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Yo salí de mis puertos, tres galeras a vela

Y a remo, a la procura de la Isla Afortunada


Que son 200 islas, mas la flor de canela
De todas, es la incógnita denominada JAUJA
Ignota, impervia al paso de toda carabela
La donó el Rey de Rodas a su primo el de León.
Solo se alcanza al precio de naufragio y procela
Y no la vieron Vasco de Gama ni Colón...

"Si este país tuviera lo que le falta y eliminara lo que le sobra,


este país sería - altro que JAUJA"
(Don Babel Manito)

DE NUESTRO CATALOGO
m£n.
GALVEZ Jaime, Rosas y el proceso constitucional 240.—
GALVEZ Jaime, Rosas y la navegación cíe los ríos. edición 240 —
GENTA Jordán B., Curso de psicología. edición 400 —
GENTA Jordán B., Guerra contrarrevolucionaria. 2^ edición 350.—
GIERKE Otto von, Teorías políticas de la Edad Media 360.—
GIEMENEZ VEGA Elias S., Esteban Echeverría. Mito y realidad 80 —
GOFF Kenneth, Psicopolítica. Técnica del lavado de cerebro. 3^ edición 150.—
GUENON René, La crisis del mundo moderno 360.—
GUENON René, El teosofísmo. 2? edición 320.—
HORACIO, Odas. Traducción de Alfredo Meyer 260.—
IBARGUREN Federico, Lecciones de historia rioplatense. edición 240.—
IRAZUSTA Julio. Perón y la crisis argentina. 2 ? edición 320.—
IRAZUSTA Julio, Vida política de Juan Manuel de Rosas. Tomo V (1845-1848) 600.—
IRAZUSTA Julio, Tomás de Anchorena. edición 280.—
IRAZUSTA Julio, Ensayos históricos 240.—
IRAZUSTA Julio, Las dificultades de la historia científica y el "Rosas" del Dr.
Celesia 150.—
IRAZUSTA Julio, Urquiza y el pronunciamiento 150 —
IVERN Andrés, Rosas y la medicina 80.—
LAFERRERE Roberto de, El nacionalismo de Rosas. 2^ edición 150.—
LANUZA José Luis, Esteban Echeverría y sus amigos 250.—
LEESE Arnold, Los Rothschild 160.—
LE CARON H., Misión destructora de la revolución 80.—
LEMAIRE Pierre, Concilio y Anticoncilio 60.—
MADIRAN Jean, El Syllabus y la civilización moderna 60.—
LEUMANN Carlos Alberto, La literatura gauchesca y la poesía gauchesca 250.—

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La Tapa es de Querandí, nombre de guerra


de un gran escultor y pintor
g

JAUJA S U M A R I O

Revista Mensual de interés general


Pág.

DIRECTORIAL 3
i
Número 3 Marzo 1967
F. CHAVES, El desarraigo Argen-
Registro Nacional de la Propiedad Intelectual
tino j , 6
N°. 923.068

L. SOLER CAÑAS, Primeras Imá-


genes de D. Juan Manuel
| DIRECTOR: Leonardo Castellani
de Rosas en la poesía del
siglo XX 10

J. del REY, En el convento 18


CONSEJO ASESOR: R P. Amancio González
Paz - Dr. Carlos Stefens Soler - D. Bruno O. IVANESSEVICH, Bases para
Jacovella - Dr. Juan Pablo Oliver - Dr.
Federico Ibarguren - Dra. Ignacia Moyano - una política educacional, 17 y 48
Dr. Jorge Martorell - D. Juan Mario Collins.

SONETERIO 25
ADMINISTRADOR: Florencio Gamallo
L. CASTELLANI, La nueva didajé 26
DISTRIBUIDORES: Editorial CRUZ Y FIERRO Notas Sanjuaninas 51

DIRECCION Y ADMINISTRACION: BOANERGES, Crónica de Roma . . 29


Hipólito Yrigoyen 545 - Capital Federal
T. E. 34-1077 A. G. P., Tres regalos para Jauja 32

J. del R., Avaricia 35

E. O., La revolución de los


carritos 35
o Franqueo Pagado
c m Periscopio 39
Concesión N°. 2668
a)
< c Interés General LEIDO PARA UD 41
6 O C o n c e s i ó n N°. 8166
CARTAS DE LECTORES 45

El CABO LE IVA 52
SUSCRIPCION:

Anual (12 números): $ 1.600.—


Exterior: 9 dólares
Semestral: $ 860.—. Exterior: 5 dólares Si a Ud., a quien corresponde
no ha llegado el N? 1 de la
Ejemplar: $ 160.—. Exterior: 1 dólar
revista, rogamos avisarnos para
Número atrasado: $ 180.— reparar la falla. Todo se irá
arreglando, si Dios quiere. Hasta
Pagos a: el Correo Argentino.

A. Renna - Huergo 808 - Santa Fe


F. Gamallo - H. Yrigoyen 545 - Buenos Aires
L. Castellani - Caseros 796 - 5° E - Cap. Fed.
É

Directorial
ESOS TIEMPOS PASADOS
ERAMOS POCOS
PERO BIEN MONTADOS

"El Director no se hace responsable de las ideas u opiniones vertidas


por sus colaboradores, sino solamente de las que ponga bajo su firma".
Esta "advertencia1' que ponen las revistas, y mi amigo Mambrú me incita
a poner, es enteramente inútil: porque todo lo que publica lo ha juzgado
el Fulano digno de publicarse; y por tanto, lo ha hecho en cierto modo
suyo.
Verdad es que ese cierto modo puede ser dialéctico: hay quizás una
opinión que no es la suya, pero que estima conveniente se debata; hay
una idea que tiene por exagerada o inexacta, pero "anda por ahí", y el
expresarla con exactitud puede ser parte a precisarla o corregirla; hay una
aplicación errónea de un principio importante, pero el principio está; y
su mismo safamiento puede ser estimulo a meditarlo o ahondarlo. Las
paradojas pueden ser errores, y pueden también ser verdades dadas vuel-
tas. Andamos diciendo que "mucha ciencia acerca a Dios, poca ciencia
aleja de Dios11 por ejemplo; hasta que un día caemos en la cuenta que
Cristo dijo cuasimente lo contrario; y entonces exclamamos fieramente:
"Mucha ciencia aleja de Dios, como alejó a Freud, a Harnack y a Marx11.
La ciencia no aleja ni acerca a Dios por sí misma; sino por su espíritu.
Quiere decir que esta revista no se destina a enseñar, sino a educar,
por pretencioso que esto suene; no a hacer propaganda sino a hacer luz; o
exactamente a suscitar "la luz que lleva en sí mismo todo hombre que
viene a este mundo".
Lo que falló en la Argentina es la educación; esto también se dice
hasta por demás y también es dialéctico; y si trata de excluir la política
es falso; porque sin la solución del problema político, el cual aquí y ahora
es previo a todos los demás, tampoco se solucionará la educación. En el
fondo gobernar bien es educar, pensaron los grandes griegos. La prueba
bien cercana es que Perón enseñó las doctrinas nacionalistas (que medio
usurpó) a los obreros.
La falla antigua de la educación en la Argentina parece estar pin-
tiparada en una controversia poco conocida entre Alberdi y Sarmiento.
Alberdi se alzó enérgicamente (en "Bases" y "Obras Postumas") contra
la manía alfabetista de Sarmiento: lo primero no es saber leer, lo primero
es conocer la religión y un oficio. El capitalismo naciente o invadiente,
enraizado en el liberalismo o iluminismo, necesitaba que el pueblo supiera
leer. . . "pasquines políticos11 — como dice con sorna Alberdi; la voz de
la tierra y el sentido común decían que el hombre común no llega a ser
realmente hombre sino a través de las verdades religiosas y la posesión
de un oficio — no de una rutina maquinal, de un oficio. Están los dos
fines de la didaxis cifrados en esto: o educar o enseñar; o hacer una per-
sona o hacer una pieza útil a la sociedad. Y aunque parezca que Alberdi
tira a esto último, con su exigencia de "escuelas de trabajo", es al revés:
tira a educar. La escuela Sarmientina, que quizá es más bien wildeana
y pizzurniana, ha llegado a esta aberración viviente que es nuestra actual
escuela: donde por ejemplo, se enseña (?) "Historia de la literatura espa-
ñola e hispanoamericana" a muchachos que no saben la lengua; y se in-
tenta sumergir en la filosofía a petimetres que no saben todavía pensar
ni empíricamente — ni sabrán nunca. Destos petimetres salen los "filó-
sofos" como el "loquitor ' de anoche que decía de un dudoso poeta jujeño,
que era "una emoción estructurada con suma". Fouteznnoi la paix, sacre
?iom d'un nom. Este es un ejemplo menor; hay cosas peores, monstruosas.
"Ministerio de Educación": no es ni siquiera Ministerio de "Instrucción":
es Ministerio de OBSTRUCCIÓN. La brutal intromisión del Estado entre
la vocación de maestro y el sujeto de la educación ha tenido resultados
despampanantes, como era enteramente lógico y necesario, dado que es
cosa contra natura — y contra espíritu. Lo que me extraña es que no
haya producido mayores ruinas. Eso fue debido a la "buena pasta" de
muchos maestros — que parece van deviniendo pocos.
Lo que educa al pueblo es, por orden:
— el culto religioso, predicación comprendida:
— el ejemplo de los de arriba ("cual el rey, tal la grey");
— las diversiones o regocijos usuales;
— las fuentes de "información";
— los "instructores" intelectuales por medio de clases, cursos o con-
ferencias.
Tomemos por ejemplo esa cosa tan inocente que es la "información".
"La Argentina tiene la gloria de poseer uno de los diarios más grandes del
mundo. . . " — Sí, cuando la gloria se mide por los volúmenes. La prensa
"grande" es simplemente una pieza de la "ocupación" del país por lo
foráneo o "foreigner". Por eso existe tan obsesiva preocupación por "la
libertad de prensa", la cual ha sido elevada a principio religioso y presen-
tada como una cosa intocable y sacrosanta: ni los reyes ni los santos de
antes han tenido los privilegios que para sí reclaman los potentados que
están agazapadas detrás del "periodismo": o sea, por la burguesía capita-
lista, dueña de la Prensa "grande". Libertad de prensa no significa ahora
libertad para los que leen; sino privilegios para los que prensan. Y aquí
nuestra "prensa" es muy mala, o antinacional, o herética o disolvente,
o . . . todo junto. Donde esto se da ¿cómo va a poder levantarse una
nación? El pueblo está siendo pertinazmente deseducado desde modo.
La "libertad, libertad, libertad" del liberalismo ha producido la des-
educación institución-alizada.
Todos los con órganos de percepción de las cosas invisibles inteligi- /
feta; en este caso mucho peor: campo de apestados, gente para morir,
semicadáveres, infrahombres; y sienten subirles a la boca la erupción can-
dente de las maldiciones. Para percibir la miseria de nuestro estado, ya
no político sino humano, yo no necesito sonda. Cómo me fue en la
Compañía de Jesús, me informa sobre la Compañía de Jesús; cómo me
fue en la Iglesia me informa sobre la Iglesia; cómo me va en el país, me
certifica del estado del país, mejor que cualquier información externa.
Como individuo particular, yo podría salir a la puerta de calle y con el
sombrero en la mano, dar a todo el que pase las gracias porque me DEJA
VIVIR; pero como depositario de un quehacer, para el cual me hizo el
Hacedor, el sentimiento de la abominación se apodera de mi alma y sube
a mis labios la palabra "Anathema". Una cosa es la dimensión de la
persona particular; otra, la cuarta dimensión de su relación con Dios.
Separado de su causa y de su fin, el hombre es nada.
Pero Jesucristo nunca maldijo. ¿No? ¿Está Ud. seguro?
Pero la verdad es que si yo maldijera, no-sería como Jesucristo, sino
como José Mármol.
Por lo cual me guardo de maldecir; salgo a la puerta con el sombrero
en la mano (ahora que no se usa más que para pedir limosna) y doy las
gracias a todo el que pase, etcétera.
Una esperanza queda: la resurrección de Don Quijote.
Una resurrección solamente puede hacerla Cristo.
Sanables hizo Dios a las naciones; y la aparición de un gran ánimo
generoso y lúcido puede levantar a todo un pueblo de la abyección, y
El Desarraigo Argentino

"No haga Ud. caso de ios publicistas teóricos, que arrebatados


FERMIN CHAVEZ de un optimismo ideal, que siempre fue enemigo de lo bueno,
pretenden que las cosas sean como existen en sus cabezas o
en el libro donde leyeron, sin medir el tiempo y las circuns-
tancias que les dieron existencia". (Carta de Alejandro Heredia
a Marcos Paz, 3 de enero de 1837).

Desde hace mucho —desde que cier- afirmando en serio lo que Plauto había
tos poderes extranacíonales necesitaron lanzado como bocadillo de comedia.
impedir lo que Alberdi llamó "la con- Después, un buen escritor pero des-
quista de una conciencia nacional"—, se pistado pensador, Ezequíel Martínez
viene tejiendo la trama de una teoría Estrada, alienado por la seductora doc-
del vaciamiento de lo argentino. Es trina freudiana, formuló la tesis del
decir que desde hace mucho los ameri- "resentimiento" de José Hernández y
canos del Río de la Plata somos desti- del gaucho argentino. Creyendo que las
natarios de una sutil agresión espiritual cosas son como existen "en el libro
que debe servir, a la postre, de filosofía donde leyó", el autor de Muerte y
justificativa de otra laya de agresiones. transfiguración del Martín Fierro llegó
Primero fue la adopción de una vieja a conclusiones valorativas que eran
fórmula, seductora y con buena prensa: otros tantos argumentos en favor de la
"Civilización o Barbarie". Lanzada por teoría del vaciamiento de lo argentino.
Europa conquistadora, fue adoptada e E hizo escuela, lamentablemente. Dos
impuesta por Sarmiento, quien la com- hombres más jóvenes, de la generación
plementaría después con una teoría de a que pertenezco, cayeron seducidos, a
genocidio: " N o hay que economizar su tiempo, por las mistificaciones de
sangre de gauchos", que es nada más Martínez Estrada y por su pensamiento
que una consecuencia lógica de aquella freudiano - sarmientista. Doppelgänger,
primera fórmula disyuntiva que había psicología del hynos, genocidio del crio-
venido a invertir la etimología de la llaje y de lo hispánico, sustitución y
palabra barbarie. Se había empezado vaciamiento de lo argentino. Aquellos
por privarnos del alimento de la etimo- dos autores son H. A. Murena, con su
logía, de las raíces de las palabras, "sub- tesis de que "vivir en América significa
trato de las experiencias mentales de estar gravado por un segundo pecado
toda una civilización y carga presa original", y Julio Mafud, con la no-
como en cápsulas explosivas de toda la vedad sociológica del "desarraigo argen-
historia espiritual de una familia étni- tino".
ca", como dijo sentenciosamente Alfon- Me interesa aquí el libro de M a f u d
so Reyes. Para los griegos, Bárbaros por todo lo que él nos revela de esa
era lo extranjero, lo extraño; según Es- enajenación (o alienación) que el gene-
trabón los que hablaban un bar-bar ral-doctor Alejandro Heredia denuncia-
ininteligible. En Plauto, por una ironía ra en 1837. El autor de El desarraigo
propia de este comediógrafo cambia de argentino se encarga él mismo de darnos
sentido: bárbarus es el no griego, o sea la clave de su enfoque y de participar-
el romano. Pero Petrarca volverá a usar nos que su libro no pretende ser origi-
el vocablo en su sentido original, al de- nal. "Inmediatamente — n o s adelanta-
cirle a Urbano V en un saludo: "Sumus mos en el prólogo— se notará la in-
enim non graeci, non bárbari, sed ítali fluencia de Ezequíel Martínez Estrada,
et latini". Nuestro Sarmiento terminó Erich From y Simone Weill". Lo que

6
equivale a una puesta al día del psico- otra de Juan Bautista Alberdi: los
analismo en un país que está ansioso de "gauchos o campesinos argentinos" no
psicoanalistas. son "otra cosa que la raza española y
Julio M a f u d no es hombre de medías civilizada de los conquistadores euro-
tintas. Es rotundo y claro en sus for- peos de la América salvaje".
mulaciones. El indio era un desarraiga- La tesis de un gaucho mestizo étnica
do. El gaucho era un desarraigado. Las y socialmente predominante es gratuita.
instituciones eran desarraigadas. El in- Es un prejuicio; un supuesto. En la
migrante era un desarraigado. La litera- mayor parte del área del gaucho, la
tura es desarraigada. La política tam- dosis de mestizaje fue reducida. Y ello
bién. Es decir, todo. ¿Se salvan sólo explica por qué los jefes de gauchos que
los negros, partidarios del Restaura- conocemos, tanto en los Llanos de La
dor . . . ? Rioja como en el Litoral, son de "la
El desarraigo en el indio. El con- raza española". Es un dato verificable.
quistador venía de paso, a cumplir "su Además, el gaucho no se destruyó a sí
secreto deseo de enriquecerse y volver, mismo; lo destruyeron, que es cosa dis-
sin pensar nunca en afincarse o quedar- tinta.
se". Es una de las claves de la conquista La animaversión que Mafud anota,
aún no estudiadas, dice Mafud. "Ella del gaucho para con el indio no es pro-
encierra —agrega— gran parte de la ducto de un resentimiento canalizado
complejidad social americana. Si no hacia un "chivo emisario". Es producto
toda". de una posición claramente racista, muy
La incomunicación fue absoluta entre bien expresada por Martín Fierro, cuya
el indio y el misionero. "Los incomu- psicología es típicamente española. Aún
nicaba todo. La religión, la raza, el hoy, en 1966, M a f u d podrá encontrar,
idioma, la cultura". Ni siquiera hubo en los distritos nogoyaenses de Don
comunicación en las misiones del llama- Cristóbal y de Crucecitas, gauchos que
do Imperio Jesuítico. "Bastó una sola diferencian muy bien a los pocos mes-
noche para su caída y su destrucción". tizos sobrevivientes llamándolos tapes.
El indio quedó desarraigado entre Y todavía hoy, en los Llanos, nos to-
dos vacíos obsesionantes: el vacío de la pamos con el descendiente puro de la
cultura y la religión destruidas, y el de raza española.
la nueva cultura y la nueva religión. El Sigamos citando a Mafud. "El chiri-
indio fue "el primer desarraigado en su pá, las botas, el poncho no poseen nin-
propia tierra". gún valor fundamental en su trayecto-
Dejo "al lector la reflexión y el co- ría psicológica. Son elementos que lo
mentario. Y el. . . cubren, pero no lo profundizan". /
El desarraigo en el gaucho. " E n el " T o d o oscilando entre su origen humi-
proceso fetal se lo disputaron la madré llante y su muerte violenta. T o d a su
india y el padre blanco. Pero no fue lo existencia cabe en vértice de una sola
uno ni lo otro. Fue un ser intermedio: frase: es un ser arrojado al encuentro
gaucho. Su cuna fue un vacío". / "Fue de sus imposibilidades". / "Pero no
creado por un choque y no por puede volver sobre sus pasos. Son los
unión". / "Su psicología fue la del hijo pasos de su prehistoria, de la madre
ilegítimo: omitió a su padre y a su violada. Tampoco puede marchar hacia
madre. . . " / "Más aún: fue un parri- adelante. Adelante está el negador: el
cida. Quiso destruir a uno y a otro. padre". Si esto es sociología del gaucho,
Pero se destruyó a sí mismo. Se excluyó Augusto Compte era un pobre tipo.
del mundo. Su efímera existencia como Como en su maestro Martínez Es-
tipo social lo confirma. N o vivió. T o d o trada, el autor atribuye al "subconcien-
el tiempo lo monopolizó en su lucha". te" o a una "preocupación metafísica"
Es la tesis de Martínez Estrada, falta lo que en Martín Fierro no es nada más
del más mínimo rigor científico y de que una acusación al régimen imperante,
la mínima seriedad. A esa tesis incon- que marginaba al gaucho conforme con
sistente del gaucho mestizo y guacho las leyes que el capitalismo triunfante
se le podría oponer —en función de imponía. Así en aquel dicho de Picar-
autoridad y de magister dixit— esta día: " . . .Parece que el gaucho tiene /

7
4
Algún pecao que pagar", no se trata de ni se las impusieron desde afuera. Se
ningún pecado 'original de América, prolongaron naturalmente desde aden-
sino del maltrato histórico y del geno- tro". (Algo es algo. Hete aquí que el
cidio cumplido en el país después de gaucho inventó la "ferrata calx" de
Pavón y de Caseros. T i t o Livio y de las tumbas etruscas.)
Sigue la composición sociológica de
Bolazo 4: "Por un par de espuelas
Mafud, sin el pábulo de Fromm pero
un gaucho galopaba leguas". (Qué bár-
con supina ignorancia histórica: "Las
baros nuestros abuelos montieleros que
guerras civiles y las de la independen-
esto hacían.)
cia: el motivo. Al gaucho no le importó
ni lo uno ni lo otro, a excepción de Bolazo 5: "El visteo pertenece al
Güemes, reconocido por Paz y San ojo. La finta, a la mano. Filosófica-
M a r t í n " . A esa excepción habría que mente, su ubicación zigzaguea más den-
agregar a Artigas, a López Jordán tro de la filosofía irracional kíergegaar-
( m a y o r ) , a Pancho Ramírez, a Facun- diana que dentro de la filosofía abstra-
do Quiroga —proveedor del Ejército de ía del racionalismo". (En efecto: tam-
los Andes— a Alejandro Heredia, a bién rascarse la incordiera es un gesto
Francisco Clavero. . . kíerkegaardiano.)
Prosigue el sociólogo porteño: " N u n - Bolazo 6: "Borges relata, en "Eva-
ca encontró un lugar para afincarse, risto Carriego", cómo una mano basta
para habitar. Los primeros pasos los para ganar u n duelo. En la habilidad
dio en tierra ajena. Los últimos tam- de su manejo no hay nada de elabora-
bién. Era un exiliado". ¿Que me cuen- ción ni de análisis.
ta? ¿Y por qué se exíló e hizo gaucho Bolazo 7: "La ultimación, en ese
matrero? ¿Por el "subconsciente" o por caso, es un acto freudiano. Siempre la-
lo que dice José Hernández en la estro- mentará el psicólogo W u n d t no haber
fa que empieza: "Tuve en mi pago en estado en la Argentina". (¡Quién sabe!
un tiempo?. . . ¿Y si ligaba una puñalada de esos bár-
Como la ristra de bolazos es larga, baros?) .
a pesar de Simone Weill, voy a enu-
merar los más salientes, con comentario Bolazo 8: "Por cada status social
pero sin acentuar sus bordes entrete- degollado (en la historia argentina son
nidos: muchos) queda un vacío, que ese status
social en forma única, particular e in-
Bolazo 1: "La pampa absorbió al variable llenaba. De ese vacío surge el
hombre. Al igual que había absorbido tipo social desarraigado". (Por fin: la
a las plantas (el olivo o la vid) cul- culpa la tuvo la Mazorca.)
tivadas por los primeros agricultores Bolazo 9 y basta: "El país heredó de
europeos". (¿Deberemos cambiar el ver- la colonia todo, que era nada. Por eso
so famoso, diciendo "la pampa tiene el nacimos casi sin instituciones, sin ante-
olivo"? U n poco más y resultará que cedentes políticos ni sociales. La Revo-
La Rioja tiene el o m b ú ) . lución puso en vigencia a la República.
Bolazo 2: "Entre talón y espuela La movilizó. Agitó la vida, las con-
está el prólogo y el epílogo de todo. ciencias. El ejército circunvaló el terri-
Hay más historia y biología en las es- torio; mejor dicho, el territorio circun-
puelas que en todos los libros sainetea- való al ejército. La campaña despertó".
dos escritos inútilmente sobre el tema. (¿Cómo? ¿No era que el gaucho no
Es el helio de la historia gaucha". / " E n quería saber nada de esos asuntos?).
el lapso que va del talón a la espuela La antología puede extenderse. Da
está la única historia irrefutable del gau- para un libro, que pensamos escribir
cho. Sus épocas pueden dividirse en dos: antes de que se les siga haciendo el cam-
la época del talón y la época de la es- po orégano a algunos CUÍCOS que se la
puela". han tomado con los hermanos Hernán-
Bolazo 3: "La espuela y el cuchillo dez, dos hermanos bien arraigados de
fueron las dos únicas manifestaciones nuestra Argentina.
técnicas que el gaucho no resistió. Fue La teoría del arraigo argentino está
por una causa biológica. N o vinieron esencialmente en José Hernández, en

