TEMA No.

11 JESÚS ES DIOS
“Por tanto, os hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios llama anatema a Jesús; y nadie
puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo.” 1Corintios 12:3

INTRODUCCIÓN
Indiscutiblemente estamos viviendo en los últimos tiempos; y en la medida que se acerca la gloriosa manifestación
de nuestro Señor Jesucristo, los días se tornan más peligrosos, recordemos que una de las señales del tiempo final es
el aumento de la maldad siendo uno de sus tentáculos el engaño. Recordemos que la Escritura dice que antes de que
venga el Día del Señor (La Tribulación), habrá una apostasía casi generalizada (2Tesalonisenses 2:1-3). Si nos damos
cuenta la apostasía es por decirlo así el último nivel en el proceso de error, ya que antes de la apostasía está la
blasfemia y antes de la blasfemia se encuentra la herejía, la cual puede ser producida de dos formas; la primera es
una causa de tipo carnal y la segunda es causada por espíritus. “Pero el Espíritu dice claramente que en los últimos
tiempos algunos apostatarán de la fe, prestando atención a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios,”
1Timoteo 4:1 Negar que Jesús es Dios ha venido a ser no solamente un error doctrinal es decir una herejía, sino que
se ha convertido en una blasfemia que está conduciendo a mucho pueblo del Señor a una apostasía que en algunos
casos puede ser reversible, sin embargo en el peor de los casos puede ser irreversible. El Propósito de este tema es
demostrar fehacientemente a la luz de la Palabra que JESÚS ES DIOS, con el fin de que sean abiertos nuestros ojos
por medio de esta verdad fundamental, y que podamos con la ayuda del Señor ayudar a aquellos que de alguna
forma han sido victimas de esta blasfemia que niega la deidad de Jesús.

DESARROLLO
Definitivamente quien está detrás del movimiento de error es el espíritu del anticristo quien según la Palabra se
opone a todo lo que se llama Dios o es objeto de culto (2Tesalonicenses 2:4). Aunque el anticristo aun no se ha
manifestado públicamente, entendemos por la Palabra que ya esta en acción el misterio de la iniquidad
(2Tesalonicenses 2:7), que es lo opuesto al Misterio de la Piedad. El enemigo va a tratar de desvirtuar la gran verdad
de que Jesucristo vino en carne, con el propósito de estorbarle a muchos la oportunidad de salvación. Recordemos
que Jesús es la piedra angular y que en ningún otro hay salvación ( Hechos 4:11-12). Por eso la Escritura nos dice
que no creamos a todo espíritu sino que los probemos (1Juan 4:1) “En esto conocéis el Espíritu de Dios: todo
espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa a Jesús, no es
de Dios; y este es el espíritu del anticristo, del cual habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo.” (1
Juan 4:2-3). Si nos damos cuenta no es una lucha doctrinal solamente, sino que estamos hablando de una batalla
espiritual. Recordemos que los apóstoles advertían a la Iglesia de esto, diciéndoles que se cuidaran de todo viento
de doctrina (Efesios 4:14); en la Biblia la palabra viento se puede traducir como espíritu, en otras palabras los
apóstoles se referían a espíritus de doctrina.

Cuando el apóstol Pablo le escribe a los de Tesalónica les dice “ni os alarméis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por
carta” (2Tesalonicenses 2:2). A los Gálatas el apóstol les advierte diciendo: “Pero si aun nosotros, o un ángel del
cielo, os anunciara otro evangelio contrario al que os hemos anunciado, sea anatema.” Gálatas 1:8. Los apóstoles
estaban consientes al respecto del movimiento de error que vendría por medio de espíritus engañadores y doctrinas
de demonios comandadas por el espíritu del anticristo. De aquí podemos entender que la fuente u origen de donde
se derivan las herejías, blasfemias y apostasías, es el espíritu del anticristo el cual utiliza a hombres que niegan a
nuestro Dios y Señor Jesucristo, y es por eso que el apóstol Judas nos exhorta a que defendamos la fe que hemos
recibido: “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido
necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.
Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta
condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único
soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.” Judas 1:3-4.
Si nos damos cuenta es un plan bien elaborado en donde siervos de Satanás como lo describió el apóstol Pablo, se
han disfrazado de ministros de justicia así como Satanás se viste de ángel de luz.
Cuando el Señor les escribe a las Iglesias en Asia, a dos de ellas El Señor les reprende en cuanto a que tenían a
aquellos que se decían ser judíos y no lo eran sino que eran sinagoga de Satanás, a lo cual el Señor le llamó blasfemia
(Apocalipsis 2:9, Apocalipsis 3:9). Lo interesante es que estaban dentro de las iglesias, por eso Judas dijo “han
entrado encubiertamente.” Una de las corrientes que actualmente niegan que Jesús es Dios, son precisamente
aquellos que se dicen ser judíos y no lo son, es decir, los judaizantes, los cuales son los testigos de Jehová del tercer
milenio. Veamos a la luz de la Palabra la verdad maravillosa que afirma que Jesús es Dios.

