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PRIMER SEMESTRE 2019

EFIP I – Examen Final Integrador Presencial

DERECHO CONSTITUCIONAL
DERECHO CONSTITUCIONAL

TEORÍA CONSTITUCIONAL Y FEDERALISMO

PODER CONSTITUYENTE

Hemos sostenido que toda la teoría constitucional asienta sobre la concepción de la


Constitución Nacional como norma suprema. Esta construcción está también basada en el
acto de nacimiento de esta norma.

Para abordar con éxito la cuestión es menester distinguir entre las normas que integran el
orden jurídico, que emanan de los órganos competentes creados por la constitución como
el Parlamento o Poder Legislativo de la norma fundante cuya etiología es conceptualmente
diferente al de cualquier otra norma jurídica.

La Constitución es fruto del ejercicio del Poder Constituyente, que ha sido definido por el
maestro Linares Quintana como “El poder soberano del pueblo de dictarse por primera vez
su ordenamiento político, jurídico institucional por primera vez o para proceder a su reforma
si fuera necesario.

El Poder Constituyente es ejercicio de soberanía popular de la más alta raigambre, surge

de la teoría esgrimida por el –Abate Sieyès- mentor de la Revolución Francesa, quien pone
en poder del tercer estado (burguesía) la atribución de dictar el pacto fundacional.

Este Poder Constituyente es susceptible de ser considerado como originario o derivado.


El originario dicta la primer constitución del Estado, el derivado tiene la potestad de refor-
mar el texto constitucional.

A su vez el Poder Constituyente Originario puede ser ejercido de manera abierta o ce-
rrada, en esta última categoría la Constitución primera se dicta en un solo acto, mientras
que la modalidad abierta deriva en un proceso Constitucional integrado por más de un acto
constitutivo. Sería el caso argentino que inicia en 1853 y concluye en 1860.

Una vez alumbrado el texto las constituciones se clasifican en rígidas o flexibles, según
sea su proceso de reforma, será flexible si puede modificarse por el mismo órgano y bajo
el mismo procedimiento del dictado de la ley, por el contrario será rígida si requiere para su
dictado un proceso especial.

Nuestra Constitución es rígida por el proceso de reforma, que está contenido en el texto,
precisamente en el Artículo 30 de la propia Constitución. La rigidez para reformar el texto
deviene de considerar una garantía la permanencia de sus normas.

Según nuestro texto es necesario un procedimiento especial, y un órgano especial para


proceder a la reforma de la Constitución Nacional.

Existen, sin embargo algunas cuestiones doctrinarias previas, la redacción del Artículo 30
ha dado lugar a diversas cuestiones:
¿Puede la constitución reformarse en todas o cualquiera de sus partes? ¿Podría mu-
tarse la Constitución?. La mayoría de la doctrina sostiene que la reforma siempre es par-
cial, Germán Bidart Campos habla de contenidos pétreos, como aquellos que no pueden
alterarse sin correr el riesgo de ingresar a una revolución y no a una reforma. Es más se
interpreta que reformar es dar nueva forma, reformular lo que ha existe.

Para un mejor estudio consideramos dos etapas: 1) preconstituyente y 2) De reforma


constitucional propiamente dicha.

1) Etapa preconstituyente: según el Artículo 30, la necesidad de la reforma


debe ser de- clarada por el Congreso de la Nación, con el voto al menos del voto de las
dos terceras partes de sus miembros.

Se suscitan varias cuestiones la declaración debe tener forma de ley, y esa ley requiere
una mayoría calificada de dos tercios. También se ha discutido la forma de computar estas
cifras.

La ley declarativa debe contener el límite material (los artículos a reformar) el límite tem-
poral, es decir en cuanto tiempo de debe cumplir con la tarea. La cantidad y forma de

elección de los convencionales constituyentes. Lugar de deliberación, presupuesto entre


otras.

2) La etapa de reforma propiamente dicha está a cargo de la Convención


Nacional Cons- tituyente, cuerpo colegiado especialmente electo por el pueblo que tiene a
su cargo la reforma del texto constitucional, según el límite material y temporal impuesto
por la ley declarativa

REFORMA CONSTITUCIONAL DE 1994

Como aporte se agrega un trabajo especialmente redactado para los alumnos de esta
universidad que trata las modificaciones producidas por la última reforma constitucional.

LAS REFORMAS AL TEXTO CONSTITUCIONAL

Para un mejor análisis es conveniente distinguir entre aquellas modificaciones e incorpo-


raciones contenidas en el llamado Núcleo de Coincidencias Básicas, sobre el que pesaba
acuerdo previo por parte de los dos partidos políticos mayoritarios, sobre el que pesaba el
compromiso de votarlos en conjunto, de aquellos temas que habían sido habilitados para el
libre debate y tratamiento individual.

REFORMAS CONTENIDAS DENTRO DEL NÚCLEO DE COINCIDENCIAS BÁSICAS

Esta parte contenía doce puntos centrales destinados a rediseñar la estructura del poder
del Estado recreando el régimen republicano, con el objeto de atenuar el sistema presi-
dencialista, y lograr un nuevo equilibrio de poder y control, de pesos y contrapesos al decir
de Montesquieu. Por ello se trato:

A) Atenuación del Sistema Presidencialista

Se crea la figura del Jefe de Gabinete de Ministros, designado y


removido por el Presi- dente de la Nación, con responsabilidad política
ante el congreso de a Nación quien tam- bién puede removerlo
mediante interpelación y voto de censura, actuales artículos 100, 101.

Sus atribuciones se detallan en el artículo 100, con 13 incisos que lo


transforman en una figura con atribuciones Constitucionales semejantes
a la de un jefe de la administración, con funciones políticas que recibe
de las que se reducen del Presidente, ejerciendo ade- más atribuciones
propias que fueran del Presidente, ya que tiene a su cargo la
administra- ción general de país, y detenta otras que le son delegadas.
Tiene el debe de concurrir por le menos una vez al mes al Congreso
para informar de la marcha del gobierno, puede ser interpelado y
removido por el voto de la mayoría absoluta de los miembros de cada
una de las Cámaras, con lo que constituye en el fusible de cambio en
épocas de crisis.

Consecuentemente se modificaron también atribuciones del


Presidente, contenidas ac- tualmente en el artículo 99, se prohíbe emitir
disposiciones de carácter legislativo, decretos de necesidad y urgencia,
salvo situaciones extraordinarias.

B) Reducción del mandato del Presidente y Vicepresidente de la Nación

Se reduce el mandato del Presidente de seis a cuatro años con la


posibilidad de reelec- ción por un solo período consecutivo, y luego con
el intervalo de un período Artículo 94. Cabe destacar que el mandato
presidencial en curso al tiempo de la reforma fue conside- rado como
primero a los fines de la reelección, quedando así consagrado en la
novena cláusula transitoria.

C) Se elimina el requisito confesional para ser Presidente.

A fin de consagrar la libertad de cultos se eliminó el requisito


confesional para ser presi- dente de la nación y consecuentemente se
modificó el juramento del mismo – Artículos 89 y 93.

D) Elección directa de tres Senadores, por cada Provincia y la Ciudad de


Buenos Aires

Se modifica la estructura del senado, incorporándose tres senadores


por cada provincia y la ciudad de Buenos Aires, con un sistema de
elección directa, asignándose dos bancas al partido político más votado
y la tercera al que le sigue, Artículo 54. Se reduce el mandato de
senador de nueve a seis años renovándose el cuerpo a razón de una
tercera parte de los distritos electorales cada dos años (Artículo 56) y
cláusula transitoria cuarta.

E) Elección directa del Presidente y vicepresidente de la Nación

Se modificó también el sistema electoral de presidente y


vicepresidente, tal como lo dis- pone el Artículo 94 se elegirán en forma
directa por el pueblo y en doble vuelta electoral.

F) Elección directa del Intendente y reforma de la ciudad de Buenos Aires

Se dispone dotar de un status especial a la Ciudad de Buenos Aires,


que se conserva como Capital Federal y asiento de las autoridades de
la Nación, en ese sentido se dispone en el Artículo 129 un régimen de
gobierno autónomo con facultades propias de legislación y jurisdicción y
la elección de su Jefe de gobierno en forma directa por el pueblo. Cabe
acotar que la ciudad de Buenos Aires ya dictó el Estatuto de
Organización de sus Instituciones, que tiene el rango de una
Constitución Provincial, incorporándose la más moderna tenden- cia del
derecho público provincial.

G) Regulación de la facultad presidencial de dictar


decretos de necesidad y urgencia y procedimientos para
agilización del trámite de discusión y sanción de las leyes

Bajo este marco se prohibió el dictado de decretos de necesidad y


urgencia, excepto que excepcionales circunstancias hicieran imposible
seguir los trámites ordinarios para la san- ción de las leyes y no se trate
de normas que regulen materia penal, tributaria, electoral o el régimen
de los partidos políticos (Artículo 99 inciso 3), también se prohibió la
delegación legislativa a favor del Presidente, (Artículo 76). Se modificó
el procedimiento de formación y sanción de las leyes para agilizarlo,
limitando a tres las intervenciones posibles de las cámaras, a tal fin se
modificó todo el capítulo quinto desde el Artículo 77 en adelante. Se
extendió el período ordinario de sesiones iniciándose el 1º de marzo y
concluyendo el 30 de noviembre.

H) Consejo de la Magistratura

Dentro de las reformas al Poder Judicial se dispuso la creación del


consejo de la Ma- gistratura (Artículo 114) cuya atribución principal será
a de seleccionar los magistrados judiciales y la administración del
Poder Judicial, se detallan también otras facultades de este cuero, que
tiene también a su cargo la administración de los recursos y la ejecución
del presupuesto, facultades disciplinarias, apertura del proceso de
remoción de magistrados inferiores y el dictado de reglamentos
relacionados con la organización judicial. También se crea por el artículo
115 el Jurado de enjuiciamiento a los fines de la remoción de magis-
trados inferiores.

I) Designación del los Magistrados Federales

Se dispone el sistema de designación de los ministros de la Corte


Suprema de la Nación por medio de pliego enviado por el Presidente de
la Nación al Senado quien aprueba la propuesta con el voto de las dos
terceras partes de los miembros presentes del cuerpo y la designación
de los demás jueces por medio de ternas vinculantes previamente
selecciona- das por el consejo de la Magistratura, con acuerdo del
Senado en sesión pública

J) Remoción de Magistrados Federales

Se sostiene el Juicio político como mecanismo de remoción de los


miembros de la Corte y se dispone la creación del Jurado de
Enjuiciamiento para remoción de jueces inferiores cuyo proceso se
inicia a instancia del consejo de la Magistratura (Artículo 115).

K) Control de la Administración Pública

En lo relativo la control de la administración publica, se dispone el


control externo de sector público nacional en su faz patrimonial,
económica, financiera y operativa, creándose la Auditoría General de la
Nación, como órgano con autonomía funcional y de asistencia técnica
del Congreso, encabezado por un miembro de la oposición, cuya
regulación se encuentra en el Artículo 85 y siguientes.

L) Establecimiento de mayorías Especiales Para la


Sanción de Leyes que Modifiquen el Régimen Electoral y de
Partidos Políticos.

Esta propuesta se redactó y trató en el seno de la Comisión de


Núcleo de Coincidencias Básicas y en la comisión de Redacción,
votado por el plenario, pero por un error formal no se incluyó en el texto
final de la Constitución. Esta omisión se corrigió por medio del Con-
greso quien por ley mandó imprimir una versión oficial del texto
constitucional rescatando esta norma que quedó incluida como
segunda parte del artículo 77, por ella se dispone la exigencia de
mayoría absoluta del total de los miembros de las Cámaras para
modificar los temas atinentes al Régimen electoral y de Partidos
Políticos.

LL) Intervención Federal


Como último punto del Núcleo de Coincidencias Básicas se dispone
regular la inter- vención federal a las provincias, quedando como
atribución exclusiva del Congreso, salvo receso y urgencia.

Hasta aquí los temas incluidos en el Núcleo de Coincidencias


Básicas, que se planificó como un sistema completo e integrado de
partes inescindibles.

TEMAS HABILITADOS PARA SU DEBATE POR LA CONVENCION


CONSTITUYENTE

A) Fortalecimiento del Régimen Federal

Dentro de los temas habilitados para su debate y tratamiento


individual encontramos: los relativos al fortalecimiento del federalismo,
para lo que se introducen sustanciales reformas al Título Segundo sobre
Gobierno de Provincias, así en el Artículo 124 se posibilita la crea- ción
de regiones, por la sola voluntad de las Provincias, así en este el
artículo se posibilita la creación de regiones, por la sola voluntad de las
Provincias y con el deber de comunica- ción al Congreso de la Nación.
Esta norma ya se ha aplicado como en el caso de la creción en 1996 la
Región de la Patagonia y en 1998 La Región Cetro del País.

Se dispuso el dominio de las provincias sobre los recursos naturales


que se encuentran en su territorio- artículo 124- y la jurisdicción
provincial sobre establecimientos de utilidad ública.

Según el artículo 125 las provincias pueden celebrar entre sí tratados


parciales con co- nocimiento del Congreso, salvo que sean de carácter
político.

Dentro del fortalecimiento del Régimen Federal se modifican incisos


del actual artículo 75, que legisla sobre atribuciones del Congreso,
determinándose un nuevo régimen de coparticipación impositiva entre
la Nación y Provincias – inciso 2_.

B) Autonomía Municipal

Se reglamenta la Autonomía Municipal, dotándola de alcance y


contenido en el orden institucional, político, administrativo, económico y
financiero, tal como lo establece el actual artículo 123.

C) Posibilidad de Incorporación de la Iniciativa y de la Consulta Popular

Ambos institutos se incorporaron en el Capítulo nuevo de Derechos y


Garantías en los Artículos 39 y 40 respectivamente

D) Posibilidad de Establecer el Acuerdo del Senado


para la Designación de Funcio- narios de Organismos de Control y
del Banco Central

En este sentido el Artículo 85 exige que su presidente sea designado a


propuesta del par- tido político de la oposición. También se crea la figura
del Defensor del Pueblo, incorporado en el Artículo 86, quien es
designado y removido por el Congreso.

Si bien, en la Constitución Nacional no se incorpora el necesario


acuerdo del Senado para designación del Presidente del Banco
Central, esta disposición se incluyó en la ley orgánica de la entidad.

E) Actualizar las Facultades del Congreso previstas en


los artículos 67 y del Presi- dente de la Nación artículo 86.

Sobre este tema, a cargo de la Comisión de Redacción se planteó un


debate interesante, ya que una parte de la misma sostenía la tesis que
actualizar debía se interpretado con un sentido restringido, es decir
limitar la reforma al lenguaje utilizado, eliminado o suplantan- do los
términos en desuso y no al contenido de las atribuciones, felizmente
prevaleció el criterio amplio y se produjo una actualización importante,
como ejemplo citamos el actual inciso 12, ,16, 18, 19, 23 entre otros del
Artículo 75, redactándose nuevamente la llamada cláusula del
progreso, el régimen de la educación, se incluyó expresamente la
autonomía de las universidades, se dispuso el dictado de medidas de
acción positiva para garantizar la igualdad efectiva de oportunidades,
entre otras. También se produce la modificación com- pleta del actual
artículo 99 que trata sobre las atribuciones del Presidente de la Nación,
las
que debieron adecuarse a la inclusión de la figura del Jefe de Gabinete
de Ministros.

F) Establecer el Defensor del Pueblo

Que queda incorporado en el Artículo 86, creándose como un órgano


independiente ins- tituido en el ámbito del congreso de la Nación, con
autonomía funcional, destacándose que para cumplir con la misión de
defender y proteger los derechos humanos y demás dere- chos,
garantías e intereses tutelados, tiene legitimación procesal.

G) Ministerio Público como Organo Extrapoder

Que queda incorporado en el artículo 120, se le otorga autonomía


funcional y autarquía financiera, cuya función radica en promover la
actuación de la justicia en defensa de la legalidad de los intereses
generales de la sociedad. Integrado por un Procurador General de la
Nación y un Defensor General de la Nación. Sus miembros gozan de
inmunidades funcionales e intangibilidad de remuneraciones.
H) Facultar al Congreso respecto de pedidos de
Informes, Interpelaciones y Comisio- nes de Investigación

Actual Artículo 71, 101.

I) Instituciones para la Integración y Jerarquía de los Tratados


Internacionales

Este tema merece un tratamiento especial, incluido en el Artículo 75


inciso 22, dispo- niéndose como atribución del Congreso aprobar o
desechar tratados internacionales con la Santa Sede, hasta aquí el
texto original, pero a continuación se sienta el principio general que
todo tratado internacional o concordato con la Santa Sede aprobado
por el Congreso adquiere jerarquía superior a las leyes. Es destacable
que con esta disposición se respeta la Convención de Viena en cuanto
impide que un Estado firmante de un tratado lo inclumpla aduciendo
normativa interna.

En el segundo párrafo del inciso se incluye una excepción a este


principio en cuanto incorporaron con rango constitucional diez tratados y
convenciones internacionales de pro- tección a derechos humanos,
transformando a nuestra Constitución en una de las más am- plias en la
materia No solo se amplían los derechos consagrados en el texto
originario sino que también se engloban las garantías para hacerlos
efectivos, posibilitándose el recurrir ante cortes internacionales en caso
de desconocimiento o falta de cumplimiento por parte de los órganos
jurisdiccionales del Estado Nacional.

En el inciso 24 del Artículo 75 se faculta al Congreso para aprobar


tratados internaciona- les de integración, con naciones
latinoamericanas o con otras naciones.

J) Garantías de la Democracia en cuanto a la


Regulación Constitucional de los Parti- dos Políticos, Sistema
Electoral y Defensa del Orden Constitucional

Estos temas se incorporaron en un Segundo Capítulo dentro de la


Primera Parte, titula- do Nuevos Derechos y Garantías, iniciándose este
capítulo con el Artículo 36, que incluye la llamada garantía del sistema
democrático, luego en el Articulo 37 se legisla sobre los derechos
políticos, determinando el carácter del sufragio como universal, igual,
secreto y obligatorio. El Artículo 38 reconoce y regula los partidos
políticos.