8
Francisco Javier Muñiz, en Manuel gados. Pero no un problema del pueblo
José Olascoaga, en Francisco F. Fernán- argentino.
dez, en Martiniano Leguizamón, en En este sentido, el libro de M a f u d ,
Fray Mocho, en Martín Coronado, en como antaño el Facundo sarmientino,
Leopoldo Lugones, en Saúl Taborda. puede alcanzar la categoría de otra bi-
Y en algunos gringos que nos defen- blia para el zonzaje.
dieron de los desarraigadores, como Pe- A esa filosofía del vaciamiento ar-
dro de Angelis o Pablo Mantegazza. gentino, reiterada al amparo de libros
Alberdi, en su Fragmento Preliminar y autores famosos, el país tiene para
de 1837, llamó a la generación de su oponerle no solamente las afirmaciones
tiempo para que trabajase por "la con- vitales de sus "arraigados": su caudi-
quista de una conciencia nacional". llos, sus escritores militantes, su pueblo
Los hermanos Hernández entregaron su en armas, sus matreros convertidos en
existencia a la ardua empresa de defen- héroes — c o m o los gauchos Molina y
der a los hijos del país. Olascoaga, con
Rivero—. El país puede oponerle tam-
su Juan Cuello o historia de un argen-
bién, por ejemplo, lo que Alberdi decía
tino; Fernández, con su Solané; Legui-
en su ya citado libro juvenil:
zamón con Montaraz; Lugones, con
El Payador y La Grande Argentina; y . . "Es, pues, ya tiempo de comenzar
Taborda, con su teoría del "comunalís- la conquista de una conciencia nacio-
mo federalista o facúndico", dieron las nal, por la aplicación de nuestra ra-
bases filosóficas y sociológicas para una zón naciente a todas las fases de
teoría del arraigo argentino. Y después nuestra vida nacional. Que cuando,
de ellos, otros muchos que viven entre por este medio, hayamos arribado a
nosotros. la conciencia de lo que es nuestro y
El desarraigo es, desde hace mucho, deba quedar, y de lo que es exóti-
problema de minorías. Siempre lo fue. co y deba proscribirse, entonces sí
Mientras el pueblo asumía con su fe habremos dado un inmenso paso de
sus deberes nacionales afirmando sobe- emancipación y desarrollo, porque no
ranía, sin flaquezas, intuyendo siempre hay verdadera emancipación mientras
los ideales de la Argentina, las minorías se está bajo el dominio del ejemplo
le daban las espaldas al país, descreían extraño, bajo la autoridad de las for-
de las fuerzas del genio nativo y hasta mas exóticas/ "Depuremos nues-
se aliaban con el agresor extranjero, tro espíritu de todo color postizo, de
enajenadas por una Argentina ideológi- todo traje prestado, de toda parodia,
ca que estaba en los libros, y no en la de todo servilismo. Gobernémonos,
tierra v y en el hombre rioplatense. Saúl pensemos, escribamos, y procedamos
Taborda, a partir de sus meditaciones en todo, no a imitación de pueblo al-
de 1932 sobre los "ideales del hombre guno de la tierra, sea cual fuere su
argentino", y en sus artículos de la re- rango, sino exclusivamente como lo
vista Facundo, formuló las bases de una exige la combinación de las leyes ge-
filosofía nacional que traduce, en pleni- nerales del espíritu humano, con las
tud, esa corriente del arraigo argentino individuales de nuestra condición so-
que se desliza a lo largo de nuestra his- cial". / "Nuestros padres nos dieron
toria no oficial, alimentada por dura- una independencia material; a nos-
bles fuentes interiores. otros nos toca la conquista de una
La teoría del desarraigo no es más forma de civilización propia: la con-
que un nuevo avatar de la formulada quista del genio americano".
hace más de un siglo por Sarmiento, El traje prestado, la parodia y el ser-
arrogante "idiota útil" del imperio que vilismo se llaman, en los últimos tiem-
por entonces manejaba la política rio- pos, Símone Weil, Erich Fromm y tutti
platense y que, en 1854, quiso segregar cuanti, usados para arrimar agua a la
la provincia de Buenos Aires creando teoría antinacional del desarraigo.
la República del Río de la Plata, justi-
ficada por escrito en una casi olvidada
página de Mitre. U n a problemática para
quienes se sienten a sí mismos desarrai-
Primeras Imageries de
Don Juan Manuel de Rosas
en la poesía del siglo XX
LUIS SOLER CAÑAS

ii lo único que podía hacer era cruzarse de


brazos, se dispone a resistir hasta donde
sea posible. Hay en su discurso una alu-
E M I L I O P. C O R B I È R E sión a Mansilla, que trae al recuerdo la
incursión de la escuadra anglofrancesa
Tres años más tarde del Rosas de por el Paraná y el combate de Vuelta
Masefield, el Dictador aparece inspiran- de Obligado, cuyo heroísmo y denuedo
do un poema vernáculo, La Rozaida, resonaron como timbres de gloria en el
original de Emilio P. Corbière, escriba- Viejo Mundo.
no, periodista, orador político y asesor El trozo aquí incluido, lo advierto
jurídico de empresas comerciales, naci- honradamente, no debe engañar a los
do en Ramos Mejía, provincia de rosistas. Corbiére pone en boca del Dic-
Buenos Aires, en 1886 y muerto en la tador palabras que cualquier revisionis-
Capital Federal en 1941. Corbière es ta de nuestra historia suscribiría, pero
autor de algunas otras producciones en ese sólo es un pasaje del poema, cuyo
verso, de un libro sobre El gaucho, contenido y dirección son decididamen-
desde sus orígenes hasta nuestros días, te antirrosistas y se conforma, en cuan-
de otro acerca de El terrorismo en la to a los hechos cantados o evocados,
revolución de Mayo y de la novela Por con la versión tradicional y corriente.
la tierra del pan. Así lo declara, paladinamente, el autor
La Rozaida, extenso poema que ocu- en el prefacio: " N o me he apartado de
pa —en el libro de ese t í t u l o — unas la verdad histórica conocida; los suce-
150 páginas, está precedido de un pró- sos, la moral de los héroes, sus incertí-
logo en el que su autor explica las cau- dumbres, sus pensamientos, odiseas de
sas que lo movieron a escribirlo e invo- vida y muerte, están tomados celosamen-
ca para su obra la protección de los te con criterio patriótico y tradicional,
dioses tutelares de la poesía épica y de respetando el concepto argentinista que
la justicia, y se complementa con una los ha valorizado y rehuyendo debates
nutrida sección de notas y biografías, sobre apreciaciones diferentes, porque
que llena aproximadamente unas 100 este libro no es de crítica ni de contro-
páginas. versia. Y por eso, Rozas, calificado co-
Corbière es un versificador diestro e mo tirano, cuyas horas de sangre siguen
infatigable, como se verá, pero la poesía siendo indiscutibles, confirmadas por
quedaba, a mi juicio (que ha de ser el sus propios decretos, ocupa un lugar de
de cualquier otro posible lector de La reprobación, mientras en el opuesto
Rozaida) más allá de sus posibilidades. surgen Lavalle, Paz y Urquiza, procla-
Totalmente más allá. A pesar de su mados paladines de la libertad, cuyos
tono heroico y .exaltado, su lectura es errores justifican sus historiadores den-
fatigosa y sólo es posible asimilarla en tro de la mente que inspiró sus actos".
pequeñas dosis. En el trozo que repro- Ya se comprende cuál es "la verdad
duzco, de no muy larga extensión, Cor- histórica conocida", cuál "el criterio pa-
bière hace hablar a Rosas cuando Luis triótico y tradicional". A mayor abun-
Felipe de Francia envía una escuadra dancia, para que se comprenda el enfo-
bloqueadora al Plata; y ;el Dictador, sin que bastante simplista e ingenuo, pese
alardes, pero sin temor, sin creer que a la ilustración y cultura del autor, con
pueda materialmente neutralizarla o que concibió su obra, transcribo los si-
vencerla, pero sin estimar tampoco que guientes conceptos del prólogo:

10
"Respetando una vieja fórmula lite- que todavía sigue presidiendo en gran
raria, he subordinado el desarrollo y parte los avatares y las peripecias de
origen de los sucesos humanos a la in- nuestra historia más corriente y, si se
fluencia de fuerzas o voluntades sobre- me permite la expresión, más oficial. De
naturales, y en mi poema, lo maravi- ahí que para Corbière el gaucho "fue
lloso responde a las ideas religiosas am- noble al mando de Güemes y bandido
bientes, tomando las pasiones como ex- al de Aldao o Quiroga".
presión de la lucha del mal y del bien,
que se disputan en el concepto cristiano, La Rozaida, libro poco menos que
el predominio del mundo; — y si Sa- desconocido, raro de hallar hasta en las
tanás o Lucifer es encarnación del vicio librerías de viejo, jamás mencionado,
o el desorden en la idea supersticiosa, constituye una verdadera curiosidad bi-
nada más propio que su acción en la bliográfica. El tiempo que abarca su
trama del poema, para que su idealismo argumento corre aproximadamente de
llegue más cerca del alma popular, y la 1823 a 1852, que ¡es el lapso en que
concepción del vicio agrande el mérito asoma Rosas en el escenario político,
de la virtud". se consolida su poder y cae finalmente
derrotado.
En una palabra, la fórmula literaria
empleada por Corbière en La Rozaida He aquí cómo aparece el Dictador
se compadece con esa arbitraria y anti- en este fragmento del canto II del libro
natural división en santos y demonios III:

Vio Rozas, en la costa, del sol a los reflejos


la poderosa escuadra de fiesta empavesada,
y despreciando amigos ,auxilios y consejos
el reto desdeñando, desenvainó la espada.

"Defiendo de la patria, gritó, la autonomía.


N o admitiré de extraños intervención en ella,
y en el empeño grande de la jornada mía
los manes de sus héroes descubrirán mi huella.

¿No son conquistadores los buques adversarios?


¿Qué buscan en mis lares, donde yo sumo todo?
La explicación es una: piratas y corsarios
proceden en los hechos de semejante modo.

A mí vengan aquellos que sienten el ultraje


de Francia y de su escuadra, como cobarde injuria",
a sus secuaces dice, mostrándoles coraje
con los crispados puños en sensación de furia.

" N o teman la osadía francesa mis aliados;


en triunfos y derrotas me encontraré el primero,
y si me dejan solo, verán abochornados,
cómo el invicto Rozas resiste al orbe entero.
(
Recursos no preciso; me sobran los porteños,
patriotas indomables, valientes a porfía,
para mostrar a Francia cómo no son pequeños
los pueblos que combaten por su soberanía.

Bloqueos no me arredran. Los buques enemigos


verán que su atentado fatuoso no me humilla,
cuando al pasar los ríos, de costas y de abrigos
retumben mis cañones al mando de Mansilla".

11
JORGE LUÍS BORGES Famosamente infame
La década de 1920 parece empezar,
su nombre fue desolación en las calles,
idolátrico amor en el gauchaje
en lo que a nuestro tema se refiere, en
forma muy poco propicia; pero a los
dos años de editada La Rozaida, es
decir, en 1923, se produce en nuestro
país el primer contacto importante del
tema Rosas con la Literatura o, mejor
dicho, con la Poesía. Ese año se publi-
ca en Buenos Aires una colección de
versos denominada Fervor de Buenos
Aires. Su autor es Jorge Luis Borges,
que de entonces acá ha llegado a cons-
y horror de puñaladas en la historia.
tituirse en una de las figuras más im-
portantes de las letras nacionales y tam-
bién en una especie de Mito o Monstruo
Sagrado, indiscutible para sus férvidos
y siempre discutido para todo el resto.
N o voy a reseñar aquí la carrera del
autor de Ficciones, sobradamente cono-
Luego el problema de Rosas pasa en
cida, ni los rasgos mayores o menores
de su personalidad, ahora siempre en
primer plano.
realidad a segundo plano, a convertirse
en mero pretexto ante el problema ma-
yor, que de larga data inquietaba a
Borges, del tiempo, de su caducidad, de
su trágica realidad cotidiana:
Hoy el olvido borra su censo de
muertes,
porque son parciales los crímenes
si los cotejamos con la fechoría del
Tiempo,
esa inmortalidad infatigable
que anonada con silenciosa culpa las
razas
y en cuya herida siempre abierta
que el último dios habrá de restañar el
último día,
cabe toda la sangre derramada.
Ante las muertes que va consumando
La poesía de Borges ha sido solicita- implacablemente el Tiempo, monstruo-
da con alguna frecuencia — n o demasia- sa deidad, Rosas queda empequeñecido
da, en verdad— por el asunto históri- y refegado.
co: Inscripción sepulcral; Rosas; Los En seguida adviene la duda:
Llanos; La fundación mitológica (que
en última versión el poeta quiere míti- N o sé si Rosas
ca) de Buenos Aires; Isidoro Acevedo; fue sólo un ávido puñal como nuestros
Página para recordar al coronel Suárez, abuelos decían;
vencedor en Junín; Alusión a la muerte creo que fue como tú y yo
del coronel Francisco Borges; Sarmien- un azar intercalado en los hechos
to; Poema conjetural. que vivió en la cotidiana zozobra
e inquietó para felicidades y penas
Algunas de esas páginas, como las re- la incertídumbre de otros.
feridas a la fundación de Buenos Aires,
a la muerte de Facundo, a los últimos También, el Dictador fue encarcelado
pensamientos de Laprida, son justamen- en la malla angustiosa del tiempo. El
te celebradas. Casi diría que famosas, poeta le concede haber sido, como él
la dedicada a Rosas, que indudablemen- mismo, como el lector, un mero azar
te palidece ante las tres antes aludidas, en la existencia. En resumen: no hay
por lo menos entre nosotros. N o lo es por qué darle tanta importancia. Sus
pero resulta lo suficientemente "singular restos mortales están lejos:
y original como para ser colocada en Hoy es el mar una separación
lugar de excepción entre las inspiradas caudalosa
por el personaje. Borges da allí una entre su reliquia cenizal y la patria,
estampa del Dictador que se compadece hoy toda vida por lastimera que sea
casi integralmente con la de la historia puede pisar su aniquilamiento y su
oficial y la leyenda folletinesca de ella noche.
derivada; pero no abruma con epíte- Al fin y al cabo
tos, sucesos, condenaciones e invectivas. Ya Dios lo habrá olvidado
Cuatro versos le son bastantes para de- y es antes una misericordia benévola
finirse ante el personaje, para declarar que un rencoroso ensañamiento e injuria
su fama, su infamia y su sangriento el reanimar su obligatoriedad decisiva
prestigio: con limosnas de odio.

12
El final no resulta muy lisonjero Aquí tenemos, por fin, a un poeta
para el Dictador, pues aunque Borges que confiesa su amistad con el Dictador,
se desliga del hombre concreto y de la que llega a conferirle categoría de poeta
pasión a favor o en contra, para él re- y que, si le llama malevo, no ha de ser
cordarlo a Rosas con odio es casi un con antipática propensión.
menester piadoso. Pasados dos años, Raúl González
Borges ha sustituido la diatriba di- T u ñ ó n da a la estampa otro volumen
recta, violenta, negadora, por un proce- de versos, con alguna que otra prosa
dimiento más sutil y más mortal: Rosas , entremezclada: Miércoles de ceniza, en
es sólo uno entre los infinitos seres za- el que figura su Epitafio para una tum-
heridos por los puñales del Tiempo, de- ba argentina en Inglaterra, uno de los
gollados y enterrados por la trágica su- mejores poemas que se han escrito so-
cesión de los días, patinados inexorable- bre el personaje. Trasluce un sentimien-
mente por el polvo del Olvido. to fuertemente admirativo, aunque le
T a l el Rosas brindado por el poeta reprocha "el mal de la divisa" y testi-
Borges. En prosa, el autor de Inquisi- monia que "enlazó las estrellas y las
ciones dijo alguna vez: "Nuestro mayor manchó de sangre"; pero es, más allá
varón sigue siendo don Juan Manuel: de cualquier toma de partido, una ex-
gran ejemplar de la fortaleza del indi- presión de ahondada poesía, una verda-
viduo, gran certidumbre de saberse dera joya lírica.
vivir, pero incapaz de erigir algo espi-
ritual, y tiranizado al fin más que Hizo morder el polvo de la derrota
nadie por su propia tiranía y su ofici- a la tierra que ahora lo cobija.
nismo". (El tamaño de mi esperanza. Tenía el genio del rastreo,
1926, pág. 8, según León Benarós, que el mal de la divisa
me dio y a quien agradezco el dato) . y la virtud de la baquía.
Acostumbrado a manejar el lazo
RAÚL GONZÁLEZ TUÑÓN enlazó las estrellas y las manchó de
sangre.
Pero Rosas va a tener, en esa tercera
década de nuestro siglo, un encuentro Lo velaron: el mate, la daga y la
mucho mejor, mucho más fructuoso guitarra.
aún, con la Poesía. En 1926 se publica Los cascos de sus brutos
por intermedio del librero Gleizer la frenetizaron a las montoneras.
primera producción de Raúl González A su lado ni López, ni Ramírez, ni
T u ñ ó n , El violin del diablo, obra pri- Artigas, ni Rivera,
migenia pero ya lograda, con la que su ni los pálidos héroes oficíales
autor se lleva el primer premio del con- pueden alzar sus sables un segundo.
curso establecido por dicho editor. Die- Sólo se dobla su fiereza
ron su voto para que así fuera los ju- ante la sombra prodigiosa
rados Alfonsina Storni y Evar Méndez. del terrible San Juan Facundo.
En ese libro predomina una visión de
los bajos fondos de la urbe porteña, Dirigió pericones como batallas
pero en el último poema, titulado y empresas comerciales.
Mutis, el autor promete a sus amigos El amor lo salvó.
encarar una nueva realidad, más cordial Y le cabe la gloria mejor
y generosa, simbolizada en 'el patio la de haber inventado
manso del arrabal porteño". Dejará sus el más grande de los gritos criollos:
locas piruetas de payaso y volcará su — ¡ V i v a la Santa Federación!
agua de amistad, su agua de corazón,
Nadie de sus maldades grite si es
"en las cajas de música de los patios
hombre bueno.
criollos":
Nadie de sus bondades hable si es
Donde la luna, es luna de cualquier hombre malo.
azotea Hoy la injusticia sopla sus cenizas.
y donde ayer, mi amigo Don Juan Se llamaba
Manuel de Rozas Don Juan Manuel de Rosas
era medio malevo y era medio poeta. y San Martín le regaló una espada.

13
En un capítulo en prosa titulado Bar Tienes sangre de tiranos
(también de Miércoles de Ceniza, capí- en tus venas, novia mía,
tulo que no desmerece por cierto de la lo sé por la tiranía
calidad poética del resto del libro), dulcísima de tus manos.
cuenta Raúl González T u ñ ó n que vivió Hay instintos inhumanos
en un convento, en Santa Fe de la Vera en tu fiero corazón,
Cruz, y dice a ese respecto: "Allí apren- en tus ojos de traición
dí, contrabandista de la soledad, los acecha Don J u a n Manuel,
grandes secretos de las pequeñas cosas. y es tu boca roja y cruel
Y a querer a Estanislao López, y a como la Federación.
Juan Manuel de Rosas, el único, el
auténtico gaucho argentino, a través de ALBERTO VACAREZZA
una lápida ofendida por el tiempo y por
los salvajes unitarios". Estamos en 1928, gran año para el
Pero en su actual postura el concepto Restaurador, pues en tanto la prensa
de Raúl González T u ñ ó n sobre Rosas formula una de sus periódicas encuestas
varió apreciadamente, y para compro- a su respecto, tres grandes líricos nues-
barlo basta recorrer varios de los poe- tros —de los cuales ya he nombrado
mas que integran su libro Primer canto a dos— inspíranse en él para escribir
argentino ( 1 9 4 5 ) , todo él compuesto hermosos poemas y un gran pulsador
por piezas de aguerrida y combativa de la cuerda popular, don Alberto Va -
militancia, tales como Himno en las carezza, toma su época y su lucha como
vísperas de Mayo; Amargo intermedio; asunto de uno de sus más afortunados
Nuevo intermedio amargo, y final de saínetes.
esperanza; Canto al pueblo heredero de El autor de Tu cuna fue un conven-
la tradición de Mayo; Canción florida tillo era rosista. En 1954 le tocó hablar
a la patria florida; El Himno Argentino en un acto auspiciado por la Organiza-
cantado a todo piano en Montevideo y ción Popular Pro Repatriación de los
José de San Martín escribe a O'Higgins. Restos de Juan Manuel de Rosas y en
En este poemario, Rosas, igual que su discurso dijo que en su niñez había
otros personajes de la historia argenti- tenido la fortuna de que le enseñaran
na — y aun americana, como Bolívar— la verdad sobre el personaje y así había
están vistos en función de un pensa- llegado a conocer un Rosas distinto al
miento político contemporáneo, referi- estereotipado por la leyenda unitaria;
do a cuestiones del candente acontecer un Rosas a quien gustaban los versos
de la actualidad. y que los escribía; un Rosas a quien
placía jugar y distraerse con los niños
en la intimidad del hogar.
FERNANDEZ MORENO El 16 de Julio de ese año Vacarezza
contestó a una encuesta sobre la Repa-
Ese mismo año de 1928 la Poesía triación, iniciada ese día por el diario.
siguió metiéndose con el jefe de la Con- "Crítica". D i j o entonces: "Recuerdo
federación. En el libro Décimas, de Fer- que, cuando era muchacho, solía ir mu-
nández Moreno, aparecido en esa fecha, cho a mi casa una señora que conoció
incluyóse una dedicada A Doña Dalmi- a Rosas y vivió intensamente su época.
ra López de Osornio, por cuyas venas Era ya muy viejita. U n día me encon-
corre la sangre terrible de Don Juan tró leyendo un libro de historia. Lo
Manuel. N o es éste, por cierto, el mo- hacía en voz alta. La página relataba
tivo central, pero el poeta lo toma como un episodio rojo de la época rosista.
Doña Gabina escuchó breve instante.
punto de comparación para enhebrar sus
Luego exclamó, indignadísima: " T o d o
versos de amor, su querella sutil: una eso que estás leyendo, niño, es mentira.
breve dosis de auténtico lirismo en la Rosas no fue eso. Nada de eso. Y o lo
que se conjugan la nota tierna y cierto conocí personalmente. Tenía el apoyo
campanilleo humorístico, ajeno por del pueblo. Se lo quería como a un
cierto a todo el pesado machaqueo his- padre. Y se lo admiraba por su gesto
tórico. de haber parado en . seco a los ingleses

14
y los franceses que nos tenían bloquea- Hay un tinte rojo fuerte
dosi ¿Sabés vos que es un bloqueo? y rondando va la muerte
Bueno, conviene que lo sepas. Es impe- por la casa del traidor.
dir que atraquen más barcos en el puer-
to. Es apoderarse de todos los produc- Unitarios y extranjeros,
tos de la tierra. ¡Es pretender que nos en sus barcos cañoneros
muramos de hambre!" Impresionado van llegando a la ciudá,
por el relato de doña Gabina, comencé mas que llegue lo que llegue^
siendo joven a interesarme por la vida a la sangre que nos riegue
del exilado de Southampton. Hablé otra sangre se unirá,
con ella muchas veces. Pregunté. Leí. Y serpenteando en mil arroyos,
cada vez lo encontré más criollo. Más y en la tierra de los criollos,
nuestro. Entonces fue cuando consulté muerte criolla encontrará.
a la opinión pública a través de El Cabo
Rivero y el público que asistió a las re- ¡Juan Manuel! ¡Yo no quería
presentaciones de esta obra me dio la coloriar esta alegría
respuesta. La misma que busca ahora que me sangra el corazón!
"Crítica" con su encuesta. El pueblo Pero hay algo en la pelea
está con Rosas. Con la justicia que re- que golpea y que golpea
presentará la repatriación de sus restos". machacando el aldabón.
El cabo Rivero, "saínete porteño de Buenos Aires se ha dormido,
1840", lo estrenó la compañía de En- Ya no se oye más el ruido
rique Muiño el 8 de marzo de 1928 en
del candombe sopipón.
el teatro Buenos Aires. N o se trata de
Sólo el alma está despierta.
un alegato rosísta, sí la obra de alguien
Y cuidando está la puerta
para quien la historia de su patria ,en
J u a n Manuel con el facón.
el período correspondiente al Dictador,
no podía encajar con la versión oficial Juan Manuel: En tu homenaje
corriente. En El cabo Rivero, como en ya rompieron el cordaje
la novela de Martín Coronado La ban- con un son antiguo y fiel
dera (llevada luego por su autor al tea- las guitarras de los hombres
tro con el título de El sargento Palma) y el golpiar de los candombes
también hay un unitario que, ante la te saluda, Juan Manuel!
complicidad de su partido con los in-
terventores y agresores europeos, en vez
de seguir con él resuelve pelear, en vez NICOLAS OLIVARI
junto a la Federación porque
De los cuatro nombres que el año
cuando la Patria peligra 1928 reúne en torno al nombre de Don
no hay más que un solo partido. Juan Manuel de Rosas voy a citar al
último, the last bul not the least, gran
Los versos que canta el cabo Rivero poeta a secas, como a secas —aunque
en el saínete homónimo fueron repro- bañada en lo íntimo de ternura— fue
ducidos más tarde por Vacarezza en su a veces -su poesía, y no mal gran poeta
libro Cantos de la vida y de-la tierra, como se dijo no hace mucho, y para
con el título de Canto a Juan Manuel. colmo en un acto de homenaje a su me-
Son los siguientes: moria. ¿Sabía alguien, recordaba al-
¡Juan Manuel! En tu homenaje guien en este país donde la erudición
ya levantan el cordaje se desprecia y los críticos de oficio sue-
con un son antiguo y fiel len conformarse con las cuatro cosas
las guitarras de los hombres, consabidas de la aprendida lección de
y el golpiar de los candombes siempre; sabía, recordaba alguien que
te saluda, Juan Manuel! Nicolás Olivar! — ¡ n a d a menos!— tam-
bién escribió un poema que rezuma
Mozas blancas y morenas sentimiento admirativo y limpio fervor
olvidando sus faenas, rosísta? .En aquella época —fines de la
todas bailan en tu honor. tercera década del siglo— la discusión

15
0
y la polémica estaban abiertas con toda Fue el año de la derrota de Don Juan
franqueza y con toda libertad sobre la Manuel. Ella, empero, no terminó con
posibilidad de reivindicacar la figura de su recuerdo. Lo habían vencido, sí,
Rosas. Quizás no era tanto la polémica Pero en el Temple te querían,
como el simple hecho limpio de que y bajo tu dictadura la sabiduríía
unos y otros, y muy especialmente los popular
que se alzaban de alguna manera con- creó esta gran frase:
tra la historia corriente y el juicio ofi- — C u a n d o Don Juan Manuel, no había
cial, no se sentían cohibidos ni someti- ladrones. . .
dos a presión negativa alguna en trance frase que en los viejos dura todavía.
de tener que expresar su pensamiento.
Se podía o no compartir los nuevos El poeta no se anima, no quiere pro-
conceptos en favor del Dictador, pero nunciar un juicio terminante, razonar-
a nadie se le habría ocurrido, como en la seducción que lo imana; él no sabe,
nuestros magníficos días, la idea de a ciencia cierta, muy bien cómo fueron
vedar la difusión de opiniones que no las cosas:
encajaban con el juicio de sobra repeti-
do a lo largo de medio siglo sobre su N o sé. No sabemos. Pero eras tan
persona y su acción. blanco y tan rubio
como lo fueron los hombres que
A diferencia del creador de Juancito vinieron después
Caminador, Olivari nunca recogió sus y abrieron cancha
versos rosistas en volumen. Su poema y alambraron la pampa.
Don Juan Manuel, enfocado el asunto N o sé. N o sabemos. Pero los morochos
con criterio distinto al habitual, se que- de barba romántica
dó en una vuelta del camino, olvidado y tropo retórico
quizás por su propio autor, quien tal
nos parecen los que luego debían recibir
vez debió considerarlo fruto de circuns-
al inmigrante
tancias o desconectado con el resto de
su producción lírica. Yo creo, por más —venido a labrarles las tierras—
de una razón, que Don Juan Manuel acompañándolo. . . con la guitarra.
merece volver a la circulación y no tan
sólo como una mera curiosidad: La atracción misteriosa de Rosas, esa
suerte de intuición popular, de cora-
Don Juan Manuel, a nosotros, hijos zonada que lo acerca a su sentimiento,
de emigrantes, se trasluce cuando afirma que
nos tocará acercarte. . .
Blanco y rubio y casto y misterioso
Así comienza el poema. Olivari, de y terriblemente bello
ascendencia genovesa, siente profunda- nos ganaste de zurda de puro guapo,
mente la condición de su sangre venida de prepotencia
del otro lado del mar, de argentino re-
Recuerda la memorable patriada de
ciente. ¿Puede el hijo o nieto de emi-
la Vuelta de Obligado (adviértase cómo
grantes sentir también la figura, la este .hecho de armas se quedó enredado
atracción de un hombre de nuestro pa- en la conciencia de la Nación y del Pue-
sado, más lejano por la transformación blo y en la voz de sus poetas) :
de las costumbres y de la fisonomía pa-
tria que por el tiempo que nos separa de . . . cruzaste el río con una cadena
él? En realidad, por el lado familiar, en donde tascaron el freno los que aquí
entrañable, algo hay que lo acerca a nada tenían que hacer.
los tiempos viejos:
Luego vuelve a alumbrarse su memo-
Viejo tremar de un recuerdo: ria con el decir de la abuela, lo ve a
vacilante candil de la memoria de mi Rosas "hermoso y terrible", y concluye
abuela. por suspender toda reflexión, toda evo-
A Urquiza lo vio entrar con un gran cación, para entregarse cálidamente en
poncho blanco. . . el grito que tantos años resonó en las
Era en el cincuenta y dos. . . calles de la patria porteña;

16
Don Juan Manuel, te evoco en el
recuerdo . . . Hasta la fecha los resultados de la
quinceabrilero de mi abuela
con el tajo de tu boca y tu pelo en "política" educacional no son muy
montonera halagüeños. Se despilfarra tiempo y
y te veo tan hermoso y tan terrible
que. . . ¡Viva la Santa Federación! dinero. . .

