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4. Trabajar con los padres es una decisión sobre una intervención clínica, una toma de
posición y uno de los pilares que fundamentan las intervenciones. Es impensable el
trabajo sin los padres, pues los niños se hallan en un momento de relación muy
estrecha con éstos y les es necesaria su asistencia: “necesita de un adulto
experimentado que advierta sus acciones y vaya en su auxilio” 1. Serán los padres
quienes en sus “decires” nombrarán a este niño y revelarán el lugar que éste ocupa
en la estructura parental y cómo se halla inscripto en el linaje familiar. En este
sentido, acordamos con E. Coriat al considerar que el niño no es sin sus padres y
que como terapeutas, como psicopedagogas, tenemos que dirigirnos a ellos para que
nos lo ‘muestren’.
5. Tomando una definición de la Lic. María Cristina Rojas, la familia, aparece como
“la red vincular a la que el ser humano pertenece de modo preferencial durante la
construcción de su subjetividad, lo cual da a la integración en lo familiar un sentido
distintivo respecto de otras pertenencias (…). El sujeto humano se conforma a partir
de vínculos primordiales, a la vez sujetos y vínculos se enlazan en la red
sociocultural2”.
1
Rozental Alicia: Juego, historia de chicos. Noveduc. Buenos Aires. 2005.
2
María Cristina Rojas. “Trastornos tempranos: una lectura familiar”.
En función de esto es que pensamos que la problemática que el niño presenta se
sostendría de modo especial en los estos vínculos familiares.
6. ¿Por qué trabajar con los padres?
7. Pensar acerca del por qué trabajar con los padres nos lleva a pensar acerca de la
concepción del niño que cada una de nosotras sustenta, ya que esta idea es la que va
a sustentar nuestra intervención con el niño y con los padres.
Hoy pensar en el niño nos lleva a pensarlo como un sujeto con necesidades
específicas y con un desarrollo peculiar, como un sujeto en vías de constitución y
con una autonomía progresiva, con derechos legales y necesidades afectivas es un
fenómeno casi actual.
En este momento, se puede puntualizar que la modalidad de aprendizaje del niño,
entendida como su manera personal de acercarse a los objetos de conocimiento, su
estilo personal de aprender, de significar las experiencias, sensaciones,
percepciones, emociones y pensamientos, responde a una matriz.
Esta matriz se construye desde la propia historia, una historia que se teje desde el
sujeto y el grupo familiar, a partir de experiencias reales y de la significación que
estas han tenido para el sujeto y sus padres. En la forma en que se llevan a cabo
estos procesos, es que va a tener una atribución simbólica, personal.
El trabajo con los padres, la apertura de un espacio para escuchar lo que ellos tienen
que decir respecto de su hijo, se funda en una necesidad lógica, en tanto los padres
son antecedentes para los niños.
Sabemos también que el niño se encuentra transitando un proceso de
constitución subjetiva, es decir, que ésta no está determinada, y será sobre las
funciones parentales en donde el niño se “apoya” para advenir como sujeto, para
transitar el camino de la constitución subjetiva.3
3
Fernández, Silvia. Curso Htal. Piñero. Bs. As. 2003.
padres; es a esos otros a los que los niños dirigen sus preguntas y los consideran
fuente de todo saber.
9. Erik Porge dirá que “es una transferencia indirecta que aspira a sostener la
transferencia sobre la persona que de entrada se reveló inepta para sostenerla. Es
además una transferencia indirecta contemporánea al establecimiento de un lazo
de transferencia sobre un progenitor en el mismo momento en que este último
desfallece”4.
Es decir, el terapeuta viene a tomar la posta de la transferencia; transferencia que,
“cuando las cosas van bien”, se encuentra dirigida a las figuras parentales.
10. Es por la vertiente del saber que lo padres nos suponen acera de los niños que nos
consultan en el límite de su función cuando no pueden sostener la tramitación de
cierta situación. De este modo nos otorgan cierto saber respecto de sus hijos.
