acerca de esto? Aquí
hay algunos de los muchos versículos:

Proverbios 2:6 LBLA, “Porque el SEÑOR da sabiduría,

de su boca vienen el conocimiento y la inteligencia”.
Observe en Proverbios 2:1 LBLA: “Hijo mío, si recibes mis
palabras, y atesoras mis mandamientos dentro de ti…” ¿Lo
hará?

Proverbios 3:1 LBLA, “Hijo mío, no te olvides de mí

enseñanza, y tu corazón guarde mis mandamientos”.

Proverbios 4:5 NIV, “Adquiere sabiduría, adquiere

inteligencia”.

2 Crónicas 1:10 RV60, “Dame ahora sabiduría y ciencia,

para presentarme delante de este pueblo; porque ¿Quién
podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?”
Eclesiastés 7:12b RV60, “Más la Sabiduría excede, en que
da vida a sus poseedores”.

Miqueas 6:9b LBLA, “Prudente es temer tu nombre”.

Lucas 2:52 RV60, “Y Jesús crecía en sabiduría y en

estatura, y en gracia para con Dios y los hombres”.

Veamos un par de situaciones que pueden surgir. Tal vez

usted tenga un diálogo como este:

“Papá, ¿Es bueno ser rico?”

“Bueno, en Proverbios 22:4 RV60, y en otros versículos se

nos dice que las “Riquezas, honra y vida son la
remuneración de la humildad y del temor de Jehová”.

“Increíble. ¿Dónde aprendió eso?”

“Curiosamente, al ser un hombre de negocios, yo he estado

luchando con esa pregunta, y recientemente en mis estudios
leí estos versículos. No tengo todas las respuestas, así que
he estado buscando en otras fuentes mejores que yo”.

“¡Que impresionante papá! ¿Ve lo que dice este versículo?

Podemos adquirir más que únicamente riqueza; podemos
adquirir también el honor y la vida. De acuerdo con este
versículo, lo único que debemos hacer es ser personas
humildes, respetar y temer al Señor. Esto suena
completamente opuesto a lo que escucho de otras personas.
Gracias papá. Me ha ayudado a esclarecer algunas cosas en
mi vida para cuando comience a ganar dinero”.

Otra situación que se pueda dar es la siguiente:

“Papi, usted siempre ha recalcado que siempre debemos

hablar sobre lo que nos sucede dentro de la familia, y este
es un tema muy personal. Hay unos chicos en la escuela que
siempre me están coqueteando a mí y a algunas de mis
amigas para tener sexo con ellos. Algunas de mis amistades
les entran a esas cosas, pero usted y mi mamá siempre han
dicho que eso es malo. ¿Será que el abstenerse es de los

47
 tiempos antiguos y ahora está bien tener relaciones? Ellas
dicen que no están dañando a nadie y que se siente
maravilloso. ¿Cómo debo enfrentar esto? ¿Qué debo hacer?

“Bueno cariño, sé que los tiempos actuales son diferentes

que mis tiempos en muchas maneras, pero he encontrado
que la verdad es la misma tanto en el pasado como ahora.
Los tiempos cambian, pero la verdad no cambia. Hace
algún tiempo leí 1 Corintios 6 que dice que la inmoralidad
sexual es prohibida. “El cuerpo no es para la fornicación,
sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo”. Más adelante
se nos exhorta a que “huyamos de la inmoralidad sexual”.
En Proverbios 4:23 Dios nos dice que “Por sobre todas las
cosas cuida tu corazón, porque de él mana la vida”. Amor,
cuando tienes relaciones sexuales fuera del matrimonio,
estás abriendo tu corazón a muchas cosas que serán
perjudiciales. Tengo la idea que crees que es incorrecto, de
lo contrario no estarías hablando con tu padre sobre algo tan
delicado. Guarda tu corazón hija mía. Sé que tomarás la
decisión correcta”.

“Eres lo mejor papi. Gracias”.

Padres, estos son únicamente dos ejemplos de situaciones que

pueden enfrentar sus hijos, si no es que ya las han enfrentado. Cuando
usted es un mentor, no va a estar diciendo “no hagas eso, no hagas
aquello”. Usted ofrece consejo sabio que se espera tomen en cuenta para
tomar decisiones sabias. Usted sabe lo que es mejor para ellos. Ellos
necesitan tomar esa decisión. La sabiduría que reciban de usted debe ser
algo confiable. Se puede guiar al caballo hacia el agua, pero no puede
forzarlo a tomarla. Usted ha provisto el mejor consejo posible, ha
confiado en la orientación que se le ha dado y la mayoría de las veces,
ellos también lo harán. Por lo general se comprobará que eran consejos
oportunos.
No se enfoque en sus hijos, más bien, que su enfoque esté en la
sabiduría que está impartiendo. Sus hijos procesan los consejos mejor

48
cuando saben que viene de una fuente confiable que tiene en mente su
bienestar. Y yo he encontrado, que, si el consejo está cubierto por la
oración, raramente falla en el alcance de su objetivo.

Preguntas para Reflexionar

¿Es usted el mentor “El hombre guía” en la vida de sus hijos?

¿Están escuchando y captando su mensaje?

Si no es así, ¿Qué debe hacer diferente?

¿Qué otros recursos necesitan implementar en el papel de mentor?

49
50
 CAPITULO 8: ESCUCHANDO

Sé que cree que entiende lo que piensa que he dicho,

pero no estoy seguro de que se dé cuenta que lo que
escuchó no es lo que yo quería decir. 22

--Robert McCloskey

Bueno, hombres, esta no es nuestra área fuerte. Por lo menos no

es mi fuerte, pues eso se me ha dicho a través de mi vida por la mayoría
de las personas cercanas a mí. Pero debo de haber escuchado más de
alguna vez, o si no, no me acordaría que me hayan dicho que no soy
bueno para escuchar. Así que esto tiene que ver más con hacer lo que
digo en vez de lo que hago.
Los expertos nos dicen que hay muy pocos hombres que son
multitareas, o sea que pueden hacer varias cosas a la vez. Si eso es
verdad, y la experiencia dicta que así lo es, entonces si estoy leyendo un
libro y viendo los deportes en la televisión, ¿Cómo puedo escuchar una
pregunta que me hagan? Deje el libro a un lado, ponga el televisor en
silencio, y escuche. Eso es lo que debemos hacer. Pero la mayoría de
nosotros lo ignoramos como si no escucháramos, o a lo mejor afirmamos
con un gruñido como si estuviéramos escuchando. ¡Qué peligroso! Y
debo admitir que la mayoría de esposas no entienden porque los hombres
tienen que dejar de hacer lo que están haciendo para poder escuchar.
“Pero cariño, quiero escuchar lo que tienes que decir”, dice él. Y
generalmente la reacción de ella es disgusto pues tuvimos que parar lo
que estábamos haciendo para poder concentrarnos y escucharlos.
¡Sigamos!
El saber escuchar, verdaderamente escuchar, es un arte, una
destreza que se puede perfeccionar. Para algunos no es fácil, ni lo será
jamás. La mayoría de nosotros tiene que trabajar muy duro en esto. Pero

51
debemos perfeccionar la habilidad de escuchar y ser respetuosos a los
demás. En el mundo ruidoso de hoy hay muchos sonidos y se hace muy
difícil. Y para nosotros, los que vamos avanzando en edad, no tenemos
una audición tan refinada como antes. Además, todos los aparatos que
tenemos a nuestra disposición parecen robar nuestra atención, distraernos
y aumentar estrés al proceso de escuchar.
Quizás alguno de ustedes haya tenido problemas con la
concentración o tienen audición selectiva, lo cual no les ayuda a captar el
tema completo que se les presenta. Yo admito que hay veces que he
dejado de escuchar por cualquier razón. O me di una idea del tema en
general de la conversación, o simplemente no estaba interesado en el
resto de la historia o discusión. No se dará a querer con ninguna de estas
reacciones. ¿Alguna vez ha observado a las mujeres cuando están
hablando entre ellas? Están enfocadas, se miran la una a la otra, aun si
están desinteresadas, y se recuerdan cada detalle de la conversación.
Nosotros, por otro lado, escuchamos como que estamos en una fiesta
bulliciosa deseando estar en otro lado.
En Santiago 1:19 LBLA, se nos exhorta a ser “prontos para
escuchar, tardos para hablar y para airarnos”. Cuando Jesús le enseñaba
con parábolas a sus discípulos, les decía que pusieran atención, o decía
“de cierto os digo”, o “escuchen mis palabras”. Él sabía que tenían la
tendencia de distraerse y perderían el impacto de la enseñanza. “Oye,
Israel” es una frase que resuena a través del Antiguo Testamento cuando
Dios o sus profetas comienzan a hablar. Esto debe consolarnos al saber
que no estamos solos en esta lucha de saber escuchar. Pero también debe
impulsarnos a entender que es necesario ser alguien que sabe escuchar.
Esto nos lleva a nuestros hijos y su necesidad de ser escuchados.
Es vital que mantenga la comunicación abierta entre usted y ellos. La
mayoría de las veces, lo único que quieren es contarle algo que no
requiere ninguna acción de su parte. Para la mayoría de los hombres, he
aquí el problema. Comenzamos a pensar en cómo solucionar el problema
mientras ellos aún están hablando. Es bueno, porque como hombres así
hemos sido creados. Pero no siempre es bueno en cada situación,
especialmente cuando se trata de nuestros hijos o nuestra esposa. En el

52
capítulo que habla sobre ser un mentor, discutimos un par de diálogos
hipotéticos. En esos casos, los hijos estaban pidiendo consejo. Pero la
mayoría de las veces, los hijos se expresan simplemente porque quieren
que alguien los escuche.
Cuando usted puede lograr escuchar atentamente, percibirá las
inflexiones, el lenguaje corporal y otros detalles. Todo esto ayuda a
determinar cuál debe ser la acción, o si debiera haber acción alguna. Si
nos enfocamos en la solución durante la conversación, podemos perder
mucho más que las simples palabras. Y vale la pena recalcar que, si
reaccionamos de una manera prejuiciosa, seguramente destruiremos
cualquier futuro diálogo con nuestros hijos. La mayoría de las veces, si
comparten sus luchas del corazón o problemas, el simple hecho de
expresarlos puede ayudarles a llegar a una solución sin que usted necesite
dar su opinión.
Tener buenas preguntas puede ayudar a fomentar más la
conversación. En la mayoría de los casos, lo que se quiere lograr es que
ellos solos puedan encontrar una solución sin que usted diga tan siquiera
una palabra. Las personas que saben escuchar pueden hacer que esto
suceda. A continuación, hay algunas sugerencias. No abarca todo, pero
son una ayuda para saber escuchar. Esta forma de interactuar demuestra
que a usted le interesan sus hijos y lo que ellos quieran expresar. Casi
siempre cuando alguien le hacia una pregunta a Jesús, Él les respondía
con otra. Que interesante, ¿No cree?

Enfóquese y concéntrese.
Haga contacto visual cuando sea posible.
Escuche aquellas cosas que quizá no se están verbalizando.
Observe el lenguaje corporal.
Haga preguntas pertinentes en vez de dar consejo.
Comente acerca de lo que escucha.
Repita lo que escucha si se puede (¿Escuché correctamente?)
Use las Escrituras donde sea apropiado al ofrecer soluciones.
Aprenda a regocijarse con lo que le están diciendo.
Al mismo tiempo, muestre empatía cuando fuere necesario.
Un abrazo puede ser la mejor respuesta, o la única, después de
escuchar.