K) Preservación del Medio Ambiente


Por esta cláusula se consagra en el nuevo Artículo 41, que incluye el
derecho de todo habitante a gozar de un ambiente sano, apto para el
desarrollo humano, preservando los recursos naturales no solo para
generaciones presentes, sino también futuras. Se preser- va también el
patrimonio natural y cultural, la diversidad biológica y el derecho a la
informa- ción y educación ambiental. Se prohíbe el ingreso al territorio
nacional de residuos actual o potencialmente peligrosos, y de los
radioactivos.

Completa este artículo consagratorio de derechos de tercera


generación, la acción de amparo (Artículo 43) que en estos casos
puede ser ejercida por el afectado, el Defensor del Pueblo y las
asociaciones que propendan esos fines, debidamente registradas.

L) Creación de Un Consejo Económico y Social con Carácter Consultivo

Fue el único tema que no logró tratarse, por lo acotado del límite
temporal que fijó en noventa días la actividad de la Convención

LL) Garantía de la Identidad Etnica y cultural de los Pueblos


Indígenas

En virtud de esta disposición se deroga la segunda parte del antiguo


inciso 15 de Artículo 67 que consagraba como atribución del congreso
el “propender la conversión de los indios al catolicismo”. En virtud del
actual inciso 17 del Artículo 75 se reconoce la preexistencia étnica y
cultural de los pueblos indígenas argentinos, garantizando el derecho a
una educa- ción bilingüe, el acceso a la propiedad comunitaria de la
tierra, la entrega de sus antiguos territorios o de tierras aptas para sus
actividades, entre otros.

Sobre este tema debemos destacar que el despacho de comisión fue


suscripto por unani- midad, y se acordó tratarlo en el recinto por su sola
lectura, sin discursos, y por aclamación. El registro de las opiniones
vertidas por los Convencionales Constituyentes, quedó en el diario de
sesiones por incorporación de agregados escritos para su publicación.

M) Defensa de la Competencia, del Usuario y Del Consumidor

Tema que se incorpora en el actual artículo 42, por el que se protege


a consumidores y usuarios de bienes y servicios en la relación de
consumo, a la protección de su salud, segu- ridad e intereses
económicos; a una información adecuada y veraz, entre otras
previsiones. Es de resaltar que las acciones en protección de estos
derechos pueden ser incoadas por el afectado, e defensor del pueblo y
las asociaciones que propendan a esos fines (Artículo 43)
Esta previsión constitucional cobra mayor relevancia al tener en
cuenta que existen pres- tadores de servicios públicos que se
encuentran en el ámbito de la organización estatal, no estatal y hasta
personas jurídicas privadas.

N) consagración expresa del Habeas Corpus y el Amparo

Regulación que se incluye en el Artículo 43, respetándose en general


los lineamientos existentes en la legislación previa y en los sucesivos
fallos de la Corte, pero adquiriendo rango Constitucional expreso a
partir de la reforma. En este artículo también se incluye una acción
especial, el Habeas Data, que permite a toda persona conocer si sus
datos están inscriptos en registros públicos o privados, en que sentido y
en caso de error lograr su rectificación.

Ñ) Implementar la Posibilidad de Unificar la Iniciación de Todos los


mandatos electi- vos en una Misma Fecha.

Esta disposición no pudo concretarse respecto de todos los


mandatos, debido a circuns- tancias políticas más que jurídicas, aunque
logró unificarse el momento de asunción de nuevos Senadores y
Diputados de la Nación – cláusula transitoria cuarta - en la fecha del 10
de diciembre , en lo que respecta al Presidente de la Nación se dispuso
considerar el mandato en curso, al momento de la reforma como primer
mandato –cláusula transitoria Novena- y por la cláusula transitoria
Décima se dispuso que el Presidente de la Nación que asumiera el 8 de
julio de 1995, extinguiría su mandato el 10 de diciembre de 1999, con lo
que se respetó el principio de intangibilidad de los mandatos
constitucionales, ya que no pueden extenderse bajo circunstancia
alguna.

Sin embargo, circunstancias políticas posteriores, determinaron que el


Presidente inicie su mandato el 25 de mayo.

SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL

Concepto procedente del antiquísimo precedente jurisprudencial 'Marbury vs


Madison", y que supone la estructuración del ordenamiento jurídico en una
pirámide jerárquica en la que la Constitución ocuparía la cúspide. Así, la
supremacía supone el punto más alto en la escala jerárquica normativa, de
manera que cualquier norma posterior y contraria que eventualmente entrase
en colisión con la norma suprema provocaría la nulidad de la norma inferior.

En la República Argentina ha existido un conflicto jurisprudencial sobre la


jerarquía de los tratados internacionales que fue finalmente resuelto con la
reforma constitucional de 1994. El artículo 75 inciso 22 de la Constitución
Argentina otorga la misma jerarquía de la constitución a un grupo de tratados
internacionales sobre Derechos Humanos. También en la misma reforma se
estableció un proceso legislativo particular para anexar otros tratados a ese
grupo, sin necesidad de reformar nuevamente la Constitución. La pirámide
jurídica en Argentina quedaría con la Constitución y los Tratados sobre DD.HH.
en la cima, los demás tratados internacionales inmediatamente después y las
demás leyes por debajo

Desde 1994

El punto de partida sigue siendo el artículo 31 de la Constitución Nacional, que


reza: “ Esta Constitución, las leyes de la nación que en su consecuencia se
dicten por el Congreso y los tratados con las potencia extranjeras son la ley
suprema de la Nación, ...”

Es decir que debajo de la Constitución, con la misma jerarquía, pero sin la


posibilidad de modificar la 1ª parte de la misma, está los tratados y
convenciones internacionales del Art. 75 inc. 22 CN. Los cuales gozan de una
presunción de constitucionalidad por haber sido analizados
pormenorizadamente por los convencionales constituyentes.

Por debajo de los mismos se encuentran los convenios y tratados


internacionales de derechos Humanos aprobados por el Congreso con mayoría
agravada, y gozan de la misma jerarquía constitucional que los anteriores.

Por último se encuentran los tratados que no son de derechos humanos, pero
que han sido aprobados y ratificados por nuestro país. Éstos tiene jerarquía
superior a las leyes federales.

Debajo de las leyes federales, se encuentran los Tratado que el Art. 124 CN les
permite celebrar a las provincias.

De esta manera queda conformada nuestra pirámide después de la reforma


constitucional de 1994. Bidart Campos, en oportunidad de la reforma, elabora
la doctrina del “Bloque de Constitucionalidad Federal”. Este bloque está
formado por la Constitución Nacional y los 11 tratados del artículo 75 inc. 22
CN. Estos tratados no están incorporados a la CN, está enumerado en la
misma, pero gozan de supremacía constitucional.

Por lo tanto la interpretación en cuanto a que los derechos que sean


reconocidos por tratados no sólo pertenecen al derecho interno sino que no es
necesario un posterior reconocimiento por parte del Estado, (Corte
Interamericana, Ekmedjian c/ Sofovich) DERECHO A REPLICA aparece
reconocido implícitamente por la CN y expresamente por la Convención
Americana sobre Derechos Humanos Art. 14 ley 23.054., y esa va a ser la
interpretación que la Corte va a adoptar en los sucesivos fallos.

Incisos 22 y 24 del art. 75. De estos puede extraerse la siguiente clasificación:

a) Tratados de derechos humanos: ver detalle en inciso 22 artículo 75. Estos


tratados se incorporan con jerarquía constitucional y las siguientes
características: 1°) “En las condiciones de su vigencia”. 2°) Si bien tienen
jerarquía constitucional, “no derogan artículo alguno de la primera parte de la
Constitución y deben entenderse complementarios de los derechos y garantías
por ella reconocidos.;

b) Tratados de integración: Las normas dictadas tienen jerarquía superior a las


leyes, pero inferior a la Constitución, la técnica legislativa para aprobar estos
tratados de Latinoamérica, en cuyo caso requieren la mayorá absoluta de la
totalidad de los miembros de cada Cámara. En cambio, en la hipótesis de
tratados con otros estados, el procedimiento es complejo o de doble
aprobación: 1° el Congreso declara la conveniencia con la mayoría absoluta de
los miembros presentes de cada Cámara y 2° dentro de los 120 días
posteriores el tratado debe ser aprobado por la mayoría absoluta de la totalidad
de los miembros de cada Cámara.

c) Tratados y concordatos comunes: tienen jerarquía superior a las leyes.


PIRÁMIDE JURÍDICA: 1° Constitución y Tratados sobre derechos humanos,
con la única salvedad que los tratados no deroguen artículo alguno de la
primera parte de la Constitución y además deben entenderse como
complementarios de los derechos y garantías por ella reconocidos. 2°)
Tratados de integración. 3°) Las Leyes de la Nación que se sancionen “en
consecuencia” de la Constitución.

RECEPCION EN LA CONSTITUCION ARGENTINA

Artículo 31: Esta constitución, las leyes de la Nación que en su


consecuencia se dicten
por el congreso y los tratados con las potencias extranjeras son la ley
suprema de la Na- ción; y las autoridades de cada provincia están
obligadas a conformarse a ellas, no obstante cualquier disposición en
contrario que obtengan las leyes o constituciones provinciales.

La disposición contenida en este artículo ha sufrido una modificación


en cuanto a la gra- dación jerárquica de normas, según el trato que la
reforma constitucional de 1994 ha dado a los tratados internacionales.
Podemos en consecuencia establecer un orden jerárquico antes o
después de la reforma constitucional

Antes de la vigencia de la reforma constitucional de 1994:

1) Esta Constitución
2) Las leyes Nacionales, que en su consecuencia se dicten y
los Tratados con las potencias extranjeras – Negociados y firmados por
el P.E., aprobados por el Congreso, ratificados en sede internacional.
Artículo 27
3) Orden jurídico provincial

Nuevo esquema de supremacía constitucional después de la reforma de


1994:

1) Constitución Nacional y Tratados de Derechos Humanos enumerados en el


Artículo
75 inciso 22. Y otros que se incorporen en las condiciones de su
vigencia tienen jerarquía Constitucional pero no derogan artículo alguno
de la primera parte de la Constitución y deben entenderse
complementarios de los derechos y garantías por ella reconocidos. Sólo
pueden denunciarse por el Poder Ejecutivo previo el voto de las 2/3
partes de los miembros totales de cada Cámara los futuros tratados de
Derechos Humanos requieren para gozar de esta categoría la
aprobación de las 2/3 partes de los votos totales de cada Cámara.

2) Todo otro tratado internacional y concordatos con la Santa Sede.

a) Tratados de Integración: Leer inciso 24. Tratamiento


distinto para aquellos con Latino- américa mayoría absoluta de la
totalidad los miembros de cada Cámara.

Para otros Estados: El congreso declara la conveniencia de su


aprobación con mayoría absoluta de los presentes de cada Cámara y
dentro de los 120 días posteriores debe ser aprobado por los 2/3 de la
totalidad de miembros de cada Cámara.

b) Tratados y Concordatos comunes: Se aprueban por el


procedimiento normal para el dictado y sanción de las leyes, y tienen
jerarquía superior a las leyes.

3) Las leyes de la Nación .

4) Orden jurídico Provincial

LA CONSTITUCION COMO PACTO O TRANSACCION

En cuanto abordamos este tema es inevitable vincularlo con las


teorías contractualistas (Siglos XVII y XVIII) que en autores tan
disímiles como Tomas Hobbes (1681), John Locke
(1690), J.J.Rouseau (1762), Montesquieu (1748), por medio de una
ficción explican el paso del estado natural del hombre al estado social.
A fin de superar el principio de la fuerza como eje de organización,
logran por medio de un contrato suscripto por los hombres, un acuerdo
para investir de autoridad a uno o algunos, a fin que estos dicten las
normas de convivencia social y provean a la seguridad.

Para los contractualistas es el pacto social el que permite crear las


reglas de conviven- cia en que se asienta el Estado de Derecho, todos
ceden y todos tienen como garantía el cumplimiento del acuerdo. Base
también del principio de soberanía popular, la creación de la autoridad
y el resguardo del espacio de libertad del hombre, todos principios
básicos incluidos dentro de este marco de deber ser.

Vinculada a estas ideas, la teoría Constitucional concibe a la


Constitución de la Nación como norma suprema destinada a regir la
organización del Estado y de la sociedad, que debe ser fruto del
consenso, del acuerdo o pacto transaccional, reflejo de la ideología e
idiosincrasia del pueblo que la dicta, de allí que sea producto del Poder
Constituyente como manifestación directa de la voluntad popular.

En la Constitución deben amalgamarse todos los valores, fines,


aspiraciones, garantías, que son características de un pueblo, lo que
sólo puede lograrse por medio del acuerdo, construyendo el país
anhelado para el presente y el futuro en el devenir del tiempo. En estas
ideas coincidimos con César Enrique Romero cuando pronuncia que
no cree en el fin de las ideologías, la Constitución está imbuida de
ideología y valor en todas y cada una de sus cláusulas.

De allí el necesario debate, el acercamiento de posturas encontradas


y afines de todos los sectores políticos y sociales, a fin que cada uno se
vea reflejado en los postulados cons- titucionales, se identifique con su
sentido y espíritu, a sabiendas que el producto final nunca será el total
de las aspiraciones de un sector, sino el suficiente que surge de la
cesión de parte de lo ambicionado para lograr el proyecto compartido,
común.

En definitiva hablamos de una construcción social histórica, de un


proceso de amalga- miento, hay coincidencias en estudiosos de los
ámbitos jurídicos, políticos e históricos, que nuestro proceso
institucional ha sido harto complejo y conflictivo.

Por el contrario, si la constitución no es producto del acuerdo, del


consenso, del pacto está predestinada a fracasar, no encuentra el
punto de su vigor, validez y vigencia.

Para probar esta teoría no es necesario recurrir a ejemplos de


laboratorio, basta con repasar nuestra historia institucional, teniendo en
cuenta los avatares políticos y organiza- cionales por los que pasamos
para llegar al dictado de la primera Constitución, a su plena vigencia y
las situaciones particulares de cada proceso de reforma constitucional.

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD

Concordante con la teoría de Supremacía Constitucional se


concatena el instituto de Control de Constitucionalidad

Esta práctica surge por la acción de la Corte Suprema de Justicia de


los Estados Unidos de Norte América, cuando el Presidente de la Corte
de EE.UU. Marshall, en el fallo “Mar- bury vs. Madison” fundamentó
esta teoría.

Se basa en el fundamento que todo acto legislativo que es contrario a


la constitución no puede aplicarse al caso concreto debiendo prevalecer
la Constitución. Caso contrario una ley modificaría su contenido.

En el Derecho Constitucional comparado se registran dos sistemas de


control:

1) Control por un Órgano Político


Se inviste de competencia para efectuar el control al mismo órgano
que dicta la Ley o un apéndice de este.

Constitución de Francia de 1958 disponía el control por un Consejo


de Constitucionali- dad.
2) Control por un Órgano Jurisdiccional
Sistema Argentino. A cargo de los jueces en el caso concreto, por
cualquier juez por medio del Artículo 14 de la ley 48. (control difuso) O a
través de tribunales especiales de constitucionalidad España Alta Corte
Constitucional. (control concentrado)

SISTEMA JUDICIAL ARGENTINO

Es jurisdiccional y a está a cargo de los jueces del país.


Regulación procesal es el recurso extraordinario Arts. 14 y 16 de la ley
48.

Artículo 43 de la Constitución Nacional que dispone al regular la


acción de amparo que es el juez quien podrá declarar la
inconstitucionalidad de la norma en que se funde el acto u omisión
lesivo, de lo que se colige:
1) El Poder Judicial es el custodio de la Constitución.
2) El Poder Judicial no decide en causas políticas. Facultades privativas de cada
poder.
3) Presunción de constitucionalidad de los actos públicos,
solo son inaplicables para el caso concreto y previa declaración judicial
4) Las cuestiones federales son siempre de derecho (salvo sentencia arbitraria)

REQUISITOS Y EXCEPCIONES

2) Debe existir un caso concreto Art. 116 Constitución Nacional


causas y juicio.
3) Existencia de un interés legítimo .
4) Planteamiento Oportuno, en la primera oportunidad
procesal . Reserva del Caso Federal fundada.
5) No procede la declaración de oficio.

6) El

recurso debe ser

fundado

FORMAS

Puede plantearse en el orden federal u ordinario como acción o


excepción o sea al de- mandar o contestar la demanda.

En el Derecho público provincial se ha legislado sobre acción


autónoma de inconstitucio- nalidad, de un modo directo y no como
anexo a un juicio.

EFECTOS

En nuestro sistema es Inter. Partes es decir solo para el caso concreto


planteado.

ANTECEDENTES HISTORICOS

Antes de 1853 regía en nuestro país una precaria organización,


graficada en una co- hesión de carácter histórico y sociológico,
caracterizada por una fuerte disputa de poder y preeminencia entre las
provincias cuyos planteos tampoco eran uniformes entre sí y el puerto
de Buenos Aires.

Desde la Revolución de Mayo en 1810, se produce permanentemente


la búsqueda de un instrumento jurídico que dotara a la Nación de la tan
ansiada “Constitución Jurídica”, enten- dida como un conjunto de
normas fundamentales, codificadas, que regulara el total de la actividad
del Estado. Sin embargo décadas de lucha por el control del poder
condujeron a guerras civiles que impedían el acuerdo necesario para
llegar a la definitiva organización.

Son rescatables diversos avances como la Asamblea de 1813, que si


bien logra consagrar importantes principios de organización, no logra la
declaración de la independencia, con- sagrada luego en 1816; o los
intentos constitucionales de 1819 o 1826, que no logran ser aplicados a
la práctica porque sectores mayoritarios de la sociedad y los actores
políticos resistieron los programas de organización que respondían a
una estructura centralizada de poder, mientras que la mayoría de las
provincia reclamaban una organización federal.

El advenimiento del gobierno de Juan Manuel de Rosas paralizó el


intento del dictado de una norma de organización, hecho que tiene
fuerte influencia en el derrocamiento de Juan Manuel de Rosas por
parte de las tropas del General Justo José de Urquiza, en la batalla de
Caseros del 03 de febrero de 1852, episodio que finaliza con el acuerdo
de San Nicolás, suscripto el 31 de mayo de 1852, y el posterior dictado
de la Constitución de 1853 bajo los preceptos del Pacto Federal de
1831 celebrado el 04 de enero de 1831.