Alicia Rozental, dice: “Los padres consultan cuando no “saben” qué hacer, o en el
límite de su saber al no poder sostener la función de Sujeto Supuesto Saber a la que
están convocados por los hijos”. Entonces, el profesional podría “ocupar ese lugar
cuando los padres no pueden ofrecerlo por algún motivo… ocupar
temporariamente ese lugar que los padres no pueden sostener para restablecer la
transferencia en los puntos en que ésta no puede ser soportada”.5 Es decir, cuando
surge en los padres cierta vacilación acerca de su función y no pueden sostener la
función de SSS que le atribuyen sus hijos, es entonces que realizan una consulta. Es
así como el profesional es convocado a asumir, temporalmente, esa posición.
12. Es decir, los padres van a consultar cuando momentáneamente han caído de esta
función esencial de soporte del niño. Entender esto da cierta direccionalidad a las
entrevistas con los padres dado que éstas tendrán como función principal, entre
otras, la de devolver a los padres a su función.
Podría pensarse el trabajo con padres como una supervisión de la función paterna,
que se superpone con algún proceso de constitución del niño.
15. Pensando en el “para qué” del trabajo con padres en la clínica con niños. Nos
encontramos con una función primordial, mínima e indispensable, que tiene que ver
con garantizar la continuidad del tratamiento para el niño, lo cual no es tarea
fácil. Si descuidamos la ya mencionada dependencia real de los niños con los
padres, nos podemos quedar “sin niño en la clínica psicopedagógica con niños”.
Esta función está relacionada con la transferencia que el psicopedagogo establezca
con los padres.
Muy frecuentemente nos encontramos en la consulta psicopedagógica con niños que
han sido derivados por la escuela, cuyos padres no se han formulado ninguna
pregunta, acercándose porque son mandados, sin haber asumido una demanda, en
este caso puede peligrar la posibilidad de un espacio para el niño, por lo tanto,
construir la demanda será el primer paso.
16. Se trata de NO OFRECER respuestas de antemano que cierren sentido, SINO QUE
NUESTRAS INTERVENCIONES APUNTARÁN A PONER EN DUDA
AQUELLO QUE APARECE COMO CERTEZAo respuesta única, apuntará a que
el discurso se despliegue.
17. Entonces a medida que los padres comiencen a desplegar su discurso, es en el decir
de los padres donde podremos ubicar el posicionamiento de cada uno de ellos en
relación al niño. El ejercicio de sus funciones está atravesado por las historias
familiares respectivas, por la relación que cada uno de los padres ha tenido con sus
propios padres y por la posibilidad más o menos lograda de haber abandonado
psíquicamente el posicionamiento simbólico de hijos a fin de donar ese espacio a
sus hijos. Es decir que cuando los padres vienen a hablar de sus hijos se jugarán en
ellos significaciones de su propia historia, de la relación con sus padres, que se
entrecruzarán a la hora de posicionarse ellos como padres. Por lo tanto, el lugar
que le otorgarán al niño no dependerá de un acto voluntario y conciente, no será
ajeno a su propia subjetividad.
Por otro lado, escuchar el discurso de los padres nos permitirá ubicar aquellos
significantes que representen al niño. Será también a partir de allí, que podemos
leer cuáles de éstos son retomados en las producciones simbólicas del niño; qué
nuevas significaciones cobran en sesión, y a la vez, nos servirán de texto para
otorgar una direccionalidad a nuestras intervenciones.
18. Volviendo al caso de Yamila
En una entrevista la mamá decía: “yo no sé ir a la escuela”.
Cuándo se le pregunta acerca de esto relaciona que no sabe ir porque no tiene ese
“gen”, “mi mamá no iba a la escuela cuando yo era chica”
Y refiere que no podría seguirle el hilo a la conversación con la maestra si ésta le
pregunta acerca de cosas escolares. Es por esto que dice: “yo creo que sería mejor que
vaya mi hija mayor porque es más estudiada”.
19. Además será fundamental movilizar ciertas cuestiones para permitir y facilitar al
niño un proceso en el que se ve impedido: aprender. Al intervenir con los padres
apostamos a que dichas intervenciones resuenen en el niño, movilizando ciertas
creencias, pareceres y modos de ver las cosas para que así el aprendizaje del niño
tenga lugar.
