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IN FISOLOGIA ARTICULAR ROTACION EN LAS ARTICULACION! Y ATLOIDOODONTOIDE Se acaba de exponer la articulacién atloido- axoidea en un corte de perfil, una vista superior con el atlas en conjunto «Fig. 11) y en primer plano (Fig. 12) permite entender su estructura y funcionamiento durante la rotacion. La articulacién atloidoodontoidea es una 1ro- coide con dos superficies cilindrieas eneajadas la una sobre la otra’ ~ una superficie cilindrica maciza, ta apoti- sis edlontoides (1), euyya forma no es total mente cilindrica, de modo que se puede adaptar a un segundo, grado de libertad. los movimientos de flexoextensidn. Esta apdfisis odontoides presenta en sus caras terior (4) y posterior (11) send articulares: carillas, Ja cavidad que recibe este cilindro macizo es un cilindro hueco que rodea totalmen- te la apolisis odontoides y que esti for- mado por delante por el arco anterior del atlas (2), y. a los lados. por las masay luterates det atiay quc comportan en su cara interna un tubéreulo muy pronuncia do (7 y 7) en el que se fija un potente ligamento que se extiende transversal- mente por deiris de ka odontoides: el figa- mento transverse (6). Por lo tanto, la odontoides esta incrustada et el interior de un anillo osteoligamentoso, con el que coniacta a través de dos articulaciones dife- rentes: — por delante, ama articulacién de tipo sino~ vial (5) con una cavidad articular y una capsula sinovial con dos plieguees, wn a ta izquienda (8) y otro a lat derecha (9). Pone en coniacto ln carilla anterior de la odon- toides (4) y la carilla posterior del arco anterior del atlas BY: por detrés, una articulacién carente de edpsula, situada en el interior de un teji- do celuloadiposo (10) que lena el espa 10 entre el anillo osteoligamentoso y la odontoides, Pone en cor cto dos super- ficies fibrocartilaginosas, una en la cara posterior de la odontoides (11) y la otra ATLOIDOAXOIDEAS en la cara anterior del ligamento trans- verso (12) Durante cl movimiento de rotacién. hacia Ja izquierda por ejemplo, (Fig. 12). ka odontoides (1) permanece fija y el anillo osteoligamenioso, formado por el atlas y el ligamento transverso gia en sentido inverso al kas agujas de un reloj alrededor de un ceniro que corresponde all eje de la odontoides (seialado en la figura con una lana), Ia cApsula articular se distiende a izquierda (8) y se tensa a la derecha (9), Simultai nte, existe un desplazumiento en las dos articulaciones atloidoaxoideas derecta c izquierda, mecanicamente unidas: en la rotaciGn, de ta izquierda hacia la derecha (Fig. 13) la mast lateral izquienda del atlas avanza, mientras que kt masa lateral derecha retrocede; durante la rota- 14), cién de la derecha hacia la izquierda (F sucede a ka inversa. Pero como las superficies superiores del axis son convexas de delante ards (Fig. 16). el trayee- to descrito por fas masas laterales del atlas no es rectilineo en un plano horizontal, sino curvilineo de comvexidad superior: cuando el atlas gira en torno al eje vertical W, sus masas laterales deseri- ben el trayecto XX’ 0 YY Si se representa tinicamente el circulo que contiene Ja curva de ta carilla inferior de las masas laterales del atlas (Fig. 15), se puede cons- 1 su posicién media correspond Ja rotacién neutra, el cfrculo de centro O ocuy Gn mis elevada en la superficie superior del axis, Cuando se desplaza havia adelante, este circulo “desciende” por la vertiente anterior de la superficie superior del axis de 2.a 3 mm, mientras que Su centro solo desciende la mitad (€/2) durante el desplazamiento hacia ats se produce el mismo fenémeno. nte a Por to tanto, durante su roweisn sobre el axis, el atlas se desplaza verticalmente hacia abajo de 2a 3 mm, de modo que su movimiento es helicoidal: ahora bien, por una parte, ef paso de esta hélice es muy corto, y, por otra, existe tuna hélice en la rotacién hacia la derecha y otra hélice de paso inverso en la rotacidn hacist La inquierda. e/2 3. TRONCO Y RAQUIS ISI 182 FISIOLOGIA ARTICULAR, LAS SUPERFICIES DE LA ARTICULACION OCCIPITOATLOIDEA, in realidad, existen dos ariiculaciones ocei- pitoutloideas, mecinicameme unidas, pares y simétrieas, que relacionan Lay carillas superiores de fas masas laterales del atlas con las superficies de los céndilos accipitales. En una vista superior del a las (Fig. 17), las. carillas atloideas son ovaladas de eje mayor obli- cuo hacia delante y hacia dentro, que convergen en un punto N, localizado en la linea media, algo por delante del arco anterior del atlas. A veces, estin retraidas en su parte media e incluso, pue den estar cada una separadas en dos carillas dis- tintas. Cubiertas de cartilages, son céncavas en ambos sentidos y la curva es casi id en un sentido come en otro. Por To tanto, se puede considerar que estin comprendidas en la super} cle de una esfera (Fig. 19) cuyo centro O se sit ria por encima del plano de las superficies arti lares y se proyectaria en Ia interseceién del eje de simettia y de la linea que une ef borde posterior de las dos carillas articulares. Por otra parte, el punto Q representa el centro de la curva de las. citadas carillay articulares en cl plano secante nica t horizontal; el punto Pes el centro de la curva de as mismas en el plano secante vertical; la figura muestra entonces 1a esfera, supuestarmente (rans dose ex mente sobre las supe jores de kis masas laterales posterior de las articulaciones as (Fig. 18), con! de las superticies cond les esta situ: da en la misma superficie esférica cuyo centro se halla en el interior del erineo, por encima del ijero occipital. La articulacién occipitoatloidea puede entonces considerarse como iia enartto: sis, es decir, como una articulacion de superficie esférica (Fi que la curva 19) con tres ejes y, por lo tanto, con tres grades de libertad: — rotacién axial en worno a un eje vertical QO: ~ flexoextensién en tomo a un efe tansver- sail que pasa por el centto O; inelinacion lateral roposterior PO. en torno a un eje anie~ 3. TRONCO Y RAQUIS 183 [84 FISIOLOGIA ARTICULAR LA ROTACION LAS ARTICU Cuando el oceipital gira sobre el atlas (Fig. 20), participa en un movimiento general de rota- cidn del atlas sobre el axis, que se efectia en tomo al eje vertical que pasa por el ce odontoides. Sin embargo, esta rotacién no es un fenémeno sencillo, ya que hace intervenir la ten- siGn de los ligaments, y en particular. del ligamento occipitoodonivideo lateral (1): en este esquema en el que se han seccionado el ocei- pital (A) y las masas laterales del atlas (B) mediante un corte verticofrontal, se ha represen- tado una rotacién hacia la izquierda de occipital sobre el atlas. Este movimiento se traduce por el deslizamiento hacia adelante del e6ndilo derecho del occipital sobre la masa lateral derecha del atlas (flecha 1), pero, simulténeamente, el lig mento occipitoondontoideo lateral (LL) se enrolla alrededor de 1a odontoides y se tensa, Esta ten- sion va ha desplazar hacia la icquierda al cOndi- lo derecho del occipital (fecha 2). ro de Ta a tension Por lo tanto, la rotaci6n hacia la izquierda se al mismo tiempo, de un desplaza- miento hacia la izquierda de 2a 3 mm y de una inclinacién del occipital hacia la derecha. Por consiguiente, no existe una rotaciOn pura, sino una rotacién asociada @ una traslacion y a una inclinacién. ACIONES OCCIPITOATLOIDEAS Ahora bien, se sabe a través de la cinematiea que una rotacion asociada y una traslacin equiva- le a oira rotacién con el mismo dngulo, pero con distinto centro y fécil de construir. En una vista superior (Fig. 21) se ha representado ef atlas de color gris claro, el axis, en gris oscuro, se ve a tra- vés de agujero occipital y, sobre la carillas laterales del atlas (rayas horizontales) las carillas de los c¢ dilos occipitales supuestamente transparentes (rayas oblicuas). Durante los movimientos de rota~ cién hacia la izquierda, en un éngulo d en torno al centro de la odontoides O, se puede observar un desplazamiento lateral h: izquierda del occi- pital de 2 a 3 mm, siguiendo el vector V, Resulta entonces facil de constiuir el centro real de la rotacién en un punta P, situado ligeramente a la derecha del plano de simetria y en la linea que une cel borde posterior de las superficies de las masas laterales del atlas, Por lo tanto, el centro real de la rolacién occipitoatloidea se desplaza entre dos puntos extremos, el punto P en el caso de ki rota ion hacia la izquierda y su simétrico P” en el caso de la rotacién hacia la derecha. De pase, cabe recalcar el interés de este dispositive que hace retroceder hacia el centro del agujero occipital (trazo grueso) el centro real de 1a rotacién, de tal modo, que el eje real del movimiento de rotaci6n corresponde al eje anatémico del bulbo raquideo. 