 EL PRINCIPIO DE ADORACIÓN
La Biblia nos enseña con mucha claridad que Dios es el único digno y merecedor de toda la adoración:
“Entonces Jesús le dijo*: ¡Vete, Satanás! Porque escrito está: "AL SEÑOR TU DIOS ADORARAS, Y SOLO A EL
SERVIRAS." Mateo 4:10 Cuando revisamos esta palabra que fue pronunciada en el antiguo pacto
(Deuteronomio 6:13-15) nos damos cuenta en su contexto, que dentro de los mandamientos que el Señor
había dado a su pueblo era precisamente el no adorar a nadie mas fuera de Dios, ya que nuestro Dios es
fuerte y celoso. “Entonces caí a sus pies para adorarle. Y me dijo*: No hagas eso; yo soy consiervo tuyo y
de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios.” Apocalipsis 19:10 “…Y cuando oí y vi,
me postré para adorar a los pies del ángel que me mostró estas cosas. Y me dijo*: No hagas eso; yo soy
consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a
Dios.” Apocalipsis 22:8-9. Si nos damos cuenta en dos oportunidades el apóstol Juan, al ver la gloria de los
seres angélicos que le estaban mostrando la revelación, estuvo tentado a rendirles adoración, sin embargo
los ángeles, entendidos en el principio de adoración, no se lo permitieron sino que le dijeron ADORA A DIOS.
Esto es muy importante mencionarlo ya que en la Palabra podemos ver como Jesús fue adorado en diversas
oportunidades y por diferentes grupos de personas, enseñándonos de esta manera la Palabra que Jesús es
Dios. Veamos algunos ejemplos:

 LOS ANGELES ADORAN A JESUS CUANDO ES INTRODUCIDO AL MUNDO “Y otra vez, cuando introduce
al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios.” Hebreos 1:6 Aquí podemos ver
una orden directa del Padre a todos sus ángeles diciéndoles “ADOREN AL PRIMOGENITO” entendemos
que el primogénito del Padre, es nuestro Señor Jesucristo quien al igual que el Padre es digno de
adoración; no olvidemos que el principio de adoración es: al Señor tu Dios adoraras.
 LOS MAGOS (SABIOS DEL ORIENTE) ADORARON A JESUS EN SU NACIMIENTO. “¿Dónde está el Rey de
los judíos que ha nacido? Porque vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle.” Mateo 2:2
“Y entrando en la casa, vieron al Niño con su madre María, y postrándose le adoraron;” Mateo 2:11
Por revelación estos hombres habían viajado de tierras lejanas para adorar a un rey. Si nos damos cuenta
estos hombres ni siquiera eran Israelitas sin embargo por alguna razón Dios les reveló el lugar en donde
había nacido el Señor Jesús, y al encontrarlo reconociendo que era Dios se postraron y le adoraron.
 JESUS FUE ADORADO DURANTE SU MINISTERIO COMO UNGIDO. “Entonces los que estaban en la
barca le adoraron, diciendo: En verdad eres Hijo de Dios.” Mateo 14:33 Al ver el prodigio que el Señor
había hecho, calmando la tormenta que los había azotado, los discípulos del Señor Jesús, recibieron la
revelación de que Jesús era el hijo de Dios, pero al adorarlo lo reconocieron como su Dios. No solamente
sus discípulos le adoraron, hubieron otros personajes que le adoraron durante su ministerio como
ungido por ejemplo: Un leproso Mateo 8:2, un ciego de nacimiento Juan 9:38, la mujer cananea Mateo
15:25, el endemoniado gadareno Marcos 5:6, La madre de los hijos de Zebedeo Mateo 20:20, un oficial
de la sinagoga Mateo 9:18. En todos esto ejemplos la Biblia dice que estas personas se postraron ante
Jesús para pedirle algo, sin embargo la palabra que se utiliza en estos versos se deriva del griego 4352
proskunéo (Strong): de G4314 y un probable derivado de G2965 (significa besar, como el perro lame la
mano del amo); abanicar o agazaparse a, i.e. (literalmente o figurativamente) postrarse en homenaje
 (hacer reverencia a, adorar):-postrarse, reverencia, suplicar. El Señor Jesús fue adorado y en ningún
momento puso resistencia a quienes se postraron ante El.

