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Universidad Nacional de Colombia

5FCH – Departamento de Filosofía


Seminario Filosofía Antigua I
Protocolo: Sesión 12 de marzo de 2020
Laura Catalina Cortés Sierra

10El presente protocolo describirá el desarrollo de la sesión dedicada, en principio, a los pasajes
264 y 265d-e del diálogo Fedro. Así pues, hemos ordenado la discusión agrupando los problemas
y temas que fueron tratados.

I. ¿Qué es la unidad?
15
Para abordar la cuestión “¿qué es la unidad?” se sugirió que este seminario podría comenzar
basándose en las argumentaciones metodológicas que plantea Fedro, es decir, comenzar con lo
que este diálogo tiene para decir acerca del método o acerca de la manera de producir un buen
discurso. Se pensó que para abordar la cuestión de la unidad también era pertinente examinar el
20asunto de la definición y, con ello, se llegó a la pregunta por la relación entre el método y la
definición. Frente a esto se sostuvo que este método, que no es otro sino el de la dialéctica, puede
entenderse como un método para producir definiciones. Esto se explicó en razón de que es un
método para producir λóγος, palabra que significa no solo discurso ordenado sino también
definición. De cara a lo anterior, surgieron dos cuestiones fundamentales; en primer lugar, si
25acaso no deberíamos contentarnos solo con atender a lo que se dice del método en el diálogo,
sino atender, además, a aquello que en él se hace, es decir, su aplicación como tal. En segundo
lugar, nos preguntamos cómo entender el procedimiento del método dado que parece pecar de
circularidad, pues parece que debemos iniciar por la definición del objeto de estudio aunque es un
método que pretende tener como objetivo dar con la definición.
30
II. Algunas cuestiones sobre la unidad

A lo largo de la sesión, se formularon algunos comentarios y cuestiones en torno a la unidad. En


primer lugar, se comentó que el método, con el que se pueden producir definiciones, admite que
35la unidad contenga ella misma contrarios. Se insistió en hay que buscar aquello que es común
incluso entre cosas y aspectos que son contrarios. En segundo lugar, se llegó a la pregunta acerca
de si todo εἶδος en tanto que género es susceptible de convertirse siempre en un εἶδος en tanto
que especie. Es decir, si toda unidad admitiría divisiones subsiguientes y, a la vez, toda unidad
admitiría también ser englobada en una unidad mayor. Finalmente, surge la observación de que la
40unidad no podría definirse como lo uno, o al menos se señaló que para definir la unidad es más
apropiado definirla por división.

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III. Sobre los pasos del método ¿orden cronológico o no?

Uno de los expositores de la sesión empleó la expresión “los dos pasos del método” para referirse
a aquel unir y dividir presentes en el método dialéctico. Allí surgió el problema de si estos dos
50“pasos” deberían entenderse cronológicamente, es decir, como un paso que se hace primero y
otro que se hace después. Si este fuera el caso, ¿cuál es el paso que se hace primero: unir o
dividir? ¿o acaso se debería replantear la manera de entender el unir y dividir como pasos en el
tiempo?

55El expositor defiende su posición según la cual los dos pasos del método son de orden
cronológico; añade que esto no implica que sean totalmente independientes entre sí y tampoco
significa que haya una preeminencia en términos de valor entre un paso y otro. El expositor
intenta fundamentar su interpretación en el texto y para ello da dos argumentos: primero, un
argumento dramático según el cual Sócrates explica primero un paso y luego el otro. Esto es
60refutado enseguida ya que cuando alguien habla de una cosa y luego de otra no quiere decir
necesariamente que ese sea el orden en que aquello de lo que se habla esté dispuesto en el tiempo.
Segundo, un argumento según el cual, lo que hace Sócrates es, primero, poner todas las cosas en
una unidad. Si Sócrates está haciendo un discurso y este pudiera tomarse como ejemplo de cómo
hacer un buen discurso, entonces, lo primero sería la unidad, según el expositor, definir. La
65objeción que se formula frente a esto tiene que ver con las preguntas “¿de qué método estamos
hablando?” y “¿para qué es el método?”. Esto hace que repasemos lo que se había afirmado
antes, esto es, que con el método se puede producir una definición. El método tiene dos “pasos”:
unir y dividir; eso equivale a decir que son estos dos pasos los que se necesitarían para llegar a
una definición, de manera que definir consistiría no solo en unir, sino en unir y también dividir.
70Por lo tanto, el argumento del expositor según el cual definir es solo unir no funciona y no
podríamos decir que la unión va primero porque si lo primero es definir, entonces, tendría que
haber tanto unión como división.