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 Para los pequeños, use el tiempo de las comidas o al acostarlos
para que compartan sobre su día.
No tenga temor de decir “no sé” a algunas preguntas.
Si es apropiado, ore con sus hijos y por ellos.
No invalide sus palabras ni interrumpa sus pensamientos.
Nunca los minimice cuando le están contando algo.
No los juzgue si han compartido algo personal.
Lleve a sus hijos mayores a comer y provea oportunidades para
el diálogo.
Después de un tiempo, pregúntele sobre su conversación para
mostrar inquietud o interés.
Si le comparten algo privado de otra persona, asegúrese de no
compartir esa información con alguien más.
No intente escuchar y mandar textos al mismo tiempo, y pídales
que hagan lo mismo.
Use el tiempo de las comidas en la casa y fuera de la casa para
conversar y escuchar.
Cuando su familia tiene algo que decirle, asuma que es algo de
vital importancia para ellos.

El arte y la calidad de escuchar se han perdido en las

generaciones recientes. Para usted como padre, ser alguien que va en
contra de la corriente dará buenos resultados a largo plazo. Les enseñará
a sus hijos que el escuchar es vital en cualquier relación. Muchas veces
he dicho que como Dios nos dio dos oídos y solo una boca, habrá querido
que escucháramos dos veces más de lo que hablamos. Por mi parte, yo
lucho con esta proporción. Quizá el escribir este libro me ayude a mí más
que a los otros lectores. Espero que sí.
Recientemente, un hombre compartió algo que el doctor de su
madre agonizante le había dicho. Aunque ella no podía verbalizar sus
pensamientos, aún le podía escuchar ya que los oídos son el último
órgano que deja de funcionar. Yo pude observar esto en mi madre en su
última semana de vida. Para mí esto dice mucho acerca del tema de saber
escuchar. La Escritura también nos dice que la fe que nos lleva a la
salvación viene por el oír. Romanos 10:17 LBLA es claro en cuanto a la

54
 vital importancia de saber escuchar—realmente escuchar: “La fe viene
por el oír y el oír por la palabra de Cristo”.
El libro de Proverbios contiene numerosas exhortaciones acerca
de saber escuchar, tanto para el joven como para el anciano. A
continuación, hay algunas: todo el capítulo 1; 4:1, 10, 20; 5:1, 7, 13;
7:24; 8:6, 32, 33; 13:1; 19:20; 22:17; 23:19, 22. Lea estos pasajes en voz
alta y escuche como que si fueran dirigidos para usted.
Dios nos habla en muchas maneras: a través de Su creación, Su
Palabra, y aún a través de nuestras esposas e hijos. ¿Estamos
escuchando?
Preguntas para Reflexionar

¿Cómo calificaría su habilidad para escuchar?

¿Se toma el tiempo para escuchar a su esposa y sus hijos?

En esta área, ¿Cómo le describirían ellos a usted?

¿Qué pasos son necesarios para mejorar la manera en la que usted

escucha?

55
56
 CAPÍTULO 9: ENSEÑANDO

Dale a un hombre un pez, y le darás de comer por un día;

enséñale a pescar, y le darás de comer por el resto de su vida.

--Proverbio Chino

Enseñar no se debe confundir con la mentoría o con modelar.

Un mentor o modelo no llenan muchos de los requisitos en la vida, desde
las cosas más básicas hasta las más exóticas. Proverbios 4:1, 2 LBLA es
el fundamento para la enseñanza: “Oíd, hijos, la instrucción de un padre,
y prestad atención para que ganéis entendimiento, porque os doy buena
enseñanza; no abandonéis mi instrucción”. La ley es “doctrina” o
“enseñanza”. El escritor usa la palabra “instrucción” para los padres. En
cuanto a sus mandamientos, Dios le dice a su pueblo en Deuteronomio
6:6-9 RV60, “enséñales diligentemente a tus hijos … cuando te sientes
con ellos en tu casa … cuando vayas por el camino … cuando te acuestes
… cuando te levantes”. Esto no da mucho margen, ¿Verdad? Debemos
ser maestros diligentes, primeramente, en cuanto a la Palabra de Dios,
pero también mucho más.
Si les enseña la verdad de las Escrituras a sus hijos, se asegurará
que lo llevaran en su corazón todos los días de su vida. Dios dice, “mi
palabra no regresara vacía”. Lo que está diciendo aquí es que alcanzará
su propósito. ¿Qué cosas debemos enseñarles a nuestros hijos? Aquí hay
algunas:

Como amarrarse los zapatos.

Como vestirse adecuadamente.
Como comer y tener buenos modales.

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Respeto
Honestidad
Como manejar, limpiar y usar un arma de fuego adecuadamente.
Como hacer un nudo
Como sostener un lápiz
Como leer y escribir
Como escribir una carta y colocarle la dirección
Como escribir un cheque
Como ver la hora
La Palabra de Dios
Como sembrar una semilla
Como cocinar
Como hacer helado casero
Como escuchar
Como pronunciar palabras
Como montar una bicicleta
Como andar en canoa
Como esquiar
Como darle de comer y cuidar a las mascotas
Como cortar el césped del patio
Como volar un barrilete o cometa
Distinguir lo bueno y lo malo
Como sostener una raqueta
Como manejar un automóvil
Integridad
Los fundamentos del golf
Como jugar juegos de mesa o cartas
Como sentarse
Sugerencias para una buena salud
Como pelar el maíz y preparar las habichuelas
Como limpiar un pescado
Como afilar un cuchillo
Las reglas de seguridad
Como nadar

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 Como hacer un nudo de pescador y colocar el anzuelo
Como lavarse los dientes y la higiene personal
Como afeitarse
La etiqueta
Como patinar y bailar
Como tirar y patear un balón
Como subirse a una ola
Como construir castillos en la arena
Como silbar
Como atrapar luciérnagas
Como armar una tienda de campaña
Como manejar el crédito
El manejo de las finanzas
Ética en el trabajo
Como trabajar

Y a la medida que usted le enseñe todas estas cosas, va

demostrando su amor por ellos. Usted está diciendo “eres importante, y
quiero que estés bien preparado para la vida y que puedas disfrutarla y
manejarla bien”. Simultáneamente, también provee la oportunidad para
ver la mano de Dios. Recientemente comencé a escribir una serie titulada
Life Speaks to Us (La vida nos habla, www.lifespeakstous.com). Un libro
con el mismo título ha sido publicado por CrossBooks. (¿Ven la
propaganda que acabo de hacer?) El punto de este escrito es que salgan a
relucir las muchas lecciones que podemos aprender al observar la
creación de Dios. Usted tiene la oportunidad de señalar estas cosas y de
enseñar en base a ellas. El Salmo 19 inicia de esta manera “Los cielos
cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos.
Un día emite palabra a otro día, Y una noche a otra noche declara
sabiduría… Por toda la tierra salió su voz, Y hasta el extremo del mundo
sus palabras”. No tenemos que buscar muy lejos o leer libros impactantes
para poder enseñarles a nuestros hijos.

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 La lista es infinita. Tanto usted como la madre de sus hijos
estarán involucrados en este proceso. Y a medida que le enseñen al hijo
mayor, él o ella ayudará a enseñarle a los hijos menores. He observado
que esto también continúa a través de las generaciones futuras. Aunque
es más intenso con los preadolescentes, hay una variedad de cosas que
enfrentan los hijos mayores. Sea creativo y mantenga las cosas
interesantes. Una de las cosas que disfruto como abuelo es que aun puedo
enseñar. Nunca termina, y nunca deja de ser divertido.
Padres, debemos estar presentes para poder enseñar. Los padres
ausentes se pierden de mucho, al igual que sus hijos. Cuando sus hijos
aprenden algo de usted, de la manera correcta, es especial. Debo agregar
aquí que es sabio delegar algunas de las áreas de enseñanza a otros,
indudablemente a su esposa, o alguien que tenga habilidad en cierta
actividad o circunstancia. Por ejemplo, si su hijo está interesado en golf o
futbol, y usted no sabe nada de ninguna de las dos cosas, lo sabio es
buscar a alguien que sí sabe.
He encontrado que las mejores oportunidades de enseñanza son
los momentos que no son diseñados para ese propósito. El ir a acampar
con la familia puede proveer muchas ocasiones para enseñar. Un padre
sabio estará pendiente de estas oportunidades. Usted es la fuente
principal de capacitación para su hijo. Necesita ser creativo y hacer que
sea interesante para que sea fácil de captar y recordar.
Recientemente fuimos a la playa y todos los nietos mayores
montaban sus tablas de surfeo en las olas. Will, quien tiene síndrome de
Down, los estuvo observando toda la semana, quedándose en la orilla.
Papá, mamá, y sus tres hermanos mayores tomaron turnos animándole y
llevándolo más adentro del mar. Comenzó a tener más confianza. El
temor parecía dar lugar a la confianza en ellos, la tabla de surfeo y en sí
mismo. En los últimos dos días del viaje, él estuvo surfeando por su
propia cuenta, montando las olas, deteniéndose, saliendo al mar de nuevo
y montando olas otra vez. Al enseñarle pacientemente, él ahora tenía la
capacidad de hacerlo por sí solo. Y apuesto a que está ansioso por ir de
nuevo el próximo año y lo hará toda la semana.

60
 Usted puede entrevistar a cualquier maestro y le dirán que no
hacen su trabajo por el sueldo que reciben; es el gozo de enseñar y
capacitar a la siguiente generación. Aunque sí necesitamos maestros
entrenados para enseñarles a nuestros hijos, el mejor lugar para comenzar
es que usted les enseñe en el hogar. “Instruye al niño en su camino, Y
aun cuando fuere viejo no se apartará de él” (Prov. 22:6 RV60). Y yo le
agregaría que él lo compartirá con la próxima generación.

Preguntas para Reflexionar

¿Qué les está enseñando a sus hijos?

¿Está capacitándolos para su tarea presente y futura?

¿Qué cosas nuevas necesitan saber, y cómo puede usted ayudarles?

¿Qué tipo de ayuda adicional necesita para entrenarlos y equiparlos

completamente?

61
62
 CAPITULO 10: DISCIPLINANDO

El que detiene el castigo, a su hijo aborrece;

Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

--Proverbios 13:24 RV60

Antes de entrar en esta sección, creo que vale la pena decir que,
si no se enfrentan las áreas anteriores de la paternidad, difícilmente
podrán tener éxito en el área de la disciplina. Es muy probable que lo
vean como muy estricto o como un “sargento”.
Este es un tema muy debatido, especialmente entre los padres de
la vieja guardia y los padres modernos. Pero hay una cosa en la cual casi
todos llegan a un acuerdo: los hijos necesitan ser disciplinados para poder
colocar parámetros y límites, entender la diferencia entre lo bueno y lo
malo, lo incorrecto de lo incorrecto y el respeto. Padres, esta es su área de
responsabilidad primaria, le guste o no. Sea cual sea el método que use,
sea la vara o un “tiempo fuera”, usted es el vigilante. La autoridad de su
esposa viene de usted y a través de usted, pero la autoridad máxima recae
con el papá.
Solo se requiere de un par de meses desde que un bebé deja su
cuna para confirmar que usted está criando a un pecador. Tan lindo, pero
tan egoísta. La mayoría de los niños tienen la actitud de: “yo quiero lo
que quiero y lo quiero ahora”. Corregir esta actitud requiere habilidad,
paciencia y entrenamiento. El tener la actitud de “mi papá me daba con el
cinturón y yo te daré a ti”, no siempre funciona, como tampoco funciona
el ignorar el comportamiento rebelde. Si no se confronta, las
consecuencias graves pueden surgir ahora o más adelante. En algunas
instancias hablamos hasta de problemas criminales.

