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Estado de derecho

Un Estado de derecho es un modelo de orden para el país por lo cual este se rige por un
sistema de leyes escritas e instituciones ordenado en torno de una constitución, la cual es el
fundamento jurídico de las autoridades y funcionarios que se someten a las normas de esta.
Cualquier medida o acción debe estar sujeta a una norma jurídica escrita y las autoridades del
Estado están limitadas estrictamente por un marco jurídico preestablecido que aceptan y al
que se someten en sus formas y contenidos. Por lo tanto, toda decisión de sus órganos de
gobierno ha de estar sujeta a procedimientos regulados por ley y guiados por absoluto respeto
a los derechos fundamentales.

Lo anterior contrasta con lo que sucede ocasionalmente en muchas dictaduras personales,


donde el deseo del dictador es la de una gran medida de acciones sin que medie una norma
jurídica. En un Estado de derecho las leyes organizan y fijan límites de derechos en que toda
acción está sujeta a una norma jurídica previamente aprobada y de conocimiento público (en
ese sentido no debe confundirse un Estado de derecho con un Estado democrático, aunque
ambas condiciones suelan darse simultáneamente). Esta acepción de Estado de derecho es la
llamada "acepción débil" o "formal" del Estado de derecho.

En un "Estado de derecho" toda acción social y estatal encuentra sustento en la norma; es así
que el poder del Estado queda subordinado al orden jurídico vigente por cumplir con el
procedimiento para su creación y es eficaz cuando se aplica en la realidad con base en el poder
del Estado a través de sus órganos de gobierno, creando así un ambiente de respeto absoluto
del ser humano y del orden público.

El término "Estado de derecho" tiene su origen en la doctrina alemana del Rechtsstaat. El


primero que lo utilizó como tal fue Robert von Mohl en su obra La ciencia de política alemana
en conformidad con los principios de los Estados de derecho (en alemán Die deutsche Polizei-
wissenschaft nach den Grundsätzen des Rechtsstaates),1 sin embargo, la mayoría de los
autores alemanes ubican el origen del concepto en la obra de Immanuel Kant. En la tradición
anglosajona, el término más equivalente en términos conceptuales es el rule of law.

Índice [ocultar]

1 Concepciones y requisitos

1.1 El Estado de derecho en sentido formal

1.2 El Estado de derecho en sentido material

2 El Estado constitucional

3 Véase también

4 Referencias

4.1 Enlaces externos


Concepciones y requisitos[editar]

Un Estado es un conjunto de instituciones públicas que controla un territorio o unidad política


superior, de manera autónoma y completamente soberana. Los países tienen organizaciones
estatales, estas pueden ser de dos tipos:

Estados autocráticos, en los que la autoridad máxima gobierna de manera autocrática


(sistemas caracterizados porque gobierna una sola persona o grupo que es quien tiene el
poder total, sin responder de sus actos a otra autoridad), o por el contrario pueden ser Estados
de derechos. En estos, la autoridad máxima está sujeta a leyes y normas escritas, el Estado
tiene pluralidad y en general existen mecanismos por el cual otro grupo de personas pueda
alternar a las personas que en un momento tienen el poder. En estos Estados existe en general
división de poderes y un equilibrio de poderes y contrapoderes entre las instituciones
existentes. Frecuentemente los "Estados de derecho" son además democracias participativas,
aunque no siempre un Estado de derecho tiene organización democrática, ya que la única
condición es la existencia de un código de leyes escrito, y no la participación ciudadana en
general.

Existen dos acepciones tradicionales del concepto Estado de derecho:

La acepción débil o meramente formal (Estado de derecho en sentido formal), el único


requisito para que un Estado sea de derecho según esta acepción es que en su organización
político-social de «cualquier poder deba ser conferido por la ley y ejercido en las formas y
procedimientos establecidos por ella». Esta acepción no excluye a los Estados autoritarios, ya
que la anterior condición puede ser satisfecha por sus sistemas jurídicos.

La acepción fuerte o substantiva (Estado de derecho en sentido real o material), requiere


además que «cualquier poder sea limitado por la ley, que condiciona no solo sus formas sino
también sus contenidos»2 Esta segunda condición según qué contenidos sean señalados como
deseables excluiría a los estados totalitarios.

