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Decreto de guerra a muerte

Célebre documento dictado por Simón Bolívar y dado a conocer en la ciudad de Trujillo, el 15 de junio de
1813. La Proclama de guerra a muerte, fue la respuesta de Bolívar ante los numerosos crímenes perpetrados
por Domingo de Monteverde, Francisco Cervériz, Antonio Zuazola, Pascual Martínez, Lorenzo Fernández de
la Hoz, José Yánez, Francisco Rosete y otros jefes realistas luego de la caída de la Primera República. La
matanza de los republicanos por parte de los jefes españoles llegó a extremos tales de provocar el rechazo de
personajes adictos a la causa monárquica. Uno de ellos fue el abogado fue el abogado Francisco de Heredia,
oidor y regente de la Real Audiencia de Caracas, quien pidió en distintas formas que cesaran las ejecuciones,
lo cual no sucedió. Según el testimonio del propio Heredia relatado en sus Memorias, un fraile capuchino de
las misiones de Apure que actuaba como uno de los partidarios de Monteverde, exhortó en una ocasión «...
en alta voz a los soldados, de siete años arriba, no dejasen vivo a nadie...» Bolívar en su Campaña
Libertadora de 1813 recibió información de la consumación de hechos como el relatado por Heredia, lo que le
llevó a expresar el 8 de junio en Mérida: «Nuestro odio será implacable y la guerra será a muerte».
Al pronunciamiento de Bolívar del 8 de junio siguió la proclama el 15 de junio en Trujillo del Decreto a
muerte el cual termina de la manera siguiente: «...Españoles y canarios, contad con la muerte, aun siendo
indiferentes, si no obráis activamente en obsequio de la libertad de Venezuela. Americanos, contad con la
vida, aun cuando seáis culpables». En una primera instancia esta manifestación fue considerada por Bolívar
como ley fundamental de la República, que luego ampliaría y ratificaría en el cuartel general de Puerto
Cabello, mediante una proclama del 6 de septiembre del mismo año 1813, acto que según algunos
historiadores puede ser considerado como un «Segundo Decreto de Guerra a Muerte». Posteriormente,
cuando en el segundo semestre de 1813 aparecen en escena José Tomás Boves y Francisco Tomás Morales,
la matanza se hace más intensa por parte de los realistas y la respuesta de los republicanos es radicalizar la
aplicación de la «guerra a muerte». Derivado de esto se produjo la ejecución de los presos españoles y
canarios de Caracas y La Guaira ordenada por Bolívar en febrero de 1814. En este último año la «guerra a
muerte» se recrudece, perdiéndose numerosas vidas de ambos bandos. Asimismo, es en este contexto de
destrucción en el que cae la Segunda República.
Entre los años 1815, 1816 y 1817 la «guerra a muerte» se extiende a la Nueva Granada, en donde el general
Pablo Morillo la ejecuta con la mayor crueldad. Entre las numerosas víctimas de Morillo se pueden destacar el
científico Francisco José de Caldas, los estadistas neogranadinos Camilo Torres y Manuel Rodríguez Torices
y los patriotas venezolanos Andrés Linares y Francisco José García de Hevia. A pesar de haber sido Bolívar
el autor del decreto de guerra sin cuartel, en varias ocasiones consideró la posibilidad de la derogación de
dicho instrumento. En tal sentido, en su proclama de Ocumare del 6 de julio de 1816, expresó que: «...La
guerra a muerte que nos han hecho nuestros enemigos cesará por nuestra parte: perdonamos a los que se
rindan, aunque sean españoles. Ningún español sufrirá la muerte fuera del campo de batalla»; lo cual
obviamente buscaba humanizar la contienda militar. Finalmente, el 26 de noviembre de 1820 se celebró en
Trujillo, en el mismo lugar donde se proclamó la «guerra a muerte», el Tratado de Regularización de la
Guerra, el cual derogaba el decreto de 1813.