63
 Joanne y yo crecimos cuando el Dr. Spock se consideraba la
autoridad máxima en la crianza de los hijos. Mis padres fueron pre-
Spock, si saben a lo que me refiero. Eran de la “era de la vara”, o paleta,
tal vez el cinto o hasta la correa de afeitar. Puede ser algo muy efectivo,
si se usa adecuadamente. Mi padre nunca me disciplinó. Mi madre era la
encargada de disciplinarme. Algunos me dicen que por esa razón soy tan
mimado. Creo que hasta yo estoy de acuerdo. Cuando ya había crecido
un poco, ella hasta me hizo escoger mi propia vara, y si en su opinión no
era la adecuada, ella escogería la vara más grande y más fuerte. Mis
piernas sentían el ardor, pero nunca vi enojo. Parecía que se cumplían las
palabras que ella me decía, “esto me dolerá más a mí que a ti”. Mi abuelo
por parte de mi madre, un hombre muy grande a quien yo respetaba y
amaba, era muy rápido para tomar su cinto o correa de afeitar. Él la
doblaba en ambas manos y la chasqueaba con fuerza dos o tres veces.
Eso me hacía reaccionar. Comenzaba a gritar, “lo siento”, hasta me salían
las lágrimas. Nunca tuvo que usar ese cinto en mí, pero sé que lo hubiera
hecho si hubiera sido necesario.
En la escuela preparatoria donde estudié, el director tenía una
vara de media pulgada de ancho, la cual tenía agujeros y una agarradera
adecuada. Medía unos dos pies de largo. Nunca la usó en mí, pero yo
sabía que existía, y las historias de los compañeros que sufrieron el dolor
de esa vara eran suficientes para mí. El procedimiento que el director
usaba era, el estudiante se agachaba, tomaba sus tobillos, cerraba los ojos
(orando con fervor como nunca) y esperaba uno o más azotes.
Hay ciertas edades, en las que la disciplina debe ser acompañada
del dolor. Se deben asociar la una con la otra. Más adelante, otros
métodos son más apropiados. Pero la sabiduría muestra que el enojo o la
ira no deben acompañar el método. Firmeza, sí. Es parte de la enseñanza.
El niño debe saber el porqué de la disciplina. Lo que usted quiere que su
hijo aprenda es que el nivel de disciplina va a ser de acuerdo con el
crimen cometido. Darle veinte azotes a un niño de tres años por haberle
dicho “te odio” a su hermano, o un sermón y “tiempo fuera” por cinco
minutos a un niño de seis que amenazó a su hermana con un cuchillo, no
son consecuencias apropiadas para las acciones de esos niños. Hay cierto
comportamiento destructivo que necesita ser tratado desde la raíz, y si es

64
algo que va empeorando, necesitan consecuencias y castigos más severos
y apropiados, o posiblemente requiera de ayuda profesional.
Debo agregar, las madres no deben hacer que los padres se
vuelvan el “malo de la película” usando la frase “espérate que llegue tu
padre a la casa”. Esto sin lugar a duda daña la imagen y relación con sus
hijos; siempre les va dar temor cuando usted regrese a casa. La mayoría
de las veces, el llegar a la casa debe ser un evento alegre, no una ocasión
de alboroto. Algunas acciones requieren atención inmediata, y la persona
que esté presente debe tener la autoridad de ejecutar la disciplina. Sin
embargo, hay ciertas ocasiones en las cuales la madre debe esperar hasta
que usted llegue. Pueda que el esperar sea más difícil para el hijo que la
acción disciplinaria en sí. Es el temor a lo desconocido.
Una palabra fuerte de advertencia: la mano nunca debe ser
usada como instrumento de disciplina. La mano representa ayuda, amor,
cariño, consuelo. Al combinarlo con acciones de paliza puede causar
confusión en el hijo, y pueda que resulte en resentimiento. Confesión, yo
he “sacudido un par de pantalones” con la única cosa que tenía a mi
alcance- mi mano. Nunca me he sentido bien sobre esa acción cuando
todo terminó. ¡Nunca!
Y ya que estamos en el tema, golpear o dar bofetadas de
cualquier tipo son tabú, y no se debe hacer, ¡nunca! Aquí es donde
usualmente inicia el abuso físico y da lugar a comportamientos más
violentos. Los expertos le dirán, y los hechos lo confirman, que los niños
que experimentan cualquier tipo de abuso tienen más posibilidades de
convertirse en abusadores ellos mismos. Solo hay que leer o escuchar las
noticias para saber que esto es una epidemia en América. Puede ser abuso
físico, verbal o sexual. Ninguno de estos es aceptable. Si usted fue
abusado en cualquier manera y siente que las acciones hacia su familia se
están tornando en esa misma dirección, debe buscar ayuda profesional
inmediatamente- y mejor si es al primer indicio. Los padres a veces
pueden sacar todo su enojo en contra de su esposa y nunca tocar a sus
hijos, pero para ellos es como si fuera contra ellos.

65
 La Biblia es muy clara, y varios Proverbios comentan acerca de
la disciplina. Parece ser que Dios pensó que valía la pena ponerle
atención a este tema.

Proverbios 13:24 RV60 dice, “El que detiene el castigo, a su

hijo aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige”.

Proverbios 19:18 LBLA dice, “Corrige a tu hijo mientras hay

esperanza, pero no desee tu alma causarle la muerte”.

Proverbios 22:15 LBLA dice, “La necedad está ligada al

corazón del niño; la vara de la disciplina la alejará de él”.

Proverbios 23:13-14 LBLA dice, “No escatimes la disciplina del

niño; aunque lo castigues con vara, no morirá. Lo castigarás con vara, y
librarás su alma del Seol”.

Proverbios 29:15 LBLA dice, “La vara y la reprensión dan

sabiduría, pero el niño consentido avergüenza a su madre”.

Sea cual sea su interpretación de la vara, no es ni una

herramienta de automóvil ni un látigo. Una tabla de dos-por-cuatro puede
usarse para llamar la atención de un burro o un asno. Eso es apropiado
para una bestia de carga, pero no para sus preciosos hijos. Sin embargo,
la vara debe ser suficientemente dura para restringir y redirigir la acción
indeseada de su hijo. Esto coloca los límites necesarios. Ellos lo desean y
lo necesitan. Dios les dice a los hijos que deben obedecer a sus padres.
“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la
tierra que el SEÑOR tu Dios te da” (Éxodo 20:12 LBLA). Este es uno de
los diez mandamientos que incluye una promesa. Ya hemos visto esta
exhortación, pero vale la pena repetirlo, “Y vosotros, padres, no
provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina e
instrucción del Señor” (Efesios 6:4 LBLA). Una vez la raíz de la
amargura se siembra en un hijo contra su padre, es probable que lleve
toda una vida para resolver las consecuencias, si es que se llega a
arreglar. Mucha de la ira y la amargura resulta de los métodos usados en

66
la disciplina. La disciplina debe demostrar el gran amor que le tiene a sus
hijos, y está diseñada para protegerlos y mantenerlos lejos del peligro;
que puedan recibir bendición y ser de bendición a otros.
La mayoría de los hijos saben cuándo han cometido alguna falta
y saben que necesitan corrección. Cuando usted no los corrige, ellos se
confunden. Ninguno de ellos va a desear las consecuencias, pero en lo
profundo de su ser saben que necesitan ser disciplinados por sus
acciones. A veces es peor cuando no se confronta la situación. Ellos se
preguntarán porque ahora y no después. Un pensamiento que llega a ser
común y abrumador en su mente es, “¿Hasta dónde puedo llegar?” Andar
tramando algo se vuelve como su segunda naturaleza.
Algunas formas de desobediencia necesitan corrección
inmediata, mientras otras necesitan ser tratadas más adelante, pero sin
dejar que pase mucho. Pueda ser que usted reconozca que hubo una mala
acción, pero le deje saber a su hijo que está muy enojado para tomar
decisiones sabias en ese preciso momento. O quizá necesite tiempo para
hablar con su esposa o si fuera necesario buscar consejo. Pero regrese y
de alguna manera actúe. A los niños les gusta jugar el “divida y
conquiste” con sus padres, y lo hacen muy bien. Cuando hacen algo que
requiere disciplina, intentarán causar división entre usted y su madre.
Cuando los dos empiezan a discutir o por lo menos a no estar de acuerdo,
el hijo calladamente sale del cuadro, muchas veces sin recibir disciplina
alguna. La respuesta es que ustedes dos vayan a otro lado; discutan,
debatan y decidan. De ahí vuelvan al hijo y apliquen el castigo
apropiado.
Para los hijos mayores, cuando decida sobre el método de
disciplina, si es un castigo por un tiempo determinado, como quitarles el
teléfono por una semana, asegúrese de darle seguimiento y monitoreo.
“Hay siete días en la semana hijo, no dos”. A veces nos sentimos
culpables por las acciones que hemos tomado. Si renegociamos o nos
retractamos siempre tendremos problemas en el futuro. Y si el castigo es
severo por un tiempo prolongado, ya sea un mes o un verano, escriban un
contrato identificando la acción que llevó a decidir ese castigo, y describa
los términos del castigo. Ambos deben firmar ese contrato entendiendo
que, si no se cumple a cabalidad, puede ser extendida por un tiempo
indefinido.

67
 Siempre he escuchado que un hijo disciplinado es un hijo feliz.
En sus manos está el poder lograr esto— y crear un hogar donde la paz
pueda existir. Sin la disciplina en el hogar, reinará el terror
desenfrenado— y su hijo quedará paralizado en muchas maneras. Usted
tiene entre dieciséis y dieciocho años para ayudar a sus hijos a
convertirse en adultos productivos y bien adaptados.
¡Sea consistente, firme, amoroso y discipline!

Preguntas para Reflexionar

¿Alguna vez fue abusado en cualquier manera cuando era niño?

De ser así, ¿Lo está manejando apropiadamente?

Describa cómo es usted en cuanto a la disciplina. ¡Sea honesto!

¿Sus métodos han sido efectivos?

¿En qué áreas debe cambiar?

