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eee eS ee Capitulo 3 ern PROCESAMIENTO DEL NUMERO a nee gee ant ene 4, SEMIOTICA DEL NUMERO Aspectos generales: los tres codigos Las cantidades numéricas se codifican en sistemas semioticos que, segin ha sida corsiderado en capitulos previos, son diversos y establecen una rela- ee “ecesartamente formal con las propiedades matematicas del refe sot tl uso del nimero por los Sujetos cognoscentes se realiza mediante 12 rerntpulacton de esas representaciones, constituyendo un tpico de debate ee gud medida y de qué manera ls individuos acceden y movilizan concepts Suramente abstractos en su arquitectura cognitiva. Reservaremes & término parmero para ese referente abstracto, que vale por una cantidad determi gary que es independiente de cualquier modalidad representaciona! © cédi- G0. Cuando se trata de las palabras dela lengua natural que se adscrer los oe ncroe continuaremos empleando el término palabras-niimero, y fina\mer per para et sistema notacional empleamos el término que lo Ideatiicas £9 sete caso ardbigo los cuales son habitualmente (lamados numerates (ver Os. Ghema 1). fs preferible evtar el término “digital” para dicho cOdigo ya et seta confuso. En todo caso, el término digito sera empleado para designe Teiatteres ardbigos individuales. De esta manera no solamente adoptames the terminologia consistente y diferenciada, sino que ademas mantenemes vocabulario usual en los trabajos de investigacién. Las cantidades puts, s¢ fepresentaran en codigos que siguen sus reglas propias de composicion, a Gertie de las cuales el aparato cognitivo computa dos variables: 'a Pop alls de formacion, y luego la cantidad que se deriva. Para el caso de nies: Fe ttturas existen tres codigos de uso habitual (ver figura 1). Dos codigos para las palabras-nimero: el cOaigo verbal oral bajo modalidad audioverbal y 48 | Sergio Dansilio a eee ‘cuyo contenido se indicara con barras paralelas inclinadas (/treinta y ocho/), ¥ el cédigo ortografico, indicado en mayasculas (TREINTA Y OCHO), de mo. dalidad visual. Los numerales arébigos constituyen un cédigo independiente, ‘gue se representa bajo modalidad visuoespacial 0, quiz, en situaciones es. eciales (sistema Braille) mediante modalidad somestésica. El pasaje de un Codigo a otro constituye los procesos de transcodificacién, que, de acuerdo a lo que sera analizado posteriormente, no siguen mecanismos sencillos ni emplean trayectos cognitivos reversibles (v. gr.: no se sigue el mecanismo para la transcodificacion /ocho/ > "8", que la inversa). Las rutinas Computacionales en un sentido y en otro son diferentes. Se trata, como ‘consideran Deloche y Seron, de una actividad linguistica compleja (1984). Esquens 1 Diferentes términos empleados en la neuropsicologia de las facultades matematicas, NUMERO {roferente) NUMERAL NOMBRE DE NUMERO (ceifra?) Sistema notacional PALABRAS-NUMERO digo verbal Los procesos de transcodificacién, sin embargo, poseen una serie de simplicidades que, comparados con otros dominios lingUisticos, proporcionan lun ambito privilegiado para el estudio de la arquitectura cognitiva subyacen te. Estas simplicidades son: 1) Aunque et conjunto de los niimeros naturales es infinito, los lexicones para los tres sistemas de codificacién son reducidos: (a) El léxico verbal (palabras-niimero, fonologico u ortogratico) es de 25 ‘elementos en francés, 31 en inglés y 29 unidades léxicas en espaol, a las cuales deberia agregarsele la conjuncién “y”, “mil”, los morfemas ligados "ciento—" 0 "-cientos”, i Los trastornos del edleulo y el procesamiento del ndmero | 49 Ficuea 1 audioverbal e CINCO; Haameree ene, f visual - visuoespacial Wax Los tres cbdigos de utilizacion habitual, Los mecanismos de transcodificacién estén Sehalados mediante fechas, las cuales se indican por letras para destacar que constitu: ‘yen mecanismos computacionales istints, Ene extremo superior de la figura se mucs, ¥en representacion pictogrdfica de la cantidad codificada. En el extremo inferior representa el cinco abstracto, como “cinqueidad” , es decir, la propiedad numérica fe todo conjunto + de elementos, entendiendo que “Nx”, "x es un nmero” (x, tendo hnomero, es una clase de clases) que en este caso corresponde al entero [5] 50 | Sergio Dansilio {by €1 téxico para ardbizes (° numeral’ casos), es de nueve mas el Core de uno-a-uno, y no hay polisers . gr: a 32. 4 TREINTA Y DOS solamente, 7 fen todos 105 Ya correspondencia uno-auno practicat ransvodificacion sean tiviles, particulal Fndoeuropea. Se requiere, °F ‘principio, Un sintagmas que son 125 palabras-namero © de aint aformaciones adecuacas Por eyempl dos cientos cuatro! > 204 GE reresclentos veintres/ 309 {no figt Vajatrociensas! > 400 (eh RESET se La transcodificacion no Pus la inversa: 503 > Jeinco - cero - tres! apinientos tres) > 500 3 eLcaricter reglado de los Process det dido de acuerdo 2 10 considerado e" en una historia largamente independiente Rructurates producto de o> cambios ti Rresidad especial pars et sistema or tontenide semantico estén en juego en 2) La naturaleza de (@ tL Serespondencia entre Los sit derecha o convirtiendo cad? ‘unidad lexica en st thas tardiamente debieron sobreponer irregularidade vrectmat (wenninges, 1992), Fe ‘confticto, que vil jo en ta transparencia de {2s alabras némero chinas, Sener una cognitivo, complejidad Gu jinstaura toda ei roblematica en (0s trasiortes de las facultades mater pian en tos inicios de 1a jquisicton det sistema MBO es, como se le ama en algunes semas notacionates ¢= Wee orresponden /trentay dos! Cass con et mismo referente)- case unica en el sisterna Un- Sromo "aesignadores rigtdos”. raptica que tos procesos 3S ren tas Lenguas 