Revisión de las barreras y variables conducentes a la implementación
de energías renovables según los ejes: a) Política energética nacional y estrategias para el desarrollo de renovables. b) Institucionalidad, regulación y estructura de mercado. c) Recursos, tecnologías e infraestructura. d) Modelos de Negocio. e) Capacidades necesarias. Curso básico
Se intenta explicar la razón y necesidad de recurrir a las energías
renovables. Se proporcionará una breve descripción de los distintos mercados de la región tratando de identificar las barreras para la inserción de las energías renovables. Se analizará la política energética de los distintos estados y las estrategias para el desarrollo de renovables, la institucionalidad, la regulación y la estructura de mercado. También se pondrá énfasis en los recursos, tecnologías e infraestructura, los modelos de negocio y las capacidades necesarias. El cambio climático Cuando nos referimos al cambio climático no nos estamos refiriendo a las variaciones puntuales interanuales del clima en una región determinada sino a las tendencias de cambio a lo largo de los años de esa región. Los cambios a los que nos referimos son los que principalmente tienen efecto sobre la temperatura ambiente y el régimen de lluvias. También es importante los cambios que se presentan en los eventos meteorológicos extremos. En particular son relevantes las existencias en la atmósfera de los llamados gases de efecto invernadero. Gases de efecto invernadero Un gas de efecto invernadero (GEI) es un gas atmosférico que absorbe y emite radiación dentro del rango infrarrojo. Este proceso es la fundamental causa del ”efecto invernadero” llamado así por su similitud a lo que ocurre en los invernaderos de cultivo si bien se trata de un principio diferente. Los principales GEI en la atmósfera terrestre son el vapor de agua, el anhídrido carbónico, el vapor de agua, el metano, el óxido de nitrógeno y el ozono. Sin los gases de efecto invernadero la temperatura promedio de la superficie terrestre sería alrededor de −18 °C,2 en lugar de la media actual de 15 °C. El efecto invernadero La atmósfera, es muy transparente para la luz visible pero es poco transparente para la radiación infrarroja. La luz solar llega sin grandes obstáculos hasta el suelo, lo calienta, dando lugar a que emita rayos infrarrojos (ondas caloríficas), los cuales, a diferencia de los rayos de luz, son absorbidos en gran parte por la atmósfera a través de los gases GEI. Al final la cantidad de energía emitida al espacio tiene que ser la misma que la absorbida, pero la superficie terrestre tiene que alcanzar la temperatura en que ambos flujos se equilibran, la cual es más alta en presencia de una atmósfera que absorbe rayos infrarrojos. Esto es similar a un invernadero destinado al cultivo con techo de cristal, aunque en realidad el cristal de un invernadero protege de la pérdida de calor más porque interrumpe la circulación del aire, que porque sea opaco a los rayos infrarrojos. El efecto invernadero El efecto invernadero es un fenómeno natural, pero la alusión frecuente a él en relación con el calentamiento global hace creer a algunos que es en sí indeseable, y una consecuencia reciente de la contaminación atmosférica. Hay que aclarar que el calentamiento no es atribuido a la simple existencia del efecto invernadero , sino al aumento de este por encima de los valores que permitieron la creación de la vida tal como la conocemos hoy por acción del hombre. Los gases de efecto invernadero son naturales, ya que que existen en la atmósfera desde antes de la aparición de los seres humanos. El efecto invernadero A partir de la Revolución industrial de mediados del siglo XIX, y debido principalmente al uso intensivo de combustibles fósiles en las actividades industriales, la ganadería y el transporte, se han producido sensibles incrementos en las cantidades de óxidos de nitrógeno y dióxido de carbono emitidas a la atmósfera. Se estima que también el metano y el óxido nitroso están aumentando su presencia por razones debidas a la actividad humana, en mayor parte la ganadería y la agricultura ganadera. Además, a este incremento de emisiones se suman otros problemas, como la deforestación, que han reducido la cantidad de dióxido de carbono retenida en materia orgánica, contribuyendo así indirectamente al aumento antropogénico del efecto invernadero. El efecto invernadero La actividad humana desde el inicio de la Revolución Industrial (considerado en 1750) ha producido un incremento del 45 % en la concentración atmosférica del dióxido de carbono (CO2) desde 280 ppm en 1750 a 400 ppm en 2015. Este incremento ha ocurrido a pesar de la absorción de una gran porción de las emisiones por varios depósitos naturales que participan del ciclo del carbono como ser los océanos. Las emisiones de CO2 producidas por actividades humanas provienen de la combustión de combustibles fósiles, principalmente carbón, petróleo y gas natural, además