68
 CAPITULO 11: BENDICIENDO

La esperanza ve lo invisible, siente lo intangible

y logra lo imposible
-Anónimo

Padres, al meditar en este refrán de un autor desconocido, pensé

en nosotros. Nosotros somos la esperanza que Dios les provee a nuestros
hijos. Cuando pronunciamos una bendición sobre nuestros hijos, en eso
nos convertimos. “Alzamos sus ojos” a los horizontes que posiblemente
nunca soñarían por sí solos o sin un poco de estímulo. ¿Lo ve? —
¿Realmente lo ve? Usted les puede ayudar a ver lo invisible, sentir lo que
es intangible y ¡lograr lo imposible! Me pregunto qué padre se sentó a la
orilla de la cama de su hijo noche tras noche escuchando sus planes de ir
a la luna algún día, y nunca lo desanimó ni se rio de esa aventura
improbable, más bien le dio la esperanza que algún día él o ella lo
podrían lograr. ¡Qué bendición!
Esto es algo que yo nunca recibí; una bendición real y profunda
de parte de mi padre. Y aunque intenté hacerlo con mis hijas, no puedo
describir un momento o lugar exacto. Pero he continuado haciendo el
intento de bendecirlas de la mejor manera que puedo. Quizá aún haya
trabajo pendiente para mí. Pero una cosa sé ahora, que esto es vitalmente
importante. Mencioné anteriormente el libro de Bill Glass titulado
Champions for Life (Campeones de por Vida). Es un libro que le
recomiendo mucho a todo padre o padre en potencia. Media vez consumí
el material, compré varias copias y aun hasta la fecha se las regalo a otros
hombres. Está basada en experiencias reales, tanto de su vida personal

69
como también de las experiencias que ha visto tras varias décadas de su
ministerio en las prisiones.
Al igual que Bill, yo he invertido más de treinta años en enseñar
en las prisiones, centros de detención y albergues para desamparados.
Las historias se parecen mucho. Un padre falló a su responsabilidad. No
fue solamente que no se dio una bendición, pero hubo muy poco, si acaso
algo, de dirección y amor. Es como si todos fueron a la misma escuela de
padres ausentes. Hay pocas excepciones a esta regla. Cada hombre
anduvo por el camino de la vida, confundido, solitario, enojado, nunca
entendiendo quien era realmente, o por qué existía, y preguntándose si
alguien se preocuparía por él.
Así que, ¿Qué es una bendición? Esta es una buena pregunta
que merece una respuesta clara. Para mí, parece plasmarse en la vida
tanto de los paganos, como también de judíos y cristianos. La bendición
debe ser importante, ya que una de las primeras veces que se menciona
en la Biblia, es cuando Jacob y su madre obtienen fraudulosamente la
bendición de Isaac (el padre) que era para Esaú (Génesis 27:1-29).
Iniciemos con la definición general del diccionario Webster. “El acto o
las palabras de aquel que bendice. Aprobación o estímulo”. Así que,
bendecir es “santificar o consagrar por un rito o palabra religiosa”;
“invocar el cuidado divino”; “otorgar prosperidad o felicidad”; “proteger,
preservar”; “dote, favor”. La bendición es un sustantivo, y bendecir es un
verbo transitivo. A mi manera de ver es transferir algo que será
permanente. 23
En la cultura de la Iglesia del primer siglo, la bendición estaba
conectada a las herencias tales como las tierras y las posesiones. Pero
también se asociaba con los nombres, el legado, el rito de iniciación y
mucho más. Es algo que la persona no se ha ganado y no merece. Es una
acción dada con gracia. Y esta era real y permanente. Una de las historias
más intrigantes para mí se encuentra en el libro de Génesis y es la
historia de José. Le animo a que lea y estudie su vida especialmente en el
contexto de la bendición que le dio su padre en Génesis 37-50. Se cuenta
que Jacob (ahora llamado Israel) tenía doce hijos y que amaba a José más
que todos los demás. Esto creó una vida difícil para José, ya que sus

70
hermanos intentaron matarlo por la envidia que sentían; decidieron
venderlo como esclavo a unos mercaderes en vez de matarlo. Llegó a
servir al Faraón, fue puesto en autoridad y después cayó en la cárcel por
una acusación falsa después de resistir los avances sexuales de la esposa
de Potifar; halló favor al interpretar sueños y eventualmente logró
restablecer a su familia, con la bendición del Faraón, durante una época
de siete años de hambruna. Al leer estos capítulos, es obvio que a José
nunca se le olvidó quien era. Aun a través de la mala dirección de parte
de su padre, el engaño de sus hermanos, ser exiliado de su patria, sufrir la
ira como un despreciado, él sabía quién era y eso le daba seguridad. Yo
propongo que esto viene desde la bendición que su padre le dio a
temprana edad.
Cuando nacieron cada una de mis hijas y cada nieto, se los
dedicamos a Dios. Pero después tuve que marcar en ellos que esa
bendición era suya. Ellos han sido consagrados al Señor. En otras
palabras, son apartados para ser usados por Él y bendecidos por Él.
Como padre, usted es el que da la bendición. Ellos necesitan oír sus
palabras. Necesitan entender su destino. El reflejo del valor de hacer esto
es monumental. Como ya hemos mencionado, el Padre declaró una
bendición a Jesús, Su Hijo, en Su bautismo. En Mateo 3:17 LBLA
leemos “Este es mi Hijo amado en quien me he complacido”.
Observe este versículo cuidadosamente:
Fue una voz—así que fue hablado;
Fue dirigido— este es;
Fue personal— mí;
Fue afectuoso— Hijo amado;
Fue entre padre e hijo— Hijo;
Fue una bendición específica— en quien tengo complacencia.

Estás bien, eres amado, aceptado, me complaces. Esto fue algo

pronunciado directamente sobre Jesús en presencia de testigos. Dios
estaba muy orgulloso de decir, “Este es Mi Hijo, y me place que lo sea”.

71
 Muchos padres acostumbran un rito de iniciación con sus hijos o
hijas. Esto es lo que pasó con Jesús. Su vida de ministerio iba a empezar
en la etapa de adultez, por así decirlo. El escuchó la voz de su padre
asegurándole que “Tienes Mi bendición. Ve, vive y muere victorioso”.
Qué confianza ha de haber sentido. No ha habido otro hombre en la
historia que haya llevado una carga más pesada. Pero estaba preparado,
porque tenía la bendición de su Padre.
Una de las cosas más sencillas, pero también profundas que la
bendición de un padre produce sobre sus hijos es: “Estás completo.
Tienes lo que se necesita. Es suficiente, todo lo que eres o lo que serás.
No tienes que actuar para obtener la bendición. Se te ha dado. Nadie
puede desaparecerla. La vida no puede quitártela. Tú eres amado; eres
importante; eres un ganador”.
¿Cuántos niños y adultos pasan por la vida pensando
equivocadamente que son un fracaso? Desafortunadamente, quizás
escucharon esas mismas palabras de sus padres. Qué devastador. Y
caminan a través de la vida cumpliendo esa profecía. Con cada fracaso, el
agujero en sus corazones se hace más profundo. Uno de los pasajes más
ricos en la Escritura es la anécdota para este tipo de pensamientos y se
encuentra en Salmo 139:14 LBLA “Te alabaré, porque asombrosa y
maravillosamente he sido hecho; maravillosas son tus obras, y mi alma lo
sabe muy bien. Te alabaré, porque maravillosas son tus obras”. Padres,
¿Escucharon eso? ¿Pueden sentir esa confianza que sobreabunda?
Escuchar que tu padre te diga que eres especial, completo, hábil, capaz y
que no eres un error, da fortaleza para seguir adelante. “¿Dónde está la
puerta? Cuidado mundo, ¡Aquí vengo! ¡Vamos! ¡Yo puedo!” Bueno, eso
es lo que la bendición de un padre hace. Sus palabras están formando a la
persona de por vida. ¡Qué gozo tan inmensurable!
Las familias en América, excluyendo algunos grupos étnicos,
han perdido este arte. Quizás los padres simplemente no tuvieron la
bendición y no pueden repetirlo por ignorancia o por el dolor no haberla
recibido. Y aún peor, hay padres que además de no dar una bendición,

72
expresan pensamientos negativos acerca de sus hijos. Es probable que
además de la falta de la bendición, también las palabras hirientes están
produciendo a personas quebrantadas, posiblemente de por vida. Hay un
dicho en inglés que dice, “Palos y piedras pueden romper mis huesos,
pero de las palabras nunca me harán daño”. Desde temprana edad los
niños usan este refrán, al igual que los adultos. No hay nada que pueda
estar más lejos de la realidad. ¡Las palabras matan! Matan la autoestima,
las metas, las ambiciones, los sueños, la esperanza y mucho más.
Sin embargo, una bendición bien pensada que tiene un propósito
intencional: da vida. El hijo o la hija necesitan escuchar esta bendición
más de una vez. Los recuerdos a veces se nublan, especialmente en
medio de circunstancias difíciles, y el poder recordar sus palabras de
bendición muchas veces será la medicina exacta que necesiten en ese
momento. Un ejemplo puede ser la tentación de tomar drogas, algo que
de seguro sucederá. “No gracias, no necesito eso. Soy seguro en mí
mismo. Soy completo sin las drogas”. ¿Quisiera usted escuchar ese
testimonio de parte de sus hijos? Yo sí.
Hay muchas heridas que los hijos enfrentan al ir creciendo.
Pienso que una de ellas es la más crítica para la vida de un niño
saludable. Ustedes padres, pueden hacer mucho para evitar que esto les
pase a sus hijos. Se llama la herida paternal. Como padre, usted debe
asegurarse que ellos escuchen por lo menos cuatro cosas de su parte:

Lo amo.
Estoy orgulloso de usted.
Usted está completo.
¡Usted es bueno!

Si usted es el hijo o la hija quien ha sido herido(a), hay algunas

razones para que usted tome el primer paso de reconciliación en esa
relación. No todos los padres son buenos para comunicarse, y quizá ese

73
haya sido el problema desde el principio. Nadie quiere que continúe esa
brecha entre ustedes y ni ese dolor.
Para muchos, varias generaciones han pasado en su familia sin
recibir una bendición de parte de su padre. Usted puede ser el que rompa
este patrón generacional. Vaya y sea de bendición, y a la medida que va,
deténgase lo suficiente para pasar la bendición a sus hijos. Y para los que
tienen hijos mayores, no es demasiado tarde. De hecho, ahora puede ser
el mejor momento para conectarse con sus hijos y pronunciar esa
bendición que necesitaban dese hace tiempo. “Al orgullo le sigue la
destrucción; a la altanería, el fracaso” Proverbios 16:18 NIV. No permita
que el orgullo se entrometa en el camino. Hágalo antes de que sea
demasiado tarde.
Y antes de dejar este tema, quiero presentarle a un nuevo amigo.
Greg Vaughn fue guiado por Dios hace algunos años para hablarle a los
padres acerca del impacto de un legado escrito para la siguiente
generación. Su libro y ministerio titulado Letters from Dad (Cartas de
Papá) ha llegado a estar en la lista de los libros más vendidos, y el
ministerio ha llegado a alcanzar a miles de hombres a través de la nación.
Este es un buen testimonio del impacto que la palabra escrita del corazón
de un padre puede tener en un hijo. Estos pueden ser tesoros tanto ahora
como para las generaciones que vendrán.
Hay muchos hombres calificados incluyendo a Bill y Greg, que
han publicado libros y artículos concernientes a la bendición paternal.
Hay organizaciones enteras dedicadas al rol o la función del padre. Hay
DVDs, sitios de internet y seminarios disponibles para padres. Hombres,
no tenemos escusa. Y no se olviden de la Palabra de Dios. ¡Es el libro de
bendiciones!

Preguntas para Reflexionar

¿Alguna vez recibió una bendición de parte de su padre?

Si lo hubiera hecho, ¿Habría hecho una diferencia en su vida? ¿Cómo?

74
¿Alguna vez les ha dado una bendición a sus hijos?

Si lo ha hecho, ¿Cómo respondieron?

Si no lo ha hecho, ¿Cuál es su plan para poner esto en práctica?

