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VELOCIDAD BIBLICA

1) RUT 1:10 y le dijeron: Ciertamente nosotras iremos contigo a tu pueblo.


2) DEUTORONOMIO 31:22 Y Moisés escribió este cántico aquel día, y lo enseñó a los hijos
de Israel.
3) LEVITICOS 12:3 Y al octavo día se circuncidará al niño.
4) 2 SAMUEL 24:8 Después que hubieron recorrido toda la tierra, volvieron a Jerusalén al
cabo de nueve meses y veinte días.
5) 1 REYES 1:46 También Salomón se ha sentado en el trono del reino,
6) 2 CRONICAS 36:11 De veintiún años era Sedequías cuando comenzó a reinar, y once
años reinó en Jerusalén.
7) ESDRAS 10:10 Y se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: Vosotros habéis pecado, por cuanto
tomasteis mujeres extranjeras, añadiendo así sobre el pecado de Israel.
8) 2 CORINTIOS 10:17 Mas el que se gloría, gloríese en el Señor;
9) NEHEMIAS 9:16 Mas ellos y nuestros padres fueron soberbios, y endurecieron su
cerviz, y no escucharon tus mandamientos.
10) GALATAS 1:11 Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no
es según hombre;
11) ESTER 10:1 El rey Asuero impuso tributo sobre la tierra y hasta las costas del mar.
12) EFESIOS 4:20 Mas vosotros no habéis aprendido así a Cristo,
13) ECLESIASTES 1:18 Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade
ciencia, añade dolor.
14) FILIPENSES 4:23 La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.
15) JOB 42:17 Y murió Job viejo y lleno de días.
16) 2 TESALONICENSES 3:18 La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros.
Amén.
17) PROVERBIOS 15:3 Los ojos de Jehová están en todo lugar,
Mirando a los malos y a los buenos.
18) 2 TIMOTEO 4:22 El Señor Jesucristo esté con tu espíritu. La gracia sea con vosotros.
Amén.
19) CANTARES 8:9 Si ella es muro, Edificaremos sobre él un palacio de plata; Si fuere
puerta, La guarneceremos con tablas de cedro.
20) TITO 3:15 Todos los que están conmigo te saludan. Saluda a los que nos aman en la fe.
La gracia sea con todos vosotros.
Amén.
21) ABDIAS V21 Y subirán salvadores al monte de Sion para juzgar al monte de Esaú; y el
reino será de Jehová.
22) DANIEL 4:1 Nabucodonosor rey, a todos los pueblos, naciones y lenguas que moran en
toda la tierra: Paz os sea multiplicada.
23) FILEMON 7 Pues tenemos gran gozo y consolación en tu amor, porque por ti, oh
hermano, han sido confortados los corazones de los santos.
24) OSEAS 5:15 Andaré y volveré a mi lugar, hasta que reconozcan su pecado y busquen mi
rostro. En su angustia me buscarán.
25) 2 PEDRO 3:18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y
Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.
26) JOEL 1:20 Las bestias del campo bramarán también a ti, porque se secaron los arroyos
de las aguas, y fuego consumió las praderas del desierto.
27) MIQUEAS 7:13 Y será asolada la tierra a causa de sus moradores, por el fruto de sus
obras.
28) 2 JUAN V13 Los hijos de tu hermana, la elegida, te saludan. Amén.
29) AMOS 9:11 En aquel día yo levantaré el tabernáculo caído de David, y cerraré sus
portillos y levantaré sus ruinas, y lo edificaré como en el tiempo pasado;
30) 2:9 La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera, ha dicho Jehová de los
ejércitos; y daré paz en este lugar, dice Jehová de los ejércitos.
Quién era Felipe, el evangelista?

El libro de Hechos nos cuenta que Felipe (conocido como el


evangelista, para diferenciarlo del apóstol), fue uno de los
diáconos de la primera iglesia en Jerusalén. También fue uno
de los primeros cristianos en predicar el evangelio fuera de
la ciudad santa, llegando a tener un impacto ministerial
significativo en la creciente iglesia primitiva.

La vida de Felipe nos muestra que cualquier cristiano común


puede ser usado por el Señor de forma extraordinaria.
Veamos más de cerca su vida y qué podemos aprender de
él.

