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La herencia: características y conceptos básicos

 
La herencia se engloba en el derecho hereditario o el derecho a la sucesión
hereditaria. Éste es uno de los derechos más antiguos que se conoce y en todos
los países está previsto en su legislación o en el derecho usual del pueblo los
efectos del fallecimiento de una personas.
El derecho de sucesión se encuentra regulado por el derecho civil estatal y por el
foral, en aquellas comunidades autónomas que disponen de una legislación civil
propia. Por ello, si residen en una comunidad con derecho foral, deben consultar
con un despacho de abogados las distintas especialidades que pueda contener la
legislación aplicable.
De forma general, los derechos a la sucesión de una persona -que son los que
regula la herencia-  se transmiten desde el momento de su muerte, como reza el
art. 657 del Código Civil. Estos derechos sucesorios, o las herencias, comprenden
todos los derechos y las obligaciones de una persona, salvo las que se extingan
con su muerte.
El orden de sucesión se dirime por la voluntad del testador –si existe testamento–
o por lo que disponga la ley –sucesión ab intestato–.
Podrán ser sucesores, herederos y legatarios todos aquellos que no estén
incapacitados por la Ley.
¿Qué diferencia hay entre sucesor, heredero y legatario?
El sucesor es todo aquel llamado a suceder al causante en sus derechos y
obligaciones. Esto es aquella persona que por testamento, o por ley, tiene derecho
a la herencia del causante.
El heredero es aquel que adquiere a título universal las obligaciones y los
derechos del causante.
El legatario es aquel que adquiere una parte concreta de la herencia, por ejemplo
al que legan una finca concreta o un coche. El legatario recibe únicamente ese
derecho o cosa concreta.
¿Qué ocurre con la herencia cuando una persona fallece sin testamento?
Cuando una persona fallece sin testamento, la Ley determina quienes van a ser
sus herederos –se llaman herederos ab intestato o herederos forzosos–, por lo
que hay que acudir al orden establecido legalmente.
¿Quién son los herederos forzosos?
Nuestro derecho civil prevé la posibilidad de que el causante no haga testamento.
En el momento de su muerte se produce el llamamiento a suceder de los
denominados herederos forzosos.
Se denominan así porque la ley –y no la voluntad del testador– los instituye
herederos del fallecido y en algunos casos les reserva de forma obligatoria –para
el testador aún con vida– una parte de la masa hereditaria; las legítimas.
El ser heredero forzoso no significa que tengas que aceptar la herencia si no que
la ley te avala como sucesor del fallecido. Pueden rechazarse las herencias, en
cuyo caso se haría el llamamiento a suceder al siguiente heredero forzoso que la
ley determina.
Orden de sucesión si no hay testamento:
1º.- Hijos y descendientes.
2º.- Padres y ascendientes.
3º.- Cónyuge.
4º.-Hermanos e hijos de hermanos.
5º.-Resto de parientes colaterales hasta el cuarto grado de consanguinidad.
6º.- El Estado.
¿Qué son las legítimas?
Por disposición legal, parte de la masa hereditaria se reserva para los hijos y
demás descendientes. En el derecho civil común, la masa hereditaria se divide en
tres partes iguales –en el derecho foral varían estos porcentajes– de las cuales
dos terceras partes se reservan para los hijos y descendientes. El primero de los
tercios ha de dividirse a partes iguales entre los hijos, mientras el segundo –tercio
de mejora– puede distribuirse entre los hijos a partes iguales o entregársela a uno
de ellos en concreto. Por último, el remanente –una tercera parte– es de libre
disposición, a voluntad del testador.
Los Padres y demás ascendientes, a falta de descendientes, que sobrevivan
tienen derecho a un tercio de la herencia, si existe cónyuge viudo, o a la mitad de
la herencia, si el fallecido no tenía cónyuge.
El cónyuge viudo, su legítima es siempre en usufructo, y será menor o mayor,
según con quién concurra a la herencia, si hay hijos u otros descendientes, le
corresponde el usufructo de un tercio (el de mejora) de la herencia, si sólo hay
ascendientes, la legítima es el usufructo de la mitad de la herencia, y si no hay
ascendientes ni descendientes del fallecido, heredará el usufructo de dos tercios
de la herencia.
¿Debo aceptar la herencia?
Aunque se habla de herederos forzosos, aceptar una herencia no es una
obligación. Los herederos o legatarios pueden rechazar su parte de la herencia,
que pasaría al siguiente heredero que por ley corresponda.
En los últimos años, han sido muchas las herencias rehusadas por no poder hacer
frente a los impuestos o a las deudas de la misma. Si la aceptación es total, los
herederos responderán con todos sus bienes del pasivo de la masa hereditaria.
No obstante, se puede aceptar la herencia a beneficio de inventario; esto es,
aceptar la masa hereditaria que en su caso resulte de detraer las cantidades
correspondientes a las deudas que se incluyan en pasivo de la herencia. De esta
forma, solo el activo –que en su caso resultase– pasaría a formar parte del
patrimonio del heredero.
Herencia
[DCiv] Conjunto de bienes, derechos y obligaciones que constituyen
el patrimonio de una persona a su muerte. En la herencia pueden distinguirse
varias fases: apertura, vocación, delación y adquisición.
CC, art. 659.
Apertura de la sucesión; Delación; Herencia yacente; Partición de la herencia.