Antecedentes de la proclamación de guerra a muerte

La guerra en Venezuela adquirió una violencia entre los años 1813 y 1814. Los realistas desde 1811 se
habían negado a reconocerles beligerancia a los patriotas.
Los realistas obtuvieron triunfos debido a que muchos pueblos se sublevaron contra los republicanos y
programaron su adhesión al Rey de España. En los campos de batalla, los soldados patriotas desertaban y se
pasaban al enemigo. Los jefes realistas aprovecharon a los pueblos ignorantes y el fanatismo en que lo
habían mantenido, para utilizarlo contra la causa independiente.
Era necesario crear conciencia nacional a favor de la independencia. El libertador comprendió y se dispuso a
tomar medidas para impedir que el enemigo siguiera teniendo éxito en su propósito de dividir al pueblo. Para
transformar la guerra civil en guerra internacional; para crear en el pueblo y en los soldados la imagen de la
patria libre que luchaba por la causa justa de su independencia nacional.
"Españoles y canarios, contad con la muerte, aún siendo indiferentes, si no obráis activamente en obsequio
de la libertad de la América; americanos, contad con la vida, aún cuando seáis culpables".
Esta proclama o decreto de guerra a muerte era, sin duda alguna, un recurso supremo para inculcar en los
venezolanos conciencia de patria; para separar los dos campos: España y Venezuela; para aislar a los
realistas del pueblo, que ciegamente venía siguiendo las promesas demagógicas de los caudillos españoles.
Los fines que perseguía El Libertador con esta proclama, eran, pues, de elevado patriotismo.
Además, El Libertador se proponía responder con la mayor energía al engaño y a las crueldades cometidas
por los realistas, y establecer con la mayor firmeza un gobierno republicano que actuara con mano firme, sin
el idealismo que había caracterizado a los dirigentes de la Primera República.

SIMÓN BOLÍVAR,
Brigadier de la Unión, General en Jefe del Ejercito del Norte,
Libertador de Venezuela
A sus conciudadanos
"Venezolanos: Un ejército de hermanos, enviado por el soberano Congreso de la Nueva Granada, ha venido
a libertaros, y ya lo tenéis en medio de vosotros, después de haber expulsado a los opresores de las
provincias de Mérida y Trujillo.
Nosotros somos enviados a destruir a los españoles, a proteger a los americanos, y a restablecer los
gobiernos republicanos que formaban la Confederación de Venezuela. Los Estados que cubren nuestras
armas, están regidos nuevamente por sus antiguas constituciones y magistrados, gozando plenamente de
su libertad e independencia; porque nuestra misión sólo se dirige a romper las cadenas de la servidumbre,
que agobian todavía a algunos de nuestros pueblos, sin pretender dar leyes, ni ejercer actos de dominio, a
que el derecho de la guerra podría autorizarnos.
Tocados de vuestros infortunios, no hemos podido ver con indiferencia las aflicciones que os hacían
experimentar los bárbaros españoles, que os han aniquilado con la rapiña, y os han destruido con la muerte;
que han violado los derechos sagrados de las gentes; que han infringido las capitulaciones y los tratados
más solemnes; y, en fin, han cometido todos los crímenes, reduciendo la República de Venezuela a la más
espantosa desolación. Así pues, la justicia exige la vindicta, y la necesidad nos obliga a tomarla. Que
desaparezcan para siempre del suelo colombiano los monstruos que lo infestan y han cubierto de sangre;
que su escarmiento sea igual a la enormidad de su perfidia, para lavar de este modo la mancha de nuestra
ignominia, y mostrar a las naciones del universo, que no se ofende impunemente a los hijos de América.
A pesar de nuestros justos resentimientos contra los inicuos españoles, nuestro magnánimo corazón se
digna, aún, abrirles por la ultima vez una vía a la conciliación y a la amistad; todavía se les invita a vivir
pacíficamente entre nosotros, si detestando sus crímenes, y convirtiéndose de buena fe, cooperan con
nosotros a la destrucción del gobierno intruso de España, y al restablecimiento de la República de
Venezuela.
Todo español que no conspire contra la tiranía en favor de la justa causa, por los medios más activos y
eficaces, será tenido por enemigo, y castigado como traidor a la patria y, por consecuencia, será
irremisiblemente pasado por las armas. Por el contrario, se concede un indulto general y absoluto a los que
pasen a nuestro ejército con sus armas o sin ellas; a los que presten sus auxilios a los buenos ciudadanos
que se están esforzando por sacudir el yugo de la tiranía. Se conservarán en sus empleos y destinos a los
oficiales de guerra, y magistrados civiles que proclamen el Gobierno de Venezuela, y se unan a nosotros; en
una palabra, los españoles que hagan señalados servicios al Estado, serán reputados y tratados como
americanos.
Y vosotros, americanos, que el error o la perfidia os ha extraviado de las sendas de la justicia, sabed que
vuestros hermanos os perdonan y lamentan sinceramente vuestros descarríos, en la íntima persuasión de
que vosotros no podéis ser culpables, y que sólo la ceguedad e ignorancia en que os han tenido hasta el
presente los autores de vuestros crímenes, han podido induciros a ellos. No temáis la espada que viene a
vengaros y a cortar los lazos ignominiosos con que os ligan a su suerte vuestros verdugos. Contad con una
inmunidad absoluta en vuestro honor, vida y propiedades; el solo título de americanos será vuestra garantía
y salvaguardia. Nuestras armas han venido a protegeros, y no se emplearán jamás contra uno solo de
nuestros hermanos.
Esta amnistía se extiende hasta a los mismos traidores que más recientemente hayan cometido actos de
felonía; y será tan religiosamente cumplida, que ninguna razón, causa, o pretexto será suficiente para
obligarnos a quebrantar nuestra oferta, por grandes y extraordinarios que sean los motivos que nos deis
pare excitar nuestra animadversión.
Españoles y Canarios, contad con la muerte, aun siendo indiferentes, si no obráis activamente en obsequio
de la libertad de América. Americanos, contad con la vida, aun cuando seáis culpables."

