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Plutón
Plutón
Su gran distancia al Sol y a la Tierra, unida a su reducido tamaño, impide que brille por encima
de la magnitud 13,8 en sus mejores momentos (perihelio orbital y oposición), por lo cual solo
puede ser apreciado con telescopios a partir de los 200 mm de abertura, fotográficamente o
con cámara CCD. Incluso en sus mejores momentos aparece como astro puntual de aspecto
estelar, amarillento, sin rasgos distintivos (diámetro aparente inferior a 0,1 segundos de arco).
No fue hasta el año 2015 cuando la sonda espacial New Horizons pasó sobre el planeta y
permitió apreciar por primera vez de forma nítida su aspecto real.
Tras un intenso debate, y con la propuesta de los astrónomos uruguayos Julio Ángel Fernández
y Gonzalo Tancredi ante la Asamblea General de la Unión Astronómica Internacional en Praga,
República Checa, se decidió por unanimidad reclasificar a Plutón como planeta enano,6
requiriendo que un planeta debe tener dominancia orbital. Se propuso su clasificación como
planeta en el borrador de resolución, pero desapareció de la resolución final, aprobada por la
Asamblea General de la UAI. Desde el 7 de septiembre de 2006 tiene el número 134340,
otorgado por el Centro de Planetas Menores.
Índice
1 Historia
1.1 Descubrimiento
1.2 Nombre
1.4.1 Controversia
2 Origen
3 Órbita
4 Características físicas
4.1 Rotación
4.2 Atmósfera
5 Satélites
5.1 Caronte
6 Exploración
7 Plutón en la ficción
8 Galería de imágenes
8.1 Videos
9 Véase también
10 Referencias
10.1 Citas
10.2 Bibliografía
11 Enlaces externos
Historia
Descubrimiento
Fotografía de Percival Lowell, iniciador del programa que dio como resultado el
descubrimiento de Plutón.
En la década de los cuarenta del siglo XIX, Urbain Le Verrier empleó la mecánica newtoniana
para predecir la posición de Neptuno tras analizar las perturbaciones en la órbita de Urano.7
Posteriores observaciones de Neptuno, a finales del siglo XIX, llevaron a los astrónomos a
conjeturar que otro planeta, además de Neptuno, perturbaba la órbita de Urano.
En 1906, Percival Lowell —un bostoniano adinerado que había fundado en 1894 el
observatorio Lowell en Flagstaff, Arizona— inició un intenso programa de búsqueda del
noveno planeta, al que llamó Planeta X.8 Para 1909, él y William H. Pickering habían sugerido
varias coordenadas celestes donde podría encontrarse dicho planeta.9 Lowell y los miembros
de su observatorio llevaron adelante la búsqueda, sin obtener resultados hasta la muerte de
aquel en 1916. Sin embargo, y sin saberlo, Lowell lo había fotografiado en sendas placas del 19
de marzo y 7 de abril de 1915, donde aparecía como un objeto débil.10 Hay otras catorce
observaciones precovery conocidas, siendo la más antigua la realizada en el observatorio
Yerkes el 20 de agosto de 1909.11
No obstante, la búsqueda del Planeta X se detuvo debido a una disputa legal de diez años con
la viuda de Percival, Constance Lowell, la cual quería que una parte del legado que su marido
dejó al observatorio fuese para ella.12 En 1929, el nuevo director del observatorio, Vesto
Melvin Slipher, encargó la búsqueda a Clyde William Tombaugh, un joven de Kansas de 23
años que lo dejó impresionado con sus dibujos astronómicos.13
La tarea de Tombaugh consistió en la toma de pares de fotografías del cielo nocturno para, a
continuación, examinar cada par y determinar si algún objeto había cambiado de posición. Usó
para ello un microscopio de parpadeo, aparato que creaba una ilusión de movimiento al
desplazar rápidamente dos fotografías sobre sí mismas y permitía así detectar cambios en la
posición de los objetos o en la apariencia de las imágenes. El 18 de febrero de 1930, tras casi
un año de búsqueda, encontró un objeto que se había movido en las placas tomadas el 23 y 29
de enero de ese año. Una fotografía de menor calidad tomada el 21 ayudó a confirmar el
movimiento.14 Después de que el observatorio obtuviera fotografías adicionales de
confirmación, la noticia del descubrimiento se telegrafió al observatorio del Harvard College el
13 de marzo de 1930.9
Nombre
El nuevo planeta fue denominado Plutón en referencia al dios romano del inframundo.