4. procedencia tas fygor> erecta © de (2 TEU el morfema "—cientos’ transcodifica como un "O") tra en ta natacion pero implica que et numeral debe estar cconstituido por tres digitos) ‘transcribe mediante “dos eros”) rede producirse directamente 26 inquierda & ontraparte notacional, 9! ranscodificacion puede ser ent Oe pit 2. Las palabras-nem es tie ies numerals arabs, ¥ 246 we inconsistencias ©5° smaticas pero tam El propio numero ¥ eas correspondencias de code: Los trastornos del céleulo y el procesamiento del nimero | 51 4) El tercer componente de simplicidad es que la gramatica de ambos sistemas 0 codigos (el de las palabras-numero y el de tos numerales), puede ser especificada con minimas reglas. Para el caso de los numerales arabigos la unica regla es que el 0 no puede ser escrito al inicio de la cifra. Desde ya puede advertirse que cualquier alteracién de elementos dara siempre algun numero, no habré arabigos ilegales, no habra tampoco "no-numerales” que aseguren un procesamiento asemédntico de la cadena. La gramatica de las Palabras-nimero (que en este caso serian mas apropiadamente llamadas ssintagmas-numero) es mas compleja pero admite una serie de especificacio- nes que varian en detalles con respecto a las lenguas. Asi después del rango de la decena se da una serie de irregularidades llamadas particulares (\os "— teens", "fifteen...") y que corresponden en el espafiol al once, doce, trece, catorce y quince. Posteriormente se componen morfemas estableciendo re- laciones aditivas mediante la asociacién del morfema que indica el rango y el Que indica la unidad ("diez-y-seis”; "veintitrés"; “cuarenta y dos”). En algu- Nos casos por factores no especificos se contraen ambos morfemas y en ‘otros casos se mantienen diferenciados y transparentes como sucede en el Inglés. No hay en el espaol formas multiplicativas usuales como et caso del “quatre-vingt” para el francés. Finalmente, las ambigledades sintacticas varian en su relacién aditiva 0 multiplicativa de acuerdo a la posicion que ocupan en el sintagma (mil-doscientos; doscientos-mil). En el espafol el morfema "-cientos” se diferencia de su correlativo "ciento” ya que en el primer caso establece una relacién multiplicativa que se marca con el plural ademas de no darse de forma libre. Todos estos factores deben tenerse resentes para comprender no solamente el patron de errores que producen los pacientes discalcilicos o acalcilicos sino también para acceder a los mo- delos de adquisicién de los sistemas simbdlicos. Columna 0 Base y Posicién Partiendo del estudio de pacientes afésicos, y bajo la concepcion de que la semiotica matematica constituye un dominio dentro del ambito mas amplio de (0 linglistco, Deloche & Seron han realizado una pionera y rica serie de investi sgaciones donde pudieron establece,siguiendo el abordaje de la Neuropsicologia, Cognitiva, una serie de hechos con respecto a la forma de representacion y os mecanismos de transcodificacion que siguen los distintos cbdigos numéricos, demostrando un grado profundo de autonomia con relacin a otros cédigos y en Particular al sistema lingistico en general (Deloche & Seron, 1982; 1984a; 1984b; 1985; 1987). Las tres lineas de investigactén con las cuales estos trabajos se ‘encuentran relacionados siguen las orientaciones clésicas ya mencionadas antes. 52 | Sergio Dansilio por un lado, extender el concepto semiotgico de las acalcuay distinguiendo Patre el procesamiento de las palabras-nimero y fos sisters rnotacionales, yet care Froplamente dicho, ta "verdadera” acalcilia © anarknens (Hecaen, fanguertergues & Houle, 1961). Por otro lado, ¥ con respecto al aspecto Angralingistico, se plantea la independencia de los sisters, rnuméricos 0 de Gigitos y nmeros, y el procesamiento de letras ¥ palabras (afasias, alexias, swafias. Finalmente, se ha pensado en una pose diferencia hemisférica a partir de la madalidad de superficie de os codigos ‘empleados, ya sean fonotogicos rarer gerafics, o Logosréficos. Estas tres vetas de estdis rneuropsicologicos proporcionan no solamente herramientas para ‘comprension de (os trastomnos ue presentan los pacientes, sino tambien para 'o elaboracion de modelos de procesamiento normal, El objetivo principal ya to && ‘establecer disociaciones Frueses (alexa para niimeros / alexia para palabras, afasia / acalculia; etc.), Sresnstrutr modelos detallados que describan los subprocess ‘involucrados en los diversas tareas del procesamiento numérico. vera gagos en el patron de errores en pacientes lesionades cerebrales, particularmente cuando se afectan areas vinca0at ‘al Lenguaje, tienden 2 eardar cierta consistencia (Deloche & Seron, 1987; Deloche & Seron, 19840; seer seron, 1985). En uno de os trabajos, por eJenPio, Deloche y Seron pelocne 7 pacientes afésicos a los que Le fueron presentados 100 items para torn de transcodiicacién (19648). La deseripcion de fos re siguid los ralferios clasicos de tipificacion (delecciones, adiciones con = pperseveracién), crierrtrando que la mayoria de los errores se corresponden €2h ‘el estimulo STrgmal, especificamente en un 87 %. Los autores, d& mare bruta, encon- ort se, de ese 87%, se respeta la magnitud de la cifta jane GY 37 &de are ce hay excasos digitos adicionales en un 31 % de (os Cash 3 Mt namero 1 crerable de dios adicionados en el 32% de los casos. EL patron de errores fredominante muestra una sustitucion de numeraies Sve, rnumeros referen- redomeuentran en igual orden dentro del respectivo rango (1 14-40, por ejemplo), o si se mantienen en el rango las sustituelones cconstituyen numeros Styacentes o muy proximos (5 > /ses/ y no /nueve!) Errores de naturaleza acyacenttnucho menos frecuentes. Esto constituye un