 JESUS RECIBIO ADORACION LUEGO DE RESUCITAR. “Y he aquí que Jesús les salió al encuentro,
diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies y le adoraron.” Mateo 28:9 “Pero los once
discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había señalado. Cuando le vieron, le adoraron;
…” Mateo 28:16-17 “Y aconteció que mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado arriba al
cielo. Ellos, después de adorarle, regresaron a Jerusalén con gran gozo,” Lucas 24:51-52 Es
impresionante ver como nuestro Dios el Señor Jesucristo, cuando fue introducido en el mundo recibió
adoración, sin embargo cuando sale del mundo nuevamente recibió adoración afirmando por medio de
esto la Escritura que Jesús es Dios.

 EL MISTERIO DE LA PIEDAD
Este gran misterio nos muestra también la divinidad de Jesús, ya que nos explica el milagro mas asombroso:
EL MILAGRO DE LA ENCARNACIÓN. Es decir, Dios hecho carne. “E indiscutiblemente, grande es el misterio
de la piedad: Dios fue manifestado en carne,…” RV60 1Timoteo 3:16 es muy importante que este
versículo lo enlacemos con otros textos que están relacionados, por ejemplo: “En esto conoced el Espíritu de
Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios;” 1Juan 4:2 El primer texto
dice que Dios fue manifestado en carne, sin embargo el segundo texto aun mas especifico dice que
Jesucristo ha venido en carne, siendo el resultado de esta que Jesucristo es Dios. Si esto fuera poco el
apóstol Juan lo explica de la siguiente manera: “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el
Verbo era Dios.” Juan 1:1. Cuando se habla del verbo se habla del hijo de Dios, El Señor Jesús. Pero Juan
continua diciendo: “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria
como del unigénito del Padre),” Juan 1:14. En estos hermosos versos se afirma la verdad gloriosa que el
verbo es Dios y que Jesucristo, el Verbo es Dios, quien se humillo para manifestarse en carne: “Haya, pues,
en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual, aunque existía en forma de Dios, no
consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de
siervo, haciéndose semejante a los hombres.” Filipenses 2:5-7 Esto versos nos muestran la manera de
cómo Cristo Jesús siendo Dios se despojo de su gloria para hacerse semejante a los hombres. Sin embargo
parte del misterio de la piedad dice que luego de haber participado de carne y haber sido ofrecido en
ofrenda por el pecado y haber resucitado fue recibido arriba en gloria, y es cuando se cumplen estos versos
tan hermosos: “Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le confirió el nombre que es sobre todo
nombre, para que al nombre de Jesús SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra,
y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre .”
Filipenses 2:9-11. “Y de los ángeles dice: EL QUE HACE A SUS ANGELES, ESPIRITUS, Y A SUS MINISTROS,
LLAMA DE FUEGO. Pero del Hijo dice: TU TRONO, OH DIOS, ES POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS, Y CETRO
DE EQUIDAD ES EL CETRO DE TU REINO.” Hebreos 1:7. Dios el Padre se refiere al Hijo como DIOS. Y que mas
confirmación que esta, que Dios mismo testifique del Hijo, es decir nuestro Señor Jesucristo, afirmando que
es Dios.