3. TRONCO Y RAQUIS 185 186 FISIOLOGIA ARTICULAR LA INCLINACION LATERAL Y LA FLEXOEXTENSION EN LA ARTICULACION OCCIPITOATLOIDEA Durante la inelinacién lateral (Fig. 22), un, corte verticofrontal del occipital, det atlas, del ani y de la tercera cervical muestra que no exis- te ningiin deyplacamiento en ta articulucion atloi doasvidea La iclinacin se efeetia inicamente entre el axis y ka tercera vértebra cervival, por una parle, y. por otra, entre ef occipital y el atlas Entre estos dos iiltimos existe poca amplitud que se traduce por un deslizamiento de los e6ndilos occipitales hacia la derecha en la inclinacion hacia la izquierda y viceversa. En este caso se ha representado una inelinaciGn hacia la izquierda wil occipital izquierdo Se uproxima a la odontoides pero sin contactar limitado por occipitoatloideas y sobre todo, por el ligamento occipitoodontoideo lateral derecho, La ine! al entre el occi- pital y la tercera cervical es de 8°, que se reparten en S entre el axis y C., y 3° entre el occipital y el alas, que muestra como el con ella, ya que el movimiento est la tensidn de la cxipsu Los movimientos de flexoextensién del ital sobre el atlas se llevan a cabo median- te cl deslizamiento de los condilos occipitales sobre lay masas laterales del atlas. Durante la flevién (Fig. 23), los e6ndilos les retroceden sobre las masas faterales del atlas: simuttineamente, se puede observar como la concha occipital se aleja del arco poste- rior del atlas y. como esie movimiento se acom- axoidea, lambign se ve como el arco posterior del atlas se aleja del arco posterior del axis. La flexién esti limitada por la puesta en tensi6n de las cipsulas y de los ligamentos posteriores (membrana occipi toatloidea y el ligamento cervieal posterior} siempre de una flexidn en la atloid: Durante la extension (Fig, 24), los e6ndilos occipitales se deslizan hacia dekinte sobre las masas laterales del atlas. Simultdineamente, la concha occipital se dirige hacia el arco posterior del atlas y como tambign existe una extensién en la atloidoaxoides aproxima al arco posterior del axis. La extensién se ve limitada por el contacto de estos tres ele- mentos seos; durante los movimientos de extet sibn forzada, el arco posterior del atlas apresado como en un cascanueces puede quebrarse entre el occipital y el arco posterior del axis. el arco posterior del atlas se La amplitud total de la flexoextensién en la oceipitoatloidea es de 15° 3. TRONCO ¥ RAQUIS 187 188 FISIOLOGIA ARTICULAR LOS LIGAMENTOS DEL RAQUIS SUBOCCIPITAL, Los ligamentos del raguis suboce’pital son muy mune rosos y potentes (Fig. 25: conte sagial; los mimens: de referencia son comunes hasta ls figura 33 inclusive) En primer lugar se yan a emplazar las elementos ‘éseos: de arriba abajo, el corte de ta apofisis basilar del ‘oxcipital (b); corte del arco anterior (e) del atlas y de su arco posterior (1; el corte sagital de 1a odonteides (2) pro Tongando hacia arriba el cuerpo del axis (k). En la odontoi des, la cavilla articular anterior ¢h) en contacto con la carilla articular posterior ()) del arco anterior del atlas; la earila “ticular posterior (i), El resto del axis esta representado por Su espinosa (n) y el corte de su Kimina iaquierds (0). Por debajo del axis, la tervera cervieal con la seccién sagital de su cuerpo vertebral (q), su apdfisisespinosa (s) y la seccién parasagital de su kémina iaquierds ¢n). En perspectiva, ta fsa cerebelosa por encima del agujero oceipital y una parte dl e KM sena EE interés de esta demostracion radic permite verificar los dos casos eatremos: nique I. si el eje UU" es vertical, ef dngulo a es nulo, ¥ por lo tame, cos a= 1, de lo que se deduce que (g e=tg bs de modo que lo que signifiea que cuando el eje es verti cal, toda rotacién en tomo a este eje deter- mina una rotacidn pura sin ninguna incl: nacién; 1 la inversa, si el ee UU" pudiera ser hori: tal (esto es imposible), sen a=1, de lo que se deduce que 1g d=1g b y d=b; lo que significa que toda rotacién en torno al eje UU’ horizontal una iaclinacion pura. No obstante, existe un caso intermedio de inclinacién a 45° del eje UU" sobre la vertical; en este caso, se demuestra de que el ulo & de inclinacién es igu naulo © de rotaci6n, Volviendo a la figura 52. se puede comprobar que cuando la vertebra gira sobre la vertebra sub- yacente, un ingulo KOL arrastra con ella el eje V,, por el que se articula con la vértebra suprayacen- le, Este eje gira entonces en V: y, saliendo del plano sagital, pasa a ser oblicuo en relacion a lox tres ejes de referencia, lo que explica que a partir de este momento aparezea un nuevo componente de extensidn. Se podrian calcular los componentes sucesivos en los seis segmentos: pero esto reque- riria el uso de un ordenador, ya que las Formulas comportarian tangentes de tangentes de tangentes hasta el sexto graxlo, Por Io tanto, pi estos movimientos es mucho mis sencillo iweuir aun modelo mecsnico 208 FISIOLOGIA ARTICULAR MODELO MECANICO DEL RAQU! Partiendo de esas concepciones mecanicas y de la divisién funcional entre raquis cervical supe- rior suboccipital y raquis cervical inferior, se ha realizado un modelo meciinico (Fig. 54) que permi- te poner de manifesto los distintos tipos de funcio- namiento de las articulaciones del raquis cervical En el raquis cervical inferior, es decir, entre C. yD, sélo se han efectuado movimientos mix- tos de inclinacién-rotacidn, alrededor de ees oblicuos (véase pag. 210), respetando su oblicui- dad anatémica y su disposicién en relacién a los cuerpos vertebrales que, en este modelo, no pi sentan ninguna articulacién discal entre sf; en cambio, dichos ejes constituyen por sf solos los. frenos del movimiento de inclinacién-rotacién. La eliminacién deliberada de los movimientos de flexoextensidn en esta parte del modelo permite que los movimientos de inclinacién-rota rezean de manera particularmente explicita. El raquis cervical suboccipital se ha lleva- do a cabo segtin los equivalentes mecanicas; de hecho, se puede distinguir: ~ un eje vertical que corresponde a la odon- toides y que permite, ademis de los movi- mientos de rotacion, algunos movimien- tos de flexoextensiGn de la meseta eliptica {que representa al atlas, merced a un juego mecéinico introducido voluntariamente entre él y el cuerpo de C:; ~ un conjunto de tres ejes ortogonales de poca amplitud que corresponden a la arti- culacién occipitoatloidea: CERVICAL * un eje vertical situado en el centro de la meseta del atlas; + dos cies perpendiculares entre si y en relacién al precedente, esquema, que forman_ un representan, por una parte, el eje de inclinacion lateral de la occipitoatloi- dea, y, por otra, el eje de flexoextension cn esta misma articulacion. Resumiendo, el raquis suboccipital repre- senta una cadena articular de tres ejes y con tres gradoy de libertad ayegurando la unidn entre C. y el occipital, representado en este modelo por una plaquita horizontal, unida a los tres planos principales de referencia de la cabeza — el plano sagital, a trazos claros — el plano frontal, en blanco; — y el plano transversal, a trazos oscuros. Este modelo permite entender cémo los dos segmentos del raquis se completan funcionalmen- te; asi, en el esquema se puede ver que el movi- miento de inclinacin-rotacion a la derecha del raquis cervical inferior se transforma en el raquis suboceipital en un movimiento de inclinacién pu- ra, gracias a la eliminacién de los componemes no deseados. (1) May dificil de realizar sogin ef método de: maguetas reconables, se esti valorando edtarlo en pl 210 FISIOLOGIA ARTICULAR LOS MOVIMIENTOS DE INCLINACION-ROTACION EN EL MODELO DEL RAQUIS CERVICAL Si ahora se considera el raquis cervical inje- rior con detalte (Fig. 55), se puede apreciar que, funcionalmente, a cada cuerpo vertebral le corres- ponde un arco posterior representado por una tablilla inclinada hacia abajo y hacia atris y pro- vista de una calza en forma de cufia. Si se com- para esta figura a la figura 50, se puede constatar que el papel de estas calzas es el de reconstituir la convergencia del plano de las superficies articula- por lo tanto, realizar la lordosis cervical. En ida uno de estos planos de superficie articular se implanta perpendicularmente el eje oblicuo, materializada en este caso por un tornillo, y que permite Ia aticulacién con la vértebra supraya- cente. De este modo, esta vértebra suprayacente s6lo se puede desplazar con respecto a la que esta situada por encima en los movimientos de rota- cién alrededor de este eje oblicuo, tal como se han explicado en la Fig. 50. Si se aplica entonces tuna rotacién sucesiva en tomo a los seis ejes de este modelo, se puede ver como adquiere, a la vez, un movimiento de inclinacién y de rotacion (Fig. 56), cuyos 50° corresponden a ta amplitud de rotacion del raquis cervical inferior y también un ligero componente de extensién que apenas es. visible en estos esquemas. Asimismo, nétese 1a forma de la cara supe- rior de C. que representa finncionalmente 1a arti- culacién atloidoaxoidea: — la forma convexa de delante atrds que corresponde a las carillas superiores del axis y permite movimientos de flexoex- tensidn del atlas (sin representar aqui); ~ eleje vertical que rebasa y representa fun- ionalmente la odontoides y permite movimientos de rotacién, 212 FISIOLOGIN ARTICULAR COMPARACIONES ENTRE EL MODELO Y EL RAQUIS CERVICAL DURANTE, LOS MOVIMIENTOS DE INCLINACION-ROTACION Si se mira el modelo de frente (Fig. 57) durante un movimiento de rotacién pura, se puede constatar que el movimiento de inclina- Cién-rotacién univoco del raquis cervical infer realiza una inclinaci6n total de 25°. Si, adem, se toma una radiografia, estric- tamente de frente, del raquis cervical en el trans- curso de un movimiento de rotacién pura de la cabeza (Fig. 58), se halla de nuevo este movi- miento de inclinacion que se traduce a nivel del axis en una inclinacién exactamente igual a 25° sobre la vertical. De la comparacién de estos dos COMPENSACIONES E! Esta vista detallada del modelo del raquis cervical (Fig. 59) en posicién de rotacién pura muestra perfectamente la constitucién mecanica del raquis cervical superior, asi como los compo- nentes compensadores que éste introduce para alizar el mavimiento de rotacién pura. De arriba abajo se pueden observar: ~ la meseta horizontal (A) que representa la base del occipital; — en su parte inferior, dos soportes fronta- les para el eje anteroposterior (4) de inclinaci6n de 1a articulaci6n occipitoa- tloidea; ~ este eje (4) se articula con la pieza inter- media (C), atravesada por un eje transver- documentos se puede entonces deducir que en el raquis cervical existen, como ya demostraron Fick y Weber a finales del siglo XIX, movimien- tos de inclinacién siempre asociados a la rota- cidn y que, por otra parte, como manifestaron mis recientemente Penning y Brugger, los movi- mientos de inclinaci6n del raquis cervical inferior los compensa el raquis cervical suboccipital para conseguir la rotacion pura y, viceversa, los movi- mientos del raquis cervical inferior los compensa el raquis cervical suboccipital para conseguir una inclinacién pura (véase Fig. 54). EL RAQUIS SUBOCCIPITAL sal (3), que representa el eje de flexoex- tensién de la occipitoatloidea; — este tiltimo (3) esti sostenido por dos flan- cos verticales (D’) unidos a una meseta horizontal (D) que gira sobre la meseta (E) gracias a un eje vertical (2) que repre- sentael eje de rotacién de la occipitoatloi- dea (oculito por C); — la meseta E, equivalente funcional del atlas, esta articulada con el axis (F) por un eje ver- tical (1) que representa a la odontoides y esta materializado en este caso porun tomni- Ho sin ajustar totalmente, lo que permite, ademis de los movimientos de rotacién, movimientos de flexoextensién sobre la cara superior convexa del axis F. 214 FISIOLOGIA ARTICULAR LAS COMPENSACIONES EN EL RAQUIS SUBOCCIPITAL (continua Resumiendo, pese a que anatémicamente n0 se iguen los diferentes elementos de este raquis suboccipital, se pueden localizar perfectamente los equivatentes fucionates: ~ el axis F con su odontoides: eje 1; — el atlas E, que se articula con la odontoides y 1a cara superior del axis: — el occipital A, que corona un conjunta funcio- nal de tres ejes perpendiculares entre si, los de 1a articula Inidoaxoidea: eje de rotacién 2), eje de flexoextensién (3) y el eje de incl nacién (4). Estos dos titimos forman entre si tun sistema de cardain Una vez descritos tos elementos del raquis suboccipital, se procede a exponer su funcionamien- to: para obtener la rotacién pura, una ve7 el raquis cervical inferior haya efectuado su movimiento de inclinaci6n-rotacién, la cadena suboceipital, con tres ejes y tres grados de libertad, debe realizar tres com- ponentes: tun componente de roracién hacia la derecha, en tomo alos ejes I y 2, que prolonga la del raquis cervical inferior y se realiza en gran parte en la articulaciGn atloidoaxoidea (dng Jo 4) y en menor medida en la articulacién occipitoatloidea (énguto Sy; ~ una extension en tomo al eje 3 de un angulo¢ que compensa la flexiOn que apare causa de la rotacién pura hacia In derect sobre el eje | ~ ¥. por tiltimo, un ligero egmponente de con- irainclinacién de Angulo @ en tomo al ¢je 4; de hecho, la mayor parte de la inclinacién del raquis cervical inferior ya ve hia neuiralizado gracias a la extensién en torno al eje 3. Anatémicamente, los movimientos se cfectian cen el raquis suboccipital gracias a tx accién de los pequenios misculos suboccipitales (véase pig. 234) ‘que se podrian denominar miseulos “nonio”, ya que su funcion principal es 1a de ajustar de forma prectsa los componentes compensatorios a fin de neuttalizar los movimientos no deseados y hacer que aparezca en su estado puro el componente deseado. Ast, existe una notable analogia entre los mtisculos “nonio” y los Cohetes “nonio” que, debido a su accion calculada con exactitud, permiten controlar la pasicién de un ve culo espacial en relacién & puntos fijos de referencia Durante el movimiento de rotacién pura de la cabeza hacia la derecha (Fig, 59), a rotacién adicional del raquis suboccipital hacia la derecha est asegurada por li accion de los miisculos oblicua mayor, recto anterior del lado derecho, y por el oblicuo menor izquierdo. Todos ellos son, a la vez, extensores, por lo tanto, realizan simultineamente la extensién descrita anteriormente. La contrainclinacién hacia la izquierda se obliene a través del oblicuo menor, del recio lateral icquierdo y del recto anterior menor izquierdo, La accién flexora de estos dos tiltimos miisculos esti cons- tituida por el componente extensor de Jos precedentes. Durante el movimiento de inelinacién pura de la cabeza hacia la derecha (Fig. 54), el componente de contrarrotacién hacia la izquienda se obtiene median- te la contraccién de los musculos eblicuo mayor, rec~ tos posteriores mayor y menor del lado isquierdo, la inclinacién adicional hacia la derecha por la ace de los mtisculos rectos posteriores mayor y menor del lado derecho y por et oblicuo menor derecho. Pot tili- mo, el componente de extension de estos. misculos, como la extensi6n en el raquis cervical inferior y la que aparecerfa por la contrarrotacién pura hacia la inquierda estén compuestas por los misculo flexores: recto anterior y recto anterior menor derechos, Y recto lateral derecho. De este modo, este modelo mecinico permite comprender la relacién anatGmica y funcional entre: ~ por una parte, el raquis cervical inferior, dota- do de movimiento de enrollamiento 0 de tor: sidn. que asccia inclinacién, rotacién, exten- sin, y esti provisto de miisculos largos, obli- cues hacia abajo, hacia fuera y hacia atras, tales como el esplenio del cuetlo, dorsal largo, trans- verso del cuello, sactolumbar, angular del om6- plato, y. en menor grado, los escalenos: todos estos miisculos estan dispuestos de forma idé- nea para realizar este movimiento univoco; — por otra parte, el raquis cervical superior, que constituye una cadena articular de tres ejes ¥ tres grados de libertad, activada, entre OU por la accién de los pequefios muisculos suboccipitales, misculos “nonio”. ya que su contraccidn antaz6nica-sinérgica logra, elit nando en las articulaciones suboccipitales los Componentes no deseados procedentes del raquis cervieal inferior, que apar mente el movimiento deseado. 3, TRONCO Y RAQUIS 215 216 FISIOLOGIA ARTICULAR AMPLITUD ARTICULAR EN EL RAQUIS CERVICAL La comparacién de radiografias de perfil durante los movimientos extremos de flexoexten- sién (Fig. 60) permite conocer: = la amplitud total de flexoextensién del raquis cervical inferior (RCI = de 100 a 110), — la amplitud total de flexoextensién det conjunto del raquis cervical en relaci6n al plano masticador (RT = 130°); — una simple resta permite deducir La ampli- tud de flexoextensién en el raquis suboc- cipital (SO = 20 a 30°) Asimismo, en radiografias de frente toma- das con inclinacién de cabeza (Fig. 61), se puede apreciar la amplitud total de inclinacién, que es, aproximadamente, de unos 45°. demas, trazando la Ifnea que une las dos apdfisis transversas del atlas, por una parte, y, por otra, la nea que une la base de las apSfisis mastoides, se haya, aproxi- madamente, una amplitud de 8° en Ia inclinacién lateral del raquis suboccipital; es decir, tinica- mente en la articulacién occipitoatloidea, La amplitud de rotacién es més dificil de apreciar, sobre todo, en lo que concierne a las rotaciones elementales (Fig. 62). La rotacién total de la cabeza es de 80 a 90° a cada lado, En lo rela- cionado a esta amplitud, se atribuyen 12° a la articulaci6n occipitoatloidea y otros tantos a ta articulaci6n atloidoaxoidea. 218 FISIOLOGIA ARTICULAR EQUILIBRIO DE LA CABEZA SOBRE EL RAQUIS CERVICAL, La cabeza esti en equilibrio (Fig. 63) cuan- do los ojos estén en la horizontal. En esta posi- cién, el plano masticador (PM), representado pot un cartén apretado entre los dientes, también es horizontal, axi como el plano auricutonasal (AN). que pasa por el borde superior del conduc to auditivo externo y por la espina nasal. La cabeza en conjunto constituye una palan- ca de interapoyo: €l puto de apoyo O se sitia en los céndi- los occip la resistencia G se Meva a cabo ejerciendo el peso de la cabeza contra su centro de gnavedad localizado c va de la silla turcas ~ la potencia F esté constituida por la fuer- za de los misculos de la nuca que, en todo momento, deben contrarrestar el peso de cabeza que tiende a hacerla caer hacia delante, Esta si dad de la c j6n anterior del centro de grave- tabera explica a rel: los mtisculos posteriores de ka nuca respect a los miisculos flexores del cuello, De hecho. los extensores luchan contra la gravedad, mientras que ene caso de los flexores la misma los refuer iva potencia de za, Esto explica también que existe un tono per- manente de los miisculos de la nuca que se opone a la caida de la cabeza hacia adelante: cuando, en el transcurso del suefo en sedestacion, esie tone i: cl ment6n cae sobre el estermén, EL raquis cervical no es rectilineo: presenta una curva céneava hacia atras 0 lordosis cervical que se caracteriza: ~ por sw cuerda (C), recta, que se extiende desde los cOndilos occipitales a las escota- duras posteroinferiores de la séptima vér- tebra cervical: ~ y por su flecha (0), perpendicular, tazada desde la escotadura posteroinferior de li: cuaria cervical a la cuerda. Cuanto mayor sea la lordosis cervical, mis se acentuard la flecha: sin embargo, ésta sera nul si el raquis cervical es reetilineo, e incluso puede ser negativa cuando éste, en flexién, sea céncavo hacia delante. En cambio, la cuerda es, normal- mente, més conta que fa longitud desarrollada por el raquis cervical, y slo es igual a ésta longitud desarrollada en un tinico caso: cuando el raquis cervical es rectilineo, He aqui un indice cervical similar al indice de Delmas, del que ya se hablé en el primer capitulo (pag. 22). 