Aunque fuera respetuosa de los acuerdos a los que arribaran los


gobernadores-caudillos de las provincias, inspirada en el pensamiento
de la generación de 1837 especialmente Juan Bautista Alberdi, y
guiada por el modelo de la constitución Norteamericana, fue resis- tida
por la provincia de Buenos Aires que se separa de la confederación
formando gobierno propio.
Se reinician los enfrentamientos y recién después de la victoria del
General Urquiza en la Batalla de Cepeda del 23 de octubre de 1859, se
suscribe el pacto de San José de Flores, por el que se permite la
primera revisión del texto originario de la Constitución y la reincor-
poración de la provincia de Buenos Aires.

Luego de esta primera reforma Constitucional en 1860 prácticamente


redactada por Do- mingo Faustino Sarmiento y Dalmacio Velez
Sarsfield, deviene una etapa de relativa esta- bilidad política e
institucional en el país.

Progresivamente el programa contenido en la Constitución Nacional


va plasmándose en la legislación y en la organización de los poderes
del Estado pero la existencia de normas que regularan de manera
tendenciosa la materia electoral, el carácter del voto y la organi- zación
de los partidos políticos, permitió que una clase política dominante se
consagrara como única rectora de la conducción política del país,
sucediéndose gobiernos con un mero viso formal de legalidad.

Como respuesta a la permanente resistencia y lucha de amplios


sectores marginados, se dicta una ley de raigambre Constitucional en
1912, la ley Nº 8.871 llamada ley Saenz Peña en honor al Presidente
que la promulgó, cuyo objetivo fue garantizar el voto univer- sal, secreto
y obligatorio.

Este orden jurídico logrado produce el advenimiento al poder de un


partido de raigambre popular, la Unión Cívica Radical, con la asunción
como presidente de Hipólito Irigoyen, (1916-1922) sucedido por el
Presidente Marcelo Torcuato de Alvear (1922-1928). En 1928 comienza
la segunda presidencia del líder radical la que el 6 de setiembre de
1930 se ve truncada sufriendo el sistema su primer quiebre con el
derrocamiento del Presidente Hi- pólito Irigoyen, inciandose una etapa
en que se suceden gobierno electos y desarrollados en el marco de la
Constitución, alternados con golpes de Estado de origen castrense que
incumplían la constitución dictando estatutos de organización que la
suplían, recordamos los producidos en 1943, 1955, 1962, 1966 y 1976.

Al respecto, Alberto García Lema sostiene que desde 1930 se opera


un proceso de desconstitucionalización que se profundiza por una serie
de elementos, y que puede me- surarse por la precariedad medida en
el tiempo del régimen democrático, en el que el sis- tema institucional
funcionó solo durante un total de treinta y cuatro años (alternados)
desde los ciento cuarenta años que corren desde 1853 hasta 1993.

En la permanente búsqueda de reafirmaciones institucionales, en


conjunto con aspira- ciones a mayores porciones de poder, existieron
desde 1860 diversas reformas al texto constitucional, las dos primeras,
de 1866 y 1898 fueron de carácter técnico y de menor importancia,
pero las dos grandes reformas de nuestro siglo, que precedieron a la
última, merecen un análisis más detenido, ya que a pesar de haber sido
intentos de reformas sus- tanciales, ambas fracasaron.

En efecto, prácticamente a mediados de este siglo se produjeron dos


reformas constitucionales que tuvieron en común la falta de acuerdo o
consenso necesario: la de 1949 impulsada por el gobierno de Juan
Domingo Perón bajo la ley declarativa Nº 13.233 dictada sin alcanzar las
mayorías calificadas exigidas por el artículo 30 de la Constitución
Nacional, en esta oportunidad se produce una reforma global del texto,
con importantes cambios institucionales, nuevas declaraciones de
derechos individuales, la incorporación del consti- tucionalismo social,
reformas institucionales en la organización del poder y la posibilidad de la
reelección presidencial dentro de un marcado fortalecimiento del
presidencialismo. Este intento propiciado por el “peronismo” no contó
con la adhesión del “antiperonismo” por lo que fracasó y fue derogada
por un bando militar del gobierno que asume luego del golpe de estado
de 1955.

En el año 1957 no existía Congreso y en virtud de un decreto ley del


Poder ejecutivo de facto se convocó a una convención reformadora
llevada a cabo por el “antiperonismo” con proscripción del peronismo. A
pesar de que se encontraban habilitadas diversas modifi- caciones, por
la ilegitimidad y la falta de consenso, solo se logró sancionar como
texto el artículo 14 bis, por el que se incorporan los principios del
constitucionalismo social.

Otra instancia institucional fue la enmienda de 1972 que se alumbró


en el gobierno de facto a cargo del General Alejandro Agustín Lanusse
que se aplicó solo para la elección de 1973, período democrático que
se trunca con otro golpe de estado el 24 de marzo de 1976.

Como vemos existe una razón más que teórica al afirmar que la
norma Constitucional solo puede afirmarse en la voluntad común,
compartida por el pueblo cuyos destinos está destinada a regir.
Siempre que se impuso un sector sobre otro, solo se logró un texto for-
mal de acotada vigencia espacial y temporal.

Teniendo en cuenta el traumático proceso histórico, político e


institucional que sufrió nuestro país y ante la gravedad de los hechos,
que se producen en el último gobierno castrense, desde 1976 hasta
1983, la ciudadanía y la dirigencia de los partidos políticos en forma
mayoritaria, advierten la necesidad de afirmar un sistema que permita
garantizar el Estado de Derecho como condición indispensable de
desarrollo del país en todos los ámbitos, tanto nacionales como
internacionales y que garantizara internamente un marco de
convivencia social.
Los partidos Políticos mayoritarios, el Radicalismo y el Justicialismo,
comienzan a tomar el camino del diálogo a fin de buscar el consenso
necesario para la reforma institucional, en ese sentido encontramos el
primer antecedente histórico en la reunión que se produce el 14 de
diciembre de 1973, en Gaspar Campos, entre el líder justicialista Juan
Domingo Perón y el líder radical Ricardo Balbín. Como consecuencia
de la misma, el Presidente Perón en abril de 1974 creó una comisión
especial encargada del estudio del tema. Los hechos históricos
posteriores impidieron su concreción.

A fines de 1985 el Presidente Raúl Ricardo Alfonsín retoma el


desafío, era imprescin- dible poner fin con la permanente sucesión de
gobiernos democráticos y golpes de estado
instaurándose prolongados gobiernos de facto, esto sólo se podía lograr
por medio de un acuerdo político institucional, capaz de modificar la
historia de desencuentros y pérdida de calidad institucional.

Persiguiendo estos objetivos crea el Consejo para la Consolidación


de la Democracia,- Decreto 2446/85 - conformado por juristas de los
partidos políticos, por miembros relevan- tes de la sociedad, del mundo
de la ciencia y del arte, quienes bajo la presidencia del Dr. Carlos
Santiago Nino, toman el desafío de aconsejar a la Presidencia de la
Nación sobre la forma de sostener y fortalecer el sistema democrático.
En ese sentido produce dos dictá- menes en los que se aconseja
reformas institucionales sustanciales, resaltando el Segundo Dictámen
en que directamente recomienda la reforma de la Constitución
Nacional.

Sobre esta reforma no se pudo avanzar ya que en la elección de


1987 para la renova- ción parcial del Congreso de la Nación, la Unión
Cívica Radical pierde escaños, haciéndo- se imposible propiciar una ley
declarativa de necesidad.

En 1989 asume a presidencia el Dr. Carlos Saúl Menem, quien desde


el año 1991 retoma el tema de la reforma constitucional, pero con
diferencias respecto al régimen propiciado por el Radicalismo. En
efecto mientras que el Justicialismo pretendía mantener un sistema
presidencialista, el Radicalismo pugnaba por avanzar hacia un
parlamentarismo atenua- do.

Se desarrollaron desde el gobierno iniciativas tanto políticas como


jurídicas con el fin de apurar la reforma, la reelección presidencial solo
podía lograrse de este modo. En ese sentido se dicta los decretos Nº
2181/93 – 2258/93 por los que el Presidente convoca a consulta
popular voluntaria y no vinculante sobre el tema y tiene ingreso un
proyecto de ley reglamentario del Artículo 30 de la Constitución
Nacional, por el cual se exigiría para probar la ley Declarativa el voto
afirmativo de los dos tercios de miembros presentes de cada Cámara.
No obstante el diálogo entre las fuerzas políticas no se había
interrumpido y el 4 de no- viembre de 1993 se concreta una reunión
entre el presidente en ejercicio y el líder de la Unión Cívica Radical, que
concluye con al firma del llamado “Pacto de Olivos” suscripto por ambos
el 14 de noviembre del mismo año.

En el acuerdo ambos se comprometen a propiciar una reforma


Constitucional que dejara incólume la primera parte de la Constitución
Nacional en su texto originario, pero que con- solidara el sistema
democrático y perfeccionara el equilibrio entre los poderes del Estado,
que afianzara la independencia de la justicia y fortaleciera los órganos
de control, que garantizara la plena vigencia de los derechos humanos,
que rediseñara el régimen federal para favorecer el progreso y
desarrollo económico de provincias y regiones y que favore- ciera la
integración latinoamericana y continental.

Con miras a la ley declarativa de la necesidad de la reforma, se


mantienen diversas re- uniones entre juristas y políticos delegados por
ambas fuerzas y se logra la redacción del
Acuerdo Para la Reforma de la Constitución Nacional, suscripto en
Buenos aires el 13 de diciembre de 1993, en el se proyectan dos partes
bien diferenciadas: una llamada Núcleo de Coincidencias Básicas sobre
el pesaba el compromiso de incorporarlo al texto consti- tucional sin
posibilidad de modificaciones, que debía ser votado en su conjunto
como un sistema en todo por sí o por no, no pudiendo desglosarse
ninguna de sus cláusulas y otra parte que contenía una serie de temas
habilitados sobre los que los Partidos Políticos parti- cipantes de la
Convención Nacional Reformadora podían efectuar propuestas
libremente.

Este acuerdo recibió críticas de los partidos no participantes del


mismo, que calificaron al acuerdo, sobre todo al Núcleo de
Coincidencias Básicas como un pacto espurio una, componenda entre
socios, logrado a espaldas del pueblo. Por otra parte como la redacción
del acuerdo, que debía incorporarse a la ley declarativa, avanzaba no
solo en los artículos habilitados para la reforma sino sobre su
contenido, algunos estudiosos consideraban que el Congreso avanzaba
sobre el límite material impuesto a la Convención Reformadora,
extralimitándose en su misión.

Dentro de este marco se dictó la Ley Declarativa de la Reforma


Constitucional Nº 24.309, que incorpora en su texto el acuerdo previo.
Obtuvo en el Congreso de la Nación una can- tidad mayor al voto de las
dos terceras partes de los miembros totales de cada una de las
Cámaras; según sus disposiciones se eligieron 305 Convencionales
Constituyente repre- sentativos de todos los partidos políticos
reconocidos, tanto nacionales como provinciales. En virtud de la
aplicación de la ley de cupo o cuotas se integraron a este cuero
colegiado 80 mujeres. Por razones históricas la sede de la Convención
se fijó en las ciudades de Santa Fé y Paraná. Las deliberaciones
comenzaron el 25 de mayo de 1994 y concluyeron con la jura de la
Constitución el 24 de agosto de 1994 en e Palacio San José de
Concepción del Uruguay.

FORMAS DE ESTADO Y DE GOBIERNO

La preocupación del hombre por distinguir y comparar la forma en


que se estructura y organiza el poder es anterior al surgimiento del
Estado moderno, habiéndose efectuado, en las distintas épocas,
múltiples clasificaciones y tipologías.
Recién en el siglo XX la doctrina construye, como nueva herramienta
para abordar el estudio de la evolución estatal, la distinción entre
“formas de estado” y “formas de gobier- no”.
En este marco, las formas de estado comprenden “las diversas
configuraciones que el
Estado adopta en relación a sus propios elementos integrativos, esto es,
a su estructura”. En cambio las formas de gobierno se refieren
específicamente a la organización y funcio- namiento de uno de los
elementos del Estado, el poder, que es ejercido por una serie de
órganos que tienen a su cargo la conducción del Estado. Finalmente,
cabe señalar que las formas de gobierno no se dan en abstracto sino
que siempre suponen una forma de estado que la condiciona.

Las formas de estado:

Según cómo se relacionen entre sí el poder y el territorio en un


estado, tradicionalmente se distingue entre:

• Estado unitario: El Estado es uno en su estructura, en su


elemento humano y en sus límites territoriales. Esta es la forma de
estado más simple y la primera con la que aparece históricamente el
Estado Moderno. Es la adoptada por Gran Bretaña, Uruguay, Paraguay,
etc.

• Estado Federal: Está basado en la descentralización


territorial del poder, de forma tal que coexisten en él un Gobierno
Federal, que detenta y ejerce el poder sobre todo su territorio y todas las
personas que habitan en él, por una parte y por la otra, una pluralidad de
estados miembros (en el caso argentino se denominan provincias),
cada uno de los cuales ejerce poder dentro del respectivo límite
territorial sobre los habitantes de cada uno de ellos. En esta estructura
compleja, sólo el Estado Federal es soberano y sujeto del orden
internacio- nal. El poder es ejercido entonces por las autoridades
centrales o las autoridades del es- tado miembro, según un sistema de
reparto de competencias preestablecido. Los Estados miembros del
Estado Federal carecen de derecho de secesión (no pueden separarse)
y nulificación (no pueden negarse a aplicar las decisiones adoptadas
por las autoridades fe- derales) Esta forma de estado ha sido adoptada
por Estados Unidos, Alemania, Argentina, Brasil, Méjico, entre otros
países.

• Confederación: Es una asociación entre Estados


soberanos, cada uno de los cuales es sujeto del orden internacional,
que se unen por un pacto o tratado, por el que se crea un órgano
permanente (dieta) a cargo de las competencias establecidas en el
pacto de alian- za. Una característica peculiar que diferencia la
Confederación del Estado federal, radica en que aquella carece de
poder directo sobre los habitantes de los Estados confederados,
quienes conservan los derechos de secesión (separarse de la
confederación) y nulificación (negarse a aplicar las decisiones
emanadas del órgano de la confederación).

Generalmente la confederación representa la primera etapa en la


Constitución de un nuevo Estado. Así ocurrió por ejemplo con los
Estados norteamericanos desde 1777 a 1787 y la confederación suiza
de 1815 a 1848.

En el siglo XX aparece una nueva forma de Estado, a la que podemos


denominar Estado Regional: Supone la descentralización del poder en
regiones, esto es, “conjuntos humanos que ofrezcan caracteres
comunes en su historia idiosincrasia, necesidades y proyecciones
futuras”. El Estado región suele ser considerado como una figura
intermedia entre el Estado Federal y el Estado Unitario. El Estado
regional, históricamente, surge en Europa partir de la Segunda Guerra
mundial, cuando países que habían adoptado originariamente la forma
unitaria, como Italia, Francia y España, comienzan a organizarse
internamente en regiones.

FEDERALISMO ARGENTINO

EVOLUCION

Desde 1810 se advierte en nuestra organización política dos grandes


visiones, una la del puerto de Buenos Aires influenciado por los
pensadores más actualizados en los debates políticos de la época,
(Montesquieu, Rousseau, Locque , la escolástica representada por el
Padre Francisco Suares, Mariana, entre otros) con una concepción
europeizante, de modernidad obnubilados por los sucesos de Francia y
Estados Unidos de Norte América y que perciben al interior como
retrasado. El interior compuesto por las catorce provincias históricas,
con una cosmovisión conservadora, tradicional y religiosa, pretendiendo
que se respetara en la nueva organización patria sus valores y
tradiciones familiares inmemoria- les.

Estas ideas se advierten en los debates que dan cuenta las Actas del
Cabildo del 22 y 25 de mayo de 1810 en las que hombres como Castelli
pugnan por la retroversión del poder al pueblo y la independencia del
Rio de la Plata y la postura de Juan José Paso respecto a la potestad
del Cabildo de la Ciudad de Buenos Aires, a quien trata como hermana
mayor y pugna por formar un gobierno hasta que lleguen los
representantes del interior. A posterio- ridad se registran dos hitos
históricos trascendentes: las Constituciones unitarias de 1819 y 1826
que son rechazadas por las provincias

Sin embargo y pese a permanentes enfrentamientos fraticidas entre


Buenos Aires. La liga del Litoral y la unión de las provincias del norte,
siempre se mantiene la idea de nego- ciación que se plasma en los
pactos provinciales:
• Tratado del Pilar 23 de febrero de 1820
• Tratado del Cuadrilátero 25 de enero de 1822
• Pacto Multilateral Federativo de Córdoba 17 de mayo de 1827
• Pacto Federal 4 de enero de 1831
• Acuerdo de San Nicolás de los Arroyos 31 de mayo de 1852
• Pacto de San José de Flores 11 de noviembre de 1859.

El dictado de la Constitución Nacional de 1853 alumbrada por el


federalismo no es acep- tada por Buenos Aires que se escinde del resto
de la confederación, hasta que al fin mer- ced a la reforma de 1860 se
reunifica la nación con un texto constitucional único.

CRISIS DEL FEDERALISMO

El desigual desarrollo económico y tecnológico, la permanente emigración


desde provincias hacia la capital, el abuso en las intervenciones federales, los
golpes de estado con derrocamiento de gobernadores provinciales son
algunos de los factores más graves que influyen para producir el permanente
deterioro de nuestro federalismo.

Al decir de Félix Luna todos imaginamos a la república como una mujer


de forma esbelta, sin embargo, merced al deterioro de nuestro
federalismo, podemos graficar nuestra repúbli- ca como un “enano
macro cefálico con extremidades raquíticas”, es decir todo el desarrollo
poblacional y económico del puerto se refleja en la pobreza y atraso del
interior del país

DERECHO FEDERAL

Para abordar este tema seguimos a Germán Bidart Campos que ha


elaborado un cuadro de probada utilidad para analizar las relaciones
entre Nación y Provincias.

Encuentra regulación y límite en la Constitución Nacional, nos


referimos a la conexión Estado-Provincias.