A parte del principio de adoración y el misterio de la piedad hay varios textos en la Biblia que declaran abiertamente
que Jesús es Dios veamos algunos de ellos:

 “Pero el hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le permitiera acompañarle; mas El lo
despidió, diciendo: Vuelve a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas Dios ha hecho por ti. Y él se fue,
proclamando por toda la ciudad cuán grandes cosas Jesús había hecho por él.” Lucas 8:38-39 Es bien
interesante que uno de los que adoró al Señor Jesús fue precisamente este hombre quien había estado
endemoniado, sin embargo, llama la atención la revelación que este hombre recibió al llamar a Jesús como
Dios. Si leemos detenidamente la instrucción que el Señor le dio fue “cuenta cuan grandes cosas DIOS ha
hecho por ti” sin embargo vemos que cuando el testificó proclamó “cuan grandes cosas había hecho JESUS
 por el” dándonos a entender la Escritura que para aquel hombre era lo mismo decir Dios que decir Jesús, ya
que el estaba convencido que Jesús era Dios.
 “aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador
Jesucristo,” RV60 Tito 2:13 Es interesante que en este texto el apóstol Pablo esta hablando de la segunda
venida de Cristo, sin embargo es muy interesante la forma como el apóstol Pablo se refiere a Él: “NUESTRO
GRAN DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO” miremos este mismo versículo en otra versión: (SSE) “esperando
aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesús, el
Cristo.”
 “Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y
Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:” RV60 2Pedro 1:1 Ahora es el apóstol
Pedro quien se refiere a nuestro salvador Jesucristo como nuestro Dios, sin embargo en la Biblia del lenguaje
sencillo se traduce aun mas claro: BLS “Yo, Simón Pedro, estoy al servicio de Jesucristo, quien me envió a
anunciar su mensaje. Reciban mis saludos. Jesucristo, nuestro Dios y Salvador, ha sido justo y bueno con
todos ustedes, pues los hizo confiar en él, como nos hizo confiar a nosotros.”
 “Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es
verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.”
1Juan 5:20 ya vimos al apóstol Pablo y al aposto Pedro afirmando que Jesús es Dios, sin embargo en este
texto vemos al apóstol Juan confirmándolo; recordemos que la Palabra no se contradice, al contrario se
confirma ella misma. Dice la Escritura que en boca de dos o tres testigos estará todo asunto (2Corintios
13:1).
 “de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las
cosas bendito por los siglos. Amén.” Romanos 9:5 En este texto se afirma que Cristo es Dios, y por la
Palabra entendemos que Jesús es el Cristo el hijo del Dios viviente, recordemos que esta fue la revelación
que recibió el apóstol Pedro cuando Jesús les pregunto: “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondiendo
Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Y Jesús, respondiendo, le dijo: Bienaventurado
eres, Simón, hijo de Jonás, porque esto no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.”
Mat 16:15-17 reconocer que Jesús es el Cristo y que Jesucristo es Dios solamente nos puede ser dado por
revelación y es una demostración de que somos nacidos de Dios: “Todo aquel que cree que Jesús es el
Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido
engendrado por él.” 1Juan 5:1
 “y a su debido tiempo manifestó su palabra por medio de la predicación que me fue encomendada por
mandato de Dios nuestro Salvador,” Tito 1:3 Si nos damos cuenta en este texto es Pablo quien esta
hablando, quien según la Escritura recibió el mandato de la predicación del evangelio por Jesús cuando se le
apareció camino a Damasco (Hechos 9:5), sin embargo en este texto Pablo se refiere a Jesús como DIOS
NUESTRO SALVADOR.

CONCLUSIONES
La Biblia muestra claramente que Jesús es Dios manifestado en carne, sin embargo esto es un misterio “EL MISTERIO
DE LA PIEDAD” si nosotros lo hemos entendido, es por misericordia y porque somos hijos de Dios a quienes Dios ha
dado a conocer sus misterios. La Escritura claramente nos enseña el principio de adoración, donde se afirma que
solamente Dios es digno de adoración, sin embargo vemos este cumplimiento en nuestro Señor Jesús quien fue
adorado cuando fue introducido en el mundo, fue adorado al momento de su nacimiento, fue adorado durante su
ministerio como ungido, fue adorado también como resucitado y cuando ascendió a lo alto y fue recibido en gloria
se sentó a la diestra de la majestad de Dios, recibiendo un nombre que es sobre todo nombre para recibir adoración
por los siglos de los siglos. Amén.