El descubrimiento fue noticia en todo el mundo. El observatorio Lowell, que tenía el derecho a
nombrar el nuevo objeto, recibió más de 1000 sugerencias que iban desde «Atlas» hasta
«Zymal». Tombaugh urgió a Slipher para que propusiera un nombre antes de que alguien se
adelantara y lo hiciera.15 Constance Lowell sugirió primero «Zeus»; después «Percival»; y
finalmente «Constance». Ninguna fue tomada en consideración.16
El nombre «Plutón» —del dios romano del inframundo— fue propuesto por Venetia Burney,
una estudiante de Oxford interesada en la mitología clásica, durante una conversación con su
abuelo Falconer Madan, miembro de la Biblioteca Bodleiana. Este pasó el nombre al
astrónomo Herbert Hall Turner quien, a su vez, envió un cable a sus colegas estadounidenses
con la propuesta.17
Para elegir el nombre definitivo del objeto, a cada miembro del observatorio Lowell se le pidió
que votara por una de tres propuestas: «Minerva», que ya era el nombre de un asteroide;
«Cronos», que tenía mala fama por haber sido propuesto por el impopular astrónomo Thomas
Jefferson Jackson See; y «Plutón». Este último recibió finalmente todos los votos.18 El nombre
fue anunciado el 1 de mayo de 1930 y, tras conocerlo, Madan dio a Venetia cinco libras de
recompensa.17 En la elección final del nombre ayudó que las dos primeras letras coincidieran
con las iniciales de Percival Lowell. El símbolo astronómico es una representación de dichas
letras: ♇, Unicode U+2647.19
El nombre caló muy pronto en la cultura popular. En 1930, Walt Disney se inspiró al parecer en
él cuando presentó a Pluto —que lleva el nombre en inglés de Plutón—, compañero canino de
Mickey Mouse, aunque el animador de Disney Ben Sharpsteen no fue capaz de confirmar la
veracidad de esto.20 En 1941, Glenn T. Seaborg llamó «plutonio» a un nuevo elemento
químico a partir del nombre del planeta. Seaborg seguía la reciente tradición de denominar a
los elementos descubiertos por el nombre de los nuevos planetas del sistema solar. Así, el
uranio se nombró a partir de Urano y el neptunio de Neptuno.21 La mayoría de los idiomas
emplean formas propias del nombre «Plutón».22 Hōei Nojiri sugirió para el japonés la
traducción «Meiōsei» (冥王星, «Estrella del rey del inframundo»),23 que fue tomada también
por el chino y el vietnamita.24
Naturaleza de Plutón
Primera imagen de Plutón, tomada en julio de 1994 por el Hubble, en la que se aprecian
detalles superficiales.
Una vez descubierto, el débil brillo de Plutón y la imposibilidad de resolver su disco arrojaron
dudas sobre la idea de que fuese el Planeta X de Lowell.8 Además, el valor de la masa se revisó
a lo largo del resto del siglo.25 Las primeras estimaciones se hicieron tomando las supuestas
perturbaciones en Urano y Neptuno. En 1931, se calculó que Plutón tenía una masa similar a la
terrestre.26 Más adelante, en 1948, una nueva estimación la redujo hasta igualarla con la de
Marte.27 En 1975, Dale Cruikshank, Carl Pilcher y David Morrison, de la Universidad de Hawái,
calcularon por primera vez su albedo y encontraron que coincidía con el del hielo de metano.
Esto significaba que Plutón tenía que ser bastante luminoso para su tamaño y que no podría
tener más del 1% de la masa de la Tierra.28 El albedo de Plutón ha resultado ser de 1,4 a 1,9
veces el terrestre.29
Reclasificación
Controversia
Representación gráfica de varios objetos transneptunianos entre los que se encuentra Éride,
con un diámetro apenas menor que el de Plutón.
Desde 1992 se han descubierto numerosos cuerpos en la misma región de Plutón del sistema
solar, lo que lo muestra como parte de la población de objetos del llamado cinturón de Kuiper.
Esto condujo a que su condición de planeta fuese controvertida y a que muchos se
cuestionasen si debía ser o no considerado junto a esa población. Algunos directores de
museos y planetarios contribuyeron a la controversia omitiendo a Plutón de los modelos del
sistema solar de sus instituciones. El planetario Hayden, por ejemplo, volvió a abrir sus puertas
—en 2000, tras una renovación— con un modelo de solo ocho planetas. Casi un año después,
era titular en algunos periódicos.34
Debido a que se iban descubriendo objetos cuyos tamaños estaban cada vez más cerca del de
Plutón, se argumentó que debería ser reclasificado como uno de los objetos del cinturón de
Kuiper —de la misma forma que Ceres, Palas, Juno y Vesta perdieron la categoría de planeta
tras el descubrimiento de muchos asteroides—. En 1999 el astrónomo Brian Marsden, por
entonces director del Centro de Planetas Menores, llegó a proponer incluirlo en el catálogo de
cuerpos menores asignándole el número (10000).35 Finalmente, la idea no fue aceptada por la
Unión Astronómica Internacional y fue el asteroide 1951 SY el que recibió ese número.
Posteriormente se le dio el nombre de Miriosto.36
Planeta enano
El debate llegó a su culmen el 24 de agosto de 2006 con una resolución de la UAI en la que
establecía la definición oficial de planeta. De acuerdo con ella, hay tres condiciones para que
un objeto sea considerado planeta:
El objeto debe ser lo bastante masivo como para que su gravedad lo haya redondeado. Más
concretamente, su propia gravedad debe llevarlo al equilibrio hidrostático.
Plutón no cumple la tercera condición debido a que su masa es solo 0,07 veces la masa de los
otros objetos de su órbita —en comparación, la masa de la Tierra es 1,7 millones de veces la
de su región orbital—,41 por lo que la UAI decidió además que los cuerpos que cumplen solo
los dos primeros criterios pasarían a denominarse «planetas enanos».43 Así, el 13 de
septiembre de 2006 se clasificó a Ceres, Plutón y Éride en la nueva categoría.44
Varios investigadores que respaldaban las dos posiciones del debate, se reunieron del 14 al 16
de agosto de 2008 en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins para
dar una conferencia que incluía conversaciones cara a cara sobre la definición actual de
planeta de la UAI.55 Bajo el título «El Gran Debate Planetario»,56 la conferencia publicó
posteriormente un comunicado de prensa en el que indicaba que los científicos no pudieron
llegar a un acuerdo respecto a la definición de planeta.57 Antes de la conferencia, el 11 de
junio de 2008, la UAI anunció en un comunicado de prensa que el término «plutoide» se usaría
para referirse a Plutón y otros objetos transneptunianos —cuyos semiejes mayores son
superiores al de Neptuno— que tuviesen una masa suficiente para conseguir la forma
esférica.58
Origen