indice de Aue ‘el lexicon para las palabras-nimero sigue un orden, de ‘acuerdo a dos parametros, el Fango y el orden dentro del rango, pero ademas ave posiblemente tos propios range ¥ Spresenten estrategias no otalmente aleatorias de Seo al namero. crores os, de acuerdo a estos hechos, comprender No So\aTiea la semio- logia de los errores especificos en pacientes (estas ‘modalidades también vere (pare que son vatidas en las discatculias), sino la arquitecturs cognitiva normal de las representaciones numéricas Posici decal Enlaestr ccodificar’ cientos”; Arébigo Lose de ahi qi tal fonot que req tualidad & Seron y Seron, tiene un (1987). | propias, acuerdo tonces é aribiga digitos » estimulo |p encon- 137 de }niimero eerrores |referen- = 40, por bpimeros bpturaleza llexicon petros, el bs propios Kenamero. Ha semio- ya normal Posicién dentro decolumna UNIDADES [Los trastornos del eéleulo y el procesamiento del niimero | 58 Ficura 2 Columnas PARTICULARES 9 Nueve Dievinueve Noventa 8 Ocho Dieciocho Ochenta ? Siete Diecisiete Setenta 6 Seis Diewiséis Sesenta 5 Cinco Quince Cincuenta 4 Cuatro Catorce Cuarenta 3 ‘Tres Treee ‘Treinta 2 Dos: Dove Veinte DECENAS Once. Dik Uno En acstructura del lexicon se especifican todas aquellas unidades léxicas que permiten odificar cualquier nimero. Se agregan las ambigledades sintacticas (“clento —"; "— mits "y") Arabigos Los caracteres arébigos poseen individualmente una naturateza logografica, de ahi que compongan un sistema notacional distinto de la escritura occiden tal fonografica. En gran parte esto explica el diferente tratamiento cognitive {que requieren, su relativa indemnidad en las afasias y las alexias, y la even: tualidad de un procesamiento por mecanismos hemisféricos derechos (Deloche f& Seron, 1987}. El caracter logografico, sin embargo, de acuerdo a Deloche y Seron, se pierde en cifras multi-digitos ya que en dicho caso cada digito tiene un significado distinto de acuerdo a la posicién que ocupa en la cadena (1987). No obstante, en el cambio posicional preserva las unidades que le son propias, no siendo similar al cambio de significado en homografos chinos de Pouerds al contexto, por ejemplo. Cada arabigo (digito), corresponde en- tonces alo que se denomina un primitivo lexical. El significado de la forma arabiga en la cifra, es decir, su valor, se define mediante la suma de los digitos componentes elevados a una potencia de diez (sistema decimal) se- gin el lugar que ocupan. Para 384: 3x 10'+ 8x 10' + 4x 10° 5A | Sergio Dansilio in el caso de que haya un cero posicional vease que el mismo no figura ‘como valor en la representacion det ‘significado. Para 2 Dx toe axe ‘aca debe establecerse una diferencia P=t% aquellos ceros que, compues tos de una cifra, corresponden 2 una cinidad lexical (20 > /veinte/)- Para 240 (donde 40 > /cuarenta/): 2x 10+ 4x 10" nas adelante nos detendremas en las deren cognitivas que implican cetprimer tipo de ceros, cayo valOr e0 et “intagma numérico es exclusivamen- cPotacional, y el segundo tipo de cerds, Sie, ‘establecen una entidad (ingits” tica diferente en tanto componen UN Gtidad léxica individual. Dicho de franera mas clara: en la dimension ne otingiistica "40" se comporta tgual que "4", y diferente a "41". En el primer caso ©5: 4x10" ‘en el segundo caso es: ax toe tx 10 La diferencia tiene una relevancia directa Pa? determinar et tipo de procesamiento que debe realizarse Co ‘cada caso. EL pasaje de rango s° Pigetua en el primer ejemplo medianve palabras-nimero monomorfemicas: erect tpencionado que is historias de os gSh02S ‘sistemas representacionales YorGiferentes, de ahi que estas éstrucit ee cofrezcan discrepancias © sor guedades, Porto pronto, piensese Gus ‘escritura de numerales arabigos amblaurallo para ser concebida de derech® © ‘ezquierda, sentido en el que se destTendd las cantidades, pero se Ween Oe jzquierda a derecha una vez Yar gas en los sistemas escritos Centrocurera irecotatinos (Menninge p90), En un mecanismo se parte de 12 Mrgastruccién del niamero en sentido Treciente, en el otro se parte de | Sproximacion a la cantidad total Palabras-nimero ‘parti de informacion det tipo de error: ‘en ta transcadificacién, tareas de agrupactén semantica y juicio de gramaticalidad extraida de pacientes tears, Deloche y Seron (19822, bi 1985; "Wea, 1985), han propuesto que él procesamiento psicolingbistico de 25 Unidades lexicales de las palabras-namers Figue un marco estructurado de syardo a. dos coordenadas. Por un (ado el sistema se. correspond ‘como segu texica dent decenas. | cordenados esta carac pertenece columna. sintactica: ny", Lose 4) 2? y los ere 340° Lose o> / todo el ¢ 2. ERF Det afectan ‘en fot los ara sintacti caso hi puede posicio afecta preser sintac! preset muest 42 4os trastornos del edleulo y el procesamiento del nimero | 55 Pertenece (unidades, particulares o decenas), y la posicién dentro de cade Solumna. Los elementos restantes del lexicon operan como ambiguedades Sinacticas © morfemas tigados: "mil", “ciento—”, "cientos", la conjuncion "y", Los errores lexicales afectan a los primitivos léxicos individualesr 49 Icinco/ 12 > /veinte/ ¥ los errores sintacticos involucraran a las ambigliedades sintacticas: 340 > /clento treinta y cuatro/ os errores de columna, sin embargo, pueden ser de naturaleza sintéctica (20 > /dos/). La distincién se realiza observando el patron de erroree on todo el cuerpo producido por el paciente. 