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Buses de superficie versus Metro
Luis Alberto Ahumada Abrigo 06 de julio de 2015
Abstract:
Luego de ocho años de la implementación de la política pública del Transantiago
han surgido múltiples problemas en su funcionamiento, siendo ésta altamente
cuestionada. El financiamiento del sistema de transporte es motivo de debate
entre expertos y policy makers. El propósito de esta investigación es analizar los
factores políticos, sociales, económicos y técnicos que han incidido en el proceso
de inyección y distribución de recursos y subsidios para el Transantiago,
identificando diferencias entre los recursos destinados a los buses de superficie y
al Metro de Santiago. Se pretende, además, sintetizar el debate técnico sobre los
beneficios del Metro y los buses de superficie incluyendo la evaluación de su
financiamiento. Por último, se busca encontrar soluciones de política pública con
visiones a largo plazo para el mejoramiento del transporte en el país.
Introducción
Contexto
En octubre de 2005 comenzó la implementación de la política pública con una marcha
blanca que se mantuvo hasta febrero de 2007, cuando ocurrió la transición definitiva.
Durante ese período estalla la crisis del Transantiago: problemas en las tecnologías de
pago, déficit de buses, cambios en los recorridos y la desinformación de la gente, fueron los
principales obstáculos que tuvo que enfrentar la política pública en sus primeras etapas.
Además, dicha fase coincidió con el cambio de gobierno de Ricardo Lagos al de Michelle
1
Recurrir a "Gráfico de actores relevantes" en Anexo para una observación gráfica de quiénes participaron.
1
Bachelet, siendo ella perjudicada políticamente y sería quien enfrentaría los problemas de la
implementación.
Los problemas se mantienen, pasando por el gobierno de Sebastián Piñera, hasta hoy en
día. El cambio en el funcionamiento de los buses de superficie ha traído consigo varios
efectos externos, como el aumento de la congestión vehicular en las calles más transitadas
de la capital, el excesivo aumento en la cantidad de buses, la disminución en el uso de
buses de superficie y un considerable aumento de los usuarios de Metro, desencadenando
un colapso en las principales líneas de la red.
Se han presentado diversas soluciones a lo largo del proceso de ejecución. Desde sus
inicios el sistema ha requerido de un subsidio para financiar sus gastos y de inyecciones de
recursos para modernizar la infraestructura vial. Sin embargo, los resultados de dichas
decisiones no han traído consigo los efectos esperados. El sistema aún continúa colapsado
y con claras deficiencias en su funcionamiento. Los usuarios cada día deben enfrentar
horas de viajes y un servicio de Metro y buses totalmente colapsado. A continuación
repasamos los principales hechos y datos puntuales que han surgido para el mejoramiento
del transporte público metropolitano, luego de la implementación del Transantiago hace 8
años.
Antecedentes
Tipos de financiamientos
En primer lugar, es importante diferenciar entre dos modos de financiamiento estatal a la
integridad del Transantiago (buses de superficie y Metro), el subsidio y la inversión en
infraestructura (ver gráfico 1, anexo). Los ingresos que percibe el sistema a través del pago
de pasajes de los usuarios no alcanza a cubrir más del 60% de los costos, el 40% restante
se paga a través de un subsidio anual estatal vigente desde 2009 (La Tercera, 2015). Es
decir, el Estado debe constantemente pagar el déficit que produce el Sistema, destinando el
68% a las empresas operadoras de buses de superficie, un 23% a la red de Metro y un
porcentaje a los gastos por la red de carga y otras instituciones. Dicho subsidio fue producto
de un proyecto de ley impulsado por Michelle Bachelet en su primer mandato, sin embargo,
éste ha adquirido modificaciones y aumentos con el pasar de los gobiernos (ver cuadro 1,
anexo).
Por otro lado, la inversión en infraestructura consiste en planes focalizados de cada
gobierno para solucionar problemas específicos de este tipo en diferentes medios de
transporte públicos. Por ejemplo, la extensión y creación de las líneas de Metro, la compra
de nuevos buses o trenes y la creación de corredores segregados de buses, entre otras
cosas.
