Está en la página 1de 7

GLOSARIO

Las definiciones que se presentan en este glosario corresponden a


las asumidas para la construcción de este curso.

Barrio

Desde los procesos de revitalización el barrio es la unidad básica


de intervención; si bien su origen puede responder a una decisión
administrativa –por ejemplo barrio La Concordia o Las Aguas-, el
valor más importante de este ámbito territorial es la identidad
propia que tiene, el sentido de pertenencia que genera dentro de la
población residente y visitantes. Un barrio puede estar delimitado
por elementos que interrumpen su continuidad -el observador logra
identificar un interior y un exterior-, o puede tener un elemento de
referencia con un área de influencia. La extensión de un barrio se
determina a partir de continuidades que involucran
características físicas, temáticas, socio económicas, étnicas y de
percepción como ruidos, olores, sensaciones, etc. (Lynch, 1998)

Centro antiguo

El centro antiguo hace referencia a una etapa específica de la


evolución de la ciudad que no ha pasado por alteraciones mayores
a lo largo del tiempo, es decir que físicamente conserva rasgos
originales. Esta categoría puede aplicarse por ejemplo al Corralito
de Piedra en Cartagena de Indias.

Centro Histórico

Responde a la división político administrativa asignada al sector


central de la ciudad, que concentra una muestra importante de
elementos considerados o declarados como Bienes de Interés
Cultural, en donde suele aplicarse una normativa especial de
protección de patrimonio. Los límites suelen hacer referencia a una
etapa específica de evolución de la ciudad, por lo que pueden
coincidir o no con los del núcleo fundacional o centro antiguo.

Centro Tradicional
Puede interpretarse como el territorio identificado por la
población como el “centro” de la ciudad; si bien concentra valores
patrimoniales –pues suele coincidir con el Centro Histórico-, su
elemento de reconocimiento es su valor de uso popular.

Centro Urbano

La definición de centro urbano también corresponde con la


definición de lugar central: “Núcleo que abastece de bienes de
consumo y servicios a sus propios habitantes y al área que lo
circunda –la cual es conocida como pericentro- y sobre la cual
ejerce influencia” (GRUPO ADUAL, 2000). Los centros urbanos o lugares
centrales son clasificados según el tipo de actividad que se
concentre en ellos; esta clasificación no es universal, por lo que
algunos autores desarrollan la propia, entre ellos Manuel Castells
(1974) que define seis tipos de centro urbano: centro urbano de
intercambio, centro de trabajo, centro medio social, centro político
institucional, centro de negocios y finalmente el centro simbólico,
que corresponde al centro histórico; el diccionario de Geografía
Urbana, Urbanismo y Ordenación del Territorio (GRUPO ADUAL, 2000),
distingue cinco tipos de centros urbanos: centro comercial, centro
direccional, centro educativo, centro financiero y finalmente el
centro Histórico. Ambas clasificaciones incluyen al centro
histórico como un tipo de centro urbano.

Conservación del Patrimonio

Reparación, mantenimiento y protección del patrimonio


arquitectónico y urbano (Banco Interamericano de Desarrollo, 2004)

Gestión urbana

“Es el conjunto de iniciativas, instrumentos y mecanismos para la


normalización de la ocupación y uso del suelo urbano, articuladas
por fuerzas políticas e iniciativas de la sociedad (gestión
política) y que tiene como final la generación de procesos de
planificación urbanística que deberán asegurar la preservación
del interés público frente al privado (gestión urbanística).”
(Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia, 2011,
pág. 25)

Intervención urbana
Puede interpretarse como el conjunto de lineamientos físicas que
buscan recuperar, reactivar o rehabilitar un sector o barrio
consolidado físicamente deteriorado; desde estas intervenciones
físicas se espera lograr una reactivación económica y social.
Dentro de las posibilidades de intervención pueden mencionarse la
conservación, la restauración, el mejoramiento, la rehabilitación,
la recuperación, el redesarrollo, la reactivación y la
revitalización. Cada una de estas intervenciones tienen
características especiales y se acude a ellas según la naturaleza
de la intervención (Banco Interamericano de Desarrollo, 2004)

Núcleo Fundacional

Se refiere al núcleo inicial de fundación de la ciudad,


independientemente de que conserve sus rasgos morfológicos o
arquitectónicos originales. En el caso de Bogotá por ejemplo, los
límites del centro o núcleo fundacional corresponden al territorio
enmarcado entre la Carrera 5 y la Carrera 10, y entre la Avenida
Jiménez y la Calle 6.

