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Javier Alexandro Vargas Sánchez A01377718 Tec Talk

¿Helado de chocolate o vainilla? Para algunos esto puede representar una pregunta

exageradamente banal, pero para una persona indecisa, esa simple decisión le puede causar

incomodidad si considera que su elección no fue la correcta; decisiones simples como esta y

complejas van formando nuestra vida, todo el tiempo elegimos. El problema de tomar una

decisión es que inmediatamente al ver los resultados obtenidos se puede generar frustración si

estos no cumplen con nuestras expectativas e ideales. Por ello existe gente que tiene miedo a

decidir y tomar acción en su vida para no enfrentar la responsabilidad del resultado y por

ende un posible fracaso que conlleva frustración. Teniendo todo esto en cuenta les presentaré

un modelo de autoconocimiento que considero que es la mejor solución para prevenir o

manejar la frustración.

Antes que nada definiré lo que es la frustración, por qué es un gran problema y

algunos ejemplos. Se entiende como frustración al estado emocional ocasionado por la

supresión o reducción inesperada de reforzamientos apetitivos. Que en pocas palabras

significa que no obtuviste la recompensa que esperabas.

Partiendo de ello, deducimos que una persona que se casa tiene la expectativa de que

sea para siempre, una persona que emprende un negocio tiene la expectativa de que sea

redituable y que crezca. Imaginemos que esa persona que se casa termina divorciado o que

quien emprende el negocio esté en quiebra, en México según los datos del INEGI en sus

reportes nupciales, los divorcios aumentan cada año. Y acorde a datos del diario “el

financiero” un 75% de los negocios emprendidos quiebran. Estamos hablando de mucha

gente que se tuvo que enfrentar a la frustración, es por ello que mi propuesta es en dos

sentidos, prever llegar a la frustración por medio de una buena toma de decisiones, lo cual
nos aleja de errar en la elección. Ahora que si ya estamos experimentado la frustración

también hay manera de manejarla y sacar provecho de ella. Definitivamente la frustración es

algo que hace más apariciones de las que nos gustarían, muchas veces creemos tener control

sobre los resultados de nuestras decisiones, pero una gran mayoría de las veces esto no es el

caso, existen muchos factores aleatorios que pueden romper nuestras expectativas; ¿quién

esperaba que en este año llegaría una crisis sanitaria que nos impediría cualquier tipo de

socialización fuera de casa?

Nuestras decisiones jamás serán perfectas, nunca podremos predecir con total

precisión los resultados que conseguiremos; a pesar de todo eso, sí existe algo que podemos

hacer, que es aprender de los errores del pasado para evitar cometerlos de nuevo. No existen

las excusas ni los chivos expiatorios, cada quién es responsable en gran medida de la realidad

que tiene; por más factores aleatorios que existan y que puedan “alterar” nuestros resultados,

solo nosotros somos quienes decidimos al final, de eso tenemos control. La frustración es una

coyuntura en la que se nos presenta la decisión de aprender de lo ocurrido o pasar página y

estar expuestos a caer en el mismo bache. Por ello pienso que el autoconocimiento y la

introspección nos brindan beneficios grandísimos para nuestro futuro, sabemos los alcances y

límites que tenemos, las cosas en las que tenemos que trabajar para ser cada día mejor, y

también obviamente nuestras fortalezas que debemos explotar a todo su potencial, si nos

conocemos bien tenemos un mejor control sobre nuestro futuro.

Ahora les presentaré el modelo de autoconocimiento que logré desarrollar a partir de mi

investigación. Con este modelo, planeo que se aproveche la oportunidad que la frustración

nos brinda para mejorar. Este modelo se enfoca en dos situaciones principales las cuales son:

1. ¿Cómo tomar buenas decisiones?


2. He cometido una mala decisión ¿Cómo dejo de experimentar la frustración?

Para la primera situación existe una serie de acciones previas a realizar antes de tomar alguna

decisión, las listaré a continuación:

● Informarse correctamente

● Considerar tus capacidades

● Plantearte expectativas realistas

● Entender lo que implica en cuestión de resultados la decisión que tomes

En caso de ya estar instalados en la frustración tengo una serie de recomendaciones:

● Ser sincero contigo mismo, y reconocer que te sientes frustrado

● Preguntarte qué sentimientos te provoca la frustración, ¿Te sientes víctima, perdedor

o estás enojado? Reconócelo con toda sinceridad

Estos puntos de autoconocimiento sirven para algo muy importante, para llegar a la

aceptación de que hay algo que debes trabajar en ti. Una vez que tienes bien identificados

estos puntos debes tener la voluntad de ya no vivir esa frustración, de salir de ella. Ahora

viene el paso más importante que es la reflexión. Consiste en hacer un análisis de qué te llevó

a ese mal resultado, racionalizar el problema, con el fin de poder pasar la página habiendo

entendido la lección.

Considero que saber lidiar con la frustración nos da un excelente punto de partida para

conocernos más, de tal suerte que podemos saber nuestros alcances y limitaciones, eso es

valiosa información para seguirnos desarrollando y retarnos o bien aceptar que tenemos que

mejorar, entender que hicimos lo mejor que pudimos con las herramientas que teníamos en
ese momento; siempre hay que recordar que tú eres el mejor amigo de ti mismo, y entre

amigos los errores se perdonan.

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