de la deforestación, la erosión del suelo y la crianza animal. El efecto invernadero Se ha estimado que si las emisiones de GEI continúan al ritmo actual, la temperatura de la superficie terrestre podría exceder los valores históricos tan pronto como 2047, con efectos potencialmente dañinos en los ecosistemas, la biodiversidad y peligraría la subsistencia de las personas en el planeta. Estimaciones de agosto de 2016 sugieren que de seguir la actual trayectoria de emisiones la Tierra podría superar el límite de 2 °C de calentamiento global, en 2036. Este limite ha sido señalado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) IPCC como un calentamiento global “peligroso”. El efecto invernadero La contribución de cada gas al efecto invernadero está determinada por las características de ese gas, su abundancia y los efectos indirectos que pueda causar. Por ejemplo, el vapor de agua y las nubes tienen una concentración de hasta 50.000 ppm y contribuye al efecto invernadero entre un 36 y 72 %. El CO2 tiene una concentración de 400 ppm y contribuye entre un 9 y un 26 %. El metano tiene una concentración de 1.8 ppm y contribuye entre un 4 y un 9 % En realidad el metano tiene un efecto de invernadero de entre un 23 y 24 veces superior al del CO2, pero como como su concentración es menor el efecto es menor. Las Emisiones de CO2 La concentración actual de CO2 (alrededor de 400 ppm) es la mayor calculada en los últimos 2 millones de años, y su ritmo de crecimiento ha alcanzado las 2 ppm anual, cuando a mediados del siglo 20 era de 0,4 ppm por año. Indudablemente la revolución industrial basada en una economía de uso de hidrocarburos es la que está provocando el aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera. Las emisiones anuales alcanzan los 40.000.000 de K toneladas. Se calcula que el 50 % de las emisiones provienen de la industria eléctrica y de la calefacción. El 20 % proviene del transporte, otro 20 % proviene de la industria manufacturera. El resto son los equivalentes de metano expresados en CO2 principalmente provenientes de la agricultura. Emisiones de CO2 de la Industria eléctrica Cuando producimos energía eléctrica en base a generación térmica estamos quemando combustibles que poseen carbón y por lo tanto estamos emitiendo CO2. La cantidad de CO2 emitido depende del combustible utilizado. El valor para el carbón es de 0.94 t/MWh (ciclo de vapor) Para el Fuel-Oil o Gas-Oil, 0.74 t/MWh ( ciclo de vapor o turbina gas en ciclo abierto) Para el Gas Natural, 0.42 t/MWh (ciclo combinado) Para la Madera, 0.90 t/MWh (ciclo abierto) El caso de la madera se merece una consideración especial Emisiones de CO2 de la Industria eléctrica El hecho de que emitir CO2 así como otros GEI es nocivo para el medio ambiente es algo de lo cual se empezó a tomar conciencia ocurrió hace solo unos cuarenta años. En 1979, en mis clases de maquinas térmicas se me enseñaba que una combustión limpia de un hidrocarburo era aquella cuyo producto de combustión, además de la energía , era solo aire caliente, vapor de agua y CO2, lo sucio eran las cenizas y lo contaminante el NOX (óxido de nitrógeno) y el CO. Incluso se puede decir que el descubrimiento del efecto de los GEI tuvo orígenes políticos. El cambio climático Si bien hoy día hay evidencia científica y concordancia entre la comunidad científica de la existencia de un cambio climático debido a la emisión de GEI por la actividad humana, hay algunos escépticos que opinan que la tierra se autorregulará, por ejemplo aumentando la absorción de CO2 por parte de los océanos, aumentando la cantidad de vegetales que habitan los mismos sin llegar a un proceso extremo de acidificación. Lo cierto es que nuestro planeta pasó millones de años para filtrar el CO2 de la atmósfera mediante energía solar (fotosíntesis de los vegetales) y la civilización actual en menos de 200 años estamos devolviendo el carbón a la atmósfera. Pensemos que poco después de la creación de nuestro planeta este poseía una atmósfera con abundante CO2 y por lo tanto era un El cambio climático planeta muy tropical, con abundante vegetación que nacía y moría tomando para su desarrollo estructural carbón de la atmósfera que se iba poco a poco enterrando bajo tierra. Así el planeta se fue enfriando a medida que el CO2 fue disminuyendo y se llegó a un equilibrio que permitió el desarrollo humano. Los vegetales enterrados, sometidos a alta presión y temperatura se transformaron en carbón mineral, e hidrocarburos, tanto sólidos como gaseosos o líquidos. Cuando usamos combustibles fósiles estamos usando la energía solar del pasado almacenada en forma de energía química y corremos el riesgo de volver a ese pasado hostil para el hombre. Los mercados energéticos Como vimos anteriormente nuestra civilización se basa principalmente en el uso de las energías fósiles, para el mercado eléctrico, para el transporte y para la industria manufacturera. Una forma clara de revertir el cambio