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CAPITULO CUARTO

LA ACULTURACIÓN

"Pienso en Alemania en la noche, entonces huye de mí el sueño..."

'Denk ich an Deutschland in derNacht, dann bin ich um den Schlafgebracht..."


Heinrich Heine

"Uno no se rompe - si todavía tiene una tarea que hacer"


"Man geht nicht kaputt - wenn man noch eine Aufgabe hat..."

Introducción:

Tratar el tema de la aculturación de los alemanes en Colombia, en el


período en cuestión, no es fácil por cuanto, primero, es un campo prácticamente
inexplorado y, segundo, ya de por sí es una realidad muy compleja en la que
intervienen numerosos elementos, las situaciones concretas varían mucho entre
sí.
Destaco brevemente algunos elementos de la situación especial del
exilado:
-Las condiciones nuevas, anormales, dramáticas y hasta trágicas que
enfrenta al abandonar su propio país.
-La situación problemática a su llegada al país que lo acoge o
simplemente lo tolera.
Los problemas externos, "objetivos" e internos, "subjetivos", a los cuales
el emigrante/exilado se ve expuesto, y muchas veces "lanzado", sin haberlo
buscado o deseado.
También hay que considerar el medio social, económico y sicológico al
que llega el inmigrante. N o todo es dramático y negativo, el mismo inmigrante
se aprovechará de más de una ventaja que le proporciona su "status" de
extranjero, de "ser-distinto"!
Qué sucede al comienzo de su arribo, en una especie de 'choque cultural'
y a lo largo de su estadía, en un supuesto proceso de adaptación?
A qué cambios y transformaciones se ve sometida su propia 'identidad',
con todo lo que esto implica?
Su 'personalidad' queda finalmente escindida o ambigua o ambivalente,
o -por qué no- enriquecida?

428 K l a u s Mann, "Der V u l k a n " , p.558.

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De todos modos, casi a priori, habría que diferenciar entte dos
situaciones diferentes: la de la ptimeta generación de emigrantes/exilados y la de
la segunda generación.
Quiero de entrada advertir claramente que, aunque toda mi exposición
se fundamenta en estudios serios, como el escrito de León y Rebeca Grinberg
'Psicoanálisis de la migración y del exilio', en entrevistas personales y en largas
reflexiones propias, con todo, no tepresenta un tesultado totalmente acabado y
terminado. Las afirmaciones puestas a considetación aquí son parte de todo un
estudio en ptoceso de sedimentación y confrontación que pienso publicar en una
posterior oportunidad.

4.1- La partida

- Las causas
Comienzo por el principio: la partida de la patria. Cuáles fueron las
razones que justificaron el partir?
"A veces puede tratarse de una búsqueda de nuevos horizontes, nuevas
experiencias, ottas formas de cultura y filosofías de vida: responderían al afán de
conocimiento y el deseo de descubrir lo lejano, lo ignoto, quizá lo considerado
prohibido o idealizado, ...
En otros casos, el deseo de partit puede ser el resultado de una vivencia
persecutoria de la que se intenta huir..."

- La salida

Los autores citados también recalcan, como yo lo hice, la importancia de


diferenciar entre los emigrantes propiamente tales y los exilados y desterrados.
Estos últimos, cuya situación prácticamente era de personas que huyen, no
podían plantearse la alternativa de un posible tegreso, tenían que "quemar las
naves tras de sí" y todos sus esfuerzos y atención estaban fijamente orientados
hacia el lugar de destino, hacia la necesaria integración en el nuevo medio.
Para estos, "... el ambiente, en general, empieza a teñitse de variados
colores en relación con sus proyectos: el sitio que se piensa abandonar puede ser
denigrado, magnificando sus defectos, en la búsqueda de justificaciones que
refuercen los motivos pata partit, tendiendo -a la vez- a exagerar los encantos del
i ,1 430
nuevo lugar.
429 Grinberg, o.c. p.74.

430 Grinberg, o.c. p.78.

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"El que decide emigrar necesita apoyo para concretar esta decisión, y
hacet frente al enojo y críticas de los que se quedan, los objetos que serán
abandonados: amigos, vecinos, colegas, parientes, etc. ..."
Lo esencial de la salida estaría resumido en los siguientes elementos
fundamentales:
- hay una búsqueda, de 'cosas' nuevas, pero acompañada muchas veces
de indecisiones y temores.
- la partida puede ser una huida, que implica también una pérdida, total
o parcial, transitoria o definitiva, que conlleva muy posiblemente un proceso de
duelo por la pérdida. Para Grinberg, duelo significa: 'dolor' y 'desafío o combate
entre dos'. Ambos son aplicables a los emigrantes, "... ya que experimentan
'dolor' por lo que dejan y afrontan un 'desafío' ante lo que les espera". Dolor y
culpa, correspondientes a la perdida de partes del 'self.

4.2- La llegada

La problemática general está muy bien expuesta en la siguiente cita de


Klaus Bade:
"Los emigrantes con frecuencia llegaban mal preparados, porque disponían
solamente de una información insuficiente. Para muchos América Latina se
había convertido en su país de llegada por pura casualidad o una selección
negativa a falta de otras alternativas. Esta selección inicial dificultó mucho su
incorporación. Muchos emigrantes eran demasiado alemanes' como para
adaptarse a la cultura de los países receptores; echaban de menos lo que les era
lo más corriente: disciplina, puntualidad y limpieza..."

