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Jane M.

Rausch 23

“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o


“Devoradora de Hombres”:
La frontera de los Llanos en la formación del
nacionalismo colombiano♣
Jane M. Rausch♦

Resumen

Tras hacer un breve recuento de la evolución del nacionalismo colombiano,


el presente ensayo se enfocará específicamente en la historia de una im-
portante frontera colombiana, los Llanos Orientales, teniendo en cuenta el
papel que ha desempeñado en la formación de la nación y aludiendo a tres
mitos generalizados sobre la zona. Luego sigue un estudio de la visión que
en la Colombia contemporánea se tiene del Llano; el ensayo finaliza con un
examen de los prospectos hacia el futuro de la incorporación integral de los
Llanos Orientales a la conciencia nacional.

Palabras clave: Colombia, nacionalismo, fronteras, Llanos Orientales.

Abstract

After a brief description of the evolution of Colombian nationalism, this


essay focuses specifically on the history of one important peripheral frontier,
the Llanos Orientales, taking into account both the role that it has played
in the formation of the Colombian nation and three popularly held myths

♣ Artículo recibido el 4 de octubre de 2007 y aprobado el 17 de octubre de 2007. Una versión preliminar
de este texto fue presentada como ponencia en la 120th Reunion Annual de la American Historical Asso-
ciation, enero 5-8 de 2006, Philadelphia, Pennsylvania, E. U. Deseo agradecer al profesor Richard Slatta
por sus útiles comentarios y sugerencias. Traducción de Juan Pablo Fernández.
♦ Doctora en Historia y Profesora del Departamento de Historia de la Universidad de Massachussetts
Amherst, MA 01003.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
24 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

about the region. A survey of contemporary Colombian attitudes regarding


this region follows, and the essay concludes by examining future prospects
for a more complete incorporation of the Llanos Orientales into national
consciousness.

Key words: Colombia, nationalism, frontiers, stereotypes of the Llanos.

Durante los últimos cien años, his- En Latinoamérica, sin embargo, la


toriadores de muchos países a lo largo conexión entre las fronteras y el con-
y ancho del mundo han examinado la cepto de Nación-estado es más proble-
interconexión entre el nacionalismo mática. Se ha argumentado que Brasil,
y las regiones fronterizas. En Estados Argentina y México han incorporado
Unidos, por ejemplo, el trabajo de sus fronteras en expansión a sus respec-
Frederick Jackson Turner, “The Sig- tivas identidades nacionales; en el caso
nificance of the Frontier in American de Colombia, por otro lado, la cuestión
History”, presentado ante la American resulta difícil de contestar. En primer
Historical Association en 1893, inició lugar, a pesar del hecho de que Colom-
un debate que sigue hasta nuestros días bia es una tierra de muchas regiones y
acerca del papel desempeñado por el por lo menos tres fronteras geográficas
Oeste como frontera en movimiento en distintas ­­­ -la costa Pacífica, la cuenca
la formación de la nación norteamerica- Amazónica y los Llanos Orientales-
na. De entonces a hoy (2008) distintos hasta hace poco los historiadores han
investigadores han refutado mucho de argüido que estas regiones periféricas
lo que ha venido a conocerse como “la
tesis de Turner”, y aún así nadie puede
negar que la idea de la expansión hacia
and the Borderlands”, American Historical Re-
el Oeste, reinventada luego en el con- view 91,1 (febrero de 1986), 66–81, y Limerick,
cepto del Destino Manifiesto, está fir- Patricia Nelson, The Legacy of Conquest: The
memente arraigada en el nacionalismo Unbroken Past of the American West, Nueva York,
W.W., Norton, 1987.
norteamericano.
 Para el caso de Brasil consultar Morse, Richard
M., (Ed.), The Bandeirantes: The Historical Role

Turner, Frederick Jackson, “The Significance of the Brazilian Pathfinders, Nueva York, Knopf,
of the Frontier in American History”, en: Annual 1967 y moog, Clodomir Vianna, Bandeirantes and
Report of the American Historical Association, Pioneers, Nueva York, 1964. Sobre Argentina
1893, Washington, D. C., Government Printing consultar Slatta, Richard W., Gauchos and the
Office, 1894, pp. 199–227. Vanishing Frontier, 2a ed., Lincoln, University of
Nebraska Press, 1992. Sobre México ver Weber,

En Taylor, George Rogers, (Ed.), The Turner David J., New Spain’s Far Northern Frontier: Es-
Thesis: Concerning the Role of the Frontier in says on Spain in the American West 1540–1821,
American History, 3ra. ed., Lexington, MA, D. Albuquerque, University of New México Press,
C., Heath, 1972, aparece una crítica a la tesis de 1979 y The Mexican Frontier: 1821–1846: The
Turner. Evaluaciones más contemporáneas apare- American Southwest under Mexico, Albuquerque,
cen en Weber, David J., “Turner, the Boltonians, University of New Mexico Press, 1982.

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nunca han tomado parte impor- Tras hacer un breve recuento de


tante en el desarrollo cultural del la evolución del nacionalismo colom-
país, cuyo centro siempre han biano, el presente ensayo se enfocará
sido las cuestas y valles de las específicamente en la historia de una im-
cordilleras en compañía de las
portante frontera colombiana, los Llanos
costas y las llanuras aluviales
del norte.
Orientales, teniendo en cuenta el papel
que ha desempeñado en la formación
En segundo lugar, el nacionalismo, de la nación colombiana y aludiendo a
que el diccionario define como tres mitos generalizados sobre la zona.
Luego sigue un estudio de la visión que
un estado de conciencia que
en la Colombia contemporánea se tiene
exalta un Estado sobre todos los
del Llano; el ensayo finaliza con un exa-
demás y hace énfasis primario
en la promoción de su cultura e men de los prospectos hacia el futuro de
intereses en oposición a los de la incorporación integral de las Llanos
otras naciones o grupos supra- Orientales a la conciencia nacional.
nacionales,
El nacionalismo en Colombia
fue (incluso para los estándares latinoa-
mericanos) un fenómeno que tardó en En su libro Nationalism in Latin
desarrollarse en Colombia, como habrá America: Diversity and Unity, Gerhard
de demostrar la siguiente discusión. Masur escribe que, en las primeras dé-
cadas posteriores a la Independencia, las
naciones emergentes de Latinoamérica

Reichel Dolmatoff, Gerardo, Colombia, Nueva
se mantuvieron cohesionadas por las
York, Praeger, 1965, p. 29. personalidades de los grandes líderes de
la gesta independentista: Simón Bolívar,

El célebre trabajo de Anderson, Benedict, Ima-
gined Communities: Reflections on the Origin and José de San Martín, Antonio José de
Spread of Nationalism, ed. rev., Londres, Verson, Sucre y Francisco de Paula Santander.
1991, ha sido puesto en tela de juicio por otras Por muchos años “fue patriotismo más
obras más recientes, como la contribución de holt,
Thomas, “The First New Nations”, en: Nancy
que nacionalismo lo que suscitaban sus
P. Appelbaum et al., Race and Nation in Modern nombres”, pero, anota Masur, en el caso
Latin America, Chapel Hill, University of North de Colombia, tras la muerte de Santander
Carolina Press, 2003; sin embargo, incluso Holt la vida política siguió siendo anárquica:
admite que el argumento de Anderson de que el
crecimiento de las comunidades criollas, los fun- las guerras civiles promovidas por dos
cionarios criollos y los periódicos desempeñaron fuertes partidos políticos -los Liberales
papeles decisivos en la fundación de las naciones y los Conservadores-, con frecuencia
latinoamericanas sigue siendo “un necesario punto
de partida” (p. vi). En su ensayo “Sobre Héroes y
Tumbas: National Symbols in Nineteenth-Century
Spanish America”, Hahr 85:3 (agosto de 2005), su propio provecho” (p. 426).
Rebecca Earle concluye que a lo largo y ancho de
Latinoamérica “durante el siglo XIX, la concepción  Masur, Gerhard, Nationalism in Latin America:
que la élite tenía de la nación fue siempre la patria Diversity and Unity, Nueva York, Macmillan,
criolla: el Estado creado en su propia imagen, para 1966.