T o d o está, desde luego, volcado y En el ciclo secundario el 75 % de


plasmado en el estilo lírico peculiar de
Olivari, hecho de desprecio por la retó- alumnos desertan en 2do. o 3er. año.
rica, como a martillazo limpio, con En este ciclo, además de la enseñan-
imágenes recias, bruscas, insólitas, con
un poco de sorna cuando menta la za ineficaz e inoportuna de los idio-
vihuela de nuestros románticos y con mas extranjeros, hay mil anomalías
un poquito de ternura, casi escondida,
cuando nombra a los inmigrantes, cuan- anacrónicas que corregir. Pero hay
do recuerda a la abuela. . .
una que es pintoresca. En las escue-

A FINES DE LA DECADA las normales se exige para aprobar


DEL T R E I N T A
las materias generales y hasta el Di-
Ya para fines de la década del 20 el
bujo un mínimo de siete puntos. Pero
tema federal y rosista va creciendo en
la literatura y en la poesía argentina. para aprobar la materia más impor-
Ya está aflorando en la prosa y en el i
verso de Héctor Pedro Blomberg, el tante, que es Práctica de la enseñan-
cantor de los puertos y de los bajos
fondos, que lo tornará canción, poema, za, sólo se exige un míñímo de cuatro
novela, cuento, diálogo escénico, episo- puntos. Interrogué a profesores e ins-
dio radiofónico. . . En la década si-
guiente, él y otros escritores enfocarán pectores sobre la razón de esa ano-
con diversidad de matices la época roja malía. Todos contestaron: es en ver-
del Restaurador y el volumen literario
y poético irá acentuándose, intensifi- dad un error, pero lo ordena el regla-
cándose, por razón misma del crecimien-
mento. Esta verdad trágica me recuer-
to de la nueva conciencia federal y ro-
sista, estimulada por la pública discu- da la respuesta de un prestigioso
sión del "caso Rosas" en diarios, revis-
tas y libros — d a n los suyos Carlos cirujano alemán que nos visitó cuando
Ibarguren y Manuel Gálvez, impulsan- la política hitlerista estaba declinando.
do tremendamente la reivindicación del
personaje— y concretada en la funda- Pero, profesor —le dije yo—, si usted
ción, un día de 1938, del Instituto de
afirma que ya el 75 % de la población
Investigaciones Históricas que lleva el
nombre del Restaurador y que" en sus no lo quiere a Hitler, ¿por qué no lo
mejores jornadas, las de entonces, supo
echan? Doctor —me dijo muy solem-
traerlo a primer plano, agitar la polémi-
ca y, como consecuencia, promover nemente—, en Alemania eso no se
—aparte de estudios, ensayos y mono-
grafías— una corriente lírica que se ex- puede hacer. ¿Pero, por qué, profe-
presa en dos direcciones: una de nega- sor? ¡Porque eso está prohibido!
ción, otra de afirmación, sin que falte
la pieza meramente decorativa, el texto (OSCAR IVANISSEVICH — Bases
que se resuelve en un interrogante o el
planteo con profundidad humana y psi- para una política educacional — CISA,
cológica. Buenos Aires 1966).
Continuará

17
En el convento
E n homenaje a L u g o n e s . . . y al P . Gaynor)

(Un locutorio de monjas de clausura de un convento imaginario;


de las cuales se ven una veintena en el saloncito detrás de las ma-
cizas rejas, sentadas en el suelo a la turca y con los velos echados,
de modo que en la semioscuridad parecen fantasmas; y al otro
lado de los barrotes de hierro con pinchos, el CAPELLAN sentado
en una especie de estrado o tarima ante una mesita con un mantel
granate.)

CAPELLÁN.—Les prometí el otro domingo, después del funeral, hacerles una


plática sobre si finado Padre Gaynor, cuya repentina muerte nos ha
desolado a todos. Sin embargo, no hablaré ahora sobre él, sino sobre uno
destos papeles de Uds., que me ha sorprendido. . . U n fenómeno.
ABADESA.—¿Qué papeles?
CAPELLÁN.—El domingo pasado me los dieron Uds., U d . misma Reveren-
dísima ¿no recuerda? Les pedí como condición desta plática me escribie-
ran todas una "Composición" acerca del P. Gaynor, que Uds. han co-
nocido como confesor muchos años, y yo solamente tres años como
amigo; con el fin de inspirarme. El cuarto o quinto papel que leí me
quitó toda la inspiración. Es una composición genial.
ABADESA.—¿Es la mía?
CAPELLÁN.—No, Reverendísima Madre. Es una de las que no traen firma.
U n a composición en verso con 14 estrofas y el título "In Memoriam".
Es una especie de elegía y plegaria al mismo tiempo. ¿Puedo saber quién
la hizo?
SOR EDITH.— ( U n a vocecita que sale de un rincón, junto con una risita aguda
muy peculiar, un poco tímida y un poco traviesa.) Soy yo, la hermana
Edith. . .
CAPELLÁN.—¿Puede alzarse Su Caridad? N o veo cuál es, sor E d i t h : parece
la tercera de la segunda fila. . .
SOR EDITH.— {de pie) La segunda de la tercera fila. Y o hice esa composición
por obediencia. ¿Qué tiene?
ABADESA.—¡Sóror, no se alce Su Caridad el velo, por f a v o r !
SOR EDITH.—Perdón, Reverenda Madre, fue un movimiento inconsciente. N o
me lo alcé. . .
ABADESA.—Por esfe movimiento contra las Santas Reglas acudirá Su Caridad
hoy después de las Vísperas a la Madre Corregidora a que le dé una
penitencia.
CAPELLÁN.—Si Ud., Reverendísima, conforme m a n d a n las Santas Reglas,
no anduviera volviendo la cabeza, no hubiera visto ese gesto inconsciente.
SOR EDITH.—Si fue inconsciente no merece castigo, Madre. Fue un gesto in-
voluntario.
CAPELLÁN.—Acéptelo, Hermana. N o replique. No. importa. Al final ¿qué
importa tampoco saber quién ha hecho ese poema? — dirán mis buenas
hermanitas. Pero sí, eso me importa mucho, su autora es un genio; en
poesía, quiero decir. Mejor dicho la composición es genial, pero no se
puede saber Seguro si la autora es un genio con solamente esas 14 es-
trofas (una por cuatro igual. . . 4 por 4, 16 y llevo una; cuatro por
una cuatro y una cinco) con solamente esos 56 versos endecasílabos.
Puede ser solamente un talento aplicado, y puede ser un loco. Con una
sola, como "El Solieron" de Lugones por ejemplo, no se puede deter-

18
minar, si el autor es un genio. Si ahora al leerla nos parece genial, es
porque conocemos toda la obra de Lugones, y la proyectamos sobre esas
quintillas; si solamente tuviéramos esas 33 quintillas, no sabríamos se-
guro si fue un genio, un talento aprovechado o un loco . . que dio en
el clavo por un casual una vez. ¿Ha escrito Su Caridad otros poemas,
Sor E d i t h ? Puede sentarse, siéntese por favor.
SOR EDITH.— (Se oye otra vez la risa aguda y contenida, sofocada con una
mano) Eso último que Su Reverencia d i j o . . .
CAPELLÁN.—¿Qué dije, ¿Qué último?
SOR EDITH.—Una loca. Sí: he hecho muchísimos poemas y cuentos pero n u n -
ca los publiqué. Perdone que me ría, Padre. Dio en el clavo U d . Soy
lo último: una loca.
CAPELLÁN.—Tonto de m í : es claro. Es imposible hubiese logrado este poema,
si no hubiese hecho muchos otros antes. ¿Qué edad tiene, hermana?
ABADESA.—¿Es necesario todo esto para una plática espiritual? ¿O qué es
esto? ¿Es una plática espiritual? A Su Reverencia le pregunto, Reve-
rendo Padre.
CAPELLÁN.—^Reverenda Madre: hágame Su Caridad la caridad de sentarse y
n o interrumpir. Y o sé lo que hago. ES una plática espiritual. C u a n d o
la termine U d . me puede echar si se le antoja, pero en el ejercicio de mi
oficio sacerdotal —siempre que no dijere yo ninguna cosa escandalosa—
U d . me escucha, y no habla sí no es preguntada. ¿Estamos? Y perdone
la rudeza. "Mulleres in Ecclesia taceant" — dijo San Pablo.
ABADESA.—Permítame una sola pregunta Su Reverencia.
CAPELLÁN.— ( A p a g á n d o l a con un ademán) ¿Hermana Edith?
SOR EDITH.—Veintiocho años.
CAPELLÁN.—Una m u j e r bien crecidita a los 28 años, sabe lo que hace. ¿Y
de m o n j a ?
SOR EDITH.—Hace un año hice los primeros votos.
CAPELLÁN.—Tres años. . . H m m . T a m b i é n sabe lo que hace; es decir lo que
es el m o n j í o . ¿Imitó a T é n n y s o n en ese poema?
SOR EDITH.—No: solamente el título. N o imité a nadie, que yo sepa.
CAPELLÁN.—Lo que caracteriza al genio es la "creación", como dicen. ¡Vaya
por la palabreja! Sólo Dios puede crear. Pero aquí en la Argentina todos
somos "creadoíes"; por lo menos, a estar a lo que dicen los locutores de
radio, que hacen gran consumo desa palabreja — o palabrona, mejor
dicho: no hay tango sórdido y sucio, y más feo que el pecado, que n o
digan: "esto es una C R E A C I O N del gran compositor criollo Anzio
R a b u f e t t i " ¡ T o d o s creadores, los argentinos! Bueno ¿qué iba diciendo
yo? Lo que caracteriza al genio, diría yo, es una especie de " a b r u p t a ori-
ginalidad": lo que él hace n o se parece a nada de lo ya hecho; y sin
embargo, por otro lado se parece en cierto m o d o a todo: pues está toma-
do de la entraña de la realidad,-del ambiente, de la tradición, de la lengua,
del alma de la patria; trasegado todo a través de su propia alma. Genios,
la verdad, hav muy pocos; y aun desos algunos genios malogrados, como
el que nombré antes; pero aun los genios malogrados. . .
SOR EDITH.— De U d . mismo dicen las gentes que es un genio, y no malogra-
do, Padre. Ha publicado 39 libros. . .
CAPELLÁN.—Hermanita, lo mismo que le dije a la Reverendísima: U d . se
calla si no es preguntada. L o que dicen las gentes deste país. . . ¡mierda!
Perdón, ¡miércoles! quise decir. Y o soy a lo más un discípulo aplicado,
u n buen estudiante bastante trabajador. Creo que este país n o da ahora
para más. Podrán nacer en él hombres con "exceso de intelecto" como
define Santo T o m á s al genio; pero ¿y el ambiente de aquí? El genio
nace pero el ambiente lo hace o mejor dicho lo perhace, como diría Orte-

19
ga; y a veces lo deshace. Ninguna nación que no sea grande puede tener
genios logrados; tendrá a lo más genios malogrados. . .
SOR EDITH.—¿Y José Hernández?
ABADESA.—Sor Edith, silencio.
CAPELLÁN.—Tiene razón la Reverendísima. N o hable si no es preguntada.
Y no me discuta nada.
SOR EDITH.—Fue un gesto inconsciente, perdón.
CAPELLÁN.—Con dos basta. ¿Leyó a Edith Sithwell, Sor Edith?
SOR EDITH.—Conozco toda la literatura inglesa; lo principal della quiero
decir. Fui profesora de inglés, y mi madre. . .
CAPELLÁN.— ¿Y, por supuesto, la literatura española?
SOR EDITH.—. . .Fue irlandesa. Conozco un poco la literatura española: es
medio aburrida. Leí las obras de Tirso de Molina cuando era chica; no
todas sino las que publicó Hartzenbusch, unas cuarenta y cinco come-
dias . . . Esas me gustaron.
CAPELLÁN.—¿A T i r s o de Molina leyó siendo chica?
SOR EDITH.—Doce años y también "La Celestina" de Rojas. ¿Qué quieren?
estaban en casa. Y deso no me he confesado todavía. N o fue pecado. . .
Así lo creo almenos (ríe).
CAPELLÁN.—Por favor hermanita ¿Quiere hacer la caridad de apartar el velo
un momento?
ABADESA.—No lo permito. Es contra las Santas Reglas.
CAPELLÁN.—Tengo autoridad para autorizarlo en caso de necesidad. ¿Her-
manita?
ABADESA.—No puedo permanecer aquí un momento más. N o lo puedo hacer
callar a Su Reverencia ni echarlo, pero no debe presenciar esta indigni-
dad. T r a t a con intimidad a las Hermanas llamándolas "hermanitas":
dice malas palabras; y convierte una plática espiritual en coqueteos y
chicoleos. Me voy; y pido a Sus Caridades que me sigan todas. (Se
levanta y sale muy concitada por el fondo. Las monjas comienzan a
levantarse titubeando).
CAPELLÁN.—¡Siéntense, mecachis! (Se reasientan todas menos una). Soy bas-
tante viejo para eso, para "chicolear" un poco, si vamos a eso. Y siem-
pre me olvido dese bendito tratamiento de "Su Caridad". ¡Ay Dios mío!
Ya ven Uds., (perdón, ya ven sus Caridades) que el genio, el hombre
genial, da qué hacer dondequiera se encuentre, hasta en un convento,
hermanitas. En f i n . . . ¿Ud. qué hace allí? ¡Aa! ¿Ha estado allí de pie,
y con el velo quitado todo el tiempo? Está bien, ya la he visto. Ya
basta. Gracias.
SOR EDITH.—No soy ni muy linda ni muy fea. Muchas veces me han dicho
que era muy hermosa, y nadie me dijo nunca que fuera fea; pero yo
sé cómo soy. Lo que no sé es si tiene autoridad U d . más qu'e la Supe-
riora para hacernos quedar aquí. . .
CAPELLÁN.—De suyo no tengo, me cachis. Pero habiendo el Capellán inicia-
do una plática que debe durar 45 minutos, mientras dure la plática, es
él quién manda.
HFMANA 1*.—Pero ¿ésto es plática?
HERMANA 2 ? .—Parece comedia de Tirso de M o l i n a . . . (Ríen las monjas).
CAPELLÁN.—Estas dos hermanitas irán hoy después de vísperas a la Madre
Corregidora que les dé una penitencia por hablar sin permiso. Ahora,
esto es importante: Sor Edith ¿por qué no se casó U d . ?
SOR EDITH.—Porque quise hacerme monja.

20
CAPELLÁN.—Sublime y femenil respuesta. Lo que yo pregunto justamente
es por qué quiso hacerse m o n j a . ¿Le hicieron el examen canónico antes
de los votos?
SOR EDITH.—Ciertamente. Los Padres Pizzariello y López J o r d á n . U n bo-
drio. Dios me perdone. L o llaman con una palabra inelegante: "explo-
rar". Ni ellos exploraron nada, ni yo supe cosa cuando terminó la "ex-
ploración" más que cuando comenzó.
CAPELLÁN.—"Ni yo supe cosa" es frase de T i r s o de Molina. M u y bien.
Esto aquí es pues la "exploración" de su vocación; y por lo tanto es
una plática espiritual que todas deben escuchar con devoción. Que se
vaya la que quiera; pero sepa que entonces desobedece. Hermana Edith,
probablemente U d . es un genio literario. Probablemente Dios quiere que
produzca obras literarias como este poema "In Memoriam". Probable-
mente, o seguramente, aquí sepultada viva en un convento no puede
producirlas. Para producirlas U d . debe salir, reentrar en el m u n d o , in-
gresar en lo que llaman "la vida literaria", en medio de todas esas
hembras pavitas, peste y polilla del país; vivir, amar, sufrir, luchar,
alegrarse, desconsolarse, casarse o no casarse. . . Apropósito: U d . huía
del m a t r i m o n i o . . .
SOR EDITH. No. ¿Yo?
CAPELLÁN.—Diga la verdad, no f i n j a
"Muy bien fingen las mujeres". . .
SOR EDITH.—"Mala fingidora soy".
CAPELLÁN.—"Pues persuadiéndome voy
Que mujer aparte eres.
•Si declararte no quieres
Aclararé yo tu pecho
SOR EDITH.—¡Oh Virgen Madre, qué he hecho
Para que éste se desmande\
CAPELLÁN.—¡Un poema así de grande
Hasta el techo!
SOR EDITH.—Ud. también leyó a T i r s o . . . Reverendo Padre.
CAPELLÁN.—Sí, pero no de chicuelo; no fui chico precoz. A los doce años
estaba todavía en las aventuras de Búfalo Bill. Le quería decir, pues, si
U d . n o se enoja, lo siguiente: U d . no es marcadamente fea. Al revés, si
U d . me permite, le diré mi impresión: a mí me parece sobremanera her-
mosa viéndola así en la oscuridad.
SOR EDITH — O j o con la Abadesa, que puede estar oyendo. Esos son "chico-
leos", Reverendo Padre, indignos de su edad y su sotana. Poco les cuesta
a los hombres decirnos eso, cuando les conviene.
CAPELLÁN.—La verdad pura. Diga también U d . la verdad pura. U d . huía
del a m o r . . .
SOR E D I T H . — ¿ P u e d e alguna h u i r de . . . Ese?
CAPELLÁN.—No me meteré en el tema de los desengaños amorosos, que toda
la gente cree son el único motivo del m o n j í o en las "mojieres". Pero
U d . no respondió tódavía a mi pregunta.
SOR EDITH.—¿Por que no me casé? N o me convenció, simplemente. Y o ni
huía ni dejaba de huir del matrimonio. Cumplía con mi trabajo que
era rudo, fui huérfana de padre desde los 12 años. . . y esperaba. N o
vino. N o me convenció. N o m'e convencieron. N i n g ú n misterio. Eso sólo
fue. O n o sé lo que fue.
CAPELLÁN.—Muy bien. Le he planteado su caso. U d . no podrá producir
una obra literaria excelsa aquí dentro. Sus votos son dispensables toda-
vía. Piénselo.

21
SOR EDITH.— (Otra vez la risita entre irónica y tierna) ¿Cree el Reverendo
Padre que es posible no pensara yo en eso muchas veces ya?
CAPELLÁN.—Es verdad, tonto de mí. Le he hablado así, con sinceridad es-
candalosa (sí, ya veo las caritas de muchas hermanitas) para prevenir
que algún día pueda arrepentirse tarde. ( N o veo las caritas, por supues-
to, dejen esos velos: las adivino. De curiosas que son no se marchan
U d s . ) Decía pues: esa facultad poética que posee Ud., Su Caridad, en
grado eminente, es un don de Dios, que no se puede extirpar; y sí n o
se ejercita, necesariamente la atormentará, producirá frustraciones, mo-
chaduras. . . ¿Cómo dice?. . . abortos. . .
SOR EDITH.—''Haciéndome fecunda en hijos muertos".
CAPELLÁN.—Justamente. Esa era la palabra que buscaba. Está en la mitad
de su poema.
SOR EDITH.—Es curioso. Era el último verso en el poema soñado. . .
CAPEI.LÁN.—¿Cómo?
SOR EDITH.—Sí, le diré cómo lo compuse. Es necesario. Soñé un poema es-
pléndido, que me llenaba de tristeza de entusiasmo de gozo, que compu-
se estando dormida, verso por verso y rima por rima. Al despertar se
me olvidó todo, excepto ese verso, el último: quise recontruir el poema
antes del desayuno, y ese verso se füje al medio; y salió estotro poema,
m u y inferior, pero m u y inferior al soñado. Así pasó la cosa. Estuve
distraída todo el tiempo de Maitines. Pero era m a n d a d o por la Santa
Obediencia.
CAPELLÁN.—Probablemente el poema hecho en sueños era m u y malo, y
este es mejor; le pareció a U d . que era m u y bueno, porque estaba so-
ñando. T e n g o un poco de experiencia de estas cosas: he escrito tres
tomos de versos.
SOR EDITH.—Eximios.
CAPELLÁN.—Me retribuye U d . los piropos. Mujeres. Zalameras todas y tes-
tarudas como muías.
SOR EDITH.—Muchas gracias por el . chicoleo. La verdad pura, Padre.
Quería decirle esto: nunca podré hacer un poema como el soñado; y por
tanto, no los haré más ¿para qué? Este es el último, pues éste me ha
agotado, agotó mi alma; y no es m u y bueno. "Haciéndome fecunda en
hijos muertos". Este es mi único poema vivo: todos los anteriores son
muertos, tanteos, imitaciones; y todos los futuros son peor que muertos,
pues no nacerán. Estos 56 versos que tiene U d . allí no se los vaya a
leer a las hermanitas. . .
CAPELLÁN.—Ni pienso. N o entenderán esta especie de . . ¿cómo dije yo
al leerlo?. . la justeza en la exhuberancia. . .
SOR EDITH.—Ni a nadie. Ni publicarlos. . .
CAPELLÁN.—Si U d . no me da permiso. Perdón, si "Su C a r i d a d " . no me
autoriza, paciencia.
SOR EDITH.—Esos 56 versos que tiene allí son definitivos, contienen mi
secreto.
CAPELLÁN.—¿El gran desengaño amoroso?
SOR EDITH.—El que sea. Nunca lo sabrá U d . Y o misma no lo sé.
CAPELLÁN.—¿Cómo es posible?
SOR EDITH.—No lo sé. . bien del todo.
CAPELLÁN.—¿Estaba enamorada del Padre Gaynor?
SOR EDITH.—¡Por f a v o r ! ¡Al Padre Gaynor, con toda su bondad, le tenía
más bien un poco d|e rabia! Que Dios me perdone. Se lo digo como en
confesión. Verdad pura. Y perdonen mis H e r m a n a s . . . ( U n a monja
se levanta y se va).

22
CAPELLÁN.—¡Por favor! ( r e m e d a n d o ) . Pobre Padre Gaynor. E n definitiva
¿ U d . permanece m o n j a ?
SOR EDITH.—Permanezco y permaneceré.
CAPELLÁN.—Le voy a contar la historia del jesuíta inglés Manley H o p k i n s . . .
SOR EDITH.—Conozco la historia, conozco todos su versos, conozco su vo-
cación. Gran poeta. Desdichado hombre. Además, faltan 7 minutos para
los 45, mire el reloj allí detrás de U d . ¿Me da por aprobada en su
"exploración"?
CAPELLÁN.—¿Por la misma razón que tuvo Manley Hopkins? ¿Cree Su
Caridad, hermanita, que Dios le exige el sacrificio de su talento a cambio
de la vida religiosa, que ciertamente vale mucho, y que es el don dé
Dios más grande en esta vida?
SOR EDITH.— (Risa) ¡Por f a v o r ! Esos son beaterías, lugares comunes devo-
tos; y son mentira . . ¡Perdón, Dios mío! son verdad; pero no en mi
caso; que es diferente, que es m u y diferente. Y o soy mujer.
C A P E L L Á N . — E s o no hace diferencia.
SOR EDITH.—Yo soy una mujer. N o soy loca. . . del todo; aunque antes lo
haya afirmado. Y o no haré más versos, porque no me da la gana, y
porque no hay más versos buenos en mí; y si me molesta alguna vez
la comezón estúpida de hacer versos, me aguantaré ¿qué hay? Manley
Hopkins Geraldo era diferente.
C A P E L L Á N . — M e parece que no era diferente.
SOR EDITH.—¡P|ero sí, Reverendo Padre! El inglés ese, que era escotista y no
tomista (según el P . Gaynor) creyó que Dios le pedía el sacrificio de
su talento poético en satisfacción de sus pecados, lo cual es un error,
según Santo T o m á s y el P. Gaynor. "Votum est solum de re licita et
meliori". L o qu)e ganó el escotista fue un disgusto tremendo al rechazarle
al revista "Month" su genial poema "El naufragio del Deutschland"
hecho por obediencia; después dolores de cabeza continuos al enseñar
griego y francés en Stonyhurst; y luego un m o n t ó n de fragmentos de
poemas raros y enrevesados que no se decidía ni a publicar ni a quemar;
y se los enviaba al burro de Bridges, el poeta laureado de la Reina, el
cual se los reprochaba y ridiculizaba; y muy bien que los publicó con
un prólogo suyo 38 años después de la muerte del Jesuita. . . Son diez
yeces mejores que todos los del burro prologista, ese estreñido de Robert
Bridges. . .
CAPELLÁN.—Lo mismo le va a pasar a U d . A ver si después de su muerte
prematura publico y o . . . como hicieron con Manley H o k i n s . .
SOR EDITH.—Ni lo sueñe. T u v o una muerte triste, a los 4 2 años; sus últimas
palabras, cuando le dijeron que ya se moría, fueron: " ¡ P o r fin, Dios
m í o ! " . L o que debió hacer es salirse de los jesuítas. . (los jesuítas no
son poetas ni lo pueden ser, dice Menéndez y Pelayo) y hacerse bene-
dictino . . .
CAPELLÁN.—Salido de la Compañía de Jesús, no lo recibirían los benedictinos.
SOR EDITH.—Bueno. Que s¡e arregle. N o es mi caso.
CAPELLÁN.—Y eso mismo que U d . le aconseja a Hopkins muerto, es lo que
yo a U d . le estoy aconsejando: salirse, y hacerse paulina o palotina.
SOR EDITH.—No. N o se canse, Padre.
HERMANA 1 ? . — L a Reverendísima 'Madne la va a perseguir desde ahora, y le
va a hacer la vida imposible — para salvarle su alma . . .
SOR E D I T H . — L a s mujeres somos más fuertes para sufrir.
CAPELLÁN.—¡Silencio, Usted! ¡No calumnien, si no son preguntadas!
HERMANA 1*.—Y a U d . , Reverendo Padre (perdone una sola palabrita más)
la Reverendísima le va a pedir al Obispo que lo saque de aquí, de Ca-

23
s
De la amable añoranza del pagano
Líbrate ya. Del manantial advierte
o El sonoro pensar. Del árbol fuerte
La hoja roja y el ramaje arcano.
N
E Siente el agua escurrirse de tu mano
Con medida sutil. El vino vierte
T Con generosa prontitud. La muerte
O Vislumbra al fin del horizonte llano.

Que tus hombros soporten con firmeza


El peso de los muertos, y el instante
Retoma con febril melancolía.
Luis
Informa ya en la piedra, al fin del día
Castellani
J u n t o con tu dorada fortaleza
Vizcay
El h i m n o de los ángeles, laudante.

llán; como si lo viera. Y o sé dónde está ahora; está en su despacho con


la Madre Corregidora escribiendo la carta al Obispo.
CAPELLÁN.—No. N o está allí. Y o sé dónde está. Bueno, me he pasado tres
minutos. Pero tengo licencia para pasarme cinco minutos. . . Atención,
ésta es la plática que les iba a hacer sobre 'el P. Gaynor; el resumen,
mejor dicho. (Leyendo un papel) "Conocí al P . Gaynor hace unos tres
años. V i n o él a mi encuentro cuando estaba yo en grandes apreturas.
De entonces acá, ha sido un amigo único: paciente ,discreto y fiel: único.
Y me hizo muchísimos bienes. Era el único a quien podía yo confiar
mi Conciencia, los enredados y estúpidos secretos die mi conciencia. Esta-
ba ya por hacerlo, y él murió. Su muerte repentina e inesperada me
afectó como ninguna otra; pero él no ha perdido su bondad en el lugar
donde está ahora, "el lugar donde mora eternamente"; según píamente,
firmemente y con mucha razón creemos. . . "
SOR E D I T H . — ¿ P u e d o sentarme?
CAPELLÁN.—¡Jesucristo! ¿Todavía está U d . de pie? " Y y o sin saber", como
dicen los Chalchaleros. ¡Puede sentarse! Mejor dicho pueden irse todas,
y se van ahora mismo como' por u n t u b o ; que ya es la hora de las Horas
Menores! ¡Empezando por la que está allá detrás de la cortina escuchan-
do y espiando! (Sale de estampía la Madre Abadesa, con gran revuelo
y rumor de polleras, diciendo:)
ABADESA.—¡Atrevido! ¡Mal sacerdote!
HERMANA 1 ? . — ¿ M e da la bendición, Reverendo Padre?
CAPELLÁN.— ( E n o j a d o ) ¡Bendiciones todavía ahora! Manaya porca miseria.
Bueno, ¡ahí va mi bendición: a las mujeres qu|e las entienda el diablo
porque ni Dios mismo las entiende; y si me echan de Capellán es una
gran suerte: "In nomine Patris, et Fili, et Spíritus Sancti, ámen".
(Baja el telón: salen todas. Una de las velas del San Francisco se
apaga; y queda la otra haciendo guiños de picardía; y luego tam-
bién se apaga. La Hermana corre a encenderlas. Fuera se oye
la voz tonante de la Abadesa regañando a su rebaño).
Jerónimo del Rey

24
Soneterio

1 — LOPE 3 _ ARTE POETICA


Mario Molina Pico. q. D. h. Rodríguez Marín

Quiero hacer un soneto para Lope Si escribir te propones un soneto


Veremos como salgo del aprieto Ve haciendo lo que yo, que a fe no es harto:
El hizo de repente otro soneto T r a s el verso tercero vendrá el cuarto.
Y salió airoso, pabellón al tope. ¿Ves? Ya se terminó el primer cuarteto.
Para su ingenio resultó un galope
Pero su ingenio fue genio completo, i Santiago^ y cierra España! T e prometo
Y es grotesco que, ayuna de respeto, Que sí aquesto es parir, es fácil parto,
Mí petulancia audaz, la banca cope. Y si el séptimo verso es un infarto
Diciendo eso no más, ya está completo.
Anima atormentada y tormentosa
De carne flaca y mente poderosa,
Del Manco contrincante pertinaz, Ello es que el nono verso venga al baile,
Y el décimo en la rueda esté metido
En tu agitado paso por la vida ¿Hay consonante a "baile" y "fraile"? ¡Háyle!
T o d o lo obtuvo tu ansia desmedida:
Sólo la muerte te brindó la paz.
Pues entonces ya es esto pan comido,
(Enviado por Doña Carmen Saavedra Y cata a Periquillo fecho fraile
de Molina Pico) Y cata el sonetejo concluido.