EL RETO

x EN LAS SIGUIENTES VEINTICUATRO HORAS

- ENCUENTRE UN LUGAR A SOLAS Y PASE UNA HORA
EN ORACIÓN
- ALABE Y ADORE A DIOS POR PERMITIRLE SER PADRE
- POR SU GUIA Y PRESENCIA EN SU VIDA
- DEDIQUE A CADA HIJO POR NOMBRE
- PIDA PERDÓN POR LAS FALTAS QUE HA COMETIDO
COMO PADRE
- PIDA HABILIDAD PARA SER UN PADRE PERMANENTE
EN TODAS LAS ÁREAS
- PIDA POR CUALQUIER COSA QUE TENGA EN SU
CORAZÓN REFERENTE AL SER PADRE Y ESPOSO

DESPUÉS DE ESTO
x DURANTE LA SIGUIENTE SEMANA (7 DIAS)
- ESCRIBA UNA CARTA (A MANO) A CADA HIJO
- DIGALE A CADA UNO QUE LOS AMA Y CUAN
IMPORTANTE SON PARA USTED
- DIGALE A CADA UNO QUE SE HA COMPROMETIDO A
ORAR DIARIAMENTE POR ELLOS Y POR NOMBRE
- DIGALE QUE ESTÁ AHÍ PARA ELLOS, NO IMPORTA LO
QUE VENGA

UNA ÚLTIMA COSA

x DURANTE LOS SIGUIENTES DOCE MESES
- ORE, ORGANICE Y HAGA UNA CEREMONIA ESPECIAL
DE BENDICIÓN PARA CADA HIJO MAYOR DE DIEZ

75
 AÑOS. GRÁBELO EN VIDEO Y PRESÉNTENLO COMO
UN REGALO PARA QUE ELLOS LO GUARDEN Y
COMPARTAN CON SUS HIJOS
- CADA HIJO ES DIFERENTE, ENTONCES DEBE SER
ALGO ORIGINAL
- CUANDO NAZCA UN NUEVO BEBÉ, PONGA SUS
MANOS SOBRE SU CABEZA EN PRESENCIA DE SU
FAMILIA Y TESTIGOS, DEDÍQUELOS A DIOS. USTED ES
EL SACERDOTE Y ANCIANO DE SU FAMILIA.

76
 CAPÍTULO 12: PROVEYENDO Y PROTEGIENDO

Pero si alguno no provee para los suyos, y

especialmente para los de su casa, ha negado
la fe y es peor que un incrédulo.

-I Timoteo 5:8 LBLA

No pasaremos mucho tiempo en estos temas, pero eso no quiere

decir que no son importantes. Los he combinado a propósito, no sólo
porque los dos comienzan con la letra p. Simplemente, estas son dos
cosas que los hombres hacen naturalmente por sus familias. Los hombres
han tenido esta función por centenares de años. Fuimos diseñados así por
nuestro Creador. Aun el hombre de la caverna sabía esto desde el
principio. Éramos los “cazadores” y las mujeres eran las “caceras”. “Los
hombres de verdad” proveen y protegen.
Cuando pensamos en proveer, se nos viene a la mente la
comida, ropa y techo. Ciertamente, hay muchas mujeres que contribuyen
a esto, y lo hacen bien. En algunas familias, los hijos se involucran en
este proceso a veces por dificultades económicas. No debe verse como
algo machista, simplemente es el plan de Dios para la familia. Al padre
se le ha encargado ser la cabeza, así que el plan y la ejecución de esta
función recaen primordialmente en su área de responsabilidad, aun y
cuando él no tenga el ingreso principal.
El proveer para la familia va más allá de estas tres “áreas
importantes” para el padre. Él está capacitado para enfrentar muchas
situaciones emocionales y psicológicas, y debe enfrentarlas en nombre de

77
la familia. Pero, como todos sabemos, las mujeres son muy aptas en esta
área, y el ignorar su perspectiva y contribución sería una farsa. Muchas
de las áreas que abarca el proveer se han incorporado en los otros
capítulos de este libro.
Y esto no significa que está comprando a sus hijos. Mientras
usted está allá trabajando y siendo el agente proveedor de su familia,
debe también estar capacitándoles para que ellos eventualmente sean
agentes productivos en sus propias familias. Tráigalos a su mundo.
Permítales ver como se ve esta parte de su vida. Esto ayudará a construir
estructura en su futuro.
He notado que algunos padres utilizan mal esta responsabilidad
de provisión para presionar en su familia. Están tan absorbidos en su ego
personal que muchas veces hacen a un lado a sus hijos y esposa. Tienen
una actitud de “Yo gano el dinero, entonces yo pongo las reglas”. Pero
cuando los hombres, los padres, conocen bien esta función y no abusan
de ella, la familia prospera en muchas maneras. “Dios resiste a los
orgullosos, pero da gracia a los humildes” (Proverbios 3:34 RV60). Para
ser el mejor de los proveedores, el padre necesita reconocer
humildemente que el verdadero proveedor es Dios, y que por su gracia
los utiliza a ellos. Los hijos aprenderán grandes lecciones con esta
actitud. “Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la
altivez de espíritu” (Proverbios 16:18 RV60). ¿Cuántas veces hemos
visto a otros, o aun nosotros mismos, tan enamorados con nuestras
pertenencias y posiciones, para que de repente un día se desmorone a
nuestro alrededor? “¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo
ningunas? Porque se harán alas Como alas de águila, y volarán al cielo”
(Proverbios 23:5 RV60). Necesitamos estar anclados en Él y Sus
provisiones. Él nunca nos fallará.
Ya les he mencionado que Mateo 6:33-34 son los versículos
más relevantes en la Biblia para mi vida. En los versículos anteriores,
hablando de las riquezas, Jesús nos compara con las aves, los lirios y el
monte. Les dice a sus lectores que no se preocupen y no estén ansiosos
sobre la comida, ropa o vivienda; más bien, somos más importantes para

78
Él que estas cosas y en vez de buscar las cosas perecederas, deberíamos
de buscar lo perdurable. Estas cosas son: ¡Su reino y Su justicia! La
promesa que nos da es clara; todo lo demás será añadido. Ven, el proveer
es mucho más que ser un trabajador arduo que trata de acumular cosas.
Los hijos están observando su proveedor terrenal, lo cual se espera que
les dé una figura de su proveedor celestial.

Porque la sabiduría protege como el dinero protege;

pero la ventaja del conocimiento es que
la sabiduría preserva la vida de sus poseedores.

-Eclesiastés 7:12 LBLA

Ahora veamos al protector. Todos ustedes que son machos han

estado esperando este tema. “¡De esto es lo que estoy hablando! Si saben
lo que les conviene, nadie se atreverá a meterse con mis hijos”. Bueno,
esto no es necesariamente de lo que estamos hablando. Pero está cerca.
“La sangre es más espesa que el agua” es una frase de acuerdo con este
tópico. Sí, en cuanto a mi esposa y mis hijos, debería tener una actitud
que dice, yo estoy aquí para protegerlos de cualquiera y de todas las
cosas. Los hombres somos diseñados esencialmente para ser eso en
nuestras familias. Y nadie respeta a un hombre que no está dispuesto a
serlo. Oh… ¿Dije respeto? El respeto inicia en los patios de la escuela y
sigue por el resto de la vida del hombre. Es fundamental el defender su
honor, o el honor de su mujer, sus hijos o su familia. Debo pensar que es
algo innato. El respeto es algo básico en la autoestima del hombre. En
Efesios 5:33 RV60 hasta el Apóstol Pablo señala esta necesidad,
refiriéndose al contexto de la relación más íntima, el matrimonio. “Por lo
demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y
a la mujer respete a su marido”.
Observe cómo reaccionan otros hombres, o usted mismo,
cuando hay una situación de peligro. En general, ¿A quién buscan sus
hijos? Nuestro pastor general contó una historia graciosa sobre cuando
sus hijos estaban pequeños. Un niño le tiró una pelota a propósito y le
pegó a una de sus hijas en la cabeza y la lastimó. Inmediatamente, el

79
encontró la pelota más cercana y se la tiró al niño y le pegó en la frente.
Eso le enseñará a no meterse con mi hija. Él luego admitió que fue la
reacción equivocada en una situación adversa, pero simplemente así
hemos sido creados. El ser tardos para airarnos pueda ser el mejor
remedio, ya que así lo pide la Palabra. Pero observe como Jesús usó su
enojo justo cuando estaba en Jerusalén; él vio el abuso que estaba
sucediendo en la casa de Su Padre, la casa de adoración. Él tumbó las
mesas de los cambistas y los regañó por sus acciones. ¡Se estaban
entrometiendo con la casa de Su Padre!
Recientemente mi hija mayor visitó la clase de su hija que está
en el sexto grado para repartir regalos de navidad para los maestros. Sin
aviso, un niño le dio una bofetada a otro niño y comenzó a gritar cosas
obscenas. Había sangre esparcida por todos lados y los otros niños se
hicieron a un lado para escapar de esa escena horrífica. Ella encontró a su
hija en una esquina, con miedo y llorando. Dijo que fue un caos por un
momento. La maestra al fin pudo controlar al grupo, y se restauró el
orden. Se les dio consuelo, y me imagino que fue un tema que surgió de
nuevo en los hogares de los alumnos esa noche. Padres, y madres, no
siempre podemos estar presentes físicamente para proteger a nuestros
hijos. Pero en este caso, así como otros más, las cicatrices emocionales
necesitan la dirección para proteger y restaurarla. Los varones son otra
historia, al punto que ellos necesitarán a un padre que les ayude a
enfrentar esto de la mejor manera posible.
Esto no significa que vayamos a pelear todas las batallas de
nuestros hijos. De la misma manera, no hay que ser sobreprotectores.
Pero si claramente hay un ladrón en su hogar, es hora de actuar de
manera protectora y punitiva. Nunca podremos refugiar a nuestros hijos
de todos los males que enfrentarán. En un capítulo anterior tocamos este
tema. Pero cuando vemos que se van asomando ciertas dificultades,
nosotros debemos estar ahí para proteger y defender. ¿Pueden imaginarse
la tranquilidad indescriptible que sentirán sus hijos cuando saben que
usted está ahí para defenderlos? Una posible respuesta es: “Vaya, mi
papá siempre me apoya. Él sería el primero que quisiera tener a mi lado
en un callejón oscuro”.

80
 Otra cosa que no significa proteger es defenderlos a ciegas
cuando ellos se han buscado un problema o han traído un problema a la
familia a través de sus acciones o inacciones. En estas situaciones, usted
como protector debe abordarlo de una manera diferente. Ellos necesitan
saber que usted los ama, pero sus acciones demandan medidas de
corrección que deben ser implementadas. En esos casos, usted no puede
defender a ciegas las acciones de su hijo por el bien de su familia o
cualquier otra razón que se le ocurra. Si maneja la situación
apropiadamente, los estará protegiendo de un mal futuro.
Otra parte de la función de protector es enseñarles a defenderse
a sí mismos, tanto físicamente como emocionalmente. Hoy en día en
América vivimos en una sociedad bastante peligrosa, peor que cualquier
tiempo que yo pueda recordar. El mal nunca se puede predecir. Llega
cuando uno menos se lo espera, y las noticias de la noche lo comprueban.
El terrorismo se presentó en nuestra nación hace como diez años atrás.
Dentro de su área de responsabilidad está velar por cómo sus hijos
manejan psicológicamente todo esto. Se puede fortalecer la ayuda que
pueda brindarle en la adaptación a través de un diálogo abierto sin
agregar miedo adicional. Enséñeles a ser observadores, cautelosos,
conscientes de su alrededor. Prepárelos para eventos que probablemente
sucederán y en los cuales pueda usted pueda o no que esté presente.
Pueda ser que ellos, a su vez, sean los que salgan a ayudar a otros en
alguna necesidad que se presente. Enséñeles a pensar con los pies en la
tierra y no entrar en pánico. Asegúrese que conozcan bien los teléfonos
de emergencia.
Me he dado cuenta de que el mejor lugar para sus hijos, después
de un evento impactante es estar en sus brazos. Permita que ellos
comenten sobre el suceso. No los detenga simplemente porque podría
causar lágrimas. Poder hablar y discutir la situación puede ayudar a
disipar pesadillas, temores o cualquier dolor emocional. Todas estas
cosas confirman que usted tiene varias funciones como el protector
principal. Los padres permanentes tienen la mejor oportunidad de
lograrlo.

