Está en la página 1de 80
ma am AaMA peer es a . Ta eg 4. TESOROS DEL ARTE MUNDIAL © Egipto Religion al mismo tiempo que norma de vida, cultura y civilizacion, el Islam abarca con une vision unificadora todas las esferas de la actividad humana. La busqueda del saber, que el Qur‘an o Corén prescribe expresamente al hombre, es una de las, fuerzas dinamicas de ese vasto propésito y la sociedad islimica atribuy6 desde sus origenes una importancta capital a la educacién. La ensefianza solia dispensarse més frecuentemente en las madrasas 0 escuelas anexas a las mezquitas. En la foto, la Mezquita de al-Azhar, de El Cairo, inaugurada por los fatimitas el dia 7 del mes de Ramadan del afio 361 de la Hagira (el 22 de junio de 972 de la Era Cristiana), que cor el niicleo en torno al cual se cred la universidad que leva su nombre. La Uni: versidad de al-Azhar, una de las mas prestigiosas del mundo islamico, contribuy6 durante algunos siglos a la propagacién del Islam y actualmente concede cada afio ss de diplomas en disciplinas tan diversas como teolagia, lengua arabe, mot ina, ciencias y arquitectura. ACOFTEO fines Una ventana abierta al mundo AGOSTO-SEPTIEMBRE 1981 ANDO XXXIV PUBLICADO EN 25 IDIOMAS spall Itiano = Twreo—_Esioveno Inglés Hn Udy Maceonio Francés Tamul Catalin Servocroata Fuso Heceo-—Malayo China Nemén —Persa ——Coreano Rabe Portugués Swahili (Organizacion de Educacion, la Gien ‘Tapas para 11 numeros : 32 francos. Les ariel fototaias ue nollavt signe © levis) buesen reproducrse Samora quo se. higs corstr "De EU'GonREO De LA UNESCO". a numers del me Man SiGe tomasoe ye! ronbre dl ate. Gnbwan orworse 3 EL{CORREO wee eempuee deo ev o pegs auctor bublque Ls treet erodes nan fcitads ors Feaacin a goers sce por ex. Los ereuos fae (os nonparon forsee mente opi ela Une ela ‘eaaeukn cea felts. En carbo, los tubs os le do {tes son cea neumbercnetlanie de ea iin, Redaccién y distribuetén ‘Unesco, clsce ce Fontency, 75700 Paris ote de redaccitn : ‘Jean Gouin Secretaria de redaccién Gian Wniteor Redactores principales Espanol: Frmcisco Ferninder Santos (Pasi) jonard Brabyn (Pais), + Werner Met (Berna) \bdel onc El Sau El Caro) ‘Japonds: Kazuo Aka (Tekioh italiano : Marie Guicers (Romab Hina: Krahea Gopal (Delhi TTamul !M. Uohemmed Mustata(Mackas} Hebreo : Alexander Breit (TeLAviu) Perea: Samac Nurinead (Teherda) Portugués : Benediero Sia (Plo de Janeiro) Neetlandts : Paul Morven (Amber) ‘Trea Mota igzer (Estar Ure: Hakim Manammed Sai (Karachi) (Catalin Joan Carreras {Mart (Barcelona) ‘Maiayo : Bahedor Shah (Kuala Lumpur) CGoreane : Lee Kwarg-Young (Set, Swahil : Domine Rusayebesbwa (ar es Sai CCrost-servio,esloveno, mececonio Y serviowrosta: Punisa'A. Pavivich (Betgrado! Shing: Shen Guofen (Pekin). Baile: Frederick H. Potter (Pris) Redactores adjunto Espafol: Jorge Envigue Adoum Frances : Ingles Roy Matin Dacumentacién : Chretiane Boucher lustracion Ariane Baie Composicién grifica : Phtippe Gent La corespondenca debe diigise ‘al rector dela ews, paginas 5 Enel umbral del siglo XV de la Hégira EL MENSAJE DEL ISLAM por Amadou-Mabiar M'Bow 7 VIDA DE MAHOMA por Muhammad Hazmidullah @ ELCORAN 9 LASUNNA 12 EL MUNDO DEL ISLAM Textos e imagenes 14 UNA MISION UNIVERSAL por Habib Chatty 23 IBN BATUTA La vuelta al mundo en teinta afios 28 LOS MUSULMANES EN LA UNION SOVIETICA or Ziyauddin Babojan 30 EL REFORMISMO ISLAMICO EN INDONESIA or Siti Barorah Baried 32 INFLUENCIA EN EL AFRICA NEGRA por Sulayman 8. Nyeng 4 UNA ETICA DEL SABER Y DE LA EDUCACION or Mohammed Alla! Sinaceur 43° LAHEGIRA por Hakim Motammed Said 44 LA EDAD DE ORO DE LA CIENCIA ISLAMICA or Abdul Razak Keddure 50 UMMAT AL-ILM Hecia un renacimiento ciont por Abdus Salam fen el mundo islamico 56 DINAMICA DEL PENSAMIENTO MUSULMAN or Abdel Mayid Mezian 63 VOCES MISTICAS DEL ISLAM por Rahmatultsh 67 _MISTIGA Y POESIA 68 UNA NUEVA ARQUITECTURA ENRAIZADA EN LA TRADICION ‘por Dogan Kuban 78 LIBROS Nuestra portada El Islam, cuyo contro religioso es La Meca "foto de la portads: el santuarlo d ba}, iniela ahora el décimoguinto siglo ‘su existencia, a cantar desde la Hégira. Este ‘numero doble de £! Correo do la Unesco can memora el ‘acontectmiento poriendo de rellove algunos rasgo ‘dol pensa- fmiento y de [a fue se ba nikdad de ceuttural da fe safe y de la “En ef nombre do Dias, ef Clemente, ef Misericordioso”” Esta Invoeaci6n, en srabe Bismillah al Rahman al Rahim, figura al comienzo de cada azora (surah. 