2 _ ARTE POETICA 4 _ ARTE POETICA

Lope de Vega D. D'Elía

U n soneto me manda hacer Violante Al fin, eso que llaman un soneto


Y en mi vida me he visto en tal aprieto: Que tan difícil Hermosilla estima
Catorce versos dicen es soneto Dos piezas son con la mayor encima:
Burla burlando, van los tres delante. U n a octava birrima y un sexteto.
Y o pensé que no hallara consonante Mejor sería un monoblock completo
Y estoy en la mitad de otro cuarteto Cosa que puede hacerse con la rima,
Mas si me veo en el primer terceto Que si usté me lo ruega o me lo intima
N o hay cosa en los cuartetos que me espante. Soy capaz de mostrárselo en efeto.

Por el primer terceto voy entrando Invoco a Rita y Rosa la de Lima


Y aun parece que entré con píe derecho Ya con la estilográfica enristrada
Pues fin con este verso le voy dando Después a Apolo, y luego al Paracleto.

Ya entré por el segundo, y aun sospecho Tres versos más y es cosa liquidada,
Que estoy los trece versos terminando. . . Dos versos; uno; el último terceto.
Contad sí son catorce, y a está hecho. Catorce versos, y no he dicho nada.

25
LA NUEVA DIDAJE
¿FUE LUTERANA
SANTA TERESA?

Si esta pregunta la hiciera Revilla, Cervantes. Santa Teresa, habría adhe-


José Bergua o Eduardo González] rido primero a la "Doble justifica-
Blanco ,ni una sonrisa al paso le con' ción11 (el compromiso con los protes-
cederíamos. Pero la hace un docto tantes del Cardenal Contarini en la
profesor de Córdoba, Carlos Alberto paz; de Chateau Cambressís) y des-
Moreyra, en un afinado estudio, de pués netamente a la "justificación pol-
cuya consideración nos parece puede la sola fe11; — deducido todo ello del
salir provecho; en dos opúsculos de análisis de una carta de la Santa al
100 págs. en todo, "Los criptogramas Cardenal Quiroga, Arzobispo de To-
de Santa Teresa' y "Esoterismo reli- ledo y Gran Inquisidor.
gí oso del siglo de oro español (edición Hay que saber que existían en ese
del autor, Córdoba 1964. y 1965). tiempo tres posiciones: "la justifica-
No dice fuera luterana sino "semi- ción por la sola fe11 — a la cual, se-
luterana"; pero no hay tutía. Si la gún Moreyra, accedían los dominicos
recia castellana adhirió a "la justifi- "bañezianos11; la justificación por los
cación por sola la fe", tan luterana propios méritos; o sea por las buenas
fue como Lutero. En eso no hay obras; a que accedían los jesuítas
"semi" que valga: es o SI o NO. "molinistas11, a los cuales Moreyra
La tesis del Profesor de Literatura tacha de "pelagianos11; y el compro-
Española, que se revela muy agudo miso del Cardenal Contarini, de que
crítico y muy versado en historia reli- ella se daba (como en el caso del juez
giosa del Quinientos, es que habría complaciente de Manzoni) por las
existido en España hasta un siglo des- dos cosas .Pro las dos posiciones ex-
pués de Cervantes un movimiento tremas (o fe o bien obras) luchaban
protestante que él llama "la cripto- apasionadamente (con pasión política
rreforma11, mantenido por los hom- a veces) protestantes y católicos. El
bres más excelsos, desde Felipe II a compromiso de Contarini 1559 (de-
San Juan de la Cruz, al cual habría fendido por Seripando en el Concilio
adherido Santa Teresa; los cuales de- de Trento) como todas las compo-
bían mantener reserva por temor de nendas, no fue fecundo: la raíz de la
la Inquisición; la cual sin embargo justificación (o sea el perdón de los
también fomentaba ese movimiento pecados y el estado de gracia) no
según Moreyra: lo mismo que Carlos pueden venir de dos cosas yuxtapues-
V, Felipe II, Fray Luis de Granada, tas; tiene que ser una.
los Papas Paulo y Sixto, Cervantes y Lo que no considera el autor es que
quién no. Usaban en consecuencia existía también (¡y cómo!) la expli-
entre ellos un lenguaje cifrado, un cación justa, que fue de la Iglesia an-
"Código11; algunas de cuyas palabras tigua y de la Iglesia actual, y de la
bivalentes encuentra él en Góngora, Iglesia siempre, obnubilada un mo-
Teresa de Jesús y ampliamente en mento por la polvareda del siglo

26
• ¿r

XVI: la justificación es producida tentó llevarla a España, y fracasó ¡de


por la fe y las obras copuladas no qué modo! Vio la verdad que se
yuxtapuestas; "por las obras infor- habían llevado cautiva los protestan-
madas por la fe", como reza la fór- tes, y quiso rejuntarla a la verdad que
mula teológica; y eso definió neta- retenían los católicos; para eso escri-
mente el Tridentino en su sesión VI, bió el "'Cathecismo" y maniobró en
condenando primero las dos opiniones España, hasta ser tenido por luterano
dicotómicas: y perseguido ("con saña" dice Me-
"Si alguien dijere los hombres, por néndez Pelayo) por Felipe II. Las in-
sus obras, que se hacen por las fuer- vestigaciones de Moreyra arrojan luz
zas naturales o por la doctrina de la sobre esta conjetura. Sobre ella escri-
Ley, sin la gracia divina por Jesucris- biré un libro — cuando esté en la
to, poder ser justificados ante Dios, Chacarita (El arte es larga mas la
sea anatema. (Canon 1). "Si alguien vida es breve).
dijere, por la sola fe es justificado el Los fanáticos de la Contrarreforma
impío, entendiendo que nada otro se tenían por herejes a cuantos no repe-
requiera.. . sea anatema (Canon 9). tieran a lo loro sus fórmulas incom-
Y finalmente: pletas — como a Galileo, Fray Luis
"Si alguien dijere que en los hom- de León, Carranza, Fray Luis de Gra-
bres justificados, las obras buenas nada, Santa Teresa. Era peligroso
talmente son don de Dios, que no pues decir la fórmula tradicional, y
sean también méritos del justifica- eso pudo inspirar el lenguaje críptico
d o . . . sea anatema". (Canon 32). de los hombres realmente entendidos
En suma, la fe es la vida del alma; de España; aunque no creo del todo
sin ella, las obras no pueden merecer en los "criptogramas" que halla Mo-
la gloria eterna; pero por ella, engen- reyra, algunos rebuscados por demás.
dran en el justo verdadero mérito: y Lo que él llama "criptorreforma" no
sin obras buenas, la fe es muerta. Por sería pues otra cosa que la sustenta-
supuesto que la fe es lo primero: "el ción de la doctrina tradicional, vuel-
justo vive por la fe" — repite San ta contenciosa con la corrupción de
Pablo. los tiempos; y eso solo explica simple-
mente todos los hechos en pro del
Este estudio del profesor Moreyra criptoluteranismo que aduce Morey-
me dio luz en el espinoso asunto de la ra; como las peripecias y el final del
condena del Arzobispo Carranza. Le- ardiente duelo Báñez-Molina, de Do-
yendo su vida y su famoso "Cathe- minicos y Jesuítas. Ambos se llama-
cismo" (el bibliotecario y amigo Rei- ban "tomistas" y ninguno lo era del
naldo José Suárez me lo consiguió fo- todo: querían racionalizar un miste-
tografiado de uno de los tres únicos rio (el de la gracia y el libre albe-
ejemplares que existen en el mundo) drío) que Santo Tomás llamó "mis-
me asaltó la idea de que el castigado terio" y se detuvo allí; como hay que
aragonés (preso durante casi 20 años, hacer.
liberado pocos días antes de morir,
retractado y relapso como Juana de La opinión de Lutero es lo bastan'
Arco) era un procer religioso — te parecida a la tradicional para indu-
quizás un mártir, como lo llama Mo- cir en confusión a los indoctos; a
reyra. Conjeturo que él vio en In- saber, la fe sola justifica y las buenas
glaterra la clave de la contienda, in- obras no; las cuales brotan después

27
necesariamente del acto de fe; que "£¿ue aunque no hubiera cielo yo Te
en Lutero se parece demasiado a un amara]
acto de sentimiento; a un movimien' y aunque no hubiera infierno Te
to de "confianza ciega" hacia Cristo. temiera]
Por otra parte, la opinión de los "mo-
pero eso es un subidísimo estado de
linistas" se parecía demasiado a P e
amor de Dios, y no una desrrecomen-
lagio; y en el vulgo católico perma-
dación del temor filial y del amor in-
necia demasiado la adhesión a las
cipiente; ni menos de la necesidad de
obras buenas; aunque fuesen externas
las obras y de la Ley; que ella reco-
puramente o vacías; como el hospital
mienda cien veces a porrillo.
de Don Juan de Robres.
Los cuitados "reformadores" que-
Contra esta "exterioridad" se le-
rían construir una escala para el cielo
vantó Lutero, malamente por des-
en que faltaran los primeros pelda-
gracia.
ños; muy linda escala ciega para no
Santa Teresa no quería que obráse-
poder subir o romperse el alma.
mos por puro miedo del infierno o co-

LIBROS RECIBIDOS
ADOLFO MUÑOZ-ALONSO — La Persona Humana.
„ „ „ — La cloaca de la Historia.
— El magisterio, forma de vida.
— Meditaciones sobre Europa.
„ — Las ideas filosóficas en M. y Pe layo
— Expresión filosófica y literaria de España.
JAIME M. de MAHIEU — La naturaleza del hombre.
ENRIQUE ZULETA ALVAREZ — Introducción a Maurrás.
CHARLES MAURRAS — El Porvenir de la Inteligencia.
— Mi defensa.
GENERAL BEAUFRE — Introducción a la estrategia.
FERMIN CHAVEZ — El revisionismo y las montoneras.
JUAN A. CASAUBON — El sentido de la revolución moderna.
FRANCISCO SANCHEZ-VENTURA - - Las apariciones no son un mito.
ARTURO GARCIA ESTRADA — Existencia y culpa.
Cl SA — Argentina-Chile.
CARLOS MOYANO LLERENA — Panorama de la economía Argentina.
DEUTSCHE KOMMENTARE — Número extraordinario de Enero 1967.
FONDO N. ARTES — Artes y letras argentinas.
EDITORIAL PAIDOS — Catálogo general 1966.
ARTURO JAURETCHE — Política nacional y revisionismo.
GABRIELA DE SOLA — El mar que en mí resuena (poemas).
BLAS BARISANI — Cacharpaya (poemas).
MARTIN ALBERTO BONEO — Sonetos del corazón (poemas).

28
Crónica de Roma
\

Carnet de Viaje
ROMA, 5 de diciembre: Perduran Schmidt, obispo de Metz, al cardenal
los ecos del "tirón de orejas" del Papa Spellman. — O el Papa habla de la paz
a los Jesuitas. . . " E P O C A " publica de una manera ambigua, o el cardenal
una caricatura de Herodes, rodeado de Spellman no ha leído el discurso de Na-
los Santos Inicentes: "He hecho todo vidad del Papa, razonan muchos. —
lo posible —exclama consternado— y Hay una tercera posibilidad —agregan
no he podido matar al Mesías. . . Pero, los belicistas—: el Papa está mal infor-
no importa, ya vendrá algún jesuíta mado de lo que pasa en el Vietnam. . .
holandés..." U n artista yanky habría enviado este!
ROMA, 12 de diciembre: Con una telegrama al Papa: "¿Quién habla en
semana de retraso apareció en el "Osser- nombre de la Iglesia: Spellman, en pro
vatore R o m a n o " la carta del Papa al de la guerra, o Su Santidad, en favor
cardenal Aldrink, con motivo del "con- de la p a z ? "
cilio pastoral de los laicos holandeses". PARIS, 28 de diciembre: Sigue la
Se dudaba si sería publicada. . . Nos ofensiva anti-Spellman. Escribe el P.
parece no habrá sido muy del agrado Wenger, redactor-jefe de "La Croix"
de los destinatarios. . . Insiste mucho (el diario católico que se despojó de la
en verdades elementales, de catecismo, " c r u z " . . . ¿para mejor evangelizar o
en las cuales normalmente no hay por para "dar testimonio", como se dice
qué insistir: primado del Papa, necesi- hoy?) :
dad de conservar la doctrina íntegra, etc. "En la noche de Navidad, las pala-
Y es mucho más lo que se lee en entre- bras del cardenal Spellman han herido
líneas. especialmente la conciencia de los cris-
Roma, 23 de diciembre: De nuevo tianos y de los hombres de buena vo-
en la calle la reforma de la Curia. luntad".
Habría un cambio próximo de hom- PARIS, 30 de diciembre: Declaración
bres. ¿Suenens y Wyszinski, invitados nes periodísticas del Cardenal Martin,
a Roma? arzobispo de Rouen: " O n ne défend pas
La muerte del cardenal Ciriaci pone la civilisation, a plus forte raison, une
sobre el tapete la posibilidad de un nue- civilisation dite chrétienne, a coups de
vo consistorio. En el último — 2 2 - 2 - canons et de bombes" . . .
6 5 — Pablo V I creó 27 cardenales. PARIS, 2 de enero: Sigue la "escala-
Desde entonces, han fallecido siete y los d a " contra el "Buen Samaritano" Spell-
italianos han bajado de 32 a 27. El man . . . Opinión de Mons. Boillon,
Colegio cuenta hoy 96 cardenales. obispo de Verdun, a sus ovejas: el car-
PARIS, 26 de diciembre: Escándalo denal Spellman no piensa como el obis-
en "círculos habitualmente católicos", pado americano, ni como los obispos
por el número de Navidad de "París- del Vietnam, ni como el Santo Padre,
M a t c h " : fotos de "cenas eucarísticas fa- ni como el Concilio, ni como el episco-
miliares" en casas de católicos holande- pado de Francia, ni como vuestro obis-
eses. . . Misas sobre simples mesas, ce- p o . ' . . (IPobre Cardenal!. . . Deber
lebradas sin ornamentos litúrgicos, en estar solo como Robinson Crusoe. . . )
una sala. . . Pensamos en el abate Fau- PARIS, 3 de enero: Conversación
chon de "Le démon du midi" de Bour- con el joven y dinámico André Giovan-
get, y su pretendida vuelta a la "iglesia ni, secretario de redacción de "Le Mon-
primitiva" . . . de et la Vie" (49, avenue d"Iéna. París
PARIS, 27 de diciembre: T o d o el XVIe. = 200.000 ejemplares mensua-
m u n d o comenta la carta de Mons. les = citada como opuesta al Concilio,

29
en una nota de la Comisión Permanen- la invitación del "totalitario" régimen
te del Episcopado francés). portugués, único defensor del sano co-
"Nos causó mucho dolor el comuni- lonialismo — y del sentido común po-
cado de un secretario de los obispos. lítico— en el mundo? Nos viene a la
pero seguiremos luchando por la Iglesia mente el recuerdo de la ignominia de la
y la Verdarf. . . Hay tres Concilios: el India con Goa, y la lenitiva "Rosa de
del Papa, el de los "peritos" y el de Oro"...
los diarios . . . Nosotros estamos con el
primero, y contra los otros dos. . . N o ROMA, 7 de enero: Estupor y dolor
somos conservadores, sino "tradiciona- en los anticomunistas, por el discurso
lístas". Son dos cosas distintas. . del Papa a China: " . . . la Iglesia. .
comprende y favorece" . . . "su trans-
NI MES, 4 de enero: Las "Arenes" formación en la presente fase históri-
de Nimes, Coliseo de bolsillo, nos re- ca. . . " ( ? ) . Y agrega a la juventud
montan a la antigüedad romana. . . china: " . . .con qué emoción y afecto
Despertamos a 1967, al leer la nota ro- consideramos (muchos diarios transcri-
mana de reprobación a Las "cenas euca- bieron: "deseamos", lo que motivó una
r i s t í a s familiares" y a las "misas con inmediata aclaración del "Osservatore
ritos y vestimentas insólitas y acompa- R o m a n o " ) su exaltación presente hacia
ñadas de músicas completamente profa- ideales de vida nueva, laboriosa, prós-
nas". Firma, entre otros, el cardenal pera."
Lercaro, simpatizante de las reformas li- Para muchos, sería ésta una frase am-
túrgicas. "Le Monde" pontifica: es bigua y, por lo menos, poco feliz, en
una respuesta al artículo de "París- pleno recrudecimiento de las purgas an-
Match" . . . tirrevisionistas por la "pacífica juven-
El mismo documento recuerda la tud guardia r o j a . . . "
prohibición de dar la hostia en la mano Los habituados a descubrir en el
al comulgante. Esto sería frecuente en Papa una política pendular, confirman
Holanda. Sin embargo, aun en Roma su tesis. Este discurso sería la contra-
hemos visto algunos casos. . . partida de la elevación de la internun-
BARCELONA, 5 de enero: Visita al ciatura de Formosa a la categoría de
Tibidabo, templo expiatorio. Justo al nunciatura. Los entendidos responden
lado se ha colocado un parque de diver- que esto último carece de significación
siones con mucha música. De noche, nos política, pues el Vaticano estaría supri-
dicen, es un lugar poco recomendable miendo todas sus internunciaturas. Los
para niños. . . ¿Qué hacen las autorida- "pendulares" insisten: hace poco se "re-
des españolas? P e r d ó n . . . catalanas. tiró" en España al abad del Valle de
U n montserratino nos dijo: "Más allá los Caídos, Fray Pérez de Montserrat,
del Ebro, empieza España". don Escarré, notorio opositor al régi-
Mindszenty al día: cuatro obispos men: gol franquista.
húngaros han presentado, por edad, su ROMA, 8 de enero: ¡Una voz anti-
renuncia. Se descuenta les será aceptada. Spellman! "L'Osservatore della Dome-
¿Qué pasará el próximo marzo, cuando nica" considera la ofensiva contra el
el bravo cardenal húngaro cumpla 75 cardenal americano, como una "polémi-
años? Gente demasiado suspicaz veía en ca humillante a la cual no han perma-
el cardenal Mindszenty el principal des- necido extrañas personalidades eclesiás-
tinatario del famoso decreto de los " 7 5 ticas de alto nivel". Y agrega: "Para
años". Y hace poco, se habría querido no pasar por "cómplices" de la "agre-
alejar al Cardenal Wyszinski de Polo- sión" americana, se ha proporcionado
nia, ofreciéndole un cargo en la Curia un "buen aporte a otra "escalada", la
R o m a n a . . . ¡Estos atrasados defensores psicológica, la cual, en definitiva, se
de la Iglesia de las Catacumbas, obsti- opone a una "victoria", para patrocinar
nados en enrojecer el idílico romance otra. .
de la "coexistencia pacífica". . . ! El sentido común ha salido por sus
BARCELONA, 6 de enero: En ma- fueros. Chesterton vive aún.
yo, cincuenta años de la aparición de ROMA. 10 de enero: Aparece la re-
la Virgen en Fátima. ¿Aceptará el Papa forma del sistema de aplicación prácti-

30
ca de las indulgencias, en un documento la hora en su discurso reciente a la No-
doctrinal de factura clásica y tradicio- bleza.
nal, que deja ver la mano del P. Ciappi, Este libro le ha valido a Maritain,
Maestro del Sacro Palacio, teólogo "ex de parte de sus amigos católicos izquier-
1
officio", del Santo Padre. El General distas, los cariñosos epítetos de "estu-
de una pequeña congregación religiosa dio simplista", de "segunda mano", es-
nos dijo: "Leer esto hace bien al alma. crito por un hombre en su "extrema
Hacía tiempo no leíamos algo tan claro
vejez", que rehusa "comprender el des-
y definitorio".
arrollo de lo mismo que contribuyó a
Para valorar su importancia, piénsese poner en marcha". Esto y mucho más
que hubo dos episcopados —de países en la pluma de un hijo de Sto. Domin-
africanos— que pidieron a la Sta. Sede, go: P. Biot. (Témoignage Cchrétien
la. supresión completa de todo tipo de 15-12-66).
indulgencias. . . En el mismo número, Henri Fesquet,
Algunos conceden mucha importan- el comentarista religioso de "Le Mon-
cia al comentario sin firma, aparecido de", fulmina a Maritain como "filóso-
hoy junto al documento oficial, en el fo del desprecio", "antiguo adepto de
"Osservatore R o m a n o " . Es una reafir- la Acción Francesa que defiende posi-
mación contundente de la inmutabili- ciones de izquierda con una mentalidad
dad de la doctrina sobre las indulgen- de extrema derecha" y hace pensar en
cias. Nosotros somos más bien pesimis- Charles Maurras. . .
tas y creemos que este comentario co- Para terminar, recomendamos dos ar-
rrerá igual suerte que la nota adjunta tículos dignos de ser leídos por su auda-
al silenciado " M o n i t u m " del Sto. Ofi- cia y su estilo desenvuelto: "Le troi-
cio sobre T . de Chardin. sième homme", por el P. Francois Rous-
Como nota risueña, nos decía un teó- tang, S. I., director hasta . . .este ar-
logo: Ahora que la Iglesia sólo otorga tículo, de "Chrístus", revista jesuíta de
indulgencias plenarias y parciales y estas espiritualidad (35, rue de Sèvres, París
últimas importan el equivalente del mé- V i e . ) . Este artículo que ha dejado bo-
rito obtenido por la realización de una quiabierta a gente ya ducha en lecturas
obra, S. Pedro tendrá que vender su progresistas, aparece en el N 9 52. El
complicada "multisuma" para cuatro Vaticano pidió la cabeza del director y
operaciones, y comprarse una sencillita escritor. . . Pero los superiores de la
que sólo multiplique por dos. . . Compañía en Francia se apresuraron a
ROMA, 11 de enero: El celibato defenestrarlo, por iniciativa propia, se-
eclesiástico está agonizando, dicen mitad gún un comunicado que publicaron en
en broma y mitad en serio los elemen- "Le Monde".
tos avanzados. Ya hay cinco mujeres Y en "Lumière et V i e " , ' N 9 78, revis-
en la Curia (dos holandesas, una belga, ta de un grupo de dominicos franceses,
una inglesa y una australiana), inte- (2, place Gaílleton, Lyon, 2 ), el pro-
grantes de los dos nuevos organismos gresismo la emprende contra el Malig-
que acaba de crear el Papa: el Consejo no, en la pluma del P. Christian Du-
de los laicos y la Comisión para la Jus- quoc, O. P . : "Satan, symbole ou réali-
ticia y la Paz. té?". Según él Padre Duquoc, los teólo-
ROMA, 20 de enero: Lectura reco- gos no sabrían afirmar hoy con certeza
mendable: Maritain: "Le Paysan de que de los datos de la Revelación se
la Garonne" (Desclée, 1965 - 400 desprende la existencia "personal" de
págs.) . 30.000 ejemplares vendidos en' Satán, pues bien podría significar nues-
Francia. T o d a la Curia lo ha leído. El tras inclinaciones al mal. . .
Papa —traductor en su época del " H u - Estos dos casos tienen mucha miga.
manismo Integral"— estaría muy im- Quizás algún día, si interesa a los lec-
presionado, por su descripción de la si- tores, los comentaremos in extenso. Por
tuación interna de la Iglesia y de las ahora, ¡feliz Cuaresma sin el Diablo!
actitudes de muchos c l é r i g o s . . . Se pue-
de encontrar un eco de la gravedad de Boanerges Romano

31
Tres Regalos para Jauja
Los Reyes Magos, nos dejaron entre El equipo económico ministerial pegó
gallos y medianoche, tres cartas y un el "sablazo" sobre la espalda centena-
esquema. T o d o ello material de gran ria de la vieja industria que montara
significación en la hora aciaga que vi- en el año 1843 el Presbítero José Euse-
vimos. Lo exponemos ante vuestra ar- bio Colombres en Tucumán, hoy inun-
gentina, cristiana y patriótica inquie- dada de enormes fábricas de azúcar, los
tud: ingenios modernos. Merced a ello el país
logró el autoabastecimiento del funda-
ALARMA EN LOS MINISTROS mental alimento. Nadie con mayor
DE LA IGLESIA autoridad, la de fundadores de una in-
dustria, para llamar la atención sobre
El Arzobispo de Tucumán Monse- este verdadero drama nacional.
ñor Juan Carlos Aramburu dirige un
emotivo mensaje al Ministro de Econo- TRISTE HISTORIA PETROLERA DE
mía Dr. Kríeger Vasena. En él le ex- TRAICÓN, NEGOCIADO Y
presa la honda preocupación por la si- CLAUDICACIÓN
tuación económica y social de la pro-
vincia. La reestructuración de la indus- 1. — Autarquía de Y. P. Fiscales: El
tria azucarera limitará las fuentes de 20 de febrero de 1958, tres días antes
trabajo. El Arzobispo recuerda también de las elecciones que permitieron el acce-
las resoluciones del II Concilio sobre so al poder al frondi-frigerismo — t o d a -
los derechos naturales de la comunidad, vía aun hoy manejando los hilos de
aclarando que una fuente de trabajo no esta siniestra t r a m a — se firmó en la
puede sólo ser valorada por su rendi- Casa de Gobierno el Decreto N 9 633,
miento económico, sin tener en cuenta que daría en adelante la Autarquía a
el bien del hombre y la sociedad. Y.P.F. para contratar servicios con con-
Por otra parte los sacerdotes de las sorcios extranjeros (Exploración, Per-
parroquias de Tafí Viejo, Famaillá, foración, Explotación y Comercializa-
Lules, Bella Vista, Marcos Paz y San ción) . El documento aparece firmado
Pablo dieron a publicidad una declara- por el Gral. Aramburu y el Ministro
ción conjunta, de la cual extractamos Cueto Rúa; es extraña la ausencia de
hirientes y católicas verdades: otras firmas de funcionarios, que por lo
"Conocemos demasiados casos de visto no quisieron cargar con tamaña
gente que no tienen pan ni ropa. Sabe- responsabilidad ante la Nación. Queda-
mos de la falta de viviendas y el haci- ba así desvirtuada una de las causas de
namiento que afecta a más del 60 por la Revolución de 1955, o sea el intento
ciento de nuestros feligreses. De aquellos del Gral. Perón de concertar la conce-
que con la terminación de la zafra mu- ción de la California Argentina Com-
chos quedan sin trabajo por siete largos pany, para la perforación de pozos pe-
meses. De aquellos que aun trabajando, trolíferos en la actual Provincia de
no tienen asegurado el pan de mañana". Santa Cruz, y se le abría el camino a
" ¿ N o abrimos el cauce hacia el ateís- los consorcios internacionales, que ya
mo social, desde el momento que no se estaban en connivencia con Frigerio.
puede predicar el Evangelio a los estó- U n a vez ganada la elección, después
magos vacíos?" del Pacto rubricado por el citado con
" N o somos sociólogos para analizar J. W . Cooke (actualmente desviado
los problemas y proponer las solucio- hacia el comunismo) y bajo la égida del
nes, pero sí padres de una comunidad, extinto Mr. Henry Holland, y su socio
que vemos el problema con angustia". el Dr. Eduardo Bussó, se inician a tam-
bor batiente los ignominiosos contratos
"Nadie que se diga cristiano, ocupe
petroleros, baldón infamante para la
el cargo o la posición que sea, puede
nacionalidad. No hemos tomado ejem-
estar ausente en esta búsqueda de so-
plo ni de México ni del Brasil. Que con- -
luciones".

