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1. INTRODUCCIÓN: CONCEPTOS BÁSICOS ......................................................................................................... 3
2. ELASTICIDAD PRECIO DE LA DEMANDA ......................................................................................................... 4
NO OLVIDES QUE ............................................................................................................................................. 11
BIBLIOGRAFÍA................................................................................................................................................... 11

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Según la ley de la demanda, sabemos que, cuando el precio aumenta, la cantidad demandada
disminuye.

Pero ¿qué tanto disminuye? O, en otras palabras, ¿qué tanto se estira?

¿Disminuye un poquito?

¿Disminuye regular?

¿Disminuye bastante?

Para responder a esta pregunta, ¡necesitamos comprender la elasticidad!

Es importante que un productor conozca la elasticidad de la demanda del bien que produce.

Esta es una herramienta fundamental al momento de fijar el precio del producto.

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Es un coeficiente que mide qué tan sensible es la cantidad demandada de un bien ante los cambios
en su precio; o, dicho de otro modo, en qué porcentaje cambia la cantidad demandada del bien “X”
frente al cambio porcentual en su precio.

𝐸𝑃𝑋 es la elasticidad-precio de la demanda de un bien “X” respecto al precio del bien “X”; es decir,
respecto a su propio precio.

Esto, expresado algebraicamente, es el cociente de dos expresiones:

En el numerador, la diferencia de las cantidades dividida entre la suma de las cantidades.

En el denominador, la diferencia de los precios entre la suma de los precios.

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Veamos este ejemplo:

En el punto A: si el precio es 7, la cantidad

demandada será 20.

En el punto B: si el precio es 5, la cantidad

demandada será 25.

Para calcular la elasticidad-precio entre A y B o entre B y A (es lo mismo), utilizamos la fórmula ya

descrita.

Al reemplazar los valores, obtenemos como resultado -0,67.

Este coeficiente es la elasticidad-precio de la demanda; siempre es un número negativo que expresa

la relación inversa entre el precio y la cantidad demandada.

Una vez calculado, ya para fines prácticos, se toma como valor absoluto.

 Si el precio aumenta en 1 %, la cantidad demandada disminuirá en 0.67%.

 Si el precio disminuye en 10 %, la cantidad demandada aumentará en 6.7%.

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La demanda es perfectamente inelástica cuando
el coeficiente de elasticidad-precio es igual a
cero.
Si esto ocurre, ¡no existe sensibilidad! Es decir,
el precio podría aumentar o disminuir, pero la
cantidad demandada no variará en absoluto:
será insensible al precio.
Cuando esto ocurre, la demanda tiene una
gráfica vertical, que expresa que los cambios en
el precio no afectan a la cantidad demandada.

Este es el caso de la sal y la insulina.

La demanda es relativamente inelástica cuando

el coeficiente de elasticidad-precio es menor a
uno.
Si esto ocurre, existe poca sensibilidad; quiere
decir que la variación porcentual de la cantidad
demandada será menor que la del precio.
Cuando esto ocurre, la demanda tiene una
gráfica con pendiente negativa, que expresa que
los cambios en el precio afectan, en menor
proporción, a la cantidad demandada.

Este comportamiento corresponde a los productos básicos, como el arroz, el azúcar, la leche, entre
otros.

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La demanda tiene elasticidad-precio unitaria
cuando el coeficiente de elasticidad es igual a uno.
Esto ocurre cuando la variación porcentual en la
cantidad demandada es igual a la del precio.

La demanda es relativamente elástica cuando el

coeficiente de elasticidad-precio es mayor a uno.
Si esto ocurre, existe mucha sensibilidad: la
variación porcentual de la cantidad demandada
será mayor que la del precio.
Cuando esto ocurre, la demanda tiene una gráfica
con pendiente negativa, que expresa que los
cambios en el precio afectan en mayor proporción
a la cantidad demandada.

Este es el caso de productos como los perfumes, las joyas, los chocolates, entre otros.

La demanda es perfectamente elástica cuando el

coeficiente de elasticidad-precio es igual a infinito.