(Derecho Civil) Conjunto de los bienes que deja una persona al morir.

Es el conjunto de bienes, derechos y obligaciones que, formando


el patrimonio del causante, se transmite al heredero al morir aquél.
La transmisión se realiza por el hecho de la muerte y desde este momento,
siempre que el heredero acepte la herencia. De ésta, y por ser relaciones jurídicas
intransmisibles, hay que descartar las de carácter público, las personalísimas y las
de contenido patrimonial pero de duración vitalicia (como el usufructo, uso
y habitación). La herencia es un patrimonio que, mientras transita
del causante al heredero de manera definitiva, conserva una
inalterable unidad con el fin de que esté garantizado el pago de las deudas
del causante y el cumplimiento de las obligaciones hereditarias. Esta unidad,
provisionalmente impuesta mientras se cumplen dichas obligaciones, desaparece
cuando puede procederse al acto jurídico formal de la partición de la herencia. Se
habla de herencia abierta cuando, por la muerte de una persona, sus relaciones
jurídicas quedan sin titular, dando lugar tal situación a la entrada del sucesor o
sucesores universales en dichas titularidades.

Código civil, artículos 657 y 659.

Conjunto de bienes y cargas que formaban el patrimonio de una persona que se


transmite por sucesión testada o intestada.

La herencia puede ser considerada de dos diferentes puntos de vista:


como transmisión de bienes que se adquieren por la muerte del sucesor y como
totalidad de bienes que son el conjunto de la herencia.

La herencia significa no sólo el acto de heredar, en cuyo caso equivale a sucesión,


sino también el patrimonio o conjunto de derechos o relaciones patrimoniales que
la constituyen, representando el sentido de la universalidad de los mismos. La
primera acepción tiene un carácter subjetivo relacionado con la acción de suceder;
mientras que la segunda tiene carácter objetivo abarcando la masa o conjunto de
bienes, derechos y obligaciones que la forman o la componen.

Administración: a) la Administración de la herencia comprende el conjunto de


actos y diligencias conservatorias de los bienes del causante que es necesario
cumplir desde la apertura de la sucesión hasta que se desintegre la comunidad
hereditaria, por partición o venta. Dentro de ella cabe no sólo
la administración propiamente dicha, sino también la adopción de ciertas medidas
preliminares de seguridad, entre las que se cuenta la designación de
un administrador provisional, previa a la del definitivo. A esta última nos
referiremos seguidamente.

B) una vez abierto el proceso sucesorio, el juez dispondrá las medidas que
considere conveniente para la seguridad de los bienes

y documentación del causante. El dinero, los títulos, acciones y alhajas se


depositarán en el banco de depósitos judiciales. Respecto de las alhajas se
adoptará la misma medida, salvo que los herederos decidieren que quedaren bajo
su custodia.

C) la designación de administrador también puede tener lugar con anterioridad a


la declaratoria de herederos o a la aprobación del testamento. Tal designación
reviste carácter provisional y quien desempeñe el cargo lo hará hasta que se
nombre al administrador definitivo.

Renuncia: a diferencia de lo que acontecía en el derecho romano, las leyes


modernas no conocen la institución del heredero necesario; nadie puede
ser obligado a conservar la calidad de heredero contra su voluntad. En otras
palabras, el heredero tiene siempre el derecho de repudiar la herencia.

La renuncia es un acto jurídico unilateral por el que la persona llamada a la


herencia declara su voluntad de repudiarla.

Interesa distinguirlo cuidadosamente de otros actos que no tienen sino


la apariencia o el nombre de tal.

Así por ejemplo, la renuncia onerosa comporta una venta de derecho hereditario;


la hecha en favor de ciertas personas, excluyendo a algunos herederos o
alternando las porciones que a estos les hubiera correspondido, importa cesión.
En ambas hipótesis hay aceptación, no repudio. La renuncia tiene los siguientes
caracteres:

a) es unilateral, porque su eficacia solo depende de la expresión de la voluntad del


renunciante; b) es gratuita; en efecto, si se tratara de una renuncia onerosa habría
en sustancia una venta y el heredero se consideraría aceptante; c) es indivisible;
la herencia no puede aceptarse o repudiarse en parte:

quien renuncia lo hace por el todo y se reputa como si nunca hubiera


sido heredero; D) es lisa y llana: no puede hacerse a término o bajo condición, ni
en favor de determinadas personas; e) tiene efectos retroactivos: se juzga al
renunciante como si nunca
hubiere sido heredero y la sucesión se defiere como si el no hubiera existido.

F) es expresa y formal.