En un primer momento el emigrante/exilado, después de los percances


de la travesía, se encuentra con un 'nuevo mundo'.
Patrick von zur Mühlen, presenta una descripción bastante completa
de esta situación. Hace teferencia a aspectos a primera vista muy secundarios,

431 Grinberg, o . c , pp.78 y 77.

432 Grinberg o . c , p.84.- Mitscherlich, en su obra clásica "Die Unfáhigkeit zum


Trauern", también habla de "duelo" -' trauern'- en un significado freudiano
posiblemente más ortodoxo!

433 Klaus Bade o . c , p.211.

434 P. von zur Mühlen, Fluchtziel Lateinamerika, S.52 ff.

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pero que en la situación especial del exilado adquieren gran importancia: la
lengua y la gente, el clima y las comidas, las ciudades y la naturaleza.- "Todo es
tan distinto..." - Por ser completamente diferentes al medio que antes le era
familiar exigían al emigrado un cambio en todas sus costumbres de vida
habituales.
"Dificultades con el clima: ante todo emigrantes mayores y de salud
quebrantable ... con la altura. Las llanuras tropicales con su calor y alta humedad
y los bichos..."
También hay que mencionar el aspecto de la higiene y de la salud:
medidas higiénicas primitivas y atención médica defectuosa. Enfermedades
desconocidas, aunque comunes en el nuevo ambiente, tales como hepatitis,
amibiasis, malaria, fiebre amarilla..., para citar solo algunas.
Pero al emigrante se le presentaban primero otra clase de problemas que
tenían que ver, precisamente, con lo exótico del país de asilo: el petmiso de
entrada y de estadía, problemas de papeles y de alojamiento, la búsqueda de
trabajo y, ante todo, la base material para sobrevivir y vivir, eran lo prioritario y
lo determinante durante el comienzo en el país del exilio (en no pocos casos estos
problemas duraron toda la permanencia en América Latina).
Pasado el primer impacto con el nuevo mundo, con frecuencia se
presentaba también otro tipo de dificultades:
"...la pérdida de la patria, de la lengua, de los parientes y amigos ...
Emigrantes más jóvenes trataban de olvidar lo más pronto posible todo aquello
que les recordara de algún modo su patria alemana ..."
Las personas mayores en cambio: "... en su espíritu no habían llegado
todavía a América Latina. Lo criticaban absolutamente todo y lo comparaban
con su pattia, donde todo había sido mejor..."
También se dieron casos de emigrantes que, por el desarraigo anímico -
espiritual- y por penalidades materiales, no hallaron otra salida que el suicidio...!
"La lucha por la subsistencia, la responsabilidad por la familia y no en
último lugar el mantenerse unidos los emigrantes, ante todo al interior de las
comunidades y las organizaciones judías, fue lo que a la mayoría apartó de
cometer acciones desesperadas e irracionales ...

Grinberg, a su vez, observa que... "Los emigrantes en el barco o avión,


que los conduce hacia un mundo aún irreal para ellos, no saben, hasta haberío
vivido, que pasará mucho tiempo, aun después de llegados a tierra firme, antes

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de que sientan esa tierra como 'realmente firme'. El 'mareo' del viaje no
desaparecerá fácilmente."
Más adelante presenta unas características tan especiales de esta nueva
situación, que perfectamente podrían parecer exageradas a personas que no han
tenido estas experiencias o simplemente no las conocen!
"La sensibilidad del recién llegado, como del recién nacido, es grande. La
necesidad de sentirse bien acogido es tal que cualquier persona que le demuestre
algún interés, que manifieste cordialidad y empatia, o cualquier gestión que se
resuelva favorablemente, le hace sentirse querido, así como cualquier
contrariedad puede hacerle sentirse rechazado por el nuevo hogar."
"La tendencia más manifiesta inicialmente es la de idealizar el país
nuevo, magnificando sus cualidades positivas y subestimando lo abandonado.
Tal idealización lleva a estados hipomaníacos, y a vivencias de bienestar psíquico
y corporal, que suelen ser fugaces y transitorias.
...Los nuevos códigos de comunicación que deberá incorporar el recién
llegado, que le son prácticamente desconocidos o mal entendidos en sus primeros
contactos, aumentan el nivel de ambigüedad y contradicción implícitos en las
informaciones que recibe, ..."
"... En esa regresión a niveles más primitivos de funcionamiento mental,
las emociones suelen expresarse en relación con elementos tan primordiales como
la comida, que pasa a tener una significación de particular relevancia, ya que
simboliza el vínculo más temprano y estructurante que se ha tenido con la madre
o con su pecho ..."
En cierta ocasión una señora colombiana me comentaba que le llamaba
poderosamente la atención la importancia, para ella excesiva, que una familia
alemana le daba al tema de las comidas en la conversación en la mesa.
Profundizo un poco en el modo cómo los emigrantes perciben, a su
manera, este nuevo mundo. Ciertamente que para muchos es una percepción
marcadamente negativa:
Un emigrante alemán en Argentina, Paul Zech, para quien el criollo es
"poco de fiar" y "superficial", lo describe así: "Un inculto y parlanchín héroe de
la charlatanería y vago, que sueña con la revolución y la vida dulce, pero que no
logra hacer nada de utilidad ..."

435 Grinberg, o . c , p.91 ss.

436 P. von zur Mühlen,o.c, S.52:"... geschwatziger und ungebildeter Maulheld


und Nichtstuer, der von Revolution und süBem Leben tráumt, aber nichts Nützliches
zustandebringt...!"