220 FISIOLOGIA ARTICULAR CONS’ E]_mtisculo estemocleidomastoideo deberia denominarse por ser mas correcto esternocleido- occipitomastoideo (ECOM), ya que esti consti- tuido por cuatro pore 75) una poreion profunda, el cleidomastoideo (Cm), que se extinde desde el tercio interno de la clavicula a ta apétisis mas- toides; tres porciones superficiales que, cuando se las separa, dibujan una N, pero que, en realidad, estin peg: a parte inferomedial, cerca del extre- mo medial de la clavicula, en la que se forma la fosita de Sédilot a través de la cual se transparent el cleidomastoideo. Estas tres porciones sor: * la cleidooccipital (Co), que recubre ka mayor parte del cleidomastoideo y Cuyas inserciones se extienden por detris, alejadas, sobre ta linea curva superior del occipital; *+ La esternooccipital (Eoy; + y la esternomastoidea (Em); ambos se nsertan mediante un tendén comin en el borde superior del manubrio esternal. EL esternooccipital se une a las inser ciones del cleidooccipital en la linea curva superior, en cuanto al esterno- aistoideo, se fija en el borde superior y borde anterior de la apofisis mastoides. En conjunto, el ECOM forma una ancha banda muscular, que se extiende sobre la cara anterolateral del cuello, oblicua hacia abajo y ICION ¥ ACCION DEL MUSCULO. TERNOCLE! DOMASTOID! delanie, cuya parte més prominente esta constituida, hacia abajo y hacia delante, por el tendén comuin al esternooccipital y al esterno- mastoideo. Estos dos misculos forman un cuerpo camoso fusiforme perfectamente visible bajo la Piel. Los dos tendones derecho e izquierdo limi- tan entre si el hueco 0 fosita supraesternal. La contraccién unilateral (Fig. 63) del COM, determina un triple movimiento que aso- cia la rotacién de la cabeza hacia el lado opuesto su contraceién, la inclinacién hacia el lado de su contraccién y la extension, Este movimiento diri- ge la mirada hacia arriba y hacia el lado opuesto culo. Esta actitud de la cabeza es caracteristica de la torticolis congénita, que. con frecuencia, se debe al acortamiento de uno de los ECOM. Mis adelante, se expondriin los efectos de la contraccion simultdnea de los dos ECOM, que dependen del estado de contraccién del resto de los miisculos del raquis cervieal: ~ si el raquis cervical permanece flexible, esta contraccién bilateral conlleva_ una hiperlordosis del raquis cervical con una extension de la cabeza y flexion del mismo sobre el raquis dorsal (véase Fig, 02 si, por el contrario, el raquis cervical se torna rigido y rectilineo debido a la con- traccidn de los misculos prevertebrales, ka contraccién simultiinea de los ECOM con- eva la flexion del raquis cervical sobre el raquis dorval y una flexién de la cabeza hacia adelanté (véase Fig. 97), A TRONCOY RAQUIS 221 202 FISIOLOGIA ARTICULAR LOS MUSCULOS PREVERTEBRALES: EL LARGO DEL CUELLO. EI misculo largo del cuello (le) es el mas profuundo de los misculos prevertebrales (Fig, 66) y se extiende por la cara anterior del raquis cer cal, desde el arco anterior del atlas hasta la terce- ra vértebra dorsal. Los anatomistas distinguen tres porciones: — una porcién oblicua descendente, que se origina en el tubéreulo anterior del atlas y se inserta a través de tres 0 cua- tro digitaciones en el tubérculo anterior de la apéfisis transversa de la tercera, cuarta, quinta y sexta vértebras cervica- les; = una porcién oblicua ascendente que se origina en el cuerpo de la segunda y terce- ra vértebras dorsales para insertarse mediante tres © cuatso digitaciones en el tubérculo anterior de la ap6fisis transversa de la cuarta, quinta, sexta y séptima vérte~ bras cervicales; = y, por thtimo, una porcién longitudinal localizada por dentro de las dos preceden- tes y algo hacia fuera de la linea media y que se inserta en los cuerpos vertebrales de las tres primeras dorsales y de las seis itimas cervicales. Por lo tanto, el miisculo largo del cuello cubre, a ambos lados de la linea media, Ja totali- dad de la cara anterior del raquis cervical. Su cor traccion bilateral y simétrica endereza la lordosis cervical y acarrea una flexién del cuello. De este modo, desempeiia un papel relevante en la estiti- ca del raquis cervical. ‘Su contraccién unilateral determina una fle- xiGn del raquis y una inclinacién hacia el lado de su contraccién, LOGIA ARTICULAR LOS MUSCULOS PREVERTEBRALES: LOS RECTOS ANTERIORES MAYOR Y MENOR DE LA CABEZA Y EL RECTO LATERAL Estos tres misculos estén situados en la parte superior del raquis cervical (Fig. 67). E| recto anterior mayor de la cabeza (ra) es, de los tres, el mas proximo a la linea media contact con su hombdlogo opuesto y se fija en la inferior de la apéfisis basilar por delante del agujero occipital; ademas, recubre la parte supe- rior del misculo largo del cuello (Ie) y termina ante tendones distintos en cada uno de los tubérculos anteriores de la tercera, cuarta, quin- lay sexta ap6fisis transversas cervicales. Es el motor del raguis cervical suboccipital y de la parte superior del raqui inferior. La contraccién simulidnea de los dos misculos rec- tos anteriores determina la flexién de la cabeza sobre el raquis cervical y el enderezamiento de la lordosis de la parte superior del mismo. La contraccién unilateral determina la flexién y la inclinacion de la cabeza hacia el lado de su con- uraecion. El recto anterior menor de la cabeza (ram) se sittia por detras y por fuera del precedente y se extiende entre la apéfisis basilar occipital y la cara anterior de La masa lateral del atlas hasta el tuberculo anterior de su apofisis transversa. Su direcci6n es oblicua hacia abajo y hacia fuera. La contraccion simultanea de los dos mus culos homologos determina la flexién de la cabe~ za sobre el raquis cervical a nivel de la articula- cién occipitoatloidea, Su contraccién unilateral determina un triple movimiento de flexién. rota- cidn e inclinacion hacia el lado de su contrac- cidn, Estos movimientos se efectian en la articu- laci6n occipitoatloidea. El misculo recto lateral (rl) es el mas supe- rior de los miisculos intertransversos; se inserta por arriba en la apofisis yugular del occipital y por abajo en el tubérculo anterior de la apstfisis transversa del atlas. Se localiza por fuers del recto anterior menor y recubre la cara anterior de la articulacin occipitoatloidea. Su contraccién bilateral determina la flexién de la cabeza sobre el raquis cervical; y su contraccién unilateral una ligera inclinacion hacia el lado de su contrac- cidn. Estos dos movimientos tienen lugar en la articulaci6n oceipitoatloidea. 226 FISIOLOGIA ARTICULAR LOS MUSCULOS PREVERTEBRALES: LOS ESCALENOS Los mtisculos escalenos son tres y se extien- den sobre la cara anterolateral del raquis cervical a modo de verdaderas maromas musculares (Fig. 68); unen las apofisis transversas cervicales a la primera y segunda costillas. El escaleno anterior (ea), triangular de vér- tice inferior, se fijaa través de cuatro tendones en los tubérculos anteriores de la tercera, cuarta, quinta y sexta ap6fisis transversas cervicales; sus fibras musculares convergen en un tendén que se insertaen el tubérculo de List supe- rior del extremo anterior de la primera costilla. La direccién general del cuerpo muscular del escale- no anterior es oblicuo hacia abajo, hacia delante y hacia fuera. Elescaleno medio (em), situado por detrés y en contacto con el escaleno anterior, se fija por arriba mediante seis lengiietas tendinosas en las apofisis transversas de las seis ultimas vértebras cervicales, a la altura de los tubérculos anteriores y en el reborde externo de la corredera transversa de la segunda, tercera, cuarta, quinta y sexta cer- vicales y en la transversa de la séptima, El cuerpo muscular, plano de delante atras, triangular de vértice inferior, se dirige oblicuamente hacia abajo, hacia fuera y ligeramente hacia delante para finalizar en la cara superior de la primera costilla, inmediatamente por detras de la comede- ra de la arteria subclavia. El esealeno posterior (ep) se localiza por detras de los dos precedentes; se inserta por arri- ba a través de tres Iengiietas tendinosas en los lubérculos posteriores de las transversas de la cuarta, quinta y sexta cervieales. Su cuerpo car- ittia por fuera y 0, con el que casi se confunde, Se inserta mediante un tend6n plano en, el borde superior y en la cara externa de la segun- da cosiilla Entre los escalenos anterior y medio pasan las ranas de origen del plexo braquial y la arte- ria subclavia. La contraccién simétrica de los escalenos determina la flexion del raquis cervical sobre el raquis dorsai y una hiperlordosis, a condicion de que cl citado raquis cervical no esté régido por la contraccién del misculo largo del cuello; ya que, de lo contrario, la contraccién simétrica de los escalenos determina sinicamente la flexion del raquis cervical sobre el raquis dorsal (véase Fig. 93), La coniraccién unilateral de los escalenos determina la inclinacion (Fig. 70) y la rovacion del raquis hacia el lado de la contraccién. Ademis, los escalenos son miiscullos acceso- rios de la inspiraci6n, cuando, tomando como punto fijo sus inserciones cervicales, elevan las dos primeras costillas. 