Derecho de heredar o suceder. | Conjunto de bienes, derechos y acciones que se


heredan.| En sentido figurado, defectos o cualidades que se heredan reciben o
copian de otra persona, y más particularmente entre padres e hijos. | Fenómeno
biológico por el cual los ascendientes transmiten a los descendientes cualidades
normales o patológicas. | ADVENTICIA. En sentido amplio, la que adquiere de
persona que no sea ninguno de sus padres el hijo de familia. | Más estrictamente,
la que la madre deja al hijo sometido a la patria potestad, con intención de que
el descendiente la adquiera para sí y no para el padre. | VACANTE. El conjunto de
bienes, derechos y obligaciones que deja el difunto intestato cuando carece
de herederos llamados por la ley para sucederle; o que, si los tiene, no se
presentan, repudian la sucesión o son indignos o incapaces para heredar.
| YACENTE. Se designa con este nombre la herencia en cuya posesión no ha
entrado todavía el heredero testamentario o ab intestato; o aquella en la que no se
han hecho las particiones, de haber varios herederos.

HIPOTECA

Título XXXVII: De la Hipoteca


ARTICULO 2432. <DEFINICIÓN DE HIPOTECA>. La hipoteca es un derecho de
prenda constituido sobre inmuebles que no dejan por eso de permanecer en poder
del deudor.
ARTICULO 2433. <INDIVISIBILIDAD DE LA HIPOTECA>. La hipoteca es
indivisible.
n consecuencia, cada una de las cosas hipotecadas a una deuda, y cada parte de
ellas son obligadas al pago de toda la deuda y de cada parte de ella.
ARTICULO 2434. <SOLEMNIDADES DE LA HIPOTECA>. La hipoteca deberá
otorgarse por escritura pública.
Podrá ser una misma la escritura pública de la hipoteca y la del contrato a que
accede.
ARTICULO 2435. <REGISTRO DE LA HIPOTECA>. La hipoteca deberá además
ser inscrita en el registro de instrumentos públicos; sin este requisito no tendrá
valor alguno; ni se contará su fecha sino desde la inscripción.
ARTICULO 2436.<HIPOTECAS CELEBRADAS EN EL EXTRANJERO> . Los
contratos hipotecarios celebrados fuera de la república o de un territorio darán
hipoteca sobre bienes situados en cualquier punto de ella o del respectivo
territorio, con tal que se inscriban en el competente registro.
ARTICULO 2437. <SANEAMIENTO DE LAS NULIDADES HIPOTECARIAS>. Si
la constitución de la hipoteca adolece de nulidad relativa, y después se valida por
el lapso de tiempo o la ratificación, la fecha de la hipoteca será siempre la fecha
de la inscripción.
ARTICULO 2438. <HIPOTECAS SUJETAS A CONDICIÓN O PLAZO>. La
hipoteca podrá otorgarse bajo cualquiera condición, y desde o hasta cierto día.
Otorgada bajo condición suspensiva o desde día cierto, no valdrá sino desde que
se cumpla la condición o desde que llega el día; pero cumplida la condición o
llegado el día, será su fecha la misma de la inscripción.
Podrá así mismo otorgarse en cualquier tiempo, antes o después de los contratos
a que acceda; y correrá desde que se inscriba.
ARTICULO 2439. <CAPACIDAD PARA HIPOTECAR>. No podrá constituir
hipoteca sobre sus bienes sino la persona que sea capaz de enajenarlos, y con los
requisitos necesarios para su enajenación.
Pueden obligarse hipotecariamente los bienes propios para la seguridad de una
obligación ajena; pero no habrá acción personal contra el dueño, si éste no se ha
sometido expresamente a ella.
ARTICULO 2440. <ENAJENACIÓN E HIPOTECA DE BIENES HIPOTECADOS>.
El dueño de los bienes gravados con hipoteca podrá siempre enajenarlos o
hipotecarlos, no obstante cualquiera estipulación en contrario.
ARTICULO 2441. <HIPOTECA CONDICIONADA Y LIMITADA>. El que sólo tiene
sobre la cosa que se hipoteca un derecho eventual, limitado o rescindible, no se
entiende hipotecarla sino con las condiciones y limitaciones a que está sujeto el
derecho; aunque así no lo exprese.
Si el derecho está sujeto a una condición resolutoria, tendrá lugar lo dispuesto en
el artículo 1548.
ARTICULO 2442. <HIPOTECA DE CUOTA POR EL COMUNERO>. El comunero
puede antes de la división de la cosa común, hipotecar su cuota; pero verificada la
división, la hipoteca afectará solamente los bienes que en razón de dicha cuota se
adjudiquen, si fueren hipotecables. Si no lo fueren, caducará la hipoteca.
Podrá, con todo, subsistir la hipoteca sobre los bienes adjudicados a los otros
partícipes, si estos consistieren en ello, y así constare por escritura pública, de que
se tome razón al margen de la inscripción hipotecaria.
ARTICULO 2443. <BIENES HIPOTECABLES>. La hipoteca no podrá tener lugar
sino sobre bienes raíces que se posean en propiedad o usufructo o sobre naves.
Las reglas particulares relativas a la hipoteca de las naves, pertenecen al Código
de Comercio.
ARTICULO 2444. <HIPOTECA DE BIENES FUTUROS>. La hipoteca de bienes
futuros sólo da al acreedor el derecho de hacerla inscribir sobre los inmuebles que
el deudor adquiera en lo sucesivo, y a medida que los adquiera.
ARTICULO 2445. <EXTENSIÓN DE LA HIPOTECA A BIENES INMUEBLES
POR ACCESIÓN, AUMENTOS Y MEJORAS>. La hipoteca constituida sobre