Profundizando en lo que durante la sesión se llamó “los dos pasos del método” se describió con
75más detalle qué son cada uno de estos pasos. Se dijo: “[…] llegar a una idea que, en visión de
conjunto, abarcase todo lo que está diseminado, para que, delimitando cada cosa, se clarifique,
así, lo que en cada caso se quiere enseñar” (Fedro, 265c). Por “idea que en visión de conjunto
abarcase lo diseminado” se refiere a una unión-sinopsis, mientras que la “delimitación” implica
separar o dividir. Si el método en efecto sirve para definir entonces hay que admitir que la
80definición compromete tanto sinopsis como delimitación. La unificación presupone, de alguna
manera, un sentido bastante claro de división y serían entonces inseparables un paso de otro.
Enseguida se agregó la observación de que los “pasos” del método serían lógicos y no
cronológicos; si se toma una unidad y se separa en otras unidades, entonces, básicamente se
estaría haciendo la unión y la separación de manera simultanea, luego, no serían pasos
85cronológicos debido a esa simultaneidad y más bien deberían considerarse como pasos lógicos.
El ponente afirma que si bien con el método se pueden obtener definiciones, no es así
necesariamente. Primero porque cuando Platón construye su definición del amor no usa este
método, es decir, no lo construye como género y especie. Segundo, Platón introduce el método
90como un antídoto para que las audiencias no se dejen engañar de los retóricos y, en ese sentido,
es más que un método simplemente para definir. Ahora, para continuar defendiendo su posición
del orden cronológico de los pasos del método, pasa a revisar el ejemplo que da Sócrates sobre la
definición del amor. Según el ponente, el primer paso que hace Sócrates es reunir las cosas que
están dispersas en una unidad, que en este caso es la locura1. Después de haber reunido una
95multiplicidad bajo la unidad de la locura ahí sí comienza a dividir y, en esa medida, sería
cronológico. Sin embargo, dice, hay que considerar que cuando se hace la labor de unidad
también se está adelantando o insinuando la labor de división, pero esa labor de división es una
segunda etapa.

100Más adelante, se examina el ejemplo del amor y se intenta identificar el género y la especie en su
definición. En 237d se plantea que pude estar una primera definición de lo que es el amor y allí se
dice que éste es un deseo; si consentimos en que esto se trata en efecto de una definición
tendríamos una confirmación de que el discurso de Sócrates sí comienza con una definición. En
ese pasaje se dice que el género del amor viene siendo el deseo y la diferencia específica es el
105goce de lo bello.

IV. Sobre las cosas que se delimitan

Surge un problema acerca de cómo entender la expresión “delimitando cada cosa2, [para que así]
110se clarifique […] lo que en cada caso se quiere enseñar” (Fedro, 265d). Se presentó una
interpretación (I) según la cual aquello que se delimita no es la especie, sino las cosas que se
quieren enseñar, es decir, aquello que se busca definir. Si lo que se quiere enseñar es el amor
entonces hay que comenzar a dividir el amor. La otra interpretación (II), al contrario, consistió en
decir que las cosas que se delimitan son de hecho las especies y en este caso se delimita al amor
115respecto de un todo más grande (el deseo por ahora y más adelante la locura).

Con el fin de entender mejor el problema y arrojar luces sobre él, se planteó la posibilidad de
seguir la interpretación del texto que hace el comentarista Hayase. Según este autor, Sócrates
descubre la locura como el género del amor al recolectar el amor junto con la glotonería y la
120intoxicación. Para encontrar el género, Sócrates tuvo que poner el amor en relación con estas
otras cosas, las cuales, al verse como semejantes pero a la vez como distintas es que se pueden
poner dentro de un mismo género, en este caso, la locura.