3. TRONCO Y RAQUIS 227 228 HSIOLOGIA ARTICULAR Los Unesquema de frente tomado de Testut (Fig, 69) permite situar la totalidad de los masculos prevertebrale el miisculo largo del cuello con su haz longitudinal (lel), sus haces oblicuos ascendentes (Icoa) y sus haces oblicuos descendentes (Icod); el recto anterior mayor de la cabeza (ra), el recto anterior menor de ta cabeza (ram); el recto lateral (sl): los misculos intertransversos, que estin divididos en dos planos: los miisculos intertransversos anteriores (ita) y los mis- culos intertransversos posteriores (itp). MUSCULOS PREVERTEBRALES EN CONJUNTO Laaccién de estos misculos intertransversos sélo determina la inclinacién del raquis hacia el lado de su contraccién (Fig. 70); esta acci6n est reforzada por la contraccién unilateral de los musculos escalenos: ~ el escaleno anterior (ea), dibujado entero s6lo en la mitad derecha; mientras que en la mitad izquierda no esta representado mas que su tendén, lo que permite mostrar el escaleno medio (em); ~ en cuanto al escaleno posterior (ep), S6lo sobresale det escaleno medio en su parte més inferior, cuando se inserta en la segunda costilla, \ TRONCO Y RAQUIS 229 69 230 FISIOLOGIA ARTICULAR LA FLEXION DE LA CABEZA Y EL CUELLO La flexion de la cabeza sobre el raquis cervi- cal y la flexion del raquis cervical sobre el raquis dorsal dependen de los musculos anteriores. En el raquis cervical superior (Fig. 71) los miisculos rectos anteriores menor y mayor (ra) determinan una flexion en la articulaci6n occ toatloidea. El musculo largo del cuello (Ie, y I yel recto anterior mayor determinan la flexiéin de las articulaciones subyacentes y, hecho importan- te, el largo del cuello determina el enderezamien- to y la rectificacién del raquis cervical (Fig. 72). A distancia del raquis cervical, y por tanto dotados de un mayor brazo de palanea, los muis- culos anteriores det cuello (Fig. 73) acttan como potentes flexores de la cabeza y del raquis cervi- cal. Se trata de los mésculos supra ¢ infrahioi- deos: el milohioideo (mh) y el vientre anterior del digdstrico (sin representar aqui) que unen el maxilar inferior al hueso hioides: = los misculos infrahioideos: tirohivideo, esternocleidohioideo (ech), estemotiroi- deo (sin representar aqui) y omohioideo (oh). La contraccién simulidnea de estos misculos determina el descenso de la mandibula inferior; aunque cuando ésta estd bloqueada contra la mandibula superior por la contracci6n simultdnea de los misculoy. masticadores, como el masetero (M) y el temporal (T), la con- traccién de los misculos supra © infrahioideos determina la flexién de la cabeza sobre el raquis cervical y la fle- xién del raquis cervical sobre el raguis dorsal, al mismo tiempo que un endere zamiento de la lordosis cervical, Por lo tanto, estos miisculos desempefian un papel primordial en la estética del raquis cervical 3. TRONCO Y RAQUIS 231 232 FISIOLOGIN ARTICULAR LOS MUSCULOS DE LA NUCA Antes de estudiar la fisiologia de los muscu- los de la nuca es indispensable entender correct: mente la disposicién mediante un corte en pers- pectiva (Fig. 74): en este caso se trata de una vista posteroderecha de la nuca, cuyos mnisculoy super- ficiales se han resecado en parte a fin de poder ver los diferentes planos. La zona de la nuca se compone de cuatro planos musculares superpuestos. De la profundi- dad a la superficie se puede observar: el plano profundo, directamente aplicado aos huesos y articuliciones, contiene: + los pequeiios musculos motores del raquis suboccipital, que se extienden entre el occipital, el atlas y el axis’ ~ el recto posterior mayor de la cabeza a: ~ el recto posterior menor de la cabeza OQ: — los oblicuos mayor (3) y menor (A): + la porcidn cervical del transversvespi- noso (5)s * Ios muisculos interespinosos (6); — el plano de los complexos, resecado en parte, contiene dos miisculos: * el complexo mayor (7); + el complexo menor (8); el mismo plano, més hacia fuera, se sitwan: * el transverso del cuello: + el dorsal largo: * yla parte superior del sacrolumbar (WN); — el plano del esplenio y del angular, tam- bién resecado en parte, comprende: * el esplenio, dividido en dos partes: + el esplenio de la cabeza (9); + y el esplenio del cuello (10), una de cuyas digitaciones de insercin en el tubérculo posterior de la tercera apofi- sis transversa se ha respetado (10°); las ‘otras dos que se insertan en el tubércu- lo posterior de la primera y de la segun- dda transversa se han seccionado; + el angular det oméplato (12): Estos miisculos estin estrechamente adosados a los del plano profundo, en cuyo alrededor se enrollan como si se tratara de una polea (lesis de Florent), de modo que su contraccién pose un importante componente de rotacion + el plano superficial comporta: ~ esencialmente el trapecio (15), que en esta figura se ha resecado casi totalmente: ~ el esternocleidooccipitomastoideo, que s6lo forma parte de la region de la nuca en su porcion posterosupe- ‘or. Aqui se ha representado parcial- mente resecado para asf mostrar sus porciones superficiales (14) y su por- Gi6n profunda cleidomastoidea (14). En el fondo de la regién comprendida entre los intersticios musculares, se pueden apreciar las inserciones superiores de los escalenos medio y posterior (13), Resumiendo, aparte los miisculos de! plano profundo, la mayor parte de los miisculos de la nuca son oblicues hacia abajo, hacia dentro y hac atras, estan adosados al plano profundo y determi simultincamente la extension, ta rotacion y la inelinacién hacia el lado de sw coniraccién, es decir, exactamente los tres componentes del movi- miento mixto del raquis cervical inferior en torno a los ees oblicuos (véase pag. 204). En cambio, la capa superficial contiene misculos de direccién cruzada respecto a los planos intermedios; 0 sea, oblicua hacia abajo, hacia delante y hacia fuera y que, esta ver, no actian directamente sobre el raquis cervical inferior, sino sobre el crineo y el raquis suboccipital, en cuyo nivel determinan, como los de los planos subyacentes, la extension y la inelinacién hacia el lado de su contracci6n, aun- gue con una rotacién hacia el lado opuesto. De este modo, son a la vez sinergistas y antagonistas de los mdsculos del plano profundo, a los que completan funcionalmente, q 74 FISIOLOGIA ARTICULAR LOS MUSCULOS SUBOCCIPITALES Habitualmente apenas se presta atencién ala fisiologia de los pequetios miisculos suboccipita- les; esto se debe al hecho de que no se la consi- dera un complemento de la fisiologéa del raquis cervical inferior. En realidad, el papel de estos miisculos “nonio” es capital en Ia actitud de la para acentuar los componentes deseados © climinar los componentes no deseados, a partir nto univeco del raquis cervical infe- Antes de abordar su fisiologia conviene repasar su disposicién anatémica asimilando correciamente su direccién en el espacio. Para ello es preciso considerarlos no solo en una vista posterior (Fig. 75), sino también en una vista externa (Fig. 76), asi como en una vista en pers- pectiva posteroderecha e inferior (Fig. 77). De este modo se puede observar: — el recto posterior mayor de Ia cabeza (J), misculo triangular de base superior, se extiende desde la apéfisis espinosa del axis hasta la Iinea curva inferior del oc pital. Su direcci6n es oblicua hacia arriba y ligeramente hacia fuera y hacia atras; — el recto posterior menor de la cabeza (2), también plano y triangular, mas corto y més profundo que el precedente, situado. inmediatamente por fuera de la linea media, se extiende desde el tubérculo pos- terior del atlas, sobre su arco posterior, hasta el tercio interno de la Ifnea curva occipital inferior. Su direccién es oblicua hacia arriba, ligeramente hacia fuera y mds directamente hacia atrds que el recto posterior mayor. Esto se debe al hecho de que el arco posterior del atlas es més pro- fundo que la apofisis espinosa del axi cl oblicuo mayor de la cabera (3), mis- culo alargado, grueso y fusiforme, situzdo por encima y por fuera del recto mayor, se extiende desde la apofisis espinosa del axis ala cara inferior y borde posterior de Ia apfisis transversa del atlas. Su direccién es oblicua hacia arriba, hacia fuera y hacia delante. Por lo tanto, esté cruzada en el espacio en relacién a los misculos prece- dentes, y en particular en lo que respecta al recto posterior menor de la cabeza el oblicuo menor de 1a cabeza (4), miis- culo conto, plano y tiangular, situado por se extiende desde la apéfisis transversa del atlas al tereio externo de Ta Vinea curva inferior del occipital. Su direccién es obli- cua hacia arriba y hacia atrds. Prictica- mente, est situado en el plano sagital, ya que no se dirige hacia fuera. Su direccin es paralela a la del recto posterior menor y perpendicular a la del oblicuo mayor; los _miisculos interespinosos (5) esi situados a ambos lados de la linea media, entre las apéfisis espinosas cervicales, por debajo del axis: de este modo, los misculos rectos posteriores mayor y menor son equivalentes de los mtisculos interespinosos. 