Si se fijan una serie de requisitos como los siguientes:

Deben crearse diferentes órganos del cuerpo del Estado y cada uno de ellos debe asumir una
de las funciones de Estado.

Esos órganos de poder del Estado deben actuar autónomamente. Es decir, sus dictámenes o
decisiones no pueden ser invalidados, modificados o anulados por otro órgano.

Debe estar establecida la forma en que se nombran los titulares del respectivo órgano, y las
solemnidades y procedimientos para poner término a sus cargos.

El poder debe estar institucionalizado y no personalizado, vale decir, debe recaer en


instituciones jurídico-políticas y no en autoridades específicas, las cuales tienen
temporalmente el poder en sus manos mientras revisten su cargo.

Tal vez el requisito más importante tiene que ver con que tanto las normas jurídicas del
respectivo Estado como las actuaciones de sus autoridades cuando aplican dichas normas
jurídicas, deben respetar, promover y consagrar los derechos esenciales que emanan de la
naturaleza de las personas y de los cuerpos intermedios que constituyen la trama de la
sociedad.

Para la acepción débil del Estado de derecho se requeriría satisfacer las cuatro primeras
condiciones, mientras que la quinta condición es típica de una acepción fuerte del Estado de
derecho. Ha existido un considerable debate sobre la utilidad de las dos acepciones: El Estado
de derecho en sentido formal y el Estado de derecho en sentido material. Autores como
Joseph Raz son partidarios de usar el término estado de derecho en sentido formal reduciendo
el estado de derecho al principio de legalidad:

Un sistema jurídico no democrático, basado en la negación de los derechos humanos, en una


gran pobreza, en segregación racial, en desigualdad sexual y en la persecución religiosa puede,
en principio, conformarse a los requerimientos del Estado cualesquiera de los sistemas
jurídicos de las más ilustradas democracias occidentales. Esto no significa que este sistema sea
mejor que aquellas democracias occidentales. Sería un sistema jurídico
inconmensurablemente pero sobresaldría en un aspecto: en su conformidad al Estado de
derecho.

J. Raz: La autoridad del derecho3

El ordenamiento jurídico del Estado debe reunir una serie de características que dan origen a
un Estado de derecho real o material.

Por contra otros autores, entre ellos el mexicano Reyes Heroles se adhieren a una acepción
material o sustantiva y consideran que el Estado de derecho se asientan en cuatro principios
amplios:

Principio de legalidad.

Obligatoriedad del derecho con respecto al Estado.

La supremacía de la constitución.

La responsabilidad del estado por sus actos frente a los ciudadanos.

El Estado de derecho en sentido formal[editar]

Estado de derecho es aquel en el que la ley es el instrumento preferente para guiar la


conducta de los ciudadanos. La transparencia, predictibilidad y generalidad están implícitas en
él. Esto conlleva a que se facilite las interacciones humanas, permite la prevención y solución
efectiva, eficiente y pacífica de los conflictos; y nos ayuda al desarrollo sostenible y a la paz
social. Para un Estado de derecho efectivo es necesario:4

Que el derecho sea el principal instrumento de gobierno.

Que la ley sea capaz de guiar la conducta humana.


Que los poderes la interpreten y apliquen congruentemente.

El Estado de derecho en sentido material[editar]

El vínculo a la observación de las leyes sería inútil e ineficaz si no se pudiera garantizar que las
leyes que ellos mismos son los garantes de los derechos fundamentales. Por lo tanto, los
elementos formales del Estado de derecho se han desarrollado y ampliado por parte de
elementos materiales del Estado, en particular mediante la adopción de normas que protegen
los derechos fundamentales.

Por ejemplo, la Constitución federal de la Confederación Suiza establece:

Art. 5 Principios de la actividad del Estado regidos por el derecho5

El derecho es la base y el límite de la actividad del Estado.

La actividad del Estado debe responder a un interés público y ser proporcionada al fin buscado.

Los órganos del Estado y los particulares deben actuar de manera conforme a las reglas de la
buena fe.

La Confederación y los cantones deben respetar el derecho internacional.

Ejemplos de concreción material para el Estado de derecho (extraídas del catálogo de los
derechos fundamentales de la Constitución Federal de la Confederación Suiza de 18 de abril de
1999):

Art. 7 La dignidad humana6

La dignidad humana debe ser respetada y protegida.