bienes raíces afecta los muebles que por accesión a ellos se reputan inmuebles,
según el artículo 658; pero deja de afectarlos desde que pertenecen a terceros.
La hipoteca se extiende a todos los aumentos y mejoras que reciba la cosa
hipotecada.
ARTICULO 2446. <EXTENSIÓN DE LA HIPOTECA A PENSIONES E
INDEMNIZACIONES>. También se extiende la hipoteca a las pensiones
devengadas por el arrendamiento de los bienes hipotecados, y a la indemnización
debida por los aseguradores de los mismos bienes.
ARTICULO 2447. <HIPOTECAS SOBRE USUFRUCTO, MINAS Y CANTERAS>.
La hipoteca sobre un usufructo, o sobre minas y canteras no se extiende a los
frutos percibidos, ni a las sustancias minerales, una vez separadas del suelo.
ARTICULO 2448. <DERECHOS DEL ACREEDOR HIPOTECARIO RESPECTO
AL PAGO>. El acreedor hipotecario tiene, para hacerse pagar sobre las cosas
hipotecadas, los mismos derechos que el acreedor prendario sobre la prenda.
ARTICULO 2449. <COEXISTENCIA DE LA ACCIÓN HIPOTECARIA Y LA
PERSONAL>. <Artículo subrogado por el artículo 28 de la Ley 95 de 1890. El
nuevo texto es el siguiente.>
El ejercicio de la acción hipotecaria no perjudica la acción personal del acreedor
para hacerse pagar sobre los bienes del deudor que no le han sido hipotecados, y
puede ejercitarlas ambas conjuntamente, aún respecto de los herederos del
deudor difunto; pero aquélla no comunica a ésta el derecho de preferencia que
corresponde a la primera.
ARTICULO 2450. <RECOBRO DE FINCA HIPOTECADA MEDIANTE PAGO>. El
dueño de la finca perseguida por el acreedor hipotecario, podrá abandonársela, y
mientras no se haya consumado la adjudicación, podrá también recobrarla,
pagando la cantidad a que fuere obligada la finca, y además las costas y gastos
que este abandono hubiere causado al acreedor.
ARTICULO 2451. <PERDIDA O DETERIORO DEL BIEN HIPOTECADO>. Si la
finca se perdiere o deteriorare, en términos de no ser suficiente para la seguridad
de la deuda, tendrá derecho el acreedor a que se mejore la hipoteca, a no ser que
consienta en que se le dé otra seguridad equivalente; y en defecto de ambas
cosas, podrá demandar el pago inmediato de la deuda líquida, aunque esté
pendiente el plazo, o implorar las providencias conservativas que el caso admita,
si la deuda fuere ilíquida, condicional o indeterminado.
ARTICULO 2452. <DERECHO DE PERSECUCIÓN DEL BIEN HIPOTECADO>.
La hipoteca da al acreedor el derecho de perseguir la finca hipotecada, sea quien
fuere el que la posea, y a cualquier título que la haya adquirido.
Sin embargo, esta disposición no tendrá lugar contra el tercero que haya adquirido
la finca hipotecada en pública subasta ordenada por el juez.
Más, para que esta excepción surta efecto a favor del tercero, deberá hacerse la
subasta con citación personal, en el término de emplazamiento de los acreedores
que tengan constituidas hipotecas sobre la misma finca; los cuales serán cubiertos
sobre el precio del remate, en el orden que corresponda.
El juez, entretanto, hará consignar el dinero.
ARTICULO 2453. <TERCERO POSEEDOR RECONVENIDO>. El tercer poseedor
reconvenido para el pago de la hipoteca constituida sobre la finca que después
pasó a sus manos con este gravamen, no tendrá derecho para que se persiga
primero a los deudores personalmente obligados.
Haciendo el pago se subroga en los derechos del acreedor en los mismos
términos que el fiador.
Si fuere desposeído de la finca o la abandonare, será plenamente indemnizado
por el deudor, con inclusión de las mejoras que haya hecho en ella.
ARTICULO 2454. <FIANZA HIPOTECARIA>. El que hipoteca un inmueble suyo
por una deuda ajena, no se entenderá obligado personalmente si no se hubiere
estipulado.
Sea que se haya obligado personalmente, o no, se le aplicará la regla del artículo
precedente.
La fianza se llama hipotecaria cuando el fiador se obliga con hipoteca.
La fianza hipotecaria está sujeta en cuanto a la acción personal a las reglas de la
simple fianza.
ARTICULO 2455. <LIMITACIÓN DE LA HIPOTECA>. La hipoteca podrá limitarse
a una determinada suma, con tal que así se exprese inequívocamente, pero no se
extenderá en ningún caso a más del duplo del importe conocido o presunto, de la
obligación principal, aunque así se haya estipulado.
El deudor tendrá derecho para que se reduzca la hipoteca a dicho importe; y
reducida, se hará a su costa una nueva inscripción, en virtud de la cual no valdrá
la primera sino hasta la cuantía que se fijare en la segunda.
ARTICULO 2456.<REGISTROS DE LA HIPOTECA>. El registro de la hipoteca
deberá hacerse en los términos prevenidos en el título Del registro de
instrumentos públicos.
ARTICULO 2457. <EXTINCIÓN DE LA HIPOTECA>. La hipoteca se extingue
junto con la obligación principal.
Se extingue, asimismo, por la resolución del derecho del que la constituyó, o por el
evento de la condición resolutoria, según las reglas legales. Se extingue, además,
por la llegada del día hasta el cual fue constituida.
Y por la cancelación que el acreedor acordare por escritura pública, de que se
tome razón al margen de la inscripción respectiva.

