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Facultad de Ciencias Sociales

Carrera de Ciencia Política y Relaciones Internacionales


Curso de Gestió n Pú blica

“Pilares necesarios para una descentralización


autónoma sin cooptación del poder central:
reflexiones para el proceso descentralizador
chileno”:
Esteban Valenzuela,
Ignacio Cienfuegos,
Francesco Penaglia
Fabián Pressacco.
Reporte Octavo

Nombre: Camila Meneses


Profesor: Ignacio Cienfuegos
Fecha: 1/10/2018
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El texto nos introduce contextualizando que en Chile se da un régimen centralista de
herencia Portaliana, destacando como un hito la creación de la Comisión Asesora
Presidencial den Descentralización Regional en abril de 2014 [CITATION Est15 \p 1085 \l
3082 ], y donde encontramos dos vías a la descentralización, aquella ligada a la autonomía,
y otra que lo hace desde el centro.

Partiendo de la pregunta “¿¿cuáles son los pilares o dimensiones centrales para una
descentralización efectiva y autónoma que restringa la capacidad cooptadora del poder
central en las regiones?” se plantea abordar el problema de manera deductiva, con un
trasfondo mayormente teórico en los modelos de descentralización, partiendo del problema
central: la cooptación, en torno a tres pilares autonomía político-financiera,
institucionalización y accountability. [CITATION Est15 \p 1086 \l 3082 ]

“La cooptación busca anular a la sociedad local en su petición de cuentas a la gestión, y a


su vez, inhibe la demanda de mayor autonomía/descentralización, ya que requiere aliados
nacionales para gestionar en la opacidad” [CITATION Est15 \p 1086 \l 3082 ] . América Latina
se caracteriza por una fuerte “institucionalización de sus prácticas cooptadoras” [CITATION
Est15 \p 1086 \l 3082 ]

Esto se da principalmente por una proliferación de una compleja maquinaria,


dada la relevancia de las coaliciones políticas, a través del intercambio capitales
informales, que termina por fusionar a partidos e instituciones. El problema de
estas prácticas clientelares, es que se asegura una “cohesión de la población hacia
el grupo dominante que gobierna” [CITATION Est15 \p 1087 \l 3082 ] y sus intereses.

Existen grupos presicratico que poseen alto control de las instituciones y del
gobierno, dándose una función de recursos monopólica, la cual es arbitraria, lo que
implica que estos promueven un poder vertical.

En Chile podemos encontrar tres tipos de operadores en programas públicos


centralistas y clientelizados: los caudillos -proyectos de comunidades-, bróker –
intermediario político que consigue favores- y el gestor- aquel que se adentra en el
lobby de proyectos-. [CITATION Est15 \p 1088 \l 3082 ]

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También podríamos referirnos al fenómeno de la “política caciquil” donde se dan
“relaciones informales, no reguladas mediante contrato y distintas del orden
institucional, por lo que han sido consideradas paralelas al mismo” [CITATION Est15 \p
1088 \l 3082 ], las cuales se dan en cierto tiempo u requiere de confianza mutua,
generándose una complicidad y aceptación por parte de la victima, la cual puede
ser de cuatro formas: la victima cómplice por miedo, interés, necesidad o
ignorancia. La segunda implicaría el paternalismo y aboga por un mantenimiento
de los fundamentos sociales.

Para identificar el ambiente propicio para la cooptación, se debe pensar en cuatro


grupos de elementos que la favorecen, los cuales pueden ser: estructurales –
régimen centralista-, formales –existencia de fondos discrecionales-. Informales –
coimas- y sutiles.

La exclusión de los intereses colectivos prolifera estas prácticas, por lo que la


descentralización aparece como alternativa, si bien, no definitiva, contribuye a la
dispersión del poder, lo que a su vez, permite una democratización de elección
respecto de las autoridades locales [CITATION Est15 \p 1089 \l 3082 ]

Sobre la autonomía política y financiera, se la descentralización en la década de los


ochenta conllevo la aceptación de un paradigma neoliberal, que a su vez tuvo
problemas de implementación dado que las subvenciones fueron insuficientes para
mantener la calidad del servicio estatal.

La importancia de la autonomía fiscal, radica en América Latina en una inequidad


territorial, que se perpetua debido a la inequidad.

