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(EDUCACIÓN CONTINUA)
CURSO: “C”
AUXILIAR DE ENFERMERÍA
HÍGADO
El hígado se localiza en la región superior derecha del abdomen, por debajo del
diafragma, ocupa el hipocondrio derecho y una parte del epigastrio. En condiciones
normales no sobrepasa el límite del reborde costal.
Llena el espacio de la cúpula diafragmática, donde puede alcanzar hasta la quinta
costilla, y está próximo al corazón del cual se encuentra separado por el diafragma.
Está recubierto por una cápsula fibrosa, la cápsula de Glisson, sobre la cual se aplica el
peritoneo.
ANATOMÍA HEPÁTICA
- Aspectos generales
El hígado tiene una forma triangular, color rojo pardo, superficie lisa y consistencia
blanda y depresible. En el adulto humano mide por término medio 26 cm de ancho, 15
cm de alto y 8 cm de espesor a nivel del lóbulo derecho, su peso aproximado es 1,5 kg.
- Ubicación
El hígado se localiza en la región superior derecha del abdomen, por debajo del
diafragma, ocupa el hipocondrio derecho y una parte del epigastrio. En condiciones
normales no sobrepasa el límite del reborde costal. Llena el espacio de la cúpula
diafragmática, donde puede alcanzar hasta la quinta costilla, y está próximo al corazón
del cual se encuentra separado por el diafragma. Está recubierto por una cápsula
fibrosa, la cápsula de Glisson, sobre la cual se aplica el peritoneo.
- Caras
El hígado se encuentra rodeado por el peritoneo visceral y presenta dos caras:
Cara anterosuperior convexa en contacto con el diafragma que lo separa de
las bases pulmonares y la cara frénica del corazón.
Cara posterorinferior. También llamada cara visceral pues en ella el hígado se
relaciona con estructuras situadas en el lado derecho del abdomen, muchas de
las cuales dejan una impresión en la cara inferior del lóbulo derecho del hígado.
Así, tenemos de atrás a delante la impresión cólica determinada por el ángulo
hepático del colon, la impresión duodenal marcada por el duodeno, pegada a la
fosa cística donde se aloja la vesícula biliar, la impresión renal menos marcada
formada por el polo superior del riñón derecho y más adelante un profundísimo
surco marcado por la vena cava inferior.
En la cara inferior del lóbulo izquierdo están la impresión gástrica y la
escotadura del esófago, en el borde posterior.
En la base del hígado se encuentra la vesícula biliar y el hilio hepático, que es la zona
de entrada de la vena porta, la arteria hepática y la salida del conducto hepático. La
estructura del hígado va a seguir las divisiones de la vena porta hepática.
Tras la división de ramos segmentarios, las ramas de la vena porta, acompañadas de las
de la arteria hepática y de las divisiones de los conductos hepáticos, se encuentran
juntas en el espacio porta.
LÓBULOS HEPÁTICOS
HISTOLOGÍA HEPÁTICA
Clásicamente se considera al lobulillo hepático
como la unidad funcional del órgano, un hígado
humano contiene entre 50 000 y 100 000
lobulillos.
Cada lobulillo tienen forma hexagonal, en el
centro del hexágono se encuentra la vena centro
lobulillar y en las esquinas los espacios porta.
Entre las esquinas del hexágono y el centro se
encuentran los sinusoides hepáticos y los
hepatocitos que se disponen en forma radiada en
torno a cada vena centro lobulillar. En el lobulillo hepático se mezcla la sangre arterial
y venosa procedente de los espacios porta para desembocar en la vena central de cada
lobulillo. Dentro del lobulillo hepático se pueden distinguir las siguientes estructuras:
Espacios porta o tríadas: son áreas triangulares situadas en los ángulos de los
lobulillos hepáticos, constituidas por un estroma conjuntivo laxo; contienen en
su interior una rama de la arteria hepática, una rama de la vena porta y un
conductillo biliar; la bilis producida por los hepatocitos se vierte en una red de
canalículos dentro de las láminas de hepatocitos y fluye, en forma centrípeta al
lobulillo, hacia los conductillos biliares de los espacios porta.
PRODUCCIÓN DE BILIS
La bilis es necesaria para la digestión de los alimentos, contiene sales biliares formadas
por el hígado a partir del ácido glicocólico y ácido taurocólico que a su vez derivan de
la molécula de colesterol. La bilis es excretada hacia la vía biliar y se almacena en la
vesícula biliar de donde se expulsa al duodeno cuando se ingieren alimentos. Gracias a
la bilis es posible la absorción de las grasas contenidas en los alimentos.
FUNCIÓN INMUNOLÓGICA
En los sinusoides hepáticos existen gran número de células de Kupffer, que
son macrófagos residentes en el hígado que fagocitan bacterias, virus y
macromoléculas extrañas al organismo.1718
El hígado es el órgano que produce la mayor parte de las proteínas que forman
el sistema del complemento, el cual está formado por unas 18 glucoproteínas
que se encuentran en el suero y se activan de forma secuencial en cascada. Este
sistema juega un importante papel en la respuesta inmune.
El hígado produce la proteína C reactiva, reactante de fase aguda cuya síntesis
aumenta considerablemente en los procesos inflamatorios.
DESINTOXICACIÓN DE LA SANGRE
Metabolización del etanol gracias a la enzima alcohol-deshidrogenasa. Esta
enzima se localiza principalmente en hígado aunque también está presente en otros
tejidos.
Neutralización de numerosas toxinas.
Metabolización de la mayor parte de los fármacos. Por ejemplo
el paracetamol se metaboliza por el hígado uniéndose con el ácido
glucurónico eliminándose de esta forma a través de la orina.
Transformación del amonio en urea. Este es un importante proceso
desintoxicante, ya que la urea es menos tóxica que el amoníaco y se elimina
fácilmente a través de la orina.
Metabolización de la bilirrubina. La bilirrubina es una sustancia tóxica que
procede de la degradación de la hemoglobina. El hígado la elimina a través de la
bilis tras conjugarla con ácido glucurónico.
ALMACENAMIENTO DE SUSTANCIAS
Hepatitis
por virus:
Hepatitis
A; Hepatitis B; Hepatitis C; Hepatitis D; Hepatitis E.
Cirrosis hepática;
Enfermedades autoinmunes: colangitis esclerosante primaria, cirrosis biliar
primaria y hepatitis autoinmune.
Enfermedades por depósito: Hemocromatosis y enfermedad de Wilson.
Enfermedades congénitas que provocan aumento de la bilirrubina:
síndrome de Gilbert, síndrome de Crigler-Najjar, síndrome de Rotor y síndrome
de Dubin-Johnson;
Esteatosis hepática, incluyendo la esteatosis hepática no alcohólica y la
esteatohepatitis no alcohólica.
Enfermedades vasculares: Síndrome de Budd-Chiari, trombosis de la vena
porta.22
Hepatocarcinoma (cáncer de hígado).
Otras: Hepatopatía alcohólica, absceso hepático, fascioliasis hepática.