81
 Preguntas para Reflexionar

¿Usted considera el papel de protector y proveedor como algo serio?

¿Qué pasos debe tomar para asegurar la protección y seguridad de su

familia?

En su hogar, ¿Es usted el primero que buscan para estas dos áreas de
responsabilidad?

¿Cómo debe involucrar más a Dios en estas dos áreas?

82
-

CAPITULO 13: PADRE ETERNO

Estamos casi finalizando este libro sobre la paternidad

responsable y esperemos que también exitosa. Pero, de la misma manera
que lo mencioné al principio, la mayoría de estas observaciones
provienen de un padre imperfecto, yo. Y como he escrito esta serie de
capítulos para aquellos que sé que son muy similares a mí, debemos
finalmente invertir unos minutos observando al Padre perfecto. En Isaías
9:6 RV60 vemos al profeta que proclama la venida del Mesías, el Cristo,
a quien le conocemos como Jesús por medio de los Evangelios.
“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado
sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios
Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”.
Todos los roles que se le han dado como un padre terrenal están
incluidas todas las funciones en los nombres que se le dan a Él, pero de
una manera más perfecta. Padre eterno es una de las características que la
mayoría de las personas no atribuyen a Jesús, porque lo ven como el Hijo
del Padre en la Trinidad (Padre, Hijo, Espíritu Santo). Pero como Él es
Dios, de hecho, Él es nuestro Padre Eterno. Tengamos por seguro que el
Espíritu Santo no se equivocó cuando guio a Isaías a escribir y
documentar los nombres de Jesús.
En los siguientes instantes, haré el intento de cristalizar los
atributos del Señor que son Suyos, y los cuales también le ha dado a
usted para ser un padre a Su imagen. Haré una lista de cada capítulo e
incluiré una referencia bíblica correspondiente. No es exhaustiva en

83
ninguna medida, pero mi esperanza es que provoque el interés necesario
para que usted haga su propio estudio profundo: (todos los pasajes son de
la versión Reina Valera 60)

Ausente: “Y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta

el fin del mundo” (Mateo 28:20). “No te desamparé, ni te dejaré”
(Hebreos 13:5; Josué 1:5).

Permanente: “Si permanecéis en mí, y mis palabras

permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho”
(Juan 15:7). “El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra
del Omnipotente” (Salmo 91:1).

Amando: “Como el Padre me ha amado, así también yo os he

amado; permaneced en mi amor” (Juan 15:9). “Sí, Con amor eterno te he
amado; por tanto, te prolongué mi misericordia” (Jeremías 31:3). “Porque
de tal manera Me amó Dios… que dio a su unigénito Hijo” (Juan 3:16).

Orando: “Y después que los hubo despedido, se fue al monte a

orar” (Marcos 6:46). “Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador,
para que esté con vosotros para siempre” (Juan 14:16). “Por lo cual
puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios,
viviendo siempre para interceder por ellos” (Hebreos 7:25).

Modelando: “Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado

vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los
otros” (Juan 13:14). “Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por
las ovejas” (Juan 10:11).

Mentoreando: “Venid en pos de mí, y os haré pescadores de

hombres” (Mateo 4:19). “Sed, pues, imitadores de Dios como hijos
amados” (Efesios 5:1). “Y corramos con paciencia la carrera que tenemos
por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe”
(Hebreos 12:1b–2a).

84
 Escuchando: “Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y
se os abrirá” (Lucas 11:9). “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi
nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de
sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus
pecados, y sanaré su tierra” (2 Crónicas 7:14).

Enseñando: “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el

Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os
recordará todo lo que yo os he dicho” (Juan 14:26). “Y se admiraban de
su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como
los escribas” (Marcos 1:22).

Discipulando: “Hijo mío, no menosprecies la disciplina del

Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él; Porque el Señor al
que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por Hijo” (Hebreos
12:5–6). “Y aquellos, (padres terrenales) ciertamente por pocos días nos
disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es
provechoso, para que participemos de su santidad” (Hebreos12:10).

Bendiciendo: “Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo,

y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi
cuerpo.” Luego tomó la copa… “Bebed de ella todos; porque esto es mi
sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de
los pecados” (Mateo 26:26, 28).

Proveyendo y Protegiendo: “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que

os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús” (Filipenses
4:19). “Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda
gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo
suficiente, abundéis para toda buena obra” (2 Corintios. 9:8). “En cuanto
a Dios, perfecto es su camino, Y acrisolada la palabra de Jehová. Escudo
es a todos los que en él esperan” (2 Samuel 22:31). “Dios es el que me
ciñe de fuerza, Y quien despeja mi camino” (2 Samuel 22:33). “Dios es
nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
Por tanto, no temeremos” (Salmos 46:1–2a).

85
 La función del padre es difícil, pero al mismo tiempo muy
gratificante. Es obvio que Dios no nos ha dado esa responsabilidad sin
equiparnos y darnos la habilidad para llevarlo a cabo. Para mí, es muy
alentador saber que Él ha diseñado todas esas cosas para nosotros para
ser padres, Él es todo eso y mucho más. En orden de asegurar el éxito,
necesitamos apoyarnos en el Padre Eterno para obtener la fortaleza y
sabiduría para completar la carrera y lograr escuchar de Él estas palabras:
“¡Bien hecho!”. Y quizás también podrá escuchar a sus hijos alabando a
Dios por su padre, usted. Hombres- padres- ¡Sí es posible!

Preguntas para Reflexionar

¿De qué manera puede imitar de una mejor manera al Señor como padre
permanente?

¿Cómo se compara usted en todas estas áreas de la paternidad?

¿Cuáles son las fortalezas que necesita seguir?

¿Cuáles son las debilidades que necesita mejorar?

Mencione una de las lecciones más significativas que ha aprendido de:

1) ¿Este Capítulo?

2) ¿Este libro?

86
 APÉNDICE

Por dónde empezar

Cuando usted nació, lloró, y el mundo se regocijó.

Viva su vida de tal manera que cuando usted muera,
el mundo llore y usted se regocije.

-Expresión Cherokee

Espero que hayan disfrutado leer Ausentes A Presentes, y que

hayan sido retados y bendecidos por este material. Nunca debemos
perder de vista la evidencia confortante que la Fuente y el Autor de toda
la vida, incluyendo la familia, es Dios, el Creador. Su único Hijo, Jesús el
Cristo, estuvo en el inicio con el Padre y el Espíritu Santo. Las Escrituras
del Antiguo y Nuevo Testamento hablan claramente al respecto. Juan 1:3
LBLA nos dice “Todas las cosas fueron hechas por medio de Él, y sin Él
nada de lo que ha sido hecho, fue hecho”. Él va más adelante y nos dice
en el versículo 4 que “En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los
hombres”.
Y en Hebreos 1:1-2 se nos dice que “Dios… en estos últimos
días nos ha hablado por Su Hijo, a quien constituyó heredero de todas las
cosas, por medio de quien hizo también el universo”. Hablando de sí
mismo, Jesús habla en Juan 14:6 LBLA diciendo, “Jesús le dijo: Yo soy
el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí”. Toda
la creación habla de sus cualidades eternas y su majestad. Con solo ver
los milagros que suceden cada día, lo podemos percibir. Quizá por
primera vez usted se ha acercado a Dios de una manera más profunda a

87
través de la lectura y meditación de su Palabra. Es posible que le haya
hablado específicamente a usted, y ahora tiene el deseo de conocerle más
íntimamente. A través de Su siervo Santiago en el 4:8a, Él nos dice
“Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros”. ¿Cómo se logra esto?
El evangelio en 1 Corintios 15 se describe de la siguiente
manera: “Cristo murió por nuestros pecados y resucitó de la muerte”. Y
el camino romano que nos dirige hacia la salvación es: (Todas las
Escrituras están en la Versión Reina Valera 1960, RV60)

Romanos 3:23: “Por cuanto todos pecaron, y están

destituidos de la gloria de Dios”.

Romanos 6:23: “Porque la paga del pecado es muerte, pero

la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor
nuestro”.

Romanos 5:8: “Mas Dios muestra su amor para con

nosotros, en que, siendo aún pecadores, Cristo murió por
nosotros”.

Efesios 2:8-9: “Porque por la gracia sois salvos por medio

de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por
obras, para que nadie se gloríe”.

Y en Juan 5:24 LBLA, vemos una verdad que podemos abrazar

a través de la fe (confianza) en Jesús, quien nos dice a usted y a mí, “En
verdad, en verdad os digo: el que oye mi palabra y cree al que me envió,
tiene vida eterna y no viene a condenación, sino que ha pasado de muerte
a vida”. Él habló claramente una vez más en Juan 11:25 LBLA, cuando
dijo “Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí,
aunque muera, vivirá”.
Si en su corazón tiene el deseo de confiar en Jesucristo para su
salvación y participar en Su vida eterna, le sugiero la siguiente oración
como el primer paso en el día de hoy. Lea la oración, y si refleja su

88
deseo, entonces hágala ahora mismo. Debe de saber que no es la oración
la que salva, más bien el poner su fe solamente en Cristo es lo que salva.

Querido Dios, sé que soy pecador. Sé que mi pecado

merece castigo. Creo que Jesús murió por mí y resucitó de
la tumba. Pongo mi confianza en Jesús como mi único
salvador. Gracias por el perdón de mis pecados y la vida
eterna que ahora tengo. En el nombre de Jesús, Amen.

¡Bienvenido al reino de Dios! ¿Puede escuchar a los ángeles que

se regocijan? ¡Sí, se están regocijando!
La vida eterna se basa en hechos, no en sentimientos. Ahora…
Compártale a Dios lo que está en su mente a través de la
oración (Filipenses 4:6-7).
Lea la Biblia diariamente (2 Timoteo 3:16-17). Un buen
punto de partida es el libro de Filipenses o el libro de Juan.
Adore a Dios con otras personas en una iglesia local
(Hebreos 10:24-25).
Comparta con otras personas acerca de Cristo Jesús (Mateo
4:19).

Padres, el mejor lugar para comenzar a compartir es con sus

hijos y su esposa. De repente se puede dar cuenta que ellos han estado
orando por usted desde hace mucho tiempo. Regocíjense y disfruten esa
vida abundante de permanencia, en el Señor y en el hogar. ¡Gloria a Dios
que nunca más tengo que estar ausente de mi hogar!
Esta es mi oración para cada lector que ha emprendido este
cambio de ausente a presente:

Padre, me gozo en el hecho que nos ha creado como

hombres y que nos ha dado el privilegio y responsabilidad
de ser padres presentes. Usted es glorificado cuando
servimos de la manera que usted ha diseñado para nosotros
como hombres. Gracias por cada hombre que
conscientemente ha hecho el compromiso de ser el mejor
padre para sus hijos y de amar a su esposa como Cristo ama
a su iglesia. Confieso que muchas veces fracasamos de
muchas maneras, pero usted conoce nuestra debilidad y
siempre está dispuesto a animarnos y mantenernos en el
camino correcto. Perdone nuestras faltas y fortalezca a esos
padres dedicados. Señor, esto es algo cercano a Su corazón.