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debidas a conflictos entre centralismo del que murió en la cruz”, asociando


y federalismo o en torno al papel de la así la independencia de Colombia con
Iglesia Católica, aplazaron el desarrollo una versión ortodoxa de la cristiandad
de un sentimiento colectivo de nación. Católica Romana.
Fue sólo hasta el régimen de Rafael El nacionalismo por el que abogaba
Núñez, en la década de 1880, que el Es- Núñez era cultural y aristocrático: ha-
tado empezó a promover una definición cía énfasis en que Colombia era “una
militante de la identidad nacional con el nación porque somos españoles, tanto
fin de centralizar el poder en Bogotá a en idioma como en religión”, definición
expensas de las identidades regionales que incluía a la población “blanca” al
y partidistas. Fue Núñez quien pro- tiempo que rechazaba los elementos
movió una constitución centralista en mestizos, africanos y nativos cuya
1886 que promulgaba una presidencia población estaba concentrada princi-
poderosa y respaldada por una Iglesia palmente en las regiones periféricas10.
Católica con el mismo poder. Núñez Durante la era Núñez (conocida como
también revivió el escudo nacional, la Regeneración), la clase dirigente
adoptado originalmente en 1834, y es- dio importancia a su historia de mando
cribió la letra del himno nacional, “¡Oh civil y constitucional y asumió con
gloria inmarcesible!”, con música del beneplácito el título de “Atenas Surame-
compositor Oreste Sindici. El himno, ricana”, empleando con gran habilidad
interpretado por primera vez en 1887 y lo que Carlos Uribe Celis, historiador
adoptado como himno nacional el 18 de social que ha estudiado en profundi-
octubre de 1920, es una remembranza dad la psiquis colombiana, ha llamado
poética de las guerras de independencia “el fantasma de la ‘alta cultura’ en un
en once estrofas y coro. Es de notar que contexto de ignorancia y atraso circun-
en la primera estrofa Núñez incluye los dante para lograr objetivos políticos de
versos “la humanidad entera, que entre dominación”11. Las élites recalcaban
cadenas gime, comprende las palabras que los presidentes de Colombia no eran
sólo políticos sino también humanistas,
gramáticos y escritores, todas ellas ca-

Ibíd., p. 30. Napoleón Peralta Barrera hizo hinca- racterísticas que ayudaban a neutralizar
pié en este aspecto del nacionalismo colombiano en
una charla que dio en la iglesia de la Veracruz de
a los militares. Incluso en el siglo XX,
Bogotá el 18 de julio de 2003. Dicha conferencia,
titulada “Los Mártires de la Independencia y la
cultura de la Nacionalidad”, apareció publicada 
Bushnell, David, The Making of Modern Colom-
en el Boletín de Historia y Antigüedades 90-822, bia: A Nation in Spite of Itself, Berkeley, University
julio-septiembre de 2003, pp. 613–620. of California Press, 1993, p. 144.

Melo, Jorge Orlando, “Etnia, región y nación: 10
Melo, Jorge Orlando, Op. cit., p. 96.
el fluctuante discurso de la identidad (Notas para
un debate)”, en: Predecir el pasado: ensayos de 11
Uribe Celis, Carlos, La mentalidad del colom-
historia de Colombia, Bogotá, Fundación Simón y biano: cultura y sociedad en el siglo XX, Bogotá,
Lola Guberek, 1992, p. 96. Ediciones Alborada, 1992, p. 201.

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los logros colombianos en el campo quiere decir que no haya habido desa-
cultural siguieron recibiendo el clamor rrollos importantes. Durante la década
internacional gracias al novelista y de 1920 intelectuales como Jorge Beja-
Premio Nobel Gabriel García Márquez rano, Arturo Castro y Armando Solano
y al artista Fernando Botero, sin men- hicieron una firme defensa del mestizaje
cionar a muchas buenas universidades y, en 1932, la invasión por parte de un
y exitosas editoriales. grupo de peruanos del territorio amazó-
nico colombiano de Leticia dio origen a
Al reforzar el poder del gobierno una declaración de guerra por parte de
central, Núñez esperaba debilitar la Colombia y a una explosión de fervor
división ideológica entre los dos parti- patriótico12.
dos políticos y superar las afiliaciones
regionales que para la mayoría de los La guerra, que finalizó en 1934
colombianos seguían siendo mucho con la victoria de Colombia, subrayó
más fuertes que su compromiso con “la la fragilidad del control ejercido por
Nación” como un todo. Estos esfuerzos, Bogotá sobre la parte oriental del país
sin embargo, parecen haber exacerbado y llevó al presidente Liberal Alfonso
las divisiones regionales y políticas, ya López Pumarejo (1934–1938) a intro-
que el ciclo decimonónico de guerras ducir políticas tendientes a ampliar el
civiles continuó sin interrupción, alcan- nacionalismo colombiano para incluir
zando su horrendo clímax en la Guerra no sólo los territorios, sino también
de los Mil Días (1899–1902), conflicto las clases medias y trabajadoras que
que culminó con la derrota liberal, tuvo los regímenes anteriores habían dejado
un costo de aproximadamente cien mil en el olvido. Tras adoptar el eslogan
vidas y preparó el escenario para el úni- “Redescubriendo a Colombia”, López
co caso importante de pérdida territorial Pumarejo afirmó:
por parte de Colombia, la secesión de
Descuidamos el territorio co-
Panamá en 1903.
lombiano, el cual permanece
Como indica Masur, aun el trauma desconocido por nosotros, y
causado por la mutilación de una parte abandonamos al pueblo a una
condición miserable y angustiosa.
importante de su territorio fue inca-
En mi opinión, no es necesario
paz de promover acuerdos de interés regenerar el país pero sí redescu-
nacional entre los partidos en pugna brirlo… Es necesario despertar
o de engendrar un espíritu integral de todas las energías humanas que
nacionalidad. A diferencia de México, han sido abandonadas… Hay
Brasil, Bolivia o Argentina, donde que hacer la conquista económi-
durante el siglo XX el nacionalismo ca del territorio nacional. Y, por
cultural y aristocrático evolucionó hacia sobre todo, hay que libertar las
un nacionalismo popular y revoluciona-
rio, Colombia siguió fragmentada en lo
territorial y en lo ideológico. Esto no 12
Melo, Jorge Orlando, Op. cit., pp. 100–101.