Paisaje

El paisaje como concepto es aplicado desde distintas disciplinas y


apropiado por lo tanto de maneras diferentes, pero desde todas las
acepciones está implícita la existencia de un sujeto observador y
un objeto observado. El Diccionario de la lengua española define
paisaje como una “Extensión de terreno que se ve desde un sitio”
(Real Academia Española, 2001), es decir que es el observador quien
determina los límites del paisaje a partir de lo que observa, en
este caso el territorio, aunque no reconozca límites establecidos
para el mismo desde lógicas político administrativas.

Paisaje Cultural

Cuando el territorio y lo que pasa en él se convierte en objeto de


reconocimiento, generador de identidad –diferente a un interés de
dominio- se puede hablar de paisaje cultural. Desde un punto de
vista metodológico, para analizar un paisaje se debe partir de la
comprensión del territorio que es el objeto contemplado (Prada
Llorente, 2004). El Paisaje Cultural es una realidad compleja, cuyo
carácter se puede definir a partir de los componentes naturales,
culturales, tangibles e intangibles, por lo que debe abordarse
desde diversas perspectivas. Se asume que el paisaje cultural es el
territorio percibido y valorado, es la imagen, percepción y síntesis
que la sociedad construye de un lugar apreciado (Prada Llorente,
2004)

Paisaje Histórico Urbano

El Paisaje Histórico Urbano es una re interpretación del concepto


de Paisaje Cultural, en donde se reconocen los contextos urbanos
con valor histórico, donde la traza, estructura predial y tipología
arquitectónica son producto de dinámicas sociales condicionadas
por determinantes territoriales (Aspilcueta, 2006). Teniendo en
cuenta que la interpretación del paisaje es subjetiva y compleja, el
paisaje histórico urbano constituye una herramienta útil para el
análisis y gestión de sectores urbanos con valores históricos pues
incluye las percepciones y necesidades de la población local sin
desconocer los hechos físicos (Traza, construcciones, estructura
predial), que permiten aproximarse a la comprensión de la
contemporaneidad de los Centro Históricos (Conti, Paisajes
históricos urbanos: nuevos paradigmas en conservación urbana,
2009). Los centros históricos son piezas de áreas metropolitanas con
obras arquitectónicas y características urbanas de particular
importancia e interés general pero también con funciones complejas
y diversificadas, propias de un centro urbano.

Patrimonio Cultural

El patrimonio cultural tradicionalmente ha sido asociado al


monumento, y por lo tanto a su dimensión física, por lo que su
manejo y protección ha estado vinculado a procesos de
identificación y valoración a partir de sus características físicas
y valores históricos conservados, mediante acciones restrictivas
desde una perspectiva normativa. Este manejo desconoce, al menos
conceptualmente, su expresión simbólica a través de procesos de
larga duración y de construcción material mediante procesos de
producción, apropiación y valoración en las prácticas sociales
cotidianas.

A partir de las nuevas tendencias de intervención del patrimonio,


se ha avanzado en entenderlo como un sistema local vivo integrado
al paisaje, no solo como un recurso sino también como un valor
importante en un espacio de desarrollo común. En esta visión la
participación política y social está altamente ligada a la
construcción social del territorio adoptando un estatus solidario
(Magnaghi, 2011).

Planes urbanos

Los Planes Urbanos establecen metas rigurosas y de largo plazo que


se definen a partir de diagnósticos realizados en el momento, y que
son las que determinan los proyectos de intervención urbana. No
son útiles en ambientes de crecimiento urbano caótico y
desordenado

Proyectos

Un proyecto consiste en un conjunto de actividades


interrelacionadas que se ejecutan de manera coordinada, para
alcanzar objetivos específicos, dentro de los límites de un
presupuesto y un periodo de tiempo concreto, con calidades
establecidas. Gestionar un proyecto implica llevar a cabo las
acciones necesarias para lograr la meta específica establecida en
el proyecto. El proyecto finaliza cuando se llega al resultado
deseado, y pierde sentido cuando desaparece la necesidad inicial.