Sostiene que hay tres tipos de Relacióones entre Nación y Provincias:

Relaciones de Subordinación

Se traducen en una subordinación exclusivamente jurídica y se deriva


directamente del Artículo 31 de la Constitución Nacional.

Artículo 31- Esta Constitución, las leyes de la Nación que en su


consecuencia se dicten por el Congreso y los tratados con las potencias
extranjeras son la ley suprema de la Na- ción; y las autoridades de cada
provincia están obligadas a conformarse a ella, no obstante cualquiera
disposición en contrario que contengan las leyes o Constituciones
provinciales, salvo para la Provincia de Buenos Aires, los tratados
ratificados después del pacto del 11 de noviembre de 1859.

El esquema normativo constitucional se escalona entonces desde la


Constitución de la Nación y el llamado bloque de legalidad federal,
luego el Artículo 5 de la Constitución obli- ga a las provincias a dictar su
propio ordenamiento jurídico, imponiéndole condiciones de
cumplimiento obligatorio.

Artículo 5°- Cada provincia dictará para sí una Constitución bajo el


sistema representati- vo republicano, de acuerdo con los principios,
declaraciones y garantías de la Constitución Nacional; y que asegure su
administración de justicia, su régimen municipal, y la educación primaria.
Bajo de estas condiciones, el Gobierno federal, garante a cada
provincia el goce y ejercicio de sus instituciones.

La reforma constitucional de 1994 que avanza profundizando el


federalismo agrega en el Artículo 123:

Artículo 123- Cada provincia dicta su propia constitución, conforme a lo


dispuesto por el art. 5° asegurando la autonomía municipal y reglando su
alcance y contenido en el orden institucional, político, administrativo,
económico y financiero.

Relaciones de Participación

En este grupo de relaciones nos referimos a la conformación de los


órganos del gobierno federal, no debemos olvidar que las provincias son
previas a la Nación y son quienes deci- den formar la unión nacional
creando el gobierno nacional, para lo que delegan atribucio- nes que
les son propias. Conforman así el Poder Ejecutivo el Poder Legislativo y
el Poder Judicial Nacional

Por eso en el Congreso Nacional la Cámara de Senadores, se


compone de tres senado- res por cada provincia

Artículo 54- El Senado se compondrá de tres senadores por cada


provincia y tres por la Ciudad de Buenos Aires, elegidos en forma
directa y conjunta, correspondiendo dos ban- cas al partido político que
obtenga el mayor número de votos, y la restante al partido político que le
siga en número de votos. Cada senador tendrá un voto.

La Cámara de Diputados

Artículo 45- La Cámara de Diputados se compondrá de


representantes elegidos directa- mente por el pueblo de las provincias,
de la Ciudad de Buenos Aires, y de la Capital en caso de traslado, que
se consideran a este fin como distritos electorales de un solo Estado y a
simple pluralidad de sufragios. El número de representantes será de
uno por cada treinta y tres mil habitantes o fracción que no baje de
dieciséis mil quinientos. Después de la reali- zación de cada censo, el
Congreso fijará la representación con arreglo al mismo, pudiendo
aumentar pero no disminuir la base expresada para cada diputado.

De esta formación se colige que los representantes del pueblo y de


los Estados provin- ciales deciden sobre: Sanción leyes, acefalía, juicio
político, estado de sitio, acuerdos para designación de funcionarios.
Arts. 59, 60, 61, 99 inc. 7 y 13, etc.

Relaciones de Coordinación

En este tema abordamos el reparto de competencias en el orden


territorial, siguiendo el presente esquema:
1) Poderes Exclusivos del orden Nacional
2) Poderes reservados por las provincias
3) Poderes concurrentes
4) Prohibiciones a Nación, a provincias y a ambas

El preindicio general de distribución de competencias es que las


Provincias conservan todo el poder no delegado, ante la duda la
atribución es provincial.
Artículo 121- Las provincias conservan todo el poder no delegado
por esta Constitución al Gobierno Federal, y el que expresamente se
hayan reservado por pactos especiales al tiempo de su incorporación.

Al mismo tiempo las provincias no ejercen el poder delegado.

Artículo 126- Las provincias no ejercen el poder delegado a la


Nación. No pueden cele- brar tratados parciales de carácter político; ni
expedir leyes sobre comercio, o navegación interior o exterior; ni
establecer aduanas provinciales; ni acuñar moneda; ni establecer ban-
cos con facultad de emitir billetes, sin autorización del Congreso
Federal; ni dictar los códi- gos Civil, Comercial, Penal y de Minería,
después de que el Congreso los haya sancionado; ni dictar
especialmente leyes sobre ciudadanía y naturalización, bancarrotas,
falsificación de moneda o documentos del Estado; ni establecer
derechos de tonelaje; ni armar buques de guerra o levantar ejércitos,
salvo en el caso de invasión exterior o de un peligro tan inmi- nente que
no admita dilación dando luego cuenta al Gobierno Federal; ni nombrar
o recibir agentes extranjeros.

Quizá pudiéramos utilizar la imagen del espejo. Las atribuciones


delegadas han sido las necesarias para conformar la Nación y encuentra
fundamento en no poder ejercer esas atri- buciones. En los órdenes más
importantes, son aquellas que hacen a la unidad del Estado, como
representación y relaciones internacionales, la seguridad y defensa, la
resolución de conflicto entre provincias, entre otras. Son las
especialmente contenidas en los artículos 75; 99; 100; 116 que dotan
de competencias a los órganos nacionales Poder Ejecutivo, Legislativo
y Judicial.

3) Poderes concurrentes

El esquema de distribución de competencias contempla las llamadas


concurrentes, que pueden ser desarrolladas por nación y provincias.
Están especialmente dedicadas al de- sarrollo de la sociedad en su
conjunto, referidas a la educación, salud, condiciones sociales de vida
de los habitantes, desarrollo comercial, de producción, de promoción y
crecimiento, entre ellas citamos las contenidas en los artículos 124,
125, 75 incisos 18, 19, entre otros.

4) La Constitución contempla también normas con


prohibiciones específicas por ejemplo con contenidos en los artículos. 9
a 13 126 y 127.

Al mismo tiempo que las provincias tienen prohibido ejercer el poder


delegado y la Nación no puede ejercer poder no delegado, existen
prohibiciones para ambas, tal la con- tenía en el bloque de derechos
humanos consagrados y las garantías sobre las que no puede avanzar
el poder sea nacional o provincial y la especial prohibición contenida en
el artículo 29.

DECLARACIONES, DERECHOS Y GARANTÍAS


Antes de ingresar al estudio de esta parte del Derecho Constitucional,
debemos esclare- cer conceptos previos, como Declaraciones Derechos
y Garantías incluidas en la Primera parte del texto que así se titula. De
manera aproximada y como primer concepto orientativo decimos que:
• Declaración: son forma generales, es una afirmación, una
elección entre posibles, una toma de postura de la Nación, considerada
en sí misma y en su relación con otros Estados, las provincias, la iglesia,
etc., como ejemplo citamos el Artículo 1, 2, 3, entre otros.
• Derechos: son atribuciones, facultades, potestades
expresamente reservadas por los hombres para sí al momento de
suscribir el pacto constitucional, destinados a ser ejercido erga omnes.
Como ejemplo citamos el Artículo 14, 14 bis, 15, 16,17, entre otros.
• Garantía: es un remedio, un camino o vía procesal en
manos de los ciudadanos para ase- gurar el pleno ejercicio de los
derechos y lograr la reparación de un Derecho Constitucional violado,
menoscabado, etc. Como ejemplo citamos el Artículo 18, 19 43, entre
otros.

También es necesario referirnos a conceptos tomados del lenguaje


natural ya que tienen significado jurídico distinto.

Persona, hombre, habitante, extranjero, ciudadano; veremos que son


ejes de imputación diferente de derechos, por ejemplo el habitante y el
extranjero pueden no gozar de dere- chos ciudadanos. La persona
humana al igual que hombre engloba a todos sin importar sexo, raza,
nacionalidad, ideología, etc., y nuestra Constitución ha tenido en general
preci- sión terminológica al respecto.

LOS DERECHOS EN GENERAL

Hemos adelantado que entendemos a los derechos como facultades,


atribuciones, pre- rrogativas a favor de la persona humana. Al respecto
no podemos dejar de mencionar dos posturas iusfilosóficas que otorgan
a este cúmulo de derechos etiología diferente, en efecto:

La Escuela de Derecho Natural o iusnaturalismo sostiene que estos


derechos son inhe- rentes al hombre por ser tal, los denomina derechos
naturales del hombre. Su origen es previo al nacimiento del Estado y
han sido tomado por todas las teorías contractualistas, Hobbes, Locke,
Rouseau, entre otros. En general sostienen que previo al Estado, el
hom- bre vivía en un estado de naturaleza, previa a toda organización
social. Allí imperaban la libertad, la igualdad y cada uno manejaba su
conducta conforme su inclinación y concien- cia.

La necesidad de orden hace que este hombre en estado de naturaleza


decida investir a algunos de autoridad para lograr la ordenación y
seguridad general, lo hace por medio del pacta o contrato social
(Constitución Nacional) en que crea la autoridad, pero de ninguna
manera pierde los derechos previos con los que integra en esta nueva
sociedad. En síntesis los derechos del Hombre son relativos a su propia
naturaleza y el Estado está obligado a reconocerlos, de no ser así, no
estamos frente a un Estado o somos testigos de la tiranía fuera de la
concepción del Estado de Derecho.

Para las teorías iuspositivistas, los hombres gozan de los derechos


que le otorga y reco- noce el estado en su conformación y orden jurídico,
de modo tal que solo podrá ser titular y ejercer aquellos que el orden
jurídico positivo les concede.

En general nuestra doctrina se inclina hacia la primera postura, incluso


autores como Carlos Santiago Nino (prominente jurista y filósofo del
Derecho Constitucional) avanza des- de el positivismo hacia el
naturalismo.

Nuestra Constitución participa del constitucionalismo clásico tributario


del pacto social, por cuanto reconocemos derechos humanos
amplísimos.

A los fines de su mejor sistematización y estudio seguiremos una doble


clasificación: De- rechos enumerado y no enumerados y derechos
incorporados en el texto originario y en sus sucesivas reformas
constitucionales:
• Derechos Enumerados son aquellos expresamente
incluidos en el texto en su redacción original y las posteriores
incorporaciones.
• Derechos no enumerados incluidos en el Artículo 33,
texto incorporado por Domingo Faustino Sarmiento en la reforma
constitucional de 1860, cuya magistral composición per- mite cubrir
cualquier omisión voluntaria o involuntaria en la enumeración previa y
también adelantarse a los tiempos, dando cobertura a las personas por
futuras situaciones amena- zantes de la dignidad del hombre que no
hubieran podido tenerse en cuenta en la enume- ración al momento de
sancionarse la reforma.

Este artículo, tal como lo hemos sostenido es una puerta abierta a los
actores constitu- cionales, especialmente a los jueces, como soporte
constitucional para reconocer nuevos derechos protectores de la
persona humana.
Artículo 33- Las declaraciones, derechos y garantías que enumera la
Constitución, no serán entendidos como negación de otros derechos y
garantías no enumerados; pero que nacen del principio de la soberanía
del pueblo y de la forma republicana de gobierno.

Alfredo Mooney al tratar el tema elabora una enumeración que ha


quedado desactuali- zada merced a la reforma constitucional de 1994, y
por leyes que han ido reglamentando la Constitución Nacional, sin
embargo la acompañamos porque cada caso incluido por el autor,
encontró fundamento constitucional en este artículo 33 siendo
expresamente citado
por lo jueces para hacer lugar a reclamos ante violaciones a los derechos
humanos.
Por su parte Germán Bidart Campos enumera entre los derechos de
libertad:
a) Hacer y omitir actividades
b) Desarrollar la personalidad
c) Elegir la forma de vida
d) Acceder a situaciones aptas para elegir
e) Liberarse de toda coacción
f) Liberarse de inferencias en al moral persona
g) Preservar la dignidad personal
h) Recibir un trato razonable y

respetuoso Derechos

enumerados por el texto

original:

Artículo 14: Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes


derechos confor- me a las leyes que reglamenten su ejercicio; a saber:
De trabajar y ejercer toda industria lícita; de navegar y comerciar; de
peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, tran- sitar y salir del
territorio argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura
previa; de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines
útiles; de profesar libremente su culto; de enseñar y aprender.

DERECHO INCORPORADO POR LA REFORMA DE 1957

Artículo 14 bis- El trabajo en sus diversas formas gozará de la


protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones
dignas y equitativas de labor; jornada limi- tada; descanso y vacaciones
pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual remuneración
por igual tarea; participación en las ganancias de las empresas, con
control de la producción y colaboración en la dirección; protección contra
el despido arbitrario; es- tabilidad del empleado público; organización
sindical libre y democrática reconocida por la simple inscripción en un
registro especial.

Queda garantizado a los gremios: Concertar convenios colectivos de


trabajo; recurrir a la conciliación y al arbitraje; el derecho de huelga. Los
representantes gremiales gozarán de las garantías necesarias para el
cumplimiento de su gestión sindical y las relacionadas con la estabilidad
de su empleo.

El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá


carácter de integral e irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el
seguro social obligatorio, que estará a car- go de entidades nacionales o
provinciales con autonomía financiera y económica, adminis- tradas por
los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir
superposición de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la protección
integral de la familia; la defensa del bien de familia; la compensación
económica familiar y el acceso a una vivienda digna.

DERECHOS DEL TEXTO ORIGINAL

Artículo 15: En la Nación Argentina no hay esclavos: los pocos que


hoy existen quedan libres desde la jura de esta Constitución; y una ley
especial reglará las indemnizaciones a que dé lugar esta declaración.
Todo contrato de compra y venta de personas es un crimen de que
serán responsables los que lo celebrasen, y el escribano o funcionario
que lo auto- rice. Y los esclavos que de cualquier modo se introduzcan
quedan libres por el solo hecho de pisar el territorio de la República.

Artículo 16: La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre,


ni de nacimiento: No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza.
Todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los
empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la base del
impuesto y de las cargas públicas.

Artículo 17: La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la


Nación puede ser priva- do de ella, sino en virtud de sentencia fundada
en ley. La expropiación por causa de utilidad pública, debe ser calificada
por ley y previamente indemnizada. Sólo el Congreso impone las
contribuciones que se expresan en el Art. 4°. Ningún servicio personal
es exigible, sino en virtud de ley o de sentencia fundada en ley. Todo
autor o inventor es propietario exclu- sivo de su obra, invento o
descubrimiento, por el término que le acuerde la ley. La confis- cación de
bienes queda borrada para siempre del Código Penal Argentino. Ningún
cuerpo armado puede hacer requisiciones, ni exigir auxilios de ninguna
especie.
Artículo 18: Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin
juicio previo fundado en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por
comisiones especiales, o sacado de los jueces designados por la ley
antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado a declarar
contra sí mismo; ni arrestado sino en virtud de orden escrita de
autoridad com- petente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona
y de los derechos. El domicilio es inviolable, como también la
correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley determinará
en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su
allanamiento y ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de
muerte por causas políticas, toda especie de tormento y los azotes. Las
cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para
castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de
precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquella exija,
hará responsable al juez que la autorice.

Artículo 19: Las acciones privadas de los hombres que de ningún


modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero,
están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los
magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que
no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.

Artículo 20: Los extranjeros gozan en el territorio de la Nación de


todos los derechos civiles del ciudadano; pueden ejercer su industria,
comercio y profesión; poseer bienes raí- ces, comprarlos y enajenarlos;
navegar los ríos y costas; ejercer libremente su culto; testar y casarse
conforme a las leyes. No están obligados a admitir la ciudadanía, ni
pagar con- tribuciones forzosas extraordinarias. Obtienen
nacionalización residiendo dos años conti- nuos en la Nación; pero la
autoridad puede acortar este término a favor del que lo solicite, alegando
y probando servicios a la República.

Artículo 21: Todo ciudadano argentino está obligado a armarse en


defensa de la Patria y de esta Constitución, conforme a las leyes que al
efecto dicte el Congreso y a los decretos del Ejecutivo Nacional. Los
ciudadanos por naturalización, son libres de prestar o no este servicio
por el término de diez años contados desde el día en que obtengan su
carta de ciudadanía.

Artículo 28: Los principios, garantías y derechos reconocidos en los


anteriores artículos, no podrán ser alterados por las leyes que
reglamenten su ejercicio.
DERECHO INCORPORADO POR LA REFORMA DE 1860

Artículo 32: El Congreso Federal no dictará leyes que restrinjan la


libertad de imprenta o establezcan sobre ella la jurisdicción federal.

DERECHOS INCORPORADOS POR LA REFORMA DE


1994 NUEVOS DERECHOS Y GARANTÍAS

Artículo 36: Esta Constitución mantendrá su imperio aun cuando se


interrumpiere su ob- servancia por actos de fuerza contra el orden
institucional y el sistema democrático. Estos

actos serán insanablemente nulos.

Sus autores serán pasibles de la sanción prevista en el Artículo 29,


inhabilitados a per- petuidad para ocupar cargos públicos y excluidos de
los beneficios del indulto y la conmu- tación de penas.

Tendrán las mismas sanciones quienes, como consecuencia de estos


actos, usurparen funciones previstas para las autoridades de esta
Constitución o las de las provincias, los que responderán civil y
penalmente de sus actos. Las acciones respectivas serán impres-
criptibles.

Todos los ciudadanos tienen el derecho de resistencia contra quienes


ejecutaren los ac- tos de fuerza enunciados en este Artículo.

Atentará asimismo contra el sistema democrático quien incurriere en


grave delito doloso contra el estado que conlleve enriquecimiento,
quedando inhabilitado por el tiempo que las leyes determinen para
ocupar cargos o empleos públicos.

El Congreso sancionará una ley sobre ética pública para el ejercicio de


la función.

Artículo 37: Esta Constitución garantiza el pleno ejercicio de los


derechos políticos, con arreglo al principio de la soberanía popular y de
las leyes que se dicten en consecuencia, el sufragio es universal, igual,
secreto y obligatorio.

La igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para el


acceso a cargos electivos y partidarios se garantizará por acciones
positivas en la regulación de los partidos políticos y en el régimen
electoral.