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inteligencias cautivas, que nunca “de este modo, Colombia representa


fueron estimuladas13. un caso en el que la energía del na-
cionalismo ha sido incapaz de superar
López Pumarejo llevó a cabo nume-
las tendencias centrífugas que durante
rosas reformas económicas, políticas
tanto tiempo han amenazado al pue-
y sociales de gran importancia, pero
blo latinoamericano” 15. Poco había
a pesar de sus esfuerzos no logró que
cambiado para la década de 1990. En
surgiera un sentimiento integral de
su aclamada historia del país, David
identidad colombiana. A mediados del
Bushnell afirma que los colombianos
siglo XX el escritor colombiano Jorge
siguieron teniendo un sentido muy am-
Padilla todavía pudo observar que “so-
bivalente de su nacionalidad y, que para
mos un archipiélago de opiniones de
bien o para mal, su país siguió siendo
tesis, de intereses encontrados”. Para
una colección heterogénea de regiones,
reforzar su generalización, Padilla narra
la siguiente anécdota: en 1946, cuando constituyéndose en “una nación a pesar
el Partido Liberal estaba dividido entre de sí misma”. Más aún, Bushnell notó
quienes apoyaban a Gabriel Turbay que los colombianos eran “los primeros
como candidato presidencial y quienes en decir (y a voz en grito) que Colom-
apoyaban a Jorge Eliécer Gaitán, el bia carece de una identidad nacional
Directorio Turbayista envió una circular auténtica o de un espíritu de verdadero
por vía telegráfica en la que explicaba nacionalismo”16.
las reglas de la campaña. Un día el Di- El historiador caribe Eduardo Po-
rectorio recibió una respuesta, originada sada Carbó, lleva la generalización de
en un caserío perdido en la inmensidad Bushnell un paso más allá al sugerir
de la provincia, que decía: que, durante los últimos treinta años, los
Directorio Liberal, Bogotá intelectuales colombianos “nos dedica-
mos sistemáticamente a ‘deconstruir’ la
Recibí su circular. Con todo nación”. En el ensayo “El regionalismo
respeto informo que soy el único político en el Caribe Colombiano”, pu-
Liberal de este pueblo. Y estoy
blicado originalmente en 1999, Posada
dividido. Atentamente.
Carbó continúa:
Pedro Pirateque14.
Cada aspecto fundamental de la
Veinte años después, Masur estuvo identidad colombiana -desde el
de acuerdo con Padilla, afirmando que significado de la Independencia
hasta el valor aglutinante del
mestizaje- ha sido sometido
13
Colombia, Presidencia de la República, La al más implacable escrutinio.
política oficial: mensajes, cartas y discursos del
presidente López, vol. I, 2–12.
14
Citado en Fluharty, Vernon L., Dance of the 15
Masur, Gerhard, Op.cit., p. 228.
Millions, Pittsburgh, University of Pittsburgh Press,
1957, p. 168. 16
Bushnell, David, Op.cit., viii.

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Todo entonces se volvió también audaz y curtido por la experiencia


ficción: negamos, por supuesto, histórica y geográfica de su na-
que la nación había existido; y cionalidad y de su territorio y de
también le quitamos todo valor a su riqueza que lo sitúan ni abajo
nuestras conquistas democráticas ni arriba sino en el centro de los
y civilistas17. países latinoamericanos19.

Un buen ejemplo de esta deconstruc- Dado el carácter nebuloso del na-


ción sistemática es un libro titulado El cionalismo colombiano, el cual sigue
país plural: ensayo sobre los colombia- siendo debilitado por la disección de
nos, publicado por Fernando Iriarte M., los expertos y las arraigadas identidades
en 2001. En una selección de artículos regionales, no es sorprendente que el
de prensa sobre interpretaciones de la papel desempeñado en su formación
personalidad colombiana, Iriarte llana- por la frontera de los Llanos siga siendo
mente concluye que un interrogante. Echando a un lado la
tradición imperante, los historiadores
508 años no han sido suficientes
paulatinamente han venido a aceptar el
para dar curso a una nacionali-
dad colombiana y 179 años de hecho de que los Llanos han tenido im-
independencia no han bastado pacto en el desarrollo del país desde los
para alcanzar la madurez; nos tiempos de la Colonia hasta el presente,
encontramos todavía en la adoles- pero su contribución al nacionalismo
cencia. Nos falta identidad… La aparentemente surge encarnada en tres
periferia del país exige ser tomada arraigados mitos: “El vaquero románti-
en cuenta18. co”, “la Devoradora de Hombres” y “la
Tierra del Futuro”20.
Asimismo, Carlos Uribe Celis argu-
ye que “el colombiano es un hombre en-
frentado a un territorio difícil. Su medio 19
Uribe Celis, Carlos, Op .cit., p. 207.
geográfico es intrincado”. Y añade: 20
En su libro Slatta, Richard, The Mythical West,
No posee el orgullo nacionalista Santa Bárbara, abc-clio, 2001, anota que estos es-
tereotipos o “imágenes de la frontera” caracterizan
del mexicano ni la presunción las fronteras de muchos países distintos, incluyendo
personal del argentino. Es un Estados Unidos. Slatta se refiere a ellas como “La
hombre mesurado y consciente de frontera dorada de la riqueza, la abundancia, la
sus precariedades pero también oportunidad”, que a grandes rasgos corresponde
con el mito del vaquero romántico; “La frontera
desértica, tierra bárbara y vacía”, que es semejante
17
Posada Carbó, Eduardo, “El regionalismo po- al mito de la devoradora de hombres; y “La frontera
lítico en el Caribe colombiano”, reimpreso en: El como futuro”, equivalente al mito de la tierra del
desafío de las ideas: ensayos de historia intelectual futuro. Slatta incluye además otra imagen -“La
y política en Colombia, Medellín, Fondo Editorial frontera como pasado”- la visión revisionista de
Universidad eafit, 2003, p. 164. que la frontera descrita por Turner ha dejado de
ser un concepto viable. Es posible que esta imagen
18
Iriarte M., Fernando, El país plural: ensayo eventualmente acabe siendo pertinente a los Llanos
sobre los colombianos, Bogotá, Ediciones Esquilo, a medida que la región continúa su proceso de
2001, p. 83. integración al resto de la nación.