Algunas cifras y estadísticas
Sin lugar a dudas, uno de los principales problemas del Transantiago es el alto costo que
significa cada año para el Estado. Estudios estiman que los aportes deberían ir más allá de
lo que se entrega vía subsidio, y proponen inversiones por hasta US $17 mil millones en
infraestructura como corredores segregados de buses y nuevas líneas de Metro (El
2
Mercurio, 2015). Además, se anticipa que el subsidio aumentará para evitar fuertes
incrementos en la tarifa de los usuarios, por lo que se estima un costo de US $16 mil
millones entre 2012 y 2022 (La Tercera, 2012).
A pesar de los elevados recursos que inyecta el Estado cada año, los indicadores de
desempeño del Sistema demuestran una baja en el transcurso del tiempo. El tiempo
promedio de espera en los paraderos ha aumentado en un 50% de 2008 a 2012 (De
Grange, 2014). El tiempo promedio de viaje en buses de superficie ha aumentado de 30
minutos en 2008 a 35 minutos en 2014 (De Grange, 2014). Además, el colapso en las
líneas de Metro ha sido cada vez más frecuente luego del malestar de los usuarios con la
implementación del Transantiago, desde 2009 a 2013, el uso de los buses ha disminuido en
un 16%, mientras que el uso de las redes de Metro ha alcanzado un aumento superior al
10% (De Grange, 2014), cifras que evidencian el descontento de las personas con el
sistema de buses y demuestra su migración al Metro, acción que causa un colapso en sus
principales líneas.
Desde una perspectiva comparada, el sistema de transporte público santiaguino presenta
estándares muy distintos a ciudades desarrolladas de magnitud similar. En el Metro de
Santiago hay 22 mil pasajeros diarios por kilómetro de Metro, mientras que en Shanghai la
cifra es de 12 mil, en Londres de 8 mil y en Washington D.C de 5 mil (Metro de Santiago,
2011). La infraestructura vial de Metro en Santiago es deficiente en comparación con estas
ciudades. En cuanto a los buses de superficie, Santiago tiene que contar con 6.500 buses
para satisfacer la demanda, cifra que se posiciona como la más alta de las ciudades OCDE
(El Líbero, 2015). Santiago tiene que lidiar con mucha demanda y poca oferta de Metro, por
ende, su oferta de buses es comparativamente inmensa.
También es importante destacar el alto impacto que tiene la evasión en los buses del
Transantiago. En 2014, los niveles de evasión alcanzaron un 24%, lo más alto en su
historia. El sistema, entonces, anualmente deja de ganar US $415 millones, lo que
representa más de un 60% del subsidio estatal, siendo la evasión el problema más costoso
para el funcionamiento del sistema (La Tercera, 2015).
Opiniones de expertos en transporte
El círculo técnico de expertos en políticas de transporte abarca una amplia gama de
propuestas y soluciones. Este conjunto de académicos trabajan como representantes de
distintas universidades del país en proyectos de formulación y evaluación de políticas
públicas en transporte, a continuación se revisará brevemente la perspectiva del ex ministro
de Transportes, Pedro Pablo Errázuriz, el académico de la UC, Juan Carlos Muñoz y Louis
de Grange, experto en transporte de la UDP. Las principales propuestas de dichos técnicos
se basan en cómo distribuir los recursos de infraestructura que se destinarán los próximos
años al transporte metropolitano, para en un mediano plazo contar con un sistema de
calidad e integridad.
Pedro Pablo Errázuriz, señala que se deben hacer gastos en infraestructura de Metro y
trenes, hasta superar los 180 km, y la construcción de 70 km de corredores segregados de
buses, con inversiones superiores a los US $460 millones. Juan Carlos Muñoz, doctor en
Transporte de la UC, prefiere priorizar el espacio vial para buses, propone 100 km de
3
corredores segregados que debieran costar hasta US $1.500 millones. Por otro lado, Louis
de Grange, doctor en Transportes de la UDP, argumenta que la inversión en Metro sería
más efectiva, proponiendo cuatro líneas nuevas y extensiones de las actuales por una
inversión de largo plazo superior a los US $6 mil millones (El Mercurio, 2015).
Problematización, Pregunta de Investigación e Hipótesis
A pesar de 8 años de soluciones, subsidios e inversiones en infraestructura, la totalidad del
sistema de transporte público metropolitano continúa en déficit y el sistema frecuentemente
está colapsado. Los actores políticos, bajo determinados criterios, han tomado decisiones
de dónde invertir y cómo distribuir los recursos, no obstante, en la actualidad vemos una
diversidad de argumentos de expertos que indican múltiples direcciones y magnitudes
diferentes en cuanto a la inyección de recursos al sistema. A raíz de esto surge la siguiente
pregunta de investigación:
¿Qué factores políticos, económicos y sociales han incidido en el proceso de
inyección y distribución de recursos a infraestructura y subsidios al Sistema de
Transporte Público Metropolitano desde la implementación del Transantiago en 2006
hasta la actualidad?