USUFRUCTO

Título IX: Del derecho de usufructo


ARTICULO 823. <CONCEPTO DE USUFRUCTO>. El derecho de usufructo es un
derecho real que consiste en la facultad de gozar de una cosa con cargo de
conservar su forma y sustancia, y de restituir a su dueño, si la cosa no es fungible;
o con cargo de volver igual cantidad y calidad del mismo género, o de pagar su
valor si la cosa es fungible.
ARTICULO 824. <DERECHOS EN EL USUFRUCTO>. El usufructo supone
necesariamente dos derechos coexistentes: el del nudo propietario, y el del
usufructuario. Tiene, por consiguiente, una duración limitada, al cabo de la cual
pasa al nudo propietario y se consolida con la propiedad.
ARTICULO 825. <MODOS DE CONSTITUCIÓN>. El derecho de usufructo se
puede constituir de varios modos:
1o.) Por la ley, como el del padre de familia, sobre ciertos bienes del hijo.
2o.) Por testamento.
3o.) Por donación, venta u otro acto entre vivos.
4o.) Se puede también adquirir un usufructo por prescripción.
ARTICULO 826. <USUFRUCTO SOBRE BIENES INMUEBLES>. El usufructo
que haya de recaer sobre inmuebles por acto entre vivos, no valdrá si no se
otorgare por instrumento público inscrito.
ARTICULO 827. <PLAZOS O CONDICIONES>. Se prohíbe constituir usufructo
alguno bajo una condición o a un plazo cualquiera que suspenda su ejercicio. Si
de hecho se constituyere, no tendrá valor alguno.
on todo, si el usufructo se constituye por testamento, y la condición se hubiere
cumplido, o el plazo hubiere expirado antes del fallecimiento del testador, valdrá el
usufructo.
ARTICULO 828. <USUFRUCTOS SUCESIVOS O ALTERNATIVOS>. Se prohíbe
constituir dos o más usufructos sucesivos o alternativos. Si de hecho se
constituyeren, los usufructuarios posteriores se considerarán como sustitutos, para
el caso de faltar los anteriores, antes de deferirse el primer usufructo.
El primer usufructo que tenga efecto hará caducar los otros; pero no durará sino
por el tiempo que le estuviere designado.
ARTICULO 829. <DURACIÓN DEL USUFRUCTO>. El usufructo podrá
constituirse por tiempo determinado o por toda la vida del usufructuario.
Cuando en la constitución del usufructo no se fija tiempo alguno para su duración,
se entenderá constituido por toda la vida del usufructuario.
El usufructo, constituido a favor de una corporación o fundación cualquiera, no
podrá pasar de treinta años.
ARTICULO 830. <CONDICIÓN PARA CONSOLIDACIÓN DEL USUFRUCTO
CON LA PROPIEDAD>. Al usufructo constituido por tiempo determinado, o por
toda la vida del usufructuario, según los artículos precedentes, podrá agregarse
una condición, verificada la cual, se consolide con la propiedad. Si la condición no
es cumplida antes de la expiración de dicho tiempo, o antes de la muerte del
usufructuario, según los casos, se mirará como no escrita.
ARTICULO 831. <SIMULTANEIDAD DE USUFRUCTO>. Se puede constituir un
usufructo a favor de dos, o más personas que lo tengan simultáneamente, por
igual, o según las cuotas determinadas por el constituyente, y podrán en este caso
los usufructuarios dividir entre sí el usufructo, de cualquier modo que de común
acuerdo les pareciere.
ARTICULO 832. <TRANSFERENCIA DE DERECHOS>. La nuda propiedad
puede transferirse por acto entre vivos, y transmitirse por causa de muerte.
El usufructo es intransmisible por testamento o abintestato.
ARTICULO 833. <RECIBO DE LA COSA FRUCTUARIA>. El usufructuario es
obligado a recibir la cosa fructuaria en el estado en que al tiempo de la delación se
encuentre, y tendrá derecho para ser indemnizado de todo menoscabo o deterioro
que la cosa haya sufrido desde entonces, en poder y por culpa del propietario.
ARTICULO 834. <CAUCIÓN E INVENTARIO SOLEMNE>. El usufructuario no
podrá tener la cosa fructuaria sin haber prestado caución suficiente de
conservación y restitución, y sin previo inventario solemne a su costa, como el de
los curadores de bienes.
Pero tanto el que constituye el usufructo como el propietario, podrán exonerar e la
caución al usufructuario.
Ni es obligado a ella el donante que se reserva el usufructo de la cosa donada.
La caución del usufructuario de cosas fungibles se reducirá a la obligación de
restituir otras tantas del mismo género y calidad, o el valor que tuvieren al tiempo
de la restitución.
ARTICULO 835. <AUSENCIA DE CAUCIÓN E INVENTARIO>. Mientras el
usufructuario no rinda la caución a que es obligado, y se termine el inventario,
tendrá el propietario la administración con cargo de dar el valor líquido de los
frutos al usufructuario.
ARTICULO 836. <INCUMPLIMIENTO DE LA PRESTACIÓN DE CAUCIÓN>. Si el
