Reflexión sobre el franquismo

Siempre hemos oído hablar del fascismo con vergüenza hacia nuestra historia.
Queremos eliminar este tabú de nuestros recuerdos, y solo queremos evitar
que esto no vuelva a suceder. La gente hoy en día no está muy concienciada
de lo que sucedió y sus graves consecuencias ya que, si preguntas sobre él,
¿cuántas personas pueden decirte qué es el fascismo?

Estoy casi seguro que entre un 80% y 90% de las personas encuestadas no
sabrían explicar ni siquiera los acontecimientos más importantes de este
período.

Hoy en día estamos rodeados de comunicación y podemos informarnos a

través de los inmensos medios que disponemos, pero lo que realmente
debemos hacer es aprender a construir nuestras propias opiniones, formar las
bases, ideas. Buscamos y retenemos la información en nuestra memoria. Es
fácil saber que una de las características del régimen autoritario es la represión
del pueblo por parte de las autoridades, lo que a su vez explica el exilio de los
que cientos de miles de personas tienen que optar.

Las características del franquismo son el miedo, represión, la opresión y la

persecución de la oposición política y la sociedad, el control ideológico y la falta
de derechos humanos y libertades básicas, para que el gobierno pueda
instaurar su ideario, su idioma y su cultura. Como ejemplo de esto, podemos
ver lo que pasó con Cataluña ya que se redujeron los derechos sindicales y
laborales de la clase trabajadora.

De esta manera, si no conocemos las graves consecuencias que conlleva un

régimen como éste, en las generaciones futuras, seguirá existiendo dictaduras
tales como las del pasado o las que podemos ver hoy en día como en Cuba,
Corea del Norte, China, pero, debemos afrontar el presente y el futuro
fijándonos en los errores del pasado. El franquismo será recordado, hablado y
considerado como un pasado histórico, no solo en el pasado, sino que debe
mantenerse en la memoria de todas las personas como nosotros hoyen día,
deseando no repetir los errores del pasado.
Como frase final de esta reflexión me gustaría terminar con una frase que mi
profesora de mi anterior instituto solía decir: “El país que olvida un error del
pasado tiende a repetirlo en el futuro”.