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análisis de riesgos
La evaluación térmica de procesos es imprescindible para un diseño
seguro del proceso y de las instalaciones en las que se lleva a cabo,
así como para definir medidas técnicas de control y para el diseño de
sistemas de seguridad de los equipos.
¿Nuestro sistema de refrigeración es suficiente para controlar el proceso? ¿En caso de que
tengamos un problema en el sistema de refrigeración durante el proceso podemos tener
algún problema de seguridad por incrementos de presión o temperatura? ¿Cuánto tiempo de
actuación tengo antes de que ocurra una reacción no deseada? ¿Qué pasaría si olvido cargar
solvente? ¿Y si olvido arrancar el agitador?
La respuesta a estas y otras muchas preguntas relacionadas con la seguridad del proceso e instalaciones
(por tanto, análisis de riesgos) no es posible sin la evaluación térmica del proceso, por tanto
es imprescindible de cara al diseño seguro tanto del proceso como de las
instalaciones en las que se lleva a cabo.
Parámetros clave de diseño de proceso como temperatura de trabajo,
temperaturas máximas y mínimas de dosificación, determinación de puntos del
proceso en los que se puede interrumpir el proceso de forma segura, etc. son
parámetros que no pueden determinarse sin haber realizado una evaluación
térmica del proceso. Ahora bien, como se ha indicado, no solo es un análisis clave para el
diseño de procesos, sino que también lo es para la definición de medidas técnicas de
control, así como para el diseño de sistemas de seguridad de los equipos, como
pueden ser la definición de enclavamientos o el dimensionamiento de sistemas de alivio de presión
(discos de ruptura, válvulas de seguridad), siendo todos los puntos anteriores necesarios para poder
asegurar que el proceso se desarrollará en condiciones controladas y seguras.
¿En qué consiste la evaluación térmica del proceso?
El análisis consiste en realizar el estudio térmico de las reacciones asociadas al proceso, tanto las
deseadas como las no deseadas que pudieran ocurrir en caso de un escenario no deseado (fallo en el
sistemas de refrigeración) para poder determinar parámetros imprescindibles para la determinación de la
criticidad del proceso, así como para poder dar respuesta a las preguntas anteriormente citadas. Algunos
de estos parámetros son:
MTSR ( Maximum Temperature of the Synthesis Reaction): qué temperatura alcanzará mi masa de
reacción en base a la energía presente en el reactor
TMRad (Time to Maximum Rate): en caso de que puedan darse reacciones no deseadas, cuánto tiempo
dispongo antes de que se produzca la citada reacción.
¿Cuándo hay que realizarla?
Como cualquier análisis de riesgos, debería realizarse en la fase del diseño del
proceso para poder validar tanto el proceso como las instalaciones, previo a la
producción a nivel industrial. Esto no implica que para aquellos procesos existentes a escala
industrial no sea necesario realizar la evaluación. El análisis también debe realizarse en estos procesos
para poder corroborar que el diseño y las instalaciones en las que ya se efectúa son intrínsecamente
seguros, y tener en cuenta los resultados de la evaluación a la hora de plantear modificaciones del
proceso, tanto en diseño del mismo (kg, temperaturas,...) como en la determinación de la idoneidad de los
equipos utilizados para llevarlo a cabo.
En base a todo lo mencionado anteriormente y tal y como se ha indicado inicialmente, es necesario
incluir la evaluación térmica de los procesos dentro de la estrategia de análisis de
riesgos de una instalación industrial en la que se llevan a cabo procesos químicos
de cara a poder realizar un diseño seguro tanto del proceso como de las
instalaciones.
Autora: Elisabet Garicano. Consultora en seguridad de procesos TÜV SÜD Process
Safety
https://www.tuv-sud.es/es-es/prensa-es/noticias-1/evaluacion-termica-de-procesos-quimicos-
en-analisis-de-riesgos
Resumen
Abstract
INTRODUCCIÓN
Método
DESARROLLO
Por otra parte, Así como el hombre, la ciencia y la tecnología han evolucionado,
también lo ha hecho la salud en el trabajo[2].
CONCLUSIONES
BIBLIOGRAFÍA