Artículo 38: Los partidos políticos son instituciones fundamentales del


sistema demo- crático. Su creación y el ejercicio de sus actividades son
libres dentro del respeto a esta Constitución, la que garantiza su
organización y funcionamiento democráticos, la represen- tación de las
minorías, la competencia para la postulación de candidatos a cargos
públicos electivos, el acceso a la información publica y la difusión de sus
ideas.

El Estado contribuye al sostenimiento económico de sus actividades y


de la capacitación de sus dirigentes.

Los partidos políticos deberán dar publicidad del origen y destino de


sus fondos y patri- monio.

Artículo 39: Los ciudadanos tienen el derecho de iniciativa para


presentar proyectos de ley en la Cámara de Diputados. El Congreso
deberá darles expreso tratamiento dentro del término de doce meses.

El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los


miembros de cada Cámara, sancionará una ley reglamentaria que no
podrá exigir más del tres por ciento del padrón electoral nacional, dentro
del cual deberá contemplar una adecuada distribución territorial para
suscribir la iniciativa.

No serán objeto de iniciativa popular los proyectos referidos a reforma


constitucional, tratados internacionales, tributos, presupuesto y materia
penal.

Artículo 40: El Congreso, a iniciativa de la Cámara de Diputados,


podrá someter a con- sulta popular un proyecto de ley. La ley de
convocatoria no podrá ser vetada. El voto afirmativo del proyecto por el
pueblo de la Nación lo convertirá en ley y su promulgación será
automática.

El Congreso o el Presidente de la Nación, dentro de sus respectivas


competencias, po- drán convocar a consulta popular no vinculante. En
este caso el voto no será obligatorio.

El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los


miembros de cada Cámara, reglamentará las materias, procedimientos y
oportunidad de la consulta popular.

Artículo 43: Toda persona puede interponer acción expedita y rápida


de amparo, siem- pre que no exista otro medio judicial más idóneo,
contra todo acto u omisión de autoridades públicas o de particulares, que
en forma actual o inminente lesione, restrinja, altere o ame- nace, con
arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y garantías reconocidos
por esta Constitución, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá
declarar la inconstitucionalidad de la norma en que se funde el acto u
omisión lesiva.
Podrán interponer esta acción contra cualquier forma de
discriminación y en lo relativo a los derechos que protegen al ambiente,
a la competencia, al usuario y al consumidor, así como a los derechos
de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del pueblo y
las asociaciones que propendan a esos fines, registradas conforme a la
ley, la que deter- minará los requisitos y formas de su organización.

Toda persona podrá interponer esta acción para tomar conocimiento


de los datos a ella referidos y de su finalidad, que consten en registros o
bancos de datos públicos, o los pri- vados destinados a proveer
informes, y en caso de falsedad o discriminación, para exigir la
supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de aquellos. No
podrá afectarse el secreto de las fuentes de información periodística.

Cuando el derecho lesionado, restringido, alterado o amenazado fuera


la libertad física, o en caso de agravamiento ilegítimo en la forma o
condiciones de detención, o en el de desaparición forzada de personas,
la acción de habeas corpus podrá ser interpuesta por el afectado o por
cualquiera en su favor y el juez resolverá de inmediato aun durante la
vigencia del estado de sitio.

Artículo 75: Son atribuciones del Congreso Nacional

Inciso 17. Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos


indígenas argen- tinos.

Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación


bilingüe e intercultural; reconocer la personería jurídica de sus
comunidades, y la posesión y propiedad comu- nitarias de las tierras que
tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas y
suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable,
transmisible, ni susceptible de gravámenes o embargos. Asegurar su
participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los
demás intereses que los afectan. Las provincias pueden ejercer
concurrentemente estas atribuciones.

Inciso 18. Proveer lo conducente a la prosperidad del país, al adelanto


y bienestar de todas las provincias, y al progreso de la ilustración,
dictando planes de instrucción general y universitaria, y promoviendo la
industria, la inmigración, la construcción de ferrocarriles y

canales navegables, la colonización de tierras de propiedad nacional, la


introducción y es- tablecimiento de nuevas industrias, la importación de
capitales extranjeros y la exploración de los ríos interiores, por leyes
protectoras de estos fines y por concesiones temporales de privilegios y
recompensas de estímulo.
Inciso19. Proveer lo conducente al desarrollo humano, al progreso
económico con jus- ticia social, a la productividad de la economía
nacional, a la generación de empleo, a la formación profesional de los
trabajadores, a la defensa del valor de la moneda, a la investi- gación y
desarrollo científico y tecnológico, su difusión y aprovechamiento.

Proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su


territorio; promover políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el
desigual desarrollo relativo de provincias y regiones. Para estas
iniciativas, el Senado será Cámara de origen.

Sancionar leyes de organización y de base de la educación que


consoliden la unidad nacional respetando las particularidades
provinciales y locales; que aseguren la responsa- bilidad indelegable del
estado, la participación de la familia y la sociedad, la promoción de los
valores democráticos y la igualdad de oportunidades y posibilidades sin
discriminación alguna; y que garanticen los principios de gratuidad y
equidad de la educación pública es- tatal y la autonomía y autarquía de
las universidades nacionales.

Dictar leyes que protejan la identidad y pluralidad cultural, la libre


creación y circulación de las obras del autor; el patrimonio artístico y los
espacios culturales y audiovisuales.

Inciso 22. Aprobar o desechar tratados concluidos con las demás


naciones y con las organizaciones internacionales y los concordatos
con la Santa Sede. Los tratados y con- cordatos tienen jerarquía
superior a las leyes.

La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre; la


Declaración Univer- sal de Derechos Humanos; la Convención
Americana sobre Derechos Humanos; el Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales; el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos y su Protocolo Facultativo; la Convención
Sobre la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio; la
Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación Racial; la Convención Sobre la Eliminación de Todas las
Formas de Discriminación Contra la Mujer; la Convención Contra la
Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes; la
Convención Sobre los Derechos del Niño; en las condiciones de su
vigencia, tienen jerarquía constitucional, no derogan artículo alguno de
la primera parte de esta Constitución y deben entenderse
complementarios de los derechos y garantías por ella reconocidos. Sólo
podrán ser denunciados, en su caso, por el Poder Ejecutivo Nacional,
previa aprobación de las dos terceras partes de la totalidad de los
miembros de cada Cámara.

Los demás tratados y convenciones sobre derechos humanos, luego


de ser aprobados por el Congreso, requerirán el voto de las dos
terceras partes de la totalidad de los miem- bros de cada Cámara para
gozar de la jerarquía constitucional.

LA LIBERTAD

Quizá sea el concepto jurídico más difícil de definir, tanto es así que se
han intentando
esbozar conceptos negativos tales como: “la ausencia de prohibición”,
sin embargo para la ciencia jurídica quien esgrime este concepto no
dice prácticamente nada. No es que estos autores tomen este concepto
de la nada, sino que se basan en el Artículo 19 de la Constitución
Nacional “Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo
ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están
sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los magistrados.
Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que no manda
la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.” Contiene en la última parte
de su redacción el llamado Principio de clausura a cuyo fin todos los
habitantes de la nación estamos obligados a conocer el contenido del
orden jurídico no pudiendo excusar- nos en el desconocimiento del
mismo. Código Civil Artículos 1, 2 y especialmente 20: Las ignorancia
de las leyes no sirve de excusa, si la excepción no está expresamente
autoriza- da por la ley leyes.

¿Es, acaso suficiente abordar el concepto constitucional de La


Libertad del Hombre des- de esta pobreza conceptual, echando mano
de una trampa jurídica harto estudiada por los filósofos jurídicos?
Creemos que no, y desde esta dificultad conceptual trataremos de dar
un concepto cercano del tema que estudiamos.

Alfredo Money citando al autor Renato Alessi define la libertad


individual asumiendo que puede ser conceptuada como la posición de
cada individuo mediante la cual tiene la posi- bilidad de desarrollar su
actividad natural, determinándose según su propia voluntad, para lograr
los fines y la satisfacción de los intereses que puede tener como
hombre, vale decir siempre que no incurra en los prohibidos por el
derecho.

Para Linares Quintana: La historia del hombre es la historia de su lucha


por la libertad.

Como vemos no es tarea fácil arribar a una definición por


características definitorias, pero si estamos obligados a determinar de
que manera lo toma la Constitución de la Nación.

En la introducción adelantamos que los conceptos de la libertad son


incorporados por el constitucionalismo desde su nacimiento según fuera
la necesidad del hombre de alcanzar su dignidad, por eso hablamos de
una primera generación de derechos como civiles y po- líticos,
destinados a incluir el concepto de soberanía popular a fin de organizar
la sociedad estatal limitando el poder, al tiempo de acceder a la
participación política con el fin de ga- rantizar el resguardo de los
derechos fundamentales del hombre, entre ellos la libertad, la igualdad
y la propiedad.

Sobre la Libertad la Constitución se define desde el inicio en el


Preámbulo cuando entre sus objetivos expresa: Asegurar los beneficios
de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad y para todos los
hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino.

Creemos que para conceptualizarla de la mejor manera es abordarla


tal como lo hace nuestra Constitución Nacional.

La libertad puede considerarse en diversos aspectos:


1) La libertad civil: incluye querer, ejecutar, exteriorizar todo
acto de voluntad dentro de los límites del orden jurídico, sin reconoce
voluntad superior o coacción de ninguna naturale- za.
2) Libertad de conciencia: es interna destinada a elevar el pensamiento.
3) Libertad de culto: protección de la práctica religiosa, implica exteriorización.

LA IGUALDAD

Aristóteles la definía como ausencia de privilegios políticos.

El Profesor Ricardo Haro tomaba una definición de la Corte al


sostener “El principio de la igualdad de todas las personas ente la ley,
según ciencia y espíritu de la constitución, no es otra cosa que el
derecho a que no se establezcan excepciones o privilegios que se
excluyan a unos de lo que se concede a otros en iguales circunstancias.
De donde se sigue forzosamente que la verdadera igualdad consiste en
aplicar en los casos ocurrente, la ley según las diferencias constitutivas
de ellos, y que cualquier otra inteligencia o aceptación de este derecho,
es contrario a su propias naturaleza e interés social”.

De estas afirmaciones se desprenden los siguientes postulados.


• Podemos afirmar que la ley debe ser igual para los iguales
en igualdad de circunstan- cias.
• Que no se establezcan excepciones o privilegios en merced de algunos.
• La ley debe reconocer y armonizar las desigualdades.
• Se deben establecer las lógicas distinciones.
• Las clasificaciones o agrupamientos deben sustentarse en
criterios razonables y no arbi- trarios.
• La desigualdad es objeto de agravio para quien la sufre.
• La discriminación debe surgir del texto

mismo de la ley. Está consagrada

constitucionalmente en el Artículo 16 .

Artículo 16: La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre,


ni de nacimiento: No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza.
Todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los
empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la base del
impuesto y de las cargas públicas.

El requisito de idoneidad se vincula a ser apto, estar capacitado tener


suficiencia para el ejercicio de un cargo público, lo que se pretende es
desvincular el empleo público de las luchas políticas partidarias, de
modo tal de construir en el Estado una burocracia apta y permanente
que no dependa de gobiernos de turno por afinidad política.

Personalmente advertimos una evolución en el concepto mismo de la


igualdad, esta defi- nición de Artistóteles, se corresponde a la primer
concepción de la igualdad, como carencia de privilegios, por eso se
habla de igualdad frente a la ley. El Estado de Derecho tiene como

uno de sus presupuestos la existencia de leyes como normas generales,


dirigidas a todos los habitantes por igual, orientadoras de la conducta
social y de aplicación coactiva.

Esto incluye la existencia de órganos con competencias para ser


ejercidas ante toda la población por igual. Basta de privilegios, de
diferentes obligaciones y de cargas diferencia- das según sea la
persona sobre la que recaiga.

Esta gran conquista del constitucionalismo clásico se muestra


insuficiente frente a los hechos que se desatan desde la Revolución
Industrial, en que la igualdad frente a la ley queda vacía de contenido.
Ante las diferencias sociales, se produce una grave desigual- dad, solo
algunos acceden a los bienes sociales, mientras que miles quedan
excluidos. Por fuerza de los hechos, esta igualdad frente a la ley se
torna totalmente insuficiente. Adviene una segunda concepción de la
igualdad que nace de la mano del Constitucionalismo Social como
igualdad de oportunidades y de acceso a los bienes sociales. Esta
concepción re- quiere de un nuevo actor: el Estado, capaz de interponer
su poder de imperio para que, por medio de la ley se propenda a un
nuevo equilibrio en la sociedad, de allí su responsabilidad como
distribuidor de la riqueza, como garante del acceso a la educación,
salud, vivienda etc. Sin embargo ante sociedades cada vez mas
seccionadas se han ido gestando grupos con grandes diferencias entre
si, mostrando la imagen de sociedades estratificadas, donde solo
algunos acceden a los paradigmas sociales y los que no, van quedando
sumidos en la marginalidad y excluidos, por razones económicas,
laborales, de sexo, credo, ideología, aspecto físico, edad, entre otras.
Se crea así la necesidad de hablar de la igualdad como la no
discriminación, donde el Estado debe recurrir a las llamadas medidas de
acción positiva para intentar subsanar el estado social.

Recientemente se ha dictado la llamada ley antidiscriminatoria que


transcribimos a con- tinuación:

MODIFICACIONES A LA LEY ANTIDISCRIMINATORIA 23.592

Artículo 1: Modificase el artículo 1 de la Ley 23.592 por el siguiente


texto:

Artículo 1: “Será reprimido con prisión de tres meses a tres años


quien arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o de algún modo
menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igua- litarias de los derechos y
garantías fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional,
Instrumentos Internacionales sobre Derechos Humanos o la ley. A los
efectos del presente artículo se considerarán particularmente los actos
u omisiones determinados por motivos tales como raza, grupo étnico,
linaje, religión, nacionalidad, idioma, nacimiento, sexo, co- lor, ideología,
opinión política o gremial, posición económica, condición social,
caracteres físicos o discapacidad.

Quien incurra en la conducta descripta será obligado además, a


pedido del damnificado, s dejar sin efecto el acto discriminatorio, a cesar
en su realización y a reparar el daño moral y material ocasionados”.

Artículo 2: Modifícase el artículo 2 de la Ley 23.592 por el siguiente texto:

Artículo 2: “Elévase en un tercio el mínimo y en un medio el máximo


de la escala penal de todo delito reprimido por el Código Penal o leyes
complementarias cuando sea cometido por persecución u odio a una
raza, etnia, linaje, religión, nacionalidad, idioma, nacimien- to, sexo,
color, ideología, opinión política o gremial, posición económica,
condición social, caracteres físicos o discapacidad; o con el objeto de
destruir en todo o en parte un grupo nacional, étnico, racial, religioso,
sexo, color o con determinada ideología, opinión, posición económica,
condición social, caracteres físicos o discapacidad. En ningún caso se
podrá exceder el máximo legal de la especie penal de que se trate”.
Artículo 3: Modificase el artículo 3 de la Ley 23.592 por el siguiente texto:

Artículo 3: “Será reprimido con prisión de seis meses a cinco años


quien cometiere actos de violencia contra otra persona o grupo de
personas en razón de su raza, etnia, linaje, religión, nacionalidad,
idioma, nacimiento, sexo, color, ideología, opinión política o gremial,
posición económica, condición social, caracteres físicos o discapacidad.

Igual pena se aplicará a los que participaren en una organización 0


realizaren propa- ganda basados en ideas o teorías de superioridad de
una raza o de un grupo de personas de determinada religión,
nacionalidad, linaje, origen étnico o color, que tengan por objeto la
justificación o promoción de la discriminación racial o religiosa en
cualquier forma, y a quienes, directa o indirectamente, en forma pública
u oculta, financiaren tal organización 0 propaganda.

En igual pena incurrirán quienes por cualquier medio alentaren,


iniciaren, o incitaren a la persecución o el odio contra una persona o
grupos de persona a causa de su raza, etnia, linaje, religión,
nacionalidad, idioma, nacimiento, sexo, color, ideología, opinión política
o gremial, posición económica, condición social, caracteres físicos o
discapacidad”.

Artículo 4: [Comuníquese al

Poder Ejecutivo] FUEROS

PERSONALES

En lo relativo a este tipo de fueros, tuvieron significancia durante la


Monarquía absoluta en que los nobles eran sometidos a jueces y
procesos especiales, conformado por pares, lo que se traduce en una
flagrante violación a la igualdad frente a la ley.

El texto de nuestro Artículo 16 los abroga por completo, es decir todos


los habitantes so- mos judiciables frente a la organización del un poder
especial del Estado, cual es el Poder Judicial, quien en ejercicio de la
jurisdicción aplica la ley al caso concreto, lo que se grafica con la
imagen de una “justicia ciega”.

Se plantean casos especiales que de ninguna manera son


excepciones a esta regla, tal el caso del fuero militar que caen en la
regulación de una legislación especial y que gozan del fuero pertinente.

Esta situación se aplica solo para las faltas militares a que están
sujetos quienes están comprendidos bajo las normas contenidas en el
Código de Justicia Militar Ley Nº 14.029,
que crean faltas específicas sometidas a juzgamiento por jueces
militares, tales como in- disciplina, desobediencia al superior, etc. La
existencia de esta justicia militar de ninguna manera excluye a los
miembros de las fuerzas armadas al sometimiento a procesos ordi-
narios para casos regidos por la ley común tanto civil, comercial o
penal.

Podría asimilarse el caso a la falta de ética profesional de médicos,


abogados, etc, por cuyas faltas a las normas que regulan el ejercicio de
la profesión son sometidos a los tribu- nales de disciplina, que no los
detraen de la justicia ordinaria.

ACCIONES POSITIVAS

Hemos sostenido que los derechos no pueden quedar como fórmulas


vacías en los tex- tos constitucionales, por el contrario ha sostenido la
Corte que son de por sí operativos, sin embargo en la realidad
advertimos que en algunos casos estamos lejos de lograr su efectiva
vigencia.

