Está en la página 1de 1

1.

Las tres posiciones o “él no hubiera”

Considero que este ejercicio ofrece una perspectiva integral de las conductas no deseadas
teniendo en cuenta que propone reconocer en primera persona las conductas no deseadas, y
en segunda instancia el recurso de la empatía; al sugerir ponerse en el lugar de los demás e
intentando percibir los sentimientos que puedan experimentar los otros como ocasión de
nuestras acciones o interacción personal.

Por otro lado propone la instauración de una tercera entidad en calidad de observador
imparcial que permita someter a juicio y escrutinio nuestro comportamiento en relación con
el contexto las relaciones interpersonales, permitiendo identificar las fallas en nuestras
acciones, vulneración de derechos, agresiones verbales o físicas, trataos injustos y todo lo
relacionado con conductas inapropiadas que se pretenden abandonar, permitiendo obtener a
partir del análisis de estas tres perspectivas, un comportamiento más asertivo.

2. Es necesario que el ser humano regule sus acciones y relaciones habituales de manera
asertiva y en un ambiente de respeto y tolerancia con su entorno, que tome plena
conciencia de aquellas conductas que derivan en detrimento de sus intereses que
perjudican a sus semejantes.

La identificación oportuna y consiente de estos comportamientos inadecuados, puede ayudar


a los individuos a llevar una vida más saludable en su esfera física y mental, redundando en
armonía y felicidad consigo mismo y la sociedad.

También podría gustarte