236 FISIOLOGIA ARTICULAR ACCION DE LOS MUSCULOS SUBOCCIPITALES: INCLINACION Y EXTENSION Por su disposicién, el oblicue mayor de la cabeza, desempena un papel importante tanto en la estiticw como en la dindmica de la articula- cidn atloidoaxoidea. De hecho, una vista de per- fill (Fig. 78) muestra que al Hevar hacia atras las apéfisis transversas del atlas, este miisculo deter- mina, cuando los dos oblicuos mayores se contra- en simétricamente, un movimiento de retroceso y de extension del atlas sobre ef axis, extension que pucde medisse en radiografias de perfil por el ingulo 4 en las masas laterales del atlas, 0 por el ingulo 4” en su arco posterior. Una vista superior (Fig. 79) muestra con claridad el movimiento de retroceso (1) determinado por la contraccién simérrica de los dos mtsculos oblicuos, que, como la cuerda de un arco, propulsan el a hacia delante y por reacciGn del atlas hacia atras. De este modo se descarga el ligamento transver- so, que asegura la contencién pasiva de la apéfi- sis odontoides y le impide luxarse hacia atrés: los dos oblicuos mayores actian simulténeamente de modo que desempefian un papel esencial en el comportamiento dinémico de la articulacién atloidoodontoidea. La contraccién unilateral de los cuatro musculos posteriores suboccipitales (Fig. 80) determina la inclinacién de la cabeza (flecha y) hacia el lado de su contracci6n, por movilizacién en Ia articulacién occipitoatloidea. Este angulo de inclinacién ® también se puede met Angulo *comprendido entre la linea horizontal de las ap6fisis transversas del atlas y la linea oblicua de las apéfisis mastoides. Ciertamente, el oblicuo menor (4) cuya contraccién acarrea el alarga- miento (c) de su homdlogo opuesto es el mas efi- caz de los muisculos de la inclinacién, El oblicuo menor toma como punto fijo la apéfisis transver- sa del atlas, estabilizada a su vez por ki contrac- cidn del oblicuo mayor (3); el recto mayor (1) es menos eficaz que el oblicuo menor y el recto menor apenas lo ¢s debido a su proximidad a la linea media. La contrac los misculos posteriores suboccipitales (Fig. 81) determina Ja extensidn de la cabeza sobre el raquis cervi lugar en la articulacién occipitoatloidea gracias a la contraccién del oblicuo posterior menor (2) y del oblicuo menor (4) y en la articulacién atloi- doaxoidea merced a la contraccidn del recto pos- terior mayor (1) y del oblicuo mayor (3) (Fig. 78). ultainea y bilateral de tiene Al superior: esta extensié 238 PISIOLOGIA ARTICULAR ACCION RO! Ademis de sus acciones de extension y de inclinaciGn, 10s muisculos suboccipitales estin dowdoy de una accién rotadora sobre ta cabeza. Considerando en primer lugar el tramo. suboceipital, es decir, la articukacién oceipitoa- Hloidea. En una vista inferior (Fig. $2), aparece con claridad que fa contraccién del misculo obli cuo menor (4) determina una rotacidn de la cabe- ra del orden de una decena de grados havia ef Judo opuesto a su coniraccién; en el ejemplo que se ilusira aqui, la contraccidn del oblicuo menor izquierdo determina la rotacion de la cabeza hacia Ja derecha; en este caso se puede obs se tensa de forma pasiv cho (4°) y el oblicuo menor posterior (2), de modo que aseguran el retoma de Ia cabeza a la posicién neutra yar como el oblicuo menor der Considerando ahor sicente, el de la articulaci6n atloidoaxoidea. En una vista inferior (Fig, 83), el axis aparece de color claro sobre el atlas de color gris. Se puede constatar que Ia contraccisn de los muisculos recto posterior mayor (1) y oblicuo mayor (3) determinan una rotacidin de’la cabeza del orden de una docena de DORA DE LOS MUSCULOS SUBOCCIPITALES. grados hucia ef lado de su coniraccién. En el ejemplo ilustrado aqui, la contraccién del recto anterior mayor derecho (1) determina una rota~ cidn de la cabeza hacia la derecha, en la oceipito- atloidea y la atloidoaxoidea a la vez este caso, el recto mayor izquierdo se alarga una longitud a que asegu ael retorno de la eaber: a Su posicién Sn del oblicuo mayor derecho (3) determina la rotacién de la cabeza hacia la derecha en la articulacién atloidoaxoidea, Una vista en perspectiva (Fig. 84), muestra cémo la contraccién del recto mayor de! lado derecho, que se extiende diagonalmente entre la espinosa del axis y la transversa derecha del atlas, hace girar a este titimo hacia la derecha, a la par que alarga el recto mayor izquierdo (Fig. $3) una longitud b (miiscuto de regreso). Una ver. asimiladas todas las acciones de los midsculos suboccipitales, se puede estudiar ta pagina 214 para comprender mejor su papel en ka anulacion de Ios componentes. no deseados de inclinacién 0 de rotacién en el transcurso de los movimientos puros de la cabeza. 240. JOLOGIA ARTICULAR LOS MUSCULOS DE LA NUCA: EL PRIMER Y EL CUARTO PLANOS, E! plano profundo de los masculos de la nuca a nivel del raquis cervical superior esti constituido por los muisculos suboccipitates descritos. con anteriori- dad; en el raquis cervical inferior por los muisculos transversoespinosos. Dispuestos conta el plano 6seo. la corredera formada por las ap6fisis espinosas, las léminas y las apdisis transversas, estos musculos estan formados por lengiietas musculares que se rect bren entre si a modo de tefas. Existe pues, acada lado de la Iinea de las espinosas un transversoespinoso 4 cocupa la corredera vertebral desde el axis al saero. La dlisposicién de las laminillas musculares (Fig. 85) se ha interpretado de diversas formas segtin autores — ena deseripcién clasica de Trotard, las fibras musculares que se originan en las apotisis ‘espinosas y en las Himinas de las cuatro véite- bras supriyacentes convergen en la apéfisis transversa de la quinta vértebra: en este esque- ma (T), se puede observar la disposicion del primer sistema laminar completo que termina a sexta apotisis transverse cervical y recu bre los sistemas laminares incompletos. qu convergen en la quinta, cuarta, y tercera apé- fisis transversas cervicale: en una descripcién mas actual de Winekler, los haces musculares tienen una disposicion inversa (W): de la lamina y de la espinosa de craneal parten cuatto | cuatio vértebras subyacentes. E esquema se ha representado el sistema lami har mis erancal que parte del axis y que recu- bre en mayor 0 menor grado loy sistemas Jaminares subyacentes. Estas dos concepeiones son dos formas distintas de deseribir una misma realidad, segtin se parta de la insercién superior © de la inferior. Sea como fuere, dado que la direccién de las fibras musculares es siempre oblicua hacia abujo, hacia fuera y ligera- mente hacia delante, ta contraccién del transversoes- pinoso determina: ‘cuando es bilateral y simétrica, una extensién del raquis cervical y una hiperlordosis. Se trata del misculo erector del raquis cervical; — cuando es asimétrica 0 unilateral, la exten- sidn, la inclinacién hacia el lado de su con- traceién y la rotacién del raquis hacia el lado ‘opuesto. Por Io tanto, esta accion sobre el raquis se asemeja a la del ECOM sobre ta cabeza. Asi, el iransversoespinoso es sinergis- ta del ECOM, pero mientras que el primero acta de manera segmentaria en cada uno de Jos tamos del raguis cervical, ese cuyas fibras tienen una direceién general parecida a la del tra sobre la totalidad del raquis cervical en cuyos extremoy se inserta, mediante dos brazos de palanca sumamente importantes, plano superficial de los musculos de la nuca . 86) esti constituido por el trapecio (Tr), euyas fibras, dispuestas en abanico, parten de una linea con- tinua que ocupa, por una parte, el tercio interno de la linea curva superior del occipital, y por otra, las apd- fisis espinosas hasta la décima dorsal y el ligamento cervical posterior. A partir de esta Linea de insercién ancales descienden oblicua delante y se fijan en el tercio externo de la clavicula, en el acro- mion y en la espina del omoplato. De este modo, e/ contomo de la parte inferior del cuello esta constitui- do por la curva envolvente de las vas de las fibras del trapecio. ate iikimo, desempefia tun papel primordial en la motricidad de la cintura escapular (véase tomo 1D; pero cuando toma como punto fijo la cintura eseapular, acttia de-manera importante sobre el raquis cervical y sobre la cabeza: ~ la contraccion bilateral simétrica de los ira- ia extension del raquis sa con acentuacién de la lordosis cervical; cuanto esti extensiGn se ve contrarrestada por Ia accién de los. antago- as anteriores del raquis cervical, el trape- cio desemperia una funcién de sestén de modo que estabiliza todo el raquis cervical; = lacontraccién unilateral o asiméwica del wra- pecio (Fig. 87: vista dorsal y contraccién del trapecio izquierdo) determina una exiensién de la cabeza y del raquis cervical con hiper- Jordosis, una inclinacién hacia el lado de ta contraccion y una roracion de ta cabeza hacia el lado opuesto, El trapecio es pues sinergista del ECOM homolateral En Ia parte superexterna de la nuca (Fig. 86) aparece el extremo superior del ECOM. Por consi guiente, e! contorno externo de la parte superior de la nuca esté constituido por la curva envolvente de tas diferentes direcciones sucesivas de las fibras muscu- lares del ECOM retorcido sobre su ee. 212 FISIOLOG LOS MUSCULOS DE LA NUC. or dchajo del trapevio se haya el tereer plano museu- Jar (Fig. 88) constituido por el esplenioy el angular. 1 esplento desciende hasta la region dows y se inser- ‘cs ltimas espinosas cervical, el ligamento cer cal posterior, las cuaito primeras espinosas donsiles y el ign- mento interespinoso: sus fibas se drigen oblicuamente hacia adelante, enrellindose en los mis- aibar con dos porciones dis- tuntas ‘una porcion cefilica que forma el explewio de la ‘cabeza (9) y que se inserta en el occipital, por deba- jp del ECOM en la mitad extema de la Tinea curva ‘occipital superior y en la mastoides, Recubre de mane: los dos complexos, que se locali- zan en el trtingulo formado por el borde intemo de los dos esplenies; una porn cervical que foie explonio det cuello (0) que se ha representado en el lado izquiento en sus conexiones con el esplenio de la cabeza, y en el lado detech aislado para mostrar como se enrolla sobre sf misma, asi como las lengtietas erminales ‘que van a insertarse sobre las apofisis tansverss del alas, del axis de la tewera cervical. La comraccién bilateral y siméirica del esplenio dew ‘extension de la cabeza y del raquis con hiperlordo- La contraccién avimétrica 0 unilateral del esplenio n, una inclinacidn y una eotacion hacia el lado de su contraccién, es decir. en el sentido del mov ‘mienio univoco del raquis cervical inferior. angular de la esedpula (12) se sina por fuera det ‘oplenio def cuello y posee con Exe inserciones superiors ‘comunes sobre las apofisis tranyversas de as cuatro primeras cervieales. Su cuerpo muscular plano se enroila gracias al tmismno movimiento que el del esplenio, sungue se spats rpi- damente para diriginse oblicuamente