32
sideraton a su debido tiempo la incon- leros firmados por el Dr. Arturo Fron-
veniencia de entregar la admiinstración dizi a espaldas del Congreso, están vi-
de sus respectivas riquezas petrolíferas ciados de insanable nulidad, son anti-
a ta "Standard OH" y sus filiales. Gra- constitucionales, y constituyen conve-
cias a la traición de Aramburu y al ne- nios atentatorios contra la soberanía
gociado de Frondizi echaron sus temi- nacional. Se admite además, en base a
bles anclas en el suelo patrio, los "pira- las pruebas aportadas, la existencia de
tas del petróleo. — Las palabras subra- tremendos negociados. El Tribunal de-
yadas están extractadas de un discurso claró culpable a Frondizi y ordenó
del extinto Presidente de los EE. U U . , mandar las actuaciones a la Justicia del
J o h n FitzGerald Kennedy, alevosa y ex- Crimen. Luego de esta "escenografía"
trañamente asesinado en Dallas en el se archivó la causa. Se anulan los con-
año 1963, hace tres años. tratos petroleros y se inician demandas
contra las siguientes compañías, ofre-
2. — Gigantesco negociado: Con ciendo además compensación o arreglo
sólo una radicación de capitales de 5 extrajudicial:
millones de Dólares en el año 1958, las
diversas Compañías que suscribieron a) Cities Service Development Com-
convenios con Y.P.F. lograron acumu- pany sucesora de Loeb-Rhoades y
lar mil millones de dólares en base a las Compañía, cuyo representante fue
suculentas ganancias obtenidas. Se co- (y sigue siendo) el Dr. Eduardo
noce en el mercado internacional el Busso, sucesor de Mr. Holland;
hecho de que el Petróleo produce divi- Busso fue ministro en el año 1955
dendos que superan el de cualquier otra y tuvo gran influencia en la Corte
inversión. El petróleo agiganta las for- Suprema. Dirige también la Texas
tunas y financia las guerras del mundo Butadienne Comp. (Petroquímica).
moderno. b) Southeast Drilling Company of Ar-
Honda inquietud provoca en el sen- gentine S. A.
timiento nacional herido tamaña afren-
c) Snam S.P.A. Società Nazionale Me-
ta, y el Dr. Frondizi tiene que valerse
nodotti.
de mil recursos maquiavélicos para evi-
tar su desplazamiento. Es raro el mes d) Kerr Mac Gee Oil.
que no haya un planteamiento castren- e) Trans World Drilling Company
se, gremial o educacional. Se deben to- Limited.
lerar en el lapso de 1958 a 1963 f ) Union Oil Company California.
hasta convenios leoninos como el de la g) Shell Production Co of Argentine
Tennesee OH Company en Tierra del Ltda.
Fuego, para la perforación y refinación
del petróleo, después de la "venta for- h) Shell Comp. Arg. de Petróleo S. A.
zosa" del plantel y equipo de Y.P.F. i) Tennesee Argentina S. A.
La zona de la concesión era vedada a j) ESSO Sociedad Anónima.
nuestras autoridades. Cañerías kilomé- I) ESSO Argentina Inc.
tricas conducían el "oro negro" de la
II) Pan American Argentine Oil Com-
planta de refinería a los barcos en la
pany.
costa, sin ningún control. La prueba
más evidente de lo expuesto la tenemos m) Pan American Intern. Oil Comp.
en la venta del combustible al Brial y ñ) The Ohio Oil Company hoy Ma-
a Uruguay, por la Tennesee, directa- rathón Petroleum Argentina Limi-
mente y sin intervención de la entidad tada y
estatal A pesar de la obligación de venta ñ) Continental Oil Argentina Limited
a Y.P.F. en un período donde todavía y otras dos o tres firmas más.
no se había logrado el autoabasteci-
miento. En resumen una veintena de entida-
des, de las cuales dos, la Pan American
3. — Maligna influencia de los mo- Argentine Oil Company (filial de la
nopolios: Ya en 1963, el gobierno del Standard Oil) y la Cities Service, po-
Dr. A. Illia, organiza un Tribunal Es- seen las tres cuartas partes del potencial
pecial, que declara: Los contratos petro- petrolero, en instalaciones, tierras con

33
subsuelos en explotación, etc. El go- ble concomitancias con el gobierno fron-
bierno anterior a 1966 celebró acuerdos dizísta lo vemos ahora actuar como
extrajudiciales con las otras empre- consultor especializado en la Casa de
sas, pero las dos mencionadas fueron Gobierno. Ya no cabe duda. Los nue-
" t a b ú " . El Dr. Eduardo Busso, como vos convenios son obra suya.
lo hizo ayer lo vuelve a hacer hoy: su
poderoso bufete está al servicio de los
FONDO MONETARIO INTERNACIONAL
monopolios.
" E L USURERO E R R A N T E "
Estas dos Compañías citadas acaban
de realizar nuevos convenios con las ca- Otra vez una sombra fatídica para la
racterísticas casi similares a los que gestó economía nacional obscurece el cielo
el Dr. Frondizi y su equipo de apátri- patrio. La del tristemente célebre Dr.
das criptocomunistas. Raúl Prebisch. el "apátrida". Verdadero
Con fecha 28 de diciembre de 1966 "liquidador" de las divisas, monetarias
(Día de los Inocentes) se anuncia la sudamericanas, desde la C E P A L , apén-
concertación de los nuevos acuerdos, a dice del F.M.I. América Latina ha de-
precios por metro cúbico de petróleo ex- jado de percibir por efecto de la desva-
traído, casi similares al de los anteriores. lorización "sincronizada" de sus mone-
La Pan American cobrará 9,32 dólares das, la friolera de veinte mil millones
en lugar de 10 dólares por metro cúbi- de dólares, en los últimos veinte años.
co. Inclusive se declara que se pagaron Es decir, cinco billones de pesos moneda
170 millones de dólares para compensar nacional. Esta pérdida irreparable ha
a las compañías cuyos contratos se anu- tenido su origen en la desvalorización
laron. Lo que no se dice es que Y.P.F. de las materias primas de este rico con-
en igual período (1963 a 1966) obtu- tinente: trigo, maíz, oro, café, cobre,
vo beneficios muy superiores a esta com caucho, plata, petróleo, etc. etc. para
pensación. Por algo la Pan-American "facilitar" su exportación. Con esta
adquiere en 15 millones de dólares los fortuna inmensa se hubieran hecho mi-
pozos que Y.P.F. perforó desde 1963 llones de viviendas, centenares de repre-
a 1966 eñ la zona de Valle Hermoso sas, millones de kilómetros de cami-
(Chubut). nos, etc. Se habría podido igualar casi
el standard de vida de EE. U U .
4. — Antecedentes de Cari Loeb:
Este nombre resulta fatídico para las Desde el año 1931, que fue gerente
naciones que se prestan a su diabólico del Banco Central, Prebisch comenzó a
juego. Constituye uno de los monopo- actuar como un verdadero cerebro de la
lios con mayores raigambres internacio- entrega; en 1940 atacó en una publi-
nales, vinculado también a Israel (?). cación a los generales nacionalistas, que
Su dirección está en Nueva York. La según él "se oponían al desarrollo del
Loeb fabrica revoluciones contra los país". El Gral. Benjamín Menéndez
gobiernos que no se prestan a su explo- lanzó' una solicitada apostrofándolo co-
tación. León Trotsky, líder de la revo- mo agente de los monopolios interna-
lución rusa de 1918 estaba emparenta- cionales (formó parte de la misión
do, por parte de su mujer, con el mismo Roca-Runciman, que vendió nuestras
Cari Loeb, que anhelaba los pozos de carnes a $ 0,50 el Kg. vivo). Menéndez
Bakú, en el Cáucaso ruso. fue pasado a retiro por esta causa. Hoy,
Prebisch, especialmente invitado, era es-
En el año 1910 alentó la revolución perado en el Aeropuerto por el automó-
mexicana, que recién en 1938 logró li- vil presidencial N ? 26.
berarse de su tutela petrolera. En forma
harto sugestiva, vemos que L. Trotsky La siniestra acción dirigida por Pre-
se radica en México después de sus des- bisch trajo a todo el continente Latino
avenencias con Stalin. La guerra civil Americano un diabólico tropel de infla-
española de 1936 también fue financia- ción, miseria y comunízacíón. ¿Es real-
da por la Banca Loeb. En Argentina, mente el Dr. Prebisch un economista
vemos a su representante el Dr. Eduar- "metalizado" al servicio de los voraces
do Busso, encaramarse en un Ministe- y ciegos monopolios internacionales,
rio. Después de conocidas y abomina- eternos "idiotas útiles"? Lo ponemos en

34
Fábulas Capitales
AVARICIA cuenta". Eran aqu'ellos tiempos en que
por S 10 y hasta por uno se podía ce-
Herren Julio era conocido entre toda nar. Decidí prolongar la broma y le
la barra nuestra porque jamás invitaba dije: "Me vas a tener que perdonar
y siempre aceptaba; y de una manera ahora, ando sin un centavo, y lo que
sutil incluso sabía provocar las invita- es peor, tengo que ir a Mendoza por
ciones. Con todo, nos era adepto, por- un mes." Me dijo que iba a ir a despe-
que tenía la habilidad que jamás en la dirme a Retiro; pero yo me fui con el
vida he visto .otra igual de hablar mal coche de José María Rosa.
del prójimo con autoridad: y ya se sabe Aquella noche murió Julio Herren.
que hablar mal del prójimo es odioso, Menéndez, el capo de nuestra barra me
pero se vuelve útil y agradable cuando lo comunicó por teléfono el mismo día:
otro lo hace por nosotros. Porque saber y después vi el aviso fúnebre en "El
ciertas cosas es de necesidad si uno quie- M u n d o " y me mandaron los mucha-
re vivir en este mundo; y la mayoría chos de la oficina la participación del
dellas son feas. entierro. T u v o un sofocón terrible: yo
Mi trágica aventura con Herren tuvo sabía de qué había muerto, y nadie más
un comienzo estúpido: comíamos los en este mundo.
dos en el Sorrlento y se le ocurrió a la El hecho de 'estar muerto no quitaba
insoportable Mariana llamarme por te- que yo le debía diez pesos. ¿Cómo se
léfono al restorán, y ~se me ocurrió a los pago? Eso pensaba yo al bajar al
mí al retornar embromarlo a Herren buffet del Cosmopolita, un hotelito que
de la manera para él más odiosa: "Me les recomiendo; enteramente tranquilo,
llaman a todo escape de la oficina". estrecho, limpio, barato y desolado; o
P A G Á , y mañana arreglamos" — le sea enteramente "Incosmopolita". En el
grité; y salí corriendo. . . y riendo. buffet dan "minutas", o sea, bifes con
Nadie sabe de qué vive — o vivía— papafritas o tortillas de acelgas SOLA-
Julio Herren, pero siempre anda bien M E N T E ; sin embargo estaba repleto;
vestido y se lo ve por todas las partes menos una mesa con dos sillas cerca de
donde no se hace nada: lo que nunca la puerta. Se abrió la puerta, entró EL
jamás le he visto es pagar algo; pero A L M A de Julio Herren, se sentó y me
que tiene plata es indudable. Bueno, al miró.
otro día salí de la oficina por la calle El bife se me hizo de suela y el vino
Bertrán, donde nunca salgo, y me topo mendocino se convirtió en agua sucia;
con él en esa cortada; y me dice sin pero pensar que yo iba a ir a sentarme
saludarme ni nada: "Son diez pesos tu en "la otra silla, era pensar en el planeta
Marte. Esperé, esperé y esperé y no salí
hasta que se fue. Aunque los demás del
bufete como si nada, yo ¡estaba seguro
que era un alma. Entonces se me puso
el .problema que dije arriba: "por estar
duda. En el año 1923, se doctoró en la muerto no quita que yo le debo diez
Universidad de Buenos Aires Ya era un pesos".
marxista declarado. Esto jamás se ha
Sin saber qué hacer, entré en la Igle-
revelado, pero consta en cierto archivo
sia de los Jeromianos que está en la
de Informaciones Anticomunistas.
Avenida San Martín. Había una misa
¿Podrá algún día este verdadero "téc- cantada y una montonera de gente. U n a
nico del desastre" al servicio de la usura muchacha muy fea pero vestida con ele-
internacional, pagar sus enormes culpas? gancia venía entre los bancos agitando
Su dialéctica marxista, ya no nos una caja donde decía: "Para los pobres
confunde. El sabe adonde va. Nosotros de los Jeromianos". U n peso se me le-
también. La Patria también lo sabe. . . vantó del corazón: me acordé de lo que
A.G.P. - Y.D.A. dicen los confesores: "Si no puede res-

35
tituír al dueño, dé una limosna a los había puesto con carbón: D E L IN-
pobres, o a nuestra Orden"; y deslicé F I E R N O . U n comunista sin duda.
los diez pesos de Herren con gran es- Sin vacilar un instante tomé los diez
panto de la elegante muchacha en la ra- pesos, los metí por la ranura y salí de-
nura de' la caja. Respiré. la Iglesia.
Pero al salir, el espanto fue mío: a En la puerta de la Iglesia, el alma de
la puerta de la Iglesia estaba el alma de Julio Herren me sacó el sombrero (el
Julio Herren mirándome con enojo. Me suyo), me hizo una gran reverencia, y
acordé que el peor uso de la plata que desapareció para siempre.
uno podía hacer era darlo a un pobre, Apenas acabó el cuento, le dijo la
según Herren. Me di una bofetada en Leona al Leoncito: ¡Ay, que invero-
la cabeza. Me parecía oir su voz iróni- símil!
ca: "Los Jeromíanos son ricos; y los — E s que estamos haciendo fábulas
pobres de los Jeromianos no existen". sobre los pecados capitales, y la Avari-
Me pareció que me seguía, caminando cia es poco poética.
pesadamente. Me encerré en mí cuarto — ¿ Y por qué no cuentan lo que yo
con llave, y ni por la ventana me ani- les conté del hombre que era Ministro
maba a mirar. y después se hizo millonario, y perdió
Pero tenía que comer. Ni por sueños la llave de la caja de fierro y adentro
se me ocurrió volver al bufete. Me fui había una rata?
a un restaurant donde Herren iba a en- — ¡ E s más inverosímil, m a m i ! —
trar mucho menos que en la Iglesia: al dijo Eel Cachorro.
"Royal's", el más caro de Mendoza. ---¿Inverosímil qule un ministro en la
En efecto, el alma no estaba allí. Em- Argentina se haga millonario?
pecé a cobrar ánimos; pero al salir me — N o , mami; lo otro.
la veo leyendo el " m e n ú " que estaba a — U d s . son los inverosímiles; y yo
la puerta. Esta vez no me miró, pero no puedo más sufrir que anden perdien-
se dio' cuenta que yo lo vi. do el tfempo en cosas de religión.
Pasé la noche sin dormir. Me dormí — Y , mami, total la gente aquí en la
pesadamente con un barbitúrico a eso Argentina es así—. De lo cual se enojó
de las seis. A las nueve me levanté, me no poco la Leona.
vestí, y salí con grandes precauciones J. del R.
para ir a ver a un Padre Jeromiano. Vi
al alma que me seguía cautelosamente.
Había misa otra vez, y otra vez vino LA REVOLUCION DE
la muchacha de la alcancía. Para alcan-
zarla, una víejíta al lado mío hacía en- LOS CARRITOS
viones, con un billete de 10 pesos y yo
me ofrecí a alcanzároslo; y al tenerlo en A poco andar solamente los optimis-
la mano se me ocurrió una idea genial; tas rayanos ten la tontería y los distraí-
lo escabullí en la manga y puse en vez dos rayanos en la hipocresía, creen aún
el un peso que suelo yo poner. La vie- que la Revolución Argentina es una re-
juca ni nadie se dio cuenta. Había ro- volución. Hoy, a apenas seis meses del
bado a los pobres los diez pesos de Julio 6 de junio la pretendida revolución a?
Herren, ¡Viva! Pero no me animaba gentina no ha hecho sino sumarse a L.
a salir de la Iglesia. crisis institucional que viene deterioran-
Estuve hasta medio día desesperado do al país desde hade unos treinta años.
tratando, de rezar o de tomar una reso- ( Y sí tuviéramos un poco más de áni-
lución. De repente vi que un moreno mo polémico podríamos hacerla remon-
andrajoso andaba haciendo algo contra tar hasta 1853, fecha en que, entre
una alcancía de las que andan contra la otras cosas, quedó asegurada la prima-
pared. Supuse que andaba queriendo cía del Estado sobre la Nación).
robar, pero vi que n o : al momento Sabemos, porque lo advertimos y
dejó y se fue. Me arrimé a ver qué porque muchos y serios obsiervadores lo
había hecho: simplemente había borra- dicen, que en la Argentina hay varias
do el letrero que decía: P A R A L A S cosas en crisis; algunas fundamentales,
ALMAS DEL P U R G A T O R I O y como el hombre, las buenas costumbres

36
y el Estado. Como no somos antropó- de un sistema estatal de la propiedad;
logos ni especialistas en filosofía moral, lo cierto es que en el día de hoy cada
sino meros y humildones cronistas po- vez más argentinos se ven obligados a
líticos, nos vamos a limitar a comentar optar entre pertenecer a la gran buro-
la crisis del Estado Argentino como cracia del Estado o a la gran burocracia
base del desbarajustie actual en que se de las empresas extranjeras. La hasta
mueve la pretendida revolución argen- ahora independiente clase media nacio-
tina. nal sigufe el camino de la no tan inde-
Es que la pretendida revolución ar- pendíente clase alta o alta burocracia
gentina es una manifestación de la crisis que gobernó el p3Ís hacia comienzos de
del régimen liberal, con lo que se quie- siglo: crudamente dicho, su papel con-
re decir que es no su superación sino su sistirá en proveer de dirigentes a la fac-
continuación. Porque la pretendida re- toría.
volución argentina es liberalismo mon- Por otra parte, el espíritu tecnocrá-
do y lirondo: es liberalismo sensual y tico es el aporte más singular y de lejos
plutocrático, antiargentino y antisocial. el más importante, de la mentalidad de
Sólo partiendo de este principio so- izquierda a la nueva sociedad argentina,
breentendido — a saber: que la Revolu- esa que empezó a forjarse hacia 1950,
ción Argentina es un esfuerzo, tal vez cuando comenzamos a darnos cuenta
el último, del liberalismo, para moder- que no éramos grandes porque no éra-
nizarse como medio de conservarse— sa mos importantes o, dicho de otra ma-
puede entender la sucesión casi caótica nera, que no éramos gloriosos porque
de acontecimientos desencadenada a par- no vivíamos confortablemente.
tir de la cero hora del 28 de junio. Dejemos por el momento las cosas
Para entender que la Revolución Ar- aquí. Reflexionemos sólo sobre esta es-
gentina es el instrumento institucional pecial situación de abierta crisis porque
del "Régimen" para perpetuarse o por atraviesa el espíritu nacional. Enajena-
lo menos para continuarse un poco más, das las clases dirigentes, en todos sus
ha de rechazarse la tesis que hace cen- niveles o si se prefiere en todas sus f u n -
trar la filosofía del 28 de junio en la ciones: empresariales, sindicales, intelec-
disolución cíe los partidos políticos. tuales, etc., a los más desarraigados in-
Nada más falso que pretender que el tereses comerciales y culturales; y dilui-
corazón del "régimen" es el sistema re- do todo eso en la "institución" de la
presentativo o algo por el estilo. Hoy pretendida Revolución Argentina, el re-
por hoy y por supuesto sin caer en un sultado de la aventura ha de ser una
cómodo maniqueísmo de cuño marxis- forma permanente de colaboración, en
ta, se ha de sostener que el régimen li- una especie de supracasta política, de
beral argentino tiene su sentido último cristianos "salvadoreños" con atenienses
en su transformación supracapitalísta. alquilones y "lobbys" y ejecutivos in-
así como tiene su estilo y su modo de teroceánicos que gobernará sobre una
actuar y desarrollarse en una visión tec- Argentina sin rostro y a la que ya no
nocrática del mundo, de la sociedad y habrá por qué amar. La misión con-
del país. creta de la oposición es hoy, a más de
Con estos presupuestos no es en nada unirse, saber qué reservas y qué defen-
extraño que la pretendida Revolución sas se pueden, todavía, hacer jugar antes
Argentina, siguiendo su curso interior de qUe la Argentina se vuelque sobre
al margen de la voluntad —buena o su desnuda geografía para morir.
n o — de su cabeza visible Onganía, El gobierno de la Revolución Argen-
vaya a desembocar, como lo prevemos tina está tomando cada vez más (y los
y aun lo profetizamos, en un Frente de recientes cambios en su elenco así lo
pre-ízquierda o de izquierda plena. Y revelan) conciencia de su papel en la
esto porque la experiencia y la lógica historia política del país. N o se propo-
así lo indican. Aunque no podamos en- ne una modificación de las estructuras
trar a un análisis más detenido', bien políticas ni de las sociales, ni siquiera
sabido es que un régimen de propiedad de las económicas. T o d o se limita a que
supracapitalísta, como, lo tiene enseña- el aparato productor se adapte a las mo-
do Belloc, en poco y nada se diferencia dernas necesidades del capitalismo inter-

37
nacional. A la satisfacción de estas ne- de revivir, por otro camino, el frondi-
cesidades se d:ebe el que la revolución cismo como escapismo. Frondizi y el
esté suspendida sobre su propia paráli- ulterior Frente, al que sin duda se vol-
sis y que excepto la disolución de los verá al final del periplo "corporativis-
partidos, al fin y al cabo un elemento ta" en que curiosamente se halla empe-
de la dinámica política y por lo tanto ñada la Revolución, basaban su estra-
inquietante, no se haya adoptado nin- tegia, sus posibilidades y lo que deno-
guna medida propiamente política. Las minaríamos su "filosofía" en la afir-
enormes fuerzas desencadenadas y la es- mación de que la síntesis de los opuestos
pectacular concentración del poder pro- —peronismo y antiperonísmo— era
ducto de la drástica pero fácil reforma deseable y más que deseable, posible. Es
institucional posterior al 28 de junio decir, es una ingeniosa vuelta de espal-
(trasladando teóricamente la soberanía das a la realidad. N o porque la síntesis
del pueblo al Estado; y prácticamente, no sea posible ni deseable — n o nos pro-
del Estado a las Fuerzas Armadas) no nunciamos sobre el particular porque
sirvieron de hecho para nada, excepto eso es obra de políticos y no de obser-
para su progresiva disolución y para fa- vadores— sino porque ella permite la
cilitar al gobierno la principal empresa postergación sine die del enfrentamiento
política en que se halla empeñado por de los dos sectores verdaderos en que
el momento: ocultar su signo ideológi- hoy se encuentran divididas todas las
co y postergar lo que sea posible el en- sociedades que buscan su orden, a saber?
cuentro con la realidad nacional. la derecha y la izquierda. Que en el
caso concreto argentino quiere decir na-
. Esta realidad está oculta ahora por cional y antinacional.
el manto revolucionario, pero ella sub-
siste en los exactos términos en que es- Los cambios producidos inopinada-
taba planteada bajo el gobierno de mente hacia fines del año pasado signi-
Illia que son también los términos que ficaron más que produjeron, el des-
se han venido reproduciendo desde membramiento del frente interno de la
1955. La dualidad peronismo-antipero- Revolución. El alejamiento del Dr.
nismo está todavía vigente y ya ha pro- T a m i , defensor de una línea económica
vocado la caída de dos presidentes cons- identificada con el sentido común y sos-
titucionales. Pero aun esta bipolaridad, tenida en la experiencia de los últimos
que al gobierno de Onganía le resulta
diez años, y más recientemente el del
fácil, cómodo y conveniente no ver,
oculta otra realidad última, que una vez ingeniero Roberto Gorostíaga y su equi-
a flote producirá una necesaria y legíti- po, destruyeron las últimas posibilida-
ma redistribución de fuerzas, y nom- des de "una revolución dentro de la re-
bres: izquierda y derecha, con todo lo volución". La Revolución ha quedado
diluido, equívoco y comprensivo que se íntegramente en manos de los ideólo-
quiera, son los términos permanentes gos del modernismo, cuya descripción
de la dinámica política de este siglo. humana queda aún por hacer. Superfi-
Advertirlo a tiempo le costó a España cialmente y sin perjuicio de encontrarles
su guerra civil y le valió su salvación. los lazos que los vinculan interna y
El gobierno de Onganía, en cambio, profundamente, podemos clasificarlos en
está todavía inmerso en la dialéctica deí tres grandes sectores cada uno con su
62: azules y colorados. Con términos misión a cumplir: los amadeístas,
tan difusos, tan poco cargados de signi- hechos de la vieja cuña nacionalista y
ficación, tan precarios, no se puede cuya superestructura doctrinaría no al-
hacer política realista ni ninguna otra. canza a ocultar su sensualidad de base;
Nadie mata ni muere por ellos. N o se los tecnócratas del Salvador, progresis-
puede fundar sobre ellos una intención tas sin ideología teológica; y los eje-
revolucionaria; no provocan la adhesión cutivos cuya patria ^es el mar.
de nadie, no arrastran implicancia al-
guna. Con estos elencos la Revolución Ar-
En el fondo, la permanencia en se- gentina no es posible. Con estos elen-
mejante dualidad no es sino la táctica cos la Revolución Argentina se trans-