A modo de hipótesis se sugiere el siguiente enunciados:
Hay una mayor incidencia de factores políticos y sociales que de factores
económicos o técnicos en el proceso de inyección y distribución de recursos a
infraestructura y subsidios al Sistema de Transporte Público Metropolitano.
Estas hipótesis son posibles situaciones en las que se puede desenvolver el proceso de
toma de decisiones gubernamentales. El propósito de la investigación, más que comprobar
esta hipótesis, es explicar e identificar los diferentes y posibles factores que inciden en el
proceso.
Objetivos
General
Analizar los factores políticos, económicos y sociales que han incidido en el proceso de
inyección y distribución de recursos a infraestructura y subsidios para el Sistema de
Transporte Público Metropolitano desde 2006 hasta la actualidad, identificando diferencias
entre los recursos destinados a los buses de superficie y al Metro de Santiago.
4
Específicos
Identificar los actores no institucionales (factores sociales) que han influido en el
proceso de toma de decisiones del proceso de inyección de recursos a
infraestructura y subsidios para el Sistema de Transporte Público Metropolitano,
desde el 2006 hasta la actualidad.
Marco Teórico
Uno de los principales desafíos de los países es desarrollar un sistema de transporte
público de calidad que permita la movilidad integral dentro de las ciudades. En Chile, las
ciudades son el entorno cotidiano de la mayoría de la población, el 87% de la población vive
en ciudades, lo que las posiciona como el motor de la economía nacional (Jans, 2009: 6).
Las grandes urbes requieren de planificación debido a su constante crecimiento poblacional
y económico, lo que va acompañado inseparablemente de un alza en los modos de
transporte y viajes. Los retos apuntan a diseñar un desarrollo urbano inteligente y que
prevea los problemas que inevitablemente se nos avecinan, como la proliferación de viajes,
el aumento en el uso del automóvil y, en consecuencia, el deterioro ambiental (Jans, 2009:
7).
5
¿Cómo medir calidad de los sistemas de transporte?
Debido a la multiplicidad de alternativas de transporte urbano, el Comité Europeo para la
Normalización (2002) ha desarrollado un método estándar para la evaluación de calidad de
los sistemas. Éste incluye un conjunto de dimensiones que son de especial importancia
para aprobar un sistema de transporte de calidad. La metodología es llamada círculo de
calidad de servicio y se divide en dos, el criterio del cliente y el criterio de los proveedores
(autoridad y operador).
Por un lado, el criterio de calidad no se evalúa solamente en términos de rendimiento
técnico, sino también desde el punto de vista del cliente y su nivel de satisfacción. Mientras
que los criterios pertenecientes a la industria tienen que ver con las buenas prácticas de los
proveedores, el rendimiento de los competidores y las restricciones presupuestales y
técnicas (CEN, 2002).
Son 8 categorías las que la norma europea establece como base para la evaluación de
calidad desde la perspectiva del cliente (CEN, 2002: 23)2:
2. Accesibilidad: acceso al sistema de transporte público incluyendo interfaz con
otros modos de transporte.
3. Información: suministro sistemático de conocimiento sobre el sistema de
transporte público para facilitar la planificación y ejecución de los viajes.
4. Tiempo: aspectos del tiempo relevantes a la planificación y ejecución de los
viajes.
5. Atención al cliente: elementos del servicio introducidos para permitir la mejor
practicable combinación entre el servicio estándar y los requerimientos de cada
cliente.
6. Confort: elementos del servicio introducidos con el propósito de hacer que los
viajes en transporte público sean relajantes y placenteros
7. Seguridad: sensación de protección personal experimentada por los clientes,
derivada de la aplicación de medidas concretas y de la actividad diseñada para
asegurar que los clientes sean conscientes de estas medidas.
8. Impacto ambiental: efecto sobre el medio ambiente derivado de la prestación
de un servicio de transporte público.