climático, es comenzar a usar fuentes de energía que no produzcan gases de efecto invernadero. Una forma es comenzar por el mercado eléctrico, uno de los mayores emisores de GEI y luego en forma paulatina ir “electrificando” el transporte y la industria manufacturera, es allí donde aparecen las energías renovables. En lo que sigue del curso vamos a poner énfasis en las Energías Renovables No Convencionales (ERNC) con énfasis en la eólica y solar. Las Energías Renovables No Convencionales Según la definición de la Agencia Internacional de Energía (IEA), la Energía Renovable es la energía que se deriva de procesos naturales (por ejemplo, la luz solar y el viento) que se reponen a una tasa más alta que su tasa de consumo. Ejemplos de estos son la Energía solar, eólica, geotérmica, hidráulica, la bioenergía y la energía de los océanos son fuentes de energía renovable. Cuando llegamos a la definición que la IEA hace de las ERNC, lo que hace es excluir a la hidroeléctrica de gran porte. Sin embargo veremos que hay varios conceptos que han ido cambiando con el tiempo Las Energías Renovables No Convencionales Fuentes de Energías Alternativas: Surge como concepto en la década de los 70 del pasado siglo, cuando empezó a tenerse en cuenta la posibilidad de que las energías de origen fósil, se agotasen en un plazo más o menos corto y se entendía necesario identificar alternativas para el suministro energético. HOY es un concepto no vigente ya que las ERNC no se presentan como una posibilidad o alternativa, sino como algo necesario.
Energías Verdes o limpias:
El término se utiliza para referirse a aquellas fuentes de energía primaria “respetuosas” con el medio ambiente, entre las exigencias para entrar en esta categoría está la no emisión de GEI, pero hay otras como los impactos sociales, o el impacto paisajístico o el ruido. No resulta en una terminología rigurosa y técnicamente aceptada. Cualquier fuente de energía genera impactos asociados a la tecnología utilizada o el “combustible” empleado. Las Energías Renovables No Convencionales En realidad, si reflexionamos sobre el origen de la energía, observamos que salvo la geotermia y la energía nuclear todas las energías que conocemos dependen del sol. Los combustibles fósiles almacenan la energía solar del pasado, y es el sol el que sube el agua a las represas hidroeléctricas o el que provoca los vientos calentando el aire. Por lo que podemos decir que las ERNC utilizan el sol de “hoy o del presente” y las otras energías utilizan el sol del “pasado lejano”. En este sentido observemos que la energía nuclear es un sol en si mismo, y que la geotermia utiliza lo que a quedando en nuestro planeta del sol que alguna vez fue. Las Energías Renovables No Convencionales En la definición de ERNC se excluye como dijimos a las Centrales Hidroeléctricas de gran porte. Hay varias razones para ello, una es el gran impacto ambiental y social que producen, otra es la vida útil no definida por los problemas de colmatación que pueden sufrir los embalses. Pero la principal es la producción de GEI de los embalses. En efecto, las centrales de embalse variable presentan una alternancia entre lecho seco y lecho húmedo que favorece el crecimiento de vegetales y pasturas y luego su descomposición con la consecuente emisión de metano. Destacamos que en algunas definiciones de metano, se lo designa como el gas de los pantanos y dijimos que su efecto invernadero es hasta 24 veces el de CO2. Las Energías Renovables No Convencionales Por el contrario, la quema de biomasa produce tanto CO2 como la combustión del carbón, sin embargo, si se trata de biomasa proveniente de plantaciones realizadas con fines energéticos o que la obtención de energía es un subproducto, esta energía será neutra con el balance de carbón en el medio ambiente, ya que se devuelve lo que se extrae. Esto no ocurre con la biomasa obtenida de procesos de deforestación. Algo similar ocurre con los procesos de agricultura cuando se desforesta para plantar cultivos que extraen menos CO2 de la atmosfera o para criar ganado que se alimenta de pasturas y produce metano. Las ENRC y el medio ambiente Ha surgido un nuevo paradigma: Energía en el marco de un modelo de desarrollo sostenible. Según el informe de la Comisión Mundial sobre el Medioambiente y el Desarrollo (Comisión Brundtland): “El desarrollo sostenible es el desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades.” Según Sha Zhukang (Secretario General de la Conferencia Rio + 20): “¡El desarrollo sostenible no es una opción¡ es el único camino que nos permite a la humanidad compartir una vida digna en este, nuestro único planeta”. Las ENRC y el medio ambiente
La mayor parte de la energía generada en el mundo proviene de