38
Periscopio
11 I 67 — Murió Waldo Franck. leo" de Avellaneda, la revista ESOUIÜ y
"Waldo Franck estuvo en la A r g e n t i n a . . . Doña Diamantina de Chichizola. Nos adheri-
en 1942. En esta oportunidad (sic) fue objeto mos de corazón a los nombrados.
de un torpe a t e n t a d o . . . condenado con la
14 I 67 — ¡¡CREASE O NO! Mistres Mary
máxima energía por la prensa y todos los
Peaflok, sirvienta del E.M.R.O. en Winnipek
escritores argentinos " . . . p e r o no por el go-
no rompió un solo plato, vaso o fuente en
bierno, que estimó conveniente declararlo
40 años — o no se supo.
"indeseable" (Ramón S. Castillo).
El gaucho Ariel A. Sozzi de 67 años (Paso
Bien. No está de más saber también lo
de los Libres) jamás bailó un tango, montó
que se dejan éstos en el tintero: lo que mo-
un novillo, enlazó un puma ni mató un negro
tivó el "torpe atentado", una cosa bastante
o un judío.
más torpe. Waldito escribió algunos torpes
denuestos contra la Nación (no la Nación Abel Cornejo de Tabacal (Salta) hijo de un
diario, de la que era admirado colaborador, cultivador de tabaco y de una cigarrera
sino contra la Nación nación) con el cálculo FUMO UN SOLO CIGARRILLO en toda su
de que se publicarían cuando él ya estu- vida — y ahora es muerto.
viera lejos de aquí. Mas quiso el azar irónico
15 I 67 — El Club de Leones, fundado por
que se publicaran estando él aún en su lu-
un corredor de seguros, Ervín Melvín de
joso Hotel; y un muchacho argentino bien
Chicago, ha cumplido 50 años de beneficio-
nacido lo corrigió "con altura", como dice
sa vida. Por pura modestia se han deno-
Don Segundo; pues no le pegó a traición
minado así; reconociéndose animales, pero
(como el Waldo quería hacer con la Patria)
valientes. Escuché la conferencia del Leo-
ni le rompió ningún hueso.
nazo Máximo Dr. Lionel Capasso por R A 1 . . .
Unas piadosas correcciones destas, oh y me atosigó.
Dios, cuánto bien harían a . . . OTROS perio-
distas tergiversadores, para la salvación de "La beneficencia de un f r a c m a s ó n . . . está
sus almas. Waldito no fue más que un pe- aún más lejos de la caridad de los santos
riodista audaz, desaforado y vacuo. que el egoísmo del libertino más empeder-
nido". (Agustín Cochín, "La Abstracción re-,
12 I 67 — "Fue suspendido por 7 días el volucionaria", Huemul, Buenos Aires, 1967).
Director de Radio Municipal". Porque anun- Esta beneficencia hacen en grande (o sea
ció la posible, probable o positiva renuncia " a nivel cósmico") la UNO, la UNESCO, la
del Coronel I n t e n d e n t e . . . el de los Rastros UNICEF, la F A O . . . profesionales de la ca-
de Perros, Baches en Veredas, Basura en ridad masónica, que con dinero ajeno se
Cunetas, Faltas de Placas en Esquinas y dedican burocráticamente y no sin provecho
Aumento de Tilinguería; como la Escuela de a hacer toda clase de bienes a la Humani-
Boxeo y de Teatro, Artes Plásticas y Balet dad, y dirigirla hacia el Anticristo. Son los
Municipal. "Benéficos", como los llamó desdeñosamen-
Deberá ser suspendido por 14 días por te Cristo.
perfecto mal gusto y falta de calidad de sus
programas — también poblados de tilingos 16 I 67 — Unos milanesios de Italia han
municipales y espesos. ¡¡¡¡El Gato Sentado!! premiado con una estatuíta de Nuestra Se-
ñora al literato argentino Jorge Luis Borges
13 1 67 — Felicitaron a la Nación diario — blasfemador de Jesucristo y también (a
por su aniversario, entre otros muchos, el creer a un su comensal) de su Santísima
Rótary Club de Pueyrredón, la logia "Gali- Madre. Esto es lo aue se llama una milanesa.
La necedad literatural es cosa seria. Fue
Paul Claudel el que rogaba a San Juda,
patrón de las causas desesperadas, que por
un pelo y a último momento salvara a los
asesinos, los literatos y las hembras de
forma en una maldición. Más aún. Al burdel:
integrar una clase dirigente de tan baja "C'est Jude par un seul cheveu qui sauve
et qui tire au ciel — L'home de lettres,
calidad humana, clase dirigente que lo l'assasin et la filie de bordel".
es sólo porque dispone del mecanismo
del poder, cierra las puertas para la for- 17 I 67 — Hizo a! país una arenga polí-
tica un Ministro apolítico.
mación de otras espontáneas en las que Por no saber callar a tiempo (parece men-
el cuerpo' social pueda expresars'e. — Es tira) un hombre puede desacreditarse para
siempre — en diez minutos.
decir, que la Revolución Argentina
Es de la última vulgaridad figurarse que a
anula las posibilidades de los argenti- este pueblo golpeado, decepcionado y tam-
nos a corto y a largo alcance. bién avivado — sensibilizado a la mentira —
se le puede hacer efecto con peroratas
E. O. llenas de lugares comunes y aun errores; e

39
incluso disparates, como: "la Revolución em- Supergrande: 41 billones de pesos, porque
peña su h o n o r " . . . el déficit será este año de 130 billones en
Se le hace al pueblo el efecto netamente vez de 171; y el gobierno no hará ningún
contrario al buscado. gasto superfluo, anoser los más indispen-
¡¡Qué deficiente educación tienen nuestros sables.
grandes "dirigentes"! La crisis argentina es
24 I 67 — Ben Crosby ha llegado el pri-
ante todo una crisis mental. Falla el mate. mero en el ranking por haber vendido 250
18 I 67 — Otro discurso político de otro millones de discos; superando a los Beatles
"estadista" parlero: lugares comunes, pro- que rankean 199 millones — nos anuncia
mesas, fanfarronadas. De enero a enero, la con entusiasmo Miguel Angel Longo.
ganancia es del politiquero: la que no va Hemos escuchado varias canciones long
al extranjero. play del Crosby en el pick up de nuestro
amigo José Mambrú. Es lo que presumíamos:
20 I 67 — "Israel ha dirigido una seria lo elemental mezclado a lo golpeado y es-
advertencia a Siria". El miedo reina sobre trepitoso; o sea la barbarie civil de las
la región del Río Jordán: miedo mutuo, que actuales masas aplebeyadas. Bien: todo lo
es la mecha más común de las explosiones estadounidense (que aquí llega, por lo
bélicas. — Algo así predijo Belloc en su menos) es KOLOSAL — en cantidad.
monumental libro sobre "Las Cruzadas".
25 1 67 — Inundaciones enormes en el
21 I 67 — "El Papa ha dirigido una ala- Brasil.
banza al Hermano Arturo". Las alabanzas del
América, "la tierra barrida por los grandes
Papa no prueban nada: alaba todo: "Si es
ríos; la última, tras de la cual no hay otra"
mi hijo o no es mi hijo, yo pagué el bautizo''.
— dice el Profeta Isaías. — Pero ¿Isaías
Esto es diplomacia.
no es antes del descubrimiento de Améri-
En realidad, el de las "alabanzas" no es ca? — Mucho antes: ahí está la gracia.
el Papa; es "il Segretario del Segretario del
Segretario di Sua Santitá". 26 I 67 — PRIVATIZACION de los Ferro-
Así fue que Pío Xli condecoró a Constan- carriles, el Petróleo, el Gas, los T e l é f o n o s . . .
cio Vigil, recibió en audiencia privada a Do- amenaza del gobierno. ¿Y por qué no tam-
dero y su concubina; y alabó a Mitre y a bién, puestos a eso, los Correos, la Aduana,
Sarmiento en la recepción del Gral. Accame: la Policía, los Tribunales?
le hizo en esta ocasión el discurso un je- Fácil manera de sacudirse las pulgas. Pero
suíta colombiano "Consegliere per l'América ellas no mueren con eso; al contrario, vuel-
Latina", que sabía de la A r g e n t i n a . . . la "his- ven con más angurria.
toria" de Grosso. Lo que habría que "privatizar" son los
ministerios de Bienestar Social y de Segu-
21 I 67 — "Aumentan en el Vietnam las ridad; pues van a lo mismo: a la seguri-
bajas de los marinos estadounidenses". d a d . . . del gobierno. También el Ministerio
Los EE. UU. están librando en el Asia de Pseudo Educación.
oeste una contienda terrible que interesa a
todo el mundo. Como la guerra a los mus- Jesucristo habló de reyes que eran mas-
limes que se cerró en Lepanto, es la lucha tuerzos, y se hacían llamar "Benéficos". Ese
entre la civilización y la barbarie. truco de la generosidad con lo ajeno, la ca-
carídad de Don Juan de Robres, pasó a
La Nación del Norte ha asumido la púr-
manos de los gobiernos liberales. Es bobada.
pura imperial. Esa púrpura no es cómoda.
Es de sangre. La beneficencia no les toca a los gobier-
nos; lo que les toca son tres cosas sola-
Me dirán que la de EE. UU. es una civili-
mente: la guerra, la justicia y los caminos.
zación averiada. "Es ia lucha de una bar-
Los liberales se meten a hacer todo lo
barie contra otra barbarie", me dice J. M.,
"la barbarie capitalista que es peor que la que no deben porque saben que están
otra". haciendo mal —o nada— lo que deben.

No creo que sea peor. La Iglesia católica 26 I 67 — Cambio de mano en las calles.
no io cree. Primer acto revolucionario de la R. A. Hace
falta también en la política. Pero allí no
21 I 67 — "Columnas de la Juventud": basta cambio de mano. Ya se han hecho
M . . . V . . . Ser campeón de tenis ¡qué res- muchos al cuete. Hay que cambiar los
ponsabilidad!" (La Nación diario). vehículos. El Ford 1853 que tenemos se cae
Realmente, lo es: "casi todos los ganado- a pedazos.
res de campeonatos son histéricos" (Ludwig
Klages). 27 I 67 — Festival de Cosquín. — Después
de haber habido escasez, ahora al contrario
22 I 67 — "Dos altos dirigentes chinos se hay "dúmpingue" de lo que llaman "foque-
han suicidado; o quizás cuatro". lorre"; y aparecen ya demasiados Chagua-
Todos ios politiqueros acaban mal — razos de la Melodía o Ruiseñores del De-
menos Mitre (D. Babel Manito). sierto que le recuerdan a uno la definición
Y aun Mitre, sí hemos de creer a la me- del "foquelorre" que dio Guillermo Díaz
moria de D. Carlos Ibarguren. Plaja: "Es el estudio del modo peculiar que
tiene cada pueblo de expresar la propia
23 I 67 Hemos ganados los argentinos la idiotez".

40
30 I 67 — Revista Naval Internacional de ble e implacable; o sea, simplemente, con
Mar del Plata. Pero ¿es Internacional o justicia seca. JUSTICIA, palabra sacra, que
Yanquial? Bien, EE. UU. es una gran nación; entre nosotros es ya mera palabra; e inclu-
y sola, la Flota Argentina es una "pasión so, mala palabra.
inútil", que dijo el otro. Bien está que se
adiestren los marinos argentinos en honor 3 II 67 — CARNAVAL — Aquí todo el año
de la independencia; para poder defender, estamos en Carnaval, incluso en Carnaval.
dado el caso, el Atlántico Sur, bajo el man-
6 II 67 — ¿Cómo quedará hecha (o des-
do del Brasil.
hecha) la cabecita de los muchachitos a
quienes sus padres dan dinero para — o
31 I 67 — Entrevista de Podgorny con el
ellos mismos llevan a — ver a James Bond?
Papa. El Cardenal Josef Slipyj, ukraniano
— ¿Quién es James Bond, oh Mambrú? —
como Podgorny, residente en Roma, se negó
¿No conoces todavía a James Bond? Es el
a recibirlo. "El Papa tiene sus razones, que
agente 007 del FBI, en película. Son los
yo respeto. Yo no". El Cardenal Slipyj estuvo
feimes actuales en que culmina la técnica
cautivo 18 años en un campo-concentración
yanqui; la cineástica y la otra. Son cintas de
ruso. Fue soltado por Jruchef (Kschrusts-
espionaje, contraespionaje y detectivaje sal-
chew escriben los franceses —y copian al-
vaje: un montón de disparates y necedades,
gunos argentinos— por no tener el francés
con su pimienta de "erotismo" o indecencia
la letra J ni la Ch) y nombrado cardenal in
("romance"), sus brotes de violencia bruta,
pectore por Juan XXIII, poco antes de su
todo ahogado en jarabe de sensiblería. ¿Có-
muerte.
mo les dejará la fantasía a esta joven ge-
Según Freie Presse de Buenos Aires (31 I neración? — Bueno, Mambrú, a nosotros dos
67) la colonia ukraniana de exilados en ¿qué nos importa? Será la generación que
Roma estima que esta entrevista hará mucho proclamará Rey al Anticristo, si acaso; y
perjuicio a su Iglesia Católica Uniata. nosotros estaremos tiempo hace reposando
en la Chacarita. Me extraña que a tu edad
1 II 67 — Si solamente la cuarta parte de gastes plata en eso, M a m b r ú . . . — Solamen-
los negociados peculados concusiones esta- te para estudiar la sociología de la cosa,
fas coimas sobornos prevaricaciones y con- como si dijéramos; total, cuesta solamente
trabandos que andan (con pelos y señales) 180 pesos. ¡Vos deberías ir de vez en cuan-
en boca del pueblo son reales, la corrup- do! — ¿180? No compro yo tan caro el tener
ción de la República (o de su actual régi- que arrepentirme.
men) es descarada e intolerable. "Dineros
y santidad, la mitad de la mitad", dice el 10 II 67 — Murió el Cardenal Copello en
español; igualmente por tanto: "dineros y Roma.
perversidad". Pero aun si solamente la cuar-
De falsa gloria lograda
ta parte es creíble, es demasiado; y el pue-
¿Qué le resta al hombre? Nada
blo cree todo.
Sí no es la fosa en que yace,
Esta llaga inveterada sólo puede detener- Y ésta la tiene ganada
se con cauterio; es decir, con rigor saluda- Sin luchar, desde que nace.

Leído para Usted


JAIME MARIA MAHIEU. - Diccionario de la nomenclatura como bola sin manija. Aquí
ciencia política - Book's International, Bs. no sólo aprenderían el uso estricto, mas co-
As. 1966 - 370 págs., cartoné. Talleres Aranel. secharían innúmeras ideas generales o prin-
cipios para reforzar o calafatear sus obser-
Escribir un tratado sucinto de política en vaciones empíricas.
forma de diccionario, es original, no cabe Estábamos por decir que Mahieu tiene
duda: tal la última realización de J. M. de tantos aciertos como líneas, cuando el "gen-
Mahieu. Este libro es la destilada quinta- delettre" que hay en uno comenzó a buscar
esencia de sus notables libros anteriores; y pelos en la leche. Si uno aprueba y alaba
al mismo tiempo, una introducción a todos sin reparos, parece que no es muy inteli-
ellos para entenderlos mejor; a saber: Evo- gente. . .
lución y Porvenir del Sindicalismo, El Estado Algunas palabras son contenciosas por su-
Comunitario, La Naturaleza del Hombre, La puesto; y cuándo nó en tal esfera: "Catoli-
economía comunitaria. cismo, Capital, Antisemitismo, Masonería,
Mahieu define con exactitud y concisión Fascismo, etc." Respecto a la primera, por
los términos de la política-ciencia, reducidos ejemplo, Mahieu se atiene a su aparición
inteligentemente a un mínimum y cuidadosa- política, no a su natura religiosa; y eso, no
mente relacionados; y los explica con un co- como debiera ser, o como fue en otros tiem-
mentario lo más breve posible. Conjuramos pos, sino como se presenta hoy; de modo
a los dioses para que lean este "diccionario" que nada de fruncir cejas.
(cuya lectura no es seca ni tediosa) los nu- Otras palabras parece pedirían ligeros re-
merosos redactores de nuestras numerosas paros; v. gr., PATRONATO, el medio más
revistas políticas, que emplean muchas veces propio para solventar el problema Iglesia-

41
E s t a d o . . . en el caso de ser católico el Es- ideología, como también sus resultados
tado — CONSENSO: "no es fuente de legi- efectivos, para sólo analizar desde el
timidad del Estado" . . . s i no es en el caso punto de vista científico sus diversos as-
de usurpación del poder, al fin consentida — pectos, no podemos sino notar su carác-
REVOLUCION: el sentido que a esta pala- ter de irrealidad. Si la sociedad, en efec-
bra da M. es nuevo: "restablecimiento del to, sólo es yuxtaposición de individuos
orden social natural mediante la restaura- libres e iguales, toda organización le está
ción del Estado en sus funciones comuni- vedada por definición, puesto que ella
t a r i a s " . . . de modo que no habra revolucio- significa diferenciación interna en órga-
nes "malas", sino que HAY o NO HAY; y nos, por tanto, jerarquía funcional, y por
si la hay, es b u e n a . . . De nombres no hay eso mismo, desigualdad y autoridad.
que disputar, dice el Filósofo; pero parece La anarquía constituye, por consiguien-
imposible haga adoptar Mahieu este nuevo te, el estado normal de la sociedad de-
nombre de la "Restauración"; y que el uso mocrática, y Rousseau lo reconoce; pues
común deje de llamar "revolución" a la Rusa, impide toda vida social. Es preciso, pues,
a la Española Republicana, a la Chinesa; y desde el origen, torcer los principios y
sobre todo a la Madre y Maestra, la Francesa admitir una delegación de la soberanía
de 1789; que según M. no fueron sino "sub- popular: se mantendrá un Estado, pero
versiones". ¿Cuál habría sido pues en la sus miembros serán designados por los
Historia una verdadera "Revolución"? Ma- individuos libres e iguales. Y puesto que
thieu no nos da ejemplos. la unanimidad electoral parece un tanto
También yo creo que una "mala" revolu- difícil de conseguir, un nuevo ardid per-
ción no es más que una "subversión"; pero mitirá reemplazarla por la mayoría nu-
en materia de lenguaje, contra el uso no po- mérica.
demos prevalecer. De ahí la siguiente disyuntiva: o bien
Mahieu parece dar por sentado que la se considera a los estadistas, mandata-
Iglesia Católica, que el pasado siglo conde- rios de sus electores, y entonces estarán
nó resueltamente el liberalismo ("libertades sometidos en todo a intereses privados;
de perdición", "licencia", "naturalismo y ra- o en el mejor de los casos —en la me-
cionalismo", "limita la libertad de la Iglesia", dida en que los individuos tomen con-
"es impotente en la cuestión social", "es ciencia de un interés general— a volun-
injusto con la clase obrera" e via dicendo) tades incompetentes; o bien se querrá
ahora ha dado una "volteface" total, y lo convertirlos en jefes verdaderos, y su
ha adoptado sin c o r t a p i s a s . . . Si eso es así, nombramiento por sus propios subordi-
"póver'a noi". Pero yo lo dudo. Esto tiene nados constituirá un mero disparate, agra-
que ser objeto de un estudio posterior. vado por la incapacidad de los individuos
Finalmente, TIRANÍA está identificada con para fundamentar su elección en las ne-
DESPOTISMO y despachada en 10 líneas. cesidades reales de una Comunidad, cuya
No son la misma cosa; y merecen más líneas. intención histórica no puede sino esca-
Este no es un libro frío sino caliente; es párseles.
decir, el autor no cree que lo "científico" En un ámbito social muy reducido, es
consista en rehuir el juicio, supuesto que posible que la elección sea la ratificación
consiste justamente en lo contrario: en lle- de una autoridad natural previa, pues los
gar al juicio, sobrepasando la mera descrip-" hombres se conocen y se juzgan en un
ción, la hipótesis, la conjetura. contacto cotidiano, y el interés general
De cualquier modo, la obra de J. M. de se afirma en lo inmediato, sin discusión
Mahieu es un trabajo de primer orden; y posible. Los campesinos de la Alta Edad
hay que dar gracias a Dios que nuestro país Media, que se agrupaban alrededor del
tenga a su provecho esta sólida y sutil ca- soldado, convirtiéndolo en su señor, sólo
beza gala. Para dárselas nosotros a Mathieu, disponían de una elección teórica: de
nos apropiamos aquí fraudulentamente la re-' hecho la necesidad privaba con una fuer-
presentación del país; el cual no se las za invencible sobre sus eventuales pre-
dará, pour sur. ferencias. Igual ocurre, mutatis mutandis,
en el pequeño municipio rural. Pero cuan-
Veamos como ejemplo la explicación de
do se trata de designar a los hombres
la palabra más usada actualmente:
que habrán de dirigir a la Comunidad en
"DEMOCRACIA" una escala superior en demasía a la del
individuo, la masa ya no es sensible sino
REGIMEN POLITICO EN EL CUAL EL PO- a una mezcla compleja y variable de in-
DER ESTÁ EN MANOS DE LA MAYORÍA DE tereses particulares, impulsos pasionales,
LOS INDIVIDUOS, SUPUESTAMENTE LIBRES costumbres y mitos, que muy poca rela-
E IGUALES POR NATURALEZA, QUE COM- ción tienen con la política. Por un jefe
PONEN LA COMUNIDAD. verdadero que logra, en un período de
La base teórica de la democracia es crisis, imponerse a ella ¡cuántos medio-
el principio de la soberanía popular, que cres y arribistas sin escrúpulos que con-
supone la tesis del contrato social, con siguen captar su confianza y sus su-
sus premisas individualistas: libertad e fragios!
igualdad naturales de los hombres, con- Históricamente, estos dos aspectos su-
siderados como esquemas abstracto)» y cesivos de la democracia sirvieron a las
no como seres históricos. Si dejamos a mil maravillas al propósito de la burgue-
un lado el poderío mítico de semejante sía al fin del siglo XVIII: la conquista y

42
conservación de los Estados tradicionales. intención de clase, que a menudo la con-
En su pureza doctrinaria, la teoría era tradice. Pero no por eso deja de ser
inaplicable; pero poseía un fuerte poder verdad que la oligarquía burguesa tiene
de sugestión en las mentes. Zapaba con interés en mantener con vida a la Co-
eficacia, en nombre del igualitarismo in- munidad sobre la cual se desarrolla de
dividualista y de un anarquismo apenas modo parasitario. La debilita por su sola
mitigado, el orden tradicional de la Co- presencia, pero asegura sus funciones
munidad, su estructura orgánica y su Es- elementales. La subordina a las poten-
tado. En su forma mayoritaria, ponía la cias financieras internacionales, pero le
autoridad política a merced de la opinión; conserva un mínimo de estructura orgá-
vale decir, en última instancia, de aque- nica. Su dominación crea un estado so-
llos que detentaban los medios de actuar cial patológico, pero el enfermo no muere
sobre las masas "atomizadas"; o si se por ello; moriría indefectiblemente si la
prefiere, sobre los individuos arbitraria- anarquía absoluta que implica la demo-
mente extraídos de sus marcos naturales. cracia teórica lograra suprimir el Estado.
Ahora bien: la posesión de los instru- La oligarquía, por necesitar para uso
mentos de la propaganda dependía del propio del poder político, no puede des-
poderío financiero, que precisamente per- truir deliberadamente su órgano. Pero le
tenecía a la ciase burguesa. Sólo se tra-
quita su independencia y reduce su auto-
taba, pues, para esta última, de una cues-
ridad, porque teme algún sobresalto de
tión de tiempo. Así la vimos, una vez
su parte; y los principios antifísicos que
dueña del Estado, instaurar en un primer
proclama, y de los cuales proceden ins-
momento un sistema censal que reserva-
tituciones que no responden sino parcial-
ba para sus miembros el derecho de voto;
mente a las exigencias del mando. La
y luego conceder al pueblo el sufragio
universal, cuando el trabajo de penetra- oligarquía burguesa es así prisionera del
ción ideológica, realizado sobre todo me- régimen que constituye el instrumento de
diante la escuela y la prensa, hubo hecho su dominación. Sólo en período de crisis
casi imposible cualquier sorpresa. puede endurecer la dictadura de clase
que impone a la comunidad. En nombre
del famoso sofisma: "nada de libertad
para los enemigos de la libertad", susti-
tuye entonces las elecciones por la gui-
llotina o sus equivalentes. No faltan ejem-
plos desde 1793 hasta nuestros días.

ADOLFO MUÑOZ ALONSO. - Las ideas filo-


sóficas en Menéndez Pelayo. - Ediciones
F.IALP, Madrid, 1956.

Es una monografía realmente completa y


convincente sobre la filosofía en Menéndez
Pelayo. En torno de la pregunta si fue o
no filósofo el polígrafo castellano (supuesto
Por cierto, semejante procedimiento
que el NO se lo dieron Ortega, D'Ors y en
algún modo Bonilla y San Martín) este otro
constituye una utilización abusiva y frau-
dulenta de los principios e instituciones
de la democracia. Pero son estos mismos
principios antinaturales, y las institucio-
nes que suscitan, las que crean las con-
diciones óptimas de la OCUPACION del
Estado comunitario por una oligarquía.
Más aún: que hacen inevitable tal ocu-
pación. Pues no hay Estado sin minoría
dirigente. Si esta se elige por sufragio
universal, depende de la opinión, que de-

filósofo castellano examina toda su obra, y


pende de la propaganda, que depende
del dinero. No existe medio de quebrar,
salvo por ruptura revolucionaria, el enca-
denamiento fatal. La democracia es nece-
sariamente una plutocracia.

La única alternativa sería el sorteo de resume todas sus expresiones filosóficas. La


los magistrados; propuesto, sin duda iró- respuesta así fundamentada es SI, con una
nicamente, por Aristóteles. Apenas es ne- reserva: NO fue un filósofo sistemático; pero
cesario precisar las consecuencias que fue más que un mero "pensador", a la ma-
habría que esperar de semejante sistema. nera de los tres arriba nombrados.
Toda continuidad en la dirección comu- M. P. nunca dijo de sí ser filósofo; antes
nitaria desaparecería. La incapacidad de lo negó modestamente, adjudicándose el tí-
ios hombres en el poder sería casi totaí. tulo de "crítico" o bien "ciudadano libre de
Su aislamiento, por falta de una clase la república de las letras"; pero la hondura
dirigente en que apoyarse ,haría insoste- y exactitud con que ejercitó la crítica, lo le-
nible su posición, y aleatoria su autori- vantan a la esfera de la filosofía.
dad. Paradójicamente, tenemos que ale-
grarnos de que la democracia teórica no "La filosofía es un riesgo. Como lo es la
pueda funcionar, y una oligarquía detente vida cuando se vive profundamente. Y
de hecho las palancas políticas de man- asirse a los postes del camino en vez de
do. Sin duda el Estado entonces es OCU- hacerse a la mar con los remos, podrá
PADO. Sin duda, sirve de instrumento a ser decisión profesoral, pero ciertamente
una clase que explota a la comunidad ep no es actitud filosófica. El filósofo no es
su exclusivo provecho. Sin duda, en con- un náufrago de la vida en la balsa de la
secuencia, su poderío es desviado de sus razón; no es tampoco un pirata sin rey
fines naturales. Sin duda, resulta mal con- ni ley: es un capitán de nuevos rumbos
ducido, puesto que su minoría dirigente que se adentra en la marea fósil de su
es de naturaleza económica, y no política conciencia, con la carta de marear bien
como correspondería; y la intención his- aprendida, porque no se ha resignado a
tórica que encarna está sometida a una ser un mero cartógrafo de las ¡deas;