0 capttulo) det Cordn, con excepeion de la novena, Los musuimanes Ia pronunelan antes de todo acto importante. Todos los ‘reyentes, cualquiera que sea su fengua materna, deben focitar en sus plogetios unos cuantos versiculos 6 sleyas Corin en la lengua arsbiga original; el Basmallah sale pues de los labios de millones de hombres y mujeres de odo ol Islam. Ls palabra arabe fsann significa "surmis¥or {2 Dios), y mustim (musulmén o mustime) es "el que toaliza el acto de sumision". En gu acepeibn mas amptia| Islam se reflere hoy a un vasto conjunto cultural que abarea a millones de personas alas que unen una fe Comin y ol sentimiento de pertenecer a una misma comunidad. El Basmalian que se reproduce arriba es una Caligraia de Yall Rasulf, dl siglo XIV" * En ste nero de Ef Corre dla Unesco se dan is fechas al mismo Gempo Segin el ealendaro[lamico y segtin fregoriano. La fecha isle es la primera, (Véase el recuado on el ealondaraietmio, pg. 4 En el umbral del siglo XV de la Hégira El] mensaje del Islam por Amadou-Mahtar M’Bow Director General de la Unesco |AN transcurido catorce siglos desde fl dia en que el profeta Mahoma (Muhammad), que desde hacia diez afios veria convocando 2 los habitantes de La Meca a seguir ef camino de Dios, ee vela obligado bruscamente a exilarse. Al, en su ciudad natal, dejaba aun grupo de fieles, pero también a onemigos tenaces ‘ue, tras haber intentado primero seducirle ‘después amedrentarle, planeeban su asesi Nato. Tuvo pues que ordenar el Profeta e| ‘xodo de la pequeria comunidad de creyen- tes. Y un da, ecompafiado de su fiel Abu Bakr, sal secretamente de Ia ciudad. Tras tuna iarga y peligrosa travesia del desierto, llegaba Mahoma a Yatrib, a donde ya habian artibado sus compafieros y cuyos habitantes le recibieron con tos brazos ablertos. De aquella modests aglomeracion i hhacor ef Profeta fa Ciudad por excelencia, Medina, que pronto se convertiia en la s2- ggunda Ciudad santa del Islam. Le antigua Yotrb seria, gracias a Mahoma, e! punto de Partida de una nueva civilzacién, Asi, la Hégira —esa epopeya del &xodo— contiene en potoncia algunas de las razones por las cuales el monsaje transmitide por Mahoma iba a identiticarse, tras su muerte, Con las esperanzas de tantos pueblos, cont tendo a su vida una nueva dimension espi tual, ica, poltica y social, La primera de esas signficaciones de la Higia es la univorsalidad. Es drigiéndose a todos los hombres sin exch Profeta y sus compaferos iban a construir luna sociedad nueva, como los primeros cal fas levarian el slam mas alld de las fronteras. de la Peninsula Arébiga, y como sus suceso- res propagarian su luz por un inmenso tert- totio en que Europs, Asia y Africa se unian, En efecto, el mensaje transmitido por el Profeta aportaba a los pueblos que lo recibian un ensanchamiento radical de todos los horizontes del espirty, jiuminando su existencis con una fe que trascendia las con- tingencias de la vida, poniendo ala ética co- ‘mo fundemento de la poltca y garantizando 2 cada individuo fa plenitud de sus derechos. en ol sono de la comunidad. La Mibertad de la comunidad musuimana se constituye, efectivamente, con al tejido de todas las libertades individuales, as ‘cuales séloflorecen en fa medida en que flo- rece ls comunidad entera. Cuando ésta se halla amenezada 0 sutre menoscabo, cada uno de los que la forman resuita amenazado ‘© menoscabado. Y, al revés, cuando se im- pide a sus miembrcs vivir plenamente su vi dda partcinando libremnte en lade la corms- nidad, la vida no puede sino empobrecerse y ta comunided deja de ser tal. Asi, los derechos de cada ser hummano se besan en la igualdad absoluta de todos ante Dios. “Sos todos iguales como los dientes dol peine", ha dicho el Profeta, Y esta igual- {dad fundamental, no alterada ni por los pri- vilagios dol nacimionto ni por las vciitudes do la fortuna, entrala una responsabilidad juridiea y moral igual para todos. De este modo, cada individuo responde ante Dios y ante los hombres de su propia conducta y, el mismo tiempo, de fa gestion de los asuntos de la comunidad. El [slam venia as ainsuflar a orbes histori- cos hasta entonces separados, a regiones ‘geogrSficas diversas, a zonas lingGisticas y ‘ulturales diferentes el eliento unificador de tuna esperanza comén que otiginaba entre ‘alles un miltiple acercamiento, un continuo movimiento de canje mutuamente fecun- dante y enriquecedcr. {Al mismo tiempo, el Isiam se abria a los saberes de los muy diversos orbes cultures ‘con fos que entrabs en contacto a medida ‘que se expandia, Puesto que el Profeta habia recomendado a los creyentes que bus- ccrena ciencia “desde Ia cuna hasta la tum- ba” yque, para alo, fuoran “hasta China, si fra preciso", ol Islam dosplogaba, con una mira dnica, su capacidad para