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Gtinbetg habla de rechazo hacia el medio, que puede desembocar en
odio:
"[Los exilados] ... pueden sentirse (en los primeros tiempos), como
héroes, acogidos con admiración y simpatía, o como renegados, por sus
sentimientos de culpa [traición a la causa, a los que quedaron, a los que
murieron...].
En tales casos, pueden reaccionar con rechazo ante todo lo que ofrece el
país nuevo y no está en función del propio: costumbtes, idioma, trabajo, cultura,
etc. Este techazo enmascara tanto la culpa por los que se quedaron como el
rencor y el odio contta el propio país que los ha expulsado; odio que, por
absurdo que resulte, se proyecta sobre el país nuevo, el país que acoge. Y así, a
veces, en vez de ser vivido como sitio 'salvador', es sentido como el causante de
los males que sufre el exiliado, mientras se idealiza el hogar, con nostalgia sin fin.
A veces ocurre como con los niños de orfelinato que, al ser puestos en hogares
adoptivos, se vengan en los nuevos padres de las carencias sufridas: en el fondo,
porque recién ahora tienen quien les escuche."
En esta situación tan compleja parece que hubiera un esfuerzo y una
necesidad, tal vez no tan consciente, de afeitarse a su pasado, a sus raíces, a su
identidad. Pero negando o rechazando lo que le es extraño, reafirmando ante los
demás, y aun ante sí mismo, precisamente lo que tiene de distinto, lo que lo hace
'ser-diferente' a los demás, a la gente que lo rodea. El emigrante quisiera
mantener y conservar esa diferencia no solamente económica -de clase social- y
cultural -la lengua materna, ese "código secreto"!- sino una diferencia "esencial"
como queriendo expresar: "Yo soy distinto, a mí no me confunda con los
demás..!" O peor: "Si me adapto o aproximo demasiado a la manera de ser
'latina' , me rebajo y pierdo mi personalidad ...". Naturalmente que la mayoría
de las veces esta actitud despierta en los demás el rechazo y el desprecio. Es decir,
el exilado cada vez estatá más distante!

Distanciamiento

Von Zur Mühlen llega a hablar de una 'delimitación' (Abgrenzung)


frente a la población del país receptor y hace una observación bien interesante:
"Conforme a su grado de cultura y nivel de desarrollo seguramente
también habrían influido ciertas arrogancias europeas. Pero una interpretación
moralizante no es una explicación satisfactoria. Sería equivocado el achacar este
distanciamiento solo a los emigrantes o solo a los nativos; más bien era una

437 O . c . p . 1 9 1 .

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consecuencia de un muruo distanciamiento. ("...sie war vielmehr Folge
wechselseitiger Fremdheit.")
"Pero sobre todo en países latinoamericanos ... poco desarrollados
reinaba entre los emigrantes la tendencia a incorporar para sí lo menos posible de
la manera de ser y de los atributos de los nativos (Einheimische) ...la
'nativización' ('Verhiesigung') se consideraba como una pérdida de la identidad
europea. El emigrante por regla general, contaba con una formación
desigualmente superior a la del nativo promedio y tenía una relación distinta
hacia el ttabajo y el tiempo, la cual le brindaba el sentimiento de una
disposición disciplinada y así superior. Por qué tendría que adaptarse
'hacia abajo'?...'"!
El testimonio de una autota de ascendencia alemana, judía, radicada en
Estados Unidos, Helen Epstein , en su fascinante libro "Los hijos del
Holocausto", complementa magníficamente lo afirmado anteriormente:
"...'Suramérica me pareció fea', me informó Gabriela. 'Era extraña
(fremdartig). Descompuesta. La gente estaba vestida de otro modo y su lengua
yo no la entendía. Yo llevaba pantalones y la gente se quedaba mirándome,
porque las muchachas allí no los llevaban. Al comienzo yo estaba muy contenta
de estar en el Colegio Alemán. Los alemanes le dan mucha importancia a tres
cosas: un buen rendimiento en el deporte -y yo era estupenda; ser rubio y
ojiazul - y ese era mi caso; y ser disciplinado -y yo también cumplía esto.
Me querían mucho.' ..."
"En el Colegio dominaba esta manera de pensar: todo lo europeo es
mucho mejor que cualquier cosa propia del país. Los nacionales (Einheimische)
eran contemplados como una clase inferior, como un estrato problemático ...
había hasta un nombre para ellos: los nativos (die Hiesigen). Aunque el Colegio
era frecuentado tanto por suramericanos como por alemanes, allí el espíritu
alemán estaba mucho más impregnado. Nosotros estudiábamos Historia
alemana desde el comienzo de las tribus germánicas. Leíamos a Goethe,

438 Patrick von zur Mühlen, "Jüdische und deutsche Identitat von Lateinamerika-
Emigranten" in: EXILFORSCHUNG Jahrbuch, Nr.5, 1987 S.57, 58.- Cf. Deutsche
Bibliothek, FFm."... Der Emigrant verfügte in der Regel über eine ungieich hóhere
Bildung ais der durchschnittliche Einheimische und er hatte ein anderes
Verháltnis zu Arbeit und Zeit, das ihm das Gefühl einer disziplinierten und damit
Uberlegenen Lebensfühung vermittelte. Warum sollte er sich «nach unten» anpassen?
..."(S.59)

439 Helen Epstein; Die Kinder des Holocaust. Gespráche mit Sohnen und Tochtern von
Ueberlebenden", C.H.Beck, München, 1987; p.120 s.