Si bien en múltiples países el sistema de transporte implementado, sea a través de trenes
subterráneos o buses de superficie, ha traído consecuencias positivas, también hay
evidencia de que, en muchas ocasiones, pueden haber efectos inesperados. La
2
La figura 1 (anexos) expresa gráficamente cómo conviven ambas formas de evaluación del servicio de
transporte.
6
implementación de sistemas de transporte público eficientes puede traer consigo una
mejora en la salud pública, por ejemplo, cuando se planifica una solución de transporte que
reduzca la cercanía de vehículos motorizados a las personas, logrando así, mejoras en
cuanto a las enfermedades respiratorias de los ciudadanos (Krzyzanowski et al., 2005; en
Dora et al., 2011). Del mismo modo, hay evidencia en la literatura que asegura que los
usuarios de transporte público tienen, en promedio, menor riesgo de accidentes en
comparación a otros medios de viaje (Dora et al., 2011).
Por otro lado, la implementación de sistema de superficie en países como México y Chile
han generado efectos adversos. El aumento en los tiempos de espera y de viaje, lo que en
consecuencia produce que gran parte de las personas intenten solucionar sus problemas de
viaje con la compra de automóviles, lo que desemboca en un excesivo aumento del uso de
vehículos privados y, por ende, un alza notable en la congestión y contaminación (Calvillo y
Moncada, 2008).
Integración de buses y metro
Gutiérrez (2013) pone énfasis en la formulación de los planes de movilidad y desarrollo
urbano. Considera que el plan de transporte público se debe basar en una visión de futuro
de la ciudad. Señala la importancia de crear estructuras institucionales de alcance integral
urbano que convivan con los distintos niveles de gobierno. Afirma que: "un plan de
movilidad no puede estar en desacuerdo con el plan de desarrollo urbano" (Gutiérrez, 2013:
12).
Gutiérrez considera que los sistemas de buses de superficie de alta calidad deben ser
tomados en cuenta como alternativas de transporte de alta calidad, "dejando atrás el
estigma de "alternativa de segunda clase" (Gutiérrez, 2013: 3). A través de la
implementación de sistemas integrados multimodalmente, la alta calidad se consigue
mediante la integración total de la oferta, con calidad homogénea, instituciones
fiscalizadoras y con alcance gubernamental suficiente (CAF, 2011).
Chaparro (2002), toma la experiencia colombiana del Transmilenio en el año 2000 para
evidenciar una positiva forma de implementación de buses, cuyo estándar del sistema
resultó ser equiparable al servicio que entrega el metro. Señala que: "Transmilenio,
comprueba la factibilidad de implantar un sistema de transporte masivo que aproveche
espacio vial existente y que transporte volúmenes de pasajeros comparables con los
llevados por líneas de metro en muchas ciudades, a una fracción del costo de un metro sin
sacrificios importantes en términos de velocidad" (Chaparro, 2002: 57). También aludiendo
a los menores costos que significaba el proyecto Transmilenio, se señala que éste ha sido
una "extrapolación de los atributos de calidad de los metros puestos en sistemas de buses
de alta capacidad en superficie, con ventajas en flexibilidad, rápida implementación y
7
menores costos con respecto a las alternativas de rieles" (Hidalgo and Gutiérrez, 2012; en
Gutiérrez, 2013: 3).
Pero, ¿es la calidad del servicio de metro mejor que la de buses? Se suele asociar un
sistema de alta calidad con las redes subterráneas de metro, no obstante, hay que
considerar una distinción fundamental: mayoritariamente los metros son grandes pilares de
calidad en sectores de alta afluencia, es decir, su cantidad de pasajeros transportados por
kilómetro es alta debido a que funcionan en sectores céntricos (poseen alto rendimiento)
(Moya, 2015). Los buses, en cambio, tienen mayor facilidad y menos costos para cubrir
sectores geográficos periféricos, aquellos donde una red de Metro sería difícilmente
costeable, en estos escenarios, probablemente el rendimiento de los buses sea menor (se
transporta menos personas por kilómetro), pero su calidad de servicio puede ser alta porque
cumplen con las expectativas de los usuarios. La alta calidad está usualmente asociada al
alto rendimiento de los sistemas donde hay alta demanda, pero se debe aclarar que alta
calidad y alto rendimiento son cosas distintas (Gutiérrez, 2013).