2. ERRORES LEXICALES Y ERRORES SINTACTICOS, Pe manera general, se denominan errores lexicales aquellos en tos que se tan los Componentes individuales de una cifra, ya sea en notacign arébiga © en formato verbal: hay sustitucién de un item \éxico por otro (en el ease go los arabigos cada unidad léxica corresponde a un digito). En los errores Sintacticos se perturba la relacion de las unidades \éxicas entre si. En este caso hay diferencias que dependen del formato representacional, lo coal puede dar lugar a confusiones. Para la notacion ardbiga, de naturalece Bpsrclonal, la adicién o deleccion de digitas (especialmente ceros o unos) afecta la estructura sintéctica. Al establecer la correspondencia con las re. Presentaciones verbales, los errores comprometeran a las ambigledades sintécticas en los procesos de transcodificacin. Los errores lexicales que Presentan los pacientes afésicas en la produccién de palabras-numeros de ‘muestran la pérdida de la informacién acerca de la identidad de la columna (14> scuarenta/), 0 ta informacion de posicién dentro de la columna (16 > 156 | Sorgio Dansilio aa ini eee /diecisiete/). El patron discriminado de errores constituyé et hallazgo empi- rico que permitio proponer el marco de organizacién det lexicon para nume. Tos, Debe entenderse que en estos casos se afectan los primitivos lexicales, y vale pues lo dicho previamente con respecto al caso de que haya un "0" 0 un “1”, En efecto: el hecho de que "14” se produzca como “/cuarenta/” signi. fica que una unidad léxica sustituye a otra unidad. Es diferente el caso si la palabra-nimero producida fuera /cuarenta-y-uno/, ya que aqui existe una dimension sintéctica que indica una diferente naturaleza cognitiva del error. Deloche y Seron sugieren que ciertas categorias de palabras (dias de la sema, ‘na, meses del afio) siguen también una organizacion en columnas, Estas tunidades lexicales ordenadas de manera serial son pasibles de incurrir en errores paraletos alos hallados en las palabras nlimeros (1984). La disociaci Con errores sintacticos, donde la produccién de los functores esta afectada y Se preserva la dimensién estrictamente lexical: 345 > /tres cuarenta y cinco/ 1200 > /doscientos mil/.../ciento veinte/ 30403 > /trescientos cuatro mil tres/ argumenta por una disociacién en los procesamientos semantico y sintéctico ue no pareceria ser formalmente distinta a la observada en el lenguaje Seneral, tal cual se observa en pacientes con afasia de Wernicke 0 de Broca (Deloche & Seron, 1982; 1983; 1985; 1987). Creemos que, actualmente, la dlsociacién debe entenderse como una diferencia lexical y sintactica, que no semantica, y el paralelismo con los ejes de perturbaciones en el lenguaje se da a un nivel altamente formal, Sucede que Deloche y Seron interpretaban gue el error entre columnas (15 > 50.0 /quince/ > /cincuenta/) correspon. dia ‘a lo que llamaban una “confusion semantica”. Pero, especificamente, la dimensi6n semantica de las palabras-nimero 0 de cualquier otro sistema epresentacional, debiera reservarse para el nivel de la comprensidn. Los cerrores lexicales, muy poco frecuentes, se asocian a las afasias de Wernicke (1984; 1987), pero resta mayor informacion para establecer una relacion sistematica entre los errores sintacticos y las afasias de Broca con agramatismo. Deloche y Seron han descrito, no obstante, una dificultad en Pacientes agramaticos para manejar informacién jerarquicamente estructurada, con lo cual se desintegra ta composicion sintactica del numero (1985). Este fendmeno afecta los functores sintacticos tales como "cien”, ciento”, “cientos”, “mil”, y con mucho més frecuencia cuando se encuen tran en una relacién multiplicativa (v. gr: trescientos mil cuatro) que cuando mil trescientos cuatro), establecen una relacién aditiva (v. g1 SFR Sage3eees9 integrar Los trastornos del céleulo y el procesamiento del mimero | 57 3. PROCESOS DE TRANSCODIFICACION Los algoritmos cognitives de transcodificacién pueden seguir, en princk- Plo, dos trayectos (Deloche & Seron, 1982a; 1982b). Por un lado, se accede a {a representacién semantica del numero codificado en su formato arabigo, y 2 partir de dicha representacién se realiza la busqueda lexical, es decir, se computa la cantidad previamente a la recodificacion. Por otro lado, la transcodificacién puede seguir un mecanismo directo de rastreo izquierda a derecha, siguiendo reglas de contexto que se van aplicando sobre cada uni dad lexical para obtener la transcripcién final. En estos casos se esta par- tiendo det codigo arbigo para recodificar en cédigo verbal (Lectura de arbigos en alta voz) (Deloche & Seron, 1982b). Las reglas de contexto serdn diferen- tes cuando se procede desde un formato verbal a un formato arabigo (escri- tura al dictado de ardbigos) (Deloche & Seron, 1982). No puede perderse de vista que las distintas rutinas de pasaje entre un codigo y otro implican computaciones diferentes, y probablemente recluten redes de conexion encefalica también discriminadas (no precisamente regiones bien localiza- das), segin ya fue mencionado previamente e ilustrado en la figura 2. Por otra parte, cada formato de codificacién comporta recursos cognitivos aso- ciados distintos, en gran medida inespecificos. Asi la memoria auditivo-ver- bal soporta los formatos orales de las palabras-nimero, y los mecanismos de \ectura fonografica inciden sobre los procesos de lectura de palabras-nimero en su formato ortografico. Ante una dificultad para la decodificacién o la roduccién audioverbal, asi como en la memoria de trabajo, entonces, la transcripcién del nimero a su forma ortogréfica 0 su presentacién como estimulo, permiten indirectamente acceder al status representacional de las palabras-numero. Los procesos de transcodificacién podrian verse perturba~ dos, pues, por factores que no son propiamente numéricos o algoritmicos. No obstante, veremos més adelante las posibilidades de que los mecanismos de transcodificacion empleen recursos