225
Schiller, Kleist y autores que ni siquiera estaban traducidos a otras lenguas... Los
alemanes de la segunda y tercera generación ciertamente con el tiempo se volvían
más sueltos, pero los de la primera generación en Suramérica siempre andaban
muy tiesos, con zapatos muy bien lustrados y algunos hasta llevaban el cabello
como Hitler. En la casa de una muchacha, amiga mía, las paredes estaban llenas
de fotos de los desfiles nazis'..."
Muchos emigrantes mantenían la convicción de poseer una 'cultura
superior', -no una raza superior!- entre otras cosas, por su formación académica o
técnica, por su disciplina y rigidez ante el trabajo, que siempre tomaban muy en
serio, por su puntualidad y sentido de cumplimiento del deber a toda ptueba
(Pflichtgefuhl) y cietta pasión pot la verdad y la honestidad, que a muchos
latinos podría parecer exagerada, demasiado ingenua y casi ridicula ...
También habría que considerar la diferencia en el aspecto teligioso, no
solamente en lo que respecta a lo ritual, sino a los distintos enfoques de la motal
luterana/calvinista, judía y la moral católica ...!
En este tema se puede hablar, con más propiedad, de un choque
cultural: "Nivel de formación, facilidades para lenguas, edad y disposición
receptiva era factores decisivos..."
Pero había algunos emigrantes, especialmente entre los mayores, "... que
en absoluto no se preocupaban por el conocimiento de la lengua, del país y de la
gente..."! "En parte era esto una respuesta al choque cultural ante un medio
extraño, al que algunos no supieron medírsele..."
Esto último me hace pensar en que no pocas veces habremos de
enconttar entre los emigrantes mayores, atributos no muy favorables al mutuo
encuentro y entendimiento como son la altivez, la arrogancia y el desprecio hacia
lo 'criollo'!
Esta clase de emigrantes difícilmente podía encontrar elementos
comunes con los habitantes de su entorno. Había un "abismo de eones
culturales" ("ein Abgrund von Kulturáonen") y "una desconfianza mutua casi
insuperable"!
De nuevo acudo a Helen Epstein quien nos relata su experiencia con sus
padres y amigos: parece que tenían la costumbre de salir al campo, a los bosques
y pasar reunidos unos ratos muy agradables, lejos de los 'americanos', que los
cohibían. Estando entte ellos, en confianza, eran otras vez las personas

440 P. von zur Mühlen, Fluchtziel Lateinamerika, S.58.

441 P. von zur Mühlen,o.c.,S.56."...eine schier unüberwindliches Misstrauen auf


beiden Seiten..."

226
espontáneas, libres, sueltas, que se podían comunicar con Tranquilidad y sin
temores, contar chistes y cuentos, formular teorías, etc.
"...tan pronto retornaban a la gran ciudad, hablaban enredado y se
cortaban. No hallaban las palabras correeras. La amplia y colorida gama de sus
vivencias se cerraba cuando se encontraban con personas que hablaban en inglés.
Se veían forzados a moverse inseguros y a tientas a través de un idioma que
desfiguraba lo que querían expresar, los presentaba como indefensos... Otra vez
se convertían en 'outsiders' (Aussenseiter)"
Pero quiero mencionar otro aspecto importante en esta situación: Se
trata del grupo receptor, es decir, de los anfitriones, que obviamente también
jugaba un papel fundamental en una situación tan complicada!
Opina Grinberg, que si el llamado 'grupo receptor' estaba en cierto
modo preparado para recibir a los exilados, ya sea porque los había invitado
previamente o porque ya estaba avisado,...
"en tal caso, la recepción será positiva o, por lo menos no habrá
hostilidad manifiesta. Si el recién llegado irrumpe sin previo aviso, podrá
despertar una reacción inicial de 'ponerse en guardia' como preparándose para
rechazar cualquier posible ataque hasta conocer sus intenciones, especialmente si
se le considera agresivo o amenazador para el grupo.
Desde luego, la actitud del inmigrante, su personalidad y su conducta
podrán reforzar o modificar estas expectativas y las primeras impresiones..."
Y destaca el mismo autor orto aspecto bien importante: la inseguridad y
posible agresividad del anfitrión.
"No solo el que emigra siente en peligro su propia identidad: también,
aunque en distinta medida, la comunidad receptora puede sentir amenazada su
identidad cultural, la pureza de su idioma, sus creencias y, en general, su
sentimiento de identidad grupal."
Pero muy posiblemente entre los anfitriones se encontraban también
pocos o muchos 'congéneres' o 'compatriotas'. Cuál era la relación con ellos?
La actitud de los 'paisanos' puede ser poco amistosa o poco acogedora, es
decir, negativa:
Uno podría suponer que "... los emigrantes en América Latina en primer
lugar buscarían contacto y ayuda en aquellos círculos que les eran más cercanos
por la lengua y por la procedencia territorial: los alemanes en el extranjero,
residentes en parte desde muchas generaciones en ulttamar. Pero la realidad era

442 Epstein o . c , p.154.

443 Grinberg o.c. ambas citas: p.102 y 100.

227
otra, puesto que estos alemanes en gran parte estaban predispuestos en contra de
los exilados debido a la propaganda nazi y no solamente se negaban a establecer
contacto con ellos, sino que en parte hasta se les enfrentaban con abierta
hostilidad. Pot regla general los alemanes en el extranjero (Auslandsdeutsche)
tenían una mentalidad nacionalista alemana (deutschnational) y conservadora.
Su imagen de Alemania se basaba en el Imperio Alemán de 1914 y no había
elaborado todavía ni la derrota de la Guerra ni los cambios políticos posteriores a
1919. Esta mentalidad, marcadamente conservadora, representaba un suelo fértil
para la propaganda del Tercer Reich en el extranjero, en la que, más que la
ideología nacionalsocialista, se propalaban ptetensiones patrióticas de [supuesto]
prestigio y grandeza mundiales."
"La barrera entre los judíos advenedizos y las comunidades judías ya
establecidas con frecuencia era grande. A esto se añadía que entre los emigran-
tes judíos de la Alemania nazi apenas había conformaciones grupales, debido a
grandes diferencias en la estratificación social, procedencias regionales y
• • i, • M445