El tema esta tratado por un autor americano Ronald Dworking, en


“Los Derechos en Se- rio” tributario del comon low, analiza casos
judiciales llegados a la Corte en que se plantean situaciones de
discriminación en los hechos, destaca dos casos: un ciudadano negro y
otro judío a los que se les impide el ingreso a dos universidades
aduciendo banales argumentos reglamentarios, en ambos casos la
Corte impone al Estado la realización de acciones con- cretas “acciones
positivas” para garantizar el real acceso al goce de los derechos.

En nuestro país rescatamos como ejemplo las llamadas leyes de cupo


femenino que ga- rantizan la incorporación de mujeres en las listas a
cargos electivos y dentro de los órganos de conducción partidarios.

La reforma de 1994 las instituye en el artículo.

Artículo 37: Esta Constitución garantiza el pleno ejercicio de los


derechos políticos, con arreglo al principio de la soberanía popular y de
las leyes que se dicten en consecuencia, el sufragio es universal, igual,
secreto y obligatorio.

La igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para el


acceso a cargos electivos y partidarios se garantizará por acciones
positivas en la regulación de los partidos políticos y en el régimen
electoral.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Consiste en el derecho de hacer público, difundir, exteriorizar un


conjunto de ideas, creen- cias, opiniones, críticas, etc, a través de
cualquier medio, oral, visual, mediante signos, sím- bolos y gestos en
forma escrita, cinematográfico, televisivo, teatro o cualquier otro.

En cuanto a los medios quedan inmersos en la protección todos los


creados o a crear- se.

De este derecho básico se desprenden otros, derecho a escuchar, a


informarse, a guar- dar silencio, a la protección de la fuente de
información, a la libertad de la creación artística, entre otros.

La recepción constitucional inicia en el Artículo 1 de la Constitución


Nacional “La Nación argentina adopta para su gobierno la forma
representativa, republicana y federal...”

En este sentido hemos sostenido que la libertad de expresión es algo


así como el termó- metro de la República, donde no se permite, no hay
sistema republicano de gobierno.

También se consagra en el Artículo 14 “... la publicación de las ideas


por la prensa sin censura previa…”

Esta prohibición de censura debe ser previa, es decir que la autoridad


o un particular impida la publicación, que el objeto de la publicación
pueda exteriorizarse. Sin embargo la Corte ha considerado censura
previa, la persecución de periodistas, cierre de medios, cambio de
modalidades u horarios de emisión, monopolio de medios, impuestos
sobre papel, discriminación sobre el otorgamiento de partidas
presupuestarias a favor de medios amigos al poder de turno.

Sujeto activo de este derecho es quien transmite, sujeto pasivo es el


Estado que debe abstenerse de prohibir u obstaculizar.

También el Artículo 32 de la Constitución Nacional, incorporado por la


reforma de 1860 ha dispuesto:

Artículo 32: El Congreso federal no dictará leyes que restrinjan la


libertad de imprenta o establezcan sobre ella la jurisdicción federal.

Se ha interpretado que esta prohibición abarca solo al Congreso,


quedando en manos de las provincias una posible reglamentación del
derecho. Por cierto aún no se ha legislado al respecto.

El Pacto de San José de Costa Rica en su Artículo 13 dispone que


toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento de expresión.
Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir, y difundir
informaciones o ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya
sea oralmente, por escrito, o en forma impresa o artística o por
cualquier otro procedimiento de su elección.

En su 2º inciso prohíbe la censura previa salvo para espectáculos


públicos, por razones de edad.

En nuestra legislación solo se ha permitido legislar sobre delitos que


podrían cometerse por medio de la prensa o difusión e general, nos
referimos a las figuras de Injurias y Calum- nias, que serán objeto de
proceso a posterioridad y nunca de manera previa.

En cuanto a la jurisprudencia de la Corte Suprema podemos distinguir


las siguientes etapas:
1) Primera etapa: Los tribunales nacionales no son
competentes para conocer en delitos de imprenta, salvo el caso Calvete
Benjamín de 1864 por injurias y calumnias publicadas contra un
senador el Dr. Martín Piñero. Se sostiene que la Corte tiene
competencias para casos regidos por esta Constitución, referido a la
inmunidad parlamentaria.
2) Caso Ministerio Fiscal de Santa Fe contra diario de la
Provincia: donde se acusa al editor de incitar a la rebelión. La Corte
sostuvo que existía competencia para entender en un caso federal si se
afecta un bien de naturaleza federal.
3) Caso Ramos Raúl C/ Batalla Eduardo: calumnias e
injurias. La Corte dice que el artí- culo 342 debe interpretarse con la
potestad del gobierno federal de dictar los Códigos de Fondo.

En síntesis, cuando el delito es común su represión legislativa


corresponde al Congreso y se juzgará por la justicia ordinaria o federal
según que las personas o las cosas cayeran bajo su jurisdicción
(Artículo75 inciso 12).

DERECHO A RÉPLICA

Se incorpora con la Convención Americana de los Derechos y Deberes


del Hombre- Pac- to San José de Costa Rica.

Permite otorgar a quien hubiera sido agraviado por un medio de


información el mismo espacio para poder responder o replicar haciendo
uso de este medio para su defensa.

Nuestro derecho lo incorpora en 1992 en la Corte en el fallo


Ekmekdjian C/ Sofovich, por el que se obliga al conductor del programa
La Noche del Sábado, dar lectura a una carta documento, reconociendo
la aplicabilidad en el derecho interno de un tratado internacional en
virtud de la Convención de Viena respecto al derecho de los tratados
internacionales.

LIBERTAD FÍSICA Y LOCOMOCIÓN


Siguiendo a Germán Bidart Campos: “es el derecho a no se arrestado
sin causa justa y sin forma legal”. Apareja así mismo, la libertad de
locomoción y la libertad de circulación. Nuestra Constitución los
consagra en el Artículo 14, al consagrar el derecho de entrar, per-
manecer, transitar y salir del territorio; y los protege en el 18. También
encuentra expresa consagración en el Pacto de San José de Costa
Rica, entre otros.

LIBERTAD DE INTIMIDAD

Presupone la tutela jurídica de la vida privada, según lo dispone el


Artículo 19. En el caso Ponzatti de Balbín fallado el 11 de diciembre de
1984, referido a la acción incoada por la familia del Dr. Ricardo Balbín
en contra de la publicación de la revista Gente que en su portada
publica la fotografía del líder agonizante.

En ese de la Corte sostuvo “en relación directa con la libertad


individual protege un
ámbito de autonomía individual constituida por sentimientos, hábitos y
costumbres, las rela- ciones familiares, la situación económica, las
creencias religiosas, la salud mental y físicas y, en suma, las acciones,
hechos o datos que teniendo en cuenta las formas de vida acep- tadas
por la comunidad está reservadas al propio individuo y cuyo
conocimiento y divulga- ción por los extraños significa un peligro real o
potencial para la intimidad. El derecho a la privacidad comprende no
sólo a la esfera doméstica, el círculo familiar y de amistad sino otros
aspectos de la personalidad espiritual o física de las personas, tales
como la integri- dad corporal o la imagen, y nadie puede inmiscuirse en
la vida privada de una persona, ni violar áreas de sus actividades
destinadas a ser difundidas sin su consentimiento o el de sus familiares
autorizados para ello”.

LIBERTAD DE CONCIENCIA Y DE CULTO

Gonzalez Calderón no distingue entre ambas, y las identifica como


formando parte con el derecho a la intimidad, sin embargo mientras que
la libertad de conciencia no trasciende la orbita de la persona, la libertad
de culto necesariamente es exteriorizada y trasciende a la sociedad, se
exteriorizan rituales, y prácticas familiares y comunitarias.

En nuestro sistema están constitucionalizadas en el artículo 14 y 19.

Alberdi, en las Bases, logra un equilibrio entre el respeto a las


mayorías poblacionales practicantes de la religión católica, con la
libertad de culto condición sine qua non para lo- grar su política
inmigratria.

De la libertad de cultos se deriva el principio de laicicidad vigente en la


educación pública, también tiene estrecha conexión con el matrimonio
civil, desde la vigencia de la ley 2393.

Por ley Nº 21.745 se ha dispuesto que es el Ministerio de Relaciones


Exteriores y Culto de la Nación quien autoriza el ingreso de nuevos
cultos para su práctica en nuestro país, se crea un Registro Nacional de
Cultos (con más de 200 reconocidos). En todos los casos pueden no
ser aceptados o rechazados si se demuelan lesivos al orden público, la
seguri- dad nacional, la moral y las buenas costumbres.

Compatible con este derecho también la Corte ha hecho lugar a


planteos para no decla- rar la religión o el derecho a no practicar un
culto.

LIBERTAD DE TRABAJO Y EJERCER TODA INDUSTRIA LÍCITA

Este concepto del trabajo en relación de dependencia modifica su


estructura por la inclu- sión de los derechos sociales.

En este caso la Constitución protege el trabajo por iniciativa propia y


el ejercicio de la producción de bienes y servicios: su comercialización.
Materia que ha sido harto relegada por las leyes en el ámbito nacional,
provincial y municipal.

LIBERTAD DE PETICIÓN Y DE ASOCIACIÓN

También consagradas en el Artículo 14 como el simple derecho de


peticionar; las auto- ridades no tienen en contrapartida la obligación de
dar respuesta, salvo en el ámbito del derecho administrativo en que la
administración nacional, provincial o municipal están obli- gadas a
responder. En cuanto al ejercicio de petición como derecho político, lo
trataremos oportunamente.

En lo atinente a la libertad de asociación como derecho civil, siempre


debe perseguir un fin lícito, el mismo está regado en el código civil al
referirse en su Artículo 33 a las personas jurídicas privadas, pudiendo
estas perseguir o no fines de lucro.

Es importante destacar el relevante rol protagónico que está


adquiriendo la participación del llamado tercer sector u ONGs en la
defensa y concientización de los derechos del hom- bre.

LA PROPIEDAD

Constitucionalmente, están consagrados en el artículo 14 y 17.


Artículo 14: Todos los habitantes de la nación gozan de los
siguientes derechos confor- me a las leyes que reglamentan su
ejercicio a saber: …de usar y disponer de su propie- dad…

Artículo 17: La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la


Nación puede ser priva- do de ella, sino en virtud de sentencia fundada
en ley. La expropiación por causa de utilidad pública, debe ser calificada
por ley y previamente indemnizada. Sólo el Congreso impone las
contribuciones que se expresan en el Art. 4°. Ningún servicio personal
es exigible, sino en virtud de ley o de sentencia fundada en ley. Todo
autor o inventor es propietario exclu- sivo de su obra, invento o
descubrimiento, por el término que le acuerde la ley. La confis- cación
de bienes queda borrada para siempre del Código Penal Argentino.
Ningún cuerpo armado puede hacer requisiciones, ni exigir auxilios de
ninguna especie.

Sostiene Linares Quintana, que la propiedad privada que está


garantizada en todos los estados aún en los colectivistas, es una
cuestión de grado. En estos estados la discusión recae sobre los
bienes de producción.

El derecho romano lo incorporó como una postetad absoluta del


propietario sobre la cosa: ius fruendi, utendi y abutendi.

A posterioridad, se desdibuja el concepto en el feudalismo; el


campesino explotaba la tierra pero el fruto era del Sr. Feudal.

Con la proliferación del comercio y el crecimiento de la burguesía se


coronó este derecho como fundamental.

Para Joaquín V. Gonzalez, es un atributo de la personalidad y anterior


a la Constitución. Otros autores sostienen que no es un derecho
natural, sino reconocido por el Estado de Derecho .

Sánchez Viamonte distingue en forma abstracta como derecho de


todos a ser titular del derecho de propiedad, sinónimo del derecho a la
propiedad; distinto del derecho de propie- dad sobre una cosa
determinada.

En ese sentido nuestro Código Civil analiza como uno de los atributos
de la persona al Patrimonio, como un derecho abstracto que se pone
en acto con el derecho de la propie- dad.

La Declaración de Derecho Humanos de la ONU de 1948, en su


Artículo 17 dispone que toda persona tiene derecho a la propiedad y
nadie puede ser privado de su ella.
BIENES SUCEPTIBLES DE PROPIEDAD PRIVADA

De esta distinción depende la extensión del derecho abstracto,


importa distinguir qué bienes integran el dominio público y cuales el
dominio privado. En nuestro orden jurídico es el Código Civil en sus
artículos 2339, 2340 quien enumera los bienes públicos; el artículo
2341 dispone el uso de las personas de los bienes públicos, el artículo
2342 conceptualiza los bienes privados del Estado, mientras que el
2343 establece cuales son los bienes sus- ceptibles de apropiación
privada.

Dentro de esta distinción es interesante analizar como la reforma


constitucional de 1994 introduce un nuevo concepto el de La Propiedad
Comunitaria a fin de garantizar los dere- chos de los pueblos
aborígenes.

Artículo 75: Corresponde al Congreso:

Inciso 17: Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos


indígenas argen- tinos….Reconocer la personería jurídica de sus
comunidades , y la posesión y propiedad comunitaria de la tierras que
tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas y
suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será
enajenable, transmisible ni susceptible de gravámenes o embargos…..

Esta disposición es innovadora sobre todo el régimen instaurado por la


ley civil argentina.

LA FUNCIÓN SOCIAL

Si bien el Derecho a la propiedad es un derecho individual, se le


asigna una función so- cial, atañe al interés colectivo .

La doctrina social de la Iglesia recepta esta concepción a partir de la


Encíclica Rerum Novarum de 1891 y todo el constitucionalismo social
argentino receptándolo no solo en la legislación sino también en fallos
judiciales. En el fallo de 1922 autos “Ercolano C/ Lanteri
se sostiene que todo derecho, aún el de propiedad debe ser
reglamentado razonablemen- te, de modo de permitir la convivencia
social.

LA PROPIEDAD INTELECTUAL

Todos los bienes materiales o inmateriales son susceptibles de ser


objeto del derecho de propiedad. En ese sentido la última parte del
Artículo 17 en su última parte dispone... Todo autor o inventor es
propietario exclusivo de su obra, invento o descubrimiento, por el
término que le acuerde la ley.

Ley 11723 garantiza de por vida el derecho exclusivo de autor de


obras científicas, Lite- rarias y artísticas, y en favor de sus herederos
hasta 50 años después de la muerte.

También regula el tema la ley 111 de patentes e invenciones con


amparo por 5, 10 o 15 años; la ley 3975 de marcas de fábrica, de
comercio y agricultura; Ley 17011 protección de la propiedad industrial.

RESTRICCIONES Y LÍMITES

El carácter relativo en cuanto a la consagración del derecho de


propiedad marca un doble límite en su contenido en su extensión
material y temporal.

Sobre el ejercicio del derecho de propiedad recaen restricciones del


derecho civil y del derecho administrativo, como el dispuesto por el
Artículo 2611 del Código Civil. También está sujeto al poder de policía
en cuanto a la posibilidad legislativa de delimitar su ejercicio, tales como
códigos de edificación urbana, moralidad, salubridad, que imponen
limitaciones que no son indemnizables.

También encontramos restricciones que pueden establecerse en


beneficio de otros parti- culares como servidumbres, que son
desmembraciones del derecho y son indemnizables, puede ser
administrativa o del derecho privado.

Excepciones a la inviolabilidad: sentencia fundada en ley y


Expropiación, por ley y previa indemnización.

LA EXPROPIACIÓN

Distinto es el caso de expropiación por razones de utilidad pública.


Linares Quintana: lo define sosteniendo que es el acto por el cual el
Estado priva a una persona de un bien determinado, con fines de
utilidad pública o interés general calificados por ley, y mediante una
justa y previa indemnización.

El Estado tiene un poder soberano sobre todos los bienes, puede


desapoderar para ga- rantizar el bien general.

Nuestros autores sostienen que es de naturaleza mixta es de derecho


público pero debe mediar la indemnización.

Requisitos:
1) Utilidad pública,
2) Declaración por ley
3) previa indemnización

Ley de expropiaciones 21499 ha dispuesto que en todos los casos se


debe justificar por la satisfacción del bien común.

La Corte ha sostenido que la declaración de utilidad pública por ley


ingresa en el campo de Causa política no judiciable.

La ley debe determinar el bien, la indemnización debe abonarse antes


del desapodera- miento. El propietario no debe sufrir menoscabo
patrimonial ni enriquecimiento sin causa. es un valor objetivo.

LA CONFISCACIÓN

El Artículo 17 en su último párrafo ha dispuesto: La confiscación de


bienes queda borra- da para siempre del Código Penal Argentino.
Ningún cuerpo armado puede hacer requisi- ciones, ni exigir auxilios de
ninguna especie.
Las Requisiciones eran actos de castigo y represalia que tenían lugar
en la etapa históri- ca de la lucha entre unitarios y federales.
Bielsa lo justifica para casos de guerra y temporariamente.

CONFISCATORIEDAD

Este tema está directamente vinculado con el cuantum de los tributos,


en este tema la Corte Suprema ha dispuesto que por todo concepto
tributario no puede excederse el 33% como alícuota sumado todos los
impuestos nacionales, provinciales o municipales.

OTRAS GARANTÍAS DEL ARTÍCULO 17

Ningún servicio personal es exigible, sino en virtud de ley o sentencia:


1) Leyes que pueden exigir servicios servicio militar de defensa civil.
2) Privación de libertad por sentencia con carga de trabajo.

LOS DERECHOS SOCIALES

La incorporación constitucional se produce en la reforma de 1957


luego de la derogación de la reforma de 1945.

El Artículo 14 bis.

Artículo 14 bis: El trabajo en sus diversas formas gozará de la


protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones
dignas y equitativas de labor; jornada limitada; descanso y vacaciones
pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual
remuneración por igual tarea; participación en las ganancias de las
empresas, con control de la producción y colaboración en la dirección;
protección contra el despido arbitrario; es- tabilidad del empleado
público; organización sindical libre y democrática reconocida por la
simple inscripción en un registro especial.

Queda garantizado a los gremios: Concertar convenios colectivos de


trabajo; recurrir a la conciliación y al arbitraje; el derecho de huelga. Los
representantes gremiales gozarán de las garantías necesarias para el
cumplimiento de su gestión sindical y las relacionadas con la
estabilidad de su empleo.

El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá


carácter de integral e irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el
seguro social obligatorio, que estará a car- go de entidades nacionales o
provinciales con autonomía financiera y económica, adminis- tradas por
los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir
superposición de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la
protección integral de la familia; la defensa del bien de familia; la
compensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna.