usufructuario no rinde la caución a que es obligado, dentro de un plazo equitativo,
señalado por el juez, a instancia del propietario, se adjudicará la administración a
éste, con cargo de pagar al usufructuario el valor líquido de los frutos, deducida la
suma que el juez prefijare por el trabajo y cuidado de la administración.
Podrá en el mismo caso tomar en arriendo la cosa fructuaria, o tomar prestados a
interés los dineros fructuarios, de acuerdo con el usufructuario. Podrá también, de
acuerdo con el usufructuario, arrendar la cosa fructuaria, y dar los dineros a
interés.
Podrá también, de acuerdo con el usufructuario, comprar o vender las cosas
fungibles, y tomar o dar prestados a interés los dineros que de ello provengan.
Los muebles comprendidos en el usufructo, que fueren necesarios para el uso
personal del usufructuario o de su familia, le serán entregados bajo juramento de
restituir las especies o sus respectivos valores, tomándose en cuenta el deterioro
proveniente del tiempo y del uso legítimo.
El usufructuario podrá, en todo tiempo, reclamar la administración, prestando la
caución a que es obligado.
ARTICULO 837. <SUPERVISIÓN DEL INVENTARIO POR EL
PROPIETARIO>. El propietario cuidará de que se haga el inventario con la debida
especificación, y no podrá después tacharlo de inexacto o de incompleto.
ARTICULO 838. <PROHIBICIÓN AL PROPIETARIO DE OBSTRUIR DEL
EJERCICIO DEL USUFRUCTO>. No es lícito al propietario hacer cosa alguna que
perjudique al usufructuario en el ejercicio de sus derechos, a no ser con el
consentimiento formal del usufructuario.
Si quiere hacer reparaciones necesarias, podrá el usufructuario exigir que se
hagan en un tiempo razonable y con el menor perjuicio posible del usufructo.
Si transfiere o transmite la propiedad, será con la carga del usufructo constituido
en ella, aunque no lo exprese.
ARTICULO 839. <DERECHO DE ACRECER>. Siendo dos o más los
usufructuarios, habrá entre ellos el derecho de acrecer, y durará la totalidad del
usufructo hasta la expiración del derecho del último de los usufructuarios.
Lo cual se entiende si el constituyente no hubiere dispuesto que terminado un
usufructo parcial, se consolide con la propiedad.
ARTICULO 840. <USUFRUCTO DE FRUTOS NATURALES>. El usufructuario de
una cosa inmueble tiene el derecho de percibir todos los frutos naturales, inclusos
los pendientes al tiempo de deferirse el usufructo.
Recíprocamente, los frutos que aún estén pendientes a la terminación del
usufructo, pertenecerán al propietario.
ARTICULO 841. <USUFRUCTO DE SERVIDUMBRES>. El usufructuario de una
heredad goza de todas las servidumbres activas, constituidas a favor de ella, y
está sujeto a todas las servidumbres pasivas constituidas en ella.
ARTICULO 842. <USUFRUCTO DE BOSQUES Y ARBOLADOS>. El goce del
usufructuario de una heredad se extiende a los bosques y arbolados, pero con el
cargo de conservarlos en su ser, reponiendo los árboles que derribe, y
respondiendo de su menoscabo, en cuanto no dependa de causas naturales o
accidentes fortuitos.
ARTICULO 843. <USUFRUCTO DE MINAS Y CANTERAS>. Si la cosa fructuaria
comprende minas y canteras en actual laboreo, podrá el usufructuario
aprovecharse de ellas, y no será responsable de la disminución de productos que
a consecuencia sobrevenga, con tal que la mina o cantera no se inutilice o
desmejore por culpa suya.
ARTICULO 844. <USUFRUCTO DE ACCESIONES NATURALES>. El usufructo
de una heredad se extiende a los aumentos que ella reciba por aluvión o por otras
accesiones naturales.
ARTICULO 845. <TESOROS>. El usufructuario no tiene sobre los tesoros que se
descubran en el suelo que usufructúa, el derecho que la ley concede al propietario
del suelo.
ARTICULO 846. <USUFRUCTO DE MUEBLES>. El usufructuario de cosa mueble
tiene el derecho de servirse de ella según su naturaleza y destino; y al fin del
usufructo no es obligado a restituirla sino en el estado en que se halle
respondiendo solamente de aquellas pérdidas o deterioros que provengan de su
dolo o culpa.
ARTICULO 847. <USUFRUCTO DE GANADOS>. El usufructuario de ganados o
rebaños es obligado a reponer los animales que mueren o se pierden, pero sólo
con el incremento natural de los mismos ganados o rebaños, salvo que la muerte
o pérdida fueren imputables a su hecho o culpa, pues en este caso deberá
indemnizar al propietario. Si el ganado o rebaño perece del todo o en gran parte
por efecto de una epidemia u otro caso fortuito, el usufructuario no está obligado a