21. Si bien, como decíamos, no hay un “cómo” que pueda ser dicho de antemano, si
podemos decir que lo hacemos a través del discurso, ‘operamos’, hacemos una
operación sobre su discurso. Escuchamos, estamos frente a silencios y decires,
formulamos preguntas, producimos algunos cortes, señalamos paradojas,
malentendidos, repeticiones, contradicciones. Intentamos desprender lo dicho, es
decir demarcamos un decir en el habla cuyo fin será que quien habla pueda
interrogarse sobre lo que acaba de enunciar. Esto con el objetivo de que se puedan
movilizar cuestiones que aparecen cristalizadas respecto al niño.
El dejar abiertas preguntas e inquietudes posibilita un camino reflexivo que una
respuesta rápida inevitablemente sustentada en una ideología de una determinada
cultura obturaría. Si pensamos las entrevistas como un lugar sólo para recavar
datos, o situación que sólo nos permite establecer una alianza para sostener el
tratamiento del niño, estaremos operando con una teoría de la historia como
acumulativa, con una idea de la constitución psíquica que nos lleva a buscar ‘hechos
traumáticos’; estaremos suponiendo que hay un registro objetivo de sucesos y por
consiguiente, que los padres funcionan a pura conciencia. Pero si pensamos que la
historia es una construcción retrospectiva de los acontecimientos pasados, que el
psiquismo se va estructurando y signando por vivencias que dejan huellas que se
enlazan y reorganizan, que son modelos de identificación e imponen normas e
ideales, que cuando padre y madre hablan, preguntan, piden, se quejan están a su
vez marcados por una cadena de repeticiones, tendremos que pensar que los padres
también son consultantes y tendremos que escucharlos y trabajar con ellos
clínicamente.
El lugar que ofrecemos a los padres en el transcurso de la cura, básicamente está
destinado a trabajar el lugar que ellos le ofrecen y le otorgan a su hijo.
Bruner, ampliando la idea original de Vigotsky (ZDP) emplea esta noción de “seaffolding”
(andamiaje) para referirse justamente a la estructuración de las tareas que hacen los adultos
buscando facilitar el aprendizaje de los más jóvenes. Aprendizaje que exige de la
comprensión por parte de quien aprende y no solo la mera realización de acciones.
Se trata de una analogía con los andamios empleados en la construcción, pues, al igual que
estos tiene cinco funciones esenciales: brindar apoyo, servir como herramienta, ampliar el
alcance del sujeto que de otro modo serían imposible , y usarse selectivamente ciando sea
necesario.
Bruner propone además la idea de formatos como ejemplos de andamios, para aquellas
situaciones de la vida diaria en las que el adulto repite con el niño la misma rutina una y
otra vez: preparación de la comida, juegos, baño, lectura de libros, y aquí podríamos
agregar las tareas escolares o el dialogar sobre temas referidos a la escolaridad; donde
gracias a la rutina misma el niño puede reducir el grado de variabilidad de su conducta,
colaborando de forma cada vez más eficaz en la tarea.
Otro aporte y aplicación es la enseñanza recíproca, que consiste en el diálogo del maestro y
un pequeño grupo de alumnos. Al principio el maestro modela las actividades; después, él y
los estudiantes se turnan el puesto de profesor. Así, estos aprenden a formular preguntas en
clase de comprensión de la lectura, la secuencia educativa podría consistir en el
modelamiento del maestro de una estrategia para plantear preguntas que incluya verificar el
nivel personal de comprensión. Desde el punto de vista de las doctrinas de Vigotsky, la
enseñanza recíproca insiste en los intercambios sociales y el andamiaje, mientras los
estudiantes adquieren las habilidades.
La colaboración entre compañeros que refleja la idea de la actividad colectiva. Cuando los
compañeros trabajan juntos es posible utilizar en forma pedagógica las interacciones
sociales compartidas.