hacia abajo y ligera- ‘mente hacia fuera y fijarse sobte el onxéplato, Cuando ton ‘como punto fijo ef raquis cervical, cl angular determina una clevacién del omiplato (wéase tomo 1). En cambio, cuando el “oméplato esti fijo, se converte en motor del rayuis cervical Su contraccién bilateral y simétrica detemiina una extension del raquis cervical con hipertondosis. Cuando los aniagonistas no permiten llevar a cabo esta extension, actia Como sostén estabilizand lateralmente el raquis cer Su contraccién unilateral o asimeétrica conlle cel caso del explenio del cuello, una extensicn con inelina- ci6n y rolacién hacia el lado de su eontracci6n y, por lo tanto, excl sentidodel movimiento univoco del raquis cervical infe- EI segundo plano muscular, situide directamente sobre el plano mis profundo (Fig. 89), esté consituido por los, das complexos y por el dorsal largo, el transverso del cuello y Ja parte superior de Ia masa lumbossera. EI complexo mayor (7) situado inmediatamente por fuera de la linea media, forma una banda musculer vertical, interrumpida por una inferseccién aponeurGtica que le ha vali. dd la denominacion de “digistrico de la nvca”. El complexo EL SEGUNDO Y EL TERC ‘mayor se fija por abajo en las transversas de las seis primera, vertebras dorsales, en a base de las transversas de kis cuaito titimas cervieales y en kas espinoses de la séptima cervical y de la primera dorsal. Su cuerpo muscular, erueso y redondea: do, recubre el transverso y fermina de rellenar la corredera \ertebral, sté separado de sa homéloge por el ligamento cer vical posterior. Los dos esplenies se encajan en la conyexidad, el complexo mayor y éste finaliza en la concha occipital, por fuera de la cresta occipital extema y ent las dos lines cur La contraccién simetrica y bilateral del complexo mayor determina la extensicin de la cabeza y del raquis cervi- ‘eal con hipertontosis; su contraccién aximétrica o unilateral ‘etermina una extensidn de la cabeza asociada a wna ligera inclinacién hacia el lado de su contracci6n. El complexo menor (8), situado por fuera del prece- ente, largo y delgado, se dinge hacia arnba y ligeramente hacia fuera ligandose por abajo en la base de las transversas ‘e las cuatro titimas cervicales y de la primera dorsal y, por aba, enel vértice y borde posterior de a mastoides, Su cue: fo muscular esti retorcido sobre si mismo Ya que sus fbras ‘mds caudales terminan siendo las mas internas por arriba, mientras que las mis craneales en el origen cervical som las nds externas sobre la mastoides, Su contraccicn bilateral y simétrica determina la exten sidnde la cuando esta extensidn se ve conirarrestala or la accidn de los antagonistas anteriores. el complexo sabiliza lateralmente la cabeza, a modo dé cable de Su contraccién mnilateral 0 asimérica determina ta extension asociada a la inclinacién del mismo lado, mas ‘2centuada que en el complexo mayor y.adenids, una rotacicn homéloga. Fl transverso del cuello (11), largo y delgado, esti \uado por fuera del complexo menor y se inserta por amibat el vénice de las cinco ultimes transversis cervicales y, por abajo, en el vérice de las ransversas de las cinco primera, ddorsales, Las fibras ms interna Son las mis cortas entre C, y D,, Las extemas son las mis largas y unen de C, aD, La contraccién simeétrica de los dos transversos deter- ming la extensin del raquis cervical inferior Cuando esta textensién se ve contramestada por Ia acciin de los antago- nistas, los transversos actian de sostén, La contraccién unilateral o asimétrica de un transver- so determina la extensicin y una inclinacion lumotateral Eldorsal largo forma parte de los miisculos de la nuca por sus inserciones mas craneales sobre las Gltimas transve ‘ss cervicales. Por etra part, se confunde, en mayor o menor xrado, con la porcidn cervical del mdsculo sacrolumbar (11) que. origindndose en el borde superior de las seis pri mers costllas finaliza junto con el transverso del cucllo en, el tubérculo posterior de las cinco utimas transversis, Sus, aacciones son parecidas a Las del trancterso: adders, In por- in cervical del sacrolumbar desempetia la funcidn de sosén, muscular del raquis cervical inferior y de elevador de las se primeras costillas (séase pig. 150), 244 FISIOLOGIA ARTICULAR LA EXTENSION DEL RAQUIS CERVICAL POR LOS MUSCULOS DE LA NUCA Todos los muisculos de la nuca son extenso- res del raquis cervical y de la cabeza, pero, segiin su disposicisn, se pueden far en tres gru- pos: el primer grupo (Fig. 90) contiene todos los musculos que se insertan en el raquis cervical ala altura de las apéfisis transversas y que se dirigen oblicuamente hacia abajo y hacia atras hasta la regiGn doi se tr el esplenio del cuello (0); — el irangverso del cuetto y la porci6n cervi- cal del sacrolambar (11); el angular det oméplato (12), Estos miisculos son extensores del raquis | cuya lordosis aumentan; su contraccién unilateral determina, ademas, la inclinacion y la rotacién hacia el lado de su contraccién; son los cery misculos motores del movimiento univoco del raquis cervical inferior (véase pig. 214) segundo grupo (Fig. 91) comprende los mntisculos de direccién oblicua hacia abajo y hacia delante: por una parte, el transversoespinoso (5). misculo propio del raquis cervie rior: ~ por otra, los miisculos que unen el occipi- tal al raquis cervical inferior: ef complexo mayor (7), el complexo menor (8), el esplenio de la cabeza, que aunque no se ha representado en este esque forma parte de este grupo: — por iltimo, los muisculos. suboceipitales sin representar en este esquema (véanse pags. 234, 236 y 238). Todos estes miisculos extienden el raquis cervical, cuya lordosis aumenian y extienden la cabeza sobre el raquis cervical debido a sus inser- ciones directas en el occipital. un tereer grupo de miisculos que pasan a modo de puente por encima del raquis cervical, en el que no toman ninguna inser- cién, De este modo, unen directamente el occipi tal y la mastoides a la cintura escapular. Se trata de: — por una parte, el trapecio (Fig. 91, 15): — por otra, el ECOM (Fig, 92), sistema dia gonal que cruza la direccién del raquis cervical y cuya contraccién bilateral y simétrica tiene tres consecuencias: extensidn de lu cabeza sobre el raquis € vical (1), la flexién del raquis cervical sobre el raquis dorsal (2), y la extensién del raquis cervical sobre Sf mismo con hiperlordosis (3). La estitica del raquis cervical sobre el plano sagital (Fig. 93) depende pues de un equi- librio dinamico permanente entre: ~ por una parte, la accién extensora de los ‘misculos de la nuca: esplenio (E), Wrans- verso del cuello, sacrolumbar y dorsal largo (DL) y trapecio (Tr). Todos ellos forman cuerdas parciales 0 totales en Ta coneavidad de la lordosis vervical; ~ por otra, los smiisculos anteriores y antero- externos + el largo del cuello (Ie), que es flexor y endereza la lordosis cervie + los escalenos (ES) que flexionan el raquis cervical sobre el raquis dorsal, aunque tienden a determinar una hiper- lordosis cervical si su acciGn no se ve compensada por el largo del cuello y por los musculos supra e infrahioideos (véase Fig. 73) La contraccién simultinea de todos estos grupos musculares determina una rectificacién del raquis cervical en su posicion media. De este modo, estos miisculos se comportan como cables de sostén situados en el plano sagital y en los pla- nos ablicuos: desempefan un papel primordial en el equilibrio de la cabeza y el transporte de car- gas sobre la misma, 246 FISIOLOGIA ARTICULAR SINERGIA-ANTAGONI MO DE LOS MUS }CULOS PREVERTEBRALES Y DEL ESTERNOCLEIDOMASTOIDEO, Como se ha podido ver con anterioridad (Fig. 92), los esternocleidomastoideos no pueden, cuando se contraen de manera aislada, actuar efi- cazmente para mantener el equilibrio de la cabe- vay la estitica del raquis cervical. Para ello, es necesaria la ayuda de los miisculos sinergistas- antagonistas, que previamente enderezarin la lor- dosis cervical (Fig. 94), Se trata de: — esencialmente, el largo del cuello (Le), situado inmediatamente por delante de los cuerpos vertebrates; — los misculos flexores de la cabeza sobre el raquis cervical (Fig. 95) situados en el tramo suboccipital: rectos anteriores de la cabeza mayor y menor y recto lateral; = por otra parte, los misculos supra e infrahioideos actian a distancia sobre un gran brazo de palanca situado por delante del raquis cervical, a condicién de que la contracci6n de los miisculos masticadores bloquee el maxilar inferior sobre el maxi- lar superior, A partir del momento en que se rectifica el raquis cervical, la lordosis enderezada (Fig. 96) y mn de la cabeza sobre el raquis cervical impedida por los miisculos suboccipitales ante- riores y los supra e infrahioideos, la contraccién simultanea de los dos ECOM (Fig. 97) determi la flexion del raquis cervical sobre el raquis dor- sal. Por lo tanto, existen nexos de antagonismo- sinergia entre los ECOM por una parte, y por otra, los muisculos prevertebrales bien en contacto con el raquis, bien a distancia por delante del mismo. la extensi 248 FISIOLOGIA ARTICUI LAS AMPLITUDES GLOBALES DEL RAQUIS CERVICAL {Como se pueden medir de forma prictica las amplitudes del raquis cervical? En el caso de la flexoextensi6n y la inclinaci6n se puede lleva cabo de manera precisa en radiografias de per- fil y de frente, pero en el caso de las rotaciones ¢s mucho mas dificil. ‘También se pueden utilizar puntos de refe- rencia exteriores, En la flexoextension (Fig. 98), el punto de referencia es el plano masticatorio, que, en posicién neutra, es horizontal. Por lo tanto, la extensién serd el ngulo abierto por