La posición (I) se mantiene en decir que eso que hemos llamado el primer paso consta de dos
125cosas: visión sinóptica y delimitación. Delimitación apunta hacia definición; lo que se está
haciendo ahí es definir. En este caso lo que está siendo definido es el amor y la manera en que

1
Durante la sesión también nombrada como manía o insania.
2
Énfasis añadido.
está siendo definido es, por un lado, por visión sinóptica, es decir, captando una idea (en este caso
la idea de la locura); por otro lado, por delimitación, que es necesaria para que se pueda definir el
amor, pues no basta con decir que el amor es locura. La delimitación supone una división:
130división de la locura en cuatro partes, entre ellas, por ejemplo, el amor divino. Si ahora lo que se
quiere no es definir el amor divino, entonces, el amor tendrá que dividirse en otra sección
dependiendo lo que se quiera definir. La posición (II) se precisó que en este diálogo siempre se
está definiendo el amor, tanto en el primer discurso como en el segundo. Para definir amor
Sócrates encuentra que hay dos géneros alternativos: o es deseo o es locura; en el primer discurso
135es deseo y en el segundo es locura. Esta segunda postura es una según la cual, de entrada, lo que
se está definiendo es la especie, es decir, el amor. Para definir el amor lo que se está haciendo es
ponerlo dentro de algo mayor; al ponerlo dentro de algo mayor se debe suponer que hay otros
elementos que están en juego (glotonería intoxicación) y hay que, intuitivamente, estar
dividiendo y produciendo diferencias entre esos elementos. Así pues, mientras que la posición (I)
140pretende la división del amor para definir otros tipos de amor, la posición (II) sostiene que se
desprende el amor de algo más grande y a la vez se desprende de otros elementos que componen
esa idea más global. Es decir, (I) lo que se subdivide es el amor y (II) lo que se subdivide es el
género mismo de la locura o el deseo.

145El consenso al que se llega en este punto es que lo que estamos definiendo es definitivamente el
amor, también estamos captando sinópticamente una unidad de lo disperso y a la vez estamos
delimitando. Lo que delimitamos es el amor y las cosas en las que se divide subsecuentemente el
amor.

150A continuación, se discutió de qué manera se está entendiendo la delimitación. Por un lado, se
podría decir que se delimita el amor frente a otros tipos de locura (como la glotonería y la
intoxicación); por otro lado, uno podría decir que se delimita el amor respecto de la locura
misma. Sin embargo, se concluyó que era lo mismo: la delimitación frente a la locura es a la vez
la delimitación respecto de ciertos miembros de la locura.
155
V. Precisiones sobre “los dos pasos” y la cronología.

Se revisaron los dos “pasos” del método y se planteó que, el primer paso, incluye captar
sinópticamente algo al delimitarlo del resto de elementos; es lo mismo aquello que se capta
160sinópticamente que aquello delimitado, pues en ambos casos es el amor. La manera en que se
delimita es trazándose un límite hacia fuera y ese afuera es ese género abarcador que en el primer
discurso corresponde al deseo y en el segundo a la locura. Ahora, dado que para definir hay que
unir y delimitar, y como eso es lo que se está haciendo precisamente, entonces, estamos hablando
de una definición técnica. Surge, sin embargo, una confusión respecto a la afirmación de que el
165paso uno se incluyen dos cosas. Algunos sugieren que el primer paso es solo ubicar el género y la
delimitación es una consecuencia de ese paso, pero no significa que la delimitación esté incluida
en ese paso. Es decir, la delimitación es una consecuencia de haber puesto algo en un único
género, pero no es un momento del primer paso.
En un intento por seguir a Hayase, se planteó que si hay dos pasos entonces estos deberían el
170paso de la recolección3 y el paso de la división. Ahora, estos pasos no serían del todo
independientes y en la explicación de cada uno aparecería el otro. El primer paso sería ubicar el
género, sin por ello haber dado las divisiones de la definición relevante. El segundo paso es la
división del género, así por ejemplo, el género de la locura se dividió en 4. Si esto es así, el texto
sí da un orden cronológico de pasos a partir de la exposición que hace Sócrates en el diálogo. No
175obstante, otra postura sugirió que lo que Hayase está haciendo es algo diferente: hay en efecto
dos técnicas distintas, pero eso no quiere decir “dos pasos” y menos en sentido cronológico. Esta
posición consideraba que cronología, de la que se comenzó a hablar al principio, tenía que ver
con el primer discurso del amor en 237d, y dicha cronología estaba motivada en que ese primer
discurso era una condición para lo que se venía en 265d. Lo que Hayase dice no es que haya dos
180pasos, primero uno y luego el otro, sino que para conseguir la definición como un todo hay dos
elementos. Se puntualizó, además, que recolectar no es lo mismo que unidad como tal, pues hay
cosas que son colecciones aunque puede no haber unidad en ellas, de ahí que en Político se
afirme que no es lo mismo la parte que la especie. La unidad como tal solo se logra hasta 266b,
en donde unión y división se usan en sentido completamente técnico. Ahora bien, se observó que
185hay un sentido en el que para poder ver la unidad hay que saber con anterioridad algo: no se
puede hacer una división sin saber qué se está dividiendo y si ya se sabe qué es lo que se está
dividiendo entonces es porque ya se tiene la definición.

