La incorporación de la gestión del riesgo dentro del modelo de dirección estratégica de la

empresa

Samuel Antonio Vargas Vargas.

Toda actividad empresarial que la empresa realiza enfrenta continuamente a riesgos, este
hecho se produce porque las organizaciones llevan a cabo sus acciones en un entorno cada vez más
cambiante, dinámico y de incertidumbre, producto de factores como la globalización y el auge de
la tecnología, en especial, la de las comunicaciones; lo que genera inseguridad sobre lo que
acontecerá en el futuro. En esta perspectiva, es el riesgo algo congénito a la actividad propia de la
empresa, por lo que, la gerencia deberá integrarlo al proceso de toma de decisiones, a través de su
conocimiento, gestión y control del mismo. Es decir, los sistemas modernos de dirección y gestión
empresarial les corresponde desarrollar la administración de riesgos, como una parte integral del
proceso gerencial.

Actualmente, el entorno y la dinámica de los negocios en la que se opera es mutante; lo que

puede traer consigo efectos positivos y negativos. Por lo que, se hace necesario estructurar una
gestión del riesgo, que les permita emplear eficientes modelos de eficacia y eficiencia. En términos
de Fernández (1998) la empresa ha de asumir que su forma de competir ha de cambiar y cuanto
más cambiante sea el entorno mejor ha de ser la condición de la empresa para afrontar y asumir los
retos de cambio. En este escenario, es evidente, que las empresas se enfrentan a diferentes riesgos,
tanto externos como internos; entre ellos los de carácter financiero y económico.

Estos postulados han suscitado el interés propio por indagar y conocer los riesgos a que está
expuesta empresa y de cómo gestionarlos.

Principales riesgos que afectan la actividad empresarial.

En los procesos de la organización pueden ocurrir efectos y eventos no deseados (riesgos)

que constituyen obstáculos para el logro de los objetivos que pretende alcanzar la organización. Un
riesgo es una contingencia o evento de condición incierta que, si se produce, tiene un efecto positivo
o perjudicial sobre el cumplimiento de alguno de los objetivos de la empresa. Dentro de este marco,
es vital la incorporación de la gestión del riesgo dentro del modelo de la dirección estratégica para
proyectar las estrategias conducentes a la identificación, y control de los mismos.
 Tal como se ha mencionado, son variados los riesgos, sin embargo, a nuestro modo de ver,
dos son los principales a los cuales se ve enfrentada la organización. Estos son de carácter
económico y financiero.

➢ Los riesgos económicos tienen que ver con actividades propias del negocio, como son
producción, compra de materias primas, ventas etc. Valga decir, que este riesgo puede
provocar que no se logre los niveles de resultados, producto de la explotación del objeto
empresarial y viene dado por distintos factores provenientes del mercado. (Seco, 2007)
➢ Los riesgos financieros hacen alusión al costo financiero, flujos de fondos, tesorería,
financiación. Los riesgos financieros de manera general pueden definirse como aquellos
que pueden incurrir en una pérdida patrimonial como resultado de una transacción
financiera (Seco, 2007) Igualmente, De la cruz (2006) menciona que el riesgo debe ser
considerado como un conjunto de consecuencias posibles que provocan el deterioro del
valor de las acciones en el mercado. En suma, se puede entender como el riesgo de no
estar en condiciones de cubrir los costos financieros de una empresa (Jorión, 2001)

La gestión del riesgo.

Toda decisión en un ambiente de incertidumbre sobre una acción que va a suceder y sobre
las consecuencias que existirán si esta acción ocurre, se denomina gestión del riesgo. Por ello, toda
organización debe contar con herramientas que permitan identificar, medir, monitorear y controlar
los riesgos a los que están expuestas con el propósito de proteger los recursos de los clientes y de
los accionistas, en beneficio de la organización y de la sociedad. (Bernal, y Roncancio, 2009). En
este orden, la integración de las actividades de gestión de riesgos es importante para tomar mejores
decisiones en el control de la empresa, la reformulación de objetivos y metas, el rediseño de
procesos, y las mejores acciones para enfrentar los riesgos de forma integrada en la organización
(Ornes, 2009)

Hoy en día, existen herramientas administrativas ya probadas que sirven de apoyo para la
gestión y administración de los riesgos, como la norma Colombiana NTC 5254: 2006, que provee
una guía genérica para el establecimiento e implementación del proceso de administración de
riesgos involucrando el establecimiento del contexto y la identificación, análisis, evaluación,
tratamiento, comunicación y el monitoreo en curso de los riesgos. Dicha norma, define la gestión
de riesgo como el proceso que ayuda a tomar decisiones a la hora de elegir el nivel de riesgo a que
está dispuesta a afrontar una compañía, identificando las variables potenciales las lleven a
maximizar oportunidades y minimizar pérdidas. Igualmente, el ciclo PHVA (planear, hacer,
verificar y actuar), donde el ciclo va desde la planeación de la gestión hasta la retroalimentación
de las tareas ejecutadas. (Atehortúa, Bustamante y Valencia, 2008). Así como también, la norma
ISO 31000 que contiene los lineamientos para establecer un sistema de riesgo eficaz.

De forma breve, se ha expuesto como la empresa se ve enfrentada a numerosos retos que

conviene gestionarse convenientemente, de manera que la actividad empresarial se vea afectada de
la menor manera posible por algún evento. En esta medida, el proceso de dirección estratégica,
responde a las iniciativas de consolidar una visión centrada en el crecimiento, la innovación y el
desarrollo empresarial; enfocada en mejorar todos los procesos de la empresa en cuanto a la
generación de valor y relaciones con los clientes, lo cual, es de trascendental para el cumplimiento
de su misión. Lo cual se cumplirá en mayor proporción, si se incorpora la gestión del riesgo como
elemento fundamental del direccionamiento estratégico; que, sin duda, aportará el análisis
integrado de los principales riesgos enfatizando en sus relaciones y observando su impacto en la
cadena de valor de la empresa.

Referencias
Atehortua, F. B. (2008). Sistema de gestión integral. Medellin.

Bernal, J. R. (2009). Guía práctica de la gestión del riesgo financiero. Bogota: Universidad de la Sabana.

Dela Cruz, E. (2006). Teoría del riesgo. Ecoe: México.

Fernandes, A. (1998). Las decisiones financieras de la empresa. Barcelona: Ariel.

Instituto Colombiano de Normas Técnicas ICONTEC. (2006). Norma técnica 5254. Bogotá: ICONTEC.

Jorión, P. (2001). Valor en riesgo. México: Mac Graw Hill.

Ornes, S. (2009). Gestión Integral de Riesgo: rol del municipio venezolano desde lo normativo.
Multiciencias, 2009, 11, (2), 159-165.

Seco, M. (2007). Riesgos económicos y financieros en la empresa. Madrid: EOI.