cognitivos generales y no especificos para el dominio de las matematicas. Los ceros, en los procesos de transcodificacién, poseen dos categorias desde el punto de vista cognitivo (Grana et al., 2003). Los ceros que integran lun primitivo léxico y asi responden a una unidad conceptual, y los ceros que Fesultan de un proceso de concatenacién para lograr la sintaxis reglada del arabigo. En el primer caso se trata de aquellos ceros que aparecen en las decenas (10 a 90) donde tos conceptos primitivos se corresponden con cada morfema de acuerdo a lo ya visto en el modelo de bases. Estos ceros que integran el primitivo conceptual (C10); (C20); etc., se encuentran como un 58 | Sergio Dansilio cero interior en ta secuencia arébiga (30642), al final (32470), 0 en ambas posiciones (30180). Grana et al. los denominan ceros lexicales, y su relacion de activacion con las formas ardbigas 0 verbales son directas: (60) fa 60 / sesenta/ Los ceros que resultan de una operacion de articulacién final con los componentes de la cifra en su relacién multipticativa, y en algunos casos de articulacién y sobre-escritura para registrar la relaci6n aditiva, se denominan ceros sintdcticos. En el primer caso es un ejemplo [2 x 1000 + 6 x 100] > <<2600>> cen el segundo caso [2 x 1000 + 6 x 100 + 7] > <<2607>> Puede observarse que en ambas situaciones el morfema correspondiente es el mismo (-cientos), y que ademas los morfemas con los cuales se empa~ rejan tales ceros constituyen lo que mas arriba habiamos denominado ambi- giiedades sintacticas. Arabigos tales como <<2030>> incluyen ambos tipos de ceros, aumentando la complejidad de su estructura conceptual y psicolingiistica, y, como consecuencia, la vulnerabilidad a la generacion de errores. Grana et al. describen un caso donde se demuestra que la dificultad de transcodificacion aumenta desde arabigos sin ceros (XXX), arabigos con eros lexicales (XXXO 0 XOXKX), hasta arébigos con ceros sintacticos (KOXX XXOX), 0 mixtos (XOXO 0 XOX00). Finalmente, los ceros interiores se acompa- jian de mayores errores ya sean lexicales (XXXXO; XOXXO) 0 sintacticos (XXOXX; XXO0K). Los ceros, entonces, no son insertados en la cifras al final de las etapas de procesamiento, como postulan los modelos abstracto-modulares Clasicos (McCloskey, Caramazza, & Basili, 1985; McCloskey & Caramazza, 1987). En los procesos de transcodificacion que implican multiples pasos (ce~ ros interiores, lexicales 0 sintacticos), es posible que incida un factor de sobrecarga ya sea en la memoria-buffer o en la secuencia cinematica al programar la produccién grafica del arabigo. Los ceros lexicales proceden directamente det concepto numérico, son mas faciles entonces de manipular, mientras que los ceros sintcticos representan una cantidad nula asociada a un determinado valor que lo da la posicién y la estructura total del numero. bn ambas, [relacion {con tos keasos de ‘pominan ndiente empa: fo ambi- tipos de Ptual y tein de ificultad |g0s con (KOK 0 tcompa- (00KoXx, Ude tas ‘dulares \mazza, 505 (ce- ctor de Stica al ‘oceden nipular, iada a mero. Los trastornos del efleulo y el procesamiento del niimero | 59 4. CARACTERIZACION DE LOS DIVERSOS TIPOS DE ERRORES EN LOS PROCESOS DE TRANSCODIFICACION VERBAL>ARABIGO. El concepto de base o columna, es utilizado para ordenar la estructura de los elementos que componen al léxico de las palabras-niumero, aunque no necesariamente implique que dicho lexicon se almacene a nivel mental de esa manera (Deloche & Seron, 1984). La importancia funcional del modelo es que, mostrandose que las dos coordenadas (columna y posicion) operan de manera independiente, el andlisis de errores nos permite inferir la informa- ion a la que el sistema no accede de manera adecuada. La tabla puede ser Ltil como protesis mental en las estrategias de rehabilitacion y de reeducacién. Por otra parte, aun para el c6digo alfabético, el lexicon que corresponde a las palabras-niimero parece estar lo suficientemente disociado del resto del vo- ‘cabulario mental para otra categorias de entidades. Habria una cierta inde pendencia de lexicones. La relativa autonomia de este léxico se explicaria tanto por las categorias a las que hace referencia (cantidades), por la siste ‘matica monosemia de las correspondencias, como por su sintaxis y hasta por el formato representacional visual en el que puede transcribirse (logografico para el sistema notacional arabigo). Considerando entonces estos hechos, pasemos a describir las diferentes clases de errores que se encuentran en sujetos con trastornos especificos en el dominio de las matematicas. No suelen encontrarse cambios entre sistemas lexicales, (por ejemplo: "PANUELO” — /nueve/), salvo que haya paralexias visuales por compromisos en niveles superficiales del procesamiento visuo-ortografico. Asi sucedia en Un paciente descrito por nosotros, quien presentaba una Degeneracién Lobar Fronto-Temporal a forma de Afasia No-Fluente progresiva, y producia erro- res del tipo "CUATROCIENTOS CUARENTA Y CUATRO” — /cuento un cuento/ (Dansitio, 1997). En otro orden, la capacidad de discriminar entre letras y arabigos se efectia ya en niveles periféricos del analisis visual, previamente al procesamiento ortografico (Dalmas & Dansilio, 2000). Se han descrito sin embargo errores donde se conserva la categoria \éxica (numerales, palabras- numero), pero en cuya génesis puede determinarse un factor de naturaleza psicolinguistica inespecifica, Son ejemplos extraidos del francés en la revision citada més arrit “CENT” > (/cingl) > 5 "TREIZE” > (/seize/) > 16 ue bien pueden considerarse error de tipo visuo-ortografico ato nie Paréntesis), y desde ahi se realiza la {ranscodificacién al formato ardbigo. En el segurdie 50, el error es fonol6. Sico. Advigrtase que, a pesar de las modificncioves vinculadas a factores Gxt Dataficos o fonoléglcos inespecificos de los cédiges huméricos, se mantie 1G Seleccion de items dentro de la categoria a qre Corresponde el estimu: '0. ES decir el sistema cognitiv preserva ta infor rece, de categoria, Prange. bien, © que haya una mala comprension del mame Lo relacién entre 1a transcodificacién y el acceso a las representaclanee semanticas de los rrumeros constituye otro problema que tratareno: nee adelante. Los errores ge cranscodificacién, de acuerdo a su mecanismo, entonces, pueden agru- Parse de acuerdo a los siguientes tipos: (1) Errores donde se compromete el procesamiento lexical de los ele- mentos individuales de los nimeros. 