Aseguran los derechos del trabajador, los de las organizaciones


gremiales y los de la seguridad social y familia

También han sido consagrado en los tratados internacionales que


gozan de jerarquía constitucional como El Pacto de San José de Costa
Rica , El Pacto Internacional de Dere- chos Económicos, Sociales y
culturales. Declaración Universal de Derechos Humanos.

En la legislación se han incorporado en la ley de contrato de trabajo


20744, sobre conve- nios colectivos ley 14250, La conciliación y
arbitraje ley 14786, de conciliación obligatoria. y arbitraje obligatorio ley
20 638.

No obstante que después del caso Siri todos los derechos se


consideran operativos, al- gunos de los consagrados en esta materia
son programáticos y dependen de una posterior regulación, tal el caso
de al participación del trabajador en las ganancias de las empresas, o la
regulación de la protección de la familia con acceso a una vivienda
digna.

Se han consagrado expresamente entre otros derechos:

Igual remuneración por igual tarea como media anti discriminación


Declaración Universal de Derechos Humanos artículo 23 inc.2.

También se regula lo atinente a la organización gremial, protegida


especialmente por la Organización Internacional del Trabajo.

Se ha incorporado la seguridad social como protección a la familia, la


maternidad, en- fermedad, riesgos imprevistos, accidentes,
enfermedades laborales, nacimiento, muerte, jubilación.
Protección a la familia, contemplando el bien de familia, asignaciones
familiares, acceso a una vivienda digna.

Seguro social obligatorio jubilaciones y pensiones móviles, etc.

También la reforma constitucional de 1994 ha incluido estos temas no


sólo con la incor- poración de tratados internacionales relativos a la
temática, sino que también los consagra en el Artículo 75 el inciso 19
primer párrafo:

Inciso 19. Proveer lo conducente al desarrollo humano, al progreso


económico con jus- ticia social, a la productividad de la economía
nacional, a la generación de empleo, a la formación profesional de los
trabajadores, a la defensa del valor de la moneda, a la investi- gación y
desarrollo científico y tecnológico, su difusión y aprovechamiento.

DERECHOS DEL AMBIENTE. DERECHO DE USUSARIOS Y


CONSUMIDORES

Estos derechos ha sido agrupados bajo la denominación de derechos


difusos porque no necesariamente tienen un sujeto activo determinado,
y su incumplimiento afectan al con- junto de los hombres en sociedad,
de manera indiscriminada. También son considerados de Tercera
generación y han sido objeto de especial protección por el Derecho
Internacio- nal de los Derechos Humanos.

La protección constitucional de estos derechos se incorpora en el


nuevo capítulo sobre derechos y garantías en la reforma de 1994.

Artículo 41: Todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente


sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las
actividades productivas satisfagan las ne- cesidades presentes sin
comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de
preservarlo. El daño ambiental generará prioritariamente la obligación
de recomponer, según lo establezca la ley.

Las autoridades proveerán a la protección de este derecho, a la


utilización racional de los recursos naturales, a la preservación del
patrimonio natural y cultural y de la diversidad biológica, y a la
información y educación ambientales.

Corresponde a la Nación dictar las normas que contengan los


presupuestos mínimos de protección, y a las provincias, las necesarias
para complementarlas, sin que aquellas alteren las jurisdicciones
locales.

Se prohíbe el ingreso al territorio nacional de residuos actual o


potencialmente peligro- sos, y de los radiactivos.

Cabe destacar que existen también leyes reglamentarias sobre la


materia tal la Ley Na- cional de Política Ambiental Nº 25675.

Artículo 42: Los consumidores y usuarios de bienes y servicios


tienen derecho, en la relación de consumo, a la protección de su salud,
seguridad e intereses económicos; a una información adecuada y veraz;
a la libertad de elección, y a condiciones de trato equitativo y digno.

Las autoridades proveerán a la protección de esos derechos, a la


educación para el con- sumo, a la defensa de la competencia contra
toda forma de distorsión de los mercados, al control de los monopolios
naturales y legales, al de la calidad y eficiencia de los servicios
públicos, y a la constitución de asociaciones de consumidores y de
usuarios.

La legislación establecerá procedimientos eficaces para la prevención


y solución de con- flictos, y los marcos regulatorios de los servicios
públicos de competencia nacional, pre- viendo la necesaria
participación de las asociaciones de consumidores y usuarios y de las
provincias interesadas, en los organismos de control.

La ley reglamentaria de la Defensa de Derechos de Usuarios y


Consumidores es la Nº 24240.

GARANTÍAS

Hemos conceptualizado a las garantías como remedios


constitucionales, vías, caminos, procesos, destinados a volver a su
estado anterior o a reponer los derechos constituciona- les que han sido
menoscabados, violados; o lisa y llanamente desconocidos por las
auto- ridades o por particulares.

Encontramos diversas manifestaciones en su regulación insertas en


el texto de la Cons- titución Nacional, en las leyes reglamentarias y en
los tratados internacionales sobre pro- tección de derechos del hombre.

Pasaremos a considerarlas individualmente:

GARANTIAS A LA LIBERTAD CORPORAL

El Artículo 14 ha consagrado el derecho de todo habitante a entrar,


transitar, permanecer o salir del territorio nacional.

Este derecho es conocido en doctrina como Libertad ambulatoria o de


locomoción, en caso que se produzca una lesión al mismo, se ha
instrumentado una de las garantías más antiguas en el tiempo, y que de
alguna manera de nacimiento al resto de las garantías con- sagradas,
hablamos del HABEAS CORPUS.

Garantiza la efectiva libertad corporal, contra actos de autoridad o de


particulares en- cuentra base de regulación constitucional en el Artículo
18.

Artículo 18: Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin


juicio previo fundado en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado
por comisiones especiales, o sacado de los jueces designados por la
ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ser obligado a declarar
contra sí mismo; ni arrestado sino en virtud de orden escrita de
autoridad com- petente. Es inviolable la defensa en juicio de la persona
y de los derechos. El domicilio es inviolable, como también la
correspondencia epistolar y los papeles privados; y una ley determinará
en qué casos y con qué justificativos podrá procederse a su
allanamiento y ocupación. Quedan abolidos para siempre la pena de
muerte por causas políticas, toda especie de tormento y los azotes. Las
cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para
castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto
de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquella exija,
hará responsable al juez que la autorice.

Su naturaleza está en discusión. Algunos dicen que es un recurso y


otros una acción, que da inicio a un verdadero proceso, su objetivo
primordial es que un órgano jurisdiccional puede revisar la legitimidad y
legalidad de la detención de una persona, para que en caso negativo
ordene inmediatamente la libertad.

En la reforma constitucional, el Artículo 43 lo incorpora como una


especie del género del amparo, transcribimos el párrafo pertinente.

Artículo 43

Cuando el derecho lesionado, restringido, alterado o amenazado


fuera la libertad física, o en caso de agravamiento ilegítimo en la forma
o condiciones de detención, o en el de desaparición forzada de
personas, la acción de habeas corpus podrá ser interpuesta por el
afectado o por cualquiera en su favor y el juez resolverá de inmediato
aun durante la vigencia del estado de sitio.

La ley reglamentaria Nº 23098 ha dispuesto su procedencia:


1) Habeas corpus reparador, ante la privación de la
libertad personal sin orden escrita de autoridad competente o en forma
ilegal.
2) Habeas corpus preventivo, ante la amenaza de
consumarse la privación de la liber- tad.
3) Habeas Corpus Restringido, ante las restricciones o
molestias secundarias de la liber- tad individual, seguimientos, vigilancia
impedimento de ingresar a ciertos lugares.
4) Habeas Corpus Correctivo ante el agravamiento
ilegítimo de las condiciones de de- tención.
5) Ante la negativa a la solicitud de optar por salir del País.
6) Existen Habeas Corpus de pronto despacho y por mora en el traslado de un
detenido.

El Habeas Corpus se mantiene frente al Estado de sitio: pueden los


jueces analizar y expedirse sobre la constitucionalidad de la declaración
del Estado de sitio y su correlación con el acto de privación de la
libertad y la materialización de la opción a salir del país.

En estos casos deben interpretarse las disposiciones del artículo 4 de


la ley de Habeas Corpus a la luz del Artículo 23 de la Constitución
Nacional, en virtud de ello la decisión de declarar el Estado de Sitio
sigue exenta del contralor judicial, lo que no implica que el Ha- beas
Corpus no se pueda presentar aún durante su vigencia lo que se
reafirma luego con la redacción del Artículo 43.

Pasos del proceso de Habeas Corpus:


1) Petición, con todo aporte de datos
2) Pedido de informes
3) La comparecencia del detenido frente al tribunal
4) Análisis de la constitucionalidad de la medida, deben ser ilegales los actos
atacados
5) Resolución judicial

Dentro de este tema cobra relevancia la garantía de Asilo basado en los


Artículos 18 y
19. Tratados de Montevideo 1888 y Declaración Universal de Derechos
Humanos 1948.

En general el Asilo procede por persecuciones políticas, raciales o


religiosas etc. nunca comisión de delitos comunes y es el Estado
Asilante quien debe determinar la posible ex- tradición.

GARANTÍAS EN EL PROCESO

Consideramos al Proceso como un conjunto sucesivo de actos


rituales cumplidos ante el órgano jurisdiccional que culmina con la
sentencia, lo que se traduce en la decisión final sobre el asunto a
resolver.

En todo Proceso se deben respetar el conjunto de reglas legales y de


equidad que de- fienden los derechos humanos: Defensa, Juez natural,
Prueba y Sentencia fundada, pero cobran mayor relevancia en el
proceso penal, toda vez que está en riesgo la libertad de la persona.

De esta garantía en general se desprenden en particular aquellos


tópicos especialmente contenidos en el Artículo 18.

Ningún habitante de la Nación puede ser penado sin juicio previo


fundado en ley anterior al hecho del Proceso, la necesidad de juicio
previo reafirma la obligatoriedad del Estado de actuar por sus órganos
constitucionales la jurisdicción, regidos además por las leyes de fondo y
de forma que deben ser previas al hecho del Proceso.

Se fija también la aplicación irretroactiva de la ley en general, cuyo


principio cede frente a la máxima de la aplicación de la ley más
benigna.

Derecho a la jurisdicción que se articula con el principio del juez


natural, ya que el Es- tado debe organizar la administración de justicia
según competencia de grado, materia, territorio, no pudiendo
instaurarse bajo ninguna condición un juez especial o comisiones
especiales de juzgamiento. Debe interpretarse el término juez como
juzgado o tribunal y no con la persona que ejerce el cargo; ni juzgado
por comisiones especiales, o sacado de los jueces designados por la
ley antes del hecho de la causa.

GARANTÍAS PARA LA CONDENA

Principio de inocencia que se mantiene hasta la condena definitiva, lo


que también impli- ca que nadie puede ser obligado a declarar contra sí
mismo.

Prohibición analógica de la ley penal, su interpretación extensiva, en


virtud del principio de legalidad y de reserva penal.
Mantenimiento de la libertad, salvo que se perjudique los fines del
proceso o se tema que el imputado eludirá el accionar de la justicia.

Institutos: excarcelación bajo caución juratoria o fianza real, pena de


ejecución condicio- nal y libertad condicional.

La sentencia arbitraria se origina en el incumplimiento del debido


proceso y de garantías procesales.

Prohibición de la pena de muerte por razones políticas de los


tormentos y azotes. Que- dan abolidos para siempre la pena de muerte
por causas políticas, toda especie de tormen- to y los azotes.

La pena es instrumento de seguridad y defensa social no de castigo.


Las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no
para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a
pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que
aquella exija, hará responsable al juez que la autorice.
Recordemos que el habeas corpus correctivo se origina en el
agravamiento ilegítimo de forma y condiciones en que se cumple la
sentencia art. 43 y ley 23098.

INVIOLABILIDAD DEL DOMICILIO, CORRESPONDENCIA Y PAPELES


PRIVADOS

Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos. El


domicilio es inviola- ble, como también la correspondencia epistolar y los
papeles privados; y una ley determina- rá en qué casos y con qué
justificativos podrá procederse a su allanamiento y ocupación.

Intimidad de la persona encuentra fundamento constitucional en el


Artículo 19:

Artículo 19: Las acciones privadas de los hombres que de ningún


modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero,
están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los
magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo
que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.

Se ha dispuesto que la orden de allanamiento debe ser clara, precisa


consignarse el funcionario evitarse que lo llevará a cabo, que no sea de
noche, etc.

LA ACCION DE AMPARO

Protege especialmente el resto de los derechos constitucionales a


excepción de la liber- tad física o de locomoción. Nace como una
creación jurisprudencial, luego se avanza al dictarse ley de amparo
16.986/ 66 y los Arts. 321 y 498 del Código Procesal civil y comercial de
la Nación, en Córdoba ley 4915/67 y 5770/74 agrega la acción contra
particulares.

Actualmente en la reforma Artículo 43 se incluyen el amparo a los


derechos individuales, a los derechos colectivos y el Habeas Data.

Artículo 43

Toda persona puede interponer acción expedita y rápida de amparo,


siempre que no exista otro medio judicial más idóneo, contra todo acto
u omisión de autoridades públicas o de particulares, que en forma
actual o inminente lesione, restrinja, altere o amenace, con arbitrariedad
o ilegalidad manifiesta, derechos y garantías reconocidos por esta
Constitu- ción, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá declarar la
inconstitucionalidad de la norma en que se funde el acto u omisión
lesiva.

Podrán interponer esta acción contra cualquier forma de


discriminación y en lo relativo a los derechos que protegen al
ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así como a los
derechos de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del
pueblo y las asociaciones que propendan a esos fines, registradas
conforme a la ley, la que deter- minará los requisitos y formas de su
organización.

Esta acción debe interponerse frente a una alteración o restricción


arbitraria del derecho constitucional por parte de la autoridad o
particulares, por acción u omisión, se reclama que cesen dichas
violaciones por esta via sumarísima, la violación debe ser clara y
manifiesta.

El perjuicio debe ser real, tangible, manifiesto, concreto e ineludible o

amenaza concreta. Los hechos u omisiones deben ser notoriamente

ilícitos o notablemente arbitrarios.

Entre sus requisitos destacamos:


1) Solo se declarará inadmisible cuando no exista un
remedio judicial más idóneo (antes se exigía el agotar la vía
administrativa).
2) Se puede accionar contra actos de autoridad lo que incluiría al Poder Judicial.
3) Los derechos son también los de los tratados y leyes.
4) Es independiente de la garantía de prestación de un servicio público.
5) Ahora también puede tratarse por esta vía los decretos, leyes y ordenanzas.

Debe ser presentada por el damnificado o su apoderado, se deben


especificar claramen- te los hechos, autores de la violación. Y la
petición clara al juez.

El juez puede rechazarla sin trámite.

La ley nacional de amparo es la Nº 16.986

EL AMPARO COLECTIVO

Para derechos de incidencia colectiva, amparo y defensa de usuarios y


consumidores.

Legitimación activa al afectado, defensor del pueblo y asociaciones


civiles especialmente inscriptas.

EL HABEAS DATA
Protege los derechos de la intimidad y el honor, se vincula también con
la libertad informática.

Artículo 43

Toda persona podrá interponer esta acción para tomar conocimiento


de los datos a ella referidos y de su finalidad, que consten en registros
o bancos de datos públicos, o los pri- vados destinados a proveer
informes, y en caso de falsedad o discriminación, para exigir la
supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de aquellos. No
podrá afectarse el secreto de las fuentes de información periodística.

Encuentra regulación normativa en la ley 25.326.

LIMITACIONES A DERECHOS Y GARANTÍAS

Hasta aquí hemos estudiado lo relativo a derechos y garantías, pero


debemos saber que su consagración no es ni puede ser absoluta, sino
relativa, imitada a la necesidad de la ordenada convivencia social.

El derecho constitucional instaura limitaciones a derechos subjetivos


de manera per- manente con el fin de asegurar el bien común, la
posible convivencia social, el orden la realización del bien justicia y la
equidad y para circunstancias extremas inusuales impone límites de
naturaleza excepcional.

LIMITACIONES PERMANENTES

Surgen de la convivencia social diaria y su ejercicio es relativos a su


reglamentación, la que dispondrá en que medida podremos ejercerlos,
sin afectar al orden público, la moral, las buenas costumbres y los
derechos de terceros. Al tratarse de limitar derechos constitu- cionales
esa reglamentación legal debe ser razonable La Reglamentación se
rige por los principios de Legalidad y Razonabilidad.

PRINCIPIO DE LEGALIDAD

Contemplado en los Artículos 14 en especial cuando en su primer


enunciado determina que los habitantes de la nación gozan de los
siguientes derechos conforme a las leyes que reglamentan su ejercicio.

Artículo 19- Las acciones privadas de los hombres que de ningún


modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero,
están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los
magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo
que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.
En todos los casos es el Congreso el órgano competente para
reglamentar por ley el ejercicio de los derechos. Debemos tener en
cuenta que el término ley no es formal, sino en sentido lato, puede
haber otras normas jurídicas en sentido general; ej.: Ordenanzas
municipales, universitarias, etc. Incluye leyes nacionales o provinciales,
ordenanzas, estatutos, decretos, etc.

DERIVACION DEL PRINCIPIO DE LEGALIDAD

Para la TÉCNICA se habla de medios razonables para la obtención de


ciertos fines.

En AXIOLOGÍA JURÍDICA se refiere al fundamento de valores


específicos del plexo axiológico: solidaridad, cooperación, poder, paz,
etc. y en el valor justicia.

EL PRINCIPIO DE RAZONABILIDAD

Surge de lo dispuesto por el artículo 28 de la Constitución Nacional.

Artículo 28- Los principios, garantías y derechos reconocidos en los


anteriores artículos, no podrán ser alterados por las leyes que
reglamenten su ejercicio.

El Dr. Ricardo Haro habla del marco de lo jurídico distinguiendo como


notas:

1) La razonabilidad Cuantitativa
Protege la identidad de los derechos considerados en sí mismos, se
pondera entre el derecho y la restricción.