Los aprendices se mueven en una ZDP puesto que, a menudo se ocupan de tareas que
rebasan sus capacidades, al trabajar con los versados estos novatos adquieren un
conocimiento compartido de proceso importantes y lo integran a lo que ya saben. Así, ésta
pasantía es una forma de constructivismo dialéctico que depende en gran medida de los
intercambios sociales.
Nos resultaron interesantes los aportes de la lic. Schlemenson, quien reflexionando acerca
de nuestra temática de investigación, refiere que muchos padres y maestros creen que los
niños desde pequeños se organizan solos y se esfuerzan espontáneamente por completar sus
conocimientos. Esto ocurre con poca frecuencia. En general, durante los primeros años de
cada ciclo, los padres deben acompañar los aprendizajes de los niños y atender su estudio,
el cumplimento de su tarea y la integración al grupo de pares.
Preocuparse durante la escolaridad por los cuadernos, las tareas de los niños y su relación
con el grupo de pares, compromete aspectos de filiación semejantes a los que los padres
ejercieron durante los primeros años en la satisfacción de las necesidades de alimentación,
protección y abrigo.
La formulación expresa de las expectativas que los padres y maestros tienen sobre el
desempeño deseado de los niños en la escuela, les permite a éstos conocer los ideales de los
adultos e intentar ordenarse en relación con los mismos.
Cuando los maestros logran enunciar sus expectativas acerca del comportamiento del niño
en la escuela, ofrecen un marco regulador en torno al cual se espera que el niño organice
sus proyectos.
La función de ser padres y de criar los implica con la propia historia, con las propias
posibilidades de enseñar y de aprender, la propia historia de aprendizajes, con los propios
recursos. Según como todo esto sea registrado, se vivirá cada momento de la crianza.
La actitud de los padres frente a los fracasos o frente a los logros en el aprendizaje de los
hijos involucra la propia visión del mundo. Para muchas familias hay una relación directa
entre la buena crianza y la rapidez con que el niño alcanza los diferentes logros en el
aprendizaje; esto se corresponde con un paradigma, un modelo sociocultural que “venera el
éxito como equivalente a la felicidad”7. Se pierde la posibilidad de disfrutar de los pasos
previos de búsqueda, experimentación, donde todavía hay torpeza, caídas. Según la actitud
que los padres tengan frente a esto los niños lo vivirán como verdaderos procesos naturales
de crecimiento y aprendizaje o como retrasos.
Sabemos que el niño construye su propia historia a partir de la palabra de los padres, de la
figura paterna y materna. Funda sus raíces, construye su identidad. De los que se trata, en
todo caso es de comprender y de acompañar desde los primeros aprendizajes, desde la
construcción de las matrices para los aprendizajes futuros.
Desde bebés los niños necesitan que se sostengan rutinas que les permitan tener tiempos
diferenciados ya sea para jugar, dormir, para estar con los padres y para cada acto de la
vida. Poder poner en palabras esto y anticipar los actos tranquiliza al niño y le permite
poder anticipar qué es lo que viene, la secuencia de actividades de cada día. La repetición
de la escena o de alguna ceremonia. (Ej. Juego antes de dormir) le da más confianza y
seguridad al niño. No poder mantener los horarios y hábitos de manera regular puede
generar alteraciones y manifestarse en alteraciones del sueño.
Estos hábitos y rutinas tienen que ser mantenidos con cierta regularidad, requiriéndose de
constancia y coherencia. Modificar un hábito instalado es más difícil que instalarlo desde el
principio.
Ahora nos preguntamos por la particularidad del aprendizaje y las dificultades en el mismo
en este contexto espacio temporal.
Para que nuevas legalidades tengan cabida y adquieran vigencia para el niño, para que sea
posible la apropiación de esa oferta cultural, tiene que haber operado alguna otra legalidad,
en algún otro orden, siendo necesario que estén dadas ciertas cuestiones relacionadas con la
constitución del psiquismo, que aquí no ampliaremos.
Siguiendo a S. Freud entendemos que la dificultad de la infancia está en que el niño tendrá
que apropiarse en un breve lapso de tiempo de los resultados del desarrollo cultural que se
extendió a lo largo de milenios, además del dominio de las pulsiones y la adaptación social.