Cuartel General de Trujillo, 15 de junio de 1813. —3


Simón Bolívar.
Es copia.
Pedro Briceño Méndez,
Secretario

Contexto histórico que rodea al decreto de Guerra a Muerte de 1813.


La Primera República de Venezuela, se caracterizó no por ser una guerra de Independencia entre Criollos y
Peninsulares (españoles), sino más bien una guerra civil, donde el "enemigo" era interior, no exterior. Existía
gran resentimiento entre la mayoría parda, con menos capacidad económica, y la mayoría Criolla o
Mantuana, la llamada oligarquía, que gobernaba la ciudad desde los municipios, y además, eran
terratenientes. También se les conoce en la historia de Venezuela como los "Grandes Cacaos".
Bolívar, conocedor de esta realidad social, decide redactar un decreto, en el que se establezca claramente,
que la lucha es contra un enemigo exterior, no interior. Cuando Bolívar dice: españoles y Canarios, contad
con la muerte, aun siendo indiferentes, si no obráis activamente en obsequio de la libertad de América.
Americanos, contad con la vida, aun cuando seáis culpables." esta tratando de establecer una diferencia en
cuanto a asimilar la idea de que somos una nueva nación, ya que esta idea seguramente aún no había sido
entendida por muchos de los que lucharon del lado de Monteverde contra la Primera República (donde
Bolívar estuvo luchando con Francisco de Miranda, surgiendo diferencias, que al final separaron a ambos
próceres). De hecho, Bolívar incluso ofrecía la libertad de los esclavos que se unieran al bando antirealista,
idea que fue traicionada en la Constitución de 1830.
Y cuál fue el resultado? Pues la mayoría parda aún veía al rey de España como su protector, además de
que el resentimiento hacía la oligarquía criolla seguiría en pie, desapareciendo la segunda República
venezolana en 1814, con el triunfo de José Tomás Boves, en la batalla de Urica, en 1814.
Tras la publicación de su famoso “Manifiesto de Cartagena”, en el cual Bolívar señala las razones por las
cuales había caído el estado republicano, decide que esta vez actuaría de una manera diferente y no dejaría
que el desorden volviera a apoderarse del país.
Mientras Bolívar se encontraba en el camino de regreso desde la Nueva Granada, actualmente conocida
como Colombia, se enteró de los acontecimientos que se habían estado desarrollando durante su ausencia en
Venezuela. Los oficiales realistas se habían dirigido a diferentes ciudades de nuestro país, donde habían
matado a todos aquellos que simpatizaran con la causa republicana.
El Libertador, lleno de ira por las acciones de los realistas, y viéndose obligado a tomar medidas para tratar de
controlar la situación, decide entonces publicar el Decreto de Guerra a Muerte. En este documento habla
sobre la venida de su ejército para restablecer la república y sobre las medidas que había decidido tomaría el
gobierno. Bolívar le asegura la libertad a todos los americanos, sin importar si éstos habían conspirado contra
la causa patriota anteriormente. Por otra parte les advierte a todos los españoles y canarios que serían
pasados por las armas a menos que obraran activamente por la libertad de América.
