Gloria Inés Gómez Pacheco

Siete razones para elevar la autoestima.

Siempre que tenemos fracasos personales o nos sentimos que no valemos nada
nos preguntamos qué concepto tenemos de nosotros al percibirnos incapaces, feos,
inferiores a los demás con una imagen pobre. Entonces se ve la necesidad de
empezar a valorarnos y pensar que la baja autoestima que tenemos se debe
empezar a fortalecer. Es por eso que por medio de este articulo quiero invitarlos a
que reflexionemos en la importancia de tener una autoestima elevada.

1. La autoestima supera las dificultades personales

Cuando las personas gozan de una elevada autoestima son capaces de afrontar los
fracasos y los problemas que surjan. Son aquellos que poseen una fuerza necesaria
para reaccionar ante los obstáculos porque a medida que se va presentando las
situaciones difíciles que traen desmotivación, desaliento, hasta depresión son
capaces de conseguir y encontrar respuestas mejores de supervivencia que les
permite tener un progreso en su madurez y en sus competencias personales.

2. La autoestima establece la responsabilidad

Es el compromiso de asumir responsabilidades, porque solo se comprometen los
que tienen confianza en sí mismos, los que creen en sus habilidades, porque son
conscientes de los recursos que cuentan para superar las dificultades propias a sus
obligaciones.

3. La autoestima apoya la creatividad

Las personas creativas poseen desde su interior la originalidad en sus capacidades
inventivas, en la fluidez y novedad en las ideas porque se requiere una
autovaloración, una vivencia de la propia valía, es decir, una excepcionalidad sin
obviar el nivel de normalidad que se da en los casos donde se evidencia en los
individuos una relación entre la creatividad y la autoconfianza.

4. La autoestima refuerza la autonomía personal

Para esto se necesita desarrollar una autoestimación positiva que consiste en elegir
las metas que se quiere conseguir, las actividades y conductas que sean
significativas de esas metas propuestas para asumir las responsabilidades que
estas traen sin depender de los demás. Es triste observar a hombres y mujeres que
se consideran insignificantes, dando lástima, mendigando cariño, acercándose a los
demás para que los protejan, indecisos y buscando a quien obedecer y depender.
5. La autoestima facilita las relaciones sociables saludables
El respeto y el aprecio que las personas se tengan a sí mismas es la base para
relacionarse con los demás porque cuando se acerquen se sentirán cómodos y el
entorno en que se esté irradiará positivismo, se observará aceptación de los demás
y a la vez se reconocerá los valores positivos en los otros. El autoconcepto será
afirmativo y se demostrará en las cualidades siendo un patrón de autoconfianza.

6. La autoestima proyecta hacia el futuro

Las habilidades o cualidades que se proyectan hacia un futuro se autoimpone las
aspiraciones y expectativas de realización que llevan a sentirse capaces de escoger
metas superiores pero alcanzables.
Para dirigirnos hacia un futuro con una alta autoestima se debe aprender a educar
la autoconfianza desechando el conformismo y la comodidad interna sino más bien
es fortalecerla exigiendo nuevos retos y poniendo a prueba los conocimientos y
aptitudes.

7. La autoestima es el centro de la personalidad

Siempre se está buscando la identidad, el impulso de llegar a ser uno mismo, esa
fuerza impulsora siendo la voluntad necesaria para poder captar lo que somos. Es
por eso que a partir de la construcción de la personalidad que está determinada por
los genes que proporcionan una gran variedad de predisposiciones como el
ambiente, las experiencias de la vida (padres, docentes, amigos, sociedad y cultura)
que se encargan de moldear todas esas posibilidades en una dirección u otra.
Por eso, la autoestima es el centro de la personalidad porque se reacciona al
contexto de acuerdo como se percibe y a la vez la personalidad determina la forma
como las personas se ven y cómo su entorno las observa.
Redactado y original de Gloria Inés Gómez Pacheco.