Está en la página 1de 2

Yo tengo un Cristo de oro Ser tu sonrisa ser

que me dejó mi madre, Hasta tu mismo aliento


en el pecho lo guardo Para poder estar
como reliquia grande, Más cerca de tu boca
el Cristo es milagroso,
el Cristo es admirable, Perdona si no tengo
en el pecho lo guardo Palabras con que pueda
herencia de mi madre, Decirte la inefable
en el pecho lo guardo Pasión que me devora
herencia de mi madre.
{ ¡Ay! madrecita mía Para expresar mi amor
si vieras cúanto lloro, Solamente me queda
al ver que me has dejado Rasgarme el pecho amada
un crucifijo de oro, Y en tus manos de seda
Dejar mi palpitante
el Cristo me acompaña
Corazón que te adora
en este mar de hielo,
el Cristo que a mi madre
le acompaña en el cielo,
el Cristo que a mi madre
le acompaña en el cielo. } bis De esta tierra ya me voy
De esta tierra ya me voy
A esta tierra he de volver
Ay amor, ay dolor
Julio Jaramillo A esta tierra he de volver
Porque tengo que pagar
Porque tengo que pagar
Cuando de nuestro amor
Gratitud de una mujer
La llama apasionada
Ay amor, ay dolor
Dentro tu pecho amante Gratitud de una mujer
Contemplas extinguida
Ya que solo por ti Una vez que ya me voy
La vida me es amada Una vez que ya me voy
El día en que me faltes De ti despedirme quiero
Me arrancaré la vida Ay amor, ay dolor
De ti despedirme quiero

Porque mi pensamiento Porque llevo la esperanza


Lleno de este cariño Porque llevo la esperanza
Que en una hora feliz De volver si no me muero
Me hiciera esclavo tuyo Ay amor, ay dolor
Lejos de tus pupilas De volver si no me muero
Es triste como un niño
Que se duerme soñando
Con tu acento de arrullo No llores ojos bonitos
No llores por que me voy
Porque llevo la esperanza
Para envolverte en besos De volver si vivo estoy
Quisiera ser el viento
Y quisiera ser todo
Lo que tu mano toca
Ya ves... Ya ves mi tierna avecilla que Si Ambato es tierra de miel,
cojia prisionera Será preciso que sepas, no hay quien la iguale;
Que desde hoy en adelante vas a ser mi si allí nació mi querer, no existen
compañera Cantando como cantabas, males
perdida entre la malesa, A orillas de un en esta vida no hay tanta dicha
arroyuelo y en el fondo de una arboleda.
que haber nacido en tu corazón,
No te deje avecilla. Agobiar por la tristeza
Yo cuidaré de que nunca te falte lo que pues las mujeres que en ti se crían.
apatezcas, tendrás el agua más pura y la
semilla más fresca Yo llevo en el alma
una amargura, dolorosa espina que me
mata Y es que tu partida me tortura, y en
silencio lloro mi dolor Fuiste tu mi fe y mi
esperanza, meta de mis sueños juveniles
Eres la ilusión que no se alcanza, eres tú
la dueña de mi amor Quiera Dios que
vuelvas algún día, para poner fin a mi
tormento Sólo tu regreso calmaria, ya
que por tu ausencia me lamento Vuelve
pronto, vuelve amada mía Para así
calmar este sufrir Si señor!

Ambato, tierra de flores,


tierrita linda, cuna de sol;
bajo tu cielo no hay sinsabores;
sólo hay canciones del corazón,
y tus contornos guardan amores,
secretos dulces de inspiración.

En noches blancas de amor,


cubrí tus calles,
de ritmos tibios al son de mi guitarra,
mientras la luna daba fulgores
a los lamentos de mí canción,
porque eres tierra de mis amores,
secretos dulces de inspiración.

Morena triste y distante,


morena linda, yo quiero dar,
la serenata dulce y fragante
porque mi alma se va a incendiar;
y en tus ojitos, claros diamantes,
toda mi vida se va a estrellar.

También podría gustarte