Con las siguientes palabras, Simón Bolívar señala claramente lo que le pasaría a quienes no se unieran a la
causa patriota: “Españoles y Canarios, contad con la muerte, aún siendo indiferentes, si no obráis activamente
en obsequio de la libertad de América. Americanos, contad con la vida, aún cuando seáis culpables”(1).
Aunque la medida que tomó Bolívar al publicar este decreto fue muy drástica y tuvo graves consecuencias, no
podemos olvidar que en ese momento los realistas estaban haciendo cosas horribles contra los patriotas,
matándolos y persiguiéndolos; además por el hecho de encontrarnos en medio de una guerra el Libertador
necesitaba encontrar la manera de poner orden.
Desde mi punto de vista, los años que siguieron a la publicación del Decreto de Guerra a Muerte, fueron muy
difíciles para el país y aunque la acción de Bolívar fue, en cierta manera justificada, considero que él pudiera
haber tomado alguna acción menos cruel que de alguna manera no involucrara la muerte de tanta gente
inocente.
A pesar de no estar de acuerdo con el decreto en ese sentido, considero que a la larga el objetivo que quería
alcanzar Bolívar se obtuvo, pues tras largos años de lucha contra los realistas, obtuvimos la libertad.

La Campaña Admirable

Luego de la pérdida de la Primera República el 25 de julio de 1812, Simón Bolívar se embarcaría en el mes de
agosto a Curazao, prometiéndose volver a Venezuela para libertarla del oprobio español. Radicado desde el
14 de noviembre en Cartagena (actual Colombia), el joven caraqueño ofrecería sus servicios al ejército
neogranadino, al igual que otros patriotas venezolanos desterrados. Bolívar asume la Comandancia de
Barrancas y, para el 8 de enero de 1813, expulsa a las fuerzas realistas del Puerto de Ocaña y de toda la
región del bajo Magdalena. Sin detenerse, conduce su tropa hacia la ciudad de San José de Cúcuta,
liberándola el 28 de febrero de 1813. Al llegar estas noticias al Congreso Unido el 1° de marzo, Camilo Torres
lo nombra brigadier de los Ejércitos de la Unión y ciudadano de la Nueva Granada. Entrando a San Antonio
del Táchira, a comienzos de marzo de 1813, Bolívar mostraría todas las intenciones de seguir avanzando y
reconquistar Venezuela. Luego de esperar dos meses la autorización del gobierno neogranadino para aquella
empresa, obtiene de aquel el permiso de expedicionar solamente hasta la ciudad tachirense de La Grita. El 14
de mayo daría comienzo a lo que se conoce como Campaña Admirable, partiendo desde la población
tachirense hasta la ciudad de Mérida, contando con una tropa de 600 soldados. Nueve días después y
despejado de enemigos el camino, Bolívar entra victorioso a aquella ciudad andina el 23 de mayo, allí le es
otorgado el título de el Libertador. El general en jefe del Ejército Libertador ocupa Trujillo a principios de junio,
ciudad donde dictó el Decreto de Guerra a Muerte el 15 del mismo mes. De Trujillo, libera seguidamente a
Guanare, Barinas y San Carlos en tan sólo 20 días. Con la ruta de los llanos centrales libre de fuerzas
enemigas y tras ocupar Valencia, el Libertador entra victorioso en Caracas el 6 de agosto de 1813.