hacer suyo el capital intelectual de los pueblos “que compartian una misma fe, al mismo tiempo {que los principales logros del saber en elres- 10 del mundo. ‘As{ es como las ensofianzas del Islam han conservado una actuslidad que se renueva onstantemente y como la epopeya ce la ira, durante [a cual se plasmaron esas fensefianzas, ha continuado inspirando las ‘mentes y los corazones, Hoy los musulma- ‘nes evocan los miltiples episodios de esa pope} como si sus protagonistas fueran seres recientemente desaparecidos cuyo re- ‘cuerdo les es infnitamente caro, cuyos ges- tos y palabras les llegan aun alo mas profun- do dl alma y cuyo ejemplo contina insp- rando sus pensarientos Y sus actos. Evocan con emocién la entrada de tos ‘compafiros dol Profeta on Medina y la fra ternal acogida que les dispensaron sus so- cusees, recibiéndoles en sus casas y com- partisndo con ellos hogar y bienes. Y suefian con ese mismo impulso de soidar- {dad entre los puoblos actuales gracias al cual ‘cada uno sentra las necesidades de los de- ‘més como las suyas propias y ios que viven fen la abundancia tenderian la mano de la amisted a aquellos que suften de le guerra, dela misera, de la ignorancia 0 de la enter- medad. Los musulmanes recuerdan todavia al Profeta exponiendo a sus compafieros el plan de una batalla inminente. Como uno de ellos le prequntara si ese plan era parte de la Revelacion o si emanaba de su propio enten- dimiento, ol Profeta respondié que era el fru- 10 de su reflexidn personal. El otro expuso fentonces sus ideas sobre al plan y acabo por cconvencer al Profeta pare que lo cambiara, Ojald pudiramos gozer hoy de ese clima de calurosa fraternided que permitiia al mas hhumilde de tos hombres expresarse sin te- ‘mor ante el més respetado, en un cima de tolerancia mutua que es fa condicion misma de la democracia para todos. Los musuimanes recuerdan también al ca- lita Umar, jefe espiritual y temporal deun Es- {ado islémico inmenso que, vencido por la {atiga, se echaba a la sombre de una palme- ra, Uno de sus stbaitos, al vere, se paraba ante 61 le diigla estas palabras llenas de hhondo afecto: "Hes cumplido con tus tareas ppabjicas, Umar, has servido @ la Justicia, y con ol corazén leno nuevamente de paz te has dormido”. Ojald hoy reinara oste mismo ‘sontido de la igualdad en vitud del cual et gobenante seria un hombre entre los hombres, dedicado a conseguir el bien de ‘sus semejantes de tal modo que cada uno se ‘sentria a su vez un paco responsable de él. Estos valores de libertad, de responsabil- dad y de Solidaridad, iuminados y sublima ddos por la fe, son tan indispensables para et hombre contemporéneo como lo eran para los contemporéneos det Profets. Hoy como ayer y como mafiana, le brindan un ideal de vida on quo sus mas humildes acciones cot ianas con penetradas por ot soplo de sus més altes aspiraciones espirituales. = 5 por Muhammad Hamidullah Vida de El Profeta en persona texto que pubicamos a continuacién,to- mado de la Historia Universal” do. Taber (muerte en Bagdad en e! ao 923), taza el Fevatofisico mas conocido de Manor, se {gin lo deserbiers A. primo y yerno del Pro- feta. Como es sabido, 1a tadieén ilimica ciiginal pronios, come una rece én conta ls Idolatia que prodominaba en Arabia antes dol adverimlente del iam, que c roprodujra la imagen de los seres animadios y, en particut lar, la fgure humana, Aunque aged crt fe iblided o parr de la Spoca do los Abasioas “io que permitio el ferecimiento de la natura, especialmente en Irsn yen Turquid— "esta regla. sigue respetindose ‘seruulosamente enol mundo ildmice on ‘que conciine al Profeta y a algunos de los ersonajes mas venerados do Islam. Le pidieron a All detates sobre le apa- Hencia exterior del Profeta. All dijo: era e estatura mediane, ni muy grande ni muy pequefio. Eran su tez de un blanco rosbceo, sus 0s negros, sus cabellos ‘espesos, brilamtes y hermosos. Su bar +52, que le cea ef rostro, era muy poblo: dda, Los cabelloslargos, que le Negaban 2 os hombres, eran negros (..) Su mane- ra de caminar era tan enérgica quo se ‘habia dicho que a cada paso se arance- ‘ba a la piedra y, sin embargo, al mismo tiempo tan ligera que 9 cada tonco areca que no tocaba fa tierra. Pero no caminaba con errogancie, como fos rincioes. Habla on su rostro tanta dul {Zura que, una ver en su presencia, era imposibie separarse de &i: si se tenia ‘hambre, une s¢ saciaba miréndole, sin volver a pensar en la comida. Los afig- dos olvidaben su pesar cuando esteban Irente a 6), hechizedes por la dulzura de ‘su rostro y de su palsbra. Quienquiara (que le hubiera visto reconocta