convicciones políticas.
Quieto recordar, de paso, lo ya dicho en otra parte de este estudio sobte
esa marcada divergencia de mentalidades entre los mismos alemanes, que no
pocas veces llevó a serias pugnas entte ellos.
Pero la actitud de los alemanes ya establecidos en el país también fue,
con bastante frecuencia, de recepción positiva, especialmente entre las Comuni-
dades, Asociaciones religiosas o laicas de ayuda, que tuvieron un papel muy
importante en el difícil proceso de integración de los emigrantes.
4.3- La adaptación
Sin demeritar lo expuesto hasta ahora, debemos tener en cuenta que
naturalmente entre los exilados no todo eran sentimientos de superioridad o de
choque cultural. En la gran mayoría de los casos se inició un largo y arduo
proceso de 'aclimatación', es decir, de adaptación.
A un nivel todavía bastante amplio, Paul Adams habla de "los problemas
de la asimilación" y hace referencia a "tres tipos de relación entte inmigrantes y
nativos":

444 P. von zur Mühlen, o . c , p.60.

445 Klaus B A D E , o.c. p.211.

446 P. von zur Mühlen, o . c , p.67.

447 willy Paul Adams Los EE. UU. de América, siglo XXI, 1985. Págs. 192 ss.

228
- El inmigrante renuncia a cuanto le permitiera la naturaleza de su
cultura natal, asimilando voluntariamente cuanto le fuera posible de la cultura
nativa.
- Participa de una mezcla de culturas, lo que afecta tanto a su propia
mentalidad como a la de los nativos, dando lugar a un reajuste recíproco y a una
nueva cultura.
- Puede preservar lo más esencial de sus valores y adaptarse a la cultura
nativa en la medida estrictamente necesaria para alcanzar el éxito material y la
identificación pública con la sociedad nativa, petmaneciendo en definitiva al
margen del grupo dominante en importantes facetas de la vida.
Otro punto, que no había considerado anteriormente, es el teligioso. que
Adams menciona al tratar los "síntomas de asimilación deficiente."
Escribe que en los años iniciales, en Estados Unidos, el grupo inmigrante
tendía a acentuar su identidad religiosa, en la que hallaba consuelo: "...el poder
cohesivo del factor religioso podía resultar en ocasiones más fuerte que otros
elementos disgregadores..."!
A un nivel más concreto cabe plantear, a propósito, la siguiente
pregunta: un exilado católico, que encontraba en Colombia a su Iglesia muy bien
instalada, se sentía mejor yendo a Misa -que entonces era en latín- en una
parroquia del barrio o en la parroquia especial de los católicos alemanes?
Seguramente con bastante frecuencia los padres no católicos hacían
bautizar a sus hijos en la Iglesia católica -"la religión del país"- por pura
conveniencia, sin preocuparse por una consecuente educación en la religión
católica y, a veces, ellos mismos eran 'conversos' por simple pragmatismo, sin
ninguna convicción personal.

Antes de continuar, es necesario hacer una diferenciación entre los


significados de los términos empleados:
Por adaptación queremos significar los esfuerzos del emigrante por
acomodarse y en cierta medida, someterse, a las condiciones objetivas de su
nuevo y extraño entorno. La asimilación viene a ser ya el proceso de
internalización de esas condiciones y de ese 'modus vivendi'. El término
aculturación se puede emplear en sentido más estricto. Entonces es posible
diferenciar entre la aculturación funcional y la aculturación subjetiva que, de
todos modos, nunca se dan en una forma 'pura' en la vida real!

448 Ibidem, p. 200 ss.

229
Aculturación funcional significa el cambio de la propia lengua, del
comportamiento social y de la representación del medio con la finalidad
inmediata de asegurar la propia existencia.
La aculturación subjetiva trasciende a la anterior y logra, o busca, la total
• J • £• • / 1 . 4 4 9

identihcacion con ia nueva patria.


Para el caso de mi estudio, tratándose de una minoría muy particular y
en circunstancias muy especiales, prefiero no utilizar el concepto de 'hibridación
cultutal' como lo emplea Néstor García Canclini en su estupendo trabajo. Para
un análisis más amplio que el presente, sobre el caso de la segunda generación de
los emigrantes/exilados, posiblemente se podrían emplear algunas de las
categotías de García Canclini.

Adaptación

Acerca de esta problemática se encuentra un estudio amplio y sugestivo


de Peter Waldmann, "Conflicto cultutal y adaptación", en el caso de Chile.
Entre otros, presenta un esquema de trabajo sobre el desarrollo de la relación
entre el grupo germano-chileno y la sociedad materna ("Beziehung zwischen dei
deutsch-chilenischen Volksgtuppe und der Muttergesellschaft").

Para el exilado y el emigrante, la adaptación era ciertamente un


imperativo, una especie de 'ley de sobrevivencia'!
La señora Frauke Meyer-Gosau escribe acerca de Elisabeth Young en
Sydney: "...su máxima de sobrevivencia también refleja las experiencias de esta
generación de inmigrantes: 'Uno debe adaptarse. Los que no fueron capaces de
hacerlo se hundieron; así como mi esposo. Yo pude adaptatme, por eso lo he
i i , 1.452
logrado ...