Con el nombre de la "Campaña Admirable" se conoce a la acción militar que el brigadier Simón


Bolívar emprendió desde San José de Cúcuta el 14 de mayo de 1813, con el objeto de liberar a Venezuela del
poder español, luego de la pérdida de la Primera República. Contaba Bolívar con una fuerza de 800 hombres,
organizados en 2 columnas o divisiones: la de vanguardia, bajo el mando del teniente coronel Atanasio
Girardot, con el apoyo del mayor Luciano D'Elhuyar como segundo comandante; mientras que la retaguardia
estaba a cargo del coronel José Felix Ribas como comandante, José Tejada jefe de artillería y del
mayor Rafael Urdaneta como mayor general. Asimismo, en sustitución del coronel Manuel del Castillo y Rada
había sido nombrado segundo comandante del Ejército el brigadier Joaquín Ricaurte, quien no obstante no
acompañó al comienzo a Bolívar en la campaña; incorporándose al año siguiente. Pedro Briceño Méndez era
el secretario general y como edecanes, fueron nombrados Juan José Pulido, Fermín Ribón y José Jugo.
El plan inicial de Bolívar para la ejecución de dicha campaña, consistía en el despliegue sobre el territorio
venezolano de una ofensiva en 2 direcciones: una columna dirigida por Ribas debía seguir por San Cristóbal-
Selva de San Camilo-Barinas y después de libertar esta provincia se reuniría con el grueso de las tropas en
Guanare o en Araure; esta columna tenía además la misión de conseguir en la provincia de Barinas, ganado y
dinero para las fuerzas patriotas. La columna de Bolívar, marcharía por la dirección de San Cristóbal-La Grita-
Mérida-Trujillo. Para apoyar esta estrategia operacional, el jefe republicano había adelantado al coronel Ribas
hasta San Cristóbalcon tropas de Cundinamarca y algunas de Cartagena. No obstante, Bolívar tuvo que
desechar este plan, pues sólo tenía autorización de llevar sus fuerzas hasta Trujillo. En virtud de lo anterior, el
17 de mayo llegó Bolívar a La Grita con el grueso de sus tropas y el 19 continuó hacia Mérida, a donde arribó
el 23 de mayo; encontrándose allí la vanguardia y las tropas que le habían precedido. En esta ciudad recibió
Bolívar importante ayuda en dinero y suministros de todo género y la incorporación de 500 hombres. Durante
su permanencia en Mérida, Bolívar se puso al tanto de la ubicación y magnitud de las fuerzas realistas que
operaban en Barinas y Trujillo, comprendiendo que debía actuar con rapidez a fin de evitar la reunión y
fortalecimiento de las fuerzas españolas. En consecuencia, ordenó a la vanguardia comandada por Atanasio
Girardot que llevase a cabo la limpieza de la provincia de Trujillo. Para esto contaba Girardot con los
batallones 2°, 4° y 5° de la Unión y algunos efectivos de artillería y caballería; que en total sumaban 488
combatientes.
La descubierta dirigida por el capitán Hermógenes Maza, la avanzada por el capitán José María Ricaurte,
avanzaron en la dirección Mendoza-Betijoque, en tanto que el capitán Manuel Gorgorza, con un pequeño
destacamento, marchó hacia Niquitao, por la vía de Las Piedras. En síntesis, todas estas fuerzas tenían como
objetivo fundamental, reunirse en Trujillo con las tropas de Girardot. Paralelo al despliegue de la vanguardia,
la retaguardia, bajo el mando del coronel José Felix Ribas emprendía su marcha desde San
Cristóbal reagrupando a todos los soldados que habían quedado dispersos o retardados. El 3 de junio, en la
tarde, los capitanes D'Elhuyar y Maza dispersaron una fuerza de 50 hombres y luego desalojaron al coronel
Ramón Correa de la posición de Ponomesa (Edo Trujillo) en la cual el jefe realista tenía 200 hombres. Este
triunfo permitió aGirardot la ocupación de Trujillo el 9 de junio, donde Bolívar dictó días después, el 15 de junio
de 1813, el célebre Decreto de Guerra a Muerte.