no haber encontrado jamds, ni antes ni después de #1, un hombre que tuviese un hablo tan encantadora. Su narie era recta, sus dientes separados, Ora dejaba Que sus cabeltos cayeran naturalmente, ora los evaba cefitdos en dos 0 tres rizos. A los Ssesenta y tres afos, Jo edad no hablo hhecho encanecer ayn en todo su cuerpo imis de unos quince cabelos... INA noche del mes de Remadin del ‘af 609, mientras 62 hallaba en una fgruta dol Hira, corca de La Meca, ‘Muhammad thn Abdaliah Ibn Abd al. “Mutalib Ibn Hashim, 0! futuro profeta Maho- ‘ma, tuvo una visién, Una voz le dijo: “Yo S07 Gabriel, el nigel enviacio por Dios para ‘comwnicarte que has sido elegido por El para ‘quo anuncies a la humanidad Su mensaje re- velado”. Y la primera revelacion que Maho- ‘ma rocibig fue la siguiente: "iPredica en ol nombre de tu Sefor, ol ‘que te ha creadol Ha oreado al hombre’ de tun coagulo. ;Predical Tu Sefor es el Dadi- ‘y0so que ha ensefiado a escribir con el cala- ‘mo: ha ensefiado al hombre lo que no sabi Estas palabras forman los cinco primeros versiculos o aleyas del capitulo (sura 0 a20- fa) "El coagulo” del Coran, 0 Libro sagrado ol Islam que contiene las ravelaciones que ‘Mahoma tuvo a lo largo de los veinttrés ‘afios que precedieron a su muerte en 632 La Meca, cura del isiamismo, era a co smienzos del siglo Vil un préspero centro eo- ‘mercial con una poblacién de unos 10.000 habitantes. Estaba situada en el cruce de las principales rutas del comercio que atravesa: ban la Peninsula arabiga, la cual, a su vez, 2 situaba on os confines de los dos imperios mas podorosos de entonces: al nareste, a Impetio porsa do los sasénidasy, sl norte al este, el Imperio bizantino (Siria y Egipto). Por ta Meca pasaban las caravanas. qua ttansportaban las mercanelas mas precioaas de la época: Ia sede de China, las especias e las Indias, los perfumes del Yemen que iban a Bizancio y a Europa. La Meca era una ciudad-Estado bien organizada, con un con sejo de diez oligarcas (hereditaies) y con rministerios de justicia, defensa, culto, rela- ciones exteriores, consultas con fos ciusa- \danos, etc. Cada uno de esos ministerios era ‘ocupado por uno de les clanes principales e la tibu de los qurayxies, a la que pertenecfa Mahoma. ‘Los habitantes de La Meca eran renom bbrados por su generosidad y su honradea: al _mentaban a los pobes en las épocas de esca- sez y hambre y habian fundado inckiso una "orden de caballeta” para protegor los intere- 8e3 de los extranjeros victimas de alguna in- Justicia por parte de los ciudadanos. Creian ‘en un Dios Gnico pero, a igual que la mayaria de las poblaciones sodentarias © némadas, dela peninsula, tenian idolos a los MUHAMMAD HAMIDULLAL, isiamslogo de Hoaiderabad ind, trabaja actialmente en ef Centro Nacional de vestgactones Cienticas de Pars. Qurante 25 03 fue profesor deta Univers lad de Estambuly ho enseriace tambidn en as de ‘Ankara y Erorum (Torgula)y Rua Lumpur (Me asia. Entra sus otras flouran Lo Prophéte do lar (Pals, 1959 y 1950) y Musi Condoet of State (Lahore, 19771. Ha taducigo a! Cordn a raneés (Borat, 1980), Mahoma ‘que adoraban con la esperanza de que inter- Cedieran en su favor ante la divinidad. No crelan en la resurrecci6n ni en el Mas Alls ‘La Meca era ctlebre por un tempo cono- cdo como la Kaaba que se habla convertido fen lugar de peregrinacion. Supuestemente construida por Adin y restaurada por ‘Abraham, la Kaaba era un edificio cObico ccuyas parades exteriores adornaban unos 360 Idolos, La Virgen Maria y el Niko Jost figuraban entre los personajes representa: dos on los frescos del interior. En un éngulo {de la Kaaba habia una Piedra Negra que era objeto de venoracién: ella indicaba el sitio onde comenzaba la procesién ritual que {aba la vuelta al templo y donde los peregr- ros jurabsn fidelidad a Dios. La peregrina- cion anual a la Kaaba atria a multitudes de fleles de toda la Peninsula ardbiga, Mahoma era analfabeto como la inmensa mayorfa de los habitantes de La Meca, of- lebres, en cambio, por su elocuencis y su ‘amor als poesia; én efecto, postas de toda la peninsula acudian a La Moca a exhibit su talento y ganarse la aprobacién de sus habi ‘antes. ‘Tal era a situacién general cuando e! Pro- feta comenz6 a previcar el mensaje del Islam. Cuando tuvo su primers revelacion en la gruta de! monte Hira, Mahoma tenfa unos cuarenta aos. Nacido en La Meca, de una familia de comerciantes arabes, log 2 sor jefe de caravana, como su padre y su ‘buelo, Su esposa Jadla era la viuda de un comerciante @ la que scompario en sus viajes a Sivia, Yemen, Arobia oriental y po- siblemente incluso