2) Errores de posicién dentro de ta base (un elemento lexical). Debe des- fa mar cd la naturaloza perseverativa del error (es decir, que provengan de {a mera falta de inhibicién o interferencia de esti er mop macuente en las acalculias y excepcionales en isc discalculias. En la {@ conjuncién "y". por ejemplo: “CINCUENTA Y Dos” 5 42 © "NOVECIENTOS CUARENTA Y TRES" + 944 ~ _ Htreinta y cuatro mil doscientos/ + 32200 Asi es muy a las decenas, "cA ftre Be | De igua, cuando el pa (% gr: "DO confunda co (b) Error Siguen el + "DIEG "DIEC "clEN También j do el proceso 160 — > 2500 En estos ¢ lexical presen gue se altera | "50" son much (2) Despiaz roducen por ¢ ‘mente la inestz el buffer fonoly Veamos, pi siguientes; Los trastornos del eéleulo y el procesamiento del némero | 61 "CATORCE” > 12 = [tres mil doscientos catorce/ —> 3215 = [dos mil quinientos yeinte/ — 2512 De igual manera que en el caso mencionado de las unidades, sucede ‘cuando el particular mantiene una relacién aditiva con la ambigliedad <> (v. gr: "DOCE MIL”), no apareciendo errores de este tipo, salvo que se confunda con un error de naturaleza sintactica ("DOCE MIL” > 1200). {(b) Errores de base o columna. Ya fueron analizados mas arriba Siguen el patrén de los ejemplos siguiente: "DIECISEIS” —> 6 (0 60) = "DIECISEIS MIL” —> 6.000 (0 600) "CIENTO TREINTA > 113 ‘También pueden interpretarse de acuerdo a un mecanismo similar cuan do el proceso de transcodificacion va de arabigo > verbal: = 160 -» /dieciséis/ = 2500 -> /doscientos cincuenta/ En estos casos, aunque se ajustan en principio al modelo de organizacion lexical presentado antes, se trata estrictamente de errores sintdcticos ya ‘que se altera la estructura relacional de la cifra, Otros errores como /15/ "50" son mucho mas raros. (2) Desplazamiento de un elemento lexical. En estos casos los errores se producen por recombinaciones de los componentes léxicos, donde probable: mente la inestabilidad de los trazos en la memoria operativa audioverbal o en el buffer fonolégico, explique en gran parte la perturbacién. Veamos, por ejemplo, as diferentes combinaciones de los morfemas siguientes: ale “CUARENTA’ “SIETE” 62 | Sorgio Dansilio eee ee armen (3) Procesamiento parcial del numeral. En este caso no se procesa de manera adecuada uno de los primitivos léxicos del segmento: “NOVECIENTOS CUARENTA Y TRES” —> 940 = "OCHO MIL TRES” —> 1.003 En este tipo de errores podrian incluirse los errores por heminegligencia, No serian, sin embargo, especificos de los nlimeros y debieran comprobarse €en otros sistemas semicticos. La heminegligencia izqulerda provoca omisio- hes 0 alteraciones en el procesamiento de cada unidad. Para utilizar los ‘ejemplos previos, "NOVECIENTOS CUARENTA Y TRES"” se escribe "43" (om sién) 0 "143” (error de completamiento retrogrado). Estos errores por heminegligencia se observan también en los pracesos de transcodificacién arabigo> verbal: - 2346 + /trescientos cuarenta y sels/ ~ 4205 — /cincuenta y tres mil cinco/ En el primer caso se trata de una omisién, en el segundo, de un mecanis- mo de sustitucién que hace un completamiento retrégrado ante dos digitos ue fueron erréneamente procesados. Desde el punto de vista semiolégico, ara poder inferir que los errores responden a la heminegligencia y no a otros ‘mecanismos léxicos 0 inclusive sintacticos, es fundamental encontrar que los errores siguen un patron constante donde afectan a la izquierda de la cifra, ‘Ademas, por supuesto, la heminegligencia, al ser un trastorno no especifico, involucra otra informacién ya sea perceptiva o inclusive motora. Se trata de. tuna perturbacién del foco atencional o de la representacién mental del hemiespacio contralateral a la lesién. Las heminegligencias derechas (por \esiones hemisféricas izquierdas) son excepcionales, sin embargo pueden iden- tificarse en la capacidad para decodificar estimulos complejos (palabras es- ccritas y numerales). A diferencia de la situacién anterior, se afecta el tramo final de la cifra, no suele haber omisiones y si errores de completamiento anterdgrado (2340 > /dos mil trescientos cincuenta/). La consistencia con respecto a la posicion afectada es el elemento que permite caracterizar el deficit. (4) En los llamados "functores” sintacticos ("mit", "cien”). Dichos functores umplen una funcién estructural aumentando la magnitud del numeral, ya sea de manera aditiva o multiplicativa. En la notacion arabiga se correspon den con el uso det “0” posicional. Se trata de errores de naturaleza sintactica: “MIL OCHOCIENTOS DIEZ” —> 18010 "CIENTO 7 "OCHO Ml Estos errores 8 tica que sigue el =} ante el morfema < los suele indicar ¢ veremos, se les pul cién como sobre-< sintacticas se coal dos "0": "DOS MIL TRES "CUATRO MIL (5) Mixtos. Cot tratada (6) En el regia Procesamiento dire mediante el siguie, “MIL NOVE, = (MILL neuf ~ "CUARENTA Estos errores su se lexicaliza de ma ‘embargo, se trata tructura sintactica