89
 Manifiéstese a esos hombres y hágales saber que usted
nunca los dejará ni los desamparará. Provéales a cada uno
éxito abundante en su función como padres. Que Su
Espíritu Santo more en ellos, sus familias y que otros
puedan ver la diferencia en sus vidas. Le adoro y ofrezco
esta oración en el nombre de su Hijo Jesús, ¡Amén!

Le invito a leer los siguientes seis testimonios de mis amigos-

padres, esposos, abuelos y bisabuelos. Reflexione en sus palabras sabias.
Todos son hombres a los cuales amo y respeto. Después, le animo a que
dedique algunos momentos y escriba su propio testimonio como padre.
Es posible que se sorprenda a usted mismo. Compártalo con sus hijos y
después comparta este libro con otro padre que lo necesite.

90
 TESTIMONIOS

Elise y yo tenemos tres hijos, dos hijas, diez nietos, cuatro nietas
y tres bisnietas.
En primer lugar, ser un padre es más fácil si es algo
generacional. Yo tuve un gran modelo en mi padre y mi abuelo antes de
él. Es un reto un poco más grande para aquel que no tiene ese contexto.
No quiero decir que sea fácil. Ha sido el trabajo más arduo que jamás
haya tenido que hacer, y fácilmente el más gratificante.
En segundo lugar, está la función de la madre, porque sin su
influencia en las discusiones pertinentes a la crianza, sería una carga
mucho más pesada. El padre y la madre deben ser uno en la crianza.
En tercer lugar, es una experiencia de aprendizaje constante.
Aunque haya errores que se cometan, deben aprender de ellos o sufrir las
consecuencias.
Cuarto es reconocer en las primeras etapas de la crianza, que sus
hijos necesitan respetarlo antes que lo puedan amar verdaderamente.
Quinto, comenzando con el padre y la madre, esfuércense por
enseñar el deber, el trabajo, la ética, el honor, la integridad, el respeto por
las personas mayores, el amor a Dios y el amor a la patria.
Sexto, es un hecho que su responsabilidad no termina con la
niñez, cuando sus hijos salen del hogar para formar sus propias vidas.
Ellos esperan que usted esté ahí para ellos cuando fuera necesario. Al
mismo tiempo, debe recordar que tienen sus propias vidas y que debe
intentar no entrometerse. No importa cuáles sean los errores que puedan
cometer, ellos son sus hijos, y nuestro mayor legado, así que continúe
orando por ellos, amándolos y apoyándoles.

91
 ¡La mayor satisfacción en la crianza de los hijos es la absoluta
certeza que sus hijos le aman y respetan!

Ronald Seller
Jubilado, Agencia de Seguros State Farm

Cookie y yo tenemos cuatro hijos: nuestro hijo Tracy y tres

hijas, Kathy Marshall, Allison Cobb y Linny Gardner. Al inicio del año
2010 nuestra familia consistía en las siguientes personas:
Cookie y yo
Cuatro hijos con sus conyugues
Dieciséis nietos y ocho cónyuges
Nueve bisnietos (de cero a cuatro años)

En primer lugar, Cookie y yo deseábamos a cada uno de

nuestros hijos. Ninguno llegó inesperadamente o fue una sorpresa. El
Señor bendijo mi esfuerzo de trabajo y Cookie nunca tuvo que trabajar
fuera del hogar. Queríamos estar involucrados con nuestra familia.
Como una expresión de este deseo, como también el de honrar
el Día de Reposo, cuando nuestros hijos estaban de edad escolar,
acordamos que podíamos hacer “cosas” el domingo, siempre y cuando
involucraba a toda la familia. Si todos queríamos ir a ver una película,
estaba bien, pero no íbamos a permitir que uno solo saliera con sus
amistades y los demás nos quedáramos en la casa, etc.
Una vez mientras regresaba de una conferencia de hombres en
Montreat, Carolina del Norte, había tanto ruido en el pequeño avión, que
cada uno estaba enfocado en leer un libro u otras cosas. Encontré el
versículo lema de mi vida: 3 Juan 4, “No tengo yo mayor gozo que este,
el oír que mis hijos andan en la verdad”. No fue fácil. Tracy no vino a los
pies de Cristo hasta su segundo año de universidad. En sus últimos años

92
de escuela nuestras hijas se unieron a buenos estudios bíblicos aceptaron
a Jesús. Los cuatro se involucraron de alguna manera u otra en la
Cruzada Estudiantil en sus años de universidad. Hoy en día, cada uno de
nuestros cuatro hijos y sus parejas son creyentes activos y dinámicos.
Dos de ellas ayudaron a sus esposos a obtener estudios de seminario (uno
es un pastor y otro un capellán en la fuerza aérea).
Una cosa más: al ver hacia atrás, nunca nos sentamos con
nuestros hijos para decirles con qué tipo de pareja deberían casarse.
Oramos mucho, pero no les presentamos “estándares” o “metas” o
definimos “la pareja ideal”. Pero el Señor tuvo el control de eso y lo
manejo a perfección. Cada uno de nuestros hijos tiene a la persona ideal
que los complementa. Y el gozo que tenemos es que no tenemos que
entrometernos. ¿Dije que los ocho son perfectos? ¡No! Disfrutamos a
cada pareja tal y como ellos son. Nos gustaría ver algunos “cambios” por
aquí y por allá, eso es cierto. Pero eso no es parte de nuestra
responsabilidad o tarea, y es algo que nunca compartimos— excepto
entre nosotros, solo mi esposa y yo.

Arthur Wood
Jubilado, Agencia de Seguro de Vida New York Life

Tengo el privilegio de estar casado con una mujer piadosa,

mujer de oración, que se llama Eletha. Tenemos un hijo, Marcus, casado
con Shelby y son padres de Marcus II de seis años y Leigh, de un año.
Somos padres orgullos de una hija, que tiene diecisiete años a quien
adoptamos desde su nacimiento.
Como padre, me di cuenta de que el mayor impacto que podía
tener en la vida de mi hijo, era que él me viera amando a mi esposa como
Cristo ama a la iglesia y no hacer que él (mi hijo) tuviera una perspectiva
amarga acerca de la vida. También entendí lo importante que era para mi
hija el modelar como debería ser la relación con un muchacho.

93
 El comentario que me llenó de mayor gozo en mí fue cuando mi
hijo me dijo, “Papá, enséñame a ser un hombre piadoso como tú”.
Marcus ahora es el ministro de jóvenes en West Dallas Community
Church (una iglesia en el Oeste de Dallas) y maestro en West Dallas
Community School (una escuela Cristiana en el Oeste de Dallas).
Lo que mi padre me enseñó a mí, la importancia de amar a Dios
y obedecer su Palabra, se lo enseñé a mis hijos. El legado continúa con
mi nieto quien recientemente me dijo, “Leo la Biblia y oro todos los días.
Si no lo hago, no tendré fortaleza”.
Tercera de Juan 4 dice “No tengo yo mayor gozo que este, el oír
que mis hijos andan en la verdad”. Un padre ausente no puede
experimentar ese gozo.

Arrvel Wilson
Pastor General, West Dallas Community Church

Mi padre nunca estaba en casa. Siempre estaba ebrio, siempre

ocupado, siempre dando escusas. Si no hubiera sido por hombres de Dios
en mi vida, que influyeron cuando yo era un niño al proveer un buen
ejemplo de un padre, me pregunto si hubiera crecido con una perspectiva
bíblica de lo que es la paternidad. Nuestro amoroso Padre celestial, a
través de su gracia admirable, ha puesto en mí una pasión y compromiso
de tan solamente una meta como padre; vivir cada día reflejando la luz y
el amor del Salvador, para que mis hijos puedan ver que Jesús es real y
que nuestra fe y confianza en Él son el único fundamento de importancia
en nuestras vidas.
En los años 1950 y 1960 los programas de televisión
constantemente mostraban a hombres que estaban comprometidos con
sus familias, quienes estaban presentes en la vida de sus hijos e hijas.
Desesperado por sentir que había familias con padres que amaban y se
preocupaban por sus familias, abracé esos programas que siempre
proveían enseñanzas y ejemplos morales para mí. Jim Anderson, del

94
programa Father Knows Best (Papá Sabe lo Mejor), interpretado por
Robert Young, no siempre sabía lo mejor y podía perder la paciencia. Sin
embargo, siempre fue un buen ejemplo para mí del compromiso amoroso
y la dedicación a sus hijos. Hugh Beaumont, el actor que interpretó el
papel de Ward Cleaver en el programa clásico de Leave it to Beaver
(Déjaselo a Beaver) proveyó otro ejemplo de un padre sólido quién
siempre estaba presente y disponible para sus hijos. Me acuerdo de que
aun siendo niño pensaba lo maravilloso que sería tener un padre que
estaba en casa todas las noches, cenando con su familia, yendo a la
escuela cuando su hijo lo necesitaba, estando presente para escuchar y
dar consejo y dirección. A menudo el personaje de Ward Cleaver se
presenta cuidadosamente combinando la disciplina y la estructura con la
compasión y ternura a medida que sus hijos luchaban con errores o malas
decisiones que son comunes aun en nuestros propios hijos.
Nuestro Padre celestial es así, cariñosa y amorosamente nos
recuerda como padres la importancia de estar presentes, de la manera que
él lo está para nosotros. Dios nos recuerda que su Palabra es el mapa para
nuestra jornada como padres, proveyendo la estructura y los
señalamientos de peligro, y al mismo tiempo recordándonos el amor
incondicional que tiene para nosotros. Como padres, es posible que nos
sintamos decepcionados o aun enojados con algunas decisiones que
tomen nuestros hijos, pero por la gracia de Dios nunca debemos olvidar
el poder del amor incondicional hacia ellos. No hay circunstancia
demasiado dolorosa, o relación demasiado tensa o dañada, que no pueda
ser enmendada con la expresión continua del amor incondicional hacia
los hijos que Dios nos ha dado.
Uno de los más grandes ejemplos de un padre piadoso, fue el
padre que Jesús describe en la parábola del “Hijo Prodigo”, el cual ilustra
al Padre Celestial. Este padre estaba disponible, y su hijo sentía la liberad
de acercarse y compartirle el deseo que tenía de encontrar una nueva vida
“en una tierra lejana”. Él estaba disponible cuando aún desde el corral de
los cerdos, el hijo dijo, “Me levantaré e iré a mi padre”. Era un padre,
quien en la mente de su hijo estaba relacionado con los cielos cuando

95
confesó, “He pecado contra el cielo y delante de ti”. El hijo no podía
dejar de pensar en Dios cuando pensaba en su padre, ya que su padre
seguramente caminó con Dios, oró y reflejó el fruto del espíritu en su
vida: amor, bondad, gentileza, humildad y perdón. La parábola muestra
claramente a un padre que mostraba afecto, cuando Jesús cuenta que el
padre “corrió y lo abrazó y le besó”. Es una gran mentira, y absurdo decir
que la “hombría” requiere frialdad y la falta de emociones. Los padres
piadosos expresan su amor libremente y no tienen miedo de tomar el
primer paso… o arriesgarse al rechazo. El padre del hijo prodigo no dijo
“Te lo dije”, porque al ser un padre piadoso, valoraba la relación con su
hijo más que “tener la razón”, y ¡el hijo lo sabía! Los fracasos de un hijo
no lo removieron del amor de su padre, y de la misma manera nuestros
fracasos no nos remueven del amor de nuestro Padre.

Len McLaughlin
Ex-Presidente, Banco SNB
Pastor General y Fundador Heritage Church

Al reflexionar acerca de nuestros cinco hijos ya adultos, y su

entrenamiento, hay cinco observaciones que haré como un padre:

1) “Si Jehová no edificare la casa en vano trabajan los que

la edifican” (Salmo 127:1). El mantener a Dios primero es
un proceso continuo, especialmente en la vida de un Padre.