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La frontera de los Llanos urbano de la región, conocido entonces


y ahora como “La puerta del Llano”.
Los Llanos se extienden al Este y
Sur de la Cordillera Andina Oriental, Antes de la llegada de los españoles,
cubriendo un área de 253.000 kilóme- los Llanos tenían una población escasa,
tros cuadrados. Cruzada por rápidos ríos compuesta de cazadores y recolectores
que desembocan al Este, en el Orinoco, nativos y aldeanos selváticos que habían
y se adentran en Venezuela, la región es adaptado sus culturas a las limitacio-
por turnos una tierra de inundaciones y nes del medio ambiente tropical. La
sequías. Hay cinturones de selva en las esperanza de encontrar el legendario
riberas de los ríos, pero la vegetación El Dorado animó a los españoles, y
predominante es un pasto alto tropical en los siglos XVI y XVII cientos de
que alimenta manadas de ganado y conquistadores exploraron sus pasti-
caballos salvajes que descienden de ani- zales buscando en vano ese reino de
males introducidos por los españoles. fábula. Los siguieron encomenderos,
administradores, cazadores de esclavos,
La región constituye la quinta parte rancheros y misioneros que subyugaron
del territorio de Colombia y comienza a los nativos y establecieron pequeños y
a menos de ciento cincuenta kilómetros remotos enclaves. Para el siglo XVIII,
(en línea recta) de la capital, Bogotá, la misión había emergido como institu-
pero por siglos la escarpada Cordille- ción principal del régimen imperial, y
ra Oriental, que alcanza cumbres de el mestizaje entre españoles e indígenas
5.800 metros, ha bloqueado el acceso produjo una subcultura de vaqueros -
a estas planicies. Los aspirantes a colo- los llaneros-, quienes durante la guerra
nos, tras recorrer un difícil trayecto en de Independencia fueron el núcleo del
ásperos caminos de montaña, se enfren- ejército de Simón Bolívar que había
taban a una descorazonadora región de de ganar una decisiva batalla contra el
clima inhóspito (nueve meses de intensa ejército español en el Puente de Boyacá
lluvia y tres meses de sequía), llena de el 7 de agosto de 1819.
enfermedades (malaria, fiebre amari-
lla, cólera, anquilostomiasis y anemia A lo largo del siglo XIX, los go-
tropical) y casi completamente aislada biernos de Colombia esporádicamente
del resto del país. Como resultado, para intentaron desarrollar la porción de la
1938, los Llanos, conformados entonces república que quedaba al Este, más allá
por los territorios de Meta, Arauca y de los Andes. Entre las estrategias que
Vichada y la boyacense provincia de emplearon se incluyen el restableci-
Casanare, tenían una población total de miento de las misiones, la promoción
97.411 personas; es decir, menos del uno de la navegación fluvial a vapor, la
por ciento de la población colombiana, construcción de caminos, el apoyo a la
que entonces era de 8.701.816 personas. inmigración y el fomento al crecimiento
Casi la tercera parte de los llaneros vi- económico mediante la introducción
vían en Villavicencio, el mayor núcleo de nuevas cosechas, mejores pastos y

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mejores razas de ganado. Para media- inmigrantes que llegaban huyendo de la


dos del siglo XX estas políticas habían violencia en otras partes de Colombia.
tenido algún impacto en la zona del Animados por nuevas medidas de salud
piedemonte, conocida como “Llanos que redujeron la insalubridad del clima
Arriba”, pero habían cambiado poco en y por la posibilidad de colonizar tierras
la sección más al Este de las planicies públicas, estos nuevos colonos vinieron
o “Llanos Abajo”. Como resultado, con la esperanza de comenzar una nueva
Isaiah Bowman y otros geógrafos que vida con sus familias22.
estudiaron la región describieron a los
Llanos como una “frontera permanen- Elevado a la categoría de departa-
te”, la cual, a diferencia de la frontera mento en 1959, el territorio del Meta
en movimiento de Estados Unidos tan en especial continuó en expansión,
elocuentemente descrita por Turner, atrayendo colonos gracias a mejoras en
había permanecido estática. A decir la autopista Bogotá-Villavicencio y su
de Bowman, quienes vivían en los extensión a Puerto López, a la ladera
Llanos seguían siendo esencialmente del río Meta. Para 1972 el Meta era
“pioneros”, aun los que vivían en fincas la región de más rápido crecimiento
o pueblos habitados por sus familias en Colombia, con una población de
durante generaciones21. 322.361 habitantes, de los cuales el
35%, ó 112.120, residían en Villavi-
Durante la segunda mitad del siglo cencio23. Esta expansión fenomenal
XX, sin embargo, el desarrollo de los continuó a pesar de los brotes de
Llanos tomó un giro brusco. La Vio- violencia guerrillera, el influjo de los
lencia, la sangrienta guerra civil que carteles de drogas y las actividades
estalló en 1948 y duró hasta 1958, tuvo de organizaciones paramilitares y del
a los Llanos como importante teatro ejército colombiano. El descubrimiento
de operaciones, pero incluso a medida de campos petrolíferos explotables trajo
que 6.000 personas abandonaban las a la región nuevos ingresos; otro tanto
llanuras buscando seguridad en las hizo el aumento en los cultivos comer-
ciudades, dicha pérdida se veía más ciales de arroz y otros productos. La
que compensada por 16.000 nuevos Constitución de 1991 declaró departa-
mentos a Casanare, Arauca y Vichada en
reconocimiento a su población en auge.
21
Bowman, Isaiah, The Pioneer Fringe, Nueva En 2005 la población del Meta alcanzó
York, Publicación Especial de la American
Geographical Society No. 12, 1931, pp. 296–99;
Crist, Raymond E., “Fixed Physical Boundaries
and Dynamic Cultural Frontiers: A Contrast”, en: Ojeda Ojeda, Tomás, Villavicencio entre la docu-
22
American Journal of Economics and Sociology 12 mentalidad y la oralidad, 1880-1980, Villavicencio,
(abril, 1953), p. 230; Platt, Raye, “Opportunities Edición Corocora, 2000, pp. 187, 205.
for Agricultural Colonization in the Eastern Border
Valleys of the Andes”, en: Pioneer Settlement, 23
Departamento del Meta: Monografía, folclor,
Nueva York, Publicación Especial de la American cultura y turismo, Villavicencio, Imprenta Depar-
Geographical Society No. 14, 1932, p. 84. tamental, 1972, pp. 13–17.