Posteriormente, ante el repliegue del jefe realista Manuel Cañas a Carache, Girardot se dirigió hacia esa
localidad con sus fuerzas el 17 de junio, en horas de la tarde. En horas de la noche, el jefe realista abandonó
la línea que ocupaba y llevó sus hombres a las alturas de Agua de Obispos. El 18 de junio se produjo el
enfrentamiento entre las fuerzas de Girardot y Cañas, resultando el triunfo del jefe patriota y eliminándose las
tropas que podían entorpecer el avance de Bolívar, quien había llegado a la ciudad de Trujillo el 14 de junio,
desde donde ordenó Ribas que marchase lo más rápidamente de Mérida en dirección de Boconó, con el
objeto de facilitar el factor sorpresa. Mientras tanto a Girardot se le ordenó a replegarse sobre Trujillo.
El 28 de junio salió Bolívar de Trujillo en dirección a Barinas, donde el jefe realista Antonio Tíscar tenía una
fuerza cercana a los 2000 hombres. El 1 de julio hizo su entrada en Guanare, ciudad que había sido
abandonada por los relistas al tener conocimiento del avance de las fuerzas de Bolívar. Días después, el 6 de
julio ocupó Bolívar la ciudad de Barinas sin ningún tipo de resistencia, ya que Tíscar se había retirado a
Guayana, por la vía de Nutrias. A la vez que Bolívar efectuaba su movimiento sobre Barinas, el coronel Ribas
derrotaba al coronel José Martí en la batalla de Niquitao, el 2 de julio; evitando que dicho jefe realista quien
había salido de Barinas a Niquitao, atacara la retaguardia de Bolívar. Liberada la provincia de Barinas de las
fuerzas relistas, Bolívar ordenó el regreso a ésta de Girardot, quien había sido enviado en persecución de
Tíscar, para luego enviarlo a Guanare. Por su parte, Ribas tuvo la misión de marchar sobre El Tocuyo y
Barquisimeto, con el objeto de enfrentar un contingente realista que avanzaba en esa dirección. El 18 de julio
tomó posesión de El Tocuyo y 2 días después siguió a Barquisimeto, donde derrotó el 22 de julio al coronel
José Oberto, en la llanura de Los Horcones. El 26 de julio llegó Bolívar a San Carlos procedente de Guanare.
El coronel realista Julián Izquierdo comandante de las fuerzas que guarnecían esta ciudad, al tener
conocimiento del avance de Bolívar y de la derrota de Oberto en Los Horcones, decidió replegar sus tropas
hacia Valencia, lo que sin embargo fue impedido por una contraorden de Domingo Monteverde, quien le
ordenó regresar a San Carlos.
El 29 de julio Bolívar fue informado de la presencia del coronel Izquierdo en Tinaquillo, ante lo cual se puso
inmediatamente en marcha hacia ese lugar. En la mañana del 31 de julio se encontró con la vanguardia
enemiga en la sabana de Pegones. Ante esta situación, Izquierdo ejecutó un movimiento retrógrado y se
replegó en la sabana de Taguanes. Hacia este lugar enfiló Bolívar su ataque con su infantería al frente y la
caballería en el ala derecha, con la cual hizo un desbordamiento del flanco izquierdo realista. En una
maniobra desesperada que buscaba neutralizar el ataque de las fuerzas de Bolívar, Izquierdo emprendió la
retirada, pero durante la ejecución de la misma fue derrotado por los republicanos. La victoria de Taguanes
dejó expedito a Bolívar el avance hacia Valencia, pues Monteverde se había retirado de Puerto Cabello al
enterarse en la sabana de Carabobo, del fracaso de Izquierdo. El 2 de agosto entró el brigadier Bolívar a
Valencia, mientras que el coronel Ribas había quedado en San Carlos como comandante de dicha plaza. Días
después siguió Bolívar hacia Caracas, hallándose el día 4 en La Victoria, donde aceptó la capitulación que le
propuso el gobierno español. Finalmente, el 6 de agosto de 1813 entró triunfalmente a Caracas el pequeño
ejército mandado por el brigadier Simón Bolívar; había culminado exitosamente la Campaña Admirable y
comenzado la gloria para Bolívar.

