El Moncayo es una montaña ubicada en noreste de la península, la cual forma
parte del sistema ibérico ubicándose en las coordenadas 41°47′17″N 1°50′18″O. Al encontrarse en el interior de la denominada cordillera ibérica el Moncayo alcanza una altitud de 2.315 m esto la destaca como una de las cumbres más elevadas en este sistema, ubicado entre los límites de dos provincias, estas son Soria y Zaragoza en España. El monte del Moncayo presenta una relación singular entre su formación y la transformación que modifica de algún modo y al mismo tiempo, las cadenas montañosas en la superficie circundante, son estas fuerzas, tanto internas como externas, las que permiten dar un orden a los periodos bajo los cuales se estructuró esta Orogenia Alpina. Instruyéndonos con el modelo de Patton para explicar las distintas fases del medio físico, llegamos a ubicar en primera instancia el movimiento cuesta abajo del agua y las partículas meteorizadas como un factor fundamental en el periodo mesozoico ubicando una fosa entre las formaciones de la Meseta Central y el Macizo del Ebro. Este movimiento del agua que traslada sedimentos y permite la acumulación de estos en la zona, que se da incluso con la presencia de las subidas del mar en la superficie, da paso a los compuestos que de forma progresiva se compactan para dar paso a la comprensión y tensión de la superficie terrestre. En un inicio los sedimentos trasladados en la era Mesozoica fueron compuestos como la grava, arenas y barros que conglomeraron grandes deltas e igual se transformaron en resistentes estratos de silíceos dando origen a su vez a rocas características del macizo. Mas tarde en la era del triásico inferior y mas adelante en el jurásico, y antes del completo retiro del mar en el área, las duras compactaciones de arenas y limos, permitieron que areniscas y lutitas sentaran bases para esta montaña. Siendo una serie de charcas de poco fondo, se gestaron disueltos sulfatos y carbonatos de calcio, que dieron como resultado de la evaporación precipitaciones de estos mismos compuestos (yeso [sulfato calcio] y dolomías [carbonato cálcico con magnesio]). A medida que el plegamiento alpino produce movimientos tectónicos importantes en la comprensión de la corteza terrestre, trajo consigo el hundimiento del macizo del Ebro y los plegamiento mesozoicos de la cuenca ibérica, es así como cada uno de los elementos es relevante en el armazón del Moncayo; dentro de los materiales que finalmente sientan las bases del macizo se encuentra en la cumbres y laderas arenisca roja (Bundersanstein) y el Silúrico (constituido de pizarras silíceas y micáferas asociadas a cuarcitas) en el Triásico; y en el Jurásico se asientan las bases constituidas por calizas que por degradación dan paso a margas. A partir de la formación geológica de una de las cumbres con más altitud en este sistema ibérico su edafología surge entre los procesos biológicos y de formación de los suelos que dependen del calor y la humedad, e incluso la evaporación y condensación luego de la consolidación de la cumbre, las condiciones climáticas e incluso atmosféricas permiten las distinción de varios tipos de suelos en el Moncayo, dentro de los suelos se encuentran los Podsoles, que se producen en ambientes fríos y con abundantes precipitaciones, e incluso sobre materiales ácidos y cubierta forestal. Siendo un suelo no frecuente en la región este macizo reúne las condiciones en ciertos sectores de las vertientes que posee, para generar los procesos de descomposición de la materia orgánica sin embargo estos se ralentizan debido al ambiente frio, de igual forma existe riqueza orgánica en este medio ácido. Por otro lado los suelos minerales que poseen intensos procesos de incorporación de materia orgánica se presentan en algunas zonas de la montaña donde no hay pendientes muy pronunciadas y existe estabilidad geomorfológica, estos son los suelos Phaeozems y Kastanozems bajo distintos pero no muy alejados procesos de acumulación de material este tipo de suelo gracias a la humificación y la melanización presentan un proceso de incorporación de materia orgánica que es favorecido a partir de las condiciones climáticas del sistema ibérico, es así como el clima estepario frio (BSk) siendo característico de la zona, pautea y vincula las características edafológicas y las condiciones bajo las cuales la vegetación surgirá en la superficie de la montaña Moncayo. La transformación de la energía solar en calor influye en la temperatura que adecua el clima a poseer una humedad mesotérmica que se manifiesta debido a las precipitaciones y la temperatura anual, la que se traduce en la evapotranspiración que sugiere una pequeña falta de agua en el verano (al menos por la zona del Agramonte de Moncayo). Anterior a la formación de comunidades vegetales en diversos ambientes del Moncayo podemos vincular la existencia de variadas singularidades tanto en relación de las manifestaciones del clima, la exposición, las formas del relieve e incluso la variación de precipitaciones en ciertas zonas del monte que producen distintos ambientes apropósito de su dimensión, aislamiento y contraste topográfico frente a otras llanuras y cumbres. Se da el caso en que el Moncayo proporciona condiciones únicas en Europa, los cambios de vegetación en relación a la altura son diversos, en este punto confluyen especie propias de Europa mediterránea y boreal.