Art. 8 Igualdad ante la ley7

Todos los seres humanos son iguales ante la ley.

Nadie podrá ser discriminado (por el estado), en particular a causa de su origen, raza, sexo,
edad, idioma, posición social, el modo de vida, convicciones religiosas, filosóficas o políticas, o
por causa de una deficiencia corporal, mental o psíquica.

El hombre y la mujer son iguales en derechos. La ley debe garantizar su igualdad de derecho y
de hecho, en particular en los dominios de la familia, la educación y el trabajo.

La ley procurará medidas encaminadas a la eliminación de las desigualdades que afectan a las
personas con discapacidad.

Por otra parte, de acuerdo con el Índice del Estado de derecho8 publicado anualmente por
proyecto mundial de justicia (World Justice Project),9 un Estado de derecho es aquel en el cual
se respetan los siguientes cuatro principios:

El gobierno en su conjunto y sus funcionarios son públicamente responsables ante la ley;


Las leyes son claras, públicas, estables, y justas, y protegen derechos fundamentales tales
como la seguridad de los ciudadanos y la defensa de su propiedad;

El proceso a través del cual las leyes son aprobadas, administradas, e implementadas es
accesible, justo, y eficiente;

El acceso a la justicia es garantizado por representantes e instancias jurídicas que son


competentes, independientes, éticas, suficientes en número, que tienen recursos suficientes, y
que reflejan las características de las comunidades que sirven.

El Estado constitucional[editar]

Según algunos autores, la presencia de una Constitución rígida y del control de legitimidad
constitucional daría lugar a una legitimidad constitucional del Estado en lo que se describió
como Estado constitucional. El surgimiento del Estado de derecho coincide con el final del
absolutismo e implica la imposición de la burguesía entre el siglo XVIII y siglo XIX, que a partir
del poder económico alcanzado impusieron reclamos políticos y determinaron una
transformación radical en la sociedad y el concepto de Estado.

En teoría, la proclamación del Estado de derecho surge como oposición explícita al Estado
absolutista. En esta última forma de Estado, los titulares del poder eran «absolutos», o sea que
se liberaban de cualquier poder superior a ellos. Actualmente, de hecho, en gran parte de los
Estados del mundo los derechos civiles y políticos están garantizados a todos los individuos sin
distinción, gracias a la evolución histórica y política que, a partir del Estado absolutista, ha
aportado al surgimiento de lo que se conoce como Estado de derecho.

Podemos reconocer un ejemplo precursor del Estado de derecho en la constitución inglesa del
siglo XVII. La Revolución Gloriosa, combatida contra el absolutismo de la dinastía Stuart
conduce a una serie de documentos (el Bill of Rights, el hábeas corpus, el Acta de
Establecimiento), que demuestra la inviolabilidad de los derechos fundamentales de los
ciudadanos y de la subordinación del rey al parlamento (que es representante del pueblo).

La proclamación consciente y presente del Estado de derecho se logra a través de las dos
grandes revoluciones del siglo XVIII: la Declaración de Independencia de los Estados Unidos y la
Revolución francesa.

Las críticas que se dirigen en general al Estado de derecho por la mayoría de la historiografía
jurídica, a partir de diversas franjas ideológicas (socialistas, doctrina social de la Iglesia, por
ejemplo) y las partes de la masa surgidas a fines del ochocientos y principios del novecientos
es aquella de haber reconocido solo en abstracto los derechos humanos fundamentales, sin
tratar la actuación concreta de tales derechos. Por lo tanto, se ha realizado en todos los
Estados liberales de facto una situación que de hecho contrastaba con las proclamaciones de
derecho prevista por los textos constitucionales vigentes. Estas deficiencias se subsanan con la
introducción de los principios del Estado del bienestar y la democracia; concretándose en el
llamado Estado social y democrático de derecho.
Véase también[editar]

Ver el portal sobre Derecho Portal:Derecho. Contenido relacionado con Derecho.

Constitución

Cultura de la legalidad

Economía constitucional

Estado constitucional de derecho

Estado de excepción

Estado social

Estado unitario

Imperio de la ley

Principio de legalidad

Rechtsstaat

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