449 Friedrich Heckmann - Bamberg:"Zeitschrift für Kulturaustausch" 1995/ 1


"Migration und kultureller Wandel", Institut Auslandsbeziehungen, Stuttgart.
Pág.52

449 P. von zur Mühlen, F l u c h t z i e l Lateinamerika, S.53.

450 N. García c a n c l i n i : "Culturas h í b r i d a s " , México, 1990.

451 P, Waldmann: "Kulturkonf l i k t und Anpassung", en: J . S t a g l : "Aspekte der Kultursozioloqie",


p. 244 s s .

452 Benz: Das é x i l der kleinen Leute, p . 1 7 1 .

230
Lograr la adaptación exigía un cambio radical en la manera de ser de los
emigrantes, ("die grof>te Umstellung" v.z. M.); obviamente las dificultades
variaban mucho según las condiciones de los diversos países de América Latina:
economía, cultura, clima, etc.
Otro experto en la materia, Heckmann , observa que se presenta una
desigual relación de poder entre los grupos.
"Inmigrantes e integrantes de grupos de minorías étnicas deben aprender
una lengua, ejercitarse en las reglas del tránsito, saber cómo se paga una cuenta y
se llama por teléfono o saber qué hacer cuando alguien se enferma ..."
Aunque este autor se refiere principalmente a los inmigrantes a países
europeos, con todo nos hace caer en la cuenta que el proceso de adaptación en
verdad implica una enorme serie de pequeños y grandes detalles en la vida
cotidiana.
El ya anteriormente citado autor Allgaier, se refiere al proceso de
adaptación de los alemanes en Colombia:
"La buena fama de los alemanes en Colombia se basa en gran parte en su
disposición a la adaptación a las costumbres sociales propias del país... lo que
implica la disposición a la asimilación. Pero al mismo tiempo se mantiene en
muchos el deseo de conservar su alemanidad. Son raras las generaciones
consecutivas puramente alemanas. Muchos alemanes jóvenes se casan con
colombianas. Estas familias se pierden para la alemanidad casi sin excepción,
puesto que la esposa determina predominantemente la educación de los hijos,
especialmente la educación de la lengua (lengua materna!)."

La lengua materna

Según los entendidos en la materia y con base en la propia experiencia,


es un elemento de enorme importancia en lo que respecta al proceso de
adaptación/ desadaptación y a la llamada escisión interna.
Da la impresión que la obligación de apropiarse de una lengua
extranjera/extraña ('Fremdsprache' ), con todo lo que esto representa y significa
en cuanto a cambio de modo de hablar, de pensar y de intercomunicarse, es
percibida por el extranjero como una amenaza -real o ficticia- a la propia

453 Friedrich Heckmann - Bamberg:"Zeitschrift für Kulturaustausch" 1995/ 1


"Migration und kultureller Wandel", Instituí Auslandsbeziehungen, Stuttgart.
Pág.52

454 Allgaier en Frbschle p.442.

231
identidad y un peligro de perder su lengua materna. De hecho ese olvido o
abandono es progresivo y real debido, principalmente, a que la 'lengua franca'
(Umgangssprache) más usada es la del lugar, bien distinta a la propia. Este
olvidar su lengua, que se supone le da piso (inneren Halt) a su propia seguridad,
es un pérdida por la cual también se hace "duelo"?
Parece que entre los exilados alemanes adultos, mayotes de edad, se
ptesentó con mucha frecuencia el caso de que, aún después de muchos años,
nunca aprendieron a manejar correctamente el español, pata hablar del caso
colombiano. Fue simplemente incapacidad, pereza o una permanente tesistencia
interna?
Helene Maimann, en un estudio bastante completo sobre cierta afasia
(Sprach-losigkeit), entre otras cosas, se refiere a muchos emigrantes quienes, pot
apropiarse el idioma nacional, abandonaron su propia lengua pero con el
resultado lamentable que tampoco dominaban el idioma nativo: "Hablaban en
medio de dos idiomas..."
Qué dtamas no tuvieron que attavesat los exilados cuya ocupación
principal era precisamente ttabajat en y con su lengua materna, como fue la
situación de tantos escritotes exilados?!
Helen Epstein al hablar de su posición ante los padres nos cuenta: "Yo
tenía acceso a ambos mundos. Yo podía cambiar de un mundo al otro, prestar
servicios de mensajera, intérprete y espía. Yo era aquella que solicitaba
infotmación, cuando nos habíamos enredado en las alejadas carretetas
secundarias; yo corregía la ortografía y la sintaxis de mi padte, cuando escribía
cartas al alcalde de New Yotk..."

La situación de los descendientes de estos adultos, la llamada segunda


generación, es distinta.
Heckmann opina que tiene que abordar "...el conflicto de las culturas
del país de emigtación y del país de la inmigración. Esta genetación estaría
sometida a la presión tanto de la casa paterna, como de las expectativas de
adaptación en la escuela y en el trabajo ..."

455 H. Maimann: "Sprachlosigkeit", en: W.Frühwald-W-Schieder:"Leben im Exil...", p.33: "Sie


sprechen zwischen zwei Sprachen, wie man zwischen zwei stühlen sitzen kann... nur nicht so
angenehm..."!

