Isabela Tobón

201730515

Vishakadatta, Eurípides y la historia que ahora escribimos.

La historia de la humanidad es una historia cíclica en donde los tiempos no cambian, en

donde todo vuelve a su estado inicial, en donde se presume de una evolución falsa. Esta idea se
puede evidenciar en la historia contada tanto en Las Troyanas de Eurípide como en
el Mudrarakshasa de Vishakadatta, contrastada con la historia actual colombiana. Historias
contadas durante tres tiempos de la historia del mundo diferentes que tienen congruencias que
hacen demostrable que los seres humanos siempre volvemos a los mismos. Estos momentos y
conceptos de conexión son los que se desarrollarán en el siguiente ensayo.

En Las Troyanas, obra de Eurípides, se cuenta la historia después de la guerra que se

vivió en Troya y de cómo la sociedad, tanto troyana como griega, queda profundamente
destruida. A lo largo de la obra podemos ver como las mujeres troyanas muestran el dolor de todo
lo sucedido y como no solo las afecta a ellas sino también a sus enemigos. Esta pérdida en un
primer lugar, muestra una destrucción de la sociedad desde el concepto de nación, donde todas
estas personas perdieron aquello que los mantenía unidos. Después, podemos ver como la muerte
de la mayoría de los hombres, de los que las mujeres dependían, trajo una destrucción profunda
para ambas sociedades, debido al papel secundario que la mujer tenía en la época. De la misma
manera, cómo el hecho de tener que abandonar sus tierras hace que a los troyanos no les quede ni
un pequeño sentido de lo que era antes de la guerra su sociedad.

Por otro lado, en la obra Mudrarakshasa, escrita por Vishakadatta, se vive un conflicto

político entre dos bandos por el poder. En dicha disputa se verán las maquinarias del poder, en
donde sin importar a que tengan que recurrir para ellos es más importante tener el mando que
cualquier otra cosa. Aquí podemos ver como las personas, dentro de la política, se pueden
confabular en contra de otros por razones de beneficio propio y como la confianza dentro de este
ámbito es muy escasa. Las amenazas juegan también un papel importante dentro de esta obra,
donde son usadas con frecuencia para obtener beneficios y usar los puntos débiles de sus
enemigos a su favor. En ambas obras es importante resaltar el papel tan importante que tiene la
religión y el destino en una y otra sociedad.

Como componente central de ambas obras me gustaría resaltar y analizar la guerra, que
por el lado del texto de Eurípides es un elemento central del pasado y en el texto de Vishakadatta
es un concepto presente en las relaciones políticas. Podríamos decir que Las Troyanas  es una
posible consecuencia del Mudrarakshasa, de cómo esta guerra que se da entre dos bandos por el
poder termina afectando a un sin número de personas que no tuvieron que ver en absoluto con los
hechos. Se podrían poner las obras en un orden cronológico en el que el Mudrarakshasa pasa en
un primer momento y deja como conclusión lo ocurrido en Las Troyanas.

La situación anterior me gustaría también retomarla desde una perspectiva nacional

actual. En Colombia se ha vivido en una constante guerra política desde hace muchísimo tiempo
y los que han sufrido, no ha sido la clase política que causó todo esto, sino la clase media y baja
que ante estas situaciones no tiene el poder de hacer mucho.

Los juegos de poder presentes en el Mudrarakshasa y en Las Troyanas no son muy

ajenos a nuestra realidad, muchos de los elementos descritos por Vishakadatta y  Euripides están
presentes hoy en la política colombiana. La sed de poder ciega la mayoría de veces a las personas
y la codicia termina con las buenas creencias de esto. En mi opinión esto fue un poco lo que
sucedió con Las Fuerzas Revolucionarias de Colombia (FARC), las cuales con el paso del tiempo
y las personas, perdieron su sentido político más profundo para enfrascarse en una guerra
meramente por las ansias de poder y de plata. El juego de espías y estrategias que se veía en la
obra podríamos llegarlo a comprar con todas las operaciones encubiertas que han realizado los
gobiernos en Colombia, que no han sido nada más que un intento por mostrar el poder del estado
crecer. Cuando en estas zonas del país afectadas por el conflicto, el poder del estado lo único que
hace es desaparecer.

En un segundo punto podríamos hacer una metáfora y tomar a Troya como Colombia y
a Las Troyanas como los campesinos y víctimas del conflicto que han sido la consecuencia de
una guerra política, en la cual la mayoría de casos no tienen nada que ver ni con las causas de
esta. Tanto en Troya como en Colombia tenemos después de la guerra un dolor profundo por la
violencia generada y las pérdidas humanas incontables. Ambos bandos, troyanos y griegos,
FARC y militares, pelearon una guerra que en cierto sentido no era suya, pero lo hicieron por el
honor y la patria, las cosas más grandes de la nación. Todos estos dejaron sus casas, a sus
familias y sus cosas por ir a pelear por una causa que sobrepasaba su entendimiento y que al final
fue totalmente desdibujada.

Desde la misma metáfora podríamos abarcar el tema del territorio, que tanto troyanos
como campesinos colombianos fueron obligados a abandonar. El sentido de territorio viene
acompañado de la tradición y la cultura, elementos que se pierden cuando se deja de habitar es
dicho lugar, por un lado los troyanos perdieron Troya y con esto su sentido de nación que era lo
que los hacía troyanos, los campesinos perdieron aquellas tareas y actos que hacían que se
consideraran como tal y esto hizo que no solo perdieran su sustento, sino también que perdieran
su esencia. El despojo de tierra y desplazamiento forzado en Colombia ha tomado muchas
víctimas y ha afectado no solo a la población campesina, esta también ha traído consecuencias
para toda la población.

Después de la ilación de todas estas ideas me gustaría añadir en modo de conclusión y

reelección la noción de cómo los tiempos no cambian tan considerablemente, y cómo en ambas
historias podremos ver reflejadas y encaminadas historias y situaciones de la realidad actual.
Tanto la guerra vivida en Troya como los conflictos políticos del Mudrarakshasa, son
situaciones que se pueden ver reflejadas en cosas que se viven en la realidad actual colombiana
que pueden dejar ver que el ser humano lo único que quiere es poder y beneficio propio sin
importar quien se vea afectado en el camino a conseguirlo.

Bibliografia
- Eurípides. Las Troyanas. Traducción de José Luis Clavo Martínez. Madrid: Editorial
Gredos, 2010.
- Vishakadatta. “Mudrarakshasa”, Great Sanskrit Plays in Modern Translation.
Traducción de P. Lal. Nueva York: New Directions, 1964.