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Comuneros

Francisco Gutiérrez de Piñeres,

Pretendió recoger más dinero,

Aumentando los impuestos,

Al pueblo que era austero.

Encontrándose en el mercado

en Marzo de 1871,

una mujer observa el edicto

que leer creyó oportuno.

Al mirar tan colosales impuestos

Que el Rey de España quiere imponer,

Llena de fuerza aguerrida

El edicto en sus manos logró romper.

Abajo los chapetones mezquinos,

“viva el Rey y muera el mal gobierno”,

Gritan los bravíos campesinos

Exigiendo justicia por los impuestos.

Y es así que en el Socorro,

A la voz de Manuela Beltrán,

Se unen todos muy pronto

Y la revuelta apoyarán.
Inicia así la rebelión,

De los famosos Comuneros,

Es José Antonio Galán,

Es más fuerte justiciero.

No queremos pagar

La Armada de Barlovento,

Pues este injusto impuesto,

y razón de nuestros lamentos.

Conforma la junta del “Común”.

Los llamados insurrectos,

Berbeo, Plata, Monsalve

Y Rosillo, hombres selectos.

Más de 4000 comuneros,

Desde el Socorro van marchando,

Y llegando a Puente Nacional

La revuelta va gestando.

A mediados de 1788,

Caballero y Góngora firma

Las capitulaciones de Zipaquirá,

Donde el tributo expira.

Pero llegando a Santafé,

Se anulan las capitulaciones,

Y sin piedad se inician,

Las famosas decapitaciones.


Ofrenda Galán su vida,

Descuartizado su cuerpo queda,

Como escarmiento para todos,

Pero el “Común” cobra fuerza.

Esculpimos como insignia

A quienes ofrendaron sus vidas,

Ni un paso atrás siempre adelante

Esa es nuestra consigna.

Luz Yaneth Ovalle Pérez

Rectora ITA Guavatá Santander

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