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los 618.427 habitantes, con 272.118, ó otros países han comenzado a desafiar
casi un tercio, en Villavicencio. El de- esa tendencia26. Para hoy es claro que,
partamento producía para entonces una comenzando con la conquista de la
fracción importante de los alimentos Nueva Granada en 1530, los Llanos y
básicos consumidos en la capital, tanto sus gentes han desempeñado papeles
que hubo planes serios de establecer un importantes en eventos históricos claves
aeropuerto internacional en las afueras como la Revolución de los Comuneros
de Villavicencio para aliviar la presión (1780–83); la Guerra de Independencia
sobre el aeropuerto El Dorado de Bogo- (durante la cual los llaneros del Casana-
tá. A pesar de seguir teniendo poco más re conducidos por Bolívar y Santander
del uno por ciento de los 40 millones derrotaron a los españoles en la Batalla
de colombianos, los Llanos continúan de Boyacá, el 7 de agosto de 1819); los
siendo una de las regiones de más rápido esfuerzos de los Liberales por poblar los
crecimiento del país, en términos tanto Llanos en la era de la Constitución de
económicos como demográficos24. Rionegro (1863–1886); la Guerra de los
Mil Días (1899–1903); la “Revolución
La frontera de los Llanos en en Marcha” del presidente Alfonso Ló-
la historia de Colombia y en el pez Pumarejo (1934–1938); la primera
ola de la Violencia (1949–1953); y más
nacionalismo colombiano
recientemente como terreno fértil para
Cuando empecé a estudiar los el conflicto armado y las actividades de
Llanos, en 1973, con sólo una o dos narcotráfico27.
excepciones notables los historiadores
Pero el hecho de que los Llanos han
descontaban la participación de los
desempeñado un papel en la historia de
Llanos (así como de las demás regiones
Colombia no necesariamente quiere de-
periféricas de tierra baja) en el desa-
cir que la frontera ha tenido un impacto
rrollo histórico de Colombia, haciendo
semejante sobre el nacionalismo colom-
énfasis en su lugar en la interacción
entre las provincias de la zona Andina y
la costa Caribe25. Pero en las tres últimas 26
Eduardo Mantilla Trejos anota que en la década
décadas investigadores de Colombia y de 1980 académicos oriundos de los Llanos publi-
caron unos 70 libros de historia regional y evolución
socioeconómica, además de volúmenes de poesía,
ensayo y narrativa, lo que demuestra que los inte-
24
Colombia a su alcance, Bogotá, Planeta, 1999, lectuales del Llano están tomando en serio la tarea
p. 134. de recuperar la historia de su región. Ver el prólogo
de Mantilla Trejos en: Baquero Nariño, Alberto,
25
Algunos de los más útiles ensayos históricos Joropo: Identidad llanera: La epopeya cultural de
son: Pacheco, Juan M., Los jesuitas en Colombia, las comunidades del Orinoco, Bogotá, Lotería de
Bogotá, 1959–62; Ortega Ricaurte, E., Villavicen- los Territorios Nacionales, 1990, p. 21.
cio (1842–1942): Monografía histórica, Bogotá,
Prensa de la Biblioteca Nacional, 1943; y Ángel 27
Rausch, Jane M., “Región olvidada: los Llanos
De Flórez, Raquel, Conozcamos al Departamento Orientales en la historia de Colombia”, en: Revista
del Meta (3 vols.), Bogotá, Fonda Rotatorio Judicial de la Academia de Historia del Meta, II, 2 (abril
Penitenciaría Central, 1962. de 1988), pp. 32–47.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
Jane M. Rausch 33

biano. Es verdad que la quinta estrofa sus trabas convencionales, más


del himno nacional de Colombia celebra o menos artificiales, y la soledad
los actos heroicos de los llaneros en la imponente de los desiertos, donde
Batalla de Boyacá; también es cierto sólo impera la naturaleza con su
que la música típica llanera, el joropo, immortal grandeza y su solemne
majestad!29.
se escucha en toda la nación; pero, a
partir del siglo XIX, la visión popular Ferozmente independiente, el lla-
de los Llanos se ha aglutinado alrededor nero, según Samper, nunca ha servido
de tres estereotipos genéricos. la causa de la opresión o la dictadura.
José María Samper fue el primero “Cuando la libertad está en peligro,
en promover la imagen del llanero responde con entusiasmo al primer lla-
como vaquero romántico y soldado de mamiento”, y al terminar la guerra no
la libertad en su Ensayo sobre las revo- pide recompensa pues en el combate “es
luciones políticas y la condición social un artista de la muerte, que ama el arte
de las repúblicas colombianas28. Tras por el arte, como cualquier otro”30.
describir los distintos tipos de gentes Este estereotipo reaparece en mu-
que habitaban las diversas regiones de chos libros y crónicas de viajes publica-
Colombia, Samper pinta al llanero -el dos desde los tiempos de Samper31. Los
gaucho colombiano, “pero un gaucho textos escolares no dejan de mencionar
infinitamente más poético, más accesi- los actos heroicos de los llaneros en
ble, menos bárbaro que el de la pampa la Batalla de Boyacá. En 1963, un nú-
argentina”: mero especial de la Revista de Policía
El llanero… es un tipo de opera Nacional de Colombia dedicado ex-
cómica por excelencia, en el cual clusivamente a los Llanos incluía en su
se alían lo heroico y pastoral, portada una colorida foto con el título
lo dramático y eminentemente “Un intrépido llanero cabalga las ilimi-
cómico, formando el conjunto tadas pampas en busca de sustento”. En
más original. Pastor de inmensos páginas interiores, uno de los redactores
y libres rebaños, jinete, toreador expresa extasiado:
y nadador insigne, soldado fabu-
loso de caballería, poeta de las El llanero es libre como el aire,
pampas y de las pasiones cando- como los pájaros, como su propio
rosamente salvajes, artista galante ganado que no conoce cercas.
a su modo, fanfarrón y chistoso;
¡el Llanero es el lazo de unión
entre la civilización y la barba- 29
Ibíd.,  p. 91.
rie… entre la sociedad con todas
30
Ibíd., p. 93.
31
Ver: Vergara y Velasco, F. J., Nueva geografía
28
Samper, José María, Ensayo sobre las revolucio- de Colombia, Bogotá, 1901–2, p. 683, y Vergara
nes políticas y la condición social de las repúblicas y Vergara, José María, Historia de la literatura en
colombianas, París, 1861. Nueva Granada, Bogotá, 1902.

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“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
34 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

Baila alegre al son de un buen visión de los Llanos como parte de su


joropo mientras se asa la carne. programa “Redescubriendo a Colom-
Las tierras le pertenecen. Monta bia”. López tenía especial afecto por
todo el día en su inseparable el territorio del Meta: con frecuencia
compañero, su caballo, sobre el
viajó allá y eventualmente compró una
que se pierde en el horizonte de
pastos y pantanos32.
finca, llamada Potosí, en las cercanías
de Puerto López. En su biografía El
El segundo estereotipo tiene que ver presidente López Pumarejo, el exminis-
más con la región que con sus habitan- tro de Gobierno Eduardo Zuleta Ángel
tes, caracterizándola como “el Futuro recuerda que López a menudo apuntaba
de Colombia”. A partir de la década de a un mapa de Colombia que tenía en su
1830, los gobiernos de Bogotá siempre oficina mientras proclamaba su fe en
han descrito los Llanos como una zona el brillante futuro de los Llanos. López
de riquezas y recursos innumerables que reconocía que no era razonable pensar
en un futuro próximo están llamados a en el potencial de la región cuando se
ser el centro de la prosperidad colom- necesitaban tres días de viaje para ir
biana. Típico de la retórica decimonó- de Bogotá a Villavicencio, pero que
nica es el siguiente fragmento extraído en la década de 1930 las cosas habían
de un informe parlamentario fechado el cambiado:
19 de septiembre de 1892:
Cuando se puede viajar a Villa-
La vasta y rica región oriental de vicencio en cuarenta minutos
la República, conocida con los y a Orocué en dos o tres horas;
nombres de Llanos de Casanare cuando el ganado se puede traer
y de San Martín, por su topogra- en camiones; cuando se puede
fía, por la fertilidad de su suelo, disponer de fertilizantes y mata-
y por la abundancia y riqueza de malezas; cuando un tractor puede
sus frutos naturales, está llamada hacer en una hora el trabajo de
a ser en época más o menos re- varias personas en un día; cuan-
mota, centro de una civilización do se sabe que se puede sembrar
tan avanzada como quizás no cacao y palma africana, seguir
alcancen las regiones ocupadas creyendo que los Llanos no sir-
por las abruptas montañas de la ven para nada es simplemente
cordillera Andina33. una de las tantas manifestaciones
del pensamiento borroso de los
En 1934 el presidente Alfonso López colombianos34.
Pumarejo con entusiasmo adoptó esta
El cariño de López por el Meta era
genuino, y a medida que la región fue
32
Paulo, Aliro, “Estampas de viaje: El llanero”, en: floreciendo gracias a su protección es-
Revista de Policía Nacional, Bogotá, 98 (marzo-
abril de 1963), p. 4.
33
Anales del Senado, Bogotá, vol. 21, septiembre Zuleta Ángel, Eduardo, El presidente López Pu-
34

