ARTE CONTEMPORÁNEO

El arte contemporáneo comienza a mediados del siglo XIX. Fue una

revolución artística y la ruptura de los modelos tradicionales, su carácter
crítico y experimental. Se puede considerar que el arte contemporáneo es un
arte que carece de valor; pues una lata vacía es una simple lata vacía que se
puede replicar en un instante sin la presencia del artista y que termina siendo
un objeto sin importancia.
El arte contemporáneo es una deformación a lo que es la estética, la métrica
y el estudio del arte. Hoy en día se puede decir que cualquiera es artista y
cada quien tiene su concepto de lo que es arte, que, inmersos en una
sociedad de consumismo ven el arte como algo elitista y exhibicionista,
siendo así, hoy el ser artista no requiere de estudio ni de técnica. Además, el
validar una “obra de arte” se lo da el precio pagado por ello.
El arte nos ayuda a observar la realidad a través de sus representaciones, a
ordenar nuestra realidad y existencia, es por eso que al observar una obra de
arte nuestros instintos y habilidades se despiertan para interpretar y
entender lo que el artística quiso expresar. Esto en el arte contemporáneo
muchas veces nos permite deducir que las obras no tienen una inteligencia
creadora, no transmite emoción o sentimiento alguno despojando el
concepto de arte y así perdiendo su valor.
Se convirtió en un confunde y reinaras. Ahora si algo no gusta o no conecta la
imagen con lo que se quiere transmitir es decir que no se entiende el
concepto de arte quitándole al artista la responsabilidad de realizar con
técnica y estudio su obra. Se dice que son obras que invitan a los
espectadores a imaginar, pero en realidad está siendo una limítate impuesta
por el artista que no tuvo la suficiente imaginación para poder terminarla.
Obras inconclusas que hace casi imposible generar una critica sobre ella, sin
relación de tiempos y espacios. No es un trabajo de meses que dejan como
resultados grandes obras, sino que resalta su trabajo banal y mediocre. Son
obras que no motiva al espectador a permanecer observándola e
interiorizando simplemente entretiene sin ir más allá de lo que puede
generara una verdadera obra de arte.
Para el arte contemporáneo todo es arte, no hay dedicación especial a ello o
que se invite a interiorizar porque llega un punto que deja de ser parte para
convertirse en algo común