a la distante Abisinia que ‘habia establecido importantes relaciones co- merciales con La Meco preislémica. Desde su juventud Mahoma habla dado muestras 2 excencionales aptitudes que le diferen: aban de sus compafieros. Gozaba, en par ticular, de reputacion por su probidad en los negocios, lo. que le valié el nombra da Al ‘Amin, 0 Sea 'digno de confisnza’. Sogin {os historiadores, Mehoma habla ‘comprado a un joven esclavo capturado en fl curso de una guerrta, Zaid Ibn Marita, @ ‘quien trataba bondadosamente. Tres. una larga bésqueds, su padre, jefe de una gran ‘ribu, lo encont en La Meca y pidid 8 Mahoma que se to dovolviera a cambio de lun rescate. El futuro Profeta respondié que lberaria a Zaid sin compensacién alguna, a ‘condici6n de que el muchacho accediera vor luntariamente 2 volver con su padre. Zaid anuncié inmediatamento que preferia ‘quedarse con Mahoma; éste, profundamen- te conmovido, Ie liberd en el eto, le condu- jo a la Kaaba yall declaré publicamente que ‘adoptaba come hijo a su antiguo esclavo. Otro hecho, que acontecié cinco afios an- tes de la primera revelacin, ilustra ol caréc- ter y [a personalidad de Mahoma. Los habi- tantes ce La Meca reconstruian ls Kaabs, estruida primero por un incendio y luego ‘oF las lluvias torrenciales. Cuando lleg® el momento de colocar ta Piedra Nagra en su sitio, etal una disputa entre los diferentes clanés, cada uno de los cuales reclamabs ‘para si el honor de restitu el objeto sagra- do. Cuando estaban a punto de pasar alas farms, un anciano propuso que so dejara la ‘decision en manos de Dios y que la primera persona que pasara por ol ugar actuara co- ‘mo étbtro, Esa persona result6 ser Mahoma Quien, colocendo la piedra en el suelo, sobre tuna ancha faja de tela, pidié a los represen- tantes do cada tribu que levantaran Ia faja or sus bordes. De esta manera, todos los lanes participaron en la ceremoria y fue el propio Mahoma quien repuso la Piedra Nogra en su lugar, para satistaccién general. Fue hacia aquelle époce cuando Mahome: ‘comonz6 a rehuir la vida mundana que Ie ro- ddaaba y a rotrarso a las inmediaciones de La ‘Meca donde pasaba sus dias entregado a la meditacién. Su lugar de retro favorito era ‘una grata del monte Hira, on la quo se reclu- Yo cinco afios sucesivos durante todo ol mes de Ramadan, que entonces caia a mediados del invierno. Y fus en su quinto retio anual ‘uando tuvo su primera vision del arcéngel Gabriel Al despertar de su suefio, Mahoma volvio 2 8u casa y relatb a su esposs Jadiya la visita dol angel. Le dominaba una profunds in- uietud pues tenia que la visién hubiers si do la del demonio cistrezado. Jaclya hizo ‘cuanto pudo por confortare yal dia siguien- twambos fueron a vistar a Waraga Ibn Note. li, un anciano ciogo, primo de Jadiya, que se habia convortido al ristanismo y ora versa- do en materia de religién, En cuanto Mahoma hubo terminado su re- lato, Waraga exclamé: Si es verdad lo que dices, eso se parece ala Nommos (la Tora) de Moisés. ¥ si Dios me da vida, te defonderé ‘en la hora en que comiencen 8 perseguirte”. "{Cémo? ~replicd Mahoma— Sere aca: perseguido por hablar de Dios y de sus ben: iciones?” “Si —dijo Waraga-—, jamés oro feta alguno ha escapado @ la persecucién por una parte do su puoblo”, Pronto se difundié por toda la ciudad ta noticia de la visibn do Mahoma, Los primo: ros en proclamar su fo en su mensaje fueron ‘su espose Jadiya, su fel esclavo liberto Zaid, su amigo Abu Bakr y su joven primo ‘Al, quien educaba como a un hijo adopti- yo. Los demis se mostraron escépticos, ‘cuando no abiertamente hostile. Tres afios pasaron sin que el Arcangel Gabriel volvera @ aparecerse al Profets. Su tia Um Lajab se mofaba de Mehoma dicién- dole: "Estoy segura de que tu demo (Gabriel) te ha abandonade y te aborrece’ Desespersido por sus dudas y herido vive. ‘mente por esta ofensa, Mahoma subié a una ‘montafia cercana. En ese instante se le apa- tecid el Angel, que le tranquilzo con las pa- labras de Dios [Corén, "El alba"): "(Por Ia mafianel jPor la noche cuando imperal Tu ‘Sefor no te ha abandonado alte aborrece.. {No te enconiré huérfano y te cio un refu- 410? gNo te encontr6 extraviado y t gud? {Explica ol bonoicio que to ha hecho tu S For” Mahoma compreneiéinmediatamer te el sentido de este mensaje quo ordonabo al hombre creer en Dios y ser caritativo. El mensaje que comenzé a predicar Maho ma en au cildad natal entrariaba dos o- lanes fundamental: la unieidad de Dios y la resurteccion y la vida despubs dela mucr- te. El principio de un solo Dios omnisciento y omnipresente, 9 quion todos rendiran cuen- tas un ola, 