ni ba, formado por el plano masticador y la horizon tal, la flexiGn sera el dngulo abierto por abajo, entre el plano masticador y 1a horizontal. Las amplitudes ya se han definido con anterioridad. Para medir la inelinacién (Fig. 100), se tomar en cuenta el dngulo formado por dos line- as, por una parte, la linea de las claviculas, y por otra, a linea de los ojos. Se puede conseguir una medicién mas exac- ta de la flexoextensidn y de la inclinacion util zando un gonidmesro de burbuja que se fijard en el crinzo, bien en el plano sagital para medir la flexoextensién, bien en el plano frontal para nclinacidn, medir la La medicién de la rotacién de la cabeza y del cuello (Fig, 99) se puede realizar con el suje- to sentado en una silla e inmovilizando correcta- mente su cintura escapular. Se tomara en cuenta entonces como referencia la linea de los hombr y larotacién se medira bien por el angulo (R) for- ‘mado por esta linea de referencia y el plano fron- tal que pasa por las orejas, bien por el dngulo (ROT) formado por el plano sagital de la cabeza con el plano sagital del cuerpo. Se puede efectuar una medicién més precisa con el individuo en dectibito supino sobre un plano duro y horizontal, con un goniémeiro de burbuja fijo en la frente en el plano transversal, RAQUE 230 FISIOLOGIA ARTICULAR, RE EL EJ El sistema nervioso cerebroespinal se encuen tradentro de la caja craneal y del canal raquideo, En el raquis cervical, ef canal raquideo protege et bulbo, que sale del crineo por el agujero occipital, y la meduta cervical, que emite las raices del plexo Cervical y del plexo braquial, Por lo tanto, el bulbo y la medala cervical contraen estrechos nexos con elementos muy mBviles del ray ical, sobre todo a nivel del raquis suboccipital en una zona de transicidn mecinica muy especifica (Fig. 101). De hecho, desde su salickt por ef agujero occipital. ef bulbo, prolongado por la medula (M), se sitia por detras y entre tos dos céndiloy occipitales, que constituyen, a este nivel, los dos puntos de apoyo mna cervical, Ahora bien, del erineo sobre la col entre los e4 cervical, el atlas y el axis van a distribuir el peso de Ja cabeza entre tres columnas, soportado en prin pio por dos columnas (C y C’). Estas tres columnas, {que se prolongan a lo largo de todo el raquis, son: adilos oceipitales y Ia tercera vértebra ~ la colunma principal de los cuerpos verte- brates (CV), situada por delante de la medula; = y de las dos columnillas laterales de las apéfisis articulares (Ay KN), situadas. a ambos lados de la médula. La divisidn de las lineas de fuerza se efectia a nivel del axis, que, de este modo, representa un verdadero distribuidor de juerzas entre el crineo y cl atlas, por una parte, y el resto de la columna vieal, por otra, De hecho (Fig. 102), tas fu ‘que soportan cada uno de los céndilos oceipi- tales (CC) se dividen en dos: ~ por una parte, delante y hacia den tro, las principales fuerzas estdticas reca- en sobre los cuerpos vertebrates (CV) a través del cuerpo del axis: por otra, las fiersas dindmicas recaen sobre la columna de las ariiculares (A), hacia atrds y hacia fuera, a través del pedi- culo vertebral del axis y ka apofisis articu- lar inferior situada debajo del arco poste- rior del Por lo tanto, esta zona suboccipital represen- ta, a ka ver, ef pivote, ef punto may movil det IE NERVIOSO Y L RAQUIS CERVICAL raquis cervical, y el lugar mis solicitado mecini- camente. Lo que equivale a reconover la impor tancia de los elementos de union ligamentosa y de los factores Gseos de estabilidad, de los que el principal es ka apdfisis odomoides de la base de la odontoides produce la completa wstabilidad del atlas sobre el axis, que puede asi bascular hacia atris, 0 To que es peor, hacia delan- te, verdadera luxacién anterior del atlas sobre el anis con la consiguiente compresién del bulbo y muerte inmediata. una fractura Otto elemento muy importante de la estabi- lidad del atlas sobre el axis es el figamento trans- verso, cuya ruptura acarrea la luxacién anterior del ailas sobre el axis, permaneciendo la odontoi- des en el sitio y comprimiendo y lesionando gra- vemente el builbe. De nuevo se ¢ stibita, No obstante, las rupt una mu is del ligamento transverso_no son tan frecuentes como las fractu~ ras de la odontoides. nivel donde mas frecuent luxaciones anteriores de C. y C,, con las articula- res inferiores de C, enganchadas en las articulares superiores de C, (Fig. 103). En esti posiciéa, ta medula esti comprimid entre el areo posterior de CG. y el dingulo posterosuperior del cuerpo de C. Dependiendo del nivel, lt compresién: medular provoca bien una paraplejia, bien una tetrapleiia, que puede ser ripidamente mortal Es obvio, que todas estas lesiones que ct Una gran inestabilidad en el raquis, pueden agra- varse por manipulaciones inadecuadas durante el manejo y transporte de los heridos, y en particu- lar, se puede entender que cualquier movimiento de flexién del raquis cervical y de flexion de la cabeza sobre el raquis cervical puede empeorar la compresién del bulbo o de Ia medula, Por lo tanto, al recoger un herido en aceidente de circu- lacién, por ejemplo, uno de los socorristas debe desempefiar como tarea tiniea y primordial man- tener ta cabeza en el eje del’ raguis, asi como extenderla ligeramente para evitar desplazamien- tos de una eventual fractura, ya sea en ef tame occipital o por debajo del mismo. FISIOLOGIA ARTICULAR NEXOS ENTRE LAS RAICES © Se acaban de exponer los importantes nexos entre el raquis cervical y el bulbo y la medula. De cada tramo del raquis cervical salen las raices de los nervios cervicales por los agujeros de conjunci6n, Estas raices pueden resultar af tadas por procesos patolégicos (Fig. 104): las hemias discales son raras en el raquis cervical salida posterolateral (flecha 1) se ve dificultada por la presencia de las apéfisis unciformes de tal modo que, cuando existen, estén mucho més pr6- ximas de la linea media (flecha 2) que en la region lumbar, por lo que mas bien acarrean com- presiones medulares, Sin embargo, el proceso de compresiéa mas frecuente en el raquis cervical se debe a la artrosis de las articulaciones uncovertebrales (flecha 3), De hecho, una vista de perfil (Fig. 105) muestra los estrechos nexos de las raices cervica- RVICALES Y EL RAQUIS, les saliendo de los agujeros de conjuncién con las articulaciones interapofisarias por detras, y a las articulaciones uncovertebrales por delante. Cuan- do se inicia el proceso de la cervicoartrosis (parte inferior de la figura), se pueden apreciar no slo los picos osteofiticos en la parte anterior de las mesetas vertebrales, sino, sobre todo, en las pro- yeeciones radialégicas oblicuas, las vegetaciones osteofiticas que parten de las articulaciones uncovertebrales y forman una prominencia en el Grea del agujero de conjuncién. Asimismo, los osteofitos avanzan por atras a partir de la articu- lacién interapofisaria y la raiz cervical puede asi verse comprimida entre los osteofitos anteriores de punto de partida uncavertebral y los osteofitos posteriores de punto de panida articular. Asi puede explicarse la sintomatologia radicular de las cervicoartrosis. 3.TRONCO Y RAQUIS 253 La gran aventura del raqui: Fue en el agua, dulce o salada, donde los seres vivos se cx tura rigida, partiendo de seres blandos como las medusas. Antako podian elegir entre una estructura externa rigida, el exoesqueleto de los crustéceos y una armadura in- terna, el endoesqueleto propio de los peces. El cuerpo de los antepasados de los peces estaba constituido por un eje flexible, que se fragment6 en piezas articuladas: ast, apa- recieron los vertebrados. Al principio, las ondulaciones de un cuerpo flexible, cilindri- co 0 plano, permitian los desplazamientos en el medio liquido. Pero las estructuras se fueron perfeccionando con la aparicién de dos pares de apéndices: las aletas anterio- res y posteriores. Cuando los peces empezaron a colonizar la tierra, aparecieron los primeros terépodos, cuyas aletas se convirtieron en patas y, posteriormente, en miem- bros que hemos heredado, articulados con la columna vertebral a través de las cintu- ras. Pero la aventura no terminé aht, ya que un dia estos cuadripedos se irguieron sobre sus patas traseras, surgiendo, en consecuencia, los primates y luego el hombre. Todas estas transformaciones modificaron profundameme el eje del cuerpo, el raquis. Esta columna vertebral, que en los cuadripedos era horizontal y estaba sujeta por sus dos extremos por un par de miembros, se convierte en vertical, reposa sobre una pelvis incompletamente erguida y ahora soporta no sélo el peso del cuerpo sino el de la cabeza y miembros superiores unidos a la cintura escapular. Esto explica tanto la aparicién de las curvas raquideas como la fragilidad de este edificio sometido a grandes contratiempos, y en particular en su punto de unién con lo que le sirve de cimientos, la pelvis. El raquis lumbar, zona de transicién entre la cuadrupedia y la verticalidad, es el punto més débil, centro de la mayorfa de los pro- blemas del hombre. El raguis dorsal sblo le sirve de eje al t6rax, estructura motora del aparato respiratorio. En cuanto al raquis cervical, es la “joya” de esta estructura, puesto que de su flexibilidad depende la orientacién de la cabeza, que protege los prin- cipales érganos de los sentidos de la vista, el ofdo, el olfato, que se coordinan para lo- calizar las presas, identificar los peligros. La comprensién de! funcionamiento de esta estructura tan relevante desprende una curiosidad que el lector no puede ignorar. ee a

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