UNIVERSIDAD CATOLICA DE HONDURAS

“NUESTRA SEÑORA REINA DE LA PAZ”

DIRECCION DE POST GRADOS E INVESTIGACION

MAESTRÍA EN DERECHO LABORAL

Asignatura: Métodos Alternos de Solución Catedrático: Dr. Juan Carlos
de Conflictos Bustillo

CASO: EL TRIANGULO DE LAS BARBUDAS

DON EVARISTO ROMERO

Usted es don Evaristo Romero, propietario de una pequeña fábrica de dulces (Confitería Julie),
ubicada en una propiedad que mide 6,000 varas cuadradas. Tiene 68 años de edad y es viudo
desde hace más de 10.

Sus negocios no han andado muy bien últimamente. Y es que usted ya se había retirado de
Confitería Julie pero con la reciente muerte trágica de su hijo, Antonio, y de su nuera, ambos
fallecidos en un accidente automovilístico el año pasado, ha tenido que retomar la dirección de
la empresa, lo que no le hizo ninguna gracia.

En el accidente sobrevivió su nieta Julie, quien ahora tiene 13 años y ha quedado como su
única compañía. Ella va a verle por las tardes a la fábrica, al salir del colegio, y ya se ha hecho
cargo de llevar por su cuenta algunos asuntos administrativos.

Usted por supuesto adora a su nieta, y le satisface todos sus caprichos juveniles. Ella está
creciendo fina y delicada, toda una bella damita, que le alegra sus días con su permanente
actitud de cariño.

Hoy por la tarde, si tiene palabra de honor, vendrá a verle su vecino. Un tipo a quien, sin
conocerlo, usted califica de irresponsable, ya que construyo su casa metiéndose en un pedazo
de su terreno, un pequeño triángulo de 40 varas al final de su propiedad.

Es cierto que a usted no le sirve para nada ese pedazo de terreno, pero no por eso va a dejar
que se lo usurpen. Toda esa parte de su propiedad esta sobrepoblada de unas plantas
exóticas conocidas como “barbudas”.

Usted llamó por teléfono al tipo ese hace una semana y le dijo algunas groserías, finalmente
quedaron de verse hoy. El vendrá a visitarlo a la fábrica, según dijo. “Ya le pegue la primera
insultada” piensa usted, “pero falta lo mejor”.

La realidad es que a usted lo que siempre le ha gustado es que le den la razón en todo,
aunque no siempre la tenga. Reconoce que es un viejo cascarrabias. Le gusta humillar a las
personas, pero solamente por ganas de molestar, no de ofender. En el fondo usted es una

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gran persona, bondadoso y comprensivo. “Pero la gente casi nunca merece que le ayuden”,
piensa. Por eso desconfía de todo el mundo, aunque siempre termina ayudando.

Si su vecino viene a verle, como lo prometió, usted piensa resolverle el problema vendiéndole
a un precio justo el pedazo de terreno. El precio anda por esos lados entre Lps. 1,600 y Lps.
2,000 la vara. Esa plata extra no le caerá mal. Sim embargo, como molestón que es usted no
piensa dejar la oportunidad para hacerlo sudar un poco. “Y si se me pone tonto le boto la casa,
piensa.

Se pide:

Tratar de resolver el presente conflicto buscando una solución pacífica y eficiente mediante el
uso de alguno de los Métodos Alternos de Solución de Conflictos vistos en clase.