86 oponia# as croencias y préct- 2s idolaticas de los habitantes de La Meca. ‘Aicomienzo, éstos se civertan con las ense- Fianzas de Mahioma, luego se burlaban de 6 ¥, finalmente, descncadenaron uno oa de Porsecuciones contra el Prafeta y ol pe Querio nimero de creyentes. que. hobian Abrazado la nueva raligidn. Mahorna ecense- {6 entonces a sus compafiros que buscaran Fofugio en fa eistiana Abisinia cuyo roy los dora aslo y “proteecién. Cuando los ‘maguies, enfurecides, onviaron una dologa- Gin pore obtener del Negus le extrecicion do los refugiados musulmanes, et soberena techaz6 su peticién. Como consecvencia do ‘este fracaso aumenté ia epresion conta los musulmanes que se habion quedado en La Moca, legindose a prohibr todos los ta soceidnes comerciles con la ribu del Profe- 1 incluso lo vonta 6ealmontos, lo que pro- ved la muorte de muchos creyentes, £! bloqueo fue levantado al cabo de tes largos afios, pero clio no puso fin ala ci cultades del Profeta, Su tio Abu Talib, jefe 4e la famila y protector suyo, muro y el ‘nuevo jele del ‘clan, otro tio’ suyo, Abu Lahab, declaré a Mahara fuera de fa ley, por lo’ que cualquier persona podia asest Pato impunemente. Sin otra akternativa que abandonar La Meca, of Profeta buscb aslo en la vecina ciudad 8 Tait, pero su pobla- in se most més host aun, por lo que pronto volvié a su Meca natal gracias a la proteccién de un amigo suyo no musulman. Mahoma decidié entonces establecor con- tacto con os extranjeros que ban a Le Meca on ocasion de la peregrinacion anual a la Kaaba, Tras varios intentos fades con gen- tes do dvorsas tibus, un peguoRo grupo rocedento do Yatrb, conacida més tarde Como Medinet akNabi, "la ciudad del Profe t2", 0 simplemente Medina, adhirio a su causa y comenzé a predicar su mensaje, Al ao siguiente, doce poregrinos de Medine roclamaron su conversion a islaismo Voneron 8 20 ciudad ocompaiodos do un Imisionero de La Meca que habla recbido instucciones del Profeta para predicar el Islam en Medina, El misionero tuvo tanto éxito que al aio st guiente 72 musulmenes de Medina fueron @ {Ee Meca e invitaron al Profota y a todos los creyentes. perseguidos “a emigrar 9. su cluded. Mahoma acepte pero antes pidio om 7 tty re ivh th tik Sh aplpo fe gad 5, 2? apie eran Le) ya be yee type aay z ap at if’? ar “ae ae El Coran “En el nombre de Dios, 6! Clemente, el aut i te it i i i : i i Wisi Hi los musimanes que emigraran a Medina en oquefios grupos, a fin de que sus conterrs- 'ReOS no se opusieran a lo que habria podido Cconstituir un verdadero éxodo. ‘A medida que aumentaba el numero de ‘musulmanes que abandonaban La Meca, los habitantes de ésta comenzaron a temer que 1 Profeta también pudiera encontrar asiio en ‘algin lugar y voNer con sus huestes a atacar la ciudad, por lo que decidieron matarle. Cuando Mahoma se enteré de fa conspi cién, buscé @ su amigo Abu Bakr y juntos resalvieron abandonar La Moca por la noche Y trasladarse a Medina. Abu Bakr contrat @ Lun guia para que les levara dos camels al lugar donde permanecian ocultes y los con- ‘dujera por caminos poco frecuentados. Tras, ‘muchas peripecias legaron a Medina, lo que ‘colmé de alegria a los musulmanes que se ‘encontraban alli instatados. Este acontecimiento, la Hivra o Hégita, cconstituye el comienzo de la era musuimen ‘que, segiin el calendarioislémico, acaba de cumplr catorce siglos (véase el art. de le pag. 43). Antes de la Hégira, la vida de! Islam estaba lena de dficultades y peigros; después de ella, en Medina, vinieron tiem- ‘pos de relativa Seguridad y de progreso en. Jos que se completaron gradusimente los d vvorsos aspectos del Islam y pudo crearse un Estado istémico. La Sunne (conduct, 2 Hadith \dichos", “doclaraciones’) es et Mahoma era un hombre préctico. Queria establocer los priicpios que quiaran el com. portamento de fos musulmanes en todos los aspectos de su existencia, tanto su vida es- piritual y personal como su actividad politica como miembros de una comunidad, Y fue fen Medina donde emprencid esa tarea, El primer problema que debio encarar fue ‘21 de les rofugiados. Propuso entonces que cada familia acomodada de Medina aco. fraternalmente @-una familia de refugiados de La Meca y que ambas trabajaran y se ga- rraran ta vida juntas, como si se tratara de tuna sola familia, Luego se planteé el problema de la seguri- dad de los musulames. A fa legada del Pro- feta, Medina carecfa de organizacién politica debido 2 que los diversos clanes guerroros no reconotian ninguna forma de autoridad estatal o personal. Mahorra convoc a los representantes de todos los grupos —musulmanes, rabes