como "desplegamie Conclusiones # Los errores si de alternativa segu cen a respuestas er zar cognitivamente rente de las formas cla de aparicién de la sistematicidad ¢ Procesa de esligencia. mprobarse ca omisio- ttilizar los 143” (omi- Fores por dificacion mecanis- 's digits iol6gico, 2aotros “que los, la cifra, recifico, trata de Ital det as (por mmiden- vras es. tramo miento a con izar el ctores al, ya 'spon- ctica: Los trastornos del céleuloy el procesamiento del niimoro | 68 ~ CIENTO TREINTA” — 30 ~ "OCHO MIL TRES — 83 (y 803) Estos errores pueden ofrecer diversas formas, ilustrando sobre la heuris- fica que sigue el sujeto. Puede sobregeneralizar una regla, por ejemplo, que ante el morfema <<-cientos>> siempre debe transcribirse uno o dos ceros. Se. {os suele indicar como errores de tipo XO 0 X00 respectivamente, y, como veremos, se les puede observar durante el aprendizaje normal de la numers cion como sobre-extensiones de reglas. En algunos casos las ambigledades sintacticas se codifican mediante un "1”, 0 inclusive con un “1” y uno o hasta dos 0’ "DOS MIL TRESCIENTOS -+ 21300 “CUATRO MIL DOSCIENTOS TRES” -» 410203 (5) Mixtos. Corresponden al 23 % de todos los errores en la casuistica tratada, (6) En el reglado de tos procesos de transcodificacién. Se trata de un Procesamiento directo término-a-término, Se expresan fundamentalmente mediante el siguiente género de errores: “MIL NOVECIENTOS CUATRO” —+ 10009004 > ("Mill neuf cents” > 10009100) > "CUARENTA Y CINCO” — 405 Estos errores suelen llamarse lexicalizaciones, ya que en el procedimiento se lexicaliza de manera aislada cada uno de los componentes de la cifra. Sin ‘embargo, se trata de errores sintdcticos, dado que se altera la propia es. tructura sintactica del numeral. También se hace referencia a estos casos como “desplegamiento del nimero”. Conclusiones i Los errores son considerados, por su sistematicidad, como estrategias de alternativa seguidas por el paciente, estrategias ineficaces ya que condu- Gen a respuestas erroneas. El andlisis de estas estrategias permiten la locali za" cognitivamente el proceso afectado. El abordaje es radicalmente dife- rente de las formas taxonémicas clasicas ya que no importa tanto la frecuen. Cia de aparicion de un género de error en el cuerpo total de la muestra, sino {a sistematicidad 0 consistencia de los mismos, y el hecho de que sigan 64 | Sergio Dansilio ciertas reglas de produccién, ya que una parte importante de los errores pueden ser inclasificables. La organizacién de (os primitivos lexicales mediante una estructura de columnas-base y posicfonamiento ordinal permite caracterizar el tipo de tras: tomo predominante en la transcodificacion del componente léxico. if Si bien no se asegura que los mecanismos de transcodificacion sean ‘exclusives del dominio numérico y auténomos con respecto a otras formas lingiisticas, hay si una independencia relativa entre la codificacion de canti- dades y el resto del lenguaje: » Y Se disocian de las afasias o las alexias en dos sentidos. Primero, que fo en todas las afasias hay perturbaciones en el procesamiento del umero, Segundo: en el caso de que coexistan, los trastornos en Los procesos de transcodificacién no siguen patrones necesariamente paralelos al componente afésico, ni cualitativamente ni en gravedad. _ ta produccion de secuencias erroneas de digitos no se realiza al azar sino que sigue reglas especificas al propio sistema: _ Habria dos estrategias globales de transcodificacién que, aunque en esencia remedan las estrategias de Lectura, son diferentes a ellas: {i) Una que sigue el contexto de la magnitud (preserva la magnitud) {i) Otra que seria contexto-independiente (no se preserva la magni- tud, como en el ejemplo de las lexicalizaciones) # Elestudio del patrén de errores y los caminos que siguen los numerates censu produccion abre ventanas para la comprension de la arquitectura cognitiva formal operante en los mecanismos de transcodificacién. La adecuada com prensin de los procesos afectados y ls procesos indemnes permite disehar planes de rehabilitacién o reeducacion racionales. ¥ Seguramente la forma de notacion condiciona la representacion de \a cantidad que se genera en el sujeto, siendo dudoso (aunque no imposible, al facnos en algunos casos) que el referente sea efectivamente formal-abstrac- to como realidad psicologica. No es lo mismo manejarse con: ‘“Quatre- vingt huit” (relacién multipticativa - relacién aditiva) Que con: ‘“Ochenta -y -ocho” (relacién aditiva) ©, siguiendo la misma lengua natural "Ocho veces diez mds ocho unidades” g iilese. [Los trastornos del eélculo y el procesamiento del niimero | 65 0: "Mds allé de ocho veces diez frutos, he agregado ocho més a a suma” Para decir “88”. Seguramente el formato de presentacién o el sistema notacional influyan de manera particular en la forma de representacin mental de las cantidades y quizés también en los algoritmos de célculo. No obstante este problema trata de la modalidad en la representacion semantica del niimero y lo consi- deraremos en el capitulo siguiente. Capitulo 6 ADQUISICION DE LAS HABILIDADES MATEMATICAS 1. DE QUE CONOCIMIENTO SE TRATA En la tradicién platénica-neoplaténica los conceptos matematicos poseen tuna naturaleza a-priori y se acceden, en ultimo términa, mediante la intui cin. En el momento de desarrollar una practica de investigacién empirica ‘acerca del conocimiento matematico, se vuelve extremadamente dificultoso hrallar el nivel de realidad psicol6gica de las entidades y los procesos asi consi- derados. Una estrategia distinta, que busque extraer informacion partiendo del origen y el desarrollo de estas formas del conacimiento en los seres humanos, promete