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UN CASO REAL EN EL

NUEVO PROCESO PENAL


Por Carmen Lilian Namuche Reyes
UN CASO REAL EN EL NUEVO PROCESO PENAL.

Por CARMEN LILIAN NAMUCHE REYES, Fiscal

Provincial del Primer Despacho de Investigación de la Segunda


Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Trujillo.

En el Distrito judicial de La Libertad, la Segunda Fiscalía Provincial


Penal Corporativa de Trujillo – Primer Despacho de Investigación, la
Fiscal Provincial responsable del caso dirigió una investigación seguida
contra siete imputados, una mujer y seis hombres. Dos de ellos tenían la
calidad de no habidos y los cinco restantes se encontraban desde el 18
de mayo del 2007, recluidos en el penal El Milagro de Trujillo al haberse
dictado la medida coercitiva de prisión preventiva. Dos de ellos tenían la
calidad de cómplices secundarios y los otros tres como coautores del
delito contra la vida. La primera, en la modalidad de Parricidio por tener
la calidad de cónyuge del occiso, y los otros por el delito de Asesinato
por lucro y alevosía.
Los hechos objeto de imputación, ocurrieron el 24 de abril de 2007
aproximadamente a las 19:30 horas. Aquel día, los imputados que ya
habían planificado quitar la vida al agraviado, se reunieron a pocos
metros de la casa de la víctima para poner en marcha el plan delictivo;
luego se dirigieron a la casa de la víctima que se encontraba solo.
Procedió a tocar la puerta su cónyuge, por lo que el agraviado al
escuchar su voz, confiadamente abrió la puerta. Acto seguido ingresaron
cinco de los imputados procediendo a agredirle en forma violenta con la
evidente finalidad de darle muerte. Luego uno de los imputados le
dispara en la cabeza, otro le dispara en el vientre, la mujer-cónyuge lo
golpea en la cabeza con una piedra y le entrega a otro de los
investigados un cuchillo, quien lo introduce en el lado derecho de la
cintura. Falleciendo finalmente la víctima. Materializándose de ese modo
el plan delictivo elaborado por la imputada- cónyuge supérstite y otro de
los imputado con quien se la vincula sentimentalmente. La finalidad del
hecho delictivo era heredar los bienes y dinero del agraviado.
De la investigación efectuada se determinó que dos de los
imputados que fueron contratados por la mujer, por la suma de
doscientos y cien soles, respectivamente, se quedaron en el exterior de
la casa del occiso, para vigilar y dar aviso ante cualquier eventualidad
que pudiera poner en peligro la consumación del delito.
Durante la investigación preparatoria en la ciudad de Trujillo, se
realizó las diligencias pendientes de actuar. Los abogados patrocinantes
de los investigados haciendo valer el legítimo derecho de defensa de
sus defendidos, interpusieron todas las acciones legales existentes,
desde exclusión de Fiscal que fue declarada Infundada por el Fiscal
Superior, tutela de Derechos, hasta reiteradas cesaciones de prisión
preventivas. Al estar por finalizar la etapa de investigación preparatoria,
los investigados que son cómplices secundarios solicitaron ampliación
de sus declaraciones, las mismas que se llevaron a cabo con presencia
de un nuevo abogado defensor. En las ampliaciones de sus
declaraciones, aquellos cambiaron sus versiones, afirmando que su
intención fue la robar a la víctima y que a consecuencia de ello se
produjo su muerte.
En el juicio oral, se instala la audiencia sin la presencia de la
imputada pero si de su defensor, quien junto con al defensor del
imputado vinculado sentimentalmente a aquella, dejan en claro su
estrategia de defensa consistente en lograr que los otros tres imputados
en prisión preventiva acepten su responsabilidad pero no por el delito de
asesinato como lo venia postulando la fiscal responsable del caso sino
como robo con subsecuente muerte. Situación que en definitiva, serviría
para desvincular del hecho a sus patrocinados y agravar la situación del
resto de acusados, pues si ello se materializaba eran pasibles de ser
sancionados con cadena perpetua.
Ante tal situación, y en calidad de defensores de la legalidad y con
la debida objetividad, los fiscales encargados del caso, desde el inicio
del juicio alegaron y luego demostraron que se estaba manipulando la
defensa de tres acusados sin importar el perjuicio irreparable que esto
les ocasionaría. Finalmente, luego de varias intervenciones de los
Fiscales, el juzgado penal colegiado de Trujillo suspendió la audiencia
pública y acto seguido declaró el estado de indefensión de los acusados
antes indicados y les dio la oportunidad para designar abogados de su
elección o en su defecto se designe abogados de oficio.
Al continuarse con la audiencia del juicio oral, se modifico el
escenario del juicio. Los nuevos defensores designados solicitaron
retrotraer el juicio a la etapa de formulación de los alegatos preliminares,
alegando que en la anterior presentación de la teoría del caso se había
vulnerado el derecho de defensa de sus patrocinados. El colegiado
aceptó la petición y se dio la oportunidad a los nuevos abogados
formulen su alegato de apertura.
Acto seguido, el colegiado luego de instruir de sus derechos a los
acusados, los consultó se admitían ser autores o partícipes del delito
materia de acusación y responsables de la reparación civil, a lo que los
tres acusados con anuencia de sus abogados admitieron los términos de
la acusación por lo que se acogieron a la conclusión anticipada del juicio
oral, aceptando su responsabilidad de haber tenido participación en el
asesinato por lucro tal como era la teoría del caso del Fiscal responsable
del caso.
Los frutos parciales de este caso se obtuvieron gracias a la
concreción del concepto de Fiscalía Corporativa, pues con la fiscal
encargada del caso (autora de la historia) participaron en las sesiones
de juzgamiento Constante Carlos Avalos Rodríguez, Fiscal Provincial del
Quinto Despacho de Investigación y William Enrique Arana Morales,
Fiscal Adjunto del Primer Despacho de Investigación, todos de la
Segunda Fiscalía Provincial Corporativa de Trujillo.
Actualmente, los tres acusados a quienes pretendieron manipular
en el juicio sus coacusados, han sido condenados a penas privativas de
libertad de seis y diez años, respectivamente, en tanto que los otros
coautores que idearon el plan criminal, han sido declarados contumases
y su juicio se encuentra pendiente hasta que sean capturados por la
Policía Nacional del Perú.

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