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Pensando Sin Dios, Ley y Orden

Por Humberto Gómez Sequeira-HuGóS


8 de julio de 2020 | Año del Señor Coronavirus | 11:22 a.m.

El desentrañamiento del cuerpo de Karl Marx


Marx fue sólo un teórico con una visión equivocada de la condición humana y del mecanismo de
su historia que vivió en un siglo político atrasado. El mal gusto que la guerra de clases de ese entonces
produjo ya fue superado por el placer de la democracia capitalista. El capital convertido en gobierno
se adecúa a la condición humana, resuelve la lucha de clases y produce la historia como una elección
supervisada por el Estado.

Ese es un resumen de la crítica de los pequeñoburgueses intelectuales que son los abanderados
de la fe en la evolución de la sociedad humana sin el cordón umbilical de clase y el Estado Neutro.
Ellos continúan atacando el cuerpo de Marx como predadores que necesitan arrancarle las ideas que
tergiversan para formar el cuerpo del monstruo ideológico con que combaten a la clase de su
manifiesto, el proletariado, y defienden a su enemigo, la burguesía. El estímulo material y psicológico
de su fe es su deseo de ser como la burguesía: un animal libre del pecado original y remordimiento
moral.

Marx fue un revolucionario que quitó el velo de la hipocresía a la sociedad burguesa. Esta es una
asociación de cazadores que vive del consumo de la energía del proletariado. Sin embargo, los
cazadores pretenden ser iguales a sus presas y piadosos con ellas. La burguesía y pequeña burguesía
no perdonan a Marx por haber preferido aliarse con el proletariado —la clase que ellos desprecian—
y usar su genio para crear el método para terminar el modo de vida burgués resultante de dicha cacería
disfrazada de libre empresa.

La intelectualidad pequeña burguesa que desentraña el cuerpo de Karl Marx es una clase adicta al
placer que produce el usufructo de la idea de ser burgués. No obstante, algunos de ellos lo admiran,
pero decapitado: sin el proletariado, la lucha de clases y la revolución social. Esa es su condición para
declararse socialistas cuando necesitan defender su estilo de vida aburguesado.

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