combustibles fósiles no renovables, cuyo consumo atenta contra la sostenibilidad a largo plazo, no solo en relación con la disponibilidad del recurso energético sino también con los impactos en todo el ciclo de vida. Las fuentes renovables, con balances nulos o casi nulos de carbono atmosférico asociados, impactan en menor intensidad a lo largo de su ciclo de vida. Las fuentes de energía renovables a diferencia de los combustibles fósiles o las centrales nucleares, tienen gran diversidad y abundancia. A escala humana, estas fuentes se consideran fuentes inagotables. Las ENRC y el medio ambiente
Su explotación no produce GEI (o casi nula), contrariamente a lo que ocurre
con los combustibles fósiles (considerando un balance de carbono neutro en la quema de biomasa). Adicionalmente, las fuentes renovables de energía no presentan el riesgo asociado al aprovechamiento de la energía nuclear. Es cierto que fabricar y montar un parque solar produce GEI, pero su emisión se compensa en tres años de operación y tienen una vida útil de al menos 30 años. En el caso de un parque eólico estos valores se calculan en dos años y poseen una vida útil de al menos 25 años. Las ENRC y el medio ambiente Las ERNC tienen menores impactos que la convencionales pero no son nulos, algunos sistemas de energía renovable presentan impactos medioambientales y sociales particulares. Los aerogeneradores pueden producir contaminación acústica y afectación del paisaje y de la emigración de aves; las centrales hidroeléctricas pueden crear obstáculos a la emigración de ciertos peces, áreas inundables, pérdida de biodiversidad; El aprovechamiento de la biomasa, si los nutrientes extraídos no se reponen adecuadamente o la selección del sitio fue inadecuada, pueden generar daños permanentes al suelo y emisiones de particulado y disposición final de cenizas. Las ENRC y el medio ambiente Las fuentes renovables, en general, tienen una naturaleza difusa, lo que implica que puede haber una baja densidad de generación por unidad de superficie. Por este motivo su generación suele involucrar grandes extensiones de terreno e inversiones que en términos económicos pueden no ser rentables en comparación con las fuentes fósiles si se analizan en el corto plazo y si no se tienen en cuenta los costos ambientales de estas. La demanda de energía eléctrica exige fuentes de generación de potencia firme, atributos que se deben manejar en la planificación de la expansión energética basada en renovables y requieren una integración a los despachos de carga de las redes eléctricas en cada país, y requieren como veremos un abordaje sistémico del problema como veremos más adelante El Potencial de las ENRC Sin embargo, el desarrollo tecnológico de los últimos años y el enorme potencial del recurso eólico y solar en la región latinoamericana hace de estas tecnologías unos jugadores formidables que tendrán cada vez mayor participación en los mercados energéticos del mundo y de nuestra región en particular. Tengamos en cuenta que Los recursos renovables como ser la eólica o la solar, o incluso, las Pequeñas centrales hidroeléctricas (PCH) fueron las primeras formas de energía que utilizó la humanidad. Sin embargo a poco de comenzar la revolución industrial se empezaron a dejar de lado por la falta de posibilidad de gestión de estos recursos. En este aspecto no podían competir con los fósiles, salvo con la aparición de grandes centrales hidroeléctricas de embalse. El Potencial de las ENRC A partir de fines del siglo pasado, luego de las sucesivas llamadas “crisis del petróleo” y de la toma de conciencia del cambio climático comenzó la era moderna de las llamadas “Energías Renovables No Convencionales”. Como dijimos entre estas se destacan la Eólica y la Solar Fotovoltaica por su enorme potencial. A razón de 1 MW eólico cada 20 hectáreas y de 1 MW solar cada 2 hectáreas es fácil comprender que en una pequeña fracción del territorio de Latinoamérica se podría generar toda la energía necesaria para abastecer a nuestro continente, tanto en el mercado eléctrico como en el transporte y la industria manufacturera. El desafío ahora es como integrar estas tecnologías en los mercados energéticos Algunos mitos sobre las ENRC A medida que las ERNC comenzaron a introducirse en los mercados eléctricos aparecieron algunos mitos sobre estas que se transformaron en barreras iniciales para su desarrollo, pero que paulatinamente van cayendo conforme estas van avanzando, entre estos mitos se destacan:
1. Que la energía producida es de mala calidad y solo puede introducirse
en forma parcial o marginal. 2. Que se trata de una forma de generación muy costosa. 3. Que las variaciones de potencia horaria son muy bruscas y la hacen ingobernable. Se las mal llama intermitentes, cuando son variables persistentes. Algunos mitos sobre las ENRC
3. Que siempre precisan gran cantidad de respaldo firme. Por cada MW
eólico que se instale es necesario instalar un MW térmico y de funcionamiento muy flexible (como ser turbinas de gas y o motores). 4. Que consumen gran cantidad de redes de transmisión. Como sus factores de capacidad oscilan entre 20 y 50 % las redes eléctricas no se utilizan en forma eficiente.