Un ejemplo de esto es el sistema de buses de Amsterdam implementado en áreas
periféricas de baja demanda, es un caso singular de éxito (Gutiérrez, 2013). A pesar de que
el área metropolitana de Ámsterdam consta de 1.4 millones de habitantes (muy por debajo
de la media de las grandes ciudades latinoamericanas, el sistema cumplió su cometido:
aumentó la demanda de los transportes públicos en 47% en 3 años, con un promedio de 32
mil pasajeros transportados cada día. (Brendan et al, 2011; en Gutiérrez, 2013).
Del mismo modo, Londres logró un incremento del 40% desde 1999 a 2008 en el uso de
buses de superficie (Houghton et al., 2009), esto indica que las políticas para cambiar las
tendencias de los ciudadanos han tenido éxito en dicha capital. Esto fue posible gracias a
“iniciativas específicas que incluían ampliación de servicios, mejores horarios y conexiones,
inversión en nuevos autobuses, una estructura tarifaria y una solución de pago más
sencillas, actualización regular de los trayectos y campañas de marketing” (Houghton et al.,
2009: 11).
Financiamiento de sistemas de transporte
El financiamiento de los sistemas de transporte comúnmente varía desde dos fuentes,
participación privada o el financiamiento estatal. Chaparro sostiene que "la participación
privada de los diversos agentes que intervienen en la prestación del servicio mediante
concesión, ha conducido a prácticas de eficiencia, productividad y competitividad dentro del
sistema" (Chaparro, 2002: 57). Dicha aseveración surge de una evaluación positiva al
sistema Transmilenio, donde el incentivo de de ingreso a los operadores se calcula en
8
función de los kilómetros recorridos, terminando con el tradicional esquema de pagos por
pasajero, que condujo a manejos indebidos dando una pésima calidad de servicio
(Chaparro, 2002).
También se ha tenido en cuenta la posibilidad de contar con mecanismos internacionales de
financiación: "la financiación internacional, mientras que puede ser suplementaria o
«empaquetada» con apoyo financiero privado o nacional, puede hacer la diferencia entre un
proyecto realizable o no realizable y también envía una señal de mercado importante en
términos de tendencias en préstamos para el desarrollo de nueva infraestructura en
general" (Dora et al., 2011: 37).
Gutiérrez (2013) subraya que el éxito en el financiamiento de los proyectos de transporte
urbano está estrechamente vinculado a que los planes de movilidad y desarrollo urbano
sean coherente con dichos proyectos. Un proyecto de transporte debe tener en cuenta las
futuras transformaciones que la institucionalidad urbana y autoridades gubernamentales
pretenda hacer en el futuro. "Cuando existen planes urbanos y planes de movilidad que
están desconectados entre sí, no tienen peso para vincular los proyectos de transporte
urbano a las prioridades de la inversión pública" (Gutiérrez, 2013: 6).
En este aspecto, Europa se diferencia de la experiencia latinoamericana porque la mayoría
de los países europeos han legislado sobre la financiación de la infraestructura y la
operación del transporte a largo plazo (Gutiérrez, 2013). Ellos lo ven como "una inversión
estratégica con alto retorno económico, social y ambiental (con gran impacto en las cuentas
de salud de gobiernos, empresas y familias, y en la calidad de vida y la competitividad de
las ciudades)" (Gutiérrez, 2013: 6), ya que se evita la proliferación de vehículos
motorizados, lo que elude la eventual congestión de la ciudad y aumento de la
contaminación (ATUC, 2012; en Gutiérrez, 2013).
"Por lo que se refiere a la política, esto conlleva la coordinación entre las distintas
autoridades y organismos de transporte urbanos, regionales y nacionales, así como con
otras entidades interesadas, como los responsables de la planificación urbana y los
proveedores de servicios de transporte. La colaboración entre estos entes es esencial para
desarrollar estrategias, políticas y estándares técnicos coherentes (tal y como se describe
en nuestra primera recomendación), así como para garantizar la ejecución coordinada de
los planes" (Houghton et al., 2009: 14).
Del mismo modo, el informe señala que debe haber coordinación en el plano operativo, lo
que consiste en la integración del servicio para el usuario, a través de la complementación
9
de procesos, políticas y procedimientos. Esto significa que deben coordinarse horarios,
billetes y tarifas entre proveedores (Houghton et al., 2009).
