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AUTÓNOMA DE MÉXICO
Se tenían ya algunos avances de la física cuántica para la época en la que surgió el principio
de la incertidumbre, tales como:
Espectro de la radiación del cuerpo negro, resuelto por Max Planck con la
cuantización de la energía. La energía total del cuerpo negro resultó que tomaba
valores discretos más que continuos. Este fenómeno se llamó cuantización, y los
intervalos posibles más pequeños entre los valores discretos son llamados
quanta (singular: quantum, de la palabra latina para «cantidad», de ahí el
nombre de mecánica cuántica). La magnitud de un cuanto es un valor fijo
llamado constante de Planck, y que vale: 6.626 ×10 julios por segundo.
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Explicación Matemática
En espacios de dimensión infinita, como los espacios
de Hilbert que aparecen en mecánica cuántica, un
operador puede ser hermítico, pero no auto adjunto
(aunque todos los operadores auto adjuntos son
evidentemente hermíticos). El interés de los operadores
en mecánica cuántica reside en que en la formulación
de Dirac von-Neumann, los posibles valores de los
observables físicos o magnitudes físicas, son
precisamente de los autovalores de ciertos operadores que representan la magnitud física.
Así pues, el que un operador pueda ser interpretado como una magnitud físicamente
medible requiere que sus autovalores sean números reales, condición que queda garantizada
si los observables se representan por operadores hermíticos.
Un teorema de importancia capital en la mecánica cuántica es el que sigue: “Si y solo si dos
operadores conmutan, tienen un conjunto de funciones propias en común”. Si para una
dirección espacial dada (x), se tienen dos operadores (magnitudes) como los operadores
posición y momento lineal que no conmutan, esto implica que no tienen ninguna función
propia en común. Así pues, para cualquier función de ondas, si es posible determinar de
forma reproducible la posición, en la determinación del momento lineal habrá siempre una
contribución estadística. Esto es la base del principio de indeterminación de Heisenber. El
principio de incertidumbre se da por la no conmutación de los operadores posición y
momento, o energía y tiempo.
Explicación Cualitativa
Se puede entender mejor este principio si pensamos en lo que sería la medida de la posición
y velocidad de un electrón: para realizar la medida (para poder “ver” de algún modo el
electrón) es necesario que un fotón de luz choque con el electrón, con lo cual está
modificando su posición y velocidad; es decir, por el mismo hecho de realizar la medida, el
experimentador modifica los datos de algún modo, introduciendo un error que es imposible
de reducir a cero, por muy perfectos que sean nuestros instrumentos.
Un error muy común es decir que el principio de incertidumbre impide conocer con infinita
precisión la posición de una partícula o su cantidad de movimiento. Esto es falso. El
principio de incertidumbre nos dice que no podemos medir simultáneamente y con infinita
precisión un par de magnitudes conjugadas.
Es decir, nada impide que midamos con precisión infinita la posición de una partícula, pero
al hacerlo tenemos infinita incertidumbre sobre su momento. Por ejemplo, podemos hacer
un montaje como el del experimento de Young y justo a la salida de las rendijas colocamos
una pantalla fosforescente de modo que al impactar la partícula se marca su posición con un
puntito. Esto se puede hacer, pero hemos perdido toda la información relativa a la velocidad
de dicha partícula.
Por otra parte, las partículas en física cuántica no siguen trayectorias bien definidas. No es
posible conocer el valor de las magnitudes físicas que describen a la partícula antes de ser
medidas. Por lo tanto, es falso asignarle una trayectoria a una partícula. Todo lo más que
podemos es decir que hay una determinada probabilidad de que la partícula se encuentre en
una posición más o menos determinada.
El hecho de que cada partícula lleva asociada consigo una onda, impone
restricciones en la capacidad para determinar al mismo tiempo su
posición y su velocidad. Este principio fué enunciado por W. Heisenberg
en 1927.
Es natural pensar que si una partícula esta localizada, debemos poder
Queda claro que para localizar una partícula es necesario sumar todas
las contribuciones de las ondas cuyo número de onda varía entre cero e
infinito y por lo tanto el momento también varía entre
cero e infinito. Es decir que está completamente indeterminado. Para ilustrar lo
anterior hemos indicado en la siguiente figura diferentes
tipos de paquetes de onda y su transformada de Fourier que nos dice
como están distribuidas las contribuciones de las ondas con número de ondas
k dentro del paquete.
En el primer
caso vemos que un paquete de ondas bien localizado en el
espacio x, tiene contribuciones prácticamente iguales de todas las ondas
con número de ondas k. En el segundo caso vemos que si relajamos un poco la
posición del paquete de ondas, también es posible definir el número de ondas (o el
momento) de la partícula.
En el último caso vemos que para definir bien el momento de la partícula,
entonces su posición queda completamente indefinida.
Es posible determinar el ancho, o la incertidumbre, del paquete de ondas tanto en el
espacio normal como en el espacio de momentos .