43
consciente de que ei océano de la filo- En España se publicó un libro sobre estas
sofía no es un mar en leche o un mar apariciones, escrito por Francisco Sánchez-
cerrado que pueda defenderse desde las Ventura y Pascual; pero no llegaron ejem-
orillas, sino que es — y termino con el plares a las librerías argentinas por haberse
símil marinero — un mar de leva, sobra hecho una edición limitada. La Editorial Cruz
que el filósofo ha de navegar sin rom- y Fierro, de Buenos Aires, adquirió los de-
perse en las rocas, pero sin volver la rechos para hacer una edición argentina, la
proa. Para estos altos mares de la filo- cual acaba de aparecer con el título de "Las
sofía ha de llevar, cauteloso, no velas de apariciones no son un mito". Esta edición
mentira, como cantó el poeta, o remos da tiene varios grabados interesantes, un enjun-
lisonja, sino velas de erudición histórica díoso prólogo del Padre Leonardo Castellani
y literaria, y remos de penetración psico- y un delicado Romancillo del poeta Ignacio
lógica, para que a sus golpes salten las B. Anzoátegui, dedicado a las cuatro cando-
ideas, como saltan las chispas del agua, rosas visionarias de Garabandal.
y la nave siga su curso, y en ella e!
La obra de Sánchez-Ventura y Pascua!
hombre con los ojos en la estrella polar.
tiene dos partes. En la primera el autor re-
Si a algún lector enfada tanta fáci! me-
futa pormenorizadamente el libro del escri-
táfora, despréciela, y quédese con el su-
tor marroquí José Antonio Monroy, el cual
gerimiento... (Párrafo final del libro).
niega la realidad de las apariciones de la
Virgen en Lourdes, en Fátima y en Garaban-
dal, atribuyéndolo todo a propaganda y a
Feo. SANCHEZ-VENTURA Y PASCUAL. - Las engaños del clero. Se ve que Monroy no
apariciones no son un mito. - Cruz y Fierro conoce bien a los sacerdotes, que suelen
editores, 260 págs. Buenos Aires, 1967. ser los primeros en rechazar los milagros
El cable había traído a la Argentina en y las apariciones que se cuentan. Sólo en
forma vaga la noticia del extraordinario última instancia, cuando está agotadas las
acontecimiento de que fueron escenarios las investigaciones y adquieren estado público
ásperas montañas de Garabandal, descono- y son confirmados con prodigios estos su-
cido caserío de la provincia de Santander, cesos sobrenaturales, los aprueba la autori-
España. Como es natural, la gente tomó el dad eclesiástica, y muy pocas veces.
suceso al principio con cierta indiferencia.
Se habla y se escribe tanto sobre asuntos En la segunda parte de la obra, la más
supersticiosos, que el pueblo, por lo general, sustancial, Sánchez-Ventura y Pascual trata
y, a veces, los doctos, no disciernen acer- en forma minuciosa las apariciones de la
tadamente entre lo divino y lo humano ni Virgen en Garabandal. Su trabajo es bastan-
entre lo verdadero y lo fraudulento. te imparcial y sus argumentos muy razona-
bles. Describe el lugar de los hechos, con-
Poco después las informaciones se fueron versa con numerosas personas que tuvieron
concretando. Ocurrieron nuevas apariciones relación con los videntes y los sucesos, en-
en la aldea santanderina. Los periodistas tre éstos sacerdotes, médicos, periodistas y
acudieron a interrogar a las cuatro niñas viajeros. El mismo habla con las niñas visio-
videntes. Se produjo el milagro de la co- narias y visita los Pinos, donde María Con-
munión sobrenatural de María Concepción, cepción recibió el Mensaje de la Virgen por
durante un éxtasis nocturno, en la calle, que medio del arcángel San Miguel.
fue filmado. Cumplióse asimismo la anun-
ciada aparición del arcángel San Miguel, el La edición argentina contiene, además del
18 de junio de 1965; y esto era cosa ya sabroso prólogo y de la poesía referidos,
ciertamente seria. El éxtasis y el diálogo tíos capítulos nuevos que le otorgan un
de la vidente fue presenciado por unas dos valor superior al de la edifición española.
mil personas procedentes de España Italia. El primero es el que detalla circunstancia-
Francia, Polonia, Gran Bretaña y los Estados damente los hechos ocurridos el 18 de junio
Unidos de Norte América. En nombre de do 1965 el mensaje redactado por María
María Santísima el mensajero celeste le dicíó Concepción, cuyo texto reproduce. El otro
a la niña un Mensaje destinado al mundo. contiene el diálogo mantenido por la niña
No se trata, desde luego, de un mensaje con la Virgen del Carmen, el 13 de noviem-
de tipo social o político. Es un mensaje tras- bre del mismo año, donde la celestial Señora
cendente, un mensaje de vida o muerte. Se le explica por qué no le dio ella el mensaje
trata de la salvación de la humanidad. La personalmente; le recuerda que sufrirá mu-
Virgen dice en su mensaje que los hombres cho, y la exhorta a visitar con frecuencia el
andan extraviados, que muchos sacerdotes Santísimo; y como la niña le dijera de su
errados llevan a las almas por el camino afán de irse con Ella al cielo, Nuestra Se-
de la perdición, y que hoy se le da manos ñora le contesta: "Al presentarte delante de
importancia a la Eucaristía. En aclaraciones Dios tienes que mostrarle tus manos llenas
posteriores la Virgen añadió a María Con- de obras hechas por ti en favor de tus her-
cepción que el Señor haría un gran milagro manos y para gloria de Dios, y ahora las
en la colina de Garabandal, el cual sería tienes vacías".
anunciado por ella con ocho días de antici-
La vidente añade: "Anteriormente me había
pación; que los enfermos presentes sanarán,
dicho la Virgen que Jesús no nos manda el
que los excépticos creerán y que Rusia se
castigo para fastidiarnos, sino para ayudar-
convertirá; y que si después la humanidad
nos y reprendernos de que no le hacemos
no se enmienda, sobrevendrá un castigo
universal. caso; y el aviso para purificarnos para ver
el milagro, en el que nos demuestra su gran

44
Cartas de los Lectores
EN RESPUESTA A NIMIO DE ANQUIN: LOS Aparte de eso, Israel es, fuera de toda
MITOS QUE VOS MATAIS GOZAN DE duda para nosotros los cristianos, el pueblo
BUENA SALUD. (O por lo menos sobreviven). elegido por Dios; pueblo que quebró el pacto
con sus obras; ya 4 ó 5 siglos antes de
En el N° 1 de "Jauja", pág. 14, leí el dis- Cristo Malaquías, en nombre de Dios, re-
curso pronunciado por Nimio de Anquin; prendió la corrupción religiosa y amenazó
para no repetirme, doy por supuesto que el con la ruptura del pactó de Leví. Cristo de-
lector lo conoce. No me interesa discutir claró la ruptura del pacto; y la conversión
lo que dice acerca de cultura, historia, lite- de Israel y su triunfo fueron APLAZADOS
ratura, política, sociología. Pero no puedo en para la Parusía. Podría traer aquí docenas
conciencia dejar pasar sin oponerme a ellos, de citas en aval de esta posición, lo que no
los conceptos siguientes, sostenidos en di- me parece necesario; al que le interese, le
cho discurso: aconsejo leer al Padre Castellani, en "Las
1°) "Ha caducado el mito del "pueblo ele- parábolas de Cristo" (pág. 266, 273, etc.) y
gido". 2?) Ha desaparecido del cuadro de "El Evangelio de Jesucristo" (pág. 230 y
valores practicables la expresión mítica de otras).
la "projimidad", derivada de la parábola del
buen samaritano. El Dr. Nimio de Anquín puede o no creer
Para empezar sostengo que en ambos esto, pero pienso que el hecho de que Israel
casos se comete grave error al emplear la sea ahora un estado no cambia la forma
palabra "mito", que significa una tradición como tenemos que verlo los cristianos; ex-
sin base histórica real, o una teoría acepta- ceptó que nos haga abrir bien los ojos para
da en el campo de la ciencia y cuya false- conocer los tiempos en que vivimos (esa es
dad es demostrable. O una fábula o ficción conciencia histórica), pues uno de los signos
alegórica, especialmente en materia religiosa. que Jesús dio de Su 2 ? Venida fue: Jeru-
Nada de esto es aplicable, dada la exis- salén no hollada más por los Gentiles. Cito
tencia de la Biblia, bien real por cierto y a Castellani (El Evangelio... pág. 379): "Je-
más estudiada que ningún otro documento rusalén que desde su ruina el año 70 ha
histórico; por otra parte la historia del pue- estado bajo el poder de los Romanos, Per-
blo de Israel precede en muchos siglos a sas Arabes, Egipcios, y T u r c o s . . . desde
las más antiguas que se poseen. 1918 y por obra del Gral. inglés Allenby ha

amor hacia nosotros y el deseo de que cum- Sucesión española, Utrech... y 8 más. III
plamos el Mensaje". Francisco Miranda, Ideología postiza... y
De modo que la humanidad está pendien- 14 más - IV Junta Separatista en Montevi-
te ahora del gran milagro, que acontecerá deo, 1® Enero 1809; y 12 más) los cuales
un día jueves, a las 20,30, en la festividad tienen tanto de Historia como de meditación
de un mártir relacionado con la Eucaristía. y juicio. El conjunto constituye una cifra de
Rusia se convertirá después, y si la huma- lo que uno tiene que retener para siempre —
nidad no se arrepiente y enmienda, sobre- Meduloso estracto de grandes tratados y
drá el castigo. sana filosofía.
"Créase o no", decía Riply. Anuncio más Todos estos puntos fuertemente sintetiza-
concreto que éste no recuerdo que se haya dos "están unidos en cuatro partes vigorosas:
visto. Es una profecía. La joven fijará el día El Imperio y la "Conquista - El Reformismo
de! milagro ocho días antes. Vale la pena borbónico - Liberalismo y Tradicionalismo -
leer el libro de Sánchez-Ventura. No se per- Vísperas emancipadoras; que van desde 1742
derá nada con ello. El buen cristiano halla- a 1810.
ra consuelo y se mejorará. Los escépticos "El hombre que sabe quiénes son sus as-
tendrán algo sugerente para meditar. Si lo cendientes estará mejor preparado para
que se anuncia sucede, e n t o n c e s . . . afrontar el destino; o por lo menos, con
más posibilidades de defensa que aquel
J. C. M.
que los ignora. Análogamente ocurre en
las colectividades sociales. Cuando ios
FEDERICO IBARGUREN. - "Lecciones de acontecimientos estallan y urge tomar
Historia Rioplatense" - 2da. edic. - Huemul, contacto con la realidad cruda, la nación
Buenos Aires, 1966. ignorante de su pasado se verá en infe-
rioridad de condiciones para reaccionar.
La reedición mejorada de las sencillas Caerá vencida por los acontecimientos
"Lecciones de Historia" de Federico Ibargu- desatados. No podrá encarar a tiempo la
ren es plausibilísima. El libro de 154 págs. solución; sucumbiendo a la larga, arrolla-
es sumamente útil. Dividido en "tópicos" da por la propaganda, los programas d©
breves ("Los Reyes Católicos - El Testamen- moda y las doctrinas de momento...
to de Isabel - y 6 más - II La Guerra de (Prefacio, pág. 27).

45
vuelto a manos de los judíos; y un "Reino no practicar principios que son propios de!
de Israel" que se reconstruye, existe tran- orden n a t u r a l . . . " los cuales principios, agre-
quilamente ante nuestros ojos". go yo, son, sintetizando, "ojo por oio y dien-
- De modo que aunque no estoy bien segu- te por diente". Y ¡ojo!
ro de todo lo que quiere decir el Dr. Anquín. Agrega Anquín: "Atenerse obstinadamente
por las dudas aclaro: el que piense que por- a ideas que ya no tienen ninguna vigencia
que los judíos tienen ahora un Estado ha efectiva, equivale a condenarse a la escla-
variado su condición de pueblo estrecha- vitud y m e d i a t i z a c i ó n . . . ' Error: las ¡deas de
mente ligado a la historia de la Salvación, Cristo tienen vigencia, y es obligación del
se equivoca. ctistiano luchar porque no dejen de tenerla.
Paso al 2? punto: la "projimidad"; por Es cierto, sin embargo (está profetizado),
suerte, para ahorrar el trabajo de descifrar, que en los últimos tiempos disminuirá el
el Dr. Anquín aclara que se refiere a la de- amor; pero aún entonces, será (¿o debo
rivada de la parábola del Buen Samaritano decir "es"?) obligación de los cristianos
¡¡ésto sí que es importante, mucho más que oponerse a ésto en todo lugar; no sólo en
lo de los judíos!! Porque se derivan acciones la iglesia; porque se equivoca Anquín cuan-
de las ideas; Anquín dice que "las ideas do sostiene que. "tampoco la acción del ciu-
rigen a los hechos"; no quiero ni pensar en dadano es misional, sino de cooperación en
qué hechos pueden ser los regidos por estas un orden mundano d a d o . . . " ; por el contra-
ideas. Pero vayamos a la cuestión: rio, la acción del ciudadano (si es católico)
Cito a Castellani ("El Evangelio..." pág. ES misional; porque tiene que ser testigo
2S3): "Los talmudistas en tiempo de Cristo, de Cristo en todas sus esferas de acción
a fuerza de disputar, habían llegado (Hillel y se es misionero empezando con el ejem-
y algunos otros) a una conclusión que no plo. Por supuesto que debe colaborar con
está en el Deuteronomio y que Cristo apro- el orden mundano, en cuanto no se oponga
bó grandemente; a saber, que el Mandato a la doctrina de Cristo; al César lo que es
Máximo, en el cual se resumía toda la Ley del César y a Dios lo que es de Dios. Como
de Moisés, es este: "Amarás al Señor tu decía el vasco, hay que aclarar: una cosa
Dios con todo el corazón y con toda tu alma es hablar de defensa propia, de ser "pru-
y con todas tus fuerzas; y (por ese mismo dentes como serpientes", de la santa Indig-
amor) al prójimo como a ti mismo". Esto no nación de Cristo y de las cruzadas. Pero
está escrito así en Moisés, pero ellos habían otra muy distinta (opuesta) y muy peligrosa,
llegado a eso a través de la meditación de atacar la viabilidad de la doctrina del amor
los Profetas. Sólo que era un poco demasia- ai prójimo. Castellani cita a San Agustín,
do grande tanta belleza y la echaban a per- que hace más de 1500 años escribió acerca
der en seguida poniendo en cuestión "¿quién de los últimos tiempos: " . . . y caiga más
es mi prójimo?" Hasta aquí Castellani. Pues bajo aún, a causa de la maldad c r e c i e n t e . . .
bien, Cristo, que vino a perfeccionar la doc- pues de tal manera escaseará la justicia; y
trina de Moisés, nos enseña en la parábola crecerán de tal modo la lascivia y la codicia,
del Samaritano, que prójimo (al que debe- que si algunos entonces fueren buenos, se-
mos amar como a nosotros mismos) es hasta rán presa de los malévolos y atropellados
nuestro enemigo. La misma ¡dea de amor al de todos modos por los i n j u s t o s . . . " ("El
prójimo está clarísímamente marcada en Evangelio..." pág. 390). Así de heroico (y
varios pasajes del Evangelio (San Juan 15, de opuesto al consejo de Anquín) va a ser
12-13, 34-13, 35- etc.). De modo que sostener el asunto. Lean "Este desconcertante Evan-
una posición opuesta sería sencillamente gelio", del P. Quattrochi).
herético. Aun dejando de lado el punto de vista re-
ligioso, para ir al científico, digamos que las
Cristo no dijo que todos nos iban a corres- más modernas corrientes psicológicas (no-
ponder; al contrario, predijo que a los que sística, de Künkel, etc.) sostienen que es
practicaran y predicaran Su doctrina, los por el amor y no por el odio que el hombre
iban a perseguir. Anquín sostiene que "en puede llegar a su madurez y felicidad. Todos
un estado cristiano —o teológico o sobre- los días la vida (y la historia) nos enseña
naturalizado— la idea de projimidad es in- que el odio engendra odio y esta cadena
teligible y hasta cierto punto practicable; sólo puede ser cortada por un acto de per-
pero en un estado político natural es abso- dón, de amor. Cabrían mil disgresiones (se
lutamente imposible que lo sea". Sin embar- me ocurre una histórica: tomar EE. UU. —Ja-
go se practica; quizás por muchos menos de pón desde 40 años hacia acá: odios econó-
los que debieran, y con heroísmo muchas micos— Pearl Harbur — Hiroshima ¿y quién
veces, pero se practica; y para empezar por me cuenta el próximo acto?) pero debo ter-
el principio, Cristo dio Su mandamiento ¡¡a minar. . .
gente que vivía en un estado no-cristianoí
Marcelo Michaud
Justamente para que se cristianice; y con
el mismo fin es que tienen que obedecerle N. de R.: Nimio de Anquín habla en el
los cristianos de hoy. plano político precisivamente; en el plano
Anquín retrocede increíblemente en el ca- moral y religioso vige y vigirá siempre, por
mino recorrido por la moral; dice: "Mientras supuesto, el precepto del amor al prójimo
no se rehaga el cristianismo de su crisis en todo su rigor. No son contradictorios
actual (apunto yo: ¿cómo cuernos se va a estos dos planos: se complementan.
rehacer con cristianos que propician con- Lo mismo notamos para el preclaro Inge-
ductas anticristianas?) no tenemos por qué niero Mario Pozzesi.

46
Del R. P. Antonio Aznar S. J. - Córdoba
II? MISION de 4 meses en LOS MOGOTES Lo que más se precisa por aquellos po-
DE GUASAPAMPA. bres de la zona son las frazadas, los col-
chones y las telas blancas y de cotín para
El paraje hermosísimo y vistoso. De pal- colchones siquiera de paja o chalas.
mitas agrestes. Imagínese sobre una lomita
Son de mucha comprensión aquellas gen-
de palmas un rancho compuesto de tronqui-
tes y de un sentir muy cristianos, a pesar
tos de palmas silvestres. Sólo ajuntadas unas
de que no suelen ver al sacerdote. Les ex-
a otras sin pulirlas y así llenas de resquicios
pliqué en una noche y con pormenores, el
las paredes del rancho. Los techos de pal-
nacimiento del Señor y su pobreza y des-
mas también y por puertas unas ramas de
amparo. La pobreza de la Virgen María quien
espinillos. El frío arreciaba y llega a 12°
sobre las pajas del pesebre puso al Niñito,
bajo cero.
envuelto en unos paños. Aquellas gentes
Parecía que el pintoresco rancho de pal- sencillas, como si vieran en realidad la es-
mas sería albergue de cabritos. Pues vivía cena, empezaron a llorar muy sentidamente.
allí una viejita con 5 chicos y 3 perros. La Me conmovían.
madre se hallaba cosechando maíz en zona
lejana. El padre trabajaba en canteras cerca Recordé lo que decía la Beata de los
de Soto. Ejercicios, Madre Antula, sor Ma. Antonia
Para dormir echaban al suelo un cuero de la Paz: "Que en ios Ejercicios populares
grande y se recostaban todos, entreverando no se debía omitir nunca la meditación del
los perros entre los chicos, para que les Nacimiento del Señor y el acto de presen-
hicieran calor. Sin más que los vestiditos tarles al Niñito en el pesebre con los cantos
puestos, así dormían. Por frazadas o colchas, y su adoración. Pues tenía experimentado,
se cubrían con otro cuero grande. que algunos de duro corazón y de mala
Es para llorar advertir que allí viven aque- vida que se resistían a la conversión, aun-
llas gentes en tales circunstancias y con- que en otras meditaciones se habían mos-
diciones de vida, que aunque todos trabajen, trado duros, en este acto se enternecían
nunca llegan a tener lo suficiente para ante el Niñito pobre entre las pajas y nací-
adquirir un colchoncito, una cama y algunas do por su amor en Belén. Lloraban de ter-
frazadas. Las mujeres cuando se ha de co- nura y se ablandaban a convertirse."
sechar el trigo se van a los campitos de
otras zonas, y lo van alzando. Vuelven en Termino: Preparé a una cieguita leprosa
la fiesta. Se las ve junto a ios burritos car- para el cielo, y hasta otros 9 que viejos y
gados de bolsas de maíz. Ellas encorvadas enfermos no se podían llegar a la capilla.
traen también alguna otra bolsa, sobre sus A los de un rancho en días les llevaba yo
hombros. Los chiquitos quedan al cuidado la comida y ollita preparada. Vivían allí un
de las viejitas. Una de Los Mogotos y muy viejo que preparé confesando y comulgando.
vieja, solía acudir a los ranchitos que la Creo habrá ya fallecido. Otra vieja, su her-
solicitaban. Los atendía con esmero. Mien- mana, con rotura en los huesos y también
tras, los varones grandes se alejan a traba- en cama. Otra hermana viejita, con heridas
jar de camioneros o en canteras. en las piernas. Era la de más edad y la
más animosa. Y otro viejo inválido y rengo,
Ni en desgracia de perder un ojo o una
hermano, quien aún subía sobre caballo y
pierna, brazos, ni la misma vida en los tra-
los atendía.
bajos de canteras y hornos, hay ninguna
indemnización! ¡Y los jornales de 100 pesos! Fueron las comuniones más de 1.600. Creo
Para otros dichosos de 1 5 0 . . . y los que es aquel lugar y zona "la verdadera Iglesia
mucho ganan 250 pesos, aun siendo camio- - de" los pobres de Cristo".
ñeros o el mecánico de las minas de cal.
Entre otras miserias hallé a una cieguita
vieja, que vivía como la de los 5 chicos y Mi nueva dirección es
3 perros. La atendía una vecina. Pero a sus
requerimientos por lo agarrotada que se pa-
saba la noche; por no tener ya qué darle,
Quinta del Niño Dios
le entregué una de mis frazadas de la cama.
Repartí cuanto llevé de ropas y bolsas de Carlos Paz
maíz, polenta, azúcar, trigo, yerba mate, po-
rotos y hasta jabones. Córdoba

Una nación que no conoce su historia


verdadera, no se conoce a sí misma;
y no conociéndose a sí misma, no
puede conocer su camino.

ARTURO SCHOPENHAUER

47
Nuestro amigo Dr. med. José Císera, ex-senador provincial y
eximio universitario nos hace llegar la "Declaración" presente,
que honra al Obispado de Reconquista y que lamentamos no
poder publicar íntegra por falta de espacio. — DIREC.

En este momento económicamente difícil, por categoría social, no hemos comprendido


nosotros SACERDOTES Y OBISPO DE LA el deber que incumbe a los cristianos de
DIOCESIS DE RECONQUISTA sentimos el administrar estos bienes al servicio de los
deber terminante de llamar !a atención de demás. Son también responsables los go-
todos los creyentes y de todos los hombres biernos que se han ido sucediendo, dejando
que creen en el valor de la persona huma- intacta no sólo la actual explotación del
na, .sobre un grupo humano particularmente hombre por el hombre, sino las causas ju-
desfavorecido y amenazado por el hambre. rídicas y económicas que posibilitan esta
Hacemos nuestro el grito de la gente que vergonzosa explotación.
sufre la injusticia, porque no podemos se- NO QUEREMOS TOMAR POSICION CON-
guir predicando el evangelio sin gritar sobre TRA NADIE, sino hacer juntos una revisión
los techos el llanto y la invocación de los seria dé nuestra posición religiosa y huma-
oprimidos: " . . . l a súplica dolorosa de tantos na, condición previa para buscar juntos so-
que viven en condiciones indignas de seres luciones justas y animar con toda la pasión
humanos no puede dejar de afectarnos y a los que pueden encontrar soluciones téc-
dejarnos inactivos. No puede y no debe que- nicas.
dar en cuanto nos sea posible desoída e Somos conscientes de nuestras culpas
i n s a t i s f e c h a . . . " dice Pablo VI. personales y colectivas hacia nuestros her-
Nos referimos particularmente a la pobla- manos afectados por las injusticias sociales,
ción de la zona del monte —conocida por pero la conciencia de nuestra fragilidad no
cuña boscosa— de cuya situación dolorosa puede acallar la proclamación del evangelio
somos testigos. Habiendo sido utilizados que nos ha sido confiado.
para la explotación irracional de una riqueza Confiamos que nuestro llamado doloroso
inmensa, estos hombres se encuentran hoy mueva a todos los hombres, fuera y dentro
sin trabajo en esta zona conscientemente de nuestra diócesis, para que se forme un
empobrecida. Esta difícil situación humana largo, profundo y urgente movimiento de opi-
se agrava al estar rodeada por la ignorancia nión y de acción en la ayuda a nuestros
o por el desprecio y la desconfianza de la hermanos de la zona monte, la zona más
mayoría de los hombres que casi en su to- pobre de la rica provincia de Santa Fe.
talidad se glorían del nombre de cristianos: Que nuestra buena voluntad, nuestra res-
—¿Podemos aceptar salarios mensuales de puesta al llamado de Cristo, renueve la ima-
cuatro o cinco mil pesos? salarios que fre- gen que muchos tienen de la Iglesia. Que
cuentemente son pagados en mercadería sin ella no aparezca desfigurada por nuestros
que el obrero tenga la posibilidad de con- egoísmos sino que se vea como defensora
trolar los precios? del hombre, la Iglesia de los pobres y de
—¿podemos aceptar para estos hombres los que sufren, la auténtica Iglesia de Cristo
que trabajan duramente y que tienen la res- que se entrega a la muerte para lograr la
ponsabilidad de su familia numerosa, una liberación del hombre.
inseguridad laboral provocada para evitar los En la diócesis de Reconquista
aportes legales? Enero de 1967
—¿Podemos aceptar los despidos abusi-
vos y la especulación con su hambre que los - *
obliga a aceptar cualquier condición de
trabajo? Buenos Aires, 10 de Febrero de 1957
—¿Podemos, sin inquietarnos, permitir Estimado Padre Castellani:
como única solución para su subsistencia, Compré "JAUJA". Muy buena. Pero qué
dejarles salir sin orientación, con medios difícil encontrarla, estaba agotada en todas
precarios, en dirección desconocida, para partes. Hay que hacer más números porque
terminar en una villa miseria, con todas las todavía hay personas de buen criterio en
consecuencias sociales conocidas? Buenos Aires.
—¿Pueden estos hombres del monte des- Algo más y si quiere lo puede publicar
cubrir I3 belleza y el valor del trabajo crea- como carta de lector primerizo.
tivo, cuando viven sin lugar fijo, sin vivienda Con respecto a los homenajes a los feti-
digna del hombre, desconociendo las ganan- ches de la tribu y al Te Deum en el aniver-
cias que aportan con el sudor ininterrumpido sario de la muerte de Brown, que no era
de su frente? santo pero era un buen hombre y no se
Nos hemos tranquilizado configurando un había manchado con fechorías, quiero de-
lenguaje de desprecio con juicios superficia- cirle que mucho más absurdo y hasta abo-
les e Injustos, sin tomar conciencia que minable es que un Cura haya cantado el
estas llagas sociales que se echan en cara Te Deum el 3 de Febrero, para celebrar la
a estos hombres son una consecuencia do derrota argentina de Caseros y en homenaje
la condición de vida a la que hemos aludido al traidor Urquiza, que se vendió al Brasil.
arriba y de la cual somos responsables. Par-' Y el Obispo de Mar del Plata bendijo ese
ticularmente responsables somos todos aque- día no sé si la plaza o la jeta de bronce
llos que por cultura, por posición económica, del amante de los patacones brasileros.

48
Y lo más triste es que representantes de dado junto a Rosas, no habría ya ni empe-
las fuerzas armadas, que tienen obligación rador ni Brasil!".
de saber la historia militar argentina y cuya Y Sarmiento, a pesar de ser de la misma
misión es defender la soberanía de la Patria, calaña, le dice a Urquiza (carta de Yungay):
festejen Caseros y canten loas a Urquiza "Se me caía la cara de vergüenza" al escu-
(incluso Onganía, hace unos años cuando char al Enviado del Emperador: "¡Si, los mi-
era comandante en jefe). llones con que hemos tenido que comprarlo
Para terminar, ya sé que Ud. conoce el (a Urquiza) para derrocar a Rosas! Todavía
informe confidencial secretísimo de Honorio después de estar en Buenos Aires quería
Hermeto Carneiro Lecao (está en el libro de que le diese los cien mil duros mensuales,
José María Rosa). mientras oscurecía el brillo de nuestras
Urquiza confiesa su delito y lo que la Ar- armas en Monte Caseros para atribuirse él
gentina perdió por su culpa. Le dice a Hono- solo los honores de la Victoria".
rio en una discusión: "¡Lo cierto es que Con esto es bastante.
Brasil ganó la guerra por mi ayuda! ¡Rosas Lo saluda con todo afecto.
hubiera terminado con el emperador y hasta
con la unidad del Brasil! ¡Si yo hubiera que- Enrique F. Canevari, Pbro.

SABIDURIA POPULAR
Hasta en el vino de misa hay heces; y mosquitas a las veces.
Con el tonto y el perverso, tierra de por medio.
Fraile y judío, nunca buen amigo.
Abad, judío y dona, jamás perdona.
A caso nuevo, consejo nuevo.
Acometa quien quiera, el fuerte espera.
A falta de polla, pan y cebolla.
Agua que no has de beber, déjala correr.
A la iglesia de voluntad, a la guerra de necesidad.
A la lumbre y al fraile, no urgarles.
Al amigo y al caballo, no cansallo.
Al amo, comerle y no verle.
A la mujer casta, Dios le basta.
A la par es negar y tarde dar.
A las diez, deja la calle para quien es.
Al bobo, mudarle el juego.
Al buey por el cuerno y al hombre por el verbo.
Alcanza , quien no se cansa.
Alguno está en el mando que a sí no aprovecha y a otros hace daño.
Al músico viejo le queda el compás.
Por lo más oscuro amanece.
A los sordos, peerlos.
Al que nada tiene, el Rey le hace franco.
Al toro y al loco, de lejos.
Al traidor, traidor y medio.
A mancha grande no hay jabón qUje baste.
Amigo de muchos amigo de ninguno.
Amigo Pedro amigo Juan, más amiga la verdad.
Amigo reconciliado, enemigo redoblado.
Las amistades, descoser mas no romper.
Amor de madre, que lo al es aire.
El amor y la fe, en las obras se vje.
A necesidad no hay ley.
Antes el golpe que el grito.
Antes que acabes no te alabes.
A presurosa demanda despaciosa respuesta.
A Q U E L ES R E Y Q U E N U N C A V E A L R E Y .
¿FIN F I N A L ? S E R V I R A D I O S Y A N A D I E H A C E R M A L .
Estos refranes castellanos y algunos otros que ahora se me olvidan definen
más o menos -mi conducta para con la Clerecía Eclesiástica — la que yo
debería tener — nos escribe un Cura joven de la Capital.