Los subsidios también dependen de la capacidad del sistema para recaudar fondos y auto
sustentarse. En Europa, pese a tener tarifas que triplican el promedio latinoamericano
(Figura 2, anexo), el promedio de subsidio europeo al transporte colectivo está encima de
50% (Figura 3, anexo) (Gutiérrez, 2013). Esto es significativo en comparación a
Latinoamérica, los gobiernos nacionales europeos contribuyen en gran parte al
financiamiento del transporte urbano, no obstante, éste siempre está condicionado por
determinados estándares de calidad y eficiencia (Gutiérrez, 2013).
Según la evidencia internacional, un sistema óptimo de transporte urbano con integración
tarifaria, operacional y física, con alta calidad y eficiencia, tendría tarifas que sólo cubrirán
hasta un 60% de los costos, la diferencia tiene que ser cubierta con subsidios
gubernamentales y otras fuentes. (Gutiérrez, 2013). La Asociación Española de Empresas
Gestoras de los Transportes Urbanos Colectivos (2012) ha elaborado una propuesta sobre
criterios y fuentes de financiación para los proyectos de transporte latinoamericanos. En ella
establecen que un sistema de transporte no puede ser cubierto sólo por la tarifa: "se
necesita un modelo de financiación institucionalizado que considere recursos adicionales,
sean estos públicos o privados" (ATUC, 2012: 17). Sin embargo, Gutiérrez señala que: "en
América Latina el transporte público urbano no cuenta con la debida prioridad en la
asignación de la inversión pública. No es un derecho social reconocido constitucionalmente,
como lo son, en la mayoría de los países, la alimentación, la educación y la salud"
(Gutiérrez, 2013: 6).
Gasto en infraestructura de sistemas de transporte
10
Esto evidencia que uno de los principales problemas urbanos actuales es el del déficit en la
infraestructura en transporte y su escasa financiación, ya que su eficacia es esencial para la
competitividad económica de la ciudad (Houghton et al., 2009). Esta dificultad para obtener
financiación es un importante obstáculo para la evolución de los sistemas de transporte, ya
que se compite p con otros proyectos de transporte e infraestructura más tradicionales.
Además, se requiere alcanzar un respaldo público para los proyectos, lo que resulta difícil
cuando se les pide a los ciudadanos que contribuyan con los costes reflejados en el
aumento de las tarifas (Houghton et al., 2009). Sobre esto, el análisis de estudios
comparativos indican que un buen indicador de cuánta prioridad se le está dando al
transporte público en una ciudad, son los niveles de inversión en relación al PIB de cada
país (Kenworthy y Laube, 2002).
La importancia de la infraestructura es crucial para el desarrollo de la ciudad. A lo largo del
trabajo se diferenciarán las medidas hacia los buses y el metro como medios de transporte,
poniendo especial énfasis en el caso chileno.
Stakeholders en políticas de transporte urbano
Stakeholders es un término definido por R.E Freeman (1984), para referirse a todos
aquellos que sean afectados o pueden ser afectados por las actividades de una empresa
(Moutchnik y Freeman, 2013), sin embargo, a continuación se utilizará para referirse a todos
aquellos afectados por una política pública, en este caso, de transporte urbano. Dichos
actores pueden ser identificados como sindicatos, gremios, dirigentes, clientes, empresas y
empleados, miembros del poder estatal, etc.
Una política exitosa debe tener en cuenta la participación de la comunidad y el sector
privado (Lahera, 2004). No es viable dirigir una política pública solamente con los
parámetros del Estado, ya que con el avance de los tiempos y la emergencia de demandas
sociales, es necesaria la participación de la comunidad en su conjunto.
11
influyen en la discusión deben estar considerados por todos los actores que participan en
política, ya sean los policy makers, los beneficiarios o afectados (Subirats, 1989).
En cuanto a su implementación, ambos autores, Lahera (2004) y Subirats (1989), señalan
que es importante tener una clarificación de la realidad en los asuntos que una política
pretende tratar. Así se crea un conjunto de normas que tienen como propósito el
cumplimiento de grandes metas mediante un proyecto.