Si esto ocurre, la sensibilidad será extrema: si el

precio aumenta o disminuye, aunque sea en una
cantidad mínima (podríamos decir en cero), la
cantidad demandada cambiará drásticamente…

¡Y nadie comprará nada!

Cuando esto ocurre, la demanda tiene una gráfica

horizontal.

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 ▪ Los bienes cuya elasticidad-precio es mayor a uno, tienen sustitutos adecuados y son elásticos.

▪ Los bienes cuya elasticidad precio es menor a uno, no tienen sustitutos adecuados y son
inelásticos.

▪ Bienes sustitutos:

• cuanto más sustitutos existan, el producto será más elástico;

• cuanto menos existan, será más inelástico.

▪ Proporción del ingreso gastado en el bien:

• cuando esta proporción sea mayor, el bien será elástico;

• cuando sea menor, el bien será inelástico.

▪ Tiempo transcurrido desde que cambió el precio:

• en el corto plazo, el producto tiende a ser inelástico;

• en el largo plazo, tiende a ser elástico.

La primera figura corresponde a una sala de cine y el cine es una diversión que
tiene muchos sustitutos; por lo tanto, es más elástico.

La segunda figura representa al combustible, que no tiene sustitutos

adecuados; en consecuencia, es inelástico.

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Un vendedor podría afirmar lo siguiente: “Si bajo el precio de mi producto, de acuerdo con la ley de la
demanda, los consumidores comprarán más; al comprar más, gastarán más y, por lo tanto, mi ingreso
total aumentará”.
¿Es correcta esta afirmación? Tal vez sí; tal vez no…
Para tener la certeza, debemos relacionarla con la elasticidad-precio de la demanda, y eso es lo que
haremos a continuación.

En el caso de los productos elásticos, ¿cómo se relacionan la variación del precio y el gasto del
consumidor?

Este gráfico permite analizar esta relación:

▪ Si el precio es P1, la cantidad demandada será Q1; entonces, el gasto total de los consumidores
será P1 por Q1 (es decir, el área roja).

▪ Si el precio es P2, la cantidad demandada será Q2; entonces, el gasto total de los consumidores
será P2 por Q2 (es decir, el área verde).

Al comparar las áreas, resulta obvio que el área verde es mayor que el área roja.
Concluimos, por ende, que, si se trata de un producto elástico, al disminuir el precio del producto,
aumentará el gasto total de los consumidores; o que, por el contrario, si aumenta el precio del
producto, disminuirá el gasto total de los consumidores.
En resumen, en el caso de los productos elásticos, es conveniente para el productor que el precio de
mercado disminuya.

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En el caso de los productos inelásticos, ¿cómo se relacionan la variación del precio y el gasto del
consumidor?

Veamos este gráfico, que nos permite observar esta relación:

▪ Si el precio es P1, la cantidad demandada será Q1; entonces, el gasto total de los consumidores
será P1 por Q1 (es decir, el área roja).

▪ Si el precio es P2, la cantidad demandada será Q2; entonces, el gasto total de los consumidores
será P2 por Q2 (es decir, el área verde).

Al comparar las áreas, comprobaremos que el área verde es menor que el área roja.

Concluimos, en consecuencia, que, si se trata de un producto inelástico, al disminuir el precio del

producto, disminuirá también el gasto total de los consumidores; o que, si aumenta el precio del
producto, crecerá el gasto total de los consumidores.

Resumiendo, en el caso de los productos inelásticos, al productor le conviene que el precio de

mercado aumente.

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 La elasticidad-precio de la demanda siempre tiene el signo negativo, pero esto solo refleja la
relación inversa entre el precio y la cantidad; para fines prácticos, se toma como valor absoluto.

Los productos elásticos tienen un coeficiente de elasticidad mayor a uno y cuentan con sustitutos
adecuados.

Los productos inelásticos tienen un coeficiente de elasticidad menor a uno y no son fáciles de
sustituir.

 PARKIN, Michael (2014) Economía. México: Pearson Educación.

 MANKIW, Gregory (2009), Economía. México: Cencage Learning.
 KRUGMAN, Paul (2013) Fundamentos de Economía. Barcelona: Reverté.

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