reponer los animales perdidos, y cumplirá con entregar los despojos que hayan
podido salvarse.
ARTICULO 848. <USUFRUCTO DE COSAS FUNGIBLES>. Si el usufructo se
constituye sobre cosas fungibles, el usufructuario se hace dueño de ellas, y el
propietario se hace meramente acreedor a la entrega de otras especies de igual
cantidad y calidad, o del valor que estas tengan al tiempo de terminarse el
usufructo.
ARTICULO 849. <USUFRUCTO DE FRUTOS CIVILES>. Los frutos civiles
pertenecen al usufructuario día por día.
ARTICULO 850. <PRIMACÍA DE CONVENCIONES>. Lo dicho en los artículos
precedentes se entenderá sin perjuicio de las convenciones que sobre la materia
intervengan entre el nudo propietario y el usufructuario, o de las ventajas que en la
constitución del usufructo se hayan concedido expresamente al nudo propietario o
al usufructuario.
ARTICULO 851. <ARRENDAMIENTO DE LA COSA FRUCTUARIA>. El
usufructuario es obligado a respetar los arriendos de la cosa fructuaria,
contratados por el propietario antes de constituirse el usufructo por acto entre
vivos, o de fallecer la persona que lo ha constituido por testamento. Pero sucede
en la percepción de la renta o pensión desde que principia el usufructo.
ARTICULO 852. <ARRENDAMIENTO Y CESIÓN DEL USUFRUCTO>. El
usufructuario puede dar en arriendo el usufructo y cederlo a quien quiera, a título
oneroso o gratuito.
Cedido el usufructo a un tercero, el cedente permanece siempre directamente
responsable al propietario.
Pero no podrá el usufructuario arrendar ni ceder su usufructo, si se lo hubiere
prohibido el constituyente; a menos que el propietario le releve de la prohibición.
El usufructuario que contraviniere a esta disposición, perderá el derecho de
usufructo.
ARTICULO 853. <RESOLUCIÓN DEL CONTRATO>. Aún cuando el usufructuario
tenga la facultad de dar el usufructo en arriendo o cederlo a cualquier título, todos
los contratos que al efecto haya celebrado se resolverán al fin del usufructo.
El propietario, sin embargo, concederá al arrendatario o cesionario el tiempo que
necesite para la próxima percepción de frutos; y por ese tiempo quedará sustituido
al usufructuario en el contrato.
ARTICULO 854. <EXPENSAS ORDINARIAS>. Corresponden al usufructuario
todas las expensas ordinarias de conservación y cultivo.
ARTICULO 855. <CARGAS E IMPUESTOS PERIÓDICOS>. Serán de cargo del
usufructuario las pensiones, cánones y, en general, las cargas periódicas con que
de antemano haya sido gravada la cosa fructuaria, y que durante el usufructo se
devenguen. No es lícito al nudo propietario imponer nuevas cargas sobre ella en
perjuicio del usufructo.
Corresponde, asimismo, al usufructuario el pago de los impuestos periódicos
fiscales y municipales, que la graven durante el usufructo, en cualquier tiempo que
se hayan establecido.
Si por no hacer el usufructuario estos pagos los hiciere el propietario, o se
enajenare o embargare la cosa fructuaria, deberá el primero indemnizar de todo
perjuicio al segundo.
ARTICULO 856. <EXPENSAS POR OBRAS O REFACCIONES MAYORES DE
CONSERVACIÓN>. Las obras o refacciones mayores, necesarias para la
conservación de la cosa fructuaria, serán de cargo del propietario, pagándole el
usufructuario, mientras dure el usufructo, el interés legal de los dineros invertidos
en ellas.
El usufructuario hará saber al propietario las obras y refacciones mayores que
exija la conservación de la cosa fructuaria. Si el propietario rehusa o retarda el
desempeño de estas cargas podrá el usufructuario, para libertar la cosa fructuaria
y conservar su usufructo, hacerlas a su costa, y el propietario se Las reembolsará
sin interés.
ARTICULO 857. <CONCEPTO DE OBRAS Y REFACCIONES MAYORES>. Se
entiende por obras o refacciones mayores las que ocurren por una vez a largos
intervalos de tiempo y que conciernen a la conservación y permanente utilidad de
la cosa fructuaria.
ARTICULO 858. <DESTRUCCIÓN FORTUITA DE EDIFICIOS>. Si un edificio
viene todo a tierra por vetustez o por caso fortuito, ni el propietario ni el
usufructuario son obligados a reponerlo.
ARTICULO 859. <DERECHO DE RETENCIÓN POR EL USUFRUCTUARIO>. El
usufructuario podrá retener la cosa fructuaria hasta el pago de los reembolsos e
indemnizaciones a que, según los artículos precedentes, es obligado el
propietario.
ARTICULO 860. <MEJORAS VOLUNTARIAS>. El usufructuario no tiene derecho
a pedir cosa alguna por las mejoras que voluntariamente haya hecho en la cosa
fructuaria; pero le será lícito alegarlas en compensación por el valor de los
deterioros que se le puedan imputar, o llevarse los materiales, si puede separarlos