Segunda República

Se inicia desde   la liberación de la ciudad de cumana y finalización de la campaña de oriente con dos
protagonistas quienes fueron Santiago Mariño y Simón Bolívar y el antagonista quien era José Tomas Boves
en el año de 1813 y hasta 1814. Donde la Guerra a Muerte alcanzó su apogeo. Uno de los episodios mas
notables en esta segunda república es la formación en territorio venezolano liberado de dos gobiernos en
caracas comandados por Simón Bolívar el otro en cumana por Santiago Mariño y con ellos diferentes batallas
y protagonistas  de gran importancia que tenían como objetivo la liberación de los pueblos, el sitio de puerto
cabello que servía de núcleo a realistas, bloqueado por mar y tierra por fuerzas de Bolívar, aquí es donde se
le da el título de Libertador  a Bolívar por el pueblo, el fusilamiento de los prisioneros españoles y canarios de
Caracas y La Guaira, la insurrección a favor de la causa realista y las numerosas acciones de guerra en la
región centro-occidental y luego en la oriental como Bárbula, Las Trincheras, Mosquitero, Mesas de
Barquisimeto, Vigirima, Araure, San Marcos, La Victoria, San Mateo, Bocachica, Ocumare del Tuy, sitio de
Valencia por los realistas, El Arao, primera batalla de Carabobo, La Puerta y Finalmente, con las batallas de
Urica y Maturín, ganadas por los realistas en diciembre de 1814. Esta Segunda República no resistió el
choque de masas populares que seguían a los realistas y que eran dirigidas por José Tomas Boves. Boves y
sus hombres toman Cumaná en lo que más que una batalla fue una carnicería en la que se pasó por cuchillo
a la población entera en el año de 1814..
El 11 de Diciembre de 1814 y en la cual fueron derrotados los venezolanos, es considerada el fin de la
Segunda República.

Batallas 1813 - 1814

El período de 1813 a 1815 es el más movido en cuanto batallas, 39. De éstas 25 la ganan los patriotas y 14
los realistas. En Oriente comienza la rebelión con los comandantes Mariño, Piar y Bermúdez. Simón Bolívar
invade desde la Nueva Granada y realiza la famosa "Campaña Admirable" que culmina con la toma de
Caracas y su nombramiento como "Libertador".

De pronto, sin embargo aparece el terrible José Tomás Boves, quien a partir de septiembre de 1813 comienza
a ganar batallas. Entre Boves, Ceballos y Morales (quien por cierto se llamaba Tomás José) acaban con todos
los ejércitos patriotas, reconquistando toda Venezuela y poniendo fin a la 2da. República.