La importancia de la inclusión de stakeholders en el diseño de una política pública también
está explícito en un informe de políticas públicas del Banco Interamericano de Desarrollo
(2006). “Algunos actores son formales, como los partidos políticos, los presidentes, el
gabinete, la legislatura, los tribunales y la burocracia, y sus funciones en la formulación de
políticas están asignadas formalmente por la Constitución. Otros actores son informales,
como los movimientos sociales, las empresas y los medios de comunicación. No tienen
ninguna función formal, pero en muchas ocasiones han resultado ser agentes poderosos”
(BID, 2006: 25). Cada uno de estos actores, según el BID, manifiesta su preocupación e
intereses de manera diferente. Subraya, por ejemplo, que para aminorar el impacto que
puede tener el desacuerdo empresarial con ciertas políticas públicas, se debe tener como
desafío, desde el punto de vista de la política, no eliminar la influencia de las empresas, sino
dirigirla de manera tal que contribuya a obtener buenos resultados (BID, 2006).
Por otro lado, dice que la influencia de los sindicatos en el proceso de formulación de
políticas es su capacidad de hacer alianzas políticas y su poder de negociación
principalmente en el sector público (BID, 2006). Los movimientos sociales, también, debido
a su uso intensivo de las redes sociales, han conseguido mantener bajo presión diversas
políticas públicas. Además, muchos de ellos se caracterizan por plantear temáticas amplias,
generales, y que no tienen una demanda específica puntual, por lo que se vuelven muy
atractivos (BID, 2006).
Los problemas de medición de calidad y financiamiento son inseparables a la planificación
de políticas públicas en transporte público, al igual que la consideración de los distintos
actores y sus intereses involucrados en la política pública. La investigación a continuación
tiene como propósito poner a prueba dichas teorías a través de un análisis completo de la
financiación del caso chileno, el Transantiago desde 2006 hasta la actualidad.
Marco Conceptual y Operacionalización
12
Atributo/
Unidad de Fuente/
Concepto Dimensión Subdimensión Indicador Medida Pregunta Instrumento
Subsidio a
empresas Informes
operadoras de Monto anual Cifra en financieros del
Buses de desde 2006 hasta millones de Ministerio y
superficie la actualidad dólares Presupuesto
Informes
Subsidio a Monto anual Cifra en financieros del
Empresa Metro de desde 2006 hasta millones de Ministerio y
Subsidio Santiago la actualidad dólares Presupuesto
Recursos
destinados a Proyectos de
infraestructura Monto anual Cifra en Ley y
para Buses de desde 2006 hasta millones de Presupuesto del
superficie la actualidad dólares Gobierno
Recursos
destinados a
infraestructura Monto anual Cifra en Proyecto de Ley
Financiamiento para Metro de desde 2006 hasta millones de y Presupuesto
al Transantiago Infraestructura Santiago la actualidad dólares del Gobierno
Percepción ¿Usted aprueba
ciudadana hacia Aprobación la gestión del Encuesta CEP y
el Gobierno gubernamental 1. Sí, 2. No Gobierno actual? UDP
Percepción ¿Usted aprueba
ciudadana hacia Aprobación la gestión del Encuesta CEP y
la Presidenta presidencial 1. Sí, 2. No Presidente? UDP
¿Qué nivel de
Nivel de satisfacción
satisfacción con posee sobre los
servicios de buses del Encuesta CEP y
buses Escala Transantiago? UDP
¿Qué nivel de
Percepción Nivel de satisfacción
Percepción ciudadana hacia satisfacción con posee sobre el Encuesta CEP y
ciudadana el Transantiago Metro Escala Metro? UDP
Opinión sobre el Entrevista
Presión de financiamiento al semiestructurad
Sindicatos sistema a
13
Opinión sobre el Entrevista
Presión de financiamiento al semiestructurad
Directorios sistema a
Iniciativas
legislativas del Proyectos de Ley
Poder iniciados por el Proyectos de
Ejecutivo Poder Ejecutivo Ley
Discusiones
Discusiones legislativas de los
en proyectos proyectos de ley Proyectos de
de ley pertinentes Ley
Opinión de
Factores Partidos actores Proyectos de
Políticos Políticos institucionales Ley
Balance Informes
económico de los Ingresos y gastos Cifra en financieros del
Buses de anuales del millones de Ministerio de
superficie sistema dólares Transportes
Informes
Balance Ingresos y gastos Cifra en financieros del
Rendimiento económico del anuales del millones de Ministerio de
económico Metro de Santiago sistema dólares Transportes
Informes
financieros del
Ministerio de
Porcentaje Transportes y
mensual de ONG Alto
evasión Porcentaje Evasión
Informes
financieros del
Ministerio de
Cifra en Transportes y
Evasión en Buses Déficit por millones de ONG Alto
de superficie evasión dólares Evasión
Informes
financieros del
Ministerio de
Porcentaje Transportes y
mensual de ONG Alto
evasión Porcentaje Evasión
Cifra en Informes
Factores Evasión en Metro Déficit por millones de financieros del
Económicos Evasión de Santiago evasión dólares Ministerio de
Transportes y
14
ONG Alto
Evasión
Tiempos de
espera
Eficiencia en
Buses de
superficie Tiempos de viaje
Tiempos de
espera
Eficiencia del Eficiencia en
servicio Metro de Santiago Tiempos de viaje
Metodología
La siguiente investigación es del tipo explicativa, ya que busca determinar las causas que
producen determinados efectos. En este caso se quieren conocer los determinantes que
explicaría el financiamiento al Transantiago, obteniendo una diferencia de criterios entre los
recursos destinados al Metro y a los buses de superficie. La investigación, por ende,
sugiere una relación causal entre factores políticos, sociales y económicos y la asignación
de recursos al sistema de transporte.