29 de 1892, p. 167. marejo, Medellín, Ediciones Albon, 1966, p. 153.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
Jane M. Rausch 35

pecial, los habitantes empezaron a con- Colombia” que evoca el Llano, ha sur-
siderarlo un semidios y le otorgaron el gido un tercer estereotipo mucho más
título de “Redescubridor del Llano”35. negativo: el de la “Devoradora de Hom-
bres”, popularizado por José Eustasio
En el siglo XXI, “el Futuro de Rivera en su célebre obra La vorágine.
Colombia” se ha convertido en reali- Publicada en 1924, esta novela ha sido
dad: los Llanos han experimentado un descrita como “una alegoría romántica,
estable crecimiento en población y en como la aterrorizada versión de un inte-
producción agrícola y ganadera. Más lectual urbano de la barbarie de su país y
importante aún, en 1973, tras décadas de como una novela de protesta”37. En esta
exploración, se encontró un yacimiento épica narración, el protagonista Arturo
petrolífero explotable en un campo de Cova y su compañera Alicia atraviesan
Caño Limón (Arauca). La Occidental de el Casanare y experimentan increíbles
Colombia comenzó a bombear millones horrores a medida que la planicie que
de barriles de petróleo, y en las décadas al principio percibían como encantadora
de 1980 y 1990 se encontraron nuevos se va tornando en grotesca pesadilla.
yacimientos en el Casanare y el Meta Luego de que interminables lluvias
respectivamente. Hoy se cree que los han convertido las fértiles sabanas en
Llanos tienen los campos petrolíferos desolados pantanos, Cova escribe:
más ricos de Colombia, con reservas
probadas de cientos de millones de ba- …y con el agua a la cintura
rriles; sin embargo, como anota Reinal- seguíamos el derrotero de los
do Barbosa, la producción petrolífera no baquianos, bañada en sudor la
ha traído a la región todos los beneficios frente y húmedas las maletas que
portábamos a la espalda, famé-
que se esperaba. La falta de planeación
licos, macilentos, pernoctando
ordenada, inteligente y objetiva ha en altiplanos de breña inhóspita,
hecho que se desperdicien muchos de sin hoguera, sin lecho, sin pro-
los ingresos generados; en opinión de tección… Aquellas latitudes son
Barbosa, la decisión gubernamental de inmisericordes en la sequía y el
entregar los derechos de explotación invierno…38.
a compañías multinacionales huele al
“renacimiento del colonialismo”36. La popularidad de La vorágine con-
venció a muchos colombianos jóvenes
En contraste con las imágenes del (que antes habían pensado en el Llano
“llanero romántico” y del “Futuro de como un buen lugar para buscar fortuna)

35
Ibíd., p. 240.
37
Franco, Jean, The Modern Culture of Latin
36
Barbosa Estepa, Reinaldo, “Frontera agrícola America, Middlesex, Gran Bretaña, Penguin Books,
orinoquense: de la precariedad estatal a la crisis 1970, p. 100.
de derechos humanos”, en: Conflictos regionales:
Amazonia y Orinoquia, Bogotá, Tercer Mundo, 38
Rivera, José Eustasio, La vorágine, Bogotá,
1998, p. 168. Presidencia de la República, 1997, p. 112.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
36 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

de que ir allá sería un error descomunal. ardía en pleno en Villavicencio mientras


En palabras de Eduardo Zuleta Ángel, aviones militares (estacionados en la
“a nadie tentaba seguir el ejemplo de Ar- base de Apiay en las afueras del pueblo)
turo Cova. A nadie le interesaba jugarse indiscriminadamente bombardeaban
la vida, si la Violencia ganaba después casas y fincas, a menudo matando civi-
de mil absurdas aventuras”39. Un artícu- les e indígenas que no tenían conexión
lo anónimo publicado en la revista Pan alguna con los rebeldes41.
en 1937, subraya los comentarios de
Zuleta Ángel al afirmar que a principios Durante la dictadura de Gustavo
de la década de 1930 los colombianos Rojas Pinilla (1953–1957) amainó la
habían empezado a ver el Llano como violencia en las planicies, pero los re-
una zona “devoradora de hombres”. beldes recibieron un nuevo soplo vital
La gente con la valentía suficiente para tras la victoria de Fidel Castro en Cuba
viajar allá estaba animada únicamente en 1959. Poco después las Fuerzas Ar-
por el deseo de parecer heroica y volver madas Revolucionarias de Colombia
del altiplano con “estremecedoras his- (FARC) y el Ejército de Liberación
torias de caníbales, animales salvajes y Nacional (ELN) establecieron bases en
culebras venenosas”40. los Llanos, preparando el terreno (por
decirlo así) para la introducción del
La prevalencia de este estereotipo cultivo ilícito de marihuana en 1977, ac-
negativo aumentó el aislamiento cultu- tividad luego reemplazada, en la década
ral de la región. Para los años cincuenta de 1980, por el cultivo de coca. Hasta
los Llanos se habían convertido en este momento los grupos guerrilleros
refugio ideal para criminales de otras re- ofrecían protección a los campesinos
giones del país. No sorprende pues que, cultivadores, pero el fracaso en 1984 de
durante la guerra civil conocida como una tregua entre las FARC y el gobierno
la Violencia, varias de las más notorias de Belisario Betancur (1982–1986) hizo
bandas rebeldes liberales operaron en que a la guerrilla se le vinieran encima
Casanare, Arauca y Meta, mientras que tanto el ejército como diversos grupos
Villavicencio se convirtió en el cuartel paramilitares contratados por grandes
general desde donde contraatacaba el agricultores y ganaderos para proteger
ejército colombiano. Las llanuras de sus personas y sus bienes42.
verdad se volvieron “Devoradoras de
Hombres” cuando la guerrilla empezó Durante los siguiente 20 años los
a llevar a cabo despiadadas vendetas líderes en Bogotá en vano intentaron
contra supuestos simpatizantes conser-
vadores de la región. La lucha partidista 41
Ojeda Ojeda, Tomás, Op. cit., p. 187.
42
Barbosa Estepa, Reinaldo, “Para-Estados y cri-
39
Zuleta Ángel, Eduardo, Op. cit., pp. 225–226. sis institucional en la Orinoquia colombiana” en:
Javier Guerrero Barón (Ed.), Iglesia, movimientos
“Los colonizadores del Llano”, en: Revista Pan,
40
y partidos: política y violencia en la historia de
Bogotá, 15 de agosto de 1937, p. 145. Colombia, Tunja, 1995, p. 149.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
Jane M. Rausch 37

