presión psíquica. Nos estamos convirtiendo de carbón en diamante, de dinosaurios en pájaros. El reto en este momento es convertir la presión en atención, las garras en alas.
II. No hay drogas o varitas mágicas. Estamos
atravesando la tormenta, estamos atravesando el problema básico de la condición humana: el sufrimiento. “La vida es difícil”, Scott Peck
III. Hemos de realizar un esfuerzo consciente –y
continuo– para movernos (deslizarnos) hacia otro estado interno. Tenemos que aprender a movilizar nuestros recursos internos más intensamente que nunca. Buena noticia: la presión, intensidad y energía del momento puede impulsarnos a salir adelante.
IV. Hay siempre más de bueno que de malo en este
instante, si sé: (a) cómo mirarlo y (b) cómo canalizar mi energía psíquica, mi mente. Prácticas
1. Este instante es el único tiempo que existe. Dilo y
tómate un tiempo para entrar en él, con todo lo que hay. Intensamente presente. “Te entrego este instante”.
2. ¿Dónde estoy? ¿Qué estoy decidiendo (en mi
interior)? ¿Que es lo que quiero realmente ahora?
3. Si no me gusta como me siento es porque estoy
eligiendo miedo. Esto exige mucha sinceridad. Es un camino (no es de la noche a la mañana). Me detengo, lo miro intensamente, dulcemente y lo entrego. Y acepto la expiación.