456 Epstein o . c , p.155.

457 Heckmann o.c., p.54

232
Se suele decir que los hijos de los exilados han tenido la gran ventaja de
crearse y educarse 'bilingües' . Es un privilegio! Se "desenvuelven" con gran
libertad en dos lenguas, viven felices en dos mundos...y en dos culturas. Tienen
una "doble identidad"... "Mitad y mitad..." Estos bilingües y "biculturales",
"seres intermedios", podrían ejercer un magnífico papel de intermediarios entre
la cultura alemana y la cultura colombiana, en ambas direcciones!
- Pero es todo esto posible, de hecho? Se trata de un enorme
enriquecimiento o de una permanente escisión interna? Y qué decir de las agudas
contradicciones internas? "No soy de aquí - ni de allá... Ni lo uno ni lo otro".
Además: esa desadaptación y esa dificultad para intercomunicarse verbalmente de
los padres la cargan los hijos como un "premio", parte de la herencia? Un "sabio"
sacerdote jesuíta decía: "Muy fácil: colombiano con los colombianos y alemán
con los alemanes!" - Felicitaciones, Padre! El problema N O es tan sencillo!
Y qué significa, entonces, el título de un manuscrito de James
Friedmann, hallado en el Exilarchiv de la Deutsche Bibliothek en Frankfurt:
"Muttersprache. Das Vaterland der Heimatlosen", "Lengua materna. La patria
de los despatriados"?

Regreso al tema de la adpatación

Con seguridad la gran mayoría de los exilados, que después de pasada la


Guerra Mundial no retornaron a Alemania, sino que se quedaron en Colombia,
para hablar de este caso específico, lograron una siruación objetiva de mayor
estabilidad económica y social, integrándose y participando plenamente en el
desatrollo y progreso del país. Se trataba de una adaptación funcional, por
necesidad o pragmatismo, con las relaciones laborales y sociales. Pero, en parte,
también era una aculturación subjetiva, paulatina. La permanente "presencia" del
medio social, del lenguaje cotidiano, del embrujo de un paisaje fabuloso fueron
haciendo una labor de sutil penetración y seducción. Es decir, esta investigación
me permite afirmar que se presentó un verdadero enriquecimiento en los
exilados, en su manera de ser y actuar, en algunas de sus costumbres. Pienso que,
por ejemplo, lograron una mayor flexibilidad en su modo de vivir (comida,
descanso, etc.) y relacionarse con los nacionales, con sus costumbres típicas en las
distintas regiones, sin tener que renunciar, necesariamente, a una serie de
convicciones y principios que personalmente consideraban 'sagrados' . Habría
muchísimos ejemplos de la vida cotidiana qué enumerar ...!
El ya citado Heckmann presenta una amplia exposición sobre lo que él
también llama aculturación, de la cual extracto los siguientes elementos:

233
Los procesos de acomodación se pueden desarrollar, "... sin que la
persona cambie sus convicciones fundamentales, valores, preferencias y maneras
de pensar ..." "Aculturación significa -a través de contactos culturales- cambios
de valores, normas y disposiciones (Einstellungen) en las personas, hasta llegar a
cambios de actitudes, 'estilos de vida' y de la propia identidad ..."

4.4.- Situaciones extremas

Además de todos los aspectos antetiotes, esta compleja realidad contiene


otros elementos que considero necesario mencionar para presentar una visión
más completa de todo este cuadro.
Grinberg habla de una "crisis postetgada": "...hay un primer período
aparentemente libre de conflictos y trastornos, hasta que al cabo de un par de
años se produce el desmoronamiento y se instala el cuadto psicótico
predominantemente en forma de un estado depresivo o fronterizo 'postergado'...,
o bien como una enfermedad somática (úlcera gástrica, cáncer, infarto de
miocardio, etc.) que equivaldría a lo que podríamos denominar una 'psicosis del
cuerpo'.
Una explicación acerca del porqué [sic] aparecen estos padecimientos
'postergados' puede residir en el hecho de que surgen cuando se pierde la fantasía
de la migración transitoria, con la esperanza de un pronto retomo, y se va
adquiriendo paulatinamente la convicción profunda, y para algunos
desgarradora, de que la pérdida y el desprendimiento son definitivos e
Ues. ti459
También se puede presentar el fenómeno de una escisión interna de la
propia personalidad.
Algunas citas tomadas del libro de Wolfgang Benz nos ilustran al
respecto: Dietrich Gronau escribe sobre Julius Stern: "un hombre
autoconsciente siempre vive internamente en una isla. Su relación con su lugar
de nacimiento, Alemania, permaneció extremadamente ambiguo ..."
"Si Julius Stern pertenece a estos extraños como judío, como alemán o
como europeo, es una especulación; lo que sí es claro es su rechazo categórico a
adaptarse a este país en donde vive ya hace más de medio siglo: 'La asimilación
para adultos es, la mayoría de las veces, una aceptación (Annahme) de una
creencia extraña o de una forma de vida extraña, internamente para ellos

