Explique ¿En el contrato de comodato, cual es la presunción del estado del bien?
Para dar respuesta a la interrogante planteada, es necesario conceptualizar el contrato
de comodato, parafraseando a Domínguez (2017), señala que, el comodato es un préstamo de uso por el que una persona cede a otra el uso gratuito de un bien mueble o inmueble para que lo utilice, con la obligación de devolverlo pasado el tiempo pactado. Por lo tanto, este contrato consiste en que el comodante entrega de forma gratuita un bien no fungible (que por su uso no es susceptible de extinguirse) al comodatario para que lo utilice y disfrute (no de los frutos, sino de la posesión del bien) por un período de tiempo limitado y con un fin específico, transcurrido o cumplido la condición deberá ser devuelto a su propietario. Es importante determinar el buen estado del bien objeto del contrato, así, decimos, que, si la cosa adolece de algún defecto, es obligación del comodante, poner de conocimiento en su debida oportunidad al comodatario, para que este puede custodiarlo con las diligencias y cuidados correspondientes; porque si el comodatario, traslada la posesión del bien por mala fe, con la intención de perjudicar, entonces la norma no da una alternativa de solución que pasamos a explicar. Según el Código Civil Peruano, indica que, “se presume que el comodatario recibe el bien en buen estado de uso y conservación, salvo prueba en contrario” (art. 1731). Estamos ante la figura de presunción iuris tantum, que si bien es cierto, las prerrogativas son establece por ley, estas admiten prueba en contrario, es decir, permite probar la inexistencia de un hecho o derecho. En este caso, si el bien adolece de algún defecto, y el comodatario advierte en su respectiva oportunidad al comodante, este no puede exigir el pago o la restitución del mismo o la devolución de uno nuevo ni pagar indemnización, pues, hizo caso omiso a la advertencia del estado del bien.
¿En el contrato de enajenación por qué se suspende la devolución del bien?
La enajenación implica la transferencia de un derecho real de un patrimonio a otro, es decir, ese acto traslativo de dominio o de liberalidad temporal del bien. Según el artículo 1745 del Código Civil prescribe, el comodatario no puede suspender la restitución alegando que el comodante no tiene derecho sobre el bien, salvo que haya sido perdido, hurtado o robado o que el comodatario sea designado depositario por mandato judicial. Además, el comodatario está obligado a suspender la restitución del bien si se pretende utilizarlo para la comisión de una infracción penal. En este caso, debe consignarlo de inmediato y bajo responsabilidad, con citación del comodante, se presenta la consignación de una persona como la figura en la cual el comodatario se libra de su obligación con su comodante. Para que esto acontezca, el comodatario debe comprobar que ha cumplido diligentemente con sus obligaciones, pero sin una respuesta positiva del comodante porque ha obstaculizado o impedido de alguna manera el cumplimiento de la prestación.