El principio de incertidumbre nos dice que hay un límite en la precisión con el cual
podemos determinar al mismo tiempo la posición y el momento de una partícula.
entonces que
Con las consideraciones cualitativas del principio de incertidumbre pueden resumirse así:
Es imposible medir la posición y el momento lineal de un corpúsculo subatómico en el
mismo instante con una precisión ilimitada. Cuanto más precisa es la medición del
momento lineal, menos precisa es la medición de la posición en ese instante, y
viceversa.
Esta relación de incertidumbre dice que si usamos un fotón de longitud de onda corta en un
intento de medir la posición de un electrón con una precisión muy alta, de modo que Δx sea
muy pequeña, entonces la incertidumbre en la medición del momento Δpx debe ser al
menos h/(4π· Δx) . Esto significa que a medida que Δx se hace más pequeña, Δpx tiene que
hacerse más grande. El efecto Compton nos sirve para entender qué ocurre: el electrón
rebota con más velocidad (con mayor momento lineal) cuanto más corta sea la longitud de
onda (mayor energía, por tanto) del fotón de medición.
De hecho, si medimos la posición con tanta precisión que no hay incertidumbre en absoluto
en la posición, entonces Δx sería cero. Pero para hacer esto nos hubiéramos visto obligados
a usar un fotón cuya longitud de onda fuese cero. Y un fotón así tendría una energía
infinita. En este caso, la incertidumbre en el momento lineal del electrón sería infinita o,
mejor, indefinida.
Por otro lado, si permitimos que la incertidumbre en la medición de la posición sea muy
grande, entonces la incertidumbre en la medición del momento se volvería muy pequeña,
ya que el fotón tendría una longitud de onda larga (momento lineal bajo). Si Δx se hace tan
grande que fuese infinita, o indefinida, entonces Δpx se convertiría en cero. Podríamos
medir el momento lineal en ese instante con absoluta precisión. Pero no podemos medir
tanto la posición como el impulso con absoluta precisión al mismo tiempo. La relación de
incertidumbre nos obliga a una compensación. Cuando la precisión de una variable
aumenta, la otra debe disminuir, y viceversa.
De igual manera que esta relación de incertidumbre afecta al par de variables posición y
momento lineal, existen otras análogas [2], como la que afecta al par energía y tiempo. Si
llamamos Δt a la incertidumbre en la medición del tiempo y ΔE a la incertidumbre en la
medición de la energía de un objeto cuántico en un instante dado, entonces el principio de
incertidumbre de Heisenberg dice que Δt· ΔE≥h/4π.
Como hemos visto, esta relación se puede resumir en:
Nota:
Análisis de Resultados
DEDUCCIÓN DE HEISENBERG
Razonamiento original de Werner Heisenberg en 1927. Se supuso el siguiente paquete
de ondas gaussiano para la función de onda.
2
−q
2 ( δq )
ψ ( q ) ∝ⅇ
Introduciendo la indeterminación de la posición de la partícula (δq ) y obviando los
factores de normalización.
De esta forma se puede deducir utilizando la transformada de Fourier el cual es el
aspecto que tendrá la correspondiente incertidumbre en el momento.
2
2 2
ⅈpq q
ϕ ( p) ∝ ∫ ⅇ
∞ −ⅈpq
ℏ
ψ ( q ) ⅆq=∫ ⅇ
∞ −ⅈpq
ℏ
⋅ⅇ
−q
2 ( δq )
2
∞
ⅆq=∫ ⅇ
−ⅈpq
ℏ
−
q
2 ( δq )
2
∞
ⅆq= ∫ ⅇ
−
( +
ℏ 2 ( δq ) 2 ) ⅆq
−∞ −∞ −∞ −∞
q2 2ⅈpq q ⅈpδq 2 p 2 δ q2
( δq )2
+
ℏ
=
δq
+
ℏ
+
ℏ ( )
Con lo que:
2
∞ −1 q ⅈpδq
(
2 δq
+
ℏ )
∫ⅇ ⅆq
−∞
Cambio de variable:
q ⅈpδq
x= +
δq ℏ
Con lo que se puede decir:
2 2
− p 2 ( δq ) −p
2 2
2ℏ 2 ( δp )
ϕ ( p ) ∝ⅇ ≡e
El producto de las indeterminaciones será:
δqδp=ℏ
Normalmente, el principio de incertidumbre es enunciado a partir de las desviaciones
estándar de las distribuciones de probabilidad.
Según la interpretación probabilística de Bohr, la distribución de probabilidad
nos da el cuadrado de la función de onda, las desviaciones están relacionadas con:
δq =√ 2 Δq ∧δp= √ 2 Δp
Por lo tanto:
2 2
( √ 2 Δq ) ( √ 2 Δp ) ≥ ℏ2
ℏ h
ΔqΔp ≥ ∨ ΔqΔp ≥
2 4π
Referencias:
1.-Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Biografia de Werner Heisenberg. En
Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Barcelona (España). Disponible
en : https://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/heisenberg.htm
2.-Powers, Thomas (1993). Heisenberg's War: The Secret History of the German Bomb .
Nueva York:
3.-Heisenberg, W. «Über quantentheoretische Umdeutung kinematischer und
mechanischer Beziehungen». Zeitschrift für Physik 33 (1925): 879-893.