A la vez, el método de investigación consistirá de procedimientos no experimentales:
observación. Se utilizarán para la búsqueda de relaciones relativas de causaefecto entre
las variables que se sugieren y el financiamiento al Transantiago.
Se usarán datos y análisis cuantitativos para la observación de indicadores de calidad del
Transantiago, su relación con indicadores de aprobación gubernamental y de evaluación de
usuarios al Transantiago. Mientras que se recolectarán datos cualitativos para el análisis de
decisión política y los actores involucrados en dicho proceso, estos serán primordialmente a
través de entrevistas. Ambos instrumentos de recolección de datos se especificarán a
continuación:
Cuantitativos
Los indicadores de funcionamiento y calidad de la política pública del Transantiago se
extraerán de los informes financieros y técnicos de la Dirección Metropolitana de
Transportes. Mientras que los indicadores de percepción ciudadana pertenecientes a los
factores sociales, serán extraídos de Encuestas de opinión CEP y UDP que cuentan con
información pertinente para los fines de la investigación.
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Cualitativos
Entrevistas y criterios de selección:
Gremios: Se entrevistará al vocero representante de la Asociación de Concesionarios de
Transporte Urbano de Superficie (ACTUS), que agrupa a las diferentes empresas que
prestan servicios al Transantiago. Mínimo dos voceros o ex voceros de dicha Asociación. El
criterio de selección de los voceros será por orden de relevancia según el investigador y
disponibilidad del entrevistado.
Directorio: Se entrevistará a uno de los directores actuales de la empresa Metro de
Santiago, que exponga las principales preocupaciones de la empresa y su opinión sobre las
políticas de financiamiento. El criterio de selección del director será por orden de relevancia
según el investigador y disponibilidad del entrevistado.
Expertos en Transporte: Se entrevistará a distintos expertos en transporte que
representen los diferentes puntos de vista acerca del debate sobre el financiamiento al
Transantiago y las diferencias entre recursos a los buses de superficie y al Metro. Mínimo 3
expertos provenientes de distintas casas de estudio. El criterio de selección será
determinado según los requerimientos del investigador y la disponibilidad del entrevista
Aspectos éticos y limitaciones
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El desarrollo del trabajo será realizado de manera objetiva, manteniendo al margen la
opinión del investigador. Sin perjuicio de lo anterior, el investigador hará saber su opinión en
las conclusiones del trabajo bajo el sustento de toda la investigación empírica anterior.
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Anexos
Gráfico 1, Tipos de financiamiento del Estado al Transantiago.
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Gráfico elaboración propia.
Gráfico de actores relevantes del proceso inicial del Transantiago.
Gráfico elaboración propia.
Cuadro 1: Proyectos de ley aprobados para el Transantiago
Decreto
28/05/2004 Ricardo Lagos Aprueba suscripción de convenio de donación 303
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Autoriza contratación de crédito externo con el BIRF por Decreto
27/07/2005 Ricardo Lagos US$4.800.000 620
Modifica la ley Nº 20.378 que crea un subsidio nacional al
transporte público remunerado de pasajeros,
26/09/2013 Sebastián Piñera incrementando los recursos del subsidio y creando el FAR Ley 20.696
Fuente: CEN (2002); en Gutiérrez, (2013).
20
Fuente: CAF (2012); en Gutiérrez, (2013).
Fuente: CAF (2010); en Gutiérrez, (2013).
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