Batalla Fecha Comandante Soldados Comandante Soldados G Comentarios


Patriota Patriotas Realista Realistas
7 Güiria ?/1/1813 Santiago 1.50 ? 200 P Comienza la
Mariño rebelión de
Oriente
8 Irapa ?/2/1813 José Fco. 400 F. Cerveriz 500 P
Bermudez
9 Maturín ?/3/1813 Manuel Piar 300 Antonio 1.500 P
Zuazola
10 Maturín ?/3/1813 Manuel Piar 500 De la Hoz 1.000 P
11 Cúcuta ?/4/1813 Simón 600 Correa 1.000 P Comienzo de
Bolivar la Campaña
Admirable
12 Maturín 25/5/1813 Manuel Piar 1.200 Domingo 2.000 P
Monteverde
13 Mérida 1/6/1813 Simón 800 ??? ??? P
Bolivar
14 Pampatar 3/6/1813 José R. 350 Pascual 500 P
Guevara Martínez
15 Cumaná 19/8/1813 Santiago 2.000 F. 1.500 P
Mariño Antoñanzas
16 Niquitao 2/7/1813 José Félix 1.000 José Martí 1.000 P
Ribas
17 Los 22/7/1813 José Félix 500 A. Oberto 1.000 P
Horcones Ribas
(Quíbor)
18 Taguanes 31/7/1813 Simón ? Izquierdo ? P
Bolívar
19 Los Pegones ?/7/1813 Rafael 1.500 R. Izquierdo 2.000 P
(Tinaquillo) Urdaneta
20 Caño Sta. ?/9/1813 Tomás 1.500 José T. Boves 2.500 R
Catalina Montilla
(Guárico)
21 Cerritos 13/9/1813 A. García de 1.200 Reyes Vargas 1.200 P
Blancos Sena
22 Bárbula 30/9/1813 Simón 2.000 Domingo 2.500 P Muerte de A.
Bolívar Monteverde Girardot
23 Las 3/10/1813 Simón ? Domingo ? P
Trincheras Bolívar Monteverde
24 Yaritagua ?/10/1813 A. García de 1.500 F. Ceballos 13.00 R
Sena
25 Mosquiteros 14/10/1813 Campo Elías 1.300 José T. Boves 2.500 P
(Guárico)
26 Tierrita 10/11/1813 Simón 2.000 F. Ceballos 2.200 R
Blanca Bolívar
(Bmto)
27 Vigirima 25/11/1813 José F. Ribas 2.000 A. Salomón 2.300 P
28 Araure 5/12/1813 Simón 2.500 F. Ceballos 3.500 P
Bolívar
29 La Puerta 3/2/1814 Campo Elías 3.000 José T. Boves 4.000 R
30 La Victoria 12/2/1814 José Félix 2.000 José T. Boves 5.000 P
Ribas
31 San Mateo 27/2/1814 Simón 1.800 José T. Boves 7.000 R
Bolívar
32 Ocumare del 16/3/1814 J. B. 2.200 F. Rosete 3.000 R
Tuy Arismendi
33 Ocumare del 20/3/1814 José Félix 2.000 F. Rosete 3.000 R
Tuy Ribas
34 San Mateo 24/3/1814 Simón 2.000 José T. Boves 7.000 P Muerte de
Bolívar Ricaurte
35 Bocachica 31/3/1814 Santiago 3.500 José T. Boves 7.000 P
Mariño
36 Valencia 3/4/1814 Rafael 280 A. Ceballos 4.000 P 1er sitio de
Urdaneta Valencia
37 Sabana de 20/4/1814 Santiago 3.000 A. Ceballos 4.000 R
Arao Mariño
38 Carabobo 28/5/1814 Simón 5.000 Juan M. 6.000 P 1ra. batalla
Bolívar Cajigal de Carabobo
39 La Puerta ?/6/1814 S. Bolívar/S. 2.300 José T. Boves 8.000 R 2da. batalla
Mariño de la Puerta,
completa
derrota
40 Valencia 19/6/1814 Juan P. 2.400 José T. Boves 6.000 R
Escalona
41 Aragua de ?/8/1814 S. Bolívar/J. 3.000 Tomás 6.000 R Muere "El
Barcelona Bermúdez Morales tigre
encaramao"
F. Carvajal
42 Maturín 12/9/1814 José Fco. 2.500 Tomás 4.000 P
Bermúdez Morales
43 Los 5/10/1814 José Fco. 2.000 José T. Boves 4.500 R
Magueyes Bermúdez
44 Urica 5/12/1814 J. F. Ribas/J. 4.200 J. T. Boves/T. 7.000 R Muerte de
F. Bermúdez Morales Boves
45 Maturín 11/12/1814 J. F. Ribas/J. 2.500 Tomás 5.000 R Destrucción
F. Bermúdez Morales total del
ejército vzno.
Fin de la 2da.
República

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