2) El amar a su madre después del Señor nunca disminuye

en importancia como propósito y también como ejemplo.

3) Mi esposa y yo acordamos que nuestra menta general en

el entrenamiento era que cada hijo debería buscar la
voluntad de Dios y hacerla en su vida personal (recuerde

96
 que no debe esperar un comportamiento fuera de la etapa de
la vida en la cual se encuentran sus hijos, tal como
demandar comportamiento adulto de un adolescente).

4) Es muy importante buscar y aplicar todos los “unos a

otros” en Efesios en primer lugar en el grupo pequeño
primordial de Dios, la familia (amor, perdón, paciencia,
etc.).

5) Ore acerca de lo mencionado en la primera observación.

Ahora con cinco hijos casados y trece nietos, cada año
alguien en la familia recopila una lista de peticiones de
oración de cada uno para que la familia interceda en
oración.

Ford Madison
Inversionista de Bienes y Raíces

Crecí en Raleigh, Ashville, Washington DC, y en Atlanta. Mi

papá trabajó para IBM, lo cual rápidamente nos dimos cuenta de que eran
las siglas de “¡I’ve Been Moved!” (Yo he sido Movido). Tuve un gran
padre quien me enseñó, a través de toda una vida de ejemplo, el valor de
amar fiel y apasionadamente a mi mamá (¡su novia por sesenta años!),
amar a su familia, dirigir a la familia semanalmente a adorar, trabajar
diligentemente y con excelencia, y la importancia de la diversión, el
descanso y la recreación. Él nos sacó innumerables veces para pasear y
de vacaciones, los cuales crearon vínculos familiares profundos de
unidad y amor. Sobre todas las cosas, me enseñó los tres grandes regalos
que un padre puede dar a sus hijos. Ahora estoy procurando pasar esos
tres regalos a mis propios hijos.

Los Tres Grandes Regalos

El Primer Regalo. Creo que el regalo más grande que les puedo
dar a mis hijos como su padre es amar a Dios con todo mi corazón,

97
mente, alma, y fuerzas al caminar con Él diariamente, obedeciendo Su
palabra y Su voluntad para mi vida. Jesús dijo, “el que permanece en Mí
y Yo en él, dará mucho fruto; fuera de Mí nada podéis hacer” (Juan
15:5). El fruto de la herencia de ser saludables, bien adaptados, e hijos
piadosos puede ser el resultado únicamente de un padre que camina con
Dios. Cuando amo a Dios de una manera correcta, viviré rectamente, y
como resultado, todas las relaciones humanas (especialmente con
aquellos en casa) tomarán su orden correcto bajo Su dirección, sabiduría,
orden, y plan. Al llenarme y someterme diariamente a Su Espíritu Santo,
demostraré el fruto de Su Espíritu morando en mí: “amor, gozo, paz,
paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza” (Gálatas
5:22-23). ¿Qué mayor herencia podría dar cualquier padre a sus hijos que
mostrar un ejemplo de vida de cómo se ve el caminar correctamente con
Dios? ¡No hay otro regalo más grande que un padre pueda dar a sus hijos
que este!

El Segundo Regalo: Creo que el segundo regalo más grande

que un padre puede dar a sus hijos es ¡amar a su madre fielmente de por
vida! Pat y yo salimos en una cita cada semana y cada tres meses
tenemos una “salida” de fin de semana, donde cultivamos nuestro amor
el uno al otro y disfrutamos estar solos (lo que se escribe “r-o-m-a-n-c-
e”). Durante esas citas y salidas, oramos juntos por nuestros hijos y
platicamos en oración y planeamos para su bienestar. Pat es mi amor
número uno (después de Jesús, por supuesto), y eso les da a mis hijos no
solamente seguridad al ser testigos del amor fiel del uno al otro como
esposo y esposa, pero también les da un gran ejemplo de fidelidad y
pureza que querrán imitar en su propio matrimonio. Tenemos la
responsabilidad y el privilegio de pintar un cuadro en el transcurso de la
vida, que refleje la belleza del amor bíblico y el pacto matrimonial como
Dios, el arquitecto, ¡lo diseñó!
El Tercer Regalo. Creo que el tercer gran regalo que un padre
puede dar a sus hijos es su presencia y su tiempo. ¡Este concepto es un
poco complicado para el padre americano del siglo veintiuno sumergido
en la tecnología, las demandas, el estrés y la ocupación! Pero este es

98
igualmente crítico que los dos primeros regalos. Cada niño necesita de un
Papá (y Mamá) que esté presente en sus vidas emocionalmente y
cronológicamente. Este tipo de desafío es una “lucha eterna, que nunca se
logra cumplir a cabalidad”. ¡Pero nunca deje de luchar por alcanzar el
éxito en esta área!
Para nuestra familia, esto comienza con cenar juntos alrededor
de la mesa, lo más seguido posible con Papá presente. Esto también
incluye a Papá cocinando panqueques o waffles el fin de semana por las
mañanas, cuando le sea posible. Las vacaciones familiares, noches
familiares de diversión, salidas a los parques, museos, conciertos, juegos,
ferias, y otras salidas similares, son tiempos importantes en familia con
Papá. Sin embargo, también existe la necesidad en cada hijo de una
conexión uno-a-uno con su papá. Con nueve hijos, esto fue el desafío
más difícil para nosotros, ¡como usted se ha de imaginar! Si es una “cita”
con papá e hija o una cena y una actividad con papá e hijo, es
absolutamente esencial individualizar el tiempo de cada hijo con su
padre. Aun estando en casa, los padres necesitan encontrar maneras para
conectarse personalmente con cada hijo individualmente. A menudo el
escuchar los eventos del día de los hijos, orando juntos con un hijo por
sus heridas, esperanzas y sueños, y el dar consejos (cuando se buscan o
se piden) son buenas maneras para implementar ese tiempo especial uno-
a-uno entre un padre y cada hijo.
Bruce Johnston me enseñó a preguntarle a mis hijos más
pequeños a la hora de ir a dormir que compartieran conmigo el “punto
brillante” y el “punto oscuro” del día. Esa rutina ha sido una entrada
fantástica en su mundo y una gran manera de terminar cada día en
oración, a medida que ellos meditan sobre sus altas y bajas del día.
También recomiendo llevar a cada hijo adolescente a un campamento
para papás e hijos tal como el Rancho JH en Etna, California, el cual
tiene un programa brillante diseñado para “cambiar los corazones de los
padres a sus hijos y el de los hijos a los padres” (Malaquías 4:6).
¡Que Dios le conceda el favor y éxito en su llamado a mostrarles
a sus hijos el corazón, las manos y el rostro de su Padre celestial al ser su
padre terrenal! ¡Vaya con Dios!

Kurt Nelson
Presidente, Ministerio Internacional Este-Oeste

99
 Preguntas para Reflexionar

¿Cuál sería un corto resumen de los atributos de la paternidad?

¿Alguna vez ha escrito el testimonio de su vida?

¿Qué beneficio cree que encontraría en su función como papá al

escribirlo?

Después de haber completado estos, ¿Los compartiría con su familia?

100
 NOTAS

1
Teodoro Roosevelt, “Citizenship in a Republic” (Ciudadanos en una República—
discurso en Sorbonne, Paris, 23 de Abril, 1910)

2
“Tasa de natalidad en hogares de madres soleteras llega a un nivel sin precedente
en los Estados Unidos, 18 de marzo, 2009”,
http://www.msnbc.msn.com/id/29754561/ns/health-womens_health/

3
Roosevelt, Ciudadanos en una República.

4
“Los Nacimientos fuera del Matrimonio: La Verdadera Historia,” modificado 24 de
Noviembre, 2009,
http://www.esrc.ac.uk/ESRCInfoCentre/about/CI/CP/the_edge/issue8/births_1.asp
x

5
Ibid

6
Ibid

7
William Julius Wilson, Cuando el Trabajo Desaparece, (New York: Alfred A.
Knopf, 1996).

8
Lorrie Irby Jackson, “Cómo las Madres Solteras Pueden Herir a sus Hijos,”
modificado 14 de Agosto, 2009.
http://www.dallasnews.com/sharedcontent/dws/dn/opinion/viewpoints/stories/DNj
ackson_15edi.State.Edition1.45ff22.html

9
“Nuestra Opinión: Las Estadísticas Pintan Un Retrato Inhóspito de los Hijos sin
Padre”, modificado 20 de Junio, 2009.
http://www.timesrecordnews.com/news/2009/jun/20/life-without-dad-statistics-
paint-bleak-picture/

10
M.L. Menchen, El Lenguaje Americano, 1945.

11
Diccionario WordNet; s.v. “ausente”.
http://www.websterdictionary.org/definition/absent

101
12
Harry Chapin, “Cat’s in the cradle” (El Gato está en la Cuna), 1974. Usado con
permiso [Bill usó la documentación requerida especificada al final de la carta del
permiso que recibió.]

13
Se le atribuye al filósofo chino Lao-tzu (c. 604-c531 a.C.), fundador del Taoísmo.

14
Diccionario WordNet, s.v. “permanecer”. http://www.webster-
dictionary.org/definition/abide

15
Se le atribuye a Daniel Webster en una conferencia dada a la Sociedad Histórica de
Nueva York el 23 de Febrero de 1852.

16
Se le atribuye a Ron Wild.

17
John Hendricks Bechtel, Deslices del Habla: Un Libro de Apoyo para Todo Aquel
Que Quiere Aspirar a Corregir los Errores Diarios al Hablar. (Salt Lake City:
Proyecto Gutenberg, 2004), 29.

18
Vea www.YouTube.com y haga la búsqueda: Ironman and Dick and Rick Hoyt.

19
El dicho se le ha atribuido al oficial militar americano y político Lewis Cass (1782-
1866), pero no hay evidencia de que él lo haya dicho.

20
Diccionario WordNet, s.v. “modelar”. http://www.webster-
dictionary.org/definition/model

21
Diccionario WordNet, s.v. “mentor”. http://www.webster-
dictionary.org/definition/mentor

22
Se le atribuye a Robert McCloskey, representante del Departamento del Estado de
los Estados Unidos, por Marvin Kalb, reportero de CBS, en TV Guide, 31 de marzo
1984, citando una conferencia de prensa no especificada durante la guerra de
Vietnam.

23
Diccionario WordNet, s.v. “bendición”. http://www.webster-
dictionary.org/definition/blessing

102
 BIOGRAFIA DEL AUTOR

BILL C. DOTSON fundó el ministerio de bienes y raíces DREM en

1986, cuando Dios colocó un llamado en su vida, junto con once otros
hombres. El mandato fue de “edificar una casa espiritual” dentro de la
comunidad de bienes y raíces en Dallas, TX, de acuerdo con 1 Pedro 2:4-
5. El ministerio en este campo se dedica a atraer a hombres y mujeres a
Cristo Jesús. Después de cincuenta años en la industria de bienes y
raíces, Bill es ahora el Fundador y Presidente de Abiding Fathers
(www.abidingfathers.org). Originarios de Franklin, Tennessee, Bill y su
esposa, Joanna, ahora viven en Dallas. Tienen dos hijas y cinco nietos.
Cada mes Bill también escribe Life Speaks to Us (La Vida Nos Habla
www.lifespeakstous.com) y ha publicado un libro con el mismo título
con la publicadora CrossBooks. Su libro más reciente es Avivamiento del
Arrepentimiento.

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