acabar con los carteles de las drogas desconocida, remota y misteriosa. A


y los distintos grupos insurgentes o nadie se le ocurriría pasar vacaciones
llegar a algún tipo de acuerdo con allá. Aquí hay mucha ignorancia sobre
ellos. Cabe citar una medida extrema: los Llanos, como si no fueran parte de
en 1998 el presidente Andrés Pastrana Colombia”. Pero añadió: “Puede que
(1998–2002) como gesto de paz cedió las opiniones sean muy distintas en
a las FARC el control total de una zona Bogotá porque allá la gente tiene fincas
de más de cuarenta mil kilómetros cua- en los Llanos; porque los llaneros van
drados en el Caquetá, al sur del Meta, a la ciudad; y porque hay restaurantes
pero esta táctica no logró el objetivo donde venden ternera a la llanera”. Otro
esperado: la inseguridad y el terror si- colega, éste de Bogotá, me dijo: “Creo
guieron asolando los Llanos, y cientos que todavía existe la visión romántica
de campesinos se vieron obligados a de los vaqueros, la amplia llanura y el
abandonar las zonas de conflicto y bus- cielo precioso. Sin embargo, creo que
car seguridad en Villavicencio43. la guerra ha ayudado mucho a que la
gente vea los Llanos como una de las
Percepciones de la frontera de regiones más peligrosas de Colombia,
los Llanos en la Colombia de con guerrilla, paramilitares y petró-
2005 leo”. Mi colega de Yopal, Casanare,
respondió muy distinto: a su modo de
En el otoño de 2004, cuando por pri- ver, la historia de Colombia ha seguido
mera vez se me ocurrió explorar el papel siendo la historia de la interacción entre
de los Llanos en el nacionalismo y la las montañas y la costa del Caribe; los
identidad nacional de los colombianos, territorios periféricos han desempeñado
les escribí a varios colegas en Colombia un ínfimo papel. Y con franca amargura
y les pregunté: “¿Cómo ven los colom- me escribió: “Además, los habitantes
bianos de hoy la frontera de los Llanos? de la región montañosa nos ven como
¿Acaso piensan en los héroes románti- los hijos menores, por eso nos han im-
cos de la Batalla de Boyacá? ¿Ven al plantado formas administrativas desde
Llano como ‘el Futuro de Colombia’ o la capital Bogotá a pesar de la descen-
como una región ‘Devoradora de Hom- tralización de la Constitución Política
bres’ -tierra de violencia, guerrilla y dro- que hoy nos rige”.
gas?”. Las respuestas que recibí fueron
fascinantes. Una profesora de Medellín La variedad de estas opiniones me
me contestó que, en su opinión, “si los animó a encargar, con este ensayo en
antioqueños llegamos a pensar en los mente, una encuesta más amplia sobre
Llanos, los vemos como una región lo que piensan los colombianos sobre
los Llanos. En enero de 2005 tres cien-
tíficos sociales colombianos interroga-
43
Forero, Juan, “Rebel-Held Zone in Colombia ron a 98 individuos para averiguar sus
Fears End of Truce”, New York Times, diciembre
16 de 2000.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
38 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

puntos de vista sobre los Llanos44. Estas En lo referente a “los Llanos como
personas estaban participando en una el Futuro de Colombia”, 65 de los en-
encuesta de mayor envergadura llevada cuestados recalcaron la importancia de
a cabo por el Departamento de Ciencia la llanura por la presencia del petróleo,
Política de la Universidad de los Andes la agricultura y la ganadería. Un hombre
para el Ministerio de Gestión Pública de Bogotá observó: “Es la única zona
(ver Tabla 1) y fueron escogidas al azar: del país que produce arroz y vacas” y
47 mujeres y 51 hombres con edades uno de Cartagena dijo: “Allí es donde
entre menos de 20 y más de 60 años. está la economía de Colombia”. Mu-
Más de la mitad de los encuestados (49) chos afirmaron con certeza que el Llano
tenían de 20 a 40 años de edad; sus in- “es una zona rica en petróleo y el petró-
gresos económicos oscilaban entre me- leo representa el futuro del país”, pero
nos de uno y cuatro salarios mínimos. una mujer de Villavicencio advirtió que
Nacidas en 20 departamentos distintos, “los gringos vienen y se roban todo el
estas personas estaban residiendo en petróleo”, mientras un caleño puntuali-
Bogotá durante la realización del estu- zó: “No hay petróleo en esa zona, sólo
dio. De los 98 encuestados, 44 dijeron pasto y vacas. Nada relevante para el
haber ido a los Llanos y 61 admitieron futuro de Colombia”.
que les gustaría ir a visitar la región.
Ochenta y tres encuestados estu-
En cuanto a los tres estereotipos: en vieron de acuerdo en que “los Llanos
lo referente a la imagen romántica de los Orientales son importantes porque
vaqueros, 31 dijeron haber aprendido son un bello lugar con planicies y
en la escuela que los llaneros fueron un pastos, cielos abiertos y una extensa
factor clave en la Batalla de Boyacá; 9 ganadería”. Sesenta y cuatro estuvie-
estuvieron en desacuerdo y 57 dijeron ron de acuerdo con esta afirmación:
no saber. Por ejemplo, una mujer nacida “Los Llanos Orientales son conocidos
en el Tolima afirmó: “Los llaneros son principalmente por su música y sus
una raza de valientes luchadores. Su au- expresiones folklóricas y culturales”;
dacia fue espectacular”. Una antioqueña sólo 14 estuvieron en desacuerdo. En
dijo: “En la historia que me enseñaron este punto, los encuestados enfatizaron
dice que los llaneros ayudaron al Ejér- que la música llanera “se oye en todos
cito Libertador”; un boyacense más es- los rincones del país” y que en especial
céptico descartó la importancia histórica el joropo es “muy representativo”. Un
de los llaneros, afirmando que “hubo hombre de Bogotá dijo: “Identifico los
contribución de todas las personas de Llanos con los llaneros valientes y las
diferentes regiones de Colombia.” coplas llaneras que cuentan historias
interesantes”. Una boyacense añadió:
“La música es representativa de los
Llanos... Cuando la oigo la relaciono
Los investigadores eran Leticia Arteaga, Stan
44
con los Llanos”. Una mujer del Tolima
Malinowitz y Natalia Perozzo.