Para el niño el pasaje a la escolaridad primaria implica el pasaje del mundo familiar al
extrafamiliar, que exige nuevas formas de adaptación a nuevas formas sociales, entrando
otros actores en escena.
Se pasa a un mundo diferente que le exige abandonar las relaciones y los lazos tempranos
como exclusivos para dar lugar a lo nuevo. Hasta ese momento el lugar de las certezas y de
la totalidad de lo existente estaba representado por aquello que los otros significativos
deseaban, pensaban y realizaban y que era para él una representación global de todo lo
factible de ser conocido, realizado y fantaseado.
Se encontrará con otros, maestros y compañeros, pares, cuyos pensamientos y acciones son
diferentes a los familiares y conocidos. Se reconocen diferencias, se encuentran similitudes
y se incorpora la duda.
La escuela así ofrece la oportunidad del ingreso a lo regulado, a un espacio de terceridad, el
de los otros, el de las informaciones y los conocimientos.
Su nuevo lugar de alumno es un lugar de igual entre iguales, posición de alumno que
presupone algunas cuestiones como: deseos de aprender, posibilidad de manejarse con
cierta autonomía, cuidado y responsabilidad por nuevos objetos que no son de su propiedad
(mochila, cuaderno), aceptación y adecuación a la normativa escolar dentro y fuera del
aula, distinguiendo que hay momentos diferenciados para jugar, aprender, preguntar y
guardar silencio. Posición que además exige haber dado un lugar a la dimensión de la
terceridad, donde las relaciones duales propias de un momento constitutivo anterior tienen
que ir cediendo para permitir el despliegue de nuevas formas de relacionarse con otros.
El tiempo y espacio también cobra una nueva configuración: horas de clase separadas del
recreo, patios con funciones distintas, lugares por donde no se puede pasar, otros grados.
Es así que todo queda atravesado por una nueva legalidad institucional.
Es importante destacar que la relación con los padres constituye un desafío particular para
la escuela. El Diseño Curricular del Gobierno de la Ciudad de Bs. As. expresa que “… es
importante que la escuela explicite qué espera y necesita de las familias, y ponga al alcance
de ellos ideas sobre las formas en que pueden apoyar el aprendizaje de los chicos, tanto en
relación con las tareas escolares como en el desarrollo de sus actividades cotidianas en la
casa, en la calle y en el barrio”8.
8
Diseño Curricular del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. 2004.
9
http://www.definicion.org/modalidad
Si bien es cierto que nos encontramos con gran cantidad de investigaciones que aluden a la
importancia del acompañamiento y sostén de los padres en tanto favorecedores del
aprendizaje escolar del niño, notamos que la mayoría de ellas están focalizadas en la
vertiente positiva del tema, es decir, en el acompañamiento de los padres en los niños con
buen desempeño escolar.
A esto podemos agregar otro estudio titulado “Bagaje académico de los padres y estudios
de los hijos”, de Arleen Toro, donde se plantea que el grado de involucramiento de los
padres con la educación de sus hijos depende entre otras cosas de la familiaridad que se
posea con el sistema escolar, la diferencia o cercanía con las normas culturales propias del
contexto escolar. También se expone que mientras más preparados estén los padres
académicamente, más oportunidad tienen sus hijos de asistir a instituciones elegidas por
ellos, de carácter privado, en este caso.
Acá nos parece importante puntualizar a qué nos referimos con la familiaridad de los padres
con el sistema escolar. Incluimos el haber atravesado por las distintas instancias del sistema
educativo como alumno, su valor dado al estudio, al aprendizaje, a la enseñanza.
Por otro lado, también relacionan la educación que poseen los padres y el estado
ocupacional de los mismos con los resultados educativos de los hijos. Concluyendo que los
estudiantes con padres profesionales tienen más oportunidades de reforzar su aprendizaje
en el hogar, porque cuentan con la ayuda de sus padres10.
El significado original del término proviene del contexto militar. Entre los griegos, la
estrategia era la actividad del estratega, es decir, del general del ejército. El estratega
proyectaba, ordenaba y orientaba las operaciones militares y se esperaba que lo hiciese con
la habilidad suficiente como para llevar a sus tropas a cumplir sus objetivos.
