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INSTITUCION EDUCATIVA TECNICA AGROPECUARIA JOSE ANTONIO GALAN

HATOVIEJO CALAMAR

AREA: Ética y Valores 11° - 2017 DOCENTE: Juana Rogelia Franco Hernandez

CONDUCTA DE ENTRADA - COSAS QUE APRENDEMOS A MEDIDA QUE PASAN LOS AÑOS

A medida que pasan los años descubrimos que si tan sólo los seres humanos nos esforzásemos en ser
personas de bien, con grandeza en el corazón y el alma, este mundo que nos trae de cabeza, sería mucho
mejor.

También he aprendido que damos valor a lo que no lo tiene, y las cosas importantes las dejamos de lado. La
vida te enseña que no es mejor persona el que todo lo tiene, sino el que es bondadoso de corazón. Todos
buscamos ser amados y apreciados, y al no conseguirlo caemos en el error de comprar el cariño de los demás.

Y sí, según pasan los años así lo voy confirmando: conviene alejarse de las personas egocéntricas, aquellas
que viven halagándose a sí mismos. Por el contrario, es sabio rodearse de personas que te pongan a ti
primero antes que nada. Nada ni nadie debe darse el lujo de tratarnos como de su propiedad, ni de hacer con
nosotros lo que ellos quieran.

El amor se debe dar así sin más, de lo contrario no es amor. Este mundo no es perfecto, las personas no lo
somos, y por ello hay que tener mucho cuidado de a quién entregamos nuestro amor y confianza, tiempo,
esfuerzo y sacrificio. Porque la persona que recibe eso de ti, debiera ser alguien que no piense sólo en sí
misma, debe ser alguien que se alegre de tus logros y te preste sus brazos cuando caes. Debe ser alguien
que esté siempre a tu lado, no sólo para lo bueno sino también en los peores momentos. Si te entregas en
cuerpo y alma a alguien que no sea así, caerás y al hacerlo tendrás que levantarte sola. Una relación así no te
conviene nada, porque te lleva a ser quien siempre da, recibiendo algo sólo cuando las cosas estén bien.

NADA de apegos, nunca son buenos, porque al apegarte a alguien siempre estarás dependiendo de esa
persona para todo. Si algo quieres, ve a por ello: que nada ni nadie te lo impida, pues tú sabes qué es lo que
te conviene y qué mereces. Hay que ser buenas personas, conviene amar, pero sin apegarse tanto como para
perder la voluntad propia.

Sé fiel a ti mismo. Sé la persona que siempre querías ser, vive conforme a tus propios criterios, a lo que a ti
te hace feliz, no a lo que los demás piensan que te haría feliz. Si quieres amar, ama libre y plenamente, no te
avergüences de decir “te quiero” o abrazar a quien te dé la gana, de reír hasta que te duela la panza y decir
garabatos si te parece que sería lo que se merece quien está contigo. No vivas de forma reprimida, y aunque
esto parezca un poco fuerte, sólo con los años aprendemos que no tenemos por qué callar cuando debemos
hablar.

Busca alcanzar tu propia independencia. Tu seguridad no debe depender de otros, has de encontrarlo en ti
mismo, no dependas de otros para saber que nada te faltará. No hay nada más loable que conseguir las cosas
por tus propios medios, sé independiente: nadie necesita a nadie, lo que queremos todos es que nos amemos
con nuestros fallos y aciertos, pero sin que nos aprisionen ni tampoco aprisionar a nadie; sólo así sabrás que
el amor está en cada uno, y no es obligado.

Evita las relaciones tormentosas, ya tenemos la suficiente madurez para saber escoger. Muchas veces nos
dejamos llevar por cosas superfluas que no aportan nada en nuestras vidas, y demasiadas veces rechazamos
e ignoramos a personas que valían la pena, personas que igual incluso nos llegaron a amar pero que las
apartamos de nosotras por trivialidades y cosas que con el tiempo te das cuentas de que no eran tan
importantes como a su tiempo creímos. El tiempo nos lleva a darnos cuenta de que demasiadas veces el buen
juicio se nos nubló al dejarnos llevar por las apariencias.

Aprendamos de los errores cometidos. El pasado ya no se puede cambiar, para eso ya es tarde… sin embargo
sí podemos aprender a hacer caso a nuestro corazón y a pensar antes de actuar; los años nos traen arrugas
pero también sabiduría. Sé que nunca seremos las mismas personas de antes y que también lloramos y nos
arrepentimos de no haber hecho tal o cual cosa, mas nunca es tarde para recapacitar, pensar y realizar
cambios en nuestra vida. Pero antes que dejarnos llevar por el momento como en nuestra juventud; pensemos
bien las cosas, si hace falta meditemos muchos días o semanas, pues ahora sabemos que los pasos
importantes pueden llevarnos tanto a la felicidad como a la tristeza.

A medida que pasan los años, es verdad, quizás no somos las de antes, pero a nuestro miedo, habremos
alcanzado más belleza, inteligencia y madurez. Ahora seamos personas que se sienten seguras de sí mismas,
personas sabias que no se dejan llevar sino que saben lo que quieren.

Igualmente, veamos a las personas tal como son, no sólo por lo que tienen o lo que no poseen. Pues la vida nos
enseña que eso carece de importancia, que hay más felicidad en tener a alguien que sólo sea bondadoso pero
que esté siempre a nuestro lado. Lo superfluo, lo banal, queda para las niñas quinceañeras.
Autor: Shoshan.

1. ¿Por qué si nos esforzamos por ser personas de bien el mundo será mejor?
2. ¿Por qué algunas personas tienen que comprar el cariño de los demás?
3. ¿Qué utilidad puedes sacar de ser fiel a ti mismo?
4. ¿Cómo podrías aprender de los errores cometidos?
5. ¿Cuáles son las razones por las que al pasar los años no somos los mismos?

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