idélatras, judios y eristanos— y les propuse la creacion de una ciudad-Estedo cuya fuerza disuadiera 2 quienquiers que pretendiese atacatla. La Propuesta fue aceptada y se eligid a Maho- ima jefe del nuevo Estado. Inmediatamente el Profeta se dedicd a re- dactar una constitucién, El texto, que ha ll ‘gado hasta nosotres, representa la primera La Sunna ‘componamiont) ‘Sunna— se constitucién escrita que se conoce. En ella se definen los derechos y deberes del jefe del Estado y de sus slbcitos y se establecen tas ‘medidas adecuades de defensa, Justicia, s- {utidad social y otras actividades necesarias ela comunidad. La caracteristca principal de esa constitucion es la tolerancia, en el sentido mas amplio del termino; en virtud de cella toda persona, musulmana 0 no, disfru- taba no s6la de fbertad de conciencia sino ademés de Hbertad frente a la leyes y la jus- ticia: asi, por ejemplo, fa ley musulmana no ‘se aplicaba a los no musulmanes en materia {vil ni penal ‘Mahoma comenzé luego a organizar la se- ‘urided del Estado musulmdn estableciondo ‘una serie de alianzas defensivas con las tr bus de las inmediaciones de Medina. Forta- lecido por esas allanzas, prohibi6 que las ca- ravanas que viajaban 2 Siri, Egipto e Irak atravesaran el teritorioislémico. Cuando los habitantes de La Meca vataron de abrirse paso por la fuerza se encontraron con que les oporian resistencia bandas de musulma- hes tres y hasta diez veces inferiores a sus propies fuerzas. As, la gran victoria que Tepresento la batalla de Badr (afio 2 de la Hé- ) fue obtenida por 300 musulmanes Contra nos 850 paganos. Con el paso de los aos La Meca comenz6 4 dar sefiales de agotamiento econémico, = ‘Muchos “tadicionstas” —especialstal dela stron en vi, @ veces hasta ‘conjunto de los actos ydichos del Profeta det Isla, Matioma, y de aquelos que fusron t& ‘itamenta sprobados por 6 a largo da toda ‘su vido misonera. Base fundamental del Dogme y de ls Ley el Islam, después del Corén, la Sunna con- ‘Sato esoncaimente en Ios comentarios del Profetaacerea dol Cordn, yen las normas de conduct prescitas ale comunidad wimics ‘en su eonhunto. También lamada Hadith, 0 Tradicin deh ‘ud de fegles practices que gularon 2. los juecas en los primeros siglo del slam, antes Se que se codticaran ls eyes postivas. Aun ‘en nuestros clas cantinda siendo una impor see Teenie oe mmc ‘que aplcan parcial o entoramonte la Chars Preoiseor® tsmica, Dentro de fo que wensmits 2 su comuni- ad, Mahome diferenciaba claramente al Co- Fn, palbr de Dios vetads por Gabriel, que fo be sufi ta mis minima sitorscion, dels Inspiracion que lo inctaba, en su vida cot diana, a actos 0 palabras aobados por Dis. Et Profeta ge hizo cargo & misino de a pre- ‘sentacion dol Coran (weage el cuado oe le ag. anterior), pero no Ge la dl Hadith En un comignzo a Sunna se transmit cas! fexclusivamente a partir de is memoria pr vados de los compatercs del Profeta. Algu- nos de els, como Abdul fon Arne y Anas Tin Malik, escdbieron las palabras y las 3c- clones de Mahoma cuando ain vila 6st ; tras no lo hiceron haste desputs des: muerte; la mayor s6io comunicaron ors monte sus conotimientos 3 sus alumnos. A ‘veces, ‘para rosolver cualauier proba, Itricieao de ote indole, se boxcabs vn procs. Gente en la vido dol Profeta- encontaro sig- hifleaba resolver el problems. Las primeras generaciones de musulmanes exporimentaron in necesied de agrupsr fo ios tos hadith sutericados del Profet, ‘muy lejos, pars recoger estas wadiciones dels propia bocs de aquoios que las conservaben. £m poco tempo la Tradicion se ensanchd ‘considerablemente. Hubo quiones fabricaron hadith para apoyar sus propiss doctings. 0 pata enaefiar doctrings Heretics. Otros, ine pulsados por su fervor y por el deseo de sor ‘um mas edificantes, legaron hesta a inventar pata poder, # raves ce todo esto, zat ) 4 ae a 9 3) xe’ i Sf pros o's. 6 o,0*g.: ces Gn k & p Pagina en color tun tallor dopendionta do la Corte los mayores talentos de Persia, {rons} del gran posta Ya Represe ‘escana de la historia de amor de ‘Mayymun Layla (El loco de Layla) cuyo tema se ingpira en le vida de un pocta frabe dol desiert, Qais. Mayynun (aniba a la derecha) contompla con fervor a su amada, de pia ante la, entrada de su tienda. Voces misticas del Islam por Rahmatullah L Islam, que es a la vez un culto rel ‘oso, un sistema social y un rea cul- ‘ural, posee también una profunda ‘adicién mistica que no ha dejado de enri- ‘quocerse en los catorce siglos ultimos. La gneseologia musulmana comprende cuatro formas posibles del conocimiento que, segin Nasir al-Din Tus, flésofo