10
Referencia. Departamento de Educación (2006, September). Issue School and Parent Interaction by
Household Language and Poverty Status.IES National Center.for Education Statistic.
11
Diccionario Pequeño Larrousse ilustrado.
Acción se define como el “efecto de hacer. Operación o impresión de cualquier agente en el
paciente. Posibilidad de hacer alguna cosa, y especialmente de acometer o defenderse”.12.
En tanto que recurso es la “acción de recurrir a una persona o cosa” 13. Se puede tomar de la
economía la noción de recursos como el conjunto de capacidades humanas, elementos
naturales y bienes de capital. Los recursos humanos son el conjunto de aptitudes y
conocimientos que poseen las personas14.
12
Diccionario Pequeño Larrousse ilustrado. Pág. 11.
13
Diccionario Pequeño Larrousse ilustrado. Pág. 878.
14
http://www.econlink.com.ar/definicion/recursos.shtml
Instrumento
Variables de contexto
Composición familiar:
-¿Cómo está compuesta la familia del niño?
-¿Con quién vive?
-¿Tiene hermanos. El niño es el mayor, intermedio o menor?
-¿De que modo, piensa usted, que lo acompaña al niño en su aprendizaje escolar?
Modalidad de acompañamiento
3- Ud. considera que lo acompaña en las tareas, todas las veces que su hijo necesita,
algunas o casi nunca?
4-Si el modo en que lo acompaña en las tareas siente que no le resulta útil, ¿ha intentado
otro?
-Si el modo en que lo ayuda a comprender algún contenido escolar, no le resulta efectivo,
¿Ha intentado otros?
-¿Con qué frecuencia?
a- casi siempre
b- esporádicamente
c- casi nunca
7-¿Utiliza alguna otra forma distinta a la escolar para que su hijo esté en contacto con
contenidos escolares?
9-¿Cuáles? (ejemplos)
11-¿De qué formas se comunica más frecuentemente con los docentes? ¿Se comunica con
regularidad?
12-¿Cuáles de las siguientes formas de comunicación suele emplear más frecuentemente
con los docentes?
Asistir a reuniones: casi siempre /esporádicamente/ nunca.
Utilizar para comunicarse los cuadernos de clases o comunicaciones: casi siempre
/esporádicamente/ nunca.
Mantener diálogos informales: casi siempre /esporádicamente/ nunca.
Buscar comunicarse a través de un tercero: casi siempre /esporádicamente/ nunca.
Comunicación telefónica: casi siempre /esporádicamente/ nunca.
Diálogo sobre el proceso de enseñanza – aprendizaje
13-¿Hablan con… (hijo) de las cosas de la escuela / del proceso de enseñanza y
aprendizaje?
14-¿Sobre qué aspectos de la escuela conversan?
15-¿Cuáles de los siguientes aspectos considera que son los que más frecuentemente
conversan?
Contenidos escolares: siempre/ casi siempre/ nunca.
Evaluaciones: siempre/ casi siempre/ nunca.
Obstáculos / dificultades en el aprendizaje: siempre/ casi siempre/ nunca.
Vínculo con el docente y pares: siempre/ casi siempre/ nunca.
Festejos escolares: siempre/ casi siempre/ nunca.
Conducta.
Avances en el aprendizaje
22- ¿Que hacen cuando su hijo tiene avances en el aprendizaje? ¿Qué es lo que más
frecuentemente hacen frente a ello?
Incentiva al niño en sus avances: si / no.
Dialoga acerca del valor del aprendizaje: si / no
Señala al niño la importancia del aprendizaje para el futuro: sí / no.
Premia al niño
No realiza ninguna acción: sí / no.
-comida
-baño
-tareas escolares
-juego
-descanso
-ocio
27-Para llevar a cabo las actividades escolares, cómo hacen para que sus hijos dispongan
del material necesario?
29-Cuando percibe que no puede acompañar a su hijo en cuestiones del aprendizaje escolar,
qué hace?