ser més fructifera. Kitcher, siguiendo esta modalidad de analisis, afirma la tesis de que nuestro conocimiento matematico puede originarse en la percepcién sensorial, es decir, que no sea por naturaleza, independiente de toda experiencia (1984). La percepcién trata con lo que la teoria ecolégica de la cognicién de Gibson llama los “affordances” del am- biente, configuraciones de relaciones y rasgos fisicos mediante los cuales el ‘ambiente proporciona informacion acerca de los estados de cosas a los even- tuales agentes cognoscentes (1979). A partir de aqui, para Kitcher las mate- maticas describen la estructura de {a realidad: el error del platonismo es reemplazar la figura de las matematicas como una descripcion de propieda- des estructurales que se manifiestan en un cierto conjunto de instancias, por la figura de las matematicas como describiendo entidades abstractas que expresan a esa estructura. Kitcher se propone defender una forma "pecu- liar” de constructivismo. AL igual que el constructivismo ortodoxo sostiene {que las verdades matemdticas extraen su verdad, en un nivel, de las opera- ciones que realizamos. A diferencia de la mayoria de los constructivistas, sin embargo, Kitcher no entiende las operaciones de relevancia como transac- clones privadas en algin medio interior. Las manipulaciones familiares de 116 | Sergio Dansilio objetos fisicos en las cuales nos comprometemos desde la nifiez, son el para: digma de actividad constructiva. Y ademas, consideramos a los hechos y tenunciados matematicos como verdaderos no en virtud de lo que podemos hacer, sino de lo que el mundo nos permite que hagamos con él. La aritmé- tica se construye como un proceso de idealizacién: igual que los gases ideales de la fisica se relacionan con los gases actuales. La vision, entonces, de que las matematicas describen la estructura de la realidad, debe articularse con la actividad operativa de un sujeto ideal. Las nociones de "entidad”, se truecan en nociones de accién. Nocién como aquella de grupo (collection) se cambia por aquella de agrupar (collecting). Agrupar es un acto intimamente ligado a la manipulacién de ‘objetos fisicos donde se segregan unos de otros que no comparten una cierta caracteristica 0 rasgo (después: categoria), y se les asigna un lugar especial. ‘as tarde podremos agrupar los objetos en el pensamiento sin movertos sobre la mesa. ;Cuanto del acto fisico de mover pasa, sin solucion de conti- huidad, al acto del movimiento representacional?. Siguiendo a Cantor, la produccion de predicados sirve para ese agrupar los objetos sobre los cuales se aplican: las acciones de agrupamiento se vuelven abstractas. Van estable- iéndose jerarquias de agrupaciones donde se transforman no solamente las propiedades perceptivas iniciales sino también la figura del propio acto de agrupar, desagregar y reagrupar. Es un mecanismo intrinsecamente iterativo. Pero el agrupamiento no es la Unica forma elemental de la actividad mate: rmatica, debe considerarse ademas el acto de corre(acionar. El correlacionar empieza al emparejar un objeto con otro, accién que se indica en el espacio mediante un poner al lado de, encima de, debajo de, después de. La familiarizacion con la actividad permite relacionar esos objetos en el pensa: ‘miento. El Lenguaje, con sus propiedades predicativas y notacionales multipt cca y formaliza los niveles de correlacién (correlaciones de correlaciones de correlaciones, etc.), al igual que en los pasos de las agrupaciones. En resu- ‘men, las nociones primitivas que Kitcher utiliza para dilucidar la naturaleza del Conocimiento matematico son, primero, la de operacién. Segundo, las acciones de agrupar ciertos objetos y de ordenarlos primero, procediendo mediante pares. Tercero, el desarrollo de equivalencias entre las operacio- nes. En Kitcher el ordenamiento por pares constituye una nocién basica para la accién de correlacionar, y el agrupar es ordenar. Existen indudables coincidencias entre la concepcién de kitcher y la {que previamente, por el camino de la psicologia genética y constructivismo mediante, sostuvo Piaget (1987). La construccién del numero en el nifio se desarrollara para Piaget sobre las estructuras légicas de los Los trastornos del eéleul el procesamionto del niimero | 117 7 de tae antes de clases (esto es, relaciones de inclustin y clasiticacion), ¥, de [as relaciones de orden (articulacién de series de elemertng oon felaciones asimétricas y transitivas). Los dos géneros de consirnesioscy Gfectian en base a la manipulacion de los objetos, por lo evel corse srreayadas en la experiencia. Los conocimientos no se extraen de vex siuetas como tales, 0 de propiedades que le son inherentes de por si, sino Ue las acciones ejercidas sobre ellos. A partic de aqui Paget ceria par songalsiones que empiezan a ser divergentes, El numero ahora term 22 fuendo una construccion "endégena”, en tanto que products oe ios acciones mas generales del sujeto y de los movimientos actives de Coons hacién. ¥ acd es necesario distinguir al menos dos principios de ic psicolo: gia genética que no se solapan con la epistemologia de Kitcher, Primero, {as acciones de reunir, encasillar u ordenar no proceden de ia experiencia 0.1 2Prendizaje sino que constituyen estructuras presentes bioloatcene ts era’ haturaleza. Segundo, Piaget sostiene la existencia de marcar en las formas le los funcionamientos organizadores de la vida, 2. EMERGENCIA DE LOS PROTOCONCEPTOS NUMERICOS 5 2003): 1. La presencia en animales de diversas especies de atender a la realeay nana COMO propiedad de las cosas y eventos del mundo, y realizar computaciones elementales internas.

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