VI. Algunos consensos, recapitulaciones y conclusiones.


190
Al inicio el interés principal era aplicar el método a la pregunta “¿qué es la unidad?” Si la
discusión siguió acerca del método y cómo es el se debe a que todavía necesitamos alguna
claridad al respecto para poder proceder a aplicar el método a la pregunta inicial.

195En el texto se esta hablando de un método, este es el método es la dialéctica que consiste en
unión y división; es un método que, podríamos decir, une el unir y el dividir. El método
dialéctico es un método que si bien puede usarse para producir definiciones, también se trata de
un método para pensar y hablar en general, de ahí que sea introducido como un antídoto contra
los retóricos. El pasaje que se examinó habla sobre la definición porque delimitar está
200relacionado con la definición, y se llegó a mostrar la relación entre método y definición a partir
de la palabra λóγος. Ahora, sobre si la unión y la división son “pasos” simultáneos no hubo
consenso, pero se acordó que dado que el método para producir definiciones consta de unir y
dividir, entonces, definir tiene que reunir tanto unión como división. Se dijo que la delimitación
se hace respecto del género, por ejemplo, el amor respecto de la locura. También se mencionó
205que toda determinación implica negar, es decir, decir lo que no es eso que se busca definir. La
delimitación se puede entender como división y entonces se refuerza el punto de que la definición
no es solo unir sino unir y dividir.

3
Término que usa Hayase
210Si lo que se quiere es producir una definición de, siguiendo el ejemplo del diálogo, el amor,
entonces, tiene haber un conocimiento sobre el deseo o la locura, tomando como género del amor
el deseo o locura. La capacidad de establecer grandes unidades y conocer a fondo cada una de
esas unidades implica conocer la definición de cada una de sus especies. La unidad, en ese
sentido, tiene que ver con una exposición completa de lo que es el género; la unidad, además, es
215el momento sinóptico-divisivo, ya que es ahí donde tenemos consciencia del género con las
delimitaciones que pueda haber dentro de él. El problema no es encontrar la definición de amor,
sino que encontrar la definición de amor supone conocer exhaustivamente el género del deseo o
la locura. El método estaría puesto ahí: al encontrar la unidad ya podemos decir, en cierta medida,
que estamos definiendo eso que nos interesaba; si encontramos la unidad lo que nos queda es
220caracterizar la unidad en sus delimitaciones y solo después de eso es que podemos discurrir
científicamente sobre el amor.

En los dos discursos sobre el amor del diálogo, se define el amor divino y el siniestro, esto quiere
decir que hace una segunda división más allá de la división respecto de la locura: no solo división
225de la locura sino del amor mismo. Pero dividir el amor y también dividir la locura no son cosas
excluyentes.

A medida que se avanza en el diálogo con Sócrates parece que se avanza en la técnica de unir y
dividir. El problema no esta en que esa primera definición que Sócrates dio sobre el amor sea tan
230fatal que la tenga que retirar, sino que lo que hizo fue muy simple: hablo del amor en general sin
dividirlo. Ya después se corrige desde el punto de vista del método y por ello comienza a dividir.

Bibliografía

235- Platón (1988). Diálogos, Fedro. Gredos: Madrid.

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