49
SOBRE VILLAS MISERIAS los medios para vivir como corresponde — y
La pavorosa situación de quienes habitan lo merecen— nunca aprenderán a hacerlo.
en las "villas miserias" se va agravando día ¡¡Cuidado con los pretextos esgrimidos por
a día. La solución del problema de la vi- quienes consideran que las masas popula-
vienda para esos hombres se ha convertido res deben continuar arrinconadas en la mi-
en casi ¡nsoluble. Especuladores desalma- seria —miseria integral, de cuerpo y de
dos pretenden encauzar sus resentimientos alma— para que ellos —los otros, los anti-
y sus esperanzas —bien explicables y justi- pueblo— puedan seguir usufructuando de
ficables— hacia una canalización totalitaria privilegios y de canongías amasadas con el
marxista. Trabajadores de la más variada dolor y el sacrificio de auténticos trabaja-
ocupación y procedencia viven en medio de dores". No he sido ni soy peronista pero
penurias físicas y morales que el gobierno debemos reconocer méritos con la misma
observa displicentemente. Estas agrupacio- firmeza con que enrostramos fallas o de-
nes comenzaron por ser instaladas con un fectos."
criterio eminentemente político para servir Las llamadas "villas miserias" son un bal-
a las maquiavélicas elucubraciones de de- dón que debemos levantar urgentemente
magogos que trajeron engañados a sus habi- porque pesa sobre todas las conciencias
tantes, ofreciéndoles condiciones doradas y dignas de los argentinos. El importe de uno
entregándoles frustradas esperanzas. Miles y solo de los negociados que he denunciado
miles de obreros chilenos, paraguayos y bo- a lo largo de mi campaña ciudadana puede
livianos se sumaron a labradores de nuestra contribuir —sustancialmente— a solucionar
tierra —vilmente desarraigados— para haci- este angustioso problema que hace a la con-
narse en pocilgas que son una afrenta para dición humana de gobernantes y de gober-
quienes pregonan sus discursos —mentiro- nados. Roberto Olejaveska
sos— y sus riquezas —malditas—. Algunos RESPONDEMOS: A Tomás de Lara, Prof.
dirigentes de comité se ocuparon de sacar- Su carta-informe pericial sobre JAUJA, acer-
les dividendo político a esas masas sufridas tada en todo: se la agradecemos. Verá en
y no se preocuparon —criminalmente— por este número que los defectos apuntados se
el enaltecimiento de las calidades sustan- subsanaron. Con Ortoneda es Ud. quizás
ciales de cada uno de esos individuos que demasiado severo; quizás: yo no entiendo
—como tal hombre— puede valer tanto co- del asunto. Su fin de non recevoir es aplas-
mo el que más; y mucho más que muchos tante. Se lo comuniqué, y lo tomó con cal-
que gritan su superioridad. A su sombra ma. Dijo iba a contestarle. Hasta ahora,
—lóbrega sombra miserable de ranchos y nones.
de cuevas— se han creado items presupues- A los que nos han escrito plácemes: mu-
tarios que insumen sumas fabulosas, pero chas gracias; nominalmente a Mario Pozzesi
hasta la fecha no se ha eliminado a uno (V. López), Marcelo Michaud (San Isidro),
solo de esos conglomerados; y por lo con- Eduardo Pasquinelli (Temperley — s u s ver-
trario, es fácil comprobar que se los fomen- sos son muy buenos), Oberdán Caletti (La
ta y se los trata de estabilizar; que es como Plata), Antonio Kobi, Vicente Iturriaga Ga-
cuidar una enfermedad a fin de que se con- bancho (Corrientes), Capitán Cotelo (Recon-
vierta en un mal incurable. La promiscuidad quista), A m a n d o González Paz, Guadalupe
y la insalubridad unidas a la miseria y a la Alemán (México City) Capitán Ricardo Cec-
educación escasa —tan precario todo esto chini (Hurlingham), Luis Corbi Rodríguez (Ro-
como la mente humana pueda imaginarlos a sario), Eduardo H. Auguste, Nicolás Pagano
estos factores imponderables— contribuyen (Salta).
a la proliferación de la delincuencia juvenil
—rateros menores— que si bien ya es un ULTIMA HORA
azote contemporáneo, su acción se tornará Señor Director:
más dañina con el transcurso de los años. He leído el juicio que mi artículo "Docen-
Parece un contrasentido pero es lo cierto cia y actividades anexas no docentes mere-
que mientras el gobierno actúa negativa- ció del señor Profesor Tomás de Lara. Le
mente en este problema, son jóvenes volun- agradezco habérmelo hecho conocer.
tarios los que realizan —con sacrificios per- Como considero que los términos en que
sonales— una auténtica obra social en ese se expresa el mencionado juicio no hacen
medio tan dejado de la mano de la acción honor a un docente ni se conforman con el
oficial. Hace días recorrí un barrio de Ezeiza espíritu mesurado y reflexivo de su notable
(Prov. de Buenos Aires) entregado a obreros revista, ruego a Ud., quiera solicitarle al
y empleados en tiempos de Perón —miles señor Lara vista sus apreciaciones con traje
y miles de casas— y mi acompañante me de calle a fin de que puedan ser publicadas.
comentaba: "Cuando entregaron estas casas, Si lo hace me será grato participar en un
a los pocos días sus poseedores vendían las coloquio en torno al Estatuto del Docente
bañaderas e hicieron fuego con las made- (Ley 14.473) y responder las objeciones que
ras de los pisos." Y le respondí: "Eso no hace a mi artículo.
tiene ninguna importancia. Los hijos de quie- Como docente siempre he tomado muy en
nes vendieron o destruyeron esas cosas las serio los deberes del espíritu y por eso no
repusieron o las repondrán; no le quepa la sólo he cultivado la verdad con máxima leal-
menor duda. Lo grave es utilizar ese pre- tad intelectual sino que la he defendido tam-
texto pueril para mantener a seres humanos bién con verdadero valor cívico.
en condiciones que son un cargo infamante Saludo al señor Director con la mayor
para todos nosotros. Si no se les entregan distinción. José María Ortoneda

50
NOTAS SANJUANINAS

COPLA POPULAR E N V I O

Cuando te vas quedo en duelo De sí lo escribió Theresa


Y con ganas de llorar De Jesús, càpite sesto
Cuando muera y vaya al cielo
Si puedo imitarla en essto
Voy a quererte llevar.
Será mi mayor empresa.
Es, Sjegún la m o n j a ésa,
GLOSA A L M O D O A N T I G U O "Camino de Perfección"
Es amor en fin, pasión
Cuando te vas quedo triste Espiritual, es misterio.
Providencia misteriosa
Es gracia, no es juego, es serio,
Rumiando y haciendo glosa
De alguito que me dijiste; Es amor en fin. Y es don.
Algo que es alegre y triste
Que es dolor y es su consuelo (Oída en San Juan de Cuyo, y co-
Que es reposo y es desvelo
A la vez, oh Dulceamarga rregidos algunos versos. Obra de algún
Y aunque sea dulce carga poeta culto del siglo X V I I o X V I I I .
Cuando te vas quedo en duelo. N o hay términos del X V I , y hay una
palabra típica del X V I I I . N o es obra
Si es venturoso el que llora del pueblo, "folklórica", como dicen,
Porque será consolado
no sólo a causa de la cita culta del fi-
Mejor llorar a tu lado
Que reír sin ti, Señora. nal; sino también por la razón general
Si es dichoso aquel que llora de que el pueblo como pueblo no crea
Sus yerros ante un altar poesía buena, sino que retiene, conser-
Para hacerse perdonar va, trasmite, y a lo más adecúa lo bueno
De Dios, conforme está visto,
que le enseñan; y éso constituye el tan
También es conforme a Cristo
Estas ganas de llorar. decantado "folklore"; que no es crea-
ción colectiva, sino recepción inteligen-
La hora vendrá, es mi esperanza, te; lo cual no es poco. Si hoy día la
Y anhelo que crece y crece masa está depravada, como cuentan, es
En que toda pena cese
a caiisa de que no les enseñan; o peor
Y sea el amor bonanza.
Ahora es dura esperanza aún, les enseñan (por la radio, el cine,
Pero un día será vuelo las revistas, los diarios, etc.) cosas ar-
Hierros que me atan al suelo tísticamente depravadas. N o hay más
Y hacen mi cárcel muy mala que ver los "números vivos" de los
Pero un día serán ala
grandes cines. A veces son demasiado
Cuando muera y vaya al cielo.
vivos; y las más son muertos y repo-
N o es cosa, no crean, de juego dridos. L. C.)
Sino de muerte y de maña
Esta sobrehumana hazaña
Que es como hielo con fuego.
N o quiero tener sosiego A ninguno negará Dios la entrada en
Sin ti, prefiero llorar el Reino de los Cielos con mayor jus-
Pero para siempre estar ticia y menor agrado que a Jorge Luis
Contigo, será otra cosa. Borges. Menos mal que tiene tiempo
Por éso dice la glosa todavía.
Voy a quererte llevar.

51
EL CABO LEIVA

(Continuación)

6 _ DORMITORIO
(Dormitorio de fonda en Santa Fe. El Comisario Eleuterio Galván
y Juancito Lauega.)
JUAN.—Así es, Comisario. Eso me encargó el Cabo y ahi está la carta dél.
Usté dirá!
COMISARIO.—¿Cómo estás vos aquí?
JUAN.—Me vine adrede. Y o no creo la polícía lo haya matao a mi padre.
Fue la política.
COMISARIO.—O una venganza personal. T u padre, vos sabés, era medio. . .
vos sabés.
JUAN.—No, Comisario, la política. M i padre hace mucho que n o ronda por
mujeres. N o rondaba, digo. . . M i madre y yo hemos jurao que. .
COMISARIO.—No lo vas a hacer vivir de nuevo con vengarte. L o esencial es
pacificar el pueblo.
JUAN.—Justamente. Y pa eso hay que hayar a los asesino. Usté, don Elute-
rio, si n o los hayan, está perdido.
COMISARIO,—¿Qué sabés vos?
JUAN.—Van a mandar intervención militar de Buenosaire como en tiempo
de Anacleto Gil. Y usté sabe como son los milicotes. T o d o el pueblo
está contra usté por la muerte de Ventura. Los nuestros por lo menos.
Y si ahora triunfa Y r i g o y e n . . .
COMISARIO.— ( M e d i t a b u n d o ) La justicia es u n lío. De puro bien que l'an
organízao, n o hace nada. N o .hace justicia. T e n g o dos proqesos, u n o
en Santa Fe cámara del crimen por asesinato de Eloy V e n t u r a ; otro en
Buenosaire, juez federal por atropello político a la ciudadanía. Y ahora
otro p o r fugitivo de la cárcel, es verdá: Sin comerlo ni beberlo, peligro
ir a la cárcel pa toda la vida. Pero veremos, dijo un ciego. ¿ T e volvés
vos o tenés un propio aquí? ¿Sabés si el Cabo ha hecho la "utopsia" del
cadáver? A q u í no dice.nada. N o sé si entendió mí telegrama cifrado.
JUAN.—Yo sigo a Güenosaíre, J¡efe. Pero aquí está el ñ a t o Soto, que es de
confianza, que vuelve a Puerto T u c á n .
COMISARIO.—Mandameló. Hay una m a n o oculta que quiere reventarme. Hay
intrigas en Güenosaire contra mí. Si va un Comisionado Federal ya no
podemos hacer nada. Crepamos.
JUAN.—No se merme, Jefe. La verdá triunfa siempre. Jefe Político lhemos
de hacer a usté en cuanto triunfe don Hipólito.
COMISARIO.—No, Juancito. Y o no sirvo. N o entiendo de política. Y o no
soy enérgico: soy dulce y violento. Soy medio tristón de carácter. ¿Qué
hace el juez de Paz?
JUAN.—Don Cáiman se mueve como dorao en espinel. El pueblo anda fiero,
Comisario, y parece hay sublevación de piones en La Forestal. Los yan-
kis los tratan como a bestias y ahora la pionada ha conseguido armas.
Gran peligro pa nojotro. Y el pueblo todo dividido. Dicen que van a
bajar al pueblo a saquiar.
COMISARIO.—¿Querés cenar conmigo? N o ; mejor te vas y me mandás al Ñato
Soto. Le vía escribir al Cabo Leiva, pero hay cosas que se deben expli-
car de palabra. . . Ahora mismo me mandás a Soto.
CMutis. Comisario pensativo:)
¿Será mejor que vuelva? ¡Pobre Leiva! ¡En qué apuros!

52
7 — C E M E N T E R I O DE P U E R T O TUCAN
(Noche cerrada. El Cabo, el Doctor y Cleto al lado de la tapia.)
CABO.—Por la puerta no conviene, nos va a sentir Aranda el sepulturero.
CLETO.—¿Tiene permiso pa sacar un muerto, Cabo?
CABO.—Saltá el tapial vos, Cleto.
CLETO.—Ah nó. Salte usté primero. Si me agarra un muerto de las patas,
me muero.
CABO.—Traé, inútil.
(El Cabo hecha por encima de la tapia azada, pala, martillo, for-
mones y destornillador. Escalan la tapia los tres, Cleto en el medio.)
(Un sendero del cementerio; avanzan sigilosamente en fila india
con una linterna sorda.)
CABO.—La tumba de Ventura está al lao el pantión de los Folla, pa aya.
DOCTOR.—¡Guarda, Cabo. Hay luces ayál
CLETO.— (Grita) ¡Cuerpo a tierra to el m u n d o !
(Del lugar en que oscilaba una llamita, parten tiros. El cabo se
alza impetuosamente con la "ñata" (pistola Browning) en la mano
y corre al ataque, seguido de Cleto, rezagado: — Alto ahí, o lo
tumbo , Alto. Dispara. El médico llega el último a la tumba de
Ventura. Otro tiro al otro lado de la tapia. Ruido de golpes. El
Cabo vuelve.)
CABO.—Se me jueron, maldita sea mi suerte. T e n í a n la llave de la puerta.
Tres hombres. Me parece conocí al Jefe.
DOCTOR.—¿Quién fue?
CABO.—Ya le viá decir un día, dotor. El Cura dice que nadie es malo hasta
que lo pillan. ¿Qué es ésto? ¿Así que nos jan ahorrado el trabajo?
/La tumba está cavada, la lápida volteada y el ataúd sacado a
medias. Al lado hay un haz de leña, papeles y un tarro de kerosén.)-
CABO.—Iban a quemar el cadáver, dotor. ¿Para qué? ¡sto sí que es misterioso!
DOCTOR.—Ayude a sacar el cajón y lo veremos.
(Saltan la tapa. Se echan atrás con asco.)
CLETO.—No stá nada balsamao, dotor. Y dijeron que la Guaraza lo había
balsamao. ¡ P u a h !
(El Doctor se inclina con la linterna en la diestra y un pañuelo
en las narices. Un grito.)
DOCTOR.—Mire, Cabo. Altroque balazo en la espalda. En otra parte. Mire.
(Acción.)
CABO.—-Ya veo. Pero no entiendo nada, dotor. T a m b i é n hay otra herida chi-
quita en el pecho. Pero ¡esta otra es enorme.
DOCTOR.—Lo mismo que Lavega, Cabo. ¿No ve? T a p á eso. V a m o s a hacer
la autosia en la 'casilla de Policarpo Acosta el mielero, aquí al lao. ¡Qué
autosia: no es necesario! Pero sí un acta con dos testigos. ¡Esto es re-
velador, Cabo! Esto absuelve a la policía. ¡Libre el Comisario Galván !
CABO.—Mañana volvamos, dotor. Y usté le-toma fotos y luego lo enterramos.
de nuevo. Achacaremos el desentierro a los ladrones.
CLETO.—Ojo, Cabo, que la gente dice que el Cura les roba los dientes de oro
a los muertos. . .
CABO.—No sías bruto, ¿querés? Levantá de aquella manija, so inútil.
(En marcha los tres con el ataúd.)
CLETO.—Con el susto que m ' h i llevao toavía lo tratan a u n o de inútil.
Usté, mí Cabo, sos más inútil que teta de hombre.
CABO.—Y vos sos más inútil que leña 'ombú.
CLETO.—Y usté, mi Cabo, sos más inútil que cáscara huevo.
CABO.—Y vos, Cleto, sos más i n ú t i l . . . te callás, querés, recluto insubordi-
nao. ¡De frente, mar! U n o , dos. . .

53
8 — CALLE
(Calle de pueblo. Don Gaspar Cáaman que va al Juzgado y detrás
el Lalo Vilaseca que lo alcanza y se le pone a la par.)
LALO.—Don Cáiman, ya que no quiere recibirme en su casa, la calle es de
todos. Esto no puede seguir.
(Mirada torva del Juez, silencio, y apretar paso cruzándose.)
LALO.—Don Cáiman de aquí no pasa si no me escucha u n a palabra.
(Mano a la cintura el Juez. Revólver bajo el saco.)
LALO.—Yo n o tengo arma, D o n Cáiman. ¿ T a n t o miedo me tiene? ¿O tiene
miedo a la verdá?
J U E Z . — Y o me llamo don Gaspar Káaman.
LALO.—Y a mí me dicen Cimarrón. Hace mal en oponerse a nuestro casa-
miento, porque ella me quiere. Usté se porta mal con ella. Ella lo res-
peta a usté, hasta demasiado lo respeta.
. . J U E Z . — N o es pa vos ese bocao.
LALO.—Si n o es pamí n o ¡es pa nadie.
J U E Z , — N o tenés onde cairte muerto. Sos un vago, más inútil que leña ombú.
L A L O — A h o r a ya no, don C a i m a n . . . D o n Káaman, disculpe. N o hayaba
quién m'empleara. M i padre es m u y severo.
J U E Z . — M e j o r ni hablar ¿Pa qué? Pa vos no va a ser. M ' h i j a es m'hija.
LALO.—Una vez negó usté que fuera su hija. Es su hija cuando k conviene.
N o sabe usté como llora ella de que usté la trata ansí, y lo que dice
usté de la m a d r e . . . lo que anda hablando usté al pedo.
(El juez lleva de nuevo ta mano al revólver, mira a otro lado y
prosigue su camino. El joven palidece al desaire, después se contiene
y lo sigue.)
, LALO.—Es 1' última vez que lo hablo, don Gaspar. Si no se aviene a ra-
zones. . .
( Silencio )
LALO.—¿Pa quién la guarda? ¿Pa ese pitucón de Carlitos Nostramo? ¿Porque
tiene plata?. . .
¿ C ó m o hicieron la plata los Nostramo?
(Llegan al Juzgado.)
LALO.—Juez don Gaspar, la injusticia se paga. Se saben muchas cosas de usté.
Ser m u y rico n o vale pa todo. Y ahora, lo que triunfe don H i p ó l i t o . . .
(El otro entra sin hacer caso.)
(Dentro del Juzgado, el Secretario Cuqui y un chino de chiripá,
melena,, facón y revólver Colt.)
J U E Z — M í r á vos, chino Chaves, si eres inútil. Me ha andao siguiendo y des-
acatando el Cimarrón Vilaseca hasta aquí. M a n d a o por esa atrevida de
Mirabel.
CHAVEZ.—¡Lo busqué en su casa, don Gaspar! H o y salió usté antes de las 9 !
J U E Z . — (Furioso) ¿Qué clase de guardaspa'lda sos?
CHAVEZ.—Allá enfrente anda recostao en el paráíso. ¿Qué quedrá?
(Otean todos.)
JUEZ.—Mirá, vos, Chaves. Salí por allá atrás y espantále el caballo, que lo
tiene atao al poste de la plaza. Metele un tiro en la verija, si viene a
m a n o . . N o hay Comisario. El Cabo es un infeliz. . . Y o soy el Jefe
aquí.
(Entran dos pleiteantes. . que dicen a la vez:)
j<? y 2 9 —¡Vea, señor Juez, aquí le vengo a pedir justicia contra éste!
JUEZ.—¡Ajuera los dos! Saquemelos afuera, Secretario, que entoavía no he
atendido el despacho.

54
(Reposa el revólver sobre la mesa. Revuelve papeles; hace cuentas
con un lápiz, mira al trasluz un pliego. Le pasa dos papeles al
Cuqui.)
JUEZ.—El edicto para los herederos del inglés. . . Fijás "uno en el almacén
Conté y le llevás ¡si otro al diario "Prensa Libre". Le decías al gallego
Segovia que más de 7 pesos no le vía pagar y que dé las gracias. A mí
no me va a chantajear.
CUQUI.—Está mal el apellido del inglés, Juez, y el nombre n o es Roberto
sino Herbert.
JUEZ.-—No t¡e metás. Esperá. Hay tres embargos. Guay de que no me los
ejecutes, y te dejés dar una paliza como la otra vez, un jastial como vos,
¡que vergüenza debías de tener!
(Los dos pleiteantes de nuevo.)
PLEIT. 1.—Este, señor Juez, míe suelta el perro cada noche, que me mata las
gayinas y me come los güevos.
PLEIT. 2.—Este, señor Juez, me robó ocho metros de mi güerta cuando alam-
bró la suya.
PLEIT. 1.—Es mentira. Primero vos me estafaste una carrada'leña, desgraciado!
PLEIT. 2 . — M á s desgraciao será tu madre. C o n v i n i m o j el precio en 5, hay
testigo; y después saliste con 6.
JUEZ.—Ustedes son los dos que pusieron de sentencia al doctor Lanfranca,
como si no hubiera autoridad legítima en este pueblo!
PLEIT. 1.—Así es, señor Juez, pero este no acató.
J U E Z . — A h o r a me dejan la sala, cornudos; y se van al Cura, o al Cabo
Leiva, que les haga otra sentencia. ¡ O r z a ! ¡Fuera de aquí!
PLEIT. 2.—Señor Juez., el Cabo Leiva mesmo m.e m a n d ó aquí.
JUEZ.—Le dicen a ese Cabo de escoba que se vaya a la p u n t a del ñapindá
verde, y ustedes también. ¡Orza!
(Mutis)
J U E Z . — E s t e es u n p u e b l o de c o r n u d o s .
(Paseando concitado por la sala. Entran Mirabel y Misia Rosa, que
trae una gran fuente en las manos.)
JUEZ.—Te d i j e que n o m e g u s t a verte a q u í ¡en h o r a s de oficina.
M. R O S . — A n i n g u n a h o r a le gusta a usté ver a su h i j a . (Risotada)
J U E Z . — V o s te callás, negra mandinga.
M. ROS.-1-—¿Se ofende a las personas decentes cuando nos traen osequios? L i n d ó
n o más. T e lo'ecía yo, Nena, te ló'ecía yo. V á m o n o s .
(Mirabel tomando la fuente de . .manos de la otra.)
MIRABEL.—Es arroz con leche, tata. L o hice yo. H o y es su cumpleaños, si
recuerda. Era pa eso no más, no molestamos más, tata.
(El otro sigue paseando sin •atender. Mirabel posa la fuente sobre
la mesa.)
MIS R.—Hace m u y mal don Gaspar, de oponerse al casamiento, si me da li-
lencia pa hablar! (Risada)
JUEZ.—¿Quién te da a vos vela en este entierro?
MARIBEL.—Es que es verdá, papá. T í a mama tiene razón. Y o quiero respetar
su voluntad, pero. . .
JUEZ.—Sos demasiado joven vos pa casarte. Además ese m o z o no te conviene
por ningún lao. Además. . .
MIS. R.—Además Usté lo odia de balde al padre, a la madre, a toa la familia,
y a medio pueblo, si v a m o j a eso, menos al mariquita de Carlito Nos-
tramo, que anda de vaca con usté en los negocios.
JUEZ.—Vieja lengua larga, quién te mete a vos. . .

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MIS. R . — E n los n e g o c i o s sucios. M e m e t e que crié a este clavel del aire desde
l o s 1 2 a ñ o s y usté la e c h ó de su casa. Y m e m e t e q u ' e y o se q u i e r e n , y
al a m o r nadie resiste. Y me mete que e s t o y cansada de verla y o r a r y
r e z a r p o r usté, q u e si se casan y o m e caso t a m b i é n .
J U E Z . — (Sarcàstico.) Ja, ja! A la vejez, viruelas.
MIS. R . — ¿ Y no? ¿Qué se ha pensao Usté? T e n g o 31 años.
J U E Z . — T r e i n t i u n o en cada pata, no digo que no. ¿Con quién?
(Los dos se van encrespando.)
MIRABEL.—Vámonos, T i a m a m a . N o pélie. Y a está.
MIS. R.—¿'Ah no? A mí nadie me ofende, ¿sabe?. ¿Sabe usté, cara de chancho
colorao? Con el Cabo me via casar, que ahora no me consiente por andar
medio candilao con ésta, porque Leiva es m u y namoradizo, que antes
cuand'era puestero me arrastró el ala, y ahora qu'es autorídá se ha subi-
do a mayores, pero yo lo voy a bajar del parral. ¿Y, no? Y yo a usté
le digo que usté ami no me falta, porque soy de una familia norteameri-
cana! Y una cosita sé que a usté no le gusta oír, referente a la viuda
Conte, y menos le va a gustar si se propala, porque la pobre Engracia
nunca ha sabido defenderse, es una enfelí, pero y o . . .
MIRABEL.—Vamos tiamama, vamos tiamama, vamos tiamama.
(Tirándole de la manga.)
(Arranque de furor del juez. Se va a la jamona y de un empujón
la hace trastabillar. Después la agarra por un brazo y la echa fuera.)
JUEZ.—Fuera de a q u í , m o n d o n g o con dos p a t a s , y que n o te v u e l v a a ver
la geta !
(Camina lento y se sienta al escritorio. Se abre la puerta y aparece
medio cuerpo Misia Rosa sujetada por Mirabel; la misia le saca la
lengua al otro y le dice con fría saña.)'
MIS. R.—Engreído, usurero, c h u p a s a n g r e .
(Mutis. El juez hace caer un tintero de un gesto de ira.)

Dice Alfredo N. Whitehead: "La educación debe ser religiosa". Y se


pregunta de inmediato: "¿Qué es la educación religiosa?" Educación re-
ligiosa es la que inculca el deber y la reverencia. Reverencia al Creador
del mundo y de la vida. Si la política educativa debe incluir los funda-
mentos políticos; sociales y económicos de la legislación y organización
escolar, es lógico que tomemos en cuenta los factores fundamentales de
la formación de nuestro pueblo. De España heredamos el idioma y la
religión, que conservamos afortunadamente.

Por lo dicho hasta ahora podemos sentar dos principios de política


educativa: 1°) No enseñar sino lo elemental, pero enseñarlo a fondo. Esto
quiere decir inculcar pocas ideas, pero importantes y susceptibles de ser
combinadas entre sí y aplicables a la vida real. Nada de ideas inertes. Hay
que inculcar ideas fuerza. 2°) Enseñar la Ley de Dios, que en Diez Man-
damientos supera los millares de leyes dictadas por los hombres. Dice
Martín Fierro - "Debe el gaucho tener casa, escuela, iglesia y derechos".

En el Congreso de Tucumán de 1816, al promulgarse el reglamento


provisorio para la dirección y administración del Estado, se estableció
como principio fundamental: "La religión católica, apostólica, romana, es
la religión santa del Estado; la infracción a este artículo será mirada como
una violación a las leyes fundamentales del p a í s . . . "
(OSCAR IVANISSEVICH — Bases para una política educacional. Con-
ferencia en CISA - 22-XI-6).

56
Publicamos para Ud. que
busca informarse con actualidad. .•

COLECCION TRIBUNA

POLITICA NACIONALISMO ESTADO


de Juan Carlos Cornejo Linares
prólogo de Leonardo Castellani

CAPITULO V CAPITULO VI
El Nacionalismo Argentino
La Constitución Real
El Justicialismo
Los Factores de Poder Justicia Social
La Iglesia La Independencia Económica
Las Fuerzas Armadas La Soberanía Política
Las Asociaciones Profesionales Revolución y Contrarrevolución
La Alta Finanza Internacional
La Masonería EPILOGO PARA ARGENTINOS
El Comunismo en Argentina La Ilegitimidad del Régimen
El Sionismo La Revolución Argentina

CRUZ Y FIERRO EDITORES


Perú 9 6 4 - Buenos Aires - (R. A.)

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