458 Heckinann o . c , p.53.

459 Grinberg o . c , p.175.

234
sin significado, pero asumida por complejos de inferioridad o por intereses
• i fi 460
materiales...
Otro caso más es el de Herbert Liffman: "Mi identidad está partida en
tres. En primer lugar soy judío, pero no puedo ni quiero olvidar la cultura
alemana, la tengo en mi sangre. Mi patria es Australia, para quien tengo
sentimientos que superan el simple agradecimiento porque el permiso de
inmigración me salvó la vida."
Una situación muy especial, presentada ante todo entre los exilados
judíos, que no quiero dejar de mencionar, es la denominada por Grinberg
"Síndrome del sobreviviente":
Este fenómeno se presentó entre inmigrantes que habían sufrido la
persecución nazi. Muchos de ellos habían sido confinados y torturados junto con
sus familiares en campos de concentración.
"...Después de su liberación, y ya establecidos en los países a los que
habían logrado emigrar, se podía observar el síndrome propiamente dicho, que
comprende un primer período de 'supernormalidad', seguido de otro en que
surgen los síntomas: ansiedad, trastornos del dormir, pesadillas, fobias,
perturbaciones de la memoria, estados depresivos crónicos, tendencia al
aislamiento, con problemas de identidad, manifestaciones psicosomáticas y, a
veces, trastornos psicóticos."
El sentimiento de culpa "...provendría de los sentimientos ambivalentes
por la pérdida de los seres queridos, intensificada porque no pudieron evitar sus
sufrimientos y su muerte y, agregaríamos, por el hecho de haber sobrevivido..."
En estas condiciones es fácil comprender por qué la integración al país
de migración se ve enormemente perturbada: para estas personas significa la
integración al "otro mundo", el de los vivos, el no-campo de concentración, el
lugar donde se puede ser tratado con dignidad y respeto y donde se pueden
obtener gratificaciones que la culpa impide aceptar.

Es la crisis de la 'sobrevivencia' de la que habla ampliamente Bruno


Bettelheim:
"Resulta tan injusto, tan poco razonable, que precisamente el
superviviente tenga que luchar sin ayuda contra alguna de las peores dificultades

460 Benz o.c. pp. 131 y 133.

461 I b i d . p.245.

462 G r i n b e r g o . c , p p . 180 y 1 8 5 .

235
psicológicas imaginables, con unos sufrimientos psicológicos que son perdonados
a todos los demás. Aunque tanto ha sufrido: la angustia ante la muerte, sin
ningún alivio, a menudo durante años y años; un tremendo dolor físico, moral y
psicológico; aquel que incluso después de su milagrosa liberación sigue sufriendo
la más severa de la privaciones porque todos o muchos familiares suyos han sido
exterminados; aquel que ha perdido todos sus bienes, que se halla desarraigado
en todos los sentidos, obligado a vivir en una tierra nueva, a aprender una nueva
ocupación, etcétera: por qué, además, se ve obligado a sentir una responsabilidad
especial, a verse perseguido por un sentimiento de culpabilidad, torturado por
unos interrogantes que obviamente no tienen respuesta? Por qué tiene que
afrontar todo esto y, peor aún, afrontarlo él solo? La injusticia de semejante
situación no le pasa desapercibida al superviviente; y si tiene tendencia a desistir
cuando se encuentta en un estado de total agotamiento emocional, acabará por
i l IT 463
hacerlo.

Conclusiones

A modo de conclusión puedo decir que muchos de los emigrantes,


principalmente los de la llamada "primera generación", los que tuvieron que
"abrir camino", a pesar de todo o tal vez hasta conscientemente, en el fondo,
siempre "siguen extraños":
"Pero la experiencia de 'ser-distinto', otra percepción del tiempo, otra
concepción de los valores y no en último lugar la barrera del idioma, hizo ver
claro a los exilados que no -o todavía no- estaban en casa en su país de asilo.
Después de que hacía mucho habían sido superadas las dificultades del idioma
español o portugués, muchos emigrantes tenían que reconocer que, debido a su
propia mentalidad, seguían siendo extraños, que se seguían diferenciando de los
nativos en los países especialmente exóticos para los centroeuropeos. 'En América
Latina, distinto a los Estados Unidos, todo inmigrante es de por vida un 'gringo',
es decir, un extraño, si no ha estado aquí sentado en los bancos de la
escuela desde los inicios'(palabras de un inmigrante al Ecuadot) ..."

463 Véase: Bruno BETTELHEIM: "Sobrevivir. El holocausto una generación después."


Grijalbo, Barcelona, 1981 - pág.49 [el autor se suicidio a una edad muy
avanzada. . . ! ]

464 Patrick von zur Mühlen, "Jüdische und deutsche Identitat von Lateinamerika-
Emigranten" in: EXILFORSCHUNG Jahrbuch, Nr.5, 1987 S.57, 58.

236
"No pocas veces los emigrantes tenían que confirmar que, aunque
habían logrado cierto nivel de bienestar y respeto después de algún tiempo,
habían permanecido siendo extraños en su nueva patria." (Ibid.)
"Pero es frecuente que, simultáneamente, descubra que su integración
tiene un límite, que nunca será 'uno de ellos', los nativos: que puede compartir
con la gente que le rodea muchas cosas pero no otras, y que lo mismo ocurre a
los demás respecto de él."!
Personalmente estoy convencido de que siempre queda una esfera o un
espacio en la intimidad, el castillo interior, que permanece totalmente inaccesible a los
"nativos", -de todos modos ni lo entenderían! Es como un deseo de guardar ciertas
raíces de su identidad, de su 'raigambre', un rescoldo al cual se sigue acogiendo, tal
vez ni tan conscientemente, al que no puede o no quiere renunciar. Ese apego se
manifiesta, a veces, en conservar tercamente ciertos "códigos secretos" como la lengua
materna ...! Tal vez sea la importancia de "las pequeñas diferencias" -tan
importantes!- de que habla Sigmund Freud?

A modo de Epílogo:

Es cierto que...
"Nadie abandona su patria con un corazón ligero, por más opresiva que
haya sido la vida allí..."

Pero, finalmente, UBI BENE IBI PATRIA

... qui potest capere capiat!

Bogotá, 3 de Octubre de 1997

465 Grinberg o . c , p.211.

466 "Niemand verlaflt leichten Herzens seine Heimat, wie bedrückend das Leben
dort auch gewesen sein mag." Denk ich an Deutschland...", Fischer Verlag,
Frankfurt M., 1993, p.9.

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