Redesarrollo Urbano

Es una de las formas de intervención más radicales y tiene que ver


con la demolición, reorganización y reconstrucción de toda un área
(Banco Interamericano de Desarrollo, 2004).

Regeneración urbana

Ampliamente difundido en la tradición norteamericana; sus


lineamientos son similares a la revitalización, por su connotación
económica, social y física, aunque a nivel físico; teniendo en
cuenta este origen se asume que su fin no es preservar edificios –
conservación de patrimonio-. Desde la regeneración urbana se busca
detonar actuaciones que respondan a la complejidad de los
problemas: ante una realidad compleja, se debe aportar una
"solución" compleja y de largo plazo. Este tipo de actuaciones debe
lograr la reactivación de la actividad económica, reintegración
laboral –formalización de actividades-, inclusión social y el
mejoramiento ambiental. Desde la regeneración se busca trabajar
contra los estigmas que puede tener un barrio, mejorar su
“reputación” y la de las personas que habitan en el (Simó Solsona,
El Concepto de Regeneración Urbana Sostenible, 2013)

Rehabilitación

La rehabilitación implica acciones que aseguren condiciones


dignas de las viviendas a través de intervenciones físicas con la
que se busca adecuar físicamente las estructuras, adaptando la
construcción a la normativa vigente y a las demandas del mercado;
a nivel de barrio esta intervención puede determinar la demolición
y/o la construcción de obras nuevas (Banco Interamericano de
Desarrollo, 2004) (Simó Solsona, El Concepto de Regeneración Urbana
Sostenible, 2013). Para construcciones de valor arquitectónico la
acción apropiada es la restauración.

Renovación Urbana

La renovación urbana representa el reemplazo de construcciones en


barrios de la ciudad que se consideran deteriorados o sub
utilizados (Mendes Zancheti, 2007). Implica por lo general un cambio en
el uso del suelo o en la intensidad de dicho uso por lo que no se realiza
en función de la población residente del área afectada. Desde el
urbanismo moderno se utiliza para hacer ciertas intervenciones urbanas
justificadas a partir de procesos de participación, o planes de
habilitación o revitalización urbana.

Restauración

Reparación, mantenimiento y protección de edificios singulares de


valores extraordinarios, considerados patrimonio arquitectónico y
urbano (Banco Interamericano de Desarrollo, 2004) (Simó Solsona, El
Concepto de Regeneración Urbana Sostenible, 2013). Para
construcciones sin valor arquitectónico la acción apropiada es la
rehabilitación.

Revitalización Urbana

El concepto se basa en lineamientos definidos para la


Regeneración, ampliamente difundido en la tradición
norteamericana, y más recientemente vinculado –años 1980- con la
intervención en centros históricos de ciudades Latinoamericanas.
Son acciones ligadas a la toma de decisiones locales por la
comunidad, que se aplican en pequeñas áreas de la ciudad –la
escala aconsejable es el barrio-. La revitalización tiene una
connotación económica y social de peso, sin descartar la dimensión
física enfocada en la preservación de edificios con valores
arquitectónicos –muy vinculada con la restauración, por lo que
suele utilizarse para sectores patrimoniales (Banco Interamericano
de Desarrollo, 2004) (Simó Solsona, El Concepto de Regeneración
Urbana Sostenible, 2013).

Territorio

El territorio es escenario de relaciones sociales, constituye el


asiento físico de la población y la fuente de recursos para su
mantenimiento, por lo que, socialmente, adquiere la definición de
límites pues da legitimidad a particulares, grupos, organizaciones
y/o estados para que ejerzan posesión, poder, soberanía y/o gestión
sobre sus recursos. El territorio está en permanente construcción a
partir de la actividad espacial de los actores relacionados, los
cuales generan diversas territorialidades en diferentes escalas
según el potencial que tengan para crearlo, recrearlo, dominarlo y
apropiarlo; la capacidad y alcance de la actividad espacial es por
lo tanto desigual y convergente, y genera una geografía del poder
que se caracteriza por la asimetría, la fragmentación, la tensión y
el conflicto. Los procesos de relación social con los que se
construye el territorio deben pensarse por lo tanto en términos de
la relación de tres dimensiones: la espacial, la temporal y la
social, pues el espacio en el territorio es construido
históricamente a través de las relaciones sociales (Montañez &
Delgado, 1998).

También podría gustarte