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
Jane M. Rausch 39

dijo: “En los buses se suben personas Por otra parte, la afirmación: “Las
con arpa y uno ya sabe que son llaneros; actividades de los grupos armados han
el arpa es sinónimo del Llano”. Otro hecho de los Llanos Orientales una de
boyacense anotó que en la televisión las más peligrosas regiones del país”
pasan mucha música llanera como as- puso de acuerdo a 43 personas, con sólo
pecto representativo de los Llanos. Un 22 en contra. Típicamente los comenta-
hombre del departamento de Magdalena rios mencionaban que los medios infor-
afirmó que “la música llanera es original man de mucha violencia en los Llanos
y hermosa, ampliamente reconocida y que la autopista Bogotá-Villavicencio
en Colombia”, pero un barranquillero es muy peligrosa debido a todas las
expresó su desacuerdo: “Su música emboscadas que ocurren. Otra gente
no es reconocida a nivel nacional. El mencionó masacres, la presencia de
vallenato es más famoso que la música grupos guerrilleros y las actividades de
llanera”. los paramilitares. Quienes discreparon
arguyeron que los medios exageran los
En lo referente a la imagen negativa peligros de los Llanos, que hay otras
de los Llanos como región “devoradora regiones de Colombia mucho más pe-
de hombres”, las respuestas fueron en- ligrosas. También argumentaron que la
contradas. Unas 26 personas estuvieron situación de seguridad está mejorando.
de acuerdo con que “su clima, su vege- En palabras de un caldense, “Esa región
tación y sus condiciones geográficas se ha mejorado. Yo he ido varias veces y
hacen de los Llanos Orientales un lugar no he visto confrontaciones armadas”.
misterioso y temible para visitar” pero
54 discreparon. Quienes estuvieron de Aunque de ninguna manera pretende
acuerdo mencionaron que en los Llanos constituir una muestra científica, esta
hay culebras, leones y tigres, además de encuesta de opinión sugiere que las
molestos enjambres de insectos, aunque imágenes del Vaquero Romántico, la
hubo quienes dijeron que las llanuras Tierra del Futuro y la Devoradora de
son un buen lugar para ir de vacaciones Hombres, siguen influyendo en la opi-
por su aire puro y su ambiente exótico. nión pública, pero también revela que,
Un hombre de Caldas respondió: “He a medida que aprenden más sobre los
oído que es la zona con el mejor clima Llanos a través de los medios, visitas a
de toda Colombia. Es caliente, pero no la región y en especial la diseminación
sofocante. Perfecto para la salud”. Un a escala nacional de la música y el fo-
boyacense afirmó: “Es un departamento lklore llaneros, los colombianos están
como cualquier otro. No entiendo por dispuestos a desafiar e incluso dejar de
qué su clima y naturaleza son peligro- lado estos estereotipos.
sos”. Un caleño explicó: “Una tierra que
inspire a los cantos llaneros, definitiva- Conclusión
mente hay que visitarla”.
El presente ensayo ha tenido el
propósito de explorar el papel desem-

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
40 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

peñado por la frontera de los Llanos paramilitares, la importancia de los Lla-


en el desarrollo del nacionalismo en nos ante el resto de la nación ha venido
Colombia. La información presentada creciendo. El impacto de los medios de
sugiere que el nacionalismo colombia- comunicación -la televisión, la radio y la
no, a diferencia de aquéllos de otros industria discográfica- está rompiendo
países latinoamericanos, se ha caracteri- con la insularidad que antes dividía al
zado por una marcada ambivalencia. La país, realzando la apreciación popular
difícil topografía del país ha incubado de las culturas únicas de las distintas re-
identidades regionales que eclipsan el giones y especialmente de aquélla de los
sentido compartido de colombianidad. Llanos. En este siglo XXI parece cada
En este sentido, los Llanos Orientales vez más probable que los colombianos
son apenas una de varias regiones que a habrán de reconocer el digno papel des-
lo largo de los siglos ha desarrollado su empeñado por las llanuras tropicales en
propia subcultura política, económica la conformación del país de hoy.
y cultural.
Tabla 1: Resultados preliminares
En términos históricos no todas las de una encuesta sobre los puntos de
regiones son iguales, y aquéllas locali- vista de los colombianos respecto a
zadas en la montaña o en la costa Caribe los Llanos Orientales
han dominado los eventos nacionales
con mucha ventaja sobre las regiones Realizada entre diciembre de 2004 y
periféricas. No obstante, es muy posible enero de 2005 por Leticia Arteaga, Stan
argüir que, de los tiempos de la Colonia Malinowitz y Natalia Perozzo.
al día de hoy, los Llanos Orientales han Entre los 98 encuestados había 47
desempeñado un papel importante en la mujeres y 51 hombres con edades de
formación de la nación colombiana, pa- menos de 20 a más de 60 años. Estas per-
pel que en la segunda mitad del siglo XX sonas nacieron en veinte departamentos
ha venido recibiendo más aceptación distintos pero todas fueron entrevistadas
gracias a los esfuerzos de investigadores en Bogotá. Las siguientes son las pre-
llaneros, colombianos y extranjeros. guntas que se les formularon:
Como sugiere Carlos Uribe Celis, las
mentalidades están cambiando a medida 1. ¿Ha estado ud. en los Llanos
que Colombia se urbaniza, se educa y Orientales?
ve mejoras paulatinas en su nivel de 44 Sí 54 No
vida45. Con una población en aumento,
2. Si no ha estado… ¿ha escuchado de
el descubrimiento de grandes reservas
los Llanos Orientales?
de petróleo, mejoras en el transporte y
40 Sí 14 No
la necesidad de controlar las actividades
de grupos rebeldes, narcotraficantes y 3. Para ud., ¿los Llanos Orientales
son una región, una ciudad, un
45
Uribe Celis, Carlos, Op. cit., p. 208.
departamento o un país?

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
Jane M. Rausch 41

61 una región En desacuerdo: 2


23 un departamento En total desacuerdo: 0
14 en blanco No sé nada al respecto: 13
En blanco: 0
4. ¿Visitaría ud. los Llanos Orienta-
les? 8. Los Llanos Orientales son conoci-
61 Sí 23 No 14 en blanco dos principalmente por su música
y sus expresiones folklóricas y
5. ¿Piensa ud. que los llaneros fueron culturales.
valientes luchadores por la libertad
y que gracias a ellos se ganó la In- Totalmente de acuerdo: 24
dependencia, lograda en la Batalla De acuerdo: 40
de Boyacá el 7 de agosto de 1819? En desacuerdo: 13
En total desacuerdo: 1
Totalmente de acuerdo: 8 No sé nada al respecto: 20
De acuerdo: 14 En blanco: 0
En desacuerdo: 7
En total desacuerdo: 2 9. Su clima, su vegetación y sus condi-
No sé nada al respecto: 54 ciones geográficas hacen de los Lla-
En blanco: 3 nos Orientales un lugar misterioso y
temible para visitar.
6. Los Llanos son una gran planicie con
depósitos de petróleo y con un gran Totalmente de acuerdo: 8
potencial agropecuario. Los Llanos De acuerdo: 18
Orientales representan el futuro de En desacuerdo: 41
Colombia. En total desacuerdo: 13
No sé nada al respecto: 17
Totalmente de acuerdo: 25 En blanco: 1
De acuerdo: 40
En desacuerdo: 8 10. Las actividades de los grupos
En total desacuerdo: 1 armados han hecho de los Llanos
No sé nada al respecto: 24 Orientales una de las más peligrosas
En blanco: 3 regiones del país.
7. Los Llanos Orientales son impor- Totalmente de acuerdo: 9
tantes porque son un bello lugar con De acuerdo: 34
planicies y pastos, cielos abiertos y En desacuerdo: 19
una extensa ganadería. En total desacuerdo: 3
No sé nada al respecto: 32
Totalmente de acuerdo: 21 En blanco: 1
De acuerdo: 62

Historia y Sociedad No. 14, Medellín, Colombia, junio de 2008, pp. 23-44
“Vaqueros Románticos”, “Tierra del Futuro” o “Devoradora de Hombres”:
42 La frontera de los Llanos en la formación del nacionalismo colombiano

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