Felipe y su ministerio en Samaria

Felipe fue escogido por los apóstoles para servir supervisando la


distribución del sustento a los pobres de la iglesia (Hch. 6).
Según lo narrado en Hechos 6:3, él era de buena reputación,
lleno del Espíritu Santo y de sabiduría. Mucho más adelante
se nos indica que llegó a tener cuatro hijas que profetizaban
(Hch. 21:9-9).

En Hechos 8 leemos que el día de la muerte de Esteban “se desató


una gran persecución en contra de la iglesia en Jerusalén, y
todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y Samaria,
excepto los apóstoles” (v.1). Entre los esparcidos se
encontraba Felipe, quien fue a Samaria. Allí el Señor hizo
algo especial por medio de su predicación: multitudes que
prestaban atención eran sanadas y muchos eran liberados
de espíritus inmundos. Había regocijo en la ciudad. Lo que
ocurrió incluso llegó a oídos de los apóstoles, quienes
enviaron a Pedro y a Juan para validar los hechos y orar por
los nuevos hermanos.

La vida de Felipe nos muestra que cualquier cristiano


común puede ser usado por el Señor de forma
extraordinaria.

Al igual que Felipe, nosotros —gente común y corriente— también


podemos ser usados por el Señor. La clave está en ponernos
en sus manos y caminar en las obras que Él preparó de
antemano para que andemos en ellas (Ef. 2:10).

Felipe y Simón el mago


Un episodio llamativo en el ministerio de Felipe es el relacionado
con Simón el mago. Este hombre había impactado
anteriormente a Samaria con sus asombrosos actos de
magia. Pretendía ser importante y algunos lo llamaban “el
Gran Poder de Dios”. Él estaba entre los más notables que
escucharon la predicación de Felipe y se bautizaron.

Simón recibió la Palabra y había quedado impresionado con lo que


hacían Felipe y los apóstoles Pedro y Juan. Contempló la
posibilidad de usar este poder para sus actividades, y
entonces ofreció dinero a los apóstoles para comprarlo. La
respuesta severa del apóstol Pedro parece indicar que la
conversión de Simón no era real: fue reprendido e invitado a
arrepentirse (Hch. 8:20-23).

La escena ilustra la conversión aparente de algunos que confiesan


con su boca creer el evangelio y hasta van a las aguas del
bautismo, pero que no han sido regenerados genuinamente.
La predicación fiel de la Palabra de Dios, como la que Felipe
modela, tarde o temprano saca a la luz a los falsos
creyentes.

Felipe y el etíope

Más adelante, Felipe fue comisionado por un ángel del Señor para
ir al camino que desciende de Jerusalén a Gaza. Allí encontró
a un “eunuco etíope, alto oficial de Candace, reina de los
etíopes, el cual estaba encargado de todos sus tesoros”
(Hch. 8:27). El etíope regresaba a su país luego de adorar en
Jerusalén.

Nuestro Señor es el Gran Pastor que busca a las ovejas


perdidas de su redil.
Lucas sigue su relato contándonos que el Espíritu dijo a Felipe que
se acercara al carruaje. Este, obedeciendo, inició una
conversación evangelística con el etíope en una escena que
puede ser descrita como una cita absolutamente preparada
por la soberana gracia divina. El Cristo eterno tenía un plan:
ejecutar Su elección mediante el evangelista.

Esto nos recuerda que nuestro Señor es el Gran Pastor que busca a
las ovejas perdidas de su redil. La manera práctica en que
ejecuta ese plan es por medio de la predicación del
evangelio a través de creyentes que ponen sus vida al
servicio del Dios que los salvó, y están dispuestos a ser
usados para llevar gloria a Su nombre.
Conclusión

El Espíritu Santo determinó que Felipe apareciera en la narrativa


de Hechos. Su historia nos muestra cómo la iglesia y la
Palabra crecían con poder avasallante, sin restricciones. Este
hombre es un modelo de amor a Cristo y compromiso con la
proclamación de Su evangelio. Es un ejemplo de rendición
ante la voluntad de Dios y sometimiento amoroso a Él.

¡Oremos que podamos ser movidos a servir al Cristo resucitado de


la misma manera! Que el evangelio nos transforme y
conduzca a una entrega absoluta a nuestro Salvador. Él es
digno de que proclamemos a todos Su salvación.

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