Las causas que permiten explicar esta necesidad de autonomía fiscal, son la:
promoción de eficiencia económica, el fortalecimiento de la identificación
ciudadano-gobierno local, la rendición de cuentas y un mayor ajuste de la carga
tributaria[CITATION Est15 \p 1091 \l 3082 ]

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A nivel fiscal, se estudia la descentralización desde dos enfoques: elección pública
y agente principal, el primero refiere de una entrega de competencias a los locales
por recursos, mientras que el segundo va por une definición central desde las
economías de escala. No existen los modelos puros, ya que depende del contexto,
lo que si suele suceder, es el desequilibrio ,tanto vertical –gobierno- como
horizontal –entre territorios-.[CITATION Est15 \p 1092 \l 3082 ]

La autonomía local, a su vez, se mide por dos factores: la autonomía financiera –


dependiente de las transferencias no condicionadas- así como la capacidad de
generar recursos propios [CITATION Est15 \p 1093 \l 3082 ]

En América Latina se da una baja capacidad de hacer cumplir las


responsabilidades por parte de los gobiernos sub nacionales, debido a la baja
autonomía, dependiendo de las transferencias del gobierno central.

A nivel de grado de descentralización, junto con el nivel de desarrollo local, se


deduce que Chile: debido a ser centralizado- sería difícil que naciera una gestión
municipal de mayores estándares-, a su vez, no basta con la autonomía política y
financiera, además requiere de una buena institucionalidad.

Respecto de la participación ciudadana y el control democrático, los autores


establecen que hay distintas formas de relación entre la descentralización y
sociedad civil, estableciendo que el contexto de corrupción del Estado y la
existencia de poderes paralelos en la región ha afectado las instancias de control ,
cuando este debiese ser “tripartito: estado, sector privado y sociedad civil”
[CITATION Est15 \p 1096 \l 3082 ] , para que no se den situaciones como las llamadas
“obras grises”.

En el continente, también se da una desigualdad respecto del ingreso al poder, así


se vuelve necesario una política descentralizadora que evite la fragmentación de la
sociedad civil, en tanto tejido social y poder institucional. A través de la
empoderación, institucionalización, mayor rendición de cuentas se evita la
formación de mafia. En Chile podemos hablar de un bajo empoderamiento de la
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participación local, a diferencia de Bogotá, Colombia, donde se ha dado un caso
ejemplar.

Siguiendo a los autores, la institucionalización es central –Neo institucionalismo- ,


dado el factor determinante que estas representan a nivel macro y micro como
elemento que es efectiva en tanto restringe las externalidades –corrupción-, así, el
proceso descentralizador se observa como la forma más viable para profundizar
nuestras democracias, ya que otorga mayor preponderancia a los funcionarios, en
tanto cumplimiento de objetivos que erradiquen la cooptación, reduciendo los
costos de transacción en tanto normas cumplidas, dado que estos se presentan
como seres racionales, los cuales son incentivados hacia un comportamiento
honesto.[CITATION Est15 \p 1099 \l 3082 ]

El neo institucionalismo a su vez, plantea que debe haber una reducción de la


“incertidumbre en las transacciones políticas y sociales” [CITATION Est15 \p 1099 \l 3082
], un impulso de políticas y acciones regionales a través de acuerdos entre entes
públicos y privados –perspectiva interactiva de gobernanza-, lo que da énfasis a
como los actores se mueven, teniendo como ejes a actores, estrategias y coaliciones
[CITATION Est15 \p 1100 \l 3082 ]

A modo de conclusión, la cooptación se sirve de la anulación del otro, obviando el


conflicto y dando prácticas como la manipulación y la repartición formal e
informal de rentas de forma corrupta, para combatir esto se ofrecen tres pilares
para que la descentralización sea efectiva: autonomía política y financiera, que la
instituciones sean reales y capaces de generar gobernabilidad –generándose
nuevas formas de crear instituciones y, finalmente, empoderando y haciendo a la
ciudadanía participe del fortalecimiento del capital social. [CITATION Est15 \p 1101 \l
3082 ]

Bibliografía
(s.f.).

4
Valenzuela, E., Cienfuegos, I., Penaglia, F., & Pressacco, F. (2015). Pilares necesarios para una
descentralización autónoma sin cooptación del poder central: reflexiones para el proceso
descentralizador chileno. Revista de Administração Pública, 1083-1106.

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