sin detrimento de la cosa fructuaria, y el propietario no le abona lo que después de
separados valdrían.
Lo cual se entiende sin perjuicio de las convenciones que hayan intervenido entre
el usufructuario y el propietario, relativamente a mejoras, o de lo que sobre esta
materia se haya previsto en la constitución del usufructo.
ARTICULO 861. <RESPONSABILIDAD DEL USUFRUCTUARIO>. El
usufructuario es responsable no sólo de sus propios hechos u omisiones, sino de
los hechos ajenos a que su negligencia haya dado lugar.
Por consiguiente, es responsable de las servidumbres que por su tolerancia haya
dejado adquirir sobre el predio fructuario, y del perjuicio que las usurpaciones
cometidas en la cosa fructuaria hayan inferido al dueño, si no las ha denunciado al
propietario oportunamente, pudiendo.
ARTICULO 862. <ACREDEDORES DEL USUFRUCTUARIO>. Los acreedores
del usufructuario pueden pedir que se le embargue el usufructo, y se les pague
con él hasta concurrencia de sus créditos, prestando la competente caución de
conservación y restitución a quien corresponda.
Podrán, por consiguiente, oponerse a toda cesión o renuncia del usufructo hecha
con fraude de sus derechos.
ARTICULO 863. <EXTINCIÓN DEL USUFRUCTO POR CONDICIÓN
RESOLUTORIA>. El usufructo se extingue generalmente por la llegada del día, o
el evento de la condición prefijados para su terminación. Si el usufructo se ha
constituido hasta que una persona distinta del usufructuario llegue a cierta edad, y
esa persona fallece antes, durará, sin embargo, el usufructo hasta el día en que
esa persona hubiera cumplido esa edad, si hubiese vivido.
ARTICULO 864. <COMPUTO DEL TERMINO DE DURACIÓN DEL
USUFRUCTO>. En la duración legal del usufructo se cuenta aún el tiempo en que
el usufructuario no ha gozado de él, por ignorancia o despojo, o cualquiera otra
causa.
ARTICULO 865. <OTRAS CAUSALES DE EXTINCIÓN DEL USUFRUCTO>. El
usufructo se extingue también:
Por la muerte natural del usufructuario, aunque ocurra antes del día o condición
prefijados para su terminación.
Por la resolución del derecho del constituyente, como cuando se ha constituido
sobre una propiedad fiduciaria, y llega el caso de la restitución.
Por consolidación del usufructo con la propiedad.
Por prescripción.
Por la renuncia del usufructuario.
ARTICULO 866. <DESTRUCCIÓN DE LA COSA FRUCTUARIA>. El usufructo se
extingue por la destrucción completa de la cosa fructuaria; si sólo se destruye una
parte, subsiste el usufructo en lo restante.
Si todo el usufructo está reducido a un edificio, cesará para siempre por la
destrucción completa de este, y el usufructuario no conservará derecho alguno
sobre el suelo.
Pero si el edificio destruido pertenece a una heredad, el usufructuario de esta
conservará su derecho sobre toda ella.
ARTICULO 867. <INUNDACIÓN DE LA COSA FRUCTUARIA>. Si una heredad
fructuaria es inundada, y se retiran después las aguas, revivirá el usufructo por el
tiempo que falte para su terminación.
ARTICULO 868. <EXTINCIÓN DEL USUFRUCTO POR SENTENCIA JUDICIAL>.
El usufructo termina, en fin, por sentencia del juez que, a instancia del propietario,
lo declara extinguido por haber faltado el usufructuario a sus obligaciones en
materia grave, o por haber causado daños o deterioros considerables a la cosa
fructuaria.
El juez, según la gravedad del caso, podrá ordenar, o que cese absolutamente el
usufructo, o que vuelva al propietario la cosa fructuaria, con cargo de pagar al
fructuario <sic> una pensión anual determinada, hasta la terminación del
usufructo.
ARTICULO 869. <USUFRUCTO DEL PADRE DE FAMILIA Y DEL CÓNYUGE>.
El usufructo legal del padre de familia sobre ciertos bienes del hijo, y el del marido,
como administrador de la sociedad conyugal, en los bienes de la mujer, están
sujetos a las reglas especiales del título De la patria potestad, y del título De la
sociedad conyugal.
Nuda propiedad es aquel derecho de una persona sobre una cosa en la que su relación con
ella es de ser sola y únicamente propietario. Como propietario, tiene el dominio sobre la cosa,
pero no ostenta la posesión por haber sido cedida ésta a través de un derecho real
denominado usufructo

Definición de usufructo. ... En el ámbito judicial, el usufructo es el derecho a disfrutar de


los bienes ajenos con la obligación de conservarlos. Esto quiere decir que
el usufructuario posee el bien en cuestión (tiene la posesión), puede utilizarlo y obtener
sus frutos, pero no es su dueño (no es el propietario).

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