2) La Razonabilidad Cualitativa
Protege la igualdad ante la ley.
Toda vez que el legislador cree una limitación en diferentes categorías,
la distinción debe ser razonable.
A antecedentes iguales se deben aplicar iguales consecuencias sin
excepciones arbitra- rias.
Principio de ponderación la distinción no debe basarse en privilegio y
hostilidad infunda- da.

3) La Razonabilidad Instrumental
Se deriva de la proporcionalidad entre la finalidad de la ley y las
restricciones impuestas a los derechos. Tiene en cuenta la adecuación
del medio y el fin buscado por la norma.
En todos los casos compete al Poder Judicial decidir si las
limitaciones encuadran o no en el marco constitucional.
ORGANIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO DEL PODER

EL PODER LEGISLATIVO

El marco constitucional inicia con el Título I de la Segunda Parte


Autoridades de la Nación Sección Primera “Del Poder Legislativo”.

En general se ha asignado al parlamento los siguientes roles:


1) Legislar: dictando Normas reguladoras de la vida social
con alcance general y coacti- vas
2) Controlar al Poder Ejecutivo y también Poder Judicial, con atribuciones
propias y por
medio de órganos de control como la Auditoría General de la Nación,
Defensor del Pueblo, Consejo de la Magistratura, Jurado de
Enjuiciamiento de Magistrados, Ministerio público.

Ejerce control Parlamentario cuando otorga venias, autorizaciones,


pedidos de infor- mes, interpelaciones, moción de censura Artículos
101, 100 incisos 9, 11.
3) Aprobar tratados internacionales o actos de gobierno
4) Intervenir en las designaciones, renuncia o remoción de funcionarios
5) Investigar, inspeccionar. Por medio de Comisiones investigadoras
6) Escenario de la oposición
7) Caja de resonancia de la opinión pública
8) Representar y participar
9) Procurar
10) Mediar y concretar
11) Debatir
12) Residencia de la clase política
13) Imágen de la democracia

ESTRUCTURA

Artículo 44º. Un Congreso compuesto de dos Cámaras, una de


Diputados de la Nación y otra de Senadores de las provincias y de la
Ciudad de Buenos Aires, será investido del Poder Legislativo de la
Nación.

Es un cuerpo colegiado, dividido en dos salas, existen sobradas


razones para sostener la bicameralidad, no solo por que otorga un
tiempo para una mayor reflexión, por la diversa edad de sus
componentes, denominándose Cámara joven a la de Diputados, y de
madurez a la de Senadores, sino por la estructura federal de nuestro
país ya que en el Senado radi- ca la representación de los estados
federales, mientras que en Diputados la del pueblo.

La Constitución Nacional ha contemplado la Integración de cada


Cámara, número de miembros, requisitos, elección, duración y
renovación de mandatos. En el Capítulo I Sec- ción I del Titulo I de la
Segunda Parte desde los artículos 45 y siguientes lo hace respecto de
Diputados de la Nación. En el Capítulo II desde el artículo 54 en
adelante lo hace res- pecto al Senado.

A continuación en el Capítulo III la Constitución se refiere a


DISPOSICIONES COMUNES A AMBAS CÁMARAS. Lo hace desde el
Artículo 63 en adelante.

FACULTADES PRIVATIVAS

En el funcionamiento de este órgano colegiado la carta magna,


respetando la represen- tación de cada Cámara ha dispuesto
facultades privativas de cada una, a continuación detallamos algunas:

Artículo 52º. Diputados acusa en juicio político.

Artículo 59 y 60º. Senadores es Cámara de juzgamiento en juicio


político. Artículo 99 inciso 4, 7 ,13 y 19 brindar acuerdo a la designación
de magistrados y funcionarios.

Artículo 61º. Declarar en estado de sitio.

PRIVILEGIOS PARLAMENTARIOS

En protección del funcionamiento del poder la Constitución ha dispuesto .

PRIVILEGIOS COLECTIVOS

Artículo 64º. Cada Cámara es juez de elecciones derechos y títulos.

Artículo 66º. Cada Cámara dicta su reglamento interno.

Artículo 66º. Poder disciplinario.

Artículo 71º. Informes de los ministros .

Artículo 101º. Control sobre el Jefe de Gabinete de ministros. Por


medio de una moción de censura con mayoría absoluta de la totalidad
de los miembros de cualquiera de las Cá- maras y puede ser removido
por el voto de la mayoría absoluta de los miembros de cada Cámara.

Artículo 106º. Pueden los Ministros concurrir a las Cámaras

INDIVIDUALES

Artículo 68º. Exención de pena, ningún miembro del Congreso puede


ser acusado, inte- rrogado judicialmente, ni molestado por las opiniones.

Artículo 69º. Exención de arresto.

Artículo 70º. Exención de proceso

También se han dispuesto una serie de Incompatibilidades con el fin


de garantizar la independencia y funcionamiento del poder, como los
contenidos en los Artículos 72, 73, 105.

DERECHO PARLAMENTARIO

Conjunto de normas que regulan el funcionamiento y organización del


Poder Legislativo de la Nación.

SESIONES Artículo 63 sesiones ordinarias 1 marzo hasta 30


noviembre, prórroga y ex- traordinarias.

Quórum Artícul. 65 mayoría absoluta, más de la mitad, y las decisiones


se toman por
mayoría absoluta Artículo 65 simultaneidad de sesiones. Forma parte
del derecho parla- mentario la tarea parlamentaria en general, la
gestión en comisiones y e n los bloques legislativos.

ASAMBLEAS PARLAMENTARIA

Artículo 99 inc.8 apertura de las sesiones por parte del Presidente.

Artículo 75 inc.21 admitir o desechar los motivos de dimisión del


presidente y vice.

Artículo 93 Juramento presidencial.

Ley 20.972 de acefalía quórum de 2/3 de los miembros de cada cámara.


Artículo 97 y 98 Proclamación del presidente y vice electos.

ATRIBUCIONES DEL PODER LEGISLATIVO

Sin lugar a dudas es la tarea legislativa la más importante en manos


del Congreso, allí radica su rol en la función gubernativa y de
organización de la convivencia social. La Cons- titución Nacional ha
dispuesto en el Capitulo V de la Formación y sanción de las leyes, un
procedimiento con intervención del Poder Ejecutivo y de ambas
Cámaras, que ha sido simplificado sustancialmente en la Reforma de
1994, remitimos entonces a los artículos 77 y siguientes.

La doctrina a los fines de un mejor estudio ha elaborado diversas


clasificaciones sobre las atribuciones del Congreso, al respecto
rescatamos la que distingue entre las expresa- mente consagradas en
el artículo 75 de la Constitución Nacional, y las que surgen de los
poderes implícitos en virtud de las cuales toda atribución no
expresamente consagrada en uno de los poderes del gobierno federal
debe ser comprendido como atribución del Senado Artículo 75 inciso 32.

Sobre las demás atribuciones están contenidas en los restantes


incisos del Artículo 75, algunas de las cuales han sido objeto de
especial desarrollo en los temas precedentes, por lo que remitimos a la
lectura de cada inciso en particular

ORGANOS AUXILIARES Y DE CONTROL VINCULADOS AL PODER


LEGISLATIVO

Incluidos por la reforma constitucional de 1994.

Capítulo Sexto
De la Auditoria General de la Nación

Artículo 85º. El control externo del sector público nacional en sus


aspectos patrimoniales, económicos, financieros y operativos, será una
atribución propia del Poder Legislativo.

El examen y la opinión del Poder Legislativo sobre el desempeño y


situación general de la Administración Pública estarán sustentados en
los dictámenes de la Auditoria General de la Nación.

Este organismo de asistencia técnica del Congreso, con autonomía


funcional, se integra- rá del modo que establezca la ley que reglamenta
su creación y funcionamiento, que debe- rá ser aprobada por mayoría
absoluta de los miembros de cada Cámara. El presidente de organismo
será designado a propuesta del partido político de oposición con mayor
número de legisladores en el Congreso.
Tendrá a su cargo el control de legalidad, gestión y auditoría de toda
la actividad de la Administración Pública centralizada y descentralizada,
cualquiera fuera su modalidad de organización, y las demás funciones
que la ley le otorgue. Intervendrá necesariamente en el trámite de
aprobación o rechazo de las cuentas de percepción e inversión de los
fondos públicos.

La ley reglamentaria se dictó bajo el número 24156 dentro de la


Administración Financie- ra y de los Sistemas de Control del Sector
Público Nacional.

Capítulo Séptimo
Del Defensor del Pueblo

Artículo 86º. El Defensor del Pueblo es un órgano independiente


instituido en el ám- bito del Congreso de la Nación, que actuará con
plena autonomía funcional, sin recibir instrucciones de ninguna
autoridad. Su misión es la defensa y protección de los derechos
humanos y demás derechos, garantías e intereses tutelados en esta
Constitución y las leyes, ante hechos, actos u omisiones de la
Administración; y el control del ejercicio de las funciones administrativas
públicas.
El Defensor del Pueblo tiene legitimación procesal. Es designado y
removido por el Con- greso con el voto de las dos terceras partes de
miembros presentes de cada una de las Cámaras. Goza de las
inmunidades y privilegios de los legisladores. Durará en su cargo cinco
años, pudiendo ser nuevamente designado por una sola vez. La
organización y fun- cionamiento de esta institución serán regulados por
una ley especial.

Reglado por ley Nº 24.284

PODER EJECUTIVO

Se adopta en nuestro sistema como poder unipersonal, solo lo ejerce


el Presidente de la Nación.

Artículo 87º. El Poder Ejecutivo de la Nación será desempeñado por


un ciudadano con el título de “Presidente de la Nación”

El vicepresidente que lo acompaña en la fórmula electoral forma parte


del poder Legisla- tivo como presidente de la Cámara de Senadores.
Algunos miembros de la doctrina han sostenido al Poder Ejecutivo
como colegiado toda vez que sus actos exigen el refrendo ministerial,
pero el hecho que los ministros sean de- signados y removidos por el
Presidente de la Nación sin necesidad de fundamento alguno, terminan
por destruir estas teorías.

La constitución de la Nación en sus Artículos 88, 89, 90, 91, 92 y 93


ha regulado lo ati- nente a acefalía, requisitos, mandato, sueldo, y
juramento sucesivamente, a cuya lectura remitimos. Solo cabe señalar
que toda regulación del Poder Ejecutivo ha sufrido sustancia- les
modificaciones en la reforma de 1994, tendientes a atenuar el hiper-
presidencialismo, sobre lo que nos explayamos al tratar la temática
oportunamente.

Es interesante advertir como a los fines de la elección de presidente y


vice de manera indirecta, se pasó a un sistema de elección directa por
voto popular y a doble vuelta electo- ral. El Artículo 94 enuncia el
principio general mientras que el artículo 97 y 98 se explayan sobre las
dos únicas excepciones a la realización de la segunda vuelta.

Artículo 94º. El presidente y el vicepresidente de la Nación serán


elegidos directamente por el pueblo, en doble vuelta, según lo
establece esta Constitución. A este fin el territorio nacional conformará
un distrito único.

Artículo 97º. Cuando la fórmula que resultare más votada en la


primera vuelta, hubiere obtenido más del cuarenta y cinco por ciento de
los votos afirmativos válidamente emitidos, sus integrantes serán
proclamados como presidente y vicepresidente de la Nación.

Artículo 98º. Cuando la fórmula que resultare más votada en la


primera vuelta hubiere obtenido el cuarenta por ciento por lo menos de
los votos afirmativos válidamente emitidos y, además, existiere una
diferencia mayor de diez puntos porcentuales respecto del total de los
votos afirmativos válidamente emitidos sobre la fórmula que le sigue en
número de votos, sus integrantes serán proclamados como presidente y
vicepresidente de la Nación.

FUNCIONES

El Presidente, a pesar de haber delegado por la Constitución


reformada, atribuciones en la figura del Jefe de Gabinete, aún conserva
las tradicionales cuatro jefaturas, a saber, Jefe de Estado, responsable
político de la administración general del país, jefe del gobierno y de las
Fuerzas Armadas.

Podemos ver sus atribuciones y funciones en el Artículo 99 con sus 20


incisos.

El Jefe de Gabinete de Ministros, figura nueva, se incorpora en el


Artículo 100 en que se dispone su designación, remoción, y funciones
con su imagen se pretendió crear una suerte de fusible del sistema
político para momentos de crisis, sin embargo su figura se ve opacada
hasta la fecha por el excesivo protagonismo del Presidente de la
Nación.

A ese capítulo debemos agregar la figura de los Ministros que forman


el Gabinete nacio- nal a quienes la Constitución se refiere desde el
artículo102 en adelante.

PODER JUDICIAL

Al iniciar el estudio de este tema no debemos olvidar la estructura


federal de nuestro país y el mandato que el artículo impone a las
provincias para organizar su administración de justicia, por lo que
conviven dos ámbitos uno el de la justicia federal y otro el de la justicia
provincial u ordinaria.

La cabeza del Poder Judicial esta en la Corte Suprema de Justicia de la


Nación.

Artículo 108º. El Poder Judicial de la Nación será ejercido por una


Corte Suprema de Justicia, y por los demás tribunales inferiores que el
Congreso estableciere en el territorio de la Nación.

En la tríada de poderes se ha pretendido dotar de toda independencia


al Poder Judicial, tanto como garantía republicana como por imperio de
la defensa de los derechos del hom- bre. Es imprescindible garantizar
entonces la permanencia en el cargo.

Artículo 110º. Los jueces de la Corte Suprema y de los tribunales


inferiores de la Nación conservarán sus empleos mientras dure su
buena conducta, y recibirán por sus servicios una compensación que
determinará la ley, y que no podrá ser disminuida en manera algu- na,
mientras permaneciesen en sus funciones.

Artículo 115º. Los jueces de los tribunales inferiores de la Nación


serán removidos por las causales expresadas en el Artículo 53, por un
jurado de enjuiciamiento integrado por legisladores, magistrados y
abogados de la matrícula federal.

Su fallo, que será irrecurrible, no tendrá más efecto que destituir al


acusado. Pero la parte condenada quedará no obstante sujeta a
acusación, juicio y castigo conforme a las leyes ante los tribunales
ordinarios.

Corresponderá archivar las actuaciones y, en su caso, reponer al juez


suspendido, si transcurrieren ciento ochenta días contados desde la
decisión de abrir el procedimiento de remoción, sin que haya sido
dictado el fallo.

En la ley especial a que se refiere el Artículo 114, se determinará la


integración y proce- dimiento de este jurado.

Como así también se garantiza la intangibilidad de sus remuneraciones.

Los requisitos para integrar la Corte o prestar funciones como jueces


inferiores del Poder Judicial fueron dispuestos en el Artículo 111. A su
vez el Artículo 112 ha previsto el juramen- to de sus miembros.

A los fines de la integración de la Corte es aplicable el artículo 99


inciso 4 es decir se de- signa a sus miembros por parte del Presidente
con acuerdo del Senado en sesión pública. Es dable destacar que por
decreto Nª 222 del año 2003, por el que el presidente limita sus

atribuciones a la hora de proponer un nuevo miembro para completar


vacante en la Corte suprema de Justicia de la Nación. Instaura un
procedimiento público con participación ciu- dadana, previo publicación
y conocimiento del candidato propuesto, procedimiento que se lleva
frente al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y luego es remitido
al Senado de la Nación órgano que presta acuerdo previo permitir
también la participación ciudadana.

Al mismo tiempo por ley Nº 26183 del 29 de Noviembre de 2006 se


modifica el número de miembros de la Corte, determinándose en cinco
y reglándose su funcionamiento hasta que este número definitivamente
se alcance.

A los fines de dotar de mayor independencia al Poder Judicial la


reforma de 1994 creo un nuevo órgano el Consejo de la Magistratura
incorporado en el Artículo 114:

Artículo 114º. El Consejo de la Magistratura, regulado por una ley


especial sancionada por la mayoría absoluta de la totalidad de los
miembros de cada Cámara, tendrá a su cargo la selección de los
magistrados y la administración del Poder Judicial.

El Consejo será integrado periódicamente de modo que se procure el


equilibrio entre la representación de los órganos políticos resultante de
la elección popular, de los jueces de todas las instancias y de los
abogados de la matrícula federal. Será integrado, asimismo, por otras
personas del ámbito académico y científico, en el número y la forma
que indique la ley.

Serán sus atribuciones:


1. Seleccionar mediante concursos públicos los postulantes a las
magistraturas inferiores.
2. Emitir propuestas en ternas vinculantes, para el
nombramiento de los magistrados de los tribunales inferiores.
3. Administrar los recursos y ejecutar el presupuesto que la
ley asigne a la administración de justicia.
4. Ejercer facultades disciplinarias sobre magistrados.
5. Decidir la apertura del procedimiento de remoción de
magistrados, en su caso ordenar la suspensión, y formular la acusación
correspondiente.
6. Dictar los reglamentos relacionados con la organización
judicial y todos aquellos que sean necesarios para asegurar la
independencia de los jueces y la eficaz prestación de los servicios de
justicia.

Este órgano se reglamento por ley Nº 24937 y su composición se


modificó luego por ley
26.080 dando mayoría al oficialismo político con lo que se desvirtuó de
alguna manera el objetivo de su nacimiento.

ATRIBUCIONES

Lo Referente a atribuciones de la Corte y Demás tribunales inferiores


se regula con el Artículo 116 y siguientes de la Constitución de la
Nación.

MINISTERIO PÚBLICO

La reforma constitucional también incorporó como órgano extra poder


al Ministerio Pú- blico Fiscal:

Artículo 120º. El ministerio Público es un órgano independiente con


autonomía funcional y autarquía financiera, que tiene por función
promover la actuación de la justicia en defensa de la legalidad de los
intereses generales de la sociedad, en coordinación con las demás
autoridades de la República.

Está integrado por un procurador general de la Nación y un defensor


general de la Nación y los demás miembros que la ley establezca.

Sus miembros gozan de inmunidades funcionales e intangibilidad de


remuneraciones.
Reglamentado a posterioridad por ley Nº 24946 Ley Orgánica del
Ministerio Público Fiscal.

BIBLIOGRAFÍA BÁSICA
Título 1: Compendio de Derecho Constitucional-BIDART CAMPOS,
Germán-1ra-2005-Ediar-Buenos Aires Título 2: Manual de Derecho
Constitucional-SAGÜES, Néstor-1ra-2008-s/d-s/d
Constitución Nacional

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