chil persa del siglo Xill, estin simbolizadas por ustro bebidas.La primera forma es el cono- Cimiento sensible de los fenémenos por me- dio de los cinco sentidos del cuerpo y de la facultad racional del espiritu; es lo que lla- mamos ciencia, y esta simbolizada por el agua, bebida trarsparente y facil de absor- ber. La segunda es el conocimiento intuitive ‘mediante lb facultad de la imaginacién; o¢ el campo del arte, de la literatura y de la offa en la acepcion corriente dol rm 1o, es deci la especulacion, y est simbol- zada por la leche, bebida més nutritva. La ‘orcera es el estudio objetivo de la expetion- la suprasensible de los profetas y de los mmistcos y de sus ensefianzas; se trata de la filosofia en el sentido etimolégico de la pa- labra, 0 sea el amor por la sabiduria divina {theosophia hikma iahiya), simbolizada pot la miel, almento més nutitve aun y deli cioso por aftadidura. La cuarta forma det conocimiento esl periencia directa —es decir sin participacion e las facultades del cuerpo ni del esptritu— ela realidad suprasensible, gracias ala acti ‘vacién en el hombre de una facultad de per- ‘copcién espiritual hasta entonces latente; es Ia rovelacion o inspiracion divina o incluso el sueKo mistico, Esta simbolizada por a vino, bebida que trasporta al hombre hasta lo mas profundo de si mismo. Es este Conocimien- {0 colestial el que ha cantado Omar Khay- ‘yam, el célebre posta persa del siglo Xil, en sus Avbaiyat, yn la bebida alcohdlica terre- nal, Por su parte, Omar ibn al-Faridh, ef ma- Yor poeta mistico érabe del siglo XIll, dice en 30 Elogio del vino: Babimas @ la memoria de! Amado un vino que nos embriagé, antes de que se creara fa Vid... Quien haya vivido sin embriaguer no ha vivide aguf abajo y aguél que no haya muer- to de su embriaguez no asté dotedo de ra- abn. Para los musulmanes, la experiencia rnistica por excelencia es a que tuvo el Pro {feta Mahora en las dos grandes noches que conmemora el calendaria islémico, La prime- 12 es la “Noche de la Potestad", cuando Mahoma recibié ta primera revelacién cord- nica por intermedio del angel Gabriel, ya se- sgunda la ’Noche de la Ascensién”, cuando 1 Profeta pudo antever brevemente la Re- sureccion, Es asi como ol Qur'an, la palabra de Dios ‘enunciada por la boca del Profeta, y los ha- dith, dichos de Mahoma transmitidos por ‘sus compafiros, constituyen la. principal fuente de meditacién mistica del islam. Esta ‘se concentra mas particulatmente en los ‘versieulos cordnicas de cardcter simbélico, ‘coma lo indica el propio Cord: "Dios pro” one pardbolas a los hombres; ¢roflexiona- rn éstos quizés?”. En los hadith del Profe- 12, Dios habla a veces en primera persona: ‘son los hadith gods/ (santos), de los que el sjomplo mas frecuentemente citado es el si- "Yo era un Tesoro oculto, y quise entonces creé el mun- do", Traténdose evidentemente de palabras, reveladas, éstas han sido estuciadas de mo- do particular por los amantes de la Sabiduria. Posteriormente, una inmensa cantidad de esctites y de dichos de los misticos se fueron acumulando en todas las regiones dol mundo isiémico. La moditacion mistica puede beber de esa fuente sin agotara préc- ticamente jamés. Algunos misticos eran escritores proffices y ciertas obras suyas son do carécter monumental. Mohyi-ddin jon Arabi (nacido en Andalucia y muerto en Damasco en 1240) hizo poco antes de su ‘muerte una lista de sus 270 obras, la ms ex- tensa de las cuales, Revelaciones de la Me- 2, comprende 560 capltues. EI Mathnawi, de Yaial s}-Din Rumi (nacido en Bally muer- toon Konia en 1273), es un poema épico de 45.000 versos de una sabiduria profunda y me RAHMATULLAH es una autovited mundial en ‘materia de misiisna itimice. Nacido one! sub ontinente ino, e& hoy a subcto bténic, Ha {erto una sve de arculosespectalzados sobre ttversos aspectos de fo Mosollailsmica, 3 una belleza pasmoss. Rumi es el fundador e la Orden sufi de los Mawlawi, més cono- ida en Occidente con el nombre de “los darviches gradores”. Dos grandes misticos pperses, Farid al-Din Attar, del siglo Xill, y Yami, de! XV, llegaron incluso a compitar tos monopolizadores y_niveladores de los, sistemas de comunicacién y de la poltica ‘mundiales y las necesidades de grandes sec- tores de la poblacion del mundo entero, el cometido de los arquitectos y de los urbanis- tasa la hora de definie una nueva imagen del entorno sélo puede concretarse de un modo lecuado si perciben claramente les dimen siones cuturales de